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Bauman: algunos debates en torno a la modernidad

Article · January 2007

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Luz MARÍA Salazar Cruz


El Colegio Mexiquense
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Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 1

Bauman: algunos debates en torno a la


modernidad

Luz María Salazar*

130

2007

La colección Documentos de Investigación difunde los avances de trabajo realizados por investigadores de El Colegio
Mexiquense, A.C., con la idea de que los autores reciban comentarios antes de la publicación definitiva de sus textos. Se
agradecerá que los comentarios se hagan llegar directamente al (los) autor(es). Los editores han mantenido fielmente el
texto original del presente documento, por lo que tanto el contenido como el estilo y la redacción son responsabilidad
exclusiva del(de los) autor(es). D.R. © El Colegio Mexiquense, A.C., Ex hacienda Santa Cruz de los Patos, Zinacantepec,
México. Teléfonos: (722) 279-99-08, 218-01-00 y 218-00-56; fax: ext. 200; E-mail: ui@cmq.edu.mx Correspondencia: Apartado
postal 48-D, Toluca 50120, México.

*E-mail: dgutierrez@cmq.edu.mx
Luz María Salazar 2

Resumen:
El interés del trabajo reside en analizar cómo se movilizan algunos
conceptos y debates centrales en lo que se ha constituido
acumulativamente la propuesta de Zygmunt Bauman. La discusión
sobre una nueva modernidad, la modernidad líquida opuesta a lo só-
lido, lo definido, cargado de racionalidad, orden y certezas, se erige
en los escenarios desencantados y derivados de las nuevas formas
de la economía, el trabajo, los presupuestos de la morfología social,
el conocimiento y la tecnología de la comunicación.

Palabras Clave: modernidad, orden, caos, modernidad líquida, ra-


cionalidad, ambivalencia, tiempo/clase, tiempo/espacio.
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 3

INTRODUCCIÓN Orden vs caos

El punto de partida de este debate está en que


La obra de Bauman analiza diferentes problemas la modernidad se ha propuesto a sí misma el
y acontecimientos de la historia reciente y de la orden, la realidad clasificada, sucesiva y conti-
vida contemporánea. Se desarrolla en temas tan nua. El orden es el arquetipo que subyace a todo
variados como: la política, la ciudad, la sociedad escenario, a partir del cual toda realidad, mor-
de consumo, la configuración de las relaciones fología social y conocimiento, se estructuran como
cercanas e íntimas como el amor, la solidaridad, sus metáforas más elaboradas, mas sostenidas, en
y la amistad, que estructuran la cotidianidad del permanente tensión contra sus íntimos conteni-
sujeto en el escenario de la modernidad líquida dos que mostrarían su variabilidad incesante y su
y en la fase de la globalización. En este texto, riesgo. La búsqueda del orden es una empresa
pretendemos analizar en el planteamiento del de riesgo porque el supuesto de las “entidades
autor cómo se movilizan algunos conceptos y independientes, autónomas y diferenciadas”,
polémicas centrales del pasaje de la modernidad ordenables, encuentra sus límites en los enlaces
sólida regida por la racionalidad, a la moderni- auto-contenidos de su propia existencia y repro-
dad líquida regida por la ambivalencia. ducción. Es decir que la pretensión de conocer
Bauman analiza la aparición de nuevas con- el orden interno de las entidades autónomas lleva
diciones en la sociedad actual que lo llevan a necesariamente a reconocer que el límite de
proponer analíticamente un cambio o transforma- acción de estas, es una cohorte establecido
ción en el contenido de la modernidad, propues- heurísticamente en función del conocimiento
ta en la que subyacen algunos debates que atra- científico en la versión de la explicación. En
viesan su obra y que nos parece relevante
comentar. Abordamos tres debates: orden vs caos,
modernidad sólida vs modernidad líquida, y Espa- posmodernidad, analiza los diversos escenarios que le dan for-
cio/clase vs tiempo/espacio, con el fin de situar ma finalmente a un nuevo modelo y caracteriza porqué las ex-
las principales transformaciones de la nueva mo- presiones de la realidad líquida se vuelven hegemónicas en el
proyecto de la modernidad contemporánea. Por su puesto que
dernidad en dos ámbitos: el sistema y el sujeto1. el desarrollo de su propuesta reclama las múltiples referencias
al debate modernidad/posmodernidad en las Sociología y las
ciencias sociales, y a otros aportes que no pertenecen al mismo
–como las deudas con los aportes de la teoría antropológica y
1
Bauman desarrolla su propuesta sobre las características que de la etnografía, por ejemplo a los de Geertz (1994)– que se
definen las relaciones sociales y la estructura social, económica inscriben en el análisis de la producción de sistemas culturales,
y política en la modernidad líquida y en la globalización. Hace en la documentación de sociedades tradicionales, y en el forta-
referencia aldebate teórico contemporáneo modernidad/ lecimiento del conocimiento local.
Luz María Salazar 4

