Día 1

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Devocionales

God Has Something to Say to You

One of the most important lessons you and I can learn is how to listen to God

. In our complex and hectic lives, nothing is more urgent, nothing more necessa

ry, and nothing more rewarding than hearing what God has to say to us—both

as a body of believers and as individual people.

You may ask, “But does God really speak to us today?” The Bible assures us He

does. The book of Hebrews opens this way: “God, after He spoke long ago to

the fathers in the prophets in many portions and in many ways, in these last d

ays has spoken to us in His Son, whom He appointed heir of all things, throug

h whom also He made the world” (Heb. 1:1-2).

Our God is not a speechless God. He’s alive and active in our world—and He s
peaks! Furthermore, He doesn’t speak to us in veiled terms, riddles, or mysteries

. He speaks to us plainly. The primary goal of any communicator is not to spea

k well but to be heard. God speaks in a way that we can hear Him, receive His

message clearly, and understand with precision what He wants us to do.

God speaks in both general and absolute terms to all people, and He speaks to

each one of us personally. We can hardly comprehend that possibility with our

finite minds. God is an infinite God, and He’s capable of communicating with e

ach one of us, right where we are—in the midst of our current circumstances o

r crises—in very personal, direct, and explicit terms.

This may be the most important concept you can ever grasp in learning how t

o listen to God. When God speaks, He’s speaking to you. Everything in the Bibl

e applies to your life in some way. Every message that’s based on the Word of

God has truth embedded within it that’s for you. There’s no such thing as a c

hapter in the Bible, a sermon based on God’s Word, or a book that expounds

and explains God’s Word that’s not for you. Each of us must take God’s Word

personally.

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 Devocionales

Dios tiene algo que decirte

Una de las lecciones más importantes que tú y yo podemos aprender es cómo escuc

har a Dios. En nuestras vidas complejas y agitadas, nada es más urgente, nada más n

ecesario y nada más gratificante que escuchar lo que Dios tiene que decirnos, como c

uerpo de creyentes y como personas individuales.

Puede preguntar: “¿Pero realmente nos habla Dios hoy?” La Biblia nos asegura que lo

hace. El libro de Hebreos se abre de esta manera: "Dios, después de haber hablado h

ace mucho tiempo a los padres de los profetas en muchas porciones y de muchas ma

neras, en estos últimos días nos ha hablado en Su Hijo, a quien nombró heredero de

todas las cosas, por medio de quien también hizo el mundo ”(Hebreos 1: 1-2).
 Nuestro Dios no es un Dios sin palabras. Él está vivo y activo en nuestro mundo, ¡y

habla! Además, Él no nos habla en términos velados, enigmas o misterios. Él nos ha

bla claramente. El objetivo principal de cualquier comunicador no es hablar bien sino

ser escuchado. Dios habla de manera que podamos escucharlo, recibir su mensaje con

claridad y entender con precisión lo que Él quiere que hagamos.

Dios habla en términos generales y absolutos a todas las personas, y nos habla a cad

a uno de nosotros personalmente. Difícilmente podemos comprender esa posibilidad c

on nuestras mentes finitas. Dios es un Dios infinito, y es capaz de comunicarse con c

ada uno de nosotros, justo donde estamos, en medio de nuestras circunstancias o crisi

s actuales, en términos muy personales, directos y explícitos.

Este puede ser el concepto más importante que puedas entender para aprender a esc

uchar a Dios. Cuando Dios habla, Él te está hablando. Todo en la Biblia se aplica a
tu vida de alguna manera. Cada mensaje que se basa en la Palabra de Dios tiene un

a verdad incrustada que es para ti. No existe un capítulo de la Biblia, un sermón bas

ado en la Palabra de Dios o un libro que explique y explique que la Palabra de Dios

no es para ti. Cada uno de nosotros debe tomar la Palabra de Dios personalmente.

'Dios habló en otro tiempo a nuestros antepasados por medio de los profetas, y
lo hizo en distintas ocasiones y de múltiples maneras. ' HEBREOS 1:1 https://m
y.bible.com/bible/222/HEB.1.1

Día 2

Devocionales

Why God Speaks to Us

God speaks to us for reasons that are purely His own: He loves us and desires to hav

e a relationship with us. He desires to walk and talk with each of us, just as He did wi

th Adam and Eve in the garden of Eden. He loves us and wants us to love Him in ret

urn. He gives to us and desires that we give back to Him. He shields and protects us

from evil and desires that we trust Him. He provides all that we need and desires that
we rely on Him as the source of our total supply. He’s our Father, and we’re His childr

en … and He desires that our relationship with Him be joyful, loving, and fulfilling.

Very specifically, God desires in His love that we might comprehend His truth about w

ho He is, who we are, and the relationship He desires to have with us. He wants us to

be conformedto His truth, applying that truth to our lives in ways that transform us e

ver more closely into the image of His Son. And He longs to communicate His truth t

o others.

Now, let’s briefly break down each of these:

· Comprehend — God has given to all believers a divine person, the Holy Spirit, who li

ves within us to help us receive and understand His truth. The Holy Spirit knows perfec

tly the mind of God, and He communicates to our spirits the truth God wants us to h

ear (1 Cor. 2:12).

· Conformed — It’s not enough that we comprehend the truth. We must be conforme

d to the truth. As we read and hear God’s Word, we come face-to-face with ourselves,

our deficiencies, our errors, and our faults. We say again and again, “I’m not like Jesu
s … but I want to be.” In these moments, we know God’s truly speaking to us because

He always calls us to become more and more like His Son (Rom. 12:2).

· Communicate — Finally, God desires that we communicate His truth to others. He do

esn’t give us His truth, impart blessings, or love us so that we might hoard these but

so that we might share and extend His love, truth, and blessings to others and, in so

doing, draw them closer to the Lord (Matt. 28:19).

God desires to speak to you in order to show you what He’s like, and He wants to re

veal Himself to you. He knows the more you see Him for who He is in His fullness—a

s your loving Father and Creator who desires only the best for you—the more you’re

going to want to be with Him. The more you’re with Him, the more you’re going to w

ant to become like Him. The more you become like Him, the greater your witness in t

he world. The greater your witness, the more others will begin to hear His voice and t

he more enriching and loving your relationships will become.

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Devocionales
 Por qué Dios nos habla

Dios nos habla por razones que son puramente suyas: nos ama y desea tener una rel

ación con nosotros. Él desea caminar y hablar con cada uno de nosotros, tal como lo

hizo con Adán y Eva en el jardín del Edén. Él nos ama y quiere que lo amemos a c

ambio. Él nos da y desea que le devolvamos a él. Él nos protege y nos protege del

mal y desea que confiemos en él. Él proporciona todo lo que necesitamos y desea q

ue confiemos en Él como la fuente de nuestro suministro total. Él es nuestro Padre y

nosotros somos Sus hijos ... y desea que nuestra relación con Él sea alegre, amorosa y

satisfactoria.

Muy específicamente, Dios desea en su amor que podamos comprender su verdad ac

erca de quién es, quiénes somos y la relación que desea tener con nosotros. Él quier

e que estemos conformados a Su verdad, aplicando esa verdad a nuestras vidas en for

mas que nos transformen cada vez más de cerca en la imagen de Su Hijo. Y anhela

comunicar su verdad a los demás.

 Ahora, vamos a desglosar brevemente cada uno de estos:

· Comprender: Dios ha dado a todos los creyentes una persona divina, el Espíritu Sant

o, que vive dentro de nosotros para ayudarnos a recibir y entender su verdad. El Espí

ritu Santo conoce perfectamente la mente de Dios, y comunica a nuestros espíritus la

verdad que Dios quiere que escuchemos (1 Co. 2:12).

