Poe
&
oyu
Constructivismo
y evaluacion
psicoeducativa
fe Vision panordmica del
capitulo
Introduccion
| ¢Qué es evaluar en el proceso
de ensenanza-aprendizaje?
Caracteristicas de una
evaluacién constructivista
Técnicas e instrumentos de
evaluacién
Tipos de evaluacién
Evaluacién de contenidos
Sumario
Actividades de reflexién e
intervencion|
|
!
i
Visién panoramica
del capitulo
Deniro de las aulas, muchos profesores contintian
realizando prdcticas evaluativas por costumbre y
sin llevar a cabo una reflexién que les permita cues- ”
tionar lo que se esta haciendo. Se evaltia sin saber”
con certeza el porqué y el para qué, en tanto que
la mayoria de las veces la evaluacién se lleya a cabo
sélo desde un punto de vista normativo-ins—
titucional, enfatizando la calificacién, la certifica-
cidén o la acteditacién, no desde una dptica mds
pedagégica que permita tomar decisiones en be
neficio del proceso de ensefianza y aprendizaje.
De hecho, algunos autores sefialan que la evalua
cidn se ha convertido en un problema purament
técnico, en una tarea que se resuelve con la mera
seleccién y aplicacién de los instrumentos apro:
piados. Tal simplificacién ha proyocado Ia acen
tuacién de profundas patologias en las prdctica
evaluativas, como aquella que prevalece en mi
chas instituciones educativas y que se refiere a
sefiar en funcién de lo que se evaltia.
En la actualidad, casi todos los que participan ae
tivamente en promover cambios en la ensefa
reconocen Ia necestdad de ayel eet
mente cambios profundos en Ia evaluacion edi
cativa. Se reconoce que si las practicas de evalConsrnctviomey enluacion prcoeducaina
en
cién no se modifican, los supuestos cambios pedagégicos en la en-
sefianza no tendrén ninguna repercusién ni cn el sistema educativo
nien el alumnado.
Sin embargo, tal cambio en la evaluaci6n psicoeducativa debe hacer-
secon un cierto rumbo; es decir, se requiere de un marco interpretativo
coherente frente a
que le dé sentido y le permita tomar una postut
s, normativas, institucionales y
las problematicas educativas, técnic
sociales que generalmente le acompafian.
Evaluar, desde la perspectiva constructivista, es dialogar y reflexio-
prendizaje, porque es una parte
nar sobre el proceso de ensefianz:
integral de dicho proceso, Consiste en poner en primer término las
decisiones pedagdgicas, para promover una ensefianza verdaderamen-
teadaptativa que atiendaa la diversidad del alumnado; en promover
(no en obstaculizar como ocurre en la evaluacién tradicional de filia-
cién empirista) aprendizajes con sentido y con valor funcional para
los alumnos; en ocuparse del problema de la regulacién de la ense-
» de la heterorre-
fianza y el aprendizaje; y en favorecer el traspas
gulacién evaluativa hacia la autorregulacién de los alumnos en ma-
teria de aprendizaje y evaluacién.
Creemos que los problemas de la evaluacién no se van a solucionar
tan slo porque los profesores conozcan los instruments evaluativos
del tiltinio grito de la moda y sepan aplicarlos, sino que se irin de-
cantando si los enfrentamos con instrumentos te6rico-conceptuales
potentes que nos permitan analizar con mayor claridad el significa-
do y el sentido de la evaluacién en las aulas.
Te eaeINTRODUCCION
Nadie puede negar que la evaluacién educativa es una actividad compleja que al mismo tiempo
constituye una tarea necesaria y esencial en la labor docente
En principio, es compleja porque dentro de un proceso educative puede evaluarse préctica-
mente todo, lo cual implica aprendizajes, ensefianza, accién docente, contexto fisico y educative,
programas, curricula, aspectos institucionales, etestera. Sievocamos aquella frase que Albert Einstein
escribié en una de las paredes de su estudio “no todo fo que cueuta es evaluable, mi todo To que puede
teoalunarse cireta”, y en ese sentido, si consiceramos que slo pudiese interesarnos la evaluacién
dentro del proceso de ensenanza y aprendizaje (como es el caso de este capitulo), ésta seguits sien:
do una tarea de gran complejidad porque le exige al docente analizar este proceso cle muchas aris-
fasy enfrentarse a una serie de asuntos y problemas dificiles de abordar, de caracter psicopedagogico,
técnico-practico, administrativo-institucional y sociocultural
[Al desempefiar sus funciones en alguna institucién educativa, cualquier docente debe tener
tuna cierta concepcién del modo en que se aprencle y se enseiia, lo mismo que acerca de como,
lo, por qué y para qué evaluar,
Se dice que detris de cada decisiGn sobre la tarea evaluativa que realiza el profesor, se manifies-
ta, implicita 0 explicitamente, una cierta concepei6n del aprendizajey, por supuesto, de la enserian-
za (véase Quinguer, 1999)
El profesor también debe poscer un cierto conocimiento teérico y practico mds o menos preciso
de un nutrido arsenal de estrategias, instrumentos y técnicas para evaluar los aprendizajes de los
dalumnos en los momentos pertinentes en que decida hacerlo, sea porque él lo considere asi o por
que la institucién o el curriculo se lo demanden.
