La Resurrección de Jesús

como experiencia de transformación de

nuestro CUERPO (o ser personal)

«CORPORALIZAR» Ser catequista

en tiempos de
la RESURRECCIÓN del SEÑOR Pandemia

RETIRO
+ Santiago Silva
Retamales
Catequistas
Dioc. Valdivia
8 de Mayo del 2021
 «Pero si Cristo está en ustedes,
aunque el cuerpo esté muerto por el «CORPORALIZAR»
pecado, el espíritu vive por el don
de Dios que nos hace justos. Y si la RESURRECCIÓN del SEÑOR
realmente el Espíritu de Dios que
resucitó a Jesús de entre los
muertos habita en ustedes, Dios,
que resucitó a Cristo de entre los
muertos, también hará vivir sus
cuerpos mortales por medio de
su Espíritu, que habita en ustedes»
Rom 8,9-11

«Todo ello [lo de Noé y la salvación de 8 personas mediante las

aguas del diluvio] es figura del bautismo por el que ahora ustedes
son salvados, que no consiste en quitar la suciedad del cuerpo,
sino en pedir a Dios una conciencia limpia en virtud de la
resurrección de Jesucristo»
1 Pe 3,21
 INICIEMOS, indicando QUÉ BUSCAMOS…

➦ Ser catequista es una vocación, no una profesión.

➦ La vocación moldea el ser y se vive «desde dentro». Forja valores, conduce la
vida, estructura la existencia. La profesión es el oficio que desempeñamos para
subsistir. La vocación involucra la vida; la profesión, algunas capacidades.
¿Cómo ser catequista en tiempos de pandemia?
➦ No tenemos contacto presencial, no contamos con niños como antes (en número
y presencia) para catequizar. Nos da la impresión que todo lo eclesial está en
compás de peligrosa espera: Misas, sacramentos, catequesis, formación,
comunidades… y sólo la acción social sobresale en muchas parroquias y
diócesis.
¿Cómo ser catequista en este contexto?, ¿cómo se catequiza?
¡CORPORALIZANDO la RESURRECCIÓN de JESUCRISTO!
➦ Es decir, integrando a nuestra corporalidad la LUZ, la VERDAD y la VIDA
NUEVA que el Señor nos regaló con su misterio pascual.
➦ ¿De qué se trata en realidad? La corporalidad es el medio práctico y real de
EXISTIR en el mundo y de RELACIONARME y VINCULARME con los otros.
Gracias a la corporalidad veo, siento, gusto, hablo, camino, entrego señales…
➦ «Corporalizar» la resurrección es adquirir una FORMA de EXISTIR y de
RELACIONARME y VINCULARME marcada por la resurrección de Jesucristo,
es decir, por su LUZ, VERDAD y VIDA NUEVA.
➦ Entonces, en todo lugar, SERÉ CATEQUISTA, particularmente HOY, en tiempo
de CRISIS SANITARIA, SOCIAL y ECLESIAL.
 Corazón/Ojos
Dividir PARA discernir
i s, !
is discernir
cr tarla Boca/Oídos
a
i r l por comunicar
v
Vi so Juzgar PARA
o optar
¡n Manos/Pies
actuar

Conciencia / Libertad / Fe

¡¡¡NO TEMAS!!!

– La vida vale más que el alimento y el cuerpo más que el vestido. Ustedes valen
más que las aves del cielo!
Lc 12,22-34

– Si no pueden cambiar las cosas pequeñas, ¿por qué se preocupan por lo

demás? NO TEMAN, el Padre ha querido darles el Reino.

– Construyan riquezas que no se deterioren, que sea un tesoro inagotable que

llegue al cielo. ¿Pero dónde está tu verdadero tesoro? ¡Allí está tu corazón!
 Rasgos físicos de «hacer cuerpo» la resurrección
Á GE NE S…
– Rostro afligido………………………….. Lc 24,17
E MPL O las IM
– Ojos cerrados – abiertos………………. Lc CO NT
24,16.31
– Ardió su corazón……………………….. Lc 24,32
– Tóquenme y vean……………………… Lc 24,39
– Corrieron a dar el anuncio……………. Mt 28,8
– Se abrazaron a sus pies……………… Mt 28,9
– Se postraron…………………………… Mt 28,17
– Corrían juntos, y Juan llegó primero…. Jn 20,4
– Entró, vio y creyó………………………. Jn 20,8
– Se quedó afuera, llorando……………..Jn 20,11
– Vengan a comer…………………………Jn 21,12

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¡¡La resurrección transforma la corporalidad!!! s Ros
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Jn 21,15-19 m de
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Mi ENCUENTRO con ÉL, para… ?» an
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1 2 3 4
Hoy sólo Medit. 1

«Corporalizar» a Cristo resucitado

Nombrarme: Vincularme: Complementarnos: Servirlos:
encontrar-me encontrar-lo reunir-nos reunir-los

Rom 8,9-11
YO TÚ NOSOTROS USTEDES

Jn 20,11-18 Mc 16,1-7 Lc 24,13-35 Mt 28,16-20

Gracia del Gracia de la Gracia de la Gracia de la

Conocimiento Comunión Fraternidad Solidaridad
 1 Nombrarme: encontrar-me

Jn 20,1
1 -18
Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?