· Conformado: no es suficiente que comprendamos la verdad. Debemos estar confor

mados a la verdad. Cuando leemos y escuchamos la Palabra de Dios, nos encontramo

s cara a cara con nosotros mismos, con nuestras deficiencias, con nuestros errores y co

n nuestras faltas. Decimos una y otra vez: "No soy como Jesús ... pero quiero ser". En

estos momentos, sabemos que Dios nos está hablando a nosotros porque Él siempre

nos llama a ser más y más como Su Hijo (Rom. 12: 2).
 · Comunicar: finalmente, Dios desea que comuniquemos su verdad a los demás. Él n

o nos da su verdad, no imparte bendiciones ni nos ama para que podamos acumularl

os, pero para que podamos compartir y extender su amor, verdad y bendiciones a los

demás y, al hacerlo, acercarlos más al Señor. (Mateo 28:19).

Dios desea hablarte para mostrarte cómo es, y quiere revelarse a ti mismo. Él sabe

que cuanto más lo ves a Él por quién es Él en Su plenitud, como tu amoroso Padre y

Creador que desea solo lo mejor para ti, más querrás estar con Él. Cuanto más esté

s con Él, más querrás ser como Él. Cuanto más te vuelves como Él, mayor será tu tes

timonio en el mundo. Cuanto mayor sea su testimonio, más otros comenzarán a escu

char Su voz y más enriquecedoras y amorosas se volverán sus relaciones.

1 CORINTIOS 2:12

'En cuanto a nosotros, no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que pr
ocede de Dios, para poder así reconocer los dones que Dios nos ha otorgado. ' 1 CO
RINTIOS 2:12 https://my.bible.com/bible/222/1CO.2.12

'No se amolden a los criterios de este mundo; al contrario, déjense transformar y renu
even su interior de tal manera que sepan apreciar lo que Dios quiere, es decir, lo bue
no, lo que le es grato, lo perfecto. ' ROMANOS 12:2 https://my.bible.com/bible/222/RO
M.12.2
'Vayan, pues, y hagan discípulos a los habitantes de todas las naciones, bautizándolos
en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, ' MATEO 28:19 https://my.bible.c
om/bible/222/MAT.28.19

Día 3

Devocionales

How God Has Spoken

God has used a variety of ways to speak to His people down through the ages

. We can gather from Genesis 3:8 that God talked face-to-face on a daily basis

with Adam in the garden of Eden, meeting him in the cool of the day. After A

dam disobeyed God, he and Eve were expelled from the garden, and God turn

ed to other forms of communications with His beloved creation.

There are at least 8 ways in which God spoke to His people in biblical times:

1. Direct Revelation — This is what many today would regard as an audible voi
ce of God. It can also be thought of as a very strong impression, one that com

es unexpectedly, is absolutely clear, and very specific.

2. Dreams — God has also spoken to people through dreams and visions. It’s i

mportant for us to note, however, that dreams and visions that bear God’s dire

ct message are very rare, not necessarily meant to be shared with others, occur

at the initiative of God, and are confirmed by outward circumstances.

3. Written Words — God has always placed great value on the written word. Hi

s commands were spread throughout the early church by both spoken and writt

en means. Behind the written Word of God is always the inspiration of God.

4. Prophets — We repeatedly find this phrase in Scripture: “Thus says the Lord.”

Those who spoke these words of God, the men we call prophets, felt that God

so overwhelmingly gave them a message, they could do nothing else but spea

k it.

5. Circumstances — We can regard many of the miracles in the Bible as God’s

use of circumstances to confirm the good news of the gospel message. They u
nderscore the direct mandates of God and provide a second witness or give evi

dence that the gospel has been preached fully (Heb. 2:3-4).

6. Angels — The word angel means “messenger from God.” God’s angels come

to people uninvited, unannounced, and unexpected. They’re usually so awesome

in form their first words are, “Fear not.” They deliver messages which are always

direct and specific, then leave. The Bible refers to angels as “ministering spirits”

whom God sends to help us … but they always come at God’s choosing and

on the authority of heaven.

7. Jesus Christ — God has spoken to us through His Son, Jesus Christ. He’s Go

d’s supreme Word to us, the perfect fulfillment of all His laws and commandme

nts. Jesus is the Word of God made flesh (John 1:14).

8. The Holy Spirit — We’ll discuss more about the work of the Holy Spirit in th

e next day’s reading, but for now we should recognize that God speaks to eac

h believer by His Holy Spirit. The Holy Spirit conveys God’s truth, and He is “G

od with us” (John 14:16-18).

Understanding how God has spoken in the past helps lay the foundation for dis

covering the primary ways He speaks today.

Devocionales

Cómo ha hablado Dios

Dios ha usado una variedad de maneras de hablarle a su pueblo a través de los siglo
s. Podemos deducir de Génesis 3: 8 que Dios habló cara a cara a diario con Adán e
n el jardín del Edén, y se encontró con él en el fresco del día. Después de que Adán
desobedeció a Dios, él y Eva fueron expulsados del jardín, y Dios se dirigió a otras fo
rmas de comunicación con Su creación amada.

Hay al menos 8 formas en que Dios habló a su pueblo en tiempos bíblicos:

1. Revelación directa: esto es lo que muchos consideran hoy como una voz audible d
e Dios. También se puede considerar como una impresión muy fuerte, una que apare
ce inesperadamente, es absolutamente clara y muy específica.
 2. Sueños: Dios también ha hablado a las personas a través de sueños y visiones. Si
n embargo, es importante que notemos que los sueños y las visiones que llevan el me
nsaje directo de Dios son muy raros, no están destinados a compartirse con otros, ocu
rren por iniciativa de Dios y están confirmados por circunstancias externas.

3. Palabras escritas: Dios siempre le ha dado un gran valor a la palabra escrita. Sus
mandatos se extendieron por toda la iglesia primitiva por medios tanto hablados como
escritos. Detrás de la Palabra escrita de Dios siempre está la inspiración de Dios.

4. Profetas: repetidamente encontramos esta frase en las Escrituras: “Así dice el Señor”.
Los que hablaron estas palabras de Dios, los hombres que llamamos profetas, sintiero
n que Dios les dio un mensaje tan abrumadoramente que no podían hacer nada más
que hablar. eso.

5. Circunstancias: podemos ver muchos de los milagros en la Biblia como el uso que
Dios hace de las circunstancias para confirmar las buenas nuevas del mensaje del evan
gelio. Subrayan los mandatos directos de Dios y proporcionan un segundo testigo o e
videncia que el evangelio ha sido predicado completamente (Heb. 2: 3-4).

6. Ángeles: la palabra ángel significa "mensajero de Dios". Los ángeles de Dios vienen
a personas sin invitación, sin previo aviso e inesperadas. Por lo general, son tan impre
sionantes en su forma que sus primeras palabras son: “No temas”. Entregan mensajes
que son siempre directos y específicos, y luego se van. La Biblia se refiere a los ángel
es como "espíritus ministradores" a quienes Dios envía para ayudarnos ... pero siempre
vienen a elección de Dios y bajo la autoridad del cielo.

7. Jesucristo: Dios nos ha hablado a través de Su Hijo, Jesucristo. Él es la Palabra su

prema de Dios para nosotros, el perfecto cumplimiento de todas Sus leyes y mandamie
ntos. Jesús es la Palabra de Dios hecho carne (Juan 1:14).

8. El Espíritu Santo: discutiremos más acerca de la obra del Espíritu Santo en la lectur
a del día siguiente, pero por ahora debemos reconocer que Dios le habla a cada creye
nte por medio de Su Espíritu Santo. El Espíritu Santo transmite la verdad de Dios, y É
l es "Dios con nosotros" (Juan 14: 16-18).

