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  • 1 - Amelia Dell Anno y Ruth Teubal - Resignificando Lo Grupal en El Trabajo Social

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    1 - Amelia Dell Anno y Ruth Teubal - Resignificando Lo Grupal en El Trabajo Social

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    Resignificando lo grupal en el Trabajo Social COLECCION DIDACTICA NOVEDADES Nuevas Identidades Urbanas en América Latina Roze - Murillo - Nufiez (Comps.) Cambio Social, Trabajo y Ciudadanfa La Participacién para el Desarrollo Social Juan J. Rigué - Raul Orsi Institucionalizacion de la Locura La Intervencién del Trabajo Social en Alternativas de Atencién Lucia del Carmen Amico Ciudadania y Territorio Las Relaciones Politicas de las Nuevas Identidades Sociales Gabriela Delamata Envejecer en un Contexto de (Des)Proteccién Social Claves Problematicas para Pensar la Intervencién Social Maria del Carmen Ludi Trabajadores Sociales en la Historia Una Perspectiva Transformadora Carina Moljo Mediacién Comunitaria Bases para Implementar un Centro Municipal de Mediacin y Resolucién de Contlictos Mita Gémez Olivera Resigniticando lo grupal en el Trabajo Social Amelia DellAnno ~ Ruth Teubal (Comps.) Ameua DeU’ANNo - RuTH TEUBaL (Comptaconas) Resignificando lo grupal en el Trabajo Social ‘Susana Agap, Veronica Cuno, Sonia DAUure, 7 Masia Aueua Dg Lucia, Lina Dwex, Rosa ENTEL, Marceta S. Fermi, Eira F. Levy, MARCELA Locker, Luisa F, PEREZ, FERNANDO RABENKO, Miriam Mazel Sicout EspaciO EDITORIAL Buenos Aires [Resigniticando lo grupal en el trabajo social / compllado por Amel DaltAnno y Ruth Teubal - 1a ed. = Buenos Aires : Espacio Eaitoril, 2008, 224 p. ; 28x16 em, (Clencles Sociales) ISBN 980-802.220-8 4, Trabajo Social. |. DelfAnno, Amelia, comp. Il. Ruth, Ruth, comp, Cop 364.8 EsraciO EDITORIAL editora - distribuidora importadora - exportadora Simé6n Bolfvar 547 - 2° of. 1 (C1066AAK) Ciudad Auténoma de Buenos Aires ‘Tel. 4831-1945 ‘ E-Mail: espacioedit@ciudad.com.ar www.espacioeditorial.com.ar Disefio de tapa: Claudia Solari ‘Composicion y armado tipogratico: Osmar Luis Bondoni Coordinacién y Producoién Editorial: Osvaldo Dubin La reproduccion total o parcial de aste tbo, en cualquier forma que sea, ‘déntca © mociicada, escrita @ maquina, por el sista “muligrapt’, ‘mimedgreto,impreso por fotocopa, fotoduplicasion,etoétoa, no aulosizads por los etktores, ila derectos reservados. Cualquler utizacén debs ser previamonte soca, 4 ealoién, 2006 Immpreso on la Argentina - Printed in Argontina ‘Quada hecho al depésito que previene la ley 11.728 BaAC eo (© 2006 Espacio Exitoral veStnoeine spn ss0-s02-220-8 | 4 LOS AUTORES Susana Abad. Maestra, Asistente Social (UBA, 1961), Psicdloga Social (1 Escuela de Psicologia Social fundada por E. Pichon-Rivisre, 1877). Po- see formacién en Educacién de Adultos, Bienestar Social (OEA), investiga: cién Social (Univ. del Salvador), Educacién Popular (Paulo Freire, ICIRA, 1968/ 68), Psicodrama psicoanalitico, psicoterapias y terapias corporales gestalticas y bioenergéticas, Violencia Familiar, Experiencia profesional en educacién, justicia y salud. Docente de la Carrera de Trabajo Social (UBA) y de la Es- cusla de Psicologia Social. Actualmente docente de Introduccién a la Violen- cia Familiar de la Facultad de Ciencias Sociales, Es asesora de la ONG Nueva Tierra, en el rea Educacion y Pobreza y el programa Espacio Freire, Autora de diversas publicaciones. Verénica Ctineo. Licenciada en Servicio Social (UNMdP) Docente de la carrera de Licenciatura en Servicio Social (UNMdP) en Metodologia de Ser- vicio Social de Grupos y en Metodologia de Servicio Social - Comunidad. Ex becaria de investigacion de la misma Universidad. Integrante activa del equi- po regional de! Area Social del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, actual Ministerio de Desarrollo Humano (Implementacién de diversos progra- mas sociales como el Plan Pafs, el Programa Vida, el Programa Comadres). Fue Concelal por et Partido Justicialista en el Municipio de Mar Chiquita, antes de asumir como integrante del Gabinete Municipal de ese distrito, como Secretaria de Desarrollo Social, funcién