función de esto todo orden es parcial y está - aquel que establece en el cálculo racional –
enlazado con otras entidades de funcionamien- costo/beneficio– un a priori necesario para
to diverso y dinámico que en conjunción la existencia, reproducción e incremento,
estructuran una complejidad que no se puede como un argumento de la economía social
observar solamente en acciones reducidas de en el cual todo consumo trasciende al indi-
orden. A partir de esta advertencia Bauman ana- viduo y enlaza el gasto social en la perspec-
liza el proyecto de sociedad garantizado por tiva de un orden y una estética societal.
presupuestos rígidos y coactivos, hacia el trán- - Supone un diseño racional en cada uno de los
sito a una sociedad con una lógica de acción elementos que se debe manifestar en estruc-
inesperada, imprevisible e inevitable. tura, forma, funcionamiento e interacción, es
decir en un sistema. Lo cual confirma por
Un mundo ordenado es: exclusión que el orden no es el caos.
- aquel que se puede intuir en una lógica de
funcionamiento regular; Un mundo del caos se representa en:
- aquel en el que se pueden calcular las pro- - aquel que da cabida a la heterogeneidad simul-
babilidades de un acontecer buscando afian- tánea, que valida en los particularismos la mul-
zar todo margen predictivo de su plausibili- tiplicidad del desarrollo diverso; la realidad se
dad. Es decir, que mediante la vinculación de lee entonces como el acontecer descontrolado,
ciertas condiciones y efectividad de ciertas imprevisto y desregulado, no armónico, no su-
acciones en el pasado se estructurarían las jeto a un modelo y un ciclo rector –orden–. Apa-
guías conocidas y certeras de logros inme- rece entonces lo casuístico como un escenario
diatos y derivados, para diseñar y controlar de ocurrencia significativo;
el futuro, tanto como para prever los acon- - recuperar el arquetipo del ‘extraño’ para re-
tecimientos y comportamientos; solver la lectura social y económica de ‘lo otro’,
- aquel en el que se busca fluir con ciertas del tercer elemento o de otros elementos que
garantías o seguridades reduciendo la intervienen en la morfología de la realidad so-
ambivalencia a cero, en tanto que asume el cial por fuera de las oposiciones duras –afir-
problema del descubrimiento, del conocimien- mativo/negativo, aceptado/excluido, interior/
to, de la aplicación de tecnología, de la ra- exterior, moderno/caduco, tipo/desclasado-.
cionalidad, y, del control de la intervención Este ‘extraño’ no sustituye ninguno de los com-
aleatoria de alteraciones posibles, en un mar- ponentes duales de la oposición binaria, ni a
gen de accidentalidad previamente tolerado; ésta misma, no la niega ni la afirma. La
- supone clasificación, segregación, delimita- descentra como único criterio de composición
ción, entidades autónomas y diferenciadas y dirección del movimiento de lo social. Lo
actuando solas y al mismo tiempo con capa- otro, con capacidad de expansión y con ten-
cidad de interactuar con otras similares o com- dencia a tener espacios hegemónicos, pue-
plementarias; es decir supone partes especia- de ser múltiple, no único, puede ser espon-
lizadas de una unidad mayor –clase– a la cual táneo no necesariamente permanente, puede
se subordina su definición típica y constante; ser contingente, heurístico y no predetermi-
- aquel en el que el orden es principio y es- nar el siguiente escenario real, ahí está su
trategia para vencer la incertidumbre y la am- poder de generar una condición de caos.
bigüedad. Orden clasificatorio posible por la - los criterios de verdad y falsedad son despla-
nominación lingüística que estructura el prin- zados por los de realidad diversa;
cipio de la supervivencia humana en el re- - prima el criterio de improvisación ligado a la
gistro de la memoria, el aprendizaje y la re- creatividad instantánea para regir la solución
producción social, a partir del complejo de las demandas sociales que por su produc-
naturaleza/cultura; ción y presión incesante pareciera que
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 5

preestableciera y colocara en primer plano de las nuevas formas de organización de las institu-
acción el sentido contingente. Surge la inde- ciones reguladoras de toda inserción individual.
terminación como presión intelectual porque
no hay ruta conocida en el presupuesto de la La modernidad sólida está representada en su-
acción y se derivan entonces en los problemas puestos de:
hermenéuticos que quedan contingentemente - Seguridad coactiva que deviene de los ob-
instalados en el plano de la comunicación con- jetivos de verdad, justicia, y homogeneidad
vencional, de la disposición inicial, o en el mejor como derivados del acto reflexivo que uni-
caso, de lo pendiente, de lo siguiente. Esta in- versaliza las garantías;
determinación aplaza pero no disipa y menos - La consolidación del Estado nación para ins-
resuelve, un nivel de conflicto o de fricción taurar los principios sociales universales que
generada en formas sedimentadas en la derivan de el sistema de derechos, la con-
arquetípica del sistema social, que disponía dición de ciudadanos, regulación socio ju-
el flujo de las relaciones. rídica en la morfología del parentesco y la
reproducción social;
- las relaciones de certidumbre dadas a través
Modernidad sólida vs modernidad líquida de los hilos conductores del trabajo, el co-
nocimiento experto, el conocimiento cientí-
El tránsito de la modernidad sólida a la moder- fico, el progreso, y la técnica como directri-
nidad líquida se observa como un movimien- ces del progreso y cambio social;
to crítico que conlleva transformaciones en el - la referencia de la estabilidad social cerca-
nivel del sujeto y del sistema social. Las trans- na, desarrollada en los diferentes niveles del
formaciones mas significativas de este pasaje sistema de estratificación y que a su vez se
se dan en las dimensiones de: las nuevas me- consolida en los subsistemas de confianza,
didas de tiempo/espacio, las nuevas relacio- solidaridad, amistad;
nes en producción/capital/trabajo, las nuevas - identidad colectiva a partir de la pertenencia
configuraciones del conflicto-socia/pacto-po- a la condición preestablecida de la ‘la clase’, ‘el
lítico, el nuevo significado del consumo/nece- sector’, ‘el grupo’, la nación, que involucra una
sidad/deseo-anhelo, los contenidos que caracterización casi holista de las similitudes;
redefinen a la comunidad/colectivos/individuo. - acción política que aborda desde la modali-
Los marcos de referencia cargados de seguri- dad de participación representativa la defini-
dad, confianza, previsibilidad, duración, se van ción del conflicto social hasta la negociación
debilitando progresivamente en su contenido de los pactos y su alcance.
conceptual y operativo, dando paso a escena-
rios que comprometen las experiencias íntimas La modernidad líquida esta representada en:
del sujeto y los compromisos institucionales del - la ambivalencia que experimentamos como un
sistema, en realidades transitorias. desorden en función de la incertidumbre
Observa la sociedad contemporánea permanente, del sentimiento de inseguridad
globalizada a través de una realidad que se im- y confusión, en la toma de decisión a partir
pone con la lógica de la ‘ambivalencia’ para ex- de la improvisación que presiona sobre la
plicar e interpretar las dinámicas actuales en dos exaltación de los impulsos contradictorios,
temporalidades: la modernidad del siglo XX y la incesantes e inestables;
modernidad en la fase actual de globalización. La - la contingencia que se manifiesta en el obrar
hegemonía de las dinámicas derivadas de la desde la libertad, diversidad, y diferencia,
globalización, es lo que ha hecho desbordarse la y que hace de la experiencia parcial que
ambivalencia como modo de acción que subyace constituye cada momento, segmentos
a las interacciones sociales, y que se refleja en discontinuos, atomizados y/o no estructurados,
Luz María Salazar 6

no integrados, entre el flujo de la realidad complementariamente en otro ámbito econó-