Comprender cómo Dios ha hablado en el pasado ayuda a sentar las bases para desc
ubrir las formas principales en que habla hoy.

'Cuando el hombre y su mujer sintieron los pasos de Dios, el Señor, que estab
a paseando por el jardín al fresco de la tarde, corrieron a esconderse entre los
árboles del jardín para que Dios no los viera. ' GÉNESIS 3:8 https://my.bible.com
/bible/222/GEN.3.8

'¿cómo podremos salir nosotros bien parados si desdeñamos una salvación tan
valiosa como esta? Me refiero a la salvación que comenzó siendo anunciada po
r el Señor, que nos confirmaron quienes la escucharon ' HEBREOS 2:3 https://
my.bible.com/bible/222/HEB.2.3
'Y la Palabra se encarnó y habitó * entre nosotros; y vimos su gloria, la que le
corresponde como Hijo único del Padre, lleno de gracia y de verdad. ' JUAN 1:
14 https://my.bible.com/bible/222/JHN.1.14

'yo, por mi parte, rogaré al Padre para que les envíe otro Abogado que esté sie
mpre con ustedes: ' JUAN 14:16 https://my.bible.com/bible/222/JHN.14.16

Día 4

Devocionales

The Primary Ways God Speaks Today

In the last devotion, we explored eight ways in which God has spoken to men

and women through the ages. While we must never limit God in the methods

He uses to speak to us, from my experience and observation, I believe there ar

e three main ways God speaks to us today:

1. Through His Word — The Bible is the Word of God, His complete revelation,

and it’s His foremost way of communicating with us today. The Bible is His Wor

d for all people because it speaks to the basic human condition, and it address

es every emotion, human relationship dynamic, problem of the heart, aspect of

the psyche, temptation or desire, heartache or joy, and issue of faith, hope, and

love. The Bible covers it all! Whenever we face difficulties, experience heartache
s, or have questions, we should go first to Scripture. There, God will speak to u

s directly, personally, intimately, and effectively (Josh. 1:7-8).

2. Through His Holy Spirit — As we walk daily in the Spirit, surrendered to His

power, we have the right and privilege to expect anything that we need to hea

r from God. The Holy Spirit living within us and speaking to us reminds us of

what God has said and done for us in the past. His Spirit gives us the words w

e need to say, the direction we need to go, and guides us in our prayers for o

urselves and others. By His Holy Spirit, God guides us each day, saying “no” to

everything that would bring us harm, delivering us from evil and temptation, an

d speaking in our hearts a “yes” to everything that will bring us blessing.

3. Through Other Believers in Christ — God uses people to speak to each of u

s. Some may be total strangers. Others may be dear friends, members of our i

mmediate families, pastors, teachers, or Bible study group leaders. God gives us

comfort and counsel through the words of other believers to encourage and ad

monish us when we need it most.

Look for God to confirm His Word. He may direct you to two or more passage

s of the Bible that convey the same meaning. He may cause you to hear a ser
mon or a Bible lesson that’s right in line with what He’s said to you in His Wor

d. He may bring a total stranger across your path to speak a word that seems

amazingly on target with last Sunday’s sermon. The multiple messages to you ar

e part of God’s assurance plan that He’s the One who’s speaking and that He

wants you to get His message without question or doubt (Rom. 8:26)INE

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Devocionales

Las formas primarias en que Dios habla hoy

En la última devoción, exploramos ocho maneras en que Dios ha hablado a lo

s hombres y mujeres a través de las edades. Si bien nunca debemos limitar a

Dios en los métodos que usa para hablarnos, según mi experiencia y observació

n, creo que hay tres formas principales en que Dios nos habla hoy:

1. A través de Su Palabra: la Biblia es la Palabra de Dios, su revelación comple

ta, y es su principal forma de comunicarse con nosotros hoy. La Biblia es Su P

alabra para todas las personas porque habla de la condición humana básica, y

aborda cada emoción, relación dinámica humana, problema del corazón, aspecto

de la psique, tentación o deseo, angustia o alegría y problema de la fe. Espe

ranza y amor. ¡La Biblia lo cubre todo! Siempre que enfrentemos dificultades,

experimentemos angustias o tengamos preguntas, primero debemos acudir a las

Escrituras. Allí, Dios nos hablará de manera directa, personal, íntima y efectiva

(Jos. 1: 7-8).

2. A través de su Espíritu Santo: mientras caminamos diariamente en el Espíritu

, entregados a su poder, tenemos el derecho y el privilegio de esperar cualquie

r cosa que necesitemos escuchar de Dios. El Espíritu Santo que vive en nosotr
os y nos habla nos recuerda lo que Dios ha dicho y hecho por nosotros en el

pasado. Su Espíritu nos da las palabras que necesitamos decir, la dirección que

debemos seguir, y nos guía en nuestras oraciones por nosotros mismos y por

los demás. Por Su Espíritu Santo, Dios nos guía cada día, diciendo "no" a todo

lo que nos haría daño, librándonos de la maldad y la tentación, y hablando e

n nuestros corazones un "sí" a todo lo que nos traerá bendiciones.

3. A través de Otros creyentes en Cristo, Dios usa a las personas para hablar

con cada uno de nosotros. Algunos pueden ser totalmente extraños. Otros pu

eden ser amigos queridos, miembros de nuestras familias inmediatas, pastores,

maestros o líderes de grupos de estudio bíblico. Dios nos brinda consuelo y c

onsejo a través de las palabras de otros creyentes para alentarnos y amonestar

nos cuando más lo necesitamos.

Busque a Dios para confirmar su Palabra. Él puede dirigirlo a dos o más pasa

jes de la Biblia que transmiten el mismo significado. Es posible que te haga es

cuchar un sermón o una lección de la Biblia que esté en línea con lo que te di

jo en Su Palabra. Él puede llevar a un total desconocido a lo largo de su cam

ino para decir una palabra que parece asombrosamente acertada con el sermón

del domingo pasado. Los múltiples mensajes para usted son parte del plan d

e seguridad de Dios de que Él es el que está hablando y que quiere que uste

d reciba su mensaje sin preguntas ni dudas (Rom. 8:26).

'Esto es lo único que se te pide: que seas fuerte y valiente y cumplas toda la l
ey que te dio mi siervo Moisés. No te desvíes de ella ni a la derecha ni a la iz
quierda; así tendrás éxito en todo lo que emprendas. ' JOSUÉ 1:7 https://my.bibl
e.com/bible/222/JOS.1.7

'Asimismo, a pesar de que somos débiles, el Espíritu viene en nuestra ayuda; a

unque no sabemos lo que nos conviene pedir, el Espíritu intercede por nosotros
de manera misteriosa. ' ROMANOS 8:26 https://my.bible.com/bible/222/ROM.8.26

Día 5

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Devocionales
How God Gets Our Attention

When we walk in the Spirit, alert to God, we hear what He’s saying to us as a

natural part of our spiritual walk. This is the Christian life, living keenly responsiv

e to the voice of God in whatever fashion He may choose to speak to us.

Unfortunately, there are also times when we choose to do things our own way.

As a result, we head in a direction that brings us to disaster or disappointment.

God’s speaking, but we aren’t listening. We aren’t tuned in to Him.

In these times, God often uses unusual means to get our attention. Prominent a

mong them are:

1. A Restless Spirit — God has frequently used a persistent restlessness to direct

me in my life. When I look back over my life and ministry, I can clearly see th

at every time God moved me from one pastorate to another, He caused me to

feel restless for several months beforehand. That restlessness drove me to seek

God so that, when the time came, I was ready to hear Him.