que actualmente desempetia junto a sus cargos docentes. Sonia Dautte, Licenciada en Servicio Social, Perito del Juzgado de Me- nores N? 8 de San Martin. Miembro del Equipo de Supervisién del Colegio Profesional de San Martin Maria Amelia de Lucia. Licenciada en Servicio Social: Integrante det Equipo de Asistencia de la Curedurla Oficial del Poder Judicial de la Provin- cia de Buenos Aires. Docente titular de la Universidad Nacional de La Plata: asignatura Andlisis institucional. Miembro del Equipo de Supervisién del Co- legio Profesional de San Martin. ‘Amelia Dell’Anno. Licenciada en Servicio Social (UBA). Magister en Clen- cias Sociales (FLACSO). Profesora titular de Metodologia - Servicio Social de Grupos y del Seminatio de Terapia Ocupacional sobre La persona con discapacidad en el contexto social (Facultad de Ciencias de la Salud y Ser- Vicio Social - Universidad Nacional de Mar del Plata). Directora del proyecto de investigacién “La promocién de la participacién, social de tas personas con discapacidad: las buenas précticas" en la misma Universidad. Ex directora de la Escuela de Ciencias de In Salud y del Comportamiento, UNMAP. s [RESIGNIFICANDO LO GRUPAL EN EL TRABAJO SOCUA, Ex Secretaria de Extensién, UNMGP. Ex docente de la Universidad Nacional del Comahue y de la Universidad de Buenos Aires. Compiladora y autora del libro Alternativas de la diversidad social: las personas con discapacidad (Es- pacio Editorial, Buenos Aires, 2004) y de otras publicaciones. E-mail: amedell @ uolsinectis.com.ar Linda Dwek. Licenciada en Servicio Social. Docente de la Universidad de Buenos Aires; asignatura Introduccién a la Violencia Familiar. Ex integrante del equipo técnico del Juzgado de Menores N® 1 de San Martin. Coordina- dora del Equipo de Supervisién del Colegio Profesional de San Martin. Rosa Entel. Licenciada on Servicio Social. Psiesloga Social (Primera Es- cuela Privada de Psicologia Social, fundada por E. Pichon-Riviére). Coordi- nadora de grupos de mujeres en situacién de violencia familiar. Supervisora de profesionales y equipos que trabajan con el problema social de la violen- cla en la familia, Docente de la Carrera de Trabajo Social, Catedra Nivel de Intervencién Il (grupos). Coordinadora Docente de los “Cursos -Talleres DES- PEGAR’, de capacitacién de voluntarios y voluntarias en violencia familiar, auspiciados por el Gobiemo de la Ciudad de Buenos Alres y el Programa de Voluntariado “Ser solidario” (Secretarfa de Desarrollo Social). Autora del I+ bro Mujeres en situacién do violencia familiar (Espacio Editorial, Buenos Ai- res, 2002). Marcela 8. Ferri. Licenciada en Servicio Social. Miembro del Equipo Téc- nico del Tribunal de Familia N® 2 de San Martin, Miembro del Equipo de Supervisién del Colegio Profesional de San Martin. Elvira F. Levy. Licenciada en Servicio Social. Miembro integrante del ca- pitulo de Adopoidn en la Asociacion de Psiquiatria infanti, Ex integrante del equipo técnico del Juzgado de Menores N? 1 de San Martin, Miembro del Equipo de Supervisién del Colegio Profesional de San Martin, Marcela Lockett. Licenciada en Trabajo Social y Licenciada en Psicolo- gfa, Universidad de Buenos Aires. Especialista en servicios sociales en se- lug y educacién para la salud. Experiencia profesional en salud trabajando a nivel familiar, grupal y en elaboracién y ejecuci6n de proyectos comunitarios. En Espatia, Madrid, experiencia en servicios de atencién a la violencia hacia la mujer tanto a nivel individual como grupal. Luisa F, Pérez. Licenciada en Servicio Social. Mediadora y conciliadora en materia penal, Integrante del equipo téonico del Centro de Asistencia a la Victima, Ministerio Publico del Departamento Judicial de San Martin. Miem- bro del equipo de supervision del Colegio Profesional de San Martin, Fernando Rabenko. Asistente Social (UBA). Licenciado en Servicio So- cial (Universidad de Morén). Docente en la Carrera de Trabajo Social, Uni LOS AUTORES: Z versidad Nacional de La Matanza, Miembro co-fundador de la Red por los Derechos del Nifio de La Matanza. Faciltador lidico, egresado del Estudio Inés Moreno. Coordinador de fa Cooperativa Tiempo de Juego (disefo, in- tervencién