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Lot MENTOS FLOSOEICOS |NPORMAL, FALACIAS YA fundamental del primer enfoque: el andlisi suclasi de los razonamientos y icacién como correctos o falaces puede ser un tema central de estudio. Sin embargo, al explicar cudndo un razonamiento es 0 no una falacia, tendremos en cuenta el contexto de emisién del razo- namiento, y en particular su emisién en un contexto dialégica, con lo que tomaremos elementos pertenecientes al segundo grupo. Y, por tiltimo, al explicar una caracteristica fundamental de las falacias, su poder de conviccién, estaremos recurriendo implicitamente a elementos retéricos. 3, RAZONAMIENTOS La definicién tradicional de las falacias es la siguiente: una falacia es un razonamiento psicolégicamente persuasivo pero légicamente defectuozo (también se dice a veces, més simplemente, que una fala- cia es un error en el razonamiento). Sélo hacia el final de este capitu- lo daremos una definicién de “falacia” que creamos adecuada. Pero, por ahora, investigaremos algunas caracteristicas de esta di i6n. En primer lugar, es claro que toma sélo un aspecto del significado corriente del término “falacia", ya que también se lo usa, por ejem- plo, como sinénimo aproximado de “afirmacién falsa” (como en: “La profesora dijo que el positivismo légico es la filosoffa del impe- rialismo. Eso es una falacia”). En segundo lugay, la definicién hace 9, La que sigue es, por ejemplo, la definicién de Copi en intraduccién a la iégica (4* edicién, 1972; 8 edicién, 1990). Cf, también Copi y Burgess-~Jackson (1992). Muchas de las observaciones que haremos en este trabajo seran criticas con respecte al enfoque de Gopi. Esto no significa, de ninguna manera, que creamos que el texto de Cop! es Inatil o que todos los temas estan mal Uatidos en él Durante muchos afos, su libro fue el nico sobre el tema de caracter introductorio, y todavia hoy sigue siendo uno de los (0 el) mejor en su clase. Pero su tratamien- to de las falacias informates, aunque mejora en las ediciones més nuavas, deja mucho que desear. 27 JUAs Manet CoMHsAga un uso esencial de la nocién de razonamiento. Dedicaremos el resto de esta seccién a intentar aclarar esa nocién.!” La légica estudia los razonamientos, pero no-los razonamientos como procesos mentales —que son tema de la psicologfa— sino los pro- ductos de tales procesos. Entendido de esta manera, un razonamiento es un conjunto de oraciones" formulado por alguien que pretende que una de esas oraciones -la “conclusién” del razonamiento— se sigue (se desprende, se deriva) de las demés —las " premisas” del razonamiento-. Esa pretensidn —la pretensién de que las premisas dan apoyo o funda- mento a la conclusién— es lo que distingue a los razonamientos de otros conjuntos de oraciones como las descripciones y los relatos. Eota caracterizacién da lugar a varias aclaraciones. En primer lu- gar debe notarse que implica que un razonamiento incluye, al menos, dos oraciones: la conclusién y por lo menos una premisa. Quienes estén familiarizados con algéin sistema de deduccién natural podrén ver que ésta no es la caracterizacién formal de lo que es un razona- miento, ya que, segiin esta tiltima, pueden existir razonamientos (in- cluso razonamientos vélidos) que no tengan ninguna premisa. Asi, por ejemplo, en cualquier sistema de légica proposicional'? la oracién “Si el tiempo es dinero, entonces el tiempo es dinero” puede derivarse 10. Nota terminol6gica: en Blardunl (1997) se sostiene que es pedagégicamente til distinguir entre argumentos (intercambios lingdisticos formulados en len- guaje natural destinados a convencer a una determinada audiencia) y razona- mientos (contrapartes mas 0 menos formalizadas y/o “regimentadas” de los argumentos). No dudo acerca de Ia utilidad pedagégica cluso tedrica de esta dlstincién, que Blarduni remonta hasta Santo Tomés. St dudo, en cambio, acerca de su conveniencia estillstica. Creo que queda claro, por las primeras secciones de este capftulo, que me interesa la distincién y que la comparto, pero en este trabajo *argumento” y “razonamiento* se usaran como sinénimos y se referiran (salvo que ef contexto claramente indique lo contrario) a lo que Blarduni llama “argumento”. 