2. An Unsolicited Word From Another Person — While not all messages from o
thers are positive, I remember a time when a person said something to me tha

t was very encouraging. I wasn’t expecting any compliment or word of affirmati

on, though I desperately needed one at the time. When I questioned the Lord

about it, He let me see that He cared so much for me that He used someone

who was almost a stranger to tell me so, in order that He might startle me int

o paying attention.

3. Unusual Circumstances (Both Bad & Good)— Circumstances can set us up to

open our hearts to God and turn our attention fully toward Him. While not all

circumstances are caused by God, I’ve seen numerous examples in my ministry

of illness, accidents, bankruptcies, divorces, and unusual blessings of abundance

bring people to their knees and to a total reliance on Christ, sometimes for the

first time in their lives.

4. Unanswered Prayers — While God answers many of our prayers in the way i

n which we desire, sometimes He’ll delay an answer or answer a prayer with a

definitive “no” in order to get our attention or keep us from straying off course.

He knows that when all of our prayers seem to be answered, we may become

complacent and simply cruise through life without listening to what He desires

to say to us.
There’s no such thing as an accident with God. The Father may use many differ

ent methods to get our attention and keep us in alignment with His will for ou

r lives. But we must always remember that He knows exactly what’s best for us,

and He’ll never quit trying to reach us so that He can guide us into the wond

erful plans and purposes He has in store for each of us (Jer. 29:11).

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Devocionales

Cómo Dios llama nuestra atención

Cuando caminamos en el Espíritu, alertas a Dios, escuchamos lo que Él nos dic

e como parte natural de nuestro caminar espiritual. Esta es la vida cristiana, viv

iendo agudamente en respuesta a la voz de Dios en cualquier forma que Él elij

a para hablar con nosotros.

 Desafortunadamente, también hay ocasiones en las que elegimos hacer las cos

as a nuestra manera. Como resultado, nos dirigimos en una dirección que nos

lleva al desastre o la decepción. Dios está hablando, pero no estamos escucha

ndo. No estamos sintonizados con él.

En estos tiempos, Dios a menudo usa medios inusuales para llamar nuestra ate

nción. Entre ellos destacan:

1. Un espíritu inquieto: Dios ha usado con frecuencia una inquietud persistente

para dirigirme en mi vida. Cuando miro hacia atrás sobre mi vida y mi ministe

rio, puedo ver claramente que cada vez que Dios me movía de un pastorado a

otro, me hacía sentir inquieto durante varios meses antes. Esa inquietud me ll
evó a buscar a Dios para que, cuando llegara el momento, estuviera listo para

escucharlo.

2. Una palabra no solicitada de otra persona: aunque no todos los mensajes d

e otras personas son positivos, recuerdo un momento en que una persona me

dijo algo que fue muy alentador. No esperaba ningún cumplido o palabra de

afirmación, aunque necesitaba desesperadamente uno en ese momento. Cuand

o le pregunté al Señor sobre eso, Él me dejó ver que se preocupaba tanto por

mí que usó a alguien que era casi un extraño para decírmelo, a fin de que p

udiera asustarme para que prestara atención.

3. Circunstancias inusuales (tanto malas como buenas) - Las circunstancias pue

den prepararnos para abrir nuestros corazones a Dios y dirigir nuestra atención

hacia Él. Si bien no todas las circunstancias son causadas por Dios, he visto nu

merosos ejemplos en mi ministerio de enfermedades, accidentes, quiebras, divor

cios y bendiciones inusuales de abundancia que hacen que las personas se arro
dillen y confíen totalmente en Cristo, algunas veces por primera vez. en sus vi

das.

4. Oraciones sin respuesta: mientras Dios responde muchas de nuestras oracion

es de la manera que deseamos, a veces retrasará una respuesta o responderá u

na oración con un "no" definitivo para llamar nuestra atención o evitar que nos

desviemos del curso. . Él sabe que cuando todas nuestras oraciones parecen

ser contestadas, podemos volvernos complacientes y simplemente navegar por l

a vida sin escuchar lo que Él desea decirnos.

No hay tal cosa como un accidente con Dios. El Padre puede usar muchos

métodos diferentes para captar nuestra atención y mantenernos alineados con S

u voluntad para nuestras vidas. Pero siempre debemos recordar que Él sabe e

xactamente lo que es mejor para nosotros, y Él nunca dejará de tratar de alcan

zarnos para poder guiarnos hacia los maravillosos planes y propósitos que Él tie

ne para nosotros (Jeremías 29:11). ).

'Yo conozco mis designios sobre ustedes —oráculo del Señor—. Son designios
de bienestar, no de desgracia, pues les ofrezco un futuro y una esperanza. ' JE
REMÍAS 29:11 https://my.bible.com/bible/222/JER.29.11

Día 6

Devocionales

The Hallmarks of God’s Messages to Us

Jesus said of those who follow Him:

My sheep hear My voice, and I know them, and they follow Me; and I give eter
nal life to them, and they will never perish; and no one will snatch them out of
My hand. My Father, who has given them to Me, is greater than all; and no one

is able to snatch them out of the Father’s hand. (John 10:27-29)

What a great statement of hope and comfort this is to us! We can know the v

oice of the Lord. As we follow His voice and do what He says, we’ll never peris

h, and neither will we ever be snatched out of His hand.

“But,” you may say, “how can I be sure that the voice I’m hearing is truly the v
oice of God?” There are five identifying hallmarks of God’s messages to us. The

y’re a means of determining whether the voice we’re hearing is truly the voice

of God. If you have a question about whether a message is from God, line it u

p against these criteria:

1. The message must be consistent with the Word of God, the Bible. God will n

ever tell us to engage in any activity that’s inconsistent with holy Scripture.

2. The message will usually be in conflict with the mainstream of conventional

wisdom. We must recognize that most of the world is moving in a direction aw

ay from what God’s Word says to be true. In most cases, God’s message stands

in sharp contrast to what the world around us has to say on an issue. But wh

en God speaks to you, He calls you to His way of thinking and seeing. In the

New Testament, this mindset is called the “mind of Christ.” Ask yourself, Would

Jesus do this? If not, don’t do it.

3. The message will clash with fleshly gratification and basic human lusts. We m

ust recognize immediately that any counsel is not of God if it urges us to gratif

y the flesh, without any thought for the consequences. God gives us messages t

hat please the Spirit of God within us, not our lusts and sinful desires.
4. The message will challenge one’s faith to rise to a new level. A “measure of

faith” has been given to every person, and our faith is to grow. We grow in fai

th when we hear from God, obey what He says to do, and then acknowledge

God’s faithfulness to His Word in our lives.

5. The message will call for personal courage to do what God has said or to c

hange what He has said to change. If you’re being asked to move against the t

ide of conventional human wisdom and act in contradiction to your fleshly natu

re, you’re going to feel as though you’re taking a risk in obeying God’s messag

e to you. Any time you take a risk for God’s purposes, you’re going to need c

ourage. And the Lord tells us that, if we’ll have courage, He’ll strengthen our h

earts (Ps. 31:24). His voice leads us not into timid discipleship but into bold witn

ess (1 Cor. 16:13-14).

Take time to make certain that you’ve truly heard from God on a matter and t

hat you’ve heard clearly and precisely. Above all, make sure He’s finished with a

ll He has to say to you on a point before rushing off to obey Him. Make sure

you have all the directions, assurances, insights, and details He desires to give y

ou. Then, subject the whole of God’s message to the points discussed in this le

sson.
Devocionales

Los distintivos de los mensajes de Dios para nosotros

Jesús dijo de los que le siguen:

Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen; y yo les doy vi

da eterna, y nunca perecerán; y nadie los arrebatará de mi mano. Mi Padre,

que me las ha dado, es más grande que todos; y nadie puede arrebatarlos de

la mano del Padre. (Juan 10: 27-29)

 ¡Qué gran declaración de esperanza y consuelo para nosotros! Podemos cono

cer la voz del Señor. Cuando seguimos Su voz y hacemos lo que Él dice, nun

ca pereceremos, ni tampoco seremos arrebatados de Su mano.