y educacién social por medio de la disciplina Idica). Especialista en redes socio-institucionales, Pose publicaciones sobre disciplinas lidicas, Infancia en situacién de riesgo y redes sociales. Miriam Mabel Sicoli. Licenciada en Servicio Social (Universidad Nacio- ral de Mar de! Plata). Magister en Servicio Social (Pontlicia Universidad Ca- tolica de Rio Grande Do Soul, Porto Alegre, Brasil). Profesora en las cate- dras de Unidad de Practica | y Metodologia - Servicio Social de Grupos, de Ja Carrera de Lioenciatura en Servicio Social de la Facultad de Ciencias de la Salud y Servicio Social, Universidad Nacional de Mar del Plata. Integrante del Grupo de Investigacion “Salud y Desarrollo det Nifo y la Familia” de la Facultad de Ciencias de la Salud y Setvicio Social de la Universidad Naci nal de Mar del Plata. Desempefio profesional en las areas de Educacion, Accién Social y Tercera Edad. Actualmente Directora de! Departamento pe- dagégico de Servicio Social (UNMdP), Autora de diferentes publicaciones. E-mail: mmsicoli@ sinectis.comar Ruth V. Teubal. Licenciada en Trabajo Social (UBA). Psicéloga Sooial (Prk mera Escuela Privada de Psicologla Social, fundada por Enrique Pichon- Riviére, Directora: Ana P. de Quiroga). Coordinadora de grupos operativos en dicha Escuela entre 1981-1998. Carrera de Especializacién de Post Gra- do en Violencia Familiar, Facultad de Psicologia, UBA. Titular de la Cétedra Introduccién a la Violencia Familiar y Profesora Adjunta a cargo de la céte- dra Nivel de Intervencién il (con grupos), Carrera de Trabalo Social, Facuk tad de Ciencias Sociales, UBA. Investigadora UBACYT, diriglendo diversos proyectos. Miembro de la Comisién Directiva de ASAPMI - Asociacién Argen- tina para la Prevencion y Asistencia del Maltrato Infantojuvenil. Compiladora y autora del libro Violencia familiar, trabajo social e insttuciones (Paidés, 2001), y otras publicaciones, E-mail: neubal@cludad.com.ar PROLOGO Natauo Kisnenman, EI Trabajo Social es una construgcién que, desde hace algo mas de cien aos, venimos haciendo qulenes hemos asumido el compromiso de mante- ner vivo el interés humano hacia las criaturas humanas, como decia Mary E. Richmond en 1922. Es que como profesién, su sentido ha sido potenciar lo humano en fa superacion de diversas situaciones en sociedades y culturas en las que con- trasian realidades no siempre favorables al desarrollo de esa cualidad que Genominamos lo humano. La pobreza, el desempleo, la violencia institu. cionalizada, la corrupeién, fa disoriminaciGn social y particularmente fa étnica, entre otros muchos factores recurrentes, dan tastimonio de una sociedad que dlsoursea sobre derechos humanos pero no los practica, Y es en el grupo donde fo humano toma relieve, porque no hay humano {que no esté vinculado a otros humanos en un grupo. Grupo es fa familia, la andi, los muchachos de la esquina de barrio, los compafieros de estu- dio, de trabajo, de la iglesia, del club, det comité politico. En grupo nos ci veriimos con amigos, en grupo se cometen delitos, en grupos reclamamos nuestros derechos ciudadanos. Ni siquiera el esquizotrénico puede prescin- dir del grupo en el que su enfermedad fue construida. No hay vida humana sin. grupos. Y trabajar con y en grupos (medio y espacio para la intervencién profe- sional), transformando necesidades en potencialidades, 68 permitimos un ‘Goce, un despliegue de pasiones y creatividades inimaginables, pues cada ‘grupo es como una caja de sorpresas, en la que sdlo implicéndonos pode- ‘mos descubrir una tarea siempre apasionante, aun en situaciones contextua- les deprimidas. Entrar a ser parte de un grupo, desde cualquier rol, sea adscripto 0 presoripto, es entrar en un juego. Siempre lo he sentido asi en todo grupo con el que he trabajado o del que formé parte. Un juego que es excitante, seductor. Y siempre es un proceso de mutuos aprendizajes gene- radores de libertad, compromiso, entrega. Agregaria que descubrimos el pla- Cer profesional trabajando grupos. Como alguna vez lo hemos dicho, fue el azar el que un dia me empujé a trabajar en y con ellos. Desde entonoes no he dejado de disfrutar esos momentos, cualquiera sea la edad, sexo 