11. En este trabajo supondremas, efectivamenta, que los “portadores de ver- dad” son las oraciones, aunque no nos detendremos a justificar esta preteren- cia. Para una excelente defensa de esta decisién, cf. Moretti (1984), 12. Mas bien, en cualquier sistema completo de légica proposicional. Las pri- metas ediciones de Introduccién a fa ldgica, de Copi, inclufan un conjunto de reglas que no permitian derivar tautologtas 28 LOGICA INFORMAL, FALACIAS ¥ ARQUNENTOS FILOSOFICDS a partir del conjunto vacio (es decir, a partir de ninguna premisa). Sin embargo, dado que queremos analizar qué razones (buenas o malas) se dan en favor de las afirmaciones que se hacen, ese caso limite de razo- namiento sin premisas no nos interesa,' En segundo lugar, debe notarse otra diferencia entre la caracteri- zacién de “razonamiento” que estamos adoptando y una caracteriza- cién formal. En la primera se hace referencia a oraciones afirmadas (por alguien), mientras que ello no es necesario (ni, quizés, conve- niente) en la segunda. Nuevamente, esta diferencia se debe a nuestro interés en la argumentacién “real”, en donde efectivamente seafirma que ciertas oraciones reciben apoyo de ciertas otras. Si el razonador pretende que el apoyo que las premisas dan a la conclusién es un apayo concluyente —esto es, un apoyo tal que es imposible que la conclusién sea falsa si las premisas son todas verda- deras-, el razonamiento es deductivo; si pretende, en cambio, que las premisas dan algdn apoyo a la conclusién, pero no un apoyo conclu- yente, el razonamiento es inductivo. Si las premisas realmente dan a la conclusién un apoyo concluyente, el razonamiento es un razona- miento deductivo valido; en caso contrario, es decir, si es concluyente el apoyo pretendido pero no el real, se trata de un razonamiento deductivo invélido. De manera anéloga, diremos que si las premisas realmente dan a la conclusién algiin apoyo (no concluyente), el razo- namiento es un razonamiento inductivo correcto; en caso contrario, es decir, si es parcial el apoyo pretendido pero no el real, se trata de un razonamiento inductivo incorrecto.! Estas consideraciones pue- den resumirse en el siguiente cuadro: 13. Esto no debe entenderse irrestrictamente, dado que no es lo mismo no tener ninguna razén en favor de una afirmacién que razonar sin partir de premisas. Si alguien se negara a aceptar que “Si el tiempo es dinero, entonces el tiempo es dinero” (u otra verdad légica mas complicada) es verdadera, lo correcto seria mostrarle que esa oracién se deriva de la Sola aplicacién de regias que é! mismo acepla (seguramente de manera implicita). Pero este caso es tan poco comun que no se pierde mucho si lo dejamos de lado. 14, Estas definiciones tropiezan con dificullades que hemos preferide ignorar, entre otras razones porque sospechamos que ninguna allemnativa seria menos problematica. © 29 Juay Manuel Comesana Validos (las premisas ddan un apoyo absoluto a | conclusién) \ Deductivos (se pretende que las premisas dan un apoyo absotuta a fa conclusién) Invalides (las premisas ‘no dan un apoyo absoluto a la conclusién) Razonamientos Correctos (las premisas ddan un apoyo parcial a \ (se pretende que las premisas la conclusién) dan un apoyo parcial a la conclusién) \ / incorrectos (las premisas no dan un apoyo parcial a la conclusion) / De esto se desprende que un razonamiento puede ser exrdneo al menos de dos maneras: puede ser invélido o puede ser incorrecto.) 