Porello debe sefalarse en forma enfitica que la evaluacién es parte jadegral de ena buena ensefian
de hecho podiriamos decir sin ningtin menoscabo que no es posible coneebir adecuadamente ala
ensefanza sin la evaluacién. En consecttencia, una mejora en las propuestas de ensehanza y apren
dizaje también requiere necesariamente un cambio significative en los modos de entender y reali-
zar la evaluacién (véase Jorba y Sanmarti, 1999).
La evaluacidn del proceso de aprendizaje y ensehanza debe considerarse como una actividad
necesaria, en tanto que le aporta al profesor un mecattisito de autocontrol que le permitira la regula
ién y el conocimiento de los factores y problemas que llegan a promover o perturbar dicho pro-
Sin la actividad evaluativa dificilmente poclriamos asegurarnos de que ocuriera algtin tipo de
aprenclizaje, cualquiera que éste fuera, o nos costaria mucho saber apenas nada sobre los resultados
V la eficacia de la accidn docente y de los procedimientos de ensenanza utilizados, Sin la informa-
ci6n que nos proporciona la evaluacién, tampoco tendriamos argumentos suficientes para propo
ner correcciones y mejoras.
En este capitulo abordamos de manera directa los asuntos relativos ala evaluacién centro del
aula desde ef marco conceptual constructivista, Para ello presentamos primero una revisién sobre
algunas consideraciones conceptuales que juzgamos relevantes para situar la evaluaciGn
psicocducativa desde la perspectiva senalada; después, ampliarems los asuntos relacionaclos con
fos procedimientos e instrumentos evaluativos, los tipos de evaluacién psicoeducativa, asi como e
eeeproblema de la evaluacién de los contenidos curriculares. Como nota aclaratoria inicial para el
lector queremos expresar que este capitulo ha sido desarrollado principalmente para que el docente
reflexione sobre la tarea evaluation desde el marco constructivista y no contiene una exposicidn en la
que se enfaticen los aspectos técnico-practicos sobre diseito de instrumentos y téenicaso sobre su
forma de uso preciso. Consideramos que esta labor ha sido desarrollada coméinmente en varios
textos sobre evaluacién, con los cuales el lector podra complementar los temas cuando decida pro-
fundizar sobre dichos aspectos si asi le interesa.
QUE ES EVALUAR EN EL PROCESO
DE ENSENANZA-APRENDIZAJE?
Cuando hablamos del concepto de eval
ediciones sobre la importancia de las caracteristicas de un objeto, hecho o situacién particular. Sin
duda, la evaluacion incluye actividades de estimacion cualitativa o cuantitativa, las cuales se consi
1, inmediatamente lo asociamos a la tarea de realizar
deran imprescindibles, pero al mismo tiempo involucra otros factores que van mis alld y que en
cierto modo la dlefinen,
Evaluar, descle nuestro punto de vista, implica seis aspectos centrales (Jorba y Casellas, 1997;
Miras y Solé, 1990; Santos, 1993; Wolf, 1988):
1. _Lademarcacién del objeto, situacisn o nivel de referencia que se ha de evaluar: identificacién de los objetos
de eoaluacién. En este capitulo nos referiremos principalmente a la evaluacion dentto del proce-
so de ensenanza y aprendizaje, y para cada aspecto en particular que se desee evaluar (por
ejemplo, los aprendizajes de los alumnos) habra que considerar ciertos abjetos de evaluacién, lo
que se refiere indudablemente a qué queremos evaluar.
2. Elusodedetermtinados criterios para la vealizacién de la evaluaci6n. Estos criterios deben tomar como
fuente principal las intenciones educativas predefinidas en la programacién del plan de clase,
del programa y/o del curriculo en cuestidn. Existen dos tipos de criterios: de realizacién (nom:
bran los actos coneretos que se esperan de los alumnos) y de resultados (contemplan aspectos
tales como: pertinencia, precisién, originalidad, volumen de conocimientos utilizados, etcéte-
ra). Evidentemente, en este caso, lo que interesa Saber es si para un objeto de evaluacién dado se
han alcanzado los conocimientos correspondientes y en qué grado.
Una cierta sistematizacion ménina necesaria para ta obtencién de ta informacion. La si
consigue mediante la aplicacién de las diversas te
evaluativos que hagan emerger los indicadores en el objeto dle evaluaci6n, segtin sea el caso y
su pertinencia. Es claro que la selecciGn y el uso de los instrumentos nos aproxima ée leno a la
pregunta de con qué vamos a evaluar:
jematizaciGn se
entos e instrumentos
-as, procedlimn
4. A partir dela obtencidn de la informacién y mediante la aplicacisin de las técnicas sera posible
construir wit epresentacién lo mis fidedigua posible del objeto de evaluacién. Esta comprension sera
mis rica si se toma en cuenta un mayor ntimero de elementos y fuentes para construirla
La emisién d de natura
leza esencialmente cualitativa sobre lo que hemos evaluado. Tras la confrontacién entre los
criterios predefinidos en las intenciones educativas y los indicadores emergers este juicio
valorativo que constituye la esencia de Ia evaluacién. La elaboracién del juicio nos permite
juicios. Con base en los puntos anteriores sera posible elaborar un juici
cn ee