individual y societal. mico distinto al solamente productivo, el fi-
- Inseguridad y dificultad de decidirse. No es nanciero, y la capacidad de movilización cua-
sólo la incapacidad de decidirse, sino el cómo si-inmediata y atemporal de los capitales –vía
decidirse, el qué decidir, cual decisión otor- los nuevos medios de sistemas de transferen-
ga mayor seguridad de elección acertada frente cia–, hace que el conflicto político gire hacia
a: la necesidad, el deseo, la economía social un conflicto económico y se resuelva cada vez
que conlleva todo consumo inmediato y me- mas al margen de la intervención política de
diato, y los encadenamientos de mediano y los Estados, y de los colectivos sociales de los
largo plazo ante una elección que represen- trabajadores. Bauman plantea el debilitamiento
te compromisos en tiempo y recursos; de los gobiernos nacionales en su capacidad
- La configuración de nuevas clasificaciones de intervención y decisión en la relación capital
organización y pertenencia a la estructura y trabajo, como efectos inhabilitantes de la
estratificación social. Lo cual presume que ha globalización por un debilitamiento político del
cambiado las formas en que se construía la Estado hasta su reducción cuasi-total. La pér-
identidad y la solidaridad social y que pro- dida de los espacios logrados residen en el
duce la adscripción fragmentada del indivi- fracaso de las políticas sociales para solventar
duo en ciertos ámbitos de acción no nece- los requerimientos de inversión paralela que
sariamente conectados entre sí. necesitaba la inversión productiva y la no crea-
- Son significativamente las instancias colecti- ción de nuevos espacios. Uno de los monopo-
vas de la seguridad sólida las que han sido lios que mantiene el Estado es la parcial regu-
transformadas y trastocadas: un caso son las lación jurídica de los mercados, pero en tanto
formas de organización laboral bajo modali- las imposiciones de estos diluyan las regula-
dades de privatización y desregulación de la ciones, la pérdida de esta función los debilita-
relación ocupacional y contractual, que ría aún mas y lo que queda es un incremento
desvincula diferencialmente a los agentes de regulación autónoma de la acumulación del
económicos de los procesos de producción y capital (Bauman, 1998ª). Las políticas de
circulación de capitales. Lo cual ha debilita- flexibilización y desregulación orientan las
do las seguridades del trabajador en las for- reformas en el sistema laboral en cuanto a su
mas de inserción, participación, duración y rigidez jurídica y económica. La flexibilidad se
desvinculación del sector, y en consecuencia impone como criterio universal de racionali-
en su propia historia laboral. Un efecto de la dad económica y se aplica a las dinámicas de
privatización se refleja en que la búsqueda de oferta y demanda. Esto requiere una nueva
progreso ya no es una empresa colectiva sino legislación que libere los criterios de protec-
individual, y las elecciones de cada uno es- ción, estabilidad y salario, eliminando las
tán en función de su propio diseño de perfil ‘distorsiones’ que son representadas por las
laboral, social y político que será ofertado a tendencias políticas de la resistencia obrera ante
la estructura del mercado, pero tal no recae la pérdida o disminución de derechos adquiri-
en una responsabilidad o una formación, de dos; y, que libere también los obstáculos a la
la sociedad o los colectivos económicos. El ‘competitividad pura’ (Bauman, 1998ª).
pacto económico social entre capital y traba- - En el ámbito del mercado, la sociedad es un
jo que pasaba por la intervención reguladora conjunto de individuos consumidores, que
del Estado, se debilita, y se desarticula como orientan su consumo por el deseo y anhelo
instancia subsidiaria de la producción social. más que por la satisfacción imponderable de
- En el escenario de la globalización, el con- las necesidades. Orientarse por el acto com-
flicto central entre capital y trabajo se trans- pulsivo del consumo se explica como una
forma. El hecho de que el capital se produce adicción –defensa– contra sentimientos de
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 7

angustia e inseguridad que el individuo solo cir la independencia de las elites globales con
puede compensar mediante la posesión de respecto a las unidades territoriales en donde se
bienes que transfieren imágenes de perte- asientan temporalmente sus unidades económi-
nencia simultánea y ambivalente a una con- cas –de producción, financiera, y de mercados-
temporaneidad global y local. . Lo cual tiene varios efectos significativos en las
- los presupuestos de la organización familiar, dinámicas prácticas del sistema: la des-
las relaciones cercanas y micro se transforman territorialización de los capitales, bienes y pro-
de ser seguras, estables y duraderas en fun- cesos laborales. Bauman (1998a:31). La movili-
ción de compromisos y representaciones a dad adquirida por los inversionistas como dueños
mediano y largo plazo, a ser vínculos vulne- de capital, los desconecta en un altísimo grado
rables y transitorios e inestables en función de las obligaciones y relaciones directas que tra-
del incremento o fortalecimiento de la indi- dicionalmente los comprometían con los capita-
viduación. Los sentimientos, la composición les productivos y los trabajadores. La extraterri-
de los vínculos afectivos, y la constitución torialidad social ubica a las nuevas elites en
emocional del sujeto están permeados por la supra-locales, y supranacionales, políticamente
lógica del mercado y del consumo, la razón inaccesibles y en consecuencia desarticuladas de
instrumental, la historia de las relaciones so- todo canal de relaciones y negociaciones direc-
ciales familiares patológicas que vulneran tas con otros grupos diferente a sus socios finan-
diferentes ámbitos del sujeto, la tecnología en cieros, por lo que la cada vez mayor separación
los vínculos amorosos, y el condicionamiento entre la ‘cima’ y la población ‘base’, fortalece una
inestable bajo relaciones de desigualdad. de las ventajas mas codiciada y apreciada del ca-
(Bauman 2005b) pital flotante: la desarticulación de las responsa-
bilidades y costes laborales, su traslado a la res-
ponsabilidad individual, y la desvinculación del
ESPACIO/CLASE VS TIEMPO/ESPACIO Estado como entidad de intermediación y reso-
lución de los conflictos políticos con el capital.
El debate de espacio/clase y espacio/tiempo En este sentido las nuevas elites se autonomizan
como directrices de organización social se de- de los compromisos sociales del crecimiento del
sarrolla en el marco de la modernidad líquida y capital. (Bauman, 1998a, 1998b)
de globalización. Las categorías de ‘tiempo’ ‘es- El incremento de la separación entre las elites
pacio’ vinculadas a la ‘clase social’ en las diná- globales y las localidades revierte en una pér-
micas económicas contemporáneas plantean una dida de poder y de capacidad política de las
lógica dual en la adscripción de los grupos so- últimas. Invisibiliza y desestructura las manifes-
ciales: aquellos que pueden movilizarse, taciones directas de conflictos sociales existen-
autonomizarse, reconfigurarse, y que conforman tes y latentes, y los desplaza a expresiones y
los grupos supranacionales, y, aquellos que per- dimensiones globales, mundiales, sistémicas,
manecen inmovilizados, atados al territorio en la (Bauman, 1998a:31). Esta parte del debate es-
dimensión local de la clase y la identidad. pacio/clase es reiterado en Bauman, y lo articu-
El cambio en las concepciones de tiempo/ la a varios tipos de problemas como las nuevas
espacio tiene impacto en la estructuración de las políticas de los procesos de trabajo (1998a,
sociedades y comunidades territoriales/locales, 1998b), la disposiciones espaciales urbanas en
y globales, lo cual redunda en la relación y ten- la ciudad capitalista desde principios del siglo XX
sión de la estructura de clases sociales. En fun- (2005), la libertad y velocidad de los movimientos
ción de que la propiedad es un elemento cons- –tecnología de las comunicaciones- (1998ª, ), el
titutivo de la clase, uno de los efectos que impacta diseño social de aislamiento del individuo (2005a,
la estructura de clase es la nueva versión de la 2005b 2002), la heterogeneidad y desigualdad
‘propiedad absentista’ (Bauman, 1998a), es de- entre poblaciones y regiones (1998a), el desmonte
Luz María Salazar 8

