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-Analisis y Modificacién de la Conducta- -Lic. José Dahab- KAZDIN, A. - Aplicaciones actuales de las Técnicas Conductuales - (cap. 12) Estudiantes Psico 4) 1) MAYORIA ESTUDIANTIL e SEGUNDA EDICION EN ESPANOL “TRADUCIDA DE LA ‘QUINTA EDICION EN INGLES Modificacion de la conducta y sus aplicaciones prdcticas EEE TEESE ESTEE EGE ALAN E. KAZDIN Universidad de Yale ‘Traducido de I quints Edicién en inglés por: ‘Virginia Sanchez Rivas Revisién técnica por: Lic. Lorena Blanea Sanchez Facultad de Estudios Superiores Zaragoza /ersidad Nacional Auténoma de México Editor responsable: Lic. Ma. Eugenia Gémez Lopez Fitri EY Masia! Modem Capitulo 12 eae iS APLICACIONES ACTUALES DE LAS TECNICAS CONDUCTUALES APLICACIONES MEDICAS Prevencion del trastorno y la enfermedad ‘Trastornos de Ia alimentacion y habitos de dieta Dolor Apegoy obediencia SEGURIDAD PERSONAL Uso del cinturén de seguridad situaciones especiales para nifios Negocios e industria PATERNIDAD E INTERACCION PADRE-HYC PREOCUPACIONES CONTEMPORANEAS EN LA VIDA DIARIA Control del transito v practicas de manejo Conservacion de energia, Reciclaje de basura Habilidades de empleo y las relacionadas con el trabajo APLICACIONES ADICIONALES INTERVENCIONES MULTICOMPONENTES APLICACIONES A GRAN ESCALA Educacion Menores infractores Aplicaciones en el sitio de trabajo ‘SEGUIMIENTO A LARGO PLAZO RESUMEN Y CONCLUSION Aplicaciones actuales de las técnicas conductuales ea Cray P PIT Onur to! Doce Tete = RI cctv stp Fe ee pe ee ee ee ee ee ee a Cogeco cae i cae oc MR ci i et = Se cen een ert peetene ae eee Oe eal cancers Seeded ne ee ee eee on Se aye eneeanstne cia ee —— See eee aaa Reena 357 358 Wl Modificacisn de la conducta y sus aplicaciones précticas (Capinato 12) APLICACIONES MEDICAS Bas EERE En i TEES Las técnicas de modificacién conductual se han aplicado de manera cteciente a problemas relacionados con la salud fisica y Ia enfermedad, Las aplicaciones de la ciencia conductwal a Ia prevencién, diagnéstico y tratamiento de problemas de salud fisica han surgido recientemente como un area denominada como medicina conductual o, de modo mis zencral, psicologia de la salud. El area comprende muchos puntos focales, como fornentar estilos de vida saludables (como ejercitarse y seguir lineamientos de dicta), reduccién de conductas que inerementan el riesgo de enfermedad o disfuncidn (por ejemplo, sexo sin protecciény riesgo de SIDA), y el tratamiento de una diversidad de disfuncionesy trastornos (por ejemplo, hipertensién; cefalalgias, dolor, obesidad) (véase Blanchard, 1993; Glenwick y Jason, en prensa). Aunque Ios ejemplos a través de los capitulos anteriores han ilustrada sciones relacionadas con la salud, es importante destacar aqul esta érea. PREVENCION DEL TRASTORNO Y LA ENFERMEDAD En muchos casos, pueden prevenirse trastornos y enfermedades graves pasticipando en condnctas proventivac, diverses ectudios ae han cnfocado cn el desairull de wuuluctas pars reducir el riesgo de enfermedad o para deteciar el comienzo temprano de la enfermedad, de modo que Ios tratamientos puedan aplicarse de manera efectiva, adlo unas ctianias de las muchas areas en que se ha logrado pueden ejemplifiearse aqui Las intervenciones conductuales se han aplicado para la prevenecién de la enfermedad {que pone en riesgo Ia vida; por ejemplo, se eabe que Ia exposicién al sol es un factor de riesgo para el cancer de piel. La probabilidad de edncer de piel se ha incrementado, Io que. se supone es resultado de un cambio en el estilo de vida, aumento en la exposicién al sol y disminneién de la eapa de ozono, ademés de que los individuos que se exponen al sol rar vez llevan a cabo una conducta suficientemente protectors. En un estudio reciente, se hizo “un esfuerzo para aumentarel grado al cual los individuos que asistian a dos albereas privadas se involucraban en conduetas de proteccién (Lombard, Neubauer, Canfield y Winett, 1991). Las conduetas blanco comprendian usar una camisa y sombrero para cubrir la parte superior del cuerpo, ponerse bloqueador solar, 6xido de cine (para cubrit) la eara y otras conductas. Se puso en préctica una intervencién proporcionando carteles para informat cémo proteger- se, anuncios diatios de retroalimentacién haciendo notar el porcentaje de adultos y nifios que habjan Mevado a cabo