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Aigee Crapo Eo $., Pohibid sro. Un cuento fantastico () ahora, eé este cuento, Elrobo del tesoro softado Antano, en cterto paraje, vivian dos mercaderes que emprendieron juntos el camino para traficar sus | ‘mercancias. | Un dia, al llegara un punto muy alejado de sus hogares, ambos se sintieron fatigados y resolvieron des- —No estarta mal un poco de reposo —dijo uno de ellos. —¥o deseo dormir —agregé el mds anciano, y al punto se lo escuch6 roncar. Yocurrié que mientras el mds joven contemplaba a su vecino dormido vio salir de su nariz un tébano que eché a volar en direcci6n a la isla de Sado. Al.cabo de una hora el tdbano regres6 y volvié a introducirse en la nariz del durmiente, el que desper- 16 de inmediato y dijo: —Esextranto. Soné que en la isla de Sado vivia un hombre muy rico, yen el jardin de su casa crecia una ‘camelia cubierta de flores blancas. Un tébano que llegé volando se pos6 al pie del drbol y me dijo: Cava en este lugar!" Yo cavé donde me indicaba y he aqui que descubrt un jarrén Ueno de oro. {Mira lo que he soRado! El més joven escuch6 este relato con el mas vivo interés y una idea eruzé por su mente. —aNo deseas venderme tu sueno? —eVondor un suono?

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