"Pero", puede decir, "¿cómo puedo estar seguro de que la voz que escucho e

s verdaderamente la voz de Dios?" Hay cinco sellos distintivos que identifican lo

s mensajes de Dios para nosotros. Son un medio para determinar si la voz qu

e escuchamos es verdaderamente la voz de Dios. Si tiene una pregunta sobre

si un mensaje es de Dios, compárelo con estos criterios:

1. El mensaje debe ser consistente con la Palabra de Dios, la Biblia. Dios nunc

a nos dirá que nos involucremos en ninguna actividad que sea inconsistente co

n la Sagrada Escritura.
 2. El mensaje generalmente estará en conflicto con la corriente principal de la

sabiduría convencional. Debemos reconocer que la mayor parte del mundo se

está moviendo en una dirección alejada de lo que la Palabra de Dios dice que

es verdad. En la mayoría de los casos, el mensaje de Dios contrasta con lo qu

e el mundo que nos rodea tiene que decir sobre un tema. Pero cuando Dios

te habla, te llama a su manera de pensar y ver. En el Nuevo Testamento, esta

mentalidad se llama la "mente de Cristo". Pregúntese, ¿Jesús haría esto? Si no

, no lo hagas.

3. El mensaje chocará con la gratificación carnal y los deseos humanos básicos.

Debemos reconocer de inmediato que cualquier consejo no es de Dios si nos

impulsa a gratificar la carne, sin pensar en las consecuencias. Dios nos da me

nsajes que agradan al Espíritu de Dios dentro de nosotros, no nuestros deseos

y deseos pecaminosos.
 4. El mensaje desafiará la fe de uno para elevarse a un nuevo nivel. Se ha d

ado una "medida de fe" a cada persona, y nuestra fe es crecer. Crecemos en

la fe cuando escuchamos a Dios, obedecemos lo que Él dice que debe hacer y

luego reconocemos la fidelidad de Dios a Su Palabra en nuestras vidas.

5. El mensaje requerirá coraje personal para hacer lo que Dios ha dicho o par

a cambiar lo que Él ha dicho para cambiar. Si se te pide que te muevas contr

a la corriente de la sabiduría humana convencional y actúes en contradicción co

n tu naturaleza carnal, sentirás que te arriesgas a obedecer el mensaje de Dios

para ti. Cada vez que te arriesgues por los propósitos de Dios, necesitarás cor

aje. Y el Señor nos dice que, si tenemos coraje, fortalecerá nuestros corazones

(Sal. 31:24). Su voz no nos lleva al discipulado tímido sino al testimonio audaz

(1 Co. 16: 13-14).

Tómese el tiempo para asegurarse de que realmente ha escuchado de Dios so

bre un asunto y que ha escuchado de manera clara y precisa. Sobre todo, ase
gúrese de que haya terminado con todo lo que tiene que decirle sobre un pun

to antes de apresurarse a obedecerlo. Asegúrese de tener todas las instruccion

es, las garantías, las ideas y los detalles que Él desea darle. Luego, someta tod

o el mensaje de Dios a los puntos discutidos en esta lección.

'Mis ovejas reconocen mi voz, yo las conozco y ellas me siguen. ' JUAN 10:27
https://my.bible.com/bible/222/JHN.10.27

'¡Amen al Señor todos sus fieles! El Señor cuida a quienes son leales y a los a
rrogantes castiga con creces.' SALMOS 31:24 https://my.bible.com/bible/222/PSA.
31.24

'Manténganse alerta y firmes en la fe; pórtense con valentía, sean modelo de fo

rtaleza. ' 1 CORINTIOS 16:13 https://my.bible.com/bible/222/1CO.16.13

Día 7

Devocionales

How to Tell If the Voice Is God’s, Not Satan’s

People often ask me, “When I listen for God to speak after I pray, I sometimes

seem to hear two voices. How do I know if I’m hearing from God or Satan?”
This is a legitimate question because the enemy of our souls also attempts to s

peak to us. We know from Jesus’ temptation in the wilderness that Satan will tr

y many tricks to convince us to listen to him instead of God (Matt. 4:1-11). The

apostle Peter warned us that the devil is always on the prowl, seeking to instill

fear and confusion (1 Pet. 5:8). We must be on the alert continually to make ce

rtain we’re hearing God’s voice as we pray and listen for God’s answer.

Peter had been a follower of Jesus from the beginning of His earthly ministry, y

et he was likened to the arch-enemy himself. After Jesus told His disciples that i

n Jerusalem He’d suffer many things from the religious authorities, be killed, the

n raised from death on the third day, Peter took Jesus aside privately and said

to Him, “God forbid it, Lord! This shall never happen to You” (Matt. 16:22). As

well-intentioned as Peter may have been, his words were not God’s but were li

ned up with Satan’s message. Jesus turned to Peter and rebuked Him saying, “

Get behind Me, Satan! You are a stumbling block to Me; for you are not settin

g your mind on God’s interests, but man’s” (Matt. 16:23).

As we learn from the example of Peter above, sometimes Satan’s voice comes t

o us not in our thoughts and imaginations but through the words of other peo

ple—some of whom may seem to be well-intentioned. The Bible assures us ther

e’s a way to tell Satan’s voice from that of our Lord. I believe that we’ll hear s

ome distinct differences in the messages.

Satan Says

· Do your own thing; do what you want to do.

· Live for the moment.

· Don’t concern yourself with what others say.

· You’re as mature as you ever need to be. You’re an adult.

The Lord Jesus Says

· Consider the effects of your behavior on others. Live a selfless, giving life.

· Live with an eye on eternity.

· Receive godly counsel.

· Continue to grow and mature and to become more and more like Jesus Chris

t.

Certainly, the outcome is different for us when we follow Satan’s voice and mes

sage rather than the Lord’s. Satan’s path always leads to loss, destruction, and

death. The Lord’s way always leads to abundant and eternal life (John 10:10).

As you continue to walk daily with the Father, meditating on His Word and see

king Him in prayer, you’ll grow in your ability to discern the voice of God and

develop an ear to hear what He’s saying to you. You’ll come to know His voice

unequivocally and immediately, for He is your Father, and He calls you by nam

e.

Devocionales

Cómo saber si la voz es de Dios, no de Satanás

 La gente a menudo me pregunta: “Cuando escucho que Dios hable después d

e rezar, a veces parezco escuchar dos voces. ¿Cómo sé si escucho de Dios o

de Satanás? "

Esta es una pregunta legítima porque el enemigo de nuestras almas también i

ntenta hablarnos. Sabemos por la tentación de Jesús en el desierto que Sataná

s intentará muchos trucos para convencernos de que lo escuchemos a él en lug

ar de a Dios (Mateo 4: 1-11). El apóstol Pedro nos advirtió que el diablo siemp

re está al acecho, buscando infundir miedo y confusión (1 P. 5: 8). Debemos e

star alerta continuamente para asegurarnos de que estamos escuchando la voz

de Dios mientras oramos y escuchamos la respuesta de Dios.