conductas de proteccién el dia anterior, y una rifa para los individuos que habian Hensdo una forma prometiendo patticipar en pricticas de “sol seguro”. La intervencién se llevé a cabo en dos piseinas en diferentes momentos. Como se muestra en la figura 12-1, la interveneién condujo a incrementos en el porcentaje de individuos que particlpaban en dos © mis conductas de proteceisn. Los xesulfados son instruccionales al mostrar que Ise intervenciones de informacién y rettoal smeniacién relativamente simples pueden conducir al eambio, La magnitud de los resultados también sugiete que se necesitan intervenciones mas potentes, ya que muchos individwos no participaron en las conductas deseadas y, por tanto, se colocaron en riesgo de contmer Aplicaciones actuales de las técnicas conductuales W 359 100 Lneabace 11 2 8 Intervencién 2 pany 4 i E ! aie ony 4 7 10 18 16 19 22 25 28 a1 94 97 40 43 46 49 52 55 3 = Alberca A. i | 74 7 10 19 16 10 2 26°00 Gi D4 B7 a0 ao 46 40 62 65 Dins de observacién consecutves Figura 121. Porcentaje de nifos(trfica superior y adultos (grfica iferion que mostraron dos nue conductas de proceccion en diss de observacion consecitives. Ln intervencion se Introdujo eh ‘Sopasy en un diseno de tea base mitipleenere las dos albercas. PUENTE! tombord, b, Neubauer, TE, Canfield, D-y Winete, RA. (1991. 360 Bl Modificacién de la conducta y sus aplicaciones précticas (Captaulo 12) cancer de piel. Aun asi, los cambios reflejan wn foco importante y muestran que el cambio conductual puede lograrse en conductas en escenarios cotidianos, Existe consenso considerable respecto a que una de las mejores maneras de reducir las ‘muertes por cancer es Ia deteecién temprana, ya que las tasas de supervivencia son mayores [Pars muchos cdnceres si se identifican temprano y se tratan antes de que se diseminen (hecho ‘metistasis). Las téenicas conductuales se han aplicado para aumentar Ia detecclén temprana a través del autoexamen, empleando instruceiones, retroalimentacidn y reforzamiento para centrenar a hotnbres y mujeres para que se autoexaminen buseando sintomas de cincer mamario o testicular (véase Friman, Fmey, Glasscock, Weigel y Christopherzen, 1986; Hall y colaboradores, 1980). Los relativamente pocos estudios en esta rea han mostrado qiie Ia conducts requerdas pueden desarollase y mantenerse después que el tratamiento ha Las intervenciones conductuales se han enfocado en elerto niimero de areas que son. criticas aunque no ponen enriesgo la vida; por ejemplo, se ha llevado a cabo bastante trabajo sobre el cuidado dental para prevenir Ia caries, enfermedad deas enciasy pérdida de dientes, ‘Aunque las infervenciones ambientales (aplicacién de flior a los suministros cormunitarios de agua) han ayudado, el cuidado individual sigue siendo eritico; se han estudiado interven- clones para diferentes facetas de cuidado dental. Y éstas se han facilitado por Ia disponibi lidad de medidas para evaluar diversos grades de placa dental. Tales mediciones permiten Js evaluncin del grado al que Ins personas se eepillan y emplen seda dental de manera En un proyecto se entrens a Jos ninos a pasar seda dental por sus dientes para reduet Ia placa; Ine instrucciones, inductores (tarjetas de recordatorio en casa), automonitoreo y reforzamiento intermitente fueron bastante efectives para reducir la placa (Dahlquist y Gil, 1986). La intervencién se mantuvo en el hogar dando un giro a los procedimientos de evaluacién y reforzamiento del experimentadar a los padres. Otros estudios han mostrado que las técnicas conductuales pueden incrementar la frecuencia, calidad del cepillado de dientes y empleo de seda dental en nifios y adultos (Claerhout y Lutzker, 1981; Iwata y Becksfort, 1981). TRASTORNOS DE LA ALIMENTACION Y HABITOS DE DIETA Las técnicas conductuales se han aplieado a una diversidad de trastornos alimenticios que pueden conducir reflejar enfermedad fisiea, ineluyendo obesidad, vémito ruminativo, anorexia nerviosa y bulimia. Por ejemplo, la anorexia nerviosa, un tastomo que se encuentra de manera invariable en mujeres jévenes, ineluye consumo reducide de comida, lo que da por resultado una pérdida de peso extrema. Las mujeres con anorexia netviosa pierden ‘cuando menos 20% de su peso corporal normal, tienen un miedo notorio a volverse obesas, y se resisten a ganar peso. Las consecuencins