0 con- diclén humana de los integrantes y temdticas abordadas. Esto también se traduce en quienes han producido este libro. En sus paginas hay quienes lo hacen desde afios de experiencia o desde Ia juven- tud que construye ta experiencia en la accion y deconsiruye sus prejuicios y 10 RESIGNFICANDO LO GAUPAL EN EL TRABAL temores en estos espacios, donde poder, saberes y afectos estén compart dos, Donde el goce, la alegria de “encontrarnos, da coraje, para abrir puer- la aventura. "28 fceso no es también una aventura esto de producir un lioro? Todo libro es producto de esa pasién y esa creatividad. Pasién por lo que hacemos. Creatividad porque en nuestra profesién, ciencia y arte se articulan perfecta- mente en nuestras acciones y en nuestras palabras. Y la palabra, ol lengua- je, es la més valiosa creacién humana, Nos comunica, nos trasciende, nos expone. Tal vez por esto tiimo, muchos no se atrevan a asumirla y muchos pretendan callarla porque molesta. El grupo es asi una red de conversacio- hes entre seres humanos que se realizan como tales mediante su particlpa- cin en la construccién y mantenimiento del mismo. be En la palabra y en la accién existimos, somos, cobramos identidad. El Trabajo Social todavia tiene asignaturas pendientes con esto de tomar la palabra, de traducirla en trabajos escritos. Por eso cada aparicién de un Ir bro es un festejo, un banquete, en el que participamos, relaciondndonos con autores y lectores, y nos nutrimos con sus saberes, aun en la discusién cuan- do no compartimos las opiniones de los autores, porque la discusién, cuan- do podemos escuchar al otro y aceptar que tenga ideas que difleran de las uestras, siempre aporta conocimientos. 'A todo esto, algiin lector se puede preguntar con toda legitimidad: gpor ‘qué este fervor por el trabajo con y en grupos? Porque el grupo es el espa- clo donde emerge y se consiruye el sujeto. Porque es el mejor medio para ‘conocer un aspecio de la realidad en la que vivimos. Porque es el espacio para la reflexion, para la cooperacién solidaria, para vivir experiencias intersubjetivas, para la accién creativa, Porque el grupo ¢s el lugar para lbe- rar la palabra y el cuerpo. Porque por el grupo transita la partcipacién so- cial, y con ella el sentido que le damos a la vida. ‘Aiguna vez he leido que le preguntaron a Freud: ,qué es la salud men- tal? Y que él contest6: “poder amar y trabajar’. Yo, con permiso de Freud, dra: trabajar, amando lo que hacemos. ¥ los que trabajamos en grupo, sin lugar a dudas, amamos hacerlo. INTRODUCCION Aneta Dewt’Axno - Ruth Teves Al encarar la presente obra como revisién y renovada mirada acerca del Trabajo Social con grupos, se nos han presentado multiples perspectivas, en coincidencia con las producciones de diferentes autores y con los aportes te6ricos y précticos que se fueron desarrollando a partir de su surgimiento como incumbencia de nuestra disciplina. La presente compllacién tiene fundamentalmente un cardcter pedagég!- 0, siendo nuestra expectativa poder offecer un material de utilidad para la formactén de los estudiantes de Trabajo Social y para fa consulta de los co- legas. No obstante, no constituye un manual ni cubre la totalidad de tépioos ue compondrian el. programa de un curso sobre Trabajo Social con grupos. Se abordan temas que seguramente deben ser objeto de debate y defi nicién por parte del colectivo profesional. En tal sentido nunca podria arribarse ‘un producto terminado. El carécter operativo del Trabajo Social con grupos, centrado en su intencionalidad de cambio, exige una base teérica que permita una interven- cin fundada y responsable. Tanto en el nivel de la practica profesional domo en el de la formacién académica, se produce y reproduce constantemente una busqueda de un marco de referencia para esa intervencién. Esto lleva a intentar una integracién conceptual para la comprensién de! proceso grupal, recogiendo aportes tedricos interdisciplinarios y articuléndo- los con los aspectos metodolégicos del Trabajo Social y con el aprendizaje ue proviene ce la praxis. La sisteratizacién tedrico-practica, sin dudas atin insuficiente, ofrece potencialmente una interesante fuente de conocimientos