Pedro había sido seguidor de Jesús desde el comienzo de su ministerio terren

al, pero se le comparó con el archienemigo. Después de que Jesús les dijo a
sus discípulos que en Jerusalén sufriría muchas cosas de las autoridades religios

as, sería asesinado y resucitado al tercer día, Pedro llevó a Jesús a un lado en

privado y le dijo: "¡Dios no lo quiera, Señor! Esto nunca te sucederá a ti ”(Mat

eo 16:22). Tan bien intencionado como pudo haber sido Pedro, sus palabras n

o fueron de Dios, sino que estaban alineadas con el mensaje de Satanás. Jesús

se volvió hacia Pedro y lo reprendió diciendo: “¡Quítate de delante de mí, Sata

nás! Eres un obstáculo para Mí; porque no estás pensando en los intereses d

e Dios, sino en los del hombre "(Mateo 16:23).

Como aprendemos del ejemplo anterior de Pedro, a veces la voz de Satanás n

os llega no en nuestros pensamientos e imaginaciones, sino a través de las pala

bras de otras personas, algunas de las cuales pueden parecer bien intencionada

s. La Biblia nos asegura que hay una manera de distinguir la voz de Satanás

de la de nuestro Señor. Creo que escucharemos algunas diferencias claras en l

os mensajes.
Satanás dice

· Haz lo tuyo; Haz lo que quieras hacer.

· Vive por el momento.

· No te preocupes por lo que otros dicen.

· Eres tan maduro como siempre necesitas ser. Eres un adulto

 El señor Jesús dice

· Considere los efectos de su comportamiento en los demás. Vive de forma d

esinteresada, dando vida.

· Vivir con la vista puesta en la eternidad.

· Recibir consejo piadoso.

 · Continuar creciendo y madurando y llegando a ser más y más como Jesucrist

o.

Ciertamente, el resultado es diferente para nosotros cuando seguimos la voz y

el mensaje de Satanás en lugar de la del Señor. El camino de Satanás siempre

conduce a la pérdida, la destrucción y la muerte. El camino del Señor siempr

e conduce a una vida abundante y eterna (Juan 10:10).

A medida que continúe caminando diariamente con el Padre, meditando en Su

Palabra y buscándolo en oración, crecerá en su capacidad para discernir la voz

de Dios y desarrollar un oído para escuchar lo que Él le está diciendo. Llegar

ás a conocer su voz de manera inequívoca e inmediata, porque Él es tu Padre

y te llama por tu nombre.

'Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el d
iablo. ' S. Mateo 4:1 https://my.bible.com/bible/149/MAT.4.1
'Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. Y
vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se co
nviertan en pan. Él respondió y dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el homb
re, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. Entonces el diablo le llev
ó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hi
jo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de
ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra.
El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían. Entonces Je
sús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él
sólo servirás. Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.
Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos de
l mundo y la gloria de ellos, y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorar
es. ' S. Mateo 4:2-11 https://my.bible.com/bible/149/MAT.4.2-11

'Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, a
nda alrededor buscando a quien devorar; ' 1 Pedro 5:8 https://my.bible.com/bible
/149/1PE.5.8

'Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirle, diciendo: Señor, te

n compasión de ti; en ninguna manera esto te acontezca. Desde entonces com
enzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y pa
decer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y
ser muerto, y resucitar al tercer día. Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate
de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las
cosas de Dios, sino en las de los hombres. ' S. Mateo 16:21-23 https://my.bible.
com/bible/149/MAT.16.21-23

'El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que t
engan vida, y para que la tengan en abundancia. ' S. Juan 10:10 https://my.bibl
e.com/bible/149/JHN.10.10
Día 8

Día 8 • 1 de 3

Devocionales

Our Predisposition to Hear

What you hear from God is determined in part by the attitude you carry into a

ny conversation with Him. Our mind-set toward a conversation with God is affec

ted by these things:

· Our Prior Relationship With God — Each of us has a history with God that be

gan even before birth (Jer. 1:5). He ordained us to be on earth, and He has a

plan and purpose for us, even though we may not have recognized them. How

ever, until a person has received Jesus Christ as his personal Savior by faith, he

will not be able to hear God speak on any subject other than salvation. If you’r

e having trouble hearing from God, you may need to re-evaluate your relations
hip with Him. He’s not motivated to speak to any of us on the basis of our go

od deeds or our needs. He’s motivated to speak to us because He has a relati

onship with us.

· Our Understanding About God — What we hear is affected by our understan

ding of who God is. For example, do you view God as a loving or demanding

Father? An intimate or distant friend? A patient or intolerant teacher? A gentle

or angry guide? A generous or reluctant provider? Do you see Him as understa

nding or insensitive? If you struggle in perceiving God as loving, patient, gentle,

generous, or understanding, it will color what and how you hear from Him.

· Our Attitude Toward God — As we approach God, we must be submissive to

Him and His will for our lives (James 4:7). We must trust that He will only do t

hat which is best and right for us. And we must come before Him with a thank

ful heart for all He has done and will continue to do for each of us.

Being in right relationship with the Father, understanding who He is, and appro

aching Him in humility and reverence places us in the right position to not only

actively hear what He has to say to us, but also to apply His truth to our lives

.
Día 8 • 1 de 3

Devocionales

Nuestra predisposición a escuchar

Lo que escuchas de Dios está determinado en parte por la actitud que llevas

a cualquier conversación con él. Nuestra mentalidad hacia una conversación co

n Dios se ve afectada por estas cosas:

· Nuestra relación previa con Dios: cada uno de nosotros tiene una historia co

n Dios que comenzó incluso antes del nacimiento (Jer. 1: 5). Él nos ordenó est

ar en la tierra y tiene un plan y un propósito para nosotros, aunque no los ha

yamos reconocido. Sin embargo, hasta que una persona haya recibido a Jesucr

isto como su Salvador personal por fe, no podrá escuchar a Dios hablar sobre

ningún otro tema que no sea la salvación. Si tiene problemas para escuchar a

Dios, es posible que deba volver a evaluar su relación con él. No está motivad

o para hablar con ninguno de nosotros sobre la base de nuestras buenas accio

nes o nuestras necesidades. Está motivado para hablar con nosotros porque tie

ne una relación con nosotros.

· Nuestra comprensión de Dios: lo que escuchamos se ve afectado por nuestra

comprensión de quién es Dios. Por ejemplo, ¿ves a Dios como un Padre amo

roso o exigente? ¿Un amigo íntimo o lejano? ¿Un maestro paciente o intolera

nte? ¿Un guía gentil o enojado? ¿Un proveedor generoso o reacio? ¿Lo ves

como comprensivo o insensible? Si luchas para percibir a Dios como amoroso,

paciente, gentil, generoso o comprensivo, eso te dará color y cómo escucharás

de Él.
 · Nuestra actitud hacia Dios - Al acercarnos a Dios, debemos ser sumisos a Él

y a Su voluntad para nuestras vidas (Santiago 4: 7). Debemos confiar en que É

l solo hará lo que es mejor y correcto para nosotros. Y debemos presentarnos

ante Él con un corazón agradecido por todo lo que ha hecho y continuará ha

ciendo por cada uno de nosotros.

Estar en una relación correcta con el Padre, comprender quién es Él y acercars

e a Él con humildad y reverencia nos coloca en la posición correcta no solo pa

ra escuchar activamente lo que tiene que decirnos, sino también para aplicar Su

verdad a nuestras vidas.

'Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué

, te di por profeta a las naciones. ' Jeremías 1:5 https://my.bible.com/bible/149/J
ER.1.5

'Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. ' Santiago 4:7 ht
tps://my.bible.com/bible/149/JAS.4.7

Día 9
Devocionales

How to Listen Actively

Samuel was one of the greatest prophets in the Old Testament. I don’t believe

it’s a coincidence that his first assignment from God was to listen for God’s voic

e (see 1 Sam. 3:8-10). Samuel’s story shows us that there’s a difference between

active listening and passive hearing. Hearing is something we do with our ears.