fisicas de Ia pérdida significativa de peso comprenden una aparieneia demacrada, cese de In menstrancién y, ef casos severos, Ia muerte. En um programa se trataron pacientes con anorexia nerviosa grave empleandounsistema de contrato de contingencia (Pertschuk, Edwards y Pomerleau, 1978). Se les dijo a las pacientes hospitalizadas que necesitaban subir un cuarto de kilo de peso diariamente para ganar clertos privilegios en el pabelldn; los contratos individualizados se redactaron por Aplicaciones actuales de las técnicas conductuales 8 361 escrito y los firmaron el terapeuta y Ia paciente. Se les dijo a las pacientes que ellas eran, responsables de subir de pese y que podian solicitar asesorfa nutricional si deseaban ayuda, Durante la linea base, las pacientes por lo general siguieron perdiendo peso; sin embargo, durante el perioda del contrato (alrededor de dos semanas), mostraron tun aumento de peso Promedio de 4.2 kilogramos (9.3 libras). La evaluacisn de seguimiento oacilé entre 3 y 28 ‘meses e indicé que las pacientes habian seguido subiendo de peso después de que fueron dadas de alta del hospital. Otros informes sugieren el tratamiento exitoso de la anorexia nerviesa con técnicas de reforzamiento y retroalimentacién, contrato de contingencia, desensibilizacién y otros procedimientos conductuales solos o en combinaciin (véase Brownell y Foreyt, 1986). ‘Otte trastarno de Ia alimentacién es la bulimia, que se caracteriza por vémito autoin- ducida y otros métodos de purga (por ejemplo, el empleo de laxantes). Los individuos que padecen bulimia estan muy preocupados por volverse obesos. Enuna demostmaciénreciente, ‘Se utilizaron téenieas cognitive conductuales con 13 mujeres que recibieron tratamiento ambulatotio par bulimia (Kettlewell, Mizes y Wasylyshyn, 1992). El tratamiento se evalud enun disefio de linea base miltiple entre subgrupos de sujetos, el cual incluyé la participa- cién de conductas de competencia cuando iban a purgarse, reto y cogniciones desadaptadas (por ejemplo, “Debo estar delgada”), establecer metas para subir de peso, participar en actividades de manejo (telajacisn) para reducit Ia urgencia de comer compulsivamente, ¥ ‘ottos. Con base en mediciones de autoinforme cobre comer en exceso y purgarse, la mayoria (69%) de las suietos se hallaban libres de sintomas al final del tratamiento; en el seguimiento ‘alos tres meses solo 15% permaneeia ain efntomas; y dichcs resultados instruyen al mostrar los efectos del tratamiento pero tambign en sefialar Jos limites. Es claro que se necesitan. ‘cambios adicionales para aumentar el impacto a corto y largo plazo, la duncisn del tratamiento fue breve (ocho sesiones de grupo con duracién de hora a hora y media cada una). Enconsecvencia, esrazonable examinar si una dosis mucho mas intensiva logra efectos mds potentes, \No todas las intervenciones relacionadas con la comida se enfocan en los trastornos; Jos habitos y estilos de alimentacisnse relacionan con la salud en general. Por tanto, muchos programas Se centran en las dietas para el pablico en general. Por ejemplo, las dietas altas ent {grasa y bajasen fibra estan asociadas con cierta cantidad de padecimientos como enfermedad ‘cardiaca coronaria y diversas formas de cancer. Los programas conductuales en escenatios ‘cotidianos se han enfocado en incrementar la seleceién y compra de alimentos altos en fibra 1 bajos en grasa (como cereales, granos y verduras); por ejemplo, las intervenctones llevadas cabo entestaurantes de comida ripida y tiendas de abarrotes se han disefiado paraaumentar Ia compra de alimentos saludables (Wagner y Winett, 1988, Winett y colaboradores, 1991). DOLOR Las técnicas conductusles se han apliendo para tratar el dolor asociado con tuna vatiedad de trastornos; éstas por lo general se aplican para cambiar muchas de las conductas asociadas con el dolor —por ejemplo, aumentar Ia eantidad de tiempo que los pacientes hospitalizados permanecen fuera de su cama; reducir signos de dolor como hacer muecas, gemir, quejarse, caminar de manera protectora o resguardada, y disminuir la dependencia en la medicactén. 