You are on page 1of 7
PAUL BERGMAN LA DEFENSA EN JUICIO LA DEFENSA PENAL Y LA ORALIDAD SEGUNDA EDICION BUENOS AIRES Carfruvo VI DECLARACION INAUGURAL A. EN GENERAL Juntas, la declaraci6n inaugural y el alegato final encvadran nuestra presentacign de la evidencia. Aunque eada uno de estos episodios nos suministran la oportunidad de Kablar directamen- te al juzgador, uno expone Ja decla i ofrecer la evidencia. Por consigui cs una resefia previa més que un andlisis, un panorama, verbal ‘que uno propone para ayudar al juzgador a entender el signifi- cado de la evidencia que legard después. De todos modos, la filosofia del gran escultor Rodin es un recordatorio de que Ta declaracién inaugural y el alegato final tienen muchos elementos en comin. Afirmase que Rodin consi- deraba sencilla la tarea de esculpir un elefante. Todo lo que uno tenia que hacer era empezar con un gran bloque de mérmol, y eliminar lo que o era un elefante. Conciba el alegato fi de mérmol, y para convertirlo en la deck raci Ja formulacién inicial. De ese modo, la-declaraci6n inaugural ya ho seré un blando recitado de la evidencia esperada, y se con- vertiré en un persuasivo panorama general de nuestro caso. ‘Como las primeras impresiones a menudo persisten, Ia imagen nos recuerda que debemog tratar de mostrarnos tan persuasivos ‘como lo permiten las reglas. Por consiguiente, dura Ja declaracién inaugural uno icas del alegato final exploradas , tanto al comenzar.como al ter- a. combinar en una historia general.la evidencia que uno espera presentar por intermedio de una serie-de testigos. 234 PAUL BERGMAN b. resumir la historia de cada testigo individual; 0 ©. agrupar la evidencia esperada en relacién con teorias Juridicas 0 proposiciones facticas discretas. tuno no puede referirse a las instrucciones al jurado, que uno es- pera que un juez imparta, puede remitirse a principios funda- mentales aplicables y presentar la evidencia esperada en el con- texto de tales pr Durante lz declaracién inaugural uno puede, referirse también a la evidencia que espera que el adversario presente, mostrar auxiliares visuales que uno se propone ofrecer, usar analogias y explicar al juzgador la decisién que se espera que él formule. Més atin, und puede pronunciar su declaracién in con cierta empatia, que sugiera que la equidad y la ‘exigen un veredicto favorable. Por ejemplo, en el contexto de un caso en que un ciclista fue lesionado cuando el mecanismo de liberacién répida de la rueda delantera de la bicicleta supuestamente funciond mal y determing que el artefacto se desplomase, conviene comparat estos posibles fragmentos de una declaracién inaugural: Fragmento A: “Aunque les recuerdo que lo que digo no idencia, espero que la evidencia demostraré que mi al al cru- leta se elevo y cayé al cruzar las vias, lo que de- que $e aflojase la rueda delantera. La bicicleta de edi6 bajo el peso de mi cliente, y éste cayé al Fragmento B: “Joey salié a pasear en bicicleta un ti pico dia de fines del verano. Se aproximaba el comienzo de las clases, pero él y sus dos amigos atin tenfan unos pocos dias para descansar y divertirse. Decidieron is funcién vespertina del cine, y enfilaron por la calle Bolas en diseosion a la avenida Beloit, Pedaleaban a velocidad nor- ‘mal, pues disponian de mucho tiempo para llegar al cine. Michael atraves6 las vias, y después lo hizo David. Poo supuesto, saltaron un poco sobre sus bicicletas, pero en re- alidad no tuvieron ningin problema. Y entonces comenz6 a cruzar Joey. De pronto, su bicicleta comenzé a sacudirse a brinear. En el momento mismo en que Joey cruzaba las LA DBFENSA EN JUICIO, 235 Vias, la rueda delantera se solt6 por completo, la bicieleta cay6 y él fue arrojado al suelo”. El fragmento A contribuye poco a originar empatia o rama, Se teaciona dbatractamente al ccsts lesioned ang. ndndole el rétulo de “cliente”; el uso obsesivo de frases como “lo que digo no es evidencia” y “la evidencia demostraré” ale- al juzgador y al abogado del incidente; y el lenguaje es liso y En cambio, el fragmento B llama por su nombre a “Ke ayuda al juzgador a verlo como una persona, no como wna sosacton fegal El lenguaje es cologulaly vivid y la his. toria se desarrolla como podria hacerlo fuera del tribu Sin faltar a las reglas, ni suscitar una falsa simpatia, la se- gunda declaracién tiene més probabilidades de lograt que el juzgador desee fallar en favor de Joey. Si la declaracién inicial tiene muchos elem: iulacién de opiniones generalmente son enunciados inatigurales impropios. Compare estas afirmaciones: equetio Jimmy estaba de pie a unos tres me- igar en que sucedi6 el choque, y tenia una vision de lo que ocui pequefio Jimmy, que éstaba a s6lo tres metros del lugar en que ocurrié el choque, tuvo mejor dad que los restantes testigos de observar lo que 'y