11
María se quedó afuera, llorando junto al sepulcro. Mientras lloraba,
se asomó al sepulcro 12 y vio a dos ángeles de blanco, sentados uno a la
cabecera y el otro a los pies de donde habían puesto el cuerpo de Jesús. 13
Ellos le preguntaron: «Mujer, ¿por qué lloras?». Ella les dijo: «Se han llevado
a mi Señor y no sé dónde lo han puesto».
14
Apenas dijo esto, se volvió y vio a Jesús de pie, pero no lo reconoció. 15
Jesús le preguntó: «Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?». Ella,
pensando que Jesús era el jardinero, le dijo: «Señor, si tú te lo llevaste, dime
dónde lo has puesto y yo me haré cargo.
Jesús le respondió: «¡María!». Ella se volvió y le contestó en
16

hebreo: «¡Rabbuní!», que quiere decir «mi Maestro».

17
Jesús, entonces, le dijo: «No me detengas, porque todavía no he subido
al Padre. Ve a decirles a mis hermanos: “Subo a mi Padre y Padre de ustedes,
y a mi Dios y Dios de ustedes”». 18 Entonces María Magdalena fue a anunciarle
a los discípulos: «¡He visto al Señor!». Y les contó lo que él le había dicho.
 Mi nombre me identifica. ¡Ese soy yo!
¡No quiero ser una careta!
Estoy llamado a marcar diferencia: lo
distinto se complementa.
He sido creado de un modo original por
Dios. No soy número de una serie.
¡Soy persona redimida por Cristo!

Pedimos al Señor resucitado la gracia del Conocimiento

 NOMBRARME: ENCONTRAR-ME = para SER MEJOR
– Adecuada afirmación de sí mismo
«Corporalidad» en creciente madurez…
– Adecuada unión con los otros

➨ Intimidad. «Re-cogerme» para encontrarme,

silenciar otras voces y escuchar la propia o mi
conciencia. Lo que soy ante otros (yo-social), ¿es lo
que soy en la intimidad? (yo-íntimo). ¡Cuidado con las El
caretas! Vivir desde «mi centro personal», para RESUCITADO
expresar «mi persona», siempre y a todos.

➨ Querer–me. Conocerme: no mirar al

lado, mirar «dentro». Aceptarme. AMIGO y
Autocrítica, pero autoestimarme HERMANO
debidamente. Auto-liderarme para amar.
Una buena cuota de humor.

➨ Sanar–me. Sanar mi historia personal: «imagen»

paterna, materna, fraterna. «Perdonar–me». Curar
envidias y fobias. Pacificar el corazón (gestión de las
culpas). Manejar la agresión. Cuidado con el
«síndrome de la utopía»: me paraliza.
 Trabajo en grupos

1 ¿Cómo he vivido la pandemia en lo personal y familiar?

Del «nombrarme», ¿qué es lo más me cuesta?

2 ¿Intimidad, Quererme, Sanarme? ¿Alguna otra
disposición que me sea difícil? ¿Por qué será?

¿Por qué nos cuesta tanto aceptar nuestros errores y

3
pedir perdón?

¿Qué tienen que ver estas disposiciones con ser un buen

4
catequista? ¿Hay alguna relación? ¿Cuál?
 Compartimos lo que la reflexión me suscitó
mos
– Lo hago con sencillez, sabiendo que el Señor está en medio nuestro:
«Donde dos o tres se reúnen en mi nombre, yo estoy allí en medio de ellos»
arti

(Mt 18,20).
p

– Voy a lo esencial que quiero comunicar, para que varios de nosotros

Com

podamos participar.

Escuchemos la Palabra del Señor: Jn 15,12-17

12
Éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros
como yo los he amado. 13 Nadie tiene mayor amor que el que da
s

su vida por sus amigos. 14 Ustedes son mis amigos si hacen lo

mo

que yo les mando. 15 Ya no los llamo «SIERVOS», porque el

Ora

siervo no sabe lo que hace su señor. A ustedes los llamo

«AMIGOS», porque les he dado a conocer todo lo que he oído a
mi Padre. 16 Ustedes no me eligieron a mí, sino que yo los elegí a
ustedes y los destiné para que vayan y den fruto y su fruto
permanezca. Todo lo que le pidan al Padre en mi nombre, él se
los dará. 17 Esto les mando: ¡que se amen los unos a los otros!

Momento para pedir, alabar, dar gracias a Dios.

 La Resurrección de Jesús
como experiencia de transformación de
nuestro CUERPO (o ser personal)

«CORPORALIZAR» Frutos deseados

la RESURRECCIÓN del SEÑOR Gálatas 5,22-25

Frutos indeseados

Gálatas 5,19-21.26