362 Wl Modificacién de la conducta y sus aplicaciones précticas (Capitulo 12) Un trabajo pionero en la aplicacién de técnicas conduetuales al dolor erénico fue Publicado hace muchos afios por Fordyce y sus colegas (Fordyce y colaboradores, 1974), En.uno de los estudios los pacientes con dolor de espalda (debido.a una variedad de trastornos fisicos) participaron en un programa de tratamiento durante aproximadamente siete semanas dentro del hospital. Durante el tratamiento los pacientes recibieron reforzamiento social por ‘parte de sus familias y de los miembros del hospital por invaluctarse en mis actividades (Como tomar pascos) enel hospital, de igual modo, las quejas, gemidos, inactividad y muceas fueron ignorados. Después del tratamiento los pacientes informaron dolor menos intenso, redujeron su ingestién de medicamentos ¢ incrementaron la cantidad de tiempo que pasabant fucra de sus carmas. Otros estudios han mostrado que el reforzayniento del personal puede aumentar actividades (por ejemplo, caminar, pedalear una bicicleta estacionaria) y reducit el dolor entre los pacientes hospitalizados diagnosticados con dolor de eapalda cronico (Caime y Pacino, 1977). Los tratamientos conductuales suelen emplearse para ayudar a los individuos a manejar Y competir con procedimientos médicos doloroses; por ejemplo, un estudio de nits (entre 3 y 13 aftos de edad) con leucemia atendida mediante manejo dolorose y estresante (ay, Elliot, Katz y Siegel, 1987). Como parte de su tratamiento y cuidado, se pedia a los nifios de manera ratinaria que completaran tres aspiraciones de médula espinal, un procedimiento médico aversivo y traumético. La prueba requiere la insercidnde una larga aguja en el hueso de la cadera para extraer médula espinal, y obtener informacién necesaria para evaluat Ia Presencia 0 ausencia de eéhulas eancerosts. De modo tipico (en Estados Unides), se aplica ‘un anestésico loeal, pero no alivia el dolor del procedimiento complete. Se utilizé un tratamiento cognitivo-conduetual, el etal comprendia la observacién de ‘una pelicula modelada de nifios haciendo frente al procedimiento, ejercicios de respiraciéin, imagineria emotiva, técnica de distraccién y ensayo conductual (por ejemplo, role-playinis con el doctor). Les efectos del tratamiento se evaluaron con base en observaciones directa de incomodidad durante el proceso de aspiracién, autosyda del niho inmediatamente después del procedimicnito, y medidas fisiolégicas (presién sanguinea, freevencia del pulse). En general, el procedimiento cognitivo-conductual condujo a un temor considerablemente ‘menor en comparacién con un tratamiento minimo proporcionado a los pacientes de maneta rutinaria o con Ia medieacisn (tranquilizantes) Otros estudios han demostrado la efectividad de varios tipos de terapia para reducir el cestrés entre nifios que atraviesan por procedimientos médicos; por ejemplo, en un estud se preparé a nifies (de edades entre 4 y 10 afios) para cirugia, viendo una pelicula modelads ¥ practicando respuestas de enfrentamiento 0 tomando parte en los procedimlentos rutinarios del hospital, como recibir informacién y ver el equipo (Faust, Olson y Rodriguez, 1991). El moldeamiento condujo a reduccién del estrés durante Ia recuperacién de la operacién. En ‘otto estudio se compararon dos interveneiones para reducir estrés entre nifios pequeitos (de 3.9 afiosde edad) sujetos.a venepunciéncome parte de su tratamiento para el cancer (Manne ¥ eolaboradores, 1990). Una intervencién conductual (entrenamiento a los padres, distrac. isn de atencién, y reforzamiento positive) condujo a menor estrés observado en las calificaciones de los padres sobre el estrés del nifio, y en las calificaciones de los padres para ‘su propia incomodidad, en comparacicn con un procedimiento control (en el cual los padres ‘tataban de ayudar a sus hijos de cualquier forma que deseaser). Los ensayos controlador de técnicas de tratamiento para nifios sujetos a procedimientos médicos han mostrado en repetidas ocasiones los beneficios de los diversoe procedimientos por encima del euidado estandarizado y rutinario que les pacientes reciben. Otros informes han sugerido que Ins 4 Aplicaciones actuales de las téenicas conductuales W 363 {éenicas conductuales incluyendo Ia biorretroalimentacién, entrenamiento en relajacién, sistemas de incentivos y estrategias congnitivo-conduetuales como el empleo de autoafir maciones, pueden emplearse para tratar el dolor asoclado con Ja enfermedad crénica, menstruacién y c6pula (véase Blanchard, 1992; Turk, Meichenbaum y Genest, 1983). Los