If our hearing is normal, we can’t help hearing sounds traveling within a certain

range. Listening, however, involves the mind. Genuine listening is active. It involv

es putting the mind in gear to hear everything that’s said as if it has meaning

to the listener.

That’s how God calls us to listen to Him: actively. He wants our full and undivid

ed attention. Let’s take a look at what I believe are the 10 key aspects of listeni

ng actively:

1. Expectantly — If we’re going to listen actively, we must come before the Lor

d expectantly. We must anticipate with eagerness that He will speak to us.

2. Quietly — The Lord says to us, “Cease striving and know that I am God” (Ps.
 46:10). If we’re to hear from God, we must be quiet and let Him do the talkin

g.

3. Patiently — The Lord doesn’t always tell us things all at once or instantaneo

usly. Sometimes He speaks part of His message to us at one time, part at anot

her. Other times we hear a message from Him only after we’ve been waiting fo

r a season of time.

4. Confidently — As we listen to God, we must be confident that we’ll hear wh

at we need to hear. It may not always be what we want to hear, but we can tr

ust God to tell us what we need to know so that we can make decisions and c

hange certain things in our lives for our ultimate good.

5. Dependently — Have you ever heard the comment, “Do it as if your life dep

ended on it”? That’s the way we’re to listen because our lives depend upon our

hearing. We must have no agenda other than God’s agenda for our lives.

6. Openly — We must come to God with hearts and minds open to receive wh

atever He chooses to give us. To listen openly means to be willing to hear God
 correct us as well as comfort us, to hear Him convict us as well as assure us,

and to hear Him chastise us as well as praise us.

7. Attentively — To listen attentively means to attend or pay attention to each

word. This is more than expectancy that God is speaking. It’s listening to each

word for all the nuances of meaning, all aspects of the message God’s giving.

When we truly listen attentively, we don’t miss a thing!

8. Carefully — To listen carefully means to listen for the Holy Spirit to confirm t

hat the word which we’re hearing is a genuine word from God. We must put e

verything we hear to that test. It must line up with the written Word of God.

9. Submissively — To listen submissively means that you listen with the full inte

nt of obeying. If you plan to obey what you hear, you obviously take care to u

nderstand. Submitting to God’s Word is the only way you’ll ever find genuine m

eaning and purpose in life. Only as you submit to God can you hear from Him

clearly and be in a position where the Lord can do for you all He’s promised t

o do.

10. Reverently — A reverent heart stands in awe of God. What a privilege we h

ave to hear from the God of the universe, the Creator of all that is. When we l

isten reverently, we listen with wonder—first that God would speak to us, and t

hen that God would invite us to be part of His plans and purposes.

All of these aspects of active listening are ways in which we truly have “ears to

hear.” Jesus said repeatedly to His disciples, “He who has ears to hear, let him

hear!” (Matt. 11:15; 13:9; 43). May this always be true of each of us.

Devocionales

Cómo escuchar activamente

Samuel fue uno de los más grandes profetas en el Antiguo Testamento. No c

reo que sea una coincidencia que su primera tarea de Dios fue escuchar la voz

de Dios (ver 1 Sam. 3: 8-10). La historia de Samuel nos muestra que hay una

diferencia entre la escucha activa y la audición pasiva. La audición es algo que

hacemos con nuestros oídos. Si nuestra audición es normal, no podemos evit

ar escuchar sonidos que viajan dentro de un cierto rango. Escuchar, sin embar
go, implica la mente. La escucha genuina es activa. Implica poner la mente e

n marcha para escuchar todo lo que se dice como si tuviera sentido para el oy

ente.

Así es como Dios nos llama a escucharlo: activamente. Él quiere nuestra atenc

ión plena e indivisible. Echemos un vistazo a lo que creo que son los 10 aspec

tos clave de escuchar activamente:

1. Expectativa: si vamos a escuchar activamente, debemos acudir ante el Señor

expectante. Debemos anticipar con entusiasmo que Él nos hablará.

 2. En silencio: el Señor nos dice: "Dejen de esforzarse y sepan que yo soy Dio

s" (Sal. 46:10). Si queremos escuchar a Dios, debemos estar callados y dejar qu

e hable.

3. Pacientemente: el Señor no siempre nos dice cosas de una vez o de maner

a instantánea. A veces nos habla parte de su mensaje en un momento, parte

en otro. Otras veces escuchamos un mensaje de Él solo después de haber est

ado esperando una temporada.

4. Con confianza: mientras escuchamos a Dios, debemos estar seguros de que

escucharemos lo que necesitamos escuchar. Puede que no siempre sea lo que

queremos escuchar, pero podemos confiar en que Dios nos dirá lo que necesita

mos saber para que podamos tomar decisiones y cambiar ciertas cosas en nues

tras vidas para nuestro máximo bien.

 5. Dependentemente: ¿Alguna vez has escuchado el comentario: "Hazlo como s

i tu vida dependiera de ello"? Esa es la manera en que debemos escuchar por

que nuestras vidas dependen de nuestra audición. No debemos tener otra age

nda que la de Dios para nuestras vidas.

6. Abiertamente: debemos acercarnos a Dios con corazones y mentes abiertas

para recibir todo lo que Él elija darnos. Escuchar abiertamente significa estar di

spuesto a escuchar a Dios corregirnos y consolarnos, escucharlo convencernos y

asegurarnos, y escucharlo castigarnos y alabarnos.

7. Atento: escuchar atentamente significa atender o prestar atención a cada pal

abra. Esto es más que la expectativa de que Dios está hablando. Es escuchar

cada palabra para todos los matices de significado, todos los aspectos del mens
aje que Dios le da. Cuando realmente escuchamos atentamente, ¡no nos perde

mos nada!

8. Con cuidado: escuchar con atención significa escuchar al Espíritu Santo para

confirmar que la palabra que estamos escuchando es una palabra genuina de D

ios. Debemos poner todo lo que oímos a esa prueba. Debe alinearse con la

Palabra de Dios escrita.

9. Sumiso - Escuchar sumisamente significa que escuchas con toda la intención

de obedecer. Si planeas obedecer lo que escuchas, obviamente te aseguras d

e entender. Someterse a la Palabra de Dios es la única manera en la que sie

mpre encontrará un verdadero significado y propósito en la vida. Solo cuando

se somete a Dios puede escuchar de Él claramente y estar en una posición en

la que el Señor pueda hacer por usted todo lo que ha prometido hacer.
 10. Reverentemente: un corazón reverente se asombra de Dios. Qué privilegio

tenemos que escuchar al Dios del universo, el Creador de todo lo que es. Cua

ndo escuchamos con reverencia, escuchamos con asombro: primero que Dios n

os hablaría, y luego que Dios nos invitaría a ser parte de sus planes y propósit

os.

Todos estos aspectos de la escucha activa son formas en las que realmente te

nemos “oídos para escuchar”. Jesús dijo repetidamente a sus discípulos: “El que

tiene oídos para oír, oiga” (Mateo 11:15; 13: 9) 43). Que esto sea siempre verd

ad de cada uno de nosotros.