por consiguiente su testimonio es especialmente “El acusado probablemente aportaré evidencia en cl sentido de que el pequefio Jimmy acababa de fracasar en su prueba de ortografia, de modo que estaba distraido 236 PAUL BERGMAN mientras regresaba a su hogar y no prestaba atenci6n a lo ue sucedia alrededor de su persona. Pero como ustedes Iegardn a saber, el pequefio Jimmy nunca tuvo buena or- tografia, y se Je habfa dicho que podta estudiar el tema un par de dias més y nego repetir la prueba. No estaba en ab- soluto preocupado”. La primera afirmacién es completamente factica, y ade- cuada en el caso de Ia declaraci6n inaugural. Pero con respecto a Ja niimero dos, ningin testigo declarard que Jimmy tuvo “la mejor oportunidad, bservar”. La afirmacién es una infe- rencia que se reclama al juzgador. Asimismo, la afirmacién de la credibilidad se refiere a una conclusién que el juzgador debe alcanzar. Tales comentarios se refieren a los procesos de razo- namiento del juzgador, y son impropios en una declaracién inaugural. La afirmacién ntimero tres propone un argumento que refuta la evidencia del adversario. La referencia que incluye Jas palabras “como ustedes legardn a saber” en la afirmacion ndimero tres recuerda la formulaci6n inaugural, pero el eje de la afirmacién es que después de sopesar la evidencia, el juzgador debe llegar a la conclusién de que el pequefio Jimmy no estaba preocupado. Nuevamente, esa formulaci6n es un argumento, representa un elemento impropio para la declaraci6n inaugural. Al margen de la exactitud de la terminologia, conviene re- cordar que la declaraci6n inaugural apropiada a menudo esté en el ofdo tanto como en el ojo del observador. La utilizacién de un método argumentativo de exposicién aumenta la probabilidad de que un juez apoye una objecién acerca de “la declaracién inaugural impropia”, B. “LA EVIDENCIA DEMOSTRARA..” Como se dijo mas arriba, las palabras “Ia evidencia demos- traré” es una de una serie de frases trilladas que los abogados a veces utilizan pa far que saben que la declaracién inaugural no constituye evidencia. ero uno puede desenvolverse perfectamente sin ella. Por ejemplo, puede relatar su historia sencillamente de forma que no implique argumentacién: LA DEFENSA EN JUIGIO 237 “Gracias, Su Sefioria. Damas y caballeros, este juicio se origina en hechos que sucedieron en septiembre, hace tres afios. Ese mes, la Consolidated Integrated Associated Amalgamated, una empresa de familia dedicada a la cacién de articulos de aluminio por extrusién, advirti6 que no disponfa de suficiente cantidad de desechos metilicos...”. Incluso sin la frase mégica, “la evidencia demostraré”, esta declaracién inaugural casi siempre es permisible. Si uno lo duda, puede recordar al juzgador una vez, al ‘que uno esté describiendo lo qué la evidencia demostraré, y después enviar la frase al tacho de la basura. ©. DECLARACIONES INAUGURALES DE LOS ACUSADOS En la mayorfa de las jurisdicciones, el abogado defensor puede realizar su declaracién inaugural’ inmediatamente des- pués de la que corresponde al demandante, 0 esperar hasta poco antes del momento en que ella presenta’ su prueba principal. ner al demandante hasta cierto punto en la ignorancia de la evi- dencia y los argumentos que uno propondra. Mas ai perfeccionar su declaracién de modo que refleje i ‘que ha surgido, efectivamente, durante la pres prueba principal por el demandante. Y en la me [a apertura nos permita ofrecer un cuadro general que ayude al juzgador a interpretar el testimonio fragmentario, esa imagen puede enturbiarse si el paran la declaracién it nos aporta ningén elemento sorpresi inmediata puede acrecentar la ventaja de | mandante, al recordar a un juzgador que nuestro lado todavia no present6 su evidencia. Finalmente, la historia que uno narra durante la apertura puede acrecentar el significado y el efecto del testimonio que uno tiene al repréguntar a los testigos del demandante. 238 PAUL BERGMAN Uno debe equilibrar estos factores de acuerdo con las cir- cunstancias individuales. En ocasiones, deseosos de recordar su presencia al juzgador, pero poco deseosos o incapaces de rese~ far previamente su algunos abogados realizan una “declaracién inaugural " como esta: “Formularé observaciones muy breves. A medida que eescuchen a los testigos presentados por el demandante, re- cuerden que cuando tengamos la oportunidad de ofrecer una evidencia, ustedes escucharan una versién muy distinta de los hechos. De acuerdo con las normas, el demandante Puede presentar primero su evidencia. Escichen cuidado- samente dicha evidencia, pero mantengan la mente abierta de modo que pueden escuchar con el mismo cuidado nues- tra evidencia. Confio en que encontrardn que nuestra ver. sign es mas verosimil,y emitrén un veredicto favorable al acusado”, Aunque en