trastornos especificos como dolor de espalda y cefalalgias, representan reas en las que se hhan estudiado varias técnicas. APEGO Y OBEDIENCIA El apego a los regimenes médicos ¢s un tea importante de preocupacién debido a que muchas formas de tratamiento fisico y psicolégico dependen de la obediencia del cliente a las recomendaciones del tratamiento. Sin embargo, las estimaciones han sugeride que mis de 50% de los pacientes no obedecen a sus regimenes prescritos (Gillum y Barsky, 1974). ‘La modificacién conductual se ha utilizado para inetementar el apego a diversos procedimientos de tratamiento, por ejemplo, Lowe y Lutzker (1979) tratarona una diabética Juvenil, lamada Amy, hospitalizada en repetidas ocasiones come resultado de no seguir el régimen médico prescrito; por lo que para asegurar el equilibrio de ou nivel de azticar en sangre, se Ie habia preccrito una dieta especial, inyecoiones de inculina y ejercicio; ademas, se le instruyé para efectuar pruebas de orina varias veces al dia y medir el efecto de la dicta balanceada, insulina y ejerciclo. También se Te habia dicho que mantuviera su higiene ‘personal, en especial en relacién con el enldado de loe pies, dehide a on mala cieenlaclin, ‘pérdida de sensibilidad y posibles heridas que podrian infectarse si no se detectaban. Por desgracia, Amy no siguis la dieta adecuada, ni efectud eximenes de orina ni culdé sus (lavar e inspeceionar en busca de cortadas y magulladuras). Para aumentar la obediencia al régimen médico en su hogar, los investigadores le dicron, ‘un “memo” (instrucciones escritas) que indieaba eémo completar las conductas deseadas y a qué hora debian hacerse cada dia. Después se planes una economia de fichas en la cual Amy obtenia puntos (intercambiables por recompensas diarins o al final de la semana) por Participar en las tareas solicitadas para mansjar su diabetes. Los efectos del progmma se Presentan enla figura 12-2, que grafiea el porcentaje diario de Amy en cuanto a efectaar las {areas deseadas. La introducelén del memo increment el apego de Amy a la dicta (poreién inferior de la figura) pero no tuvo efecto sobre sus otras conducias. El sistema de fichas, sin ‘embargo, mejoré de manera notoria cu apego a loe requerimientas de euidade de los pies y pmiebas de orina, Durante el periodo de seguimiento, el experimentador ya no estuvo involucrado de manera formal en el programa, fueron los padres quienes continuaron el programa, y las conductas de Amy se mantuvieron a ma taza elevada, ‘Ouo programa se enfocd en mejorar la habilidad de 19 nifios (de edades entre 8 y 12 aiios de edad) para controlar su diabetes (Epstein y colaboradores, 1981). Se entrené a los nifios y a sus padres para evaluar niveles de glucosa en ofina, ajustar las dosis de insulina de acuerdo con Ins necesidades, seguir una dicta especial y ejercitarse. Cuando los nifios recibieron puntos por evaluar de manera precisa sus niveles de glucoea enorina y por seguir los regimenes de dieta y ejercicio, el control de sus niveles de glucosa se incremento de ‘manera sustancial y, los beneficios se mantuvieron hasta 10 semanas después de que el tratamiento habia terminedo. Las técnicas de reforzamiento también se han utilizado para aumentar el seguimiento de una dita especial, ejercicio y regimenes de medieacién entre pacientes con una diversi- 364 BI Modificacién de la conducta y sus aplicaciones prdcticas (Captruto 12) Linea base Meme 1 Sistema de puntos Seguimients Pruabas ®® s.r 40 = Pooanse de ebedonia Diets Dias Semanas 12-2. Poreentaje de obediencia al regimen médico de culdado d los ples, prucbas de orina y PUENTE: Lowe, K. ¥ Lutzker J. R.(1979). dad de trastoros como disfuncién renal, hipertensién, asma y enfermedad coronaria, por mencionar sélo algunos (véase Russo y Varni, 1982; Stusrt, 1982). Estas aplicaciones con. en especial signifieativas debido a Ins consecuencias de amenaza a la vida si falla el seguimiento de los tratamientos prescritos. SEGURIDAD PERSONAL TEETH Bana MEER Ee neenciniatanaa einen Las técnicas conductusles se han aplicado de manera creciente a seas de seguridad para evilar dafio y muerte en una variedad de situaciones, Ia significacién de las conductas Aplicaciones actuales de las técnicas conduetuales W 365 relacionadas con Ia seguridad puede atestiguarse en muchas formas. Pot ejemplo, entre los adultos, los