creciente de los sistemas de protección y segu- gistro empírico de las similitudes. Por el contra-
ridad social (Bauman:1998a), que finalmente son rio en la sociedad global el sujeto se estructura
‘factores vinculantes’ al intento de sistematización a partir de la alta velocidad de las comunicacio-
de las ‘consecuencias humanas’ a partir de la nes, de los lazos flexibles y efímeros vinculados
globalización progresiva. a la dinámica de la corta duración –las redes tienen
La parte de este debate que corresponde a una duración variable por lo que las relaciones
la unidad ‘espacio/tiempo’se vincula a otros efec- están sujetas a la desarticulación de las mismas,
tos de la modernidad líquida y la globalización y al contenido atemporal del espacio/tiempo-,
como procesos paralelos que generan usos y del cambio incesante en la sociedad global.
prácticas homogeneizantes y al mismo tiempo (Bauman 1999:25; Castels 2000)
polarizan las diferencias, y cuyos cambios se 3. en las dinámicas globales, los individuos
derivan de la tecnología de la computación, la son sometidos a formas de vida aisladas, a con-
información y de la comunicación (Bauman 2002, diciones de extrañamiento forzado, y el aislamien-
2005ª, 1998b). Se aborda necesariamente el vín- to se erige como un ideal emocional de autono-
culo de la ‘red’ en dos perspectivas: la ‘red’ so- mía, autosuficiencia, a partir del cual cada uno
cial, a partir del desarrollo de la informática que cubre y abastece la totalidad de sus requerimien-
define nuevas lógicas y funciones en las relacio- tos. La crítica de Bauman observa que dicho ais-
nes sociales; y la red supra-espacial que redefine lamiento no fortalece la individualidad en dos
las relaciones de poder, las relaciones sociales sentidos: i. en que hay un debilitamiento
de producción y circulación. Todas logradas a sistémico del sujeto y este queda a merced de
partir de la transformación y reorganización de los criterios institucionales que le determinan –
los enlaces de la comunicación. debilitando- los cambios en los accesos a los
En el debate espacio/clase - tiempo/espa- recursos –siendo este acceso, lo que lo mantie-
cio, uno de los ámbitos donde se observa el efec- ne vinculado socialmente-; y ii. en que hay una
to de transformación es en la constitución del pérdida de los soportes colectivos, y de los co-
sujeto. Son las diferencias entre el sujeto dado munitarios tradicionales. (Bauman, 2005a, 1998ª);
en la condición local y aquel que se estructura 4. la relación-capital trabajo estaba parcial-
a partir de las dinámicas globales, las que dan mente regulada por los pactos con el Estado,
cuenta de las diferencias: parcialmente por los pactos necesarios entre
1. Hay una diferencia de espacialidad. Lo organismos sindicales y empresas, y, parcialmente
local tiene una territorialidad definida y exclu- por la relación entre trabajadores, Estado y ca-
yente, en la cual el individuo es una realidad pitales nacionales. Todo lo cual daba un marco
singular; lo global presume un espacio ilimita- de protección, regulación, defensa y estabilidad
do, inclusivo y expansivo, en la cual el sujeto de los procesos económico-laborales. Para el
es una realidad muestral; trabajador el tiempo/espacio significaba horario,
2. Lo local tiene historia que constituye una lugar de trabajo y salario. El tiempo/espacio era
‘antigüedad’, un refinamiento de la partencia una unidad ‘rutinizada’, localizada, productiva en
histórica. El sujeto en la comunidad local se cons- la fábrica que otorgaba seguridad, concreción,
truye y produce en las dinámicas de cohesión y visibilidad, asociación. En las dinámicas de
de integración social. La cohesión social en cual- globalización el tiempo/espacio se torna invisi-
quier escala es una función del consenso, de los ble, sin medida de horario para la constatación
conocimientos comunes, de aquellos que se del trabajo, porque la relación capital trabajo es
aprehenden en la enseñanza temprana y estric- extraterritorial, individualizada, invisible e inse-
ta, y que se registran en reiteración de los valo- gura;
res y las prácticas culturales. Aquí, la relación 5. Los costes de transmisión de la informa-
íntima está asociada a la cercanía y coinciden- ción en escala global y local es un hecho de
cia espaciales, a la cuasi-simultaneidad del re- importancia cultural y económica. En las socie-
dades que cuentan con hardware y software la
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 9