4. RAZONAMIENTOS DEDUCTIVOS, La definicién de razonamiento valido que Copi da en el capitulo 1 de su Introduccién a la légica dice ms o menos lo siguiente: un razona- miento es valido si, en. caso de que sus premisas sean todas verdaderas, 15. Por supuesto, si consideramos sdlo una fuente de error: la relaci6n entre premisas y conclusiones. (Jn razonamiento también puade ser ert6neo (inade- cuado puede ser una mejor palabra) por tener premisas falsas 0 una conclusion no pertinente al tema en discusion. LOOICA INFORMAL, PALACLIS ¥ ARGUMENTOS HLOSOFICOS es necesario que la conclusion también sea verdadera. Otza defini- cidn equivalente a ésa dice que un razonamiento es valido si no puede tener premisas verdaderas (todas, se sobreentiende) y conclusién fal- sa. Veamos algunos ejemplos de razonamientos vélidos: A) (Premisa) Esto es un tridngulo, Por lo tanto, (Conclusion) esto tiene tres lados, B) (Premisa 1) Los seres humanos son murciélagos. Pero (Premisa 2) todos los muroiélagos tienen alas. Parle tanto, (Conchusién) los seres humanos tienen alas. ©) (Premisa 1) Manam oa pampeano, (Premisa 2) Todos los pampeanos fueron presidentes. Por lo tanto, (Conclusiin} Menem fue presidente. Estos ejemplos nos permiten poner de relieve varias caracteristicas de los razonamientos en general, y de los razonamientos vélidos en particular. En primer lugar, como lo muestra A), no es necesario que un razonamiento (ya sea valido o no, correcto o incorrecta) tenga mas 08, sf debe tener al menos una de una premisa, aunque, como ya lo premisa. Por otro lado, todos los razonamientos tienen exactamente una conclusién. Si en algiin lado hay més de una conclusidn, entonces hay mas de un razonamiento. En segundo lugar, los ejemplos B) y C) nos dejan ver que la validez de un razonamiento no depende (directamente) de la verdad a false- dad de sus premisas y conclusiones. En B) hay una premisa verdade- ra, otra falsa y la conelusién es también falsa, pero el razonamiento es vélido; es decir, las premisas apoyan de manera absoluta a la con- clusién. Esto puede verse porque si todas las premisas fueran verdade- ras, entonces la conclusién no podria ser falsa. Esta definicién permite que existan razonamientos vdlidos con premisas verdaderas y conclu- sién verdadera, con premisas (al menos una) falsas y conclusion tam- bién falsa ~como B)~ y con premisas falsas y conclusién verdadera -como C)~. Lo que le definicién no permite, sin embargo, es que un razonamiento sea vélido, tenga todas las premisas verdaderas y su 3 JUAN Mantiet Comtsasa, conclusién sea falsa. Aun cuando ésta (que tiene premisas verdaderas y conclusion falsa) sea toda la informacién que tenemos acerca de un yazonamiento, podemos saber que es invalido. Por otro Jado, que un razonamiento tenga premisas y conclusién ver- dadera (0 premisas falsas y conclusién ya sea verdadera o falsa) no implica que el razonamiento sea valido, como lo muestra este ejemplo: D) Premisa 1) Si éste es un libro sobre légica informal, entonces existe al menos un libro sobre légica informal. Poro (Premisa 2) existe al menos un libro sobre légica informal. Por bo tanto (Conclusién), ésto un libro sobre légica ir formal. Solo podemos decidir acerca de la validez o invalidez de un razo- namiento contando tinicamente con los valores de verdad de premisas y conclusién si sabemos que las premisas son verdaderas y la conelu- sidn falsa. En ese caso, como ya dijimos, esa informacién basta para que sepamos que el razonamiento en cuestin es invélido. En todos los demas casos, necesitamos saber més cosas acerca del razo- namiento para decidir aceroa de mu valides. En el caso de D), por ejemplo, sahemos que esté formado sdlo por oraciones verdaderas, pero si sdlo supiéramos eso, no podrfamos decidir si es vélido o invélido. EQué hace falta, entonces, para saber en cualquier caso si un razonamiento dado es vélido 0 no? Tenemos que saber, por su- puesto, si la(s) premisa(s) ofrece(n)' un apoyo absolute a la conclu- sidn. Y “las premisas ofrecen un apoyo absoluto a la conclusién” significa, como hemos visto, que no puede ser posible que las premisas sean verdaderas y la conclusién falsa. En el caso de D), por ejemplo, sahemos que no es vélido porque, aun cuando su conclusién sea verdadera, podria haber sido falsa aunque su premisa siguiera sien- do verdadera. Eso es algo que no puede pasar con los razonamien- tos vélidos -como A)-C)-. 