accidentes son la cuarta causa de muerte (después de las enfermedades cardiacas, céncer y apoplejia); aquellos en veh{culos de motor y pot cuestiones de trabajo son las dos categorias de accidentes que dan por resultado las tasas de mortalidad mis elevadas. Las intervenciones que pueden disminuir I probabilidad de dafio y muerte a partir de accidentes son obviamente importantes. El rango de conductas relacionadas con, Ja seguridad y las situaciones a Iaz que se han aplicado téenicas conductuales es amplio y aqui s6lo puede ejemplificarce USO DEL CINTURON DE SEGURIDAD El empleo de cinturones de seguridad en automaviles es un asunto de seguridad importante, dada Tn evidencla de que esa prictica puede evitar aproximadamente la mitad de las muertes ¥ dafios que se preseniarfan en su ausencla entre los pasajeros de vehiculos de motor. Como tuna ilustracién del trabajo en esta area, el empleo del cinturén de seguridad se incrementé hire los nifios que asistinn » un programa de guarderia después de la escuela (Sowers-Hong, ‘Thyer y Bailey, 1987). La utilizacién del cinturén de seguridad se evalué al final de cada dis, cuando los padres recogian a sus nifiog; cada padre manejaba hasta una zona de carga, yen ese momento un miembro del personal iba por el nifio y lo Hevaba al carro. EL empleo. del cinturén de seguridad se evalud observando si el ni se Io habia colocado antes de que fel caito sallera de Ia zona de embarque. La infervencion para desarrollar la uillizacion del cinturén de seguridad incluia informacién edveativa para los nifios cobre el empleo de Jos cinturones, entrenamiento agertivo a través de role-play para ayudarlos a solicitar ayuda ‘cuando Io necesitaran pats encontrar o azegurarze el cinturdn de seguridad, y practica en cemplear dictintas clases de cinturones. También ce utiliz3 un sistema de recompensa en el coual el nifto que uesba cinturén de seguridad era eandidato para una loteria al dia siguiente, en la cusl podia ganar un pequeno premio (valuado entre 1,50 y 3.50 pesos). Las oportunidades de un nifio para ganar el premio al dia siguiente eran relativamente altas. {50 por ciento). Después de que el programa estuvo en vigor, el criterio de ejecucién para ser clegido para Ia loteria se incrementé a dos dias consecutivos de utilizacién del cinturén de seguridad. ‘Aunque el programa se aplicé a los 158 nifios de Ia unidad, Ia intervencién se evalud s6lo con 16 nifios, ésta oe introdyjo en un disefio de linea base multiple entre dos grupos de nifios. Como es evidente en la figura 12-3, el empleo de cinturén de seguridad se increments ‘cuando ce introdujo Ia interveneién. Cuando Ia frecuencia de Ia loteria se redujo y se necesitaron dos dins de uso del cinturén de seguridad, este empleo permanecié elevado. Se llevé a cabo una evaluacidn de ceguimiento tres meses después de que el programa habia ‘concluidoy los resultados indicaron un nivel clevado de utilizacién de cinturdn de seguridad (75.86 por ciento). SITUACIONES ESPECIALES PARA NINOS Existe un sinmimero de situaciones en las cuales los nifios se encuentran en riesgo debido a su edad, falta de conocimiento, inexperiencin y etapa de desarrollo. Varies puntos focales 360 1 Modificacién de la conducta y sus aplicaciones précticas (Capirulo 12) sobre el enturén Lneabase Se seguridad 50% de deevanecimionts Sequimients Poteanse denies con chun de eeguicad puate Ye Tsao 45" 25 eran! 00 68 73 78 93102 Figura 12—3. porcentaje de utilizacién de eincurén de seguridad de ocho nos en el Grupo 1 y ocho nifos en el Grupe 2. FUENTE: Sowers-Hoag, K: M, Thyer, B.A. Bailey, JS (1997). itustran los esfuerzos para aplicar téenicas conductuales para incrementar Ia seguridad infantil en el hogar y la comunidad. El secuestro infantil es obviamente una importante preocupacién social y patemal. En una investigacién se entrené a nifioe preescolares (de 3 815 aftos de edad) para protegerse a sf mismos contra el secuestro pot parte de extrafos (Poche, Brouwer y Swearingen, 1981), los nifios fueron eeleccionados de manera inicial para participar si fuesen susceptibles de Secuestro, lo cual se evalus haciendo que un extrafo: (en realidad alguien trabajando en el estudio) se aproximara al nifio y le preguntara ai abandonaria Ia escuela con él. Por desgracia 90% de los nfios accedierona irse conelextrafio después de que éste