velocidad y la incesante producción de la infor- una relación con: tiempo, información, velocidad
mación generan un agotamiento inmediato a la de su acción y coste de su uso. (Bauman
producción de la información. Cada noticia y cada 1998a:26). En las dinámicas globales el espacio
hecho se agota de manera inmediata en su pro- proyectado por los factores técnicos es: creado
ducción, y es sustituido por otro que se agota en por la ingeniería de los fluidos, fabricado en
la misma medida. Ahí esta la producción y el función de las necesidades de comunicación,
agotamiento incesante. Lo ‘barato’ está en el hecho racionalizado para individualizar los colectivos
de que la alta velocidad constante impide al ampliados –globales- en lugar de permanecer un
sujeto detenerse y profundizar, constituirse so- espacio comunal, resistente, sólido, permanen-
cialmente en el acontecer histórico, como cono- te y no negociable;
cedor y productor autónomo de un criterio so- 8. Sobre el espacio progresista2, en tanto
bre lo dado. La información anuncia y el sujeto artificial territorial/urbanístico/arquitectónico, el
enuncia (no analiza, no profundiza, no constru- surgimiento de la red global de información ha
ye, todo está produciéndose incesantemente bajo impuesto un tercer espacio cibernético al mun-
el límite de lo inabarcable). A diferencia del sujeto do humano. Según Paul Virilio los elementos del
en el interior de las comunidades locales, que espacio cibernético “no están provistos de dimen-
se reitera y refuerza en el proceso de memori- siones espaciales sino inscritos en la temporali-
zación y atención selectiva, que recibe la infor- dad singular de una difusión instantánea. En lo
mación en una perspectiva de la relación consi- sucesivo, no se puede separar a las personas por
go mismo, no exterior a su realidad y a su medio de obstáculos físicos o distancias tempo-
responsabilidad. Este sujeto no desconoce la di- rales. Con la interfaz de las terminales de los
mensión global pero la percibe en el sentido ordenadores y los monitores de video, las dis-
relacional y no atomizado de las partes; tinciones entre aquí y allá pierden todo signifi-
6. Retoma Timothy W. Luke, para referir que cado” (en Bauman, 1998a 27).
a diferencia de las sociedades tradicionales, en Hasta aquí hemos presentado tres debates
las globales, las relaciones se organizan en tor- que sobre la modernidad se movilizan en la mayor
no de las aptitudes generalmente no mediatizadas parte de los textos de Bauman enfatizando en
de los cuerpos humanos: las concepciones tra- los cambios que a nivel de la racionalidad im-
dicionales de la acción suelen ocurrir a través de peran en el pasaje de la modernidad sólida a la
la tecnología. Mientras que las metáforas orgá- modernidad líquida en cuanto a los supuestos en
nicas para expresarse siguen siendo el medio de el conocimiento, las relaciones sociales, y los
las sociedades tradicionales: el enfrentamiento efectos en la economía y la política a partir de
era cara a cara, el combate cuerpo a cuerpo, la la globalización. Pareciera atípico en la obra de
justicia de ojo por ojo y diente por diente; el Bauman un extenso desarrollo como el del Ho-
encuentro entre corazones y la solidaridad tien- locausto. Veamos brevemente cómo relaciona
de a indicar la asociación; los cambios son pro- este hecho en su análisis sobre la modernidad.
gresivos y lentos. (Bauman, 1998a:26);
7. Esta situación cambia con el progreso de
los medios que permiten extender el conflicto,
la solidaridad, el combate y la administración de
justicia, lejos del alcance de la relación directa,
micro, ‘cara a cara’. El espacio “procesó/centró/
organizó/normalizó” y sobretodo se emancipó de
las restricciones naturales del cuerpo humano. A
partir de entonces el espacio es organizado por
la capacidad de los factores técnicos y tecnoló-
gicos. El espacio, la espacialidad se convierte en
Luz María Salazar 10

porque los argumentos históricos, políticos y


MODERNIDAD Y HOLOCAUSTO militares no terminan por explicar o por com-
prender sociológicamente la ocurrencia y la in-
Las preguntas que pueden estar detrás del aná- tensidad del mismo en una etapa en que la
lisis del holocausto en Bauman pueden ser mu- modernidad esgrimiría un humanismo que impe-
chas y variadas. El desarrollo del texto respon- diría dicha conflagración contra sí misma. La
dería a diferentes tipos de preguntas en la sistematicidad sin precedentes del holocausto, su
Sociología y las Ciencias Sociales, tales como: ¿El expansión supranacional y supra-territorial, la
domino de principios nomológicos en una racio- combinación de otros causales al margen del
nalidad “jardinera, cultivadora y quirúrgica”3, ac- problema judío –antisemitismo-, pero que inter-
tuaron como ‘razón instrumental’4 para justificar vinieron y se instalaron confusamente en la con-
política, económica y étnicamente el holocaus- frontación, justifican como parcialmente inexpli-
to? Luego podrían venir cuestiones y preguntas cado e interpretado este hecho en la tendencia
que relacionen empíricamente las dinámicas in- histórica de la modernidad. En consecuencia, los
ternas de los diferentes niveles en que estuvie- tensores de un conflicto histórico no resuelto que
ron involucrados los sujetos en el holocausto, tenían una composición relativamente local,
como por ejemplo: las tensiones político-econó- desbordaron dichos márgenes y, enlazaron otros
micas que se debatían en la antesala de las pre- niveles de confrontaciones no resueltas con otros
ocupaciones sobre la responsabilidad de los actores, comprometiendo y complejizando la
ejecutores; los actos vinculados a las situaciones dimensión e intención genocida, por supuesto
de presión de la autoridad nazi, y, los perpetra- inaceptable.
dos también en las situaciones extremas en las Bauman relaciona cómo el holocausto es
que se juega la supervivencia de cada uno frente uno de los hechos que ha merecido el análisis y
al genocidio; los niveles de responsabilidad moral la documentación de las Ciencias Sociales y en
que no se subsumen a la explicación de la or- particular de la Sociología, desarrollando diferentes
den militar; ¿Cuál es el perfil humano y psicoa- hipótesis:
nalítico de los sujetos que dirigieron y realiza- - La conjunción de algunas realidades en
ron los hechos?; ¿Quienes son aquellos que conflicto y/o competencia en la sociedad alemana
observando, permitieron y/o se detuvieron ante
la múltiple reiteración del totalitarismo nazi? o
¿Cómo considerar la participación de las víctimas?,
entre muchas otras interrogaciones. La preocu-
pación de realizar otro análisis como dice Bauman
sirva de plataforma para ‘volverle a hacer que
tenga sentido’ y encontrar su vinculación con el
proyecto de la modernidad, quizá llevó a
replantearse el holocausto en la conjunción de
dos dinámicas coincidentes pero no iguales: el
genocidio y la guerra.
Las respuestas sobre la racionalidad del
holocausto en Bauman le resultan insuficientes
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 11