16. En adelante se omitirén expresiones tales como “premisa(s)". Cuando hable de “premisas” se entender que puede haber sdlo una. LOGICA INFORMAL, FALACIAS ¥ AROUNENTOS FILOSOFICOS 5. RAZONAMIENTOS INDUCTIVOS Veamos ahora con un poco més de detalle los razonamientos inductivos. Una primera aclaracién se refiere a la definicién de razo- namiento inductive que hemos dado, que no coincide necesariamente con la que se encuentra en los manuales tradicionales. Lo que hemos enfatizado en la definicién de “razonamiento inductivo correcto” es el hecho de que la verdad de las premisas ofrece un apoyo parcial a la verdad de la conclusién.!? Sin embargo, muchas veces se identifica a los razonamientos inductivos con los que llamaremos “razonamien- tos inductivos por enumeracién”. Estos tienen la siguiente forma: Kes A XjesA Por lo tanto, todos los X son A. De esta identificacién surge la afirmacién de que los razonamien- tos inductivos “van de lo particular a lo general”. Esta es una afirma- cién inadecuada, al menos por dos motivos. En primer lugar, aun- que restringiéramos (indebidamente, segiin creo) los razonamientos inductivos a las generalizaciones por enumeracién, no es tan claro que vayan siempre “de lo particular a lo general”. El siguiente, por ejemplo, es un razonamiento inductivo por enumeracién: F) Los hombres son mamiferos y tienen pulmones. Las vacas son mamiferos y tienen pulmones. Los delfines son mamiferos y tienen pulmones. Por lo tanto, todos los mamiferas tienen pulmones. 17. El hecho de que Ia relacién entre premisas y conclusiones en un razona- miento inductivo sea una relacién de grado y no una relacién absoluta hace que el tratamiento formal de los razonamientos inductivos no sea tan directo como el de los deductivos. Esto no significa que no se haya intentado formular distin- tas “légicas inductivas’, pero sf significa que el éxito de esios intentos ha sido cuestionado casi unanimemente. 33 JUAN Maxtiet CONESARA En ese razonamiento, no hay un sentido claro de “particular” en al:cual laniproraoss’ sen particalaren;‘yn.qus oejraflarena todos loa hombres, a todas las vacas y & todos los delfines. Lo que sf puede defenderse es la afirmacién de que, en un razonamiento inductive por enumeracién, la conclusién es siempre mds general que cada una de las premisas. Pero, en segundo lugar, y mas imzurtan-e, existen razonamientos que son inductivos en el sentide, por nosotros definido y que de nin- guna manera van de Jo particular a lo general ni su conclusién es necesariamente més general que sus premisas. Veremos tres tipos de razonamientos con estas caracteristicas. Los siguientes ejemplos son casos de lo que llamaremos silogismo iductivo: La mayoria de los astrénomos son despistados. Pablo es astrénomo. Porlo tanto, Pablo os despistado, El noventa por ciento de los europeos sabe hablar ingles. ‘Ara a europea. Por lo tanto, Ana sabe hablar inglés. La conclusién de los silogismos inductivos, como se ve clara- mente en estos ejemplos, suele ser una oracién particular. Esto no es necesariamente as{, como se ve en este caso (poco interesante, por cierto): La mayoria de los mamiferos tienen al menos dos extremidades inforiores. Las vacas son mamiferos. Forlo tanto, las vacas tienen al menos dos extremidades inforiores. Pero, de todos modos, en ningiin caso la conclusion de un silogis- mo inductivo seré més general que