'Jehová, pues, llamó la tercera vez a Samuel. Y él se levantó y vino a Elí, y dij
o: Heme aquí; ¿para qué me has llamado? Entonces entendió Elí que Jehová lla
maba al joven. Y dijo Elí a Samuel: Ve y acuéstate; y si te llamare, dirás: Habla
, Jehová, porque tu siervo oye. Así se fue Samuel, y se acostó en su lugar. Y
vino Jehová y se paró, y llamó como las otras veces: ¡Samuel, Samuel! Entonc
es Samuel dijo: Habla, porque tu siervo oye. ' 1 Samuel 3:8-10 https://my.bible.c
om/bible/149/1SA.3.8-10
'Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; Seré exaltado entre las naciones; e
naltecido seré en la tierra. ' Salmos 46:10 https://my.bible.com/bible/149/PSA.46.
10

'El que tiene oídos para oír, oiga. ' S. Mateo 11:15 https://my.bible.com/bible/149
/MAT.11.15

'Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que

tiene oídos para oír, oiga. ' S. Mateo 13:43 https://my.bible.com/bible/149/MAT.1
3.43

Día 10

Devocionales

Sitting in God’s Presence

As we focus on today’s final lesson, we want to put together as many of the c

oncepts that we’ve covered in earlier lessons and go through a time of hearing

from God in a step-by-step way. This process is called meditation or, as I like t

o call it, sitting before the Lord.

There are five basic steps in this process:

1. Setting Aside Time — Meditation requires a commitment of time. I encourage

you to think of this as a season of time. The exact length of time will be dete

rmined by your purpose and your state of being as you come before the Lord.
Your goal is to have a mind committed to hearing from the Lord, not a mind t

hat’s closed, cloudy, or cluttered.

2. Getting Still Before the Lord — Fix your thoughts on the Lord. True stillness

before the Father involves a sense of relaxation and of total ease in His presenc

e.

3. Recalling the Lord’s Goodness — As you spend time in stillness of heart bef

ore the Lord, meditate on the goodness of God. Review your past, recalling all

the times in which He’s protected, provided, blessed, and cared for you. Reflect

on the Lord Himself: His greatness, grace, and goodness. Remember all the pro

mises in His Word made to all who believe and trust in Him.

4. Making a Request — How much more meaningful to make a petition to the

Lord after we’ve entered into His presence with a committed mind and heart, h

aving removed the hindrances of sin or false understanding that might keep us

from hearing Him clearly. State your request as simply as possible, and get to t

he very heart of what you want the Lord to do for, in, and through you.

5. Submitting Our Will to God’s Answer — As you make your request, be awar

e of any pride in your heart, asking God to remove it. Be mindful of any doubt

or disbelief in God’s ability or desire to answer your request. Be aware of ans

wers you’re likely to reject out of hand even before God speaks. Ask Him to he
lp you in your belief, praying for Him to keep your mind open, unclouded, and

uncluttered. Then, sit before Him and await His response to you.

When we sit before the Lord, meditating on His truth revealed to us, we see th

ings from a different perspective. The things that once occupied our minds lose

their grip. New things awaken within us. We feel stronger and better able to fa

ce life. Psalm 36:9 asserts, “In Your light we see light.” There’s something about

God shedding His enlightenment on a subject that causes us to see His truth cl

early.

The apostle Paul prayed that the Ephesians might be given a “spirit of wisdom

and revelation in the knowledge of Him” (Eph 1:17). He prayed that the eyes of

their hearts would be enlightened so that they might know the hope of His call

ing, the riches of the glory of His inheritance, and the exceeding greatness of H

is power toward them (Eph. 1:18).

What a wonderful thing to experience! Nothing will seem impossible to us if we

seek the Lord in prayer, expecting and actively listening for Him to speak to u

s. When we do, we'll come away from our time spent with Him with renewed h

ope, an awareness of all that He has for us, and an assurance that He can and

will act in power to bring about all that He has said.

To learn more about how you can experience a deeper relationship with God thr
ough prayer and actively listening for His voice, click here.

Devocionales

Sentado en la presencia de Dios

A medida que nos enfocamos en la lección final de hoy, deseamos reunir todo

s los conceptos que hemos cubierto en lecciones anteriores y pasar por un mo

mento de escuchar a Dios de manera paso a paso. Este proceso se llama me

ditación o, como me gusta llamarlo, sentarse ante el Señor.

Hay cinco pasos básicos en este proceso:

1. Establecer tiempo aparte: la meditación requiere un compromiso de tiempo.

Os animo a pensar en esto como una temporada del tiempo. La duración exac

ta del tiempo será determinada por su propósito y su estado de ser cuando se

presente ante el Señor. Tu objetivo es tener una mente comprometida a escuc

har al Señor, no una mente cerrada, nublada o abarrotada.

2. Quedarse quieto ante el Señor - Fije sus pensamientos sobre el Señor. La

verdadera quietud ante el Padre implica una sensación de relajación y de total f

acilidad en Su presencia.
3. Recordando la bondad del Señor - Mientras pasas tiempo en quietud de cor

azón ante el Señor, medita en la bondad de Dios. Revise su pasado, recordan

do todos los momentos en que Él lo protegió, lo proporcionó, lo bendijo y lo cui

dó. Reflexiona sobre el Señor mismo: Su grandeza, gracia y bondad. Recuerd

e todas las promesas hechas en Su Palabra a todos los que creen y confían en

Él.

4. Hacer una solicitud: es mucho más significativo hacer una petición al Señor

después de que hayamos entrado en Su presencia con una mente y un corazó

n comprometidos, habiendo eliminado los obstáculos del pecado o la falsa comp

rensión que podrían impedirnos escucharlo claramente. Exprese su solicitud de

la manera más simple posible y llegue al corazón mismo de lo que quiere que

el Señor haga por, en y a través de usted.

5. Enviar nuestra voluntad a la respuesta de Dios: al hacer su solicitud, tenga

en cuenta cualquier orgullo en su corazón, pidiéndole a Dios que lo elimine. Se

a consciente de cualquier duda o incredulidad en la capacidad o el deseo de Di

os para responder a su solicitud. Sé consciente de las respuestas que probabl

emente rechazarás de antemano incluso antes de que Dios hable. Pídale que l
o ayude en su creencia, orando para que mantenga su mente abierta, despejad

a y despejada. Luego, siéntate ante Él y espera su respuesta para ti.

Cuando nos sentamos ante el Señor, meditando en su verdad revelada a nosot

ros, vemos las cosas desde una perspectiva diferente. Las cosas que alguna v
ez ocuparon nuestras mentes pierden su control. Nuevas cosas despiertan dent

ro de nosotros. Nos sentimos más fuertes y más capaces de enfrentar la vida.

El Salmo 36: 9 afirma: "En tu luz vemos luz". Hay algo acerca de que Dios arr

oja su iluminación sobre un tema que nos hace ver claramente su verdad.

El apóstol Pablo oró para que a los efesios se les diera un "espíritu de sabidur

ía y revelación en el conocimiento de Él" (Ef 1:17). Oró para que los ojos de s

us corazones se iluminaran de modo que pudieran conocer la esperanza de su

llamamiento, las riquezas de la gloria de su herencia y la grandeza de su poder
para con ellos (Ef. 1:18).

¡Qué cosa tan maravillosa de experimentar! Nada nos parecerá imposible si b

uscamos al Señor en oración, esperando y escuchando activamente que Él nos

hable. Cuando lo hagamos, saldremos del tiempo que pasamos con Él con una

esperanza renovada, una conciencia de todo lo que Él tiene para nosotros y un

a seguridad de que Él puede y actuará en el poder para lograr todo lo que Él h

a dicho.
 Para obtener más información sobre cómo puede experimentar una relación má

s profunda con Dios a través de la oración y escuchar activamente su voz, hag

a clic aquí.

'Porque contigo está el manantial de la vida; En tu luz veremos la luz. ' Salmos
36:9 https://my.bible.com/bible/149/PSA.36.9

'para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu

de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de
vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha lla
mado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos, ' Efesios
1:17-18 https://my.bible.com/bible/149/EPH.1.17-18