como el etnocentrismo étnico y religioso; la re- cer y ‘volver a poner en orden’ el ámbito de que
sistencia cultural manifiesta en insuficientes gra- se trate. Es decir que el problema de la
dos de aculturación y asimilación de la sociedad aculturación es un problema de competencia
migrante judía; la propiedad, el poder, la con- política que involucra la dominación en la dife-
centración económica en los judíos, y la creciente rencia cultural6. El problema de la aculturación
participación de los mismos en los espacios eco- se debate en el contexto del proyecto moderno
nómicos; las formas de ascenso social; las pro- de homogeneizar, integrar7, asimilar8, incorporar
fesiones y saberes; en conjunto fueron factores a la Sociedad y al Estado nación9 las ‘minorías
centrales en la movilización del antisemitismo étnicas’10, las colonias, y las ‘poblaciones de te-
judío, al mismo tiempo que criterios ad hoc para rritorios incorporados’. Estas razones son
presionar por una sociedad moderna, organiza- ilustrativas para sugerir que, esgrimir el proble-
da racionalmente, controlable, y homogénea, todo ma de ‘los niveles de aculturación’ es reafirmar
lo cual tensó el problema civilizatorio y respal- otro argumento explicativo del holocausto en el
dó las actividades de la ingeniería social5. proyecto moderno.
- El problema de los niveles de aculturación - El racismo como expresión que viabilizó
merece una revisión. Desde la perspectiva de los antagonismos y se colectivizó en una ideo-
Bauman hay que diferenciar entre la logía de discriminación y rechazo11, se combinó
prefiguración histórica de un cuasi-arquetipo judío con la intolerancia que acumulaba el antisemi-
que registra otras persecuciones y masacres en tismo hasta indiferenciarse, y fue uno de los cri-
su historia, y, el pueblo judío de la sociedad ale- terios ideológicos que contribuyó a encaminar las
mana y europea en la inmediatez del holocaus- prácticas de genocidio y eugenesia,
to. A partir del registro de la cotidianidad se rastrea instrumentalizadas en el conocimiento científico
el proceso de relación que implica parentescos, y la ingeniería social. El cuestionamiento a esta
negocios, educación, diferentes tipos de socia- causal explicativa radica en que no puede con-
lizaciones e integraciones parciales pero perma- siderarse como única condición ó condición su-
nentes, que en el tema de la integración, mues- ficiente en tanto que el racismo en sentido uni-
tran cómo hay áreas de la vida social que fluyen versal contendría una acción excluyente hacia
convencionalmente y que configuran una mor- todo lo ‘no ario’, y el ‘antisemitismo’ por sí mis-
fología social. Pero cuando el sistema dominan- mo no supondría inevitablemente el holocausto
te extrema su sistema coactivo para forzar y/o y menos la guerra involucrando otros actores. El
detener el avance de los elementos diferentes debate con Otros autores12 sugiere que debían
–culturas, sujetos, subsistemas-, es decir cuando coexistir necesariamente diferentes factores his-
se ve amenazado en su capacidad hegemónica, tóricos y contingentes, internos y tangenciales,
entonces se esgrime el problema de la tanto como externos, que intervinieron
aculturación como ‘causal suficiente’ para ejer-
Luz María Salazar 12

diferencialmente en la corresponsabilidad del donde esta variables cobran un perfil social. Por
hecho. otra parte y a propósito de esta condición
- Las expresiones de ‘conflicto, perjuicio o multirrelacional, el holocausto no puede ser ana-
agresión’ son fenómenos sociales habituales para lizado en su alcance real solo desde la Sociolo-
dar curso a las contradicciones, por lo que el gía o la Historia, sin la concurrencia de la otras
holocausto se incorpora en esta tendencia expli- disciplinas.
cativa como un acontecimiento extremo. Bauman Bauman discute aquí el aporte que el aná-
cuestiona críticamente que de esta interpretación lisis del ‘holocausto’ puede hacer a una
se puede derivar la oscura lectura de una con- reinterpretación del proyecto de la modernidad,
dición humana ‘natural, primitiva, solucionada y no acepta el sobreentendido que la moderni-
cuasi culturalmente, cuya tendencia deviene dad ya interpretó el holocausto como un
primariamente inmanente’. La crítica a este ar- epifenómeno suyo o de las dinámicas históricas
gumento es una oposición a una determinación que se reinstalan en la modernidad. Creo que
biologicista, o en su defecto algo mas cuestio- cambia la pregunta a posicionar el holocausto en
nable: una especie de atavismo debido a la per- uno de los arquetipos etnocéntricos, político e
manencia del conflicto/destrucción en el com- ideológico del proyecto moderno. En virtud de
portamiento humano (Bauman ,1997:2). esto reclama a la Sociología una explicación que
- Una de las hipótesis que interesa a no se argumente en versiones teleológicas. De
Bauman de Everett Hughes explica el holocausto hecho no se puede aceptar que el holocausto es
desde dinámicas de dominación –el gobierno el resultado, en un momento dado de un funcio-
nacional socialista de Alemania-; desde dinámi- namiento defectuoso de los mecanismos de coac-
cas de corresponsabilidad –quién lo perpetra, ción a los factores irracionales que desbordan los
cuáles son las circunstancias, quiénes lo permi- impulsos violentos. No se puede aceptar que sea
ten, cuáles son las señales de ascenso, y quié- un fracaso del diseño socializador que desbor-
nes y cómo se mantienen distantes-; desde la dó lo límites morales en tanto que toda acción
coexistencia de factores sistémicos psico-socia- moral es social. Bauman considera que la ten-
les –que posibilitaron llevar a cabo el ‘trabajo dencia histórica y teórica no explica en sí mis-
sucio’-. Esta hipótesis supone empíricamente mos el holocausto porque lo elevaría a la con-
varios responsables, y no solamente el antisemi- dición de verdad o regularidad necesaria, lo cual
tismo en la sociedad alemana. También supone lo vuelve a dejar en una versión teleológica.
un proyecto político de dominación vinculado al Tiene que hacerse una conexión de sentido con
Estado nación en la versión del Estado moder- el borde extremo que alcanza cada proyecto social
no. para mostrar que el holocausto es uno de los
- La explicación multirrelacional del holo- rostros de la sociedad moderna.
causto –en la cual se ponderan desde variables Para Bauman la sociología ortodoxa ubica
psicológicas, ideológicas y estructurales defini- el holocausto como un fallo, no un producto de
das por las tendencias de los relatos de las víc- la modernidad, de ahí que éste hubiera signifi-
timas y sobrevivientes, las variables históricas cado dos situaciones paralelas: “la supresión de
como la preexistencia e intensidad del antisemi- los impulsos irracionales y esencialmente
tismo, los grados asimilación y aculturación, hasta antisociales, y la eliminación gradual pero impla-
las vinculaciones de las responsabilidades mo- cable de la violencia de la vida social” bajo la
rales-, evidencian un impacto humanizador y concentración de la misma por el Estado”. Es decir
racionalizador de la organización social sobre los el Estado ejerció el monopolio de la violencia
impulsos humanos individuales que rigen la con- esgrimiendo la salvaguarda de “la comunidad
ducta de cada uno (Feín citada por Bauman, nacional y las condiciones del orden social”. El
1997:5). Lo cual indicaría que el holocausto no argumento de esta acción es que el Estado con
podría realizarse por fuera de la configuración
y de la organización social dominante que es
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 13