todas sus premisas. La estructura general de un silogismo inductivo es la siguiente: 34 LOGICA INFORMAL, FALACIAS ¥ ARDUMENTOS FILOSOFICOS EIX por cienta (o la mayoria, 0 muchos) de los ¥ es F. Ae. Por lo tanto, Aes F. Como puede verse, un silogismo inductive consta de dos premisas y una conelusién. Una de sus premisas establece (cualitativa o cuan- titativamente) la frecuencia relativa de dos propiedades, la de ser Y y la de ser F; es decis, establece qué porcentaje de los Y son F. La otxa premisa establece que un determinado individuo es Y, y la conclusin la frecuencia relativa, més fuerte serd el razonamiento (la conclusién seré més probablemente verdadera dada la verdad de las premisas). Si sdlo el cincuenta por ciento de los Y es F, eso no nos permite concluir sugiere que, por lo tanto, es F. Obviamente, cuanto mayor s nada acerca de un Y en particular si no contamos con més informa- cién. Si, por otro lado, un porcentaje muy bajo de los Y es F, eso nos permite establecer inductivamente que un Y en particular no es F. De manera que los silogismos inductivos pueden también responder a este esquema: ‘Sélo un X por ciento (0 una minorfa, 0 casi ninguno) de los Y os F. Aes Y. Parle tanto, A noes F. Por ejemplo: Sélo una pequeria minorfa de los estudiantes de la Universidad de Buenos Aires son extranjeros. Carolina es estudiante de la Universidad de Buenos Aires. Por bo tanto, Carolina no es extranjera (es decir, es argentina). Otro tipo de razonamiento inductivo lo constituyen los razona- ruientos por analogia, de los cuales el siguiente es un caso: E) Los seres humanos gritan y sienten dolor cuando se los golea. Los animales gritan cuando se los golpea. Por lo tanto, los animales sienten dolor cuando se los golpea. 35 Juas MANrEt COMEEARA, Aguf, obviamente, las premisas no ofrecen un apoyo absoluto a la conclusién (es posible que las premisas sean todas verdaderas y la conclusién falsa -Descartes creyé que eso es lo que de hecho pasa-), pero, de todas maneras, Ja verdad de las premisas hace que la conclusién sea probablemente verdadera. Dicho de otro modo, ti los animalesino gritaran cuends'ec los golpee: (6 «i los. sexes humanos no lo hicieran, 0 si no sintieran dolor), entonces ten- defamos menos razones para creer que los animales sienten dolor. Los razonamientos por analogfa tienen la siguiente estructura general: A tiene las caracteristicas b, ¢ y d. B tiene las caracteristicas b, cy d. X tiene las caracteristicas by c. Por lo tanto, X tiene la caracteristica d. Como se puede ver en nuestro ejemplo, no es necesario que un razonamiento por analogfa tenga mas de un “caso base” (la enumera- vidn de casos a los que se aplican ciertas caracterfsticas); aunque, en general, mayor cantidad de premisas verdaderas con la estructura ade- cuada hacen més “fuerte” al razonamiento (como veremos enseguida ésta es una propiedad de todos los razonamientos inductivos, no ex- clusiva de los razonamientos par analogfa). El cuarto tipo de razonamiento inductivo que vamos a consi- derar se conace como salto a la mejor explicacién (0 también como abduccién, término que usé Peirce). Tiene la siguiente estructura: Se da el fendmeno A. Hes la mejor explicacién de A. Porlo tanto, H. Por ejemplo: El motor del auto esté caliante. La mejor explicacién de que el motor del auto esté caliente es que ha sido usado recientemente. Porlo tanto, el auto ha si usado recientemente. 36 LOGICA INFORMAL, FALACIAS ¥ ARGUMENTOS FULOSOFICOS Este tipo de razonamiento también ha sido usado en filosoffa. Por ejemplo, algunos “realistas cientificos” (como Boyd) han sostenido que la mejor explicacién del éxito y la convergencia de las teorfas cientfficas es que (la mayorfa de) sus términos refieren es decir que realmente existen, por ejemplo, electrones, y que se comportan como lo dicen las leyes fisicas-.'