sélo les indujode manera verbal, aunque nose retins en realidad a ningin nifio del escenario. El entrenamiento se efectué en varios lugares alrededor de Ia escuela, ee entrené a los adultos para tentar a los nifios utilizando trucos verbales e incitarlos a ire con ellos. Pot supuesto, no se emples fuerza fisiea para inducirlos (dicha fuerza rata vez la utilizan las [personas que en verdad raptan nifios), Afirmacianes como éstaa se hicieron a los nifios: “2 Te gustaria ir conmigo de paseo?” “Tengo una sorpresa agradable en mi carro”, Las conductas blanco, derivadas de entrevistas con los padres, consistieron en hacer un breve comentario Aplicaciones actuales de las técnicas conductuales 1 367 verbal al extrafio y alejarse tan pronto fuera posible. El entrenamiento consistié en modelar Jas conduetas deseadas, hacer que los niftos laz practicaran y proveerlos con reforzariento social y tangible (por ejemplo; elogio, ealcomantas) por responder de manera adecuada, La prictica continué en distintas situaciones y entre diferentes tipos de aproximaciones de los adultos; los resultados indiearon que los nifios aprendieron las conduetas requeridas y no fueron susceptibles de que los adultos los tentaran. Los efectos se generalizaron Ia evaluactén en una situacién natural en la comunidad y se mantuvieron hasta 12 semanas después de que el tratamiento habia terminado. La investigacién subsecuente ha mostrado ‘que puede entrenarse a los nifios en habilidades para evitar el secuestro con una cinta de video que presenta la secuencia de entrenamiento (Ponche, Yoder y Miltenberger, 1988). Programa podria diseminarse con amplitud en virtud de su forma de videocinta, acomparada or instrucciones para su utilizacion. En otto programa se entrend a nifios de escuela elemental para involucrarse en. conductas que les capacitarian para escapar de situaciones de incendio en su hogar (Jones, Kazdin y Haney, 1981). Se entrené a los nifios en dormitories simulados en la escuela, las ‘conductas de escape deseadas se seleccionaron de manusles de seguridad contra incendios y después de consultar con los bomberos, quienes identificaron situaciones problema y ‘conductaspara salvar la vida. Las conductas blanco eran secuencias de respuestasenextremo complejas para evitar ser agobindo por el humo (por ejemplo, rodarse de la cama, arrastrarse ‘a gatas hacia la puerta o la ventana), o tomar decisiones con base en Ia amplitud y ubieacién. del incendio hipotético, ademis de seleccionar entre rutas alternativas de escape. El ‘entrenamlento comprendis Instruceiones, xetronlimentacion, modelado ast como autorrefor~ zamiento y reforzamiento externo. Los resultados indicaron que los nifios no contaban con, Jas respuestas requeridas antes del enitrenamiento pero Ine decasrollaron a ui nivel elevado cuando se ejecutd el programa. Ademés, las respuestas se sostuvieron en.una evaluacién de seguimiento a las dos semanas. Otros esfuerzos para desarrollar habilidades para estar a salvo de los incendios se han centrado en poblaciones especiales, como personas con retraco. mental profundo, deterioro visual ¢ incapacidad fisiea a quienes se ha entrenado para abandonar a salvo sus hogares (por ejemplo, Bannerman, Sheldon y Sherman, 1991; Jones, Sissan y Van Hasselt, 1984), La seguridad de los nifios ha sido el punto focal en varias otras aplicaciones de las \écnicas conductuales, como intervenciones para reducir el nimero de rlesgos a la seguridad Infantil en el hogar, por ejemplo, fuego, electricidad, venenos (Iertinger, Greene y Lutzker, 1984) y manejar aquellas cituaciones de los “nifios con Haves de cu casa, que son aquellos que regresan a cu casa de In escuela, sin supervisién adulta (Peterson, 1984). En estos estudies se han hecho esfuerzos para aumentar Ia seguridad en el hogar o para auxilinr a los nifioe a manejar situaciones en las cuales no esté disponible un adulto. NEGOCIOS E INDUSTRIA ‘Muchas aplicaciones de la modificacién conductual ze han efectuado en la industria para promover pricticas de seguridad por parte de los empleados (por ejemplo, usar articulos de proteceién, emplear equipo potenclalmente peligrozo de manera adecusda) y manejo retirar Tiesgos de trabajo). Puede verse una ilustracién excelente en un estudio sobre seguridad en mineria de pozos sbiertos (Fox, Hopkins y Anger, 1987). El estudio