sus instituciones “despoja de todo cálculo moral acción’ como la ‘concatenación de acciones
la utilización y despliegue de la violencia y li- secuenciales’ fueron estrategias burocrático-mi-
beran las aspiraciones de racionalidad de la in- litares necesarias, pues de lo contrario la dimen-
terferencia de las normas éticas o de las inhibi- sión de la responsabilidad genocida hubiera sido
ciones morales”. Como característica constitutiva ‘insoportable’, imposible de asumir. Característi-
de la civilización moderna dice Bauman, la ‘ra- cas que se mantienen en el funcionamiento del
cionalidad’, soslaya criterios alternativos de la ejército moderno.
acción al justificarlos, como el uso de la violen- Estas acciones indicando una organización,
cia al cálculo racional, en consecuencia se pre- distribución de responsabilidades, jerarquías, y
senta los “fenómenos del holocausto como re- racionalización de los recursos humanos milita-
sultados legítimos de la tendencia civilizadora” res, no solo des-responsabiliza directamente a los
(Bauman, 1997:36-37). actores parciales sino que legitima su indiferen-
Lo anterior no nos libera de observar pro- cia moral. Es decir, des-nucleiza la responsabili-
blemas de responsabilidad moral de los diferentes dad moral del sujeto y la convierte en someti-
actos que concatenados concretaron el holocausto miento jerárquico a la obediencia militar, volviendo
sistemáticamente. Bauman destaca dos: la diná- difuso la participación individual y directa en las
mica de ‘mediación de la acción’ que indica las acciones ‘necesarias’, sin las cuales se arriesgan
acciones parciales que realizan los diferentes o impiden los resultados estimados. Esta ‘media-
segmentos de la organización militar13, descono- ción de la acción’, aparte de indicar una estrate-
cidas entre sí, con diferentes niveles de respon- gia militar conjuga una lógica racional de ubicar
sabilidad y riesgo, aparentemente sin relación acciones y logros parciales sistémicamente.
directa, bajo órdenes jerárquicas con responsa- La deslegitmación de los problemas mora-
bles ausentes, encadenamientos desconocidos, les en escenarios de guerra y conflictos arma-
aparentes o reales, acciones parciales y sin cla- dos, es un telón confuso que se ha intentado
ras correspondencias entre la intención general argumentar a partir de varias dinámicas que se
y la acción parcial. Indica también que hay ele- desarrollan en las convivencias centrales y pa-
mentos, y sujetos, que intervienen entre “la ac- ralelas a las confrontaciones directas como: la
ción y yo” Por supuesto que como estrategia, no ‘acción medidadora’; la información segmentada;
es privativa de la organización y burocracia mi- los diversos recursos de relación social de la
litar del holocausto –sí en su dimensión y exten- supervivencia unidos a la contingencia y los
sión-, sino de la dinámica de las confrontaciones contextos singulares; la historia personal de cada
armadas con cuerpos militares estructurados, y, actor que lo puede enfrentar eventualmente con
acciones y territorios de competencia militar reflejos ineludibles en el opuesto; la saturación
definidos. El otro elemento asociado es la ‘con- de los actos de guerra; la supuesta cooperación
catenación de las acciones secuenciales’ dirigida de las víctimas, o el reconocimiento sistemático
al logro de resultados finales. La realización de de las situaciones extremas donde todos actúan
acciones parciales, experimentos, y órdenes, sobre el horizonte del exceso. Este último es el
aparecen como factores vinculantes a un objeti- momento en el cual la guerra o los conflictos
vo final, y al mismo tiempo segmentan las res- armados, o las confrontaciones, exacerban todas
ponsabilidades impidiendo al sujeto conocer los las violencias, y entonces cabe el acierto de que
objetivos y resultados últimos. Esta es otra estra- “la guerra es inimaginable”. Bauman diría meta-
tegia desarrollada en el modelo de responsabi- fóricamente que el holocausto es un sistema
lidad parcial utilizada por la burocracia moder- concatenado de acciones y actores, en el cual,
na y en particular por la burocracia y los mandos como un terreno movedizo, todo movimiento
militares, que bien puede asociarse a un siste- incrementan su poder de succión” (Bauman,
ma y modelo especializado de trabajo. En el 1997:205)
análisis de Bauman tanto la ‘mediación de la
Luz María Salazar 14