* Por diltimo, consideraremos también un tipo de razonamiento inductive que, segiin muchos filésofos de la ciencia, explica el procedimiento me- diante el cual se confirman las hipdtesis cientificas. Los llamaxemos razonamientos confirmatorios, y tienen la siguiente forma: Sila hipstesis H es verdadera, entonces se producira el fendmeno (observable y particular) O. Se produce el fendmeno O. Porlo tanto, Hes verdadera. Debemos hacer aqui dos aclaraciones. En primer lugar, tomado desde un punto de vista deductivo, es decir si se pretende que la ver- dad de las premisas garantiza la verdad de la conclusién, cualquier razonamiento inductivo es invélido. Pero, como ya se habré notado, no todo razonamiento no vilido es inductivo. Para sacrificar la diver- sign en aras de la claridad, repetiremos ahora que un razonamiento es inductivamente corcecto si la verdad de sus premisas ofrece algiin apoyo (no concluyente) a la verdad de su conclusién. En el caso particular de los razonamientos confirmatorios, considerados desde un punto de vista deductivo, éstos tienen la forma de lo que se conoce como falacia de afirmacién del consecuente. Se llama con este nombre a aguellos razonamientos que tienen una similitud superficial con un tipo de razonamiento vélido: el Modus Ponens. El siguiente es un ejemplo de Modus Ponens: 18. En La verdad desestructurada, de esta misma coleccién, €. Barrio analiza este tipo de argumento, que puede usarse también en favor de una teorla “correspondentista” dela verdad 7 Juan Manvel Comesana, ‘Si Dios ha muerto, entonces todo esté permitido (Dostoievski). Dios ha muerto (Nietesche). Por lo tanto, todo esta pormitido. La falacia de afirmacién del consecuente consiste en invertir la segunda premisa y !a conclusién de un Modus Ponens y suponer que el razonamiento ain es vélido: Si Dios ha muerto, entonces todo estd permitido. Todo esta permitido. Porlo tanto, Dios ha muerto. Pero, repetimos, la falacia se comete sélo si se encara el razo- namiento desde un punto de vista deductivo; es decir, si se preten- de que las premisas ofrecen un apoyo absoluto a la conclusién Esto no es lo que pasa, para volver al tema de esta seccién, con los razonamientos confirmatorios. En estos casos lo que se supone es que la verdad de lax premisas auimenta la probabilidad de qua la conclusién sea verdadera. Que lo que aquf llamamos razonamien- tos confirmatorios sean inductivos y no deductivos fue un deseu- bri vo en la filosofia de la ciencia. iento que dio lugar a un programa de investigacién atin acti- En resumen: a) los razonamientos inductivos, considerados desde un punto de vista deductivo, son invélidos; pero b) ello no implica que los mismos razonamientos, considerados desde un punto de vista inductivo, no sean correctos. Por el vontra- rio, muchos razonamientos, si se consideran desde un punto de vista inductivo y respetan ciertas restricciones (por ejemplo, los tipos de razonamientos mencionados en esta seccién), son correctos y hasta indispensables en nuestros intereambios lingiitsticos habituales. Dijimos que harfamos dos aclaraciones sobre los razonamien- tos confirmatorios. La primera es de cardcter general y fue resu- mida en el pdrrafo anterior. La segunda es Ja que sigue. Debe notarse aquf que estamos suponiendo (sin argumentar en favor de esta idea) que las hipétesis cientificas son, generalmente y en 38 LOGICA INFORMAL, FALACIAS ¥ ARGUMENTOS BOSOFICOS los casos més interesantes al menos, hipétesis tedricas -es decir, hipétesis con términos que hacen referencia a objetos v sucess no observables—. Aun en el caso en que una hipétesis cientifica sdlo contenga términos que hagan referencia a objetos 0 sucesos observables, seréu enunciados universales (enunciados que se re- fieren a todos los individuos de una clase en cuestidn, clase que contendré una cantidad indefinida de miembros). Si ello es asi, entonces no es posible “testear” directamente esas hipdtesis. Lo que permiten los razonamientos confirmatorios es testear indi- rectamente este tipo de hipétesis, por medio de la consideracién de algunas de sus consecuencias observacionales (es decir, por me- dio de la consideracién de consecuencias de la hipdtesis que con- tengan solamente términos que hagan referencia a objetos y/o sucesos observables y que sean enunciados singulares). Todo esto puede ser (y es) discutido, pero no cabe duda de que existen razonamientos inductivos que tienen la forma de los que aqui llamamos razonamientos confirmatorios, dentro y fuera del 4mbito de la investigacién cientifica. La clasificacion de los razonamientos inductivos hecha en esta secoién puede resumizse en el siguiente cuadro: 39 Jraw Masel Comesasa Por enumeracién simple: Xe, Xes A. Por lo tanto, todos fos X son A. Silogismos inductivos: E1X por ciento {o la mayorla, 0 muchos) de los ¥ es F. Aes. Por to tanto, A es F Razonamientos Por analogia: inductivos A tiene fas caracteristicas b, cy d. B tiene las caractoristicas b, cy d. X tiene las caraceristicas b y Parl tanto, X ine a caraceristica d. Salto a la mejor explicacién. Se da el fendmeno A. Hes la mejor explicacion de A. Pore tanto, H. Aazonamientos contirmatarios: Si la hipdtesis H es verdadara, entonces se producird el fendmeno (observable y particular) 0. ‘Se produce el fenémeno 0. Por lo tanto, H es verdadera, Al hablar sobre los razonamientos por analogfa hicimos refe- rencia a una caracteristica de los razonamientos inductivos que permite diferenciarlos de los deductivos. Esa caracteristica es la siguiente: dado un razonamiento inductivo correcto, la adicién de informacién a sus premisas puede hacerlo més fuerte o més dgbil. Esto se ve més claramente, quizds, en el caso de los razona- mientos inductivos por enumeracién. Cuantos més casos de ma- miferos con pulmones agreguemos a las premisas de nuestro ejem- plo, més probable sera la conclusién de que todos los mamiferos tienen pulmones. Y, por el otro lado, un sole caso de mamifero sin pulmones transforma a nuestro razonamiento en invalido (y, pox supuesto, en incorrecto). 40 LOGICA INFORMAL, FALACTAS ¥ ARG Nada de esto sucede con los razonamientos deductivos.'? Si un razonamiento deductivo es vélido, el agregarle informacién a sus premisas no cambiaré esta caracterfstica (si puede cambiarla, por su- puesto, el quitarle informacién contenida en sus premisas). Conside- remos este razonamiento deductivo: Todos los chapistas son bohemios.” Juan es un chapista. Porlo tanto, Juan es bohemio. Podrfa pensarse que si agregamos a este razonamiento la premisa “No todos los chapistas son hohemios” ya no seré més valido. Pero ello no es asf. Este agregado simplemente lo convierte en un razonamiento con premisas contradictorias (y quizés, por ello, imitil), pero no en un razonamiento invélido. Si una oracién se sigue de otras, entonces se sigue del conjunto original en conjuncién con cualquier otra oracién. Este principio légico no vale para los razonamientos inductivos, y es el aque esti a la base de la distincisn que estamos realizando. 6. FALACIAS, BROMAS Y PROPAGANDAS, Podemos volver ahora, entonces, a la caracterizacién de “falacia” que dimos al principio de la seccién 3. Alli dijimos que una falacia es un razonamiento psicolégicamente persuasivo pero légicamente de- fectuoso. Un razonamiento puede ser ]dgicamente defectuoso de va- rias maneras (ver nota 14), pero las que nos interesan aqui son la invalidez y la incorreccién. 19, Dejamos de lado en este trabajo los estudios sobre Idgicas no monoténicas, donde se consideran razonamiantos deductivos que (supuestamente) si son afectados por la suma de informacion a sus premisas. 20. Generalizacion seguramente apresurada (ver capitulo 2) proporcionada por un mecénico. 4

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