se llevé a enbo en dos 368 Wl Modificacién de la conducta y sus aplicaciones précticas (Capitulo 12) minas de poze abierto, uno en Wyoming y el otro en Arizona; de una de las minas se extraia y procesaba uranio, y de la otra carbén. Las dos minas utilizaban equipo similar (camiones, tractores niveladores) y procedimientos también semejantes (mineria de fleje, aplastamiento y almacenaje de materiales). Las metas del programa eran decrementar dafios relacionados con el trabajo, y disminuir los dias que se pierden a causa de tales daftos (debido a cuidado médico, ceguro y daito de equipo) entre les empleades de cada mina. ‘Se proporcioné un incentivo en forma de fichas (estampillas de premio) al final de cada mes, a los trabajadores que no habfan sufrido dafios © que no habfan requeride culdado ‘médico a causa de un accidente. Las estampillas de premio también se daban a todos los miembros de un grupo que trabajaba a cargo de un supervisor particular si nadie enel grupo habia sufrido dafio. Habia disponibles estampillas de bonificacién para los trabajadores cuyas sugerencias para mejorar la seguridad en las inetalaciones fueran adoptadas. También, ‘podian perderse las estarnpillas de premio (costo de respuesta) por faltar al trabajo a causa de dafio 0 por provoear un accldente. Las estampillas de premio podian intereambiarse en. un centro de reembolso cereano que tenia cientos de articulos, como pequefios aparatos electrodomésticos, partillas para barbacoa, especieros y relojes. El programma se introdujo. eneada mina en un dieefio de linea baze multiple ¢ integrado a Ins pricticas rutinariae de In mina durante varios afos. La figura 12-4 muestra una mareada reduccin en el mimero de aceidentes entre loz trabajadores (panel superior), asi come una reduccidn en los costoz monetarios para la compa (panel inferior). También es de interés el empleo del programa a largo plazo y la continuacién de la mnejoria en la seguridad, ‘Muchas otras aplicaciones en la industria han mostrado que las técnicas conductuales ‘pueden mejorar la ceguridad on el trabajo. Las intervenciones han ompleado rotroalimenta cién hacia los trabajadores, inductores y referzamlento para las conductas que promueven, Ja seguridad, y modelamiento de pricticas de trabajo seguras. Estas intervenciones han promovido pricticas de los empleados para evitar el dafo y han disminuide de manera efectiva los riesgos conducentes a accidentes, y Ia exposiciéna sustancias téxicas potencial- mente cancerfgenas (Alavosius y Sulzet-Azaroff, 1986; Hopkins y colaboradores, 1986; Sulzer-Azaroff y de Santamaria, 1980), PATERNIDAD E INTERACCION PADRE-HYJO SELES ESSE SESSE EEE ELS Las técnicas conductusles se han aplicado a un rango muy amplio de areas relacionadas con Ja patemidad y la crianza de nifios. La amplitud de aplicaciones es comprensible, ya que cl curso del desarrollo normal existen muchas conductas que necesitan realizarse para el funcionamicnto del nifio en Ia vida diaria. Las téenicas conductuales pueden ayudar a nogociar muchos de los retos de Ia eriariza de nifios. Ademis, a menudo la paternidad dicfunctonalo decadaptada surge como reflejo del maltrato fisicoy del deseuide de los nifios, aqui también se han aplicado las téenieas conductusles. El rango de splicaciones de Ia2 enieas conductuales a Ia paternidad y a Ia interaccién padre-hijo se ilustra con ejemplos de-unas cuantas de las muchas areas de investigaciin, Cierio nieero de padres con discapacidades y retraso tienen nifios y a menudo se ‘encuentran inadecuadamente equipados par cuidar de ellos. Elentrenamiento de habilida- des es de summa importancia debido a que el culdado inadecuado de infantes obviamente 9,000 4.500 8 u a2 83 2.000 Hd 28 4.500 600,000 200,000 600,000 Cote surtades en dlrs 300,000 1970 LUnea base) \ 2 3970 Aplicaciones actuales de las téenicas conductuates WI 369 ‘Economia de fchas ‘Shitey Basin Navajo 1975 4980 1995 foe Economia de fichas Shirley Basin Navelo Ligeti 1975 1200 198s, foo Figura 12a. numero anual de dios perdidos de trabajo, por miles de horas-hombre trabajadas, debido ‘relacionados con el trabajo (a ‘subetion y costo anual, ajustado por horas trabajadas © Inflaion, como resultado de aceldences y dafios (figura inferioN FUENTE: Fox, DK, Hopkins, BL y Anger, W. (1987),

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