general concluyente y desprovisto de referencia a cualquier testimonio concreto, su brevedad puede inducir al juez.a permitirlo. Pero sia uno se le permite realizar gatorio voir dire (averiguaciéa previa), puede cubrir durante el mismo gran parte de ese terreno. Uno solamente puede realizar una declaracién de apertura, y la postergacién de la misma hasta después del momento en qué el demandante termine de hablar, generalmente es preferible a la realizaci6n de una apertura fic. ticia, D. LAS DESVENTAJAS DE LOS DETALLES Sujeto a la disccecién judicial en relacién con el tiempo, uuno generalmente esté en libertad de incluir tantos o tan escavon detalles como lo prefiera en una declaraci6n inaugural. Pero las consideraciones tActicas sugieren que es mejor dejar muchos de- talles de manera que los propios testigos los revelen, Cuanto més elevado el nfimero de detalles que uno incluye en una de- claraci6n, més probable es que el juzgador nos Palabra. Al margen del posible hastfo, una apertura exces mente detallada puede inducir al juzendor a prestar escasa ign al propio testimonio, o a llegar a la conclusién de que el LA DEFENSA EN JUICIO 239 ibreto bien ensayado que el abogado le su- ministr6. Consideremos este posible fragmento de apertura: “Red se sent6 en una sila, aproximadamente a un me- tro y medio de la cabecera dela cama. No podia ver clara- mente a la persona que segin crefa era su abuela, porque habia olvidado los anteojos, las cortinas estaban cortidas, y habfan extendido las mantas de modo que casi cubrian la cara de la persona. Al pensar que la abuela tenia un as- pecto extrafio, dijo: ‘Abuela, tus cabellos parecen tan cor- tos”, En ese momento, Wolfe aparté las mantas con tanta fuerza que aterrizaron cerca de la puerta del dormitorio, a unos 5 metros de distancia. Wolfe: se incorporé répida- mente, grité “Te engafie’ y se arroj6 sobre Red, Le aferr6 ‘el brazo derecho con la mano izquierda. Lo sostuvo unos diez segundos, y Red se retoreia y se movia tratando de sol- tarse, Ella extendié la mano hecia el canasto, que estaba leno de..”. Este fragmento de declaracién se ajusta a las normas de la apertura. Pero, des eficaz? Después de escucharlo, es posible que el juzgador no preste mucha atencién al testimonio de Red. Asf como un comentario previo excesivamente detallado puede destruir cualquier interés que uno tenga en ver un filme, bign una declaracién excesivamente detalla del juzgador para escuchar atentamente el Juzgador puede llegar a ta conclusién de qj Cin del testigo sigue tan de cerca Ia formulacién inaugural, ella esta declarando de acuerdo con un libreto preparado por su abogado. Conviene reservar algunos detalles importantes para el testimonio, de modo que el juzgador no piense que ya antes lo escuché todo. E. EVITE LA EXAGERACION DURANTE LA DECLARACION INAUGURAL La referencia a la evidencia que uno no atina a presentar permite que un adversario destaque esa falla durante el alegato final, y puede inducir al juzgador a dudar de la eredibilidad de nuestro caso. Una formulacién equivocada incluso puede de- 240 PAUL BERGMAN, terminar la anulacién del juicio. Por consiguiente, remitase solo ala evidencia que usted esté seguro que podré presentar. romesas referidas a la evidencia que uno no puede mente corresponden a una de tres eategorias. Uno se errdneamente a la evidencia que espera obtener de un testigo amistoso, a la que espera que el adversario pre- sente, 0 a la que mas tarde el juez declara inadmisible. Conside- emos brevemente cada una de estas categorias. Con respecto a conviene tratar con figos que uno se propone convocar, ido Ia inclusién de informacién acerca de la cual un testigo ya hablé. Los testigos pueden parlotear relatando una historia de diferente modo cada vez que uno ha- bla con ellos, o incluyendo preambulos como “creo, aunque no estoy un 100 % seguro” en pasajes de su relato. El testi parlotea en la comodidad de nuestro estu Asimismo, vacile ante la posibilidad de remitirse a la evi- dencia aportada por testigos que no pueden ser convocados para declarar. Suponga que el pequeno Jimmy, u t fri6 ataques de sarampién semanas que precedieron peas del proceso, que t garganta muy dolorida. Es p le que usted dese omitir cualquier referencia: a la eviden que sélo el peq my puede suministrar. En caso conti tio, el alegato final del abogado de la parte contraria puede eluir una declaracién como ésta: “Cuando comenz6 este caso, la sefiorita Cardozo prometié en su declaracién inaugural que demostraria que mi cliente, el sefior Palsgraf, cruz6 con luz roja. "Prometié presentar un testigo neutral, una persona que no tenfa ningtin tipo de parentesco con su cliente, y que di- ia precisamente eso. Bien, ustedes ya escucharon fa evi- dencia que ella apo: ‘otalidad de la misma.

You might also like