cada uno de los conflictos, actores, y momentos


LA COOPERACIÓN en que se dé.
En el caso del holocausto Bauman desarro-
El o los actos de supuesta ‘cooperación’ no pue- lla el hecho de que éste involucró varios tipos
den retrotraerse en abstracto como una acción de poblaciones con historias políticas que impli-
voluntaria o peor ubicarse en el ánimo de una caron relaciones distintas antes y durante los
acción voluntarista para validar perversamente hechos dados, lo que impide plantear una ‘co-
la acción contra sí mismo. Es un escenario es- operación’ como sistema de des-legitimación de
crupuloso para suponer una ‘cooperación’ las responsabilidades o un sistema estratégico de
valorativa, en positivo. La supuesta ‘cooperación’ salvación o de aprobación. Esta salvedad es im-
es forzada, que se obliga desde el sistema de portante en tanto que nos dificulta el asociar
coacción a que se ha sometido una sociedad, o cooperación con sospecha.
los individuos. Se puede pensar la ‘cooperación’
desde i. la victimización; ii. la evaluación racio-
nal de las pérdidas; iii. la inexperiencia o el EL PRINCIPIO DE OBEDIENCIA
desconocimiento de las implicaciones políticas
de que todas las decisiones comprometen y En el análisis de la ética de la obediencia Bauman
enlazan una forma participación en el conflicto; atribuye un papel significativo al modelo de
iv. la corrupción también es un escenario crea- autoridad desarrollado por la burocracia moder-
do mediante el deterioro de la voluntad; y, v. el na. O sea una burocracia militar especializada que
escenario mas triste sería la decisión a priori. La usurpa y desborda la burocracia civil. En esta
‘cooperación’ puede depender de los imperati- burocracia las preocupaciones morales del fun-
vos de la coacción militar; o de la hiper-espe- cionario no cuestionan los objetos de la acción,
cialización de la burocracia moderna; o del ni- ó el cuestionamiento no trasciende a cambiar la
vel de expectativas falsamente creadas frente a acción. La autoridad del sujeto -obediencia- se
los extremos, de la supervivencia de sí mismos. ejerce y el acto se valida en la responsabilidad
Estas expectativas tienen un contenido débil en impersonal, ó en otras autoridades aún mas abs-
tanto que la supervivencia depende de Otros y tractas “la ciencia” ó la “investigación” que dic-
bajo otros criterios diferentes/opuestos a los pro- tan los procedimientos. Esta obediencia es otro
pios; la supuesta cooperación también puede de los instrumentos que confunde o desdibuja la
estar relacionada con del tiempo en que una responsabilidad del ejecutor en el acto arbitra-
persona esté en procesos de debilitamiento o de rio de las agresiones.
victimización sistemática; o de la experiencia en La obediencia así vista, puede excusar “la
la protección civil y colectiva; o de la historia producción social del comportamiento inmoral”,
política militar de la sociedad a la que se perte- lo cual significa un problema ético, que cae en
nece; ó de la etapa del sistema de agresión; o el terreno del humanismo, tanto como un análi-
de quién es el agresor inicial; o de la causa de sis racional y objetivo de los hechos, que como
la agresión14, o de otras variables casuísticas en tal, anuncia su dificultad e inabarcabilidad em-
pírica para llegar a una explicación y/o interpre-
tación satisfactoria de las experiencias consuma-
das en el holocausto. Esta inaccesibilidad ya nos
indica un límite en varios sentidos: la reflexión
sobre los hechos parciales con fines teóricos es
Bauman: algunos debates en torno a la Modernidad 15

tentativa pero válida; la reconstrucción subjeti- de moralidad, la norma consuetudinaria, y el


va e intersubjetiva de las experiencias individuales Estado de derecho se encuentran subvertidos, el
podría eventualmente mostrar diversas expresio- ejercicio social se vuelve laxo a toda acción que
nes de ‘lesión moral’ en los individuos, no ne- otorgue garantías, lo cual es el espacio propicio
cesariamente coincidentes, y su corresponden- para actuar clandestinamente, inmoralmente, sin
cia en los grados de voluntad e indiferencia frente reglas. Esto tampoco nos permitiría decir que el
a la perpetración de los hechos. Esto supondría holocausto fue una interrupción o en palabras de
una tarea mas difícil: contrastar los sistemas de Bauman “una demencia momentánea en el am-
moralidad precedentes en cada uno de los gru- plio escenario de la cordura”. Al contrario, se
pos involucrados en el holocausto de tal mane- gestó y se realizó en nuestra sociedad moderna
ra que dichos sistemas otorgaran argumentos y racional, con la organización burocrática
cualitativos de responsabilidad moral, y de su- institucional racional, y con los recursos los cien-
puesta cooperación, en el inevitable esfuerzo por tíficos disponibles y forzados, esgrimiendo y
la supervivencia15. Así entendida, cada sistema articulando las contradicciones contemporáneas,
moral solo atiende la necesidad de la sociedad internas y externas al mismo, por esta razón es
donde se origina, situación que limita cualquier un problema de complejidad y desarrollo racio-
comparación entre sistemas morales, y menos nal.
permitiría observaciones generales y/o
generalizantes encaminadas a nutrir una propuesta
general de la moralidad. Quizá un análisis mas Bibliografía
detallado de los esquemas de resistencia políti-
ca a través de variables como la adscripción Bauman Zigmunt (2005a), Modernidad y
étnica, política de género, edad, y tipo de ocu- Ambivalencia. Anthropos, UNAM, Universi-
paciones, entre muchas otras, nos permitan evi- dad Central de Venezuela. Barcelona.
tar un esquema normativo y voluntarista de la
intervención de la moralidad. Este aspecto resulta Bauman Zygmunt, (2005b), Amor líquido. Acerca
relevante para los análisis de confrontaciones de la fragilidad de los vínculos humanos”,
armadas contemporáneas 16 en las sociedades Fondo de Cultura Económica de Argenti-
donde el conflicto político interno refleja los na, Argentina
problemas históricos no resueltos y su manteni-
miento bajo la necesidad de integración social en Bauman, Zygmunt (2005c) Ética Posmoderna.
condiciones posibles de convivencia. Siglo XXI Editores. Buenos Aires
No obstante lo anterior, no podemos dejar
de considerar que la sociedad fomenta los com- Bauman (2002), Modernidad Líquida
portamientos moralmente regulados y margina,
suprime o evita los comportamientos inmorales. Bauman, Zygmunt (2004). La Sociedad Sitiada.
La sociedad racional argumenta una especie de Buenos Aires, Argentina, F.C.E
autodominio de las pasiones, los impulsos, y los
deseos que definen límites variables a los siste- Bauman Zigmunt (1998a), Globalización. Con-
mas de moralidad. También es preciso diferen- secuencias humanas. F.C.E. México
ciar los contextos en los cuales se validan los
comportamientos morales y se censuran los in- Zygmunt Bauman (1998b). Trabajo, consumismo
morales. La guerra, el holocausto, las confronta- y nuevos pobres.
ciones armadas, los conflictos políticos que no
se resuelven y tienen períodos de coacción mi- Bauman Zigmunt (1997), Modernidad y holo-
litar, de competencias desiguales extremadas, son causto. Maos Print, Eapaña
sin duda contextos singulares donde los sistemas
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