para reforzar esta bisqueda, que debe conservar un eje de identidad desde la propia disciplina, Un recorrido por las diversas corrientes de investigacién sobre grupos coloca al trabajador social en una encrucijada, al tratar de identificar aque- ios aportes que lo saquen de una actitud ingenua, sin atraparlo en una con- fusion de ideas y planteos epistemolégicos que, al provenir de campos del saber muy especializados, exceden el marco de referencia de su propia pre- aracion basica de grado. Tal es el caso de los desarrollos de origen psicoa- Ralitico, que ofrecen los elementos para una interpretacidn profunda de los, grupos como conjuntos intersubjetivos, pero que exigen una formacién disci- plinar especifica. Tomando otros ejemplos, tampoco seria posible abarcar ‘minuciosamente las teorizaciones provenientes de la semiética, o del anall- sis institucional u ottos desarrollos actuales del pensamiento sociolégico y/o politico. Al incorporar conceptos provenientes por Io tanto de diferentes cam- os del saber, debe sefialarse el riesgo de una repeticién acritica de los 2 [RESIGNFICANDO LO GRUPAL EN EL TRABAJO SOCIAL mismos, sin captacién real de su significado. Lo anterior no invalida ta pre- sencia de muchos trabajadores sociales que se han perfecoionado y espe- cislizado, convirtiéndose en referentes en las tematicas grupales. No siendo entonces posible disponer siempre y efectivamente de todos los conocimientos que surgen en el marco interdisciplinario, se plantea el interrogante acerca de la posibilidad de una comprensién sutlciente de 10 ‘grupal en la perspectiva del Trabajo Social. Por ello, se considera importante seguir reflexionando sobre ei objeto y los objetivos del mismo y construir un marco conceptual comprensible, que incorpore criticamente aportes interdisciplinarios fundamentales y que respalde su accionar en el érea de lo social, para asi potenciar la riqueza de sus posibilidades, inoluyendo su pro pia contribucién a la teoria social, Actualmente, la produccién bibliogrética del Trabajo Social, las presenta- ciones en congresos y los debates al interior de la profesién mencionan sistomaticamente la necesidad de tener en cuenta la llamada “cuestion so- cial’, las consscuencias de la globalizacién dependiente, fos nuevos escena- Tios y actores sociales, las nuevas formas de participacion, la perspectiva de cludadanta, etc. Estas paginas no escapan a tal tendencia. Sin embargo, ante 'a existencia de obras especializadas que tratan acerca de este tema, el mis- mo no es aqui objeto de profundizacién, si bien es mencionado en varios de los capitulos, fundamentalmente en lo que atafe a la dimensién de lo grupal, ‘Los grupos poseen una existencia real con relacién a un contexto social que los contiene y fos condiciona. Son emergentes de la cuestién social, la teflejan, la muestran, la reproducen en los Ambitos de la vida cotidiana y de aigin modo la redefinen, con potencialidad transformadora, En la presente obra se despliegan aportes seleccionados, que se nutren de una amplia gama de alterativas teéricas posibles. Algunos de los auto- res que se citan se consideran cldsioos cuyos aportes, quizas resignificados, siguen ofreciendo elementos de interés, de modo pertinente. Otros nos in: troducen en planteos mas recientes. Finalmente algunas consideraciones S09 producto de elaboraciones desarrollades por los autores de esta obra, tanto en el émbito académico universitatio y extrauniversitario, como en la activi dad institucional y comunitaria, en algunos casos con trayectorias de cua renta afios de vida profesional. Con este libro, las compiladoras retoman un trabajo compartido, que tuvo tuna primera expresién en la elaboracién de un articulo publicado en 1985 acerca de la nocién de farea en oi Trabajo Social con grupos (Dell’Anno, A. y Teubal, R., 1985). Se estima que en estos afios transcurrides, en que am- bas realizaron otras producciones, se ha generado una evolucién interesan- te de los marcos de referencia, que hoy intentan actualizar y renovar. Los siguientes capitulos estén unidos por un objetivo comin, ya expresa- do. Bada la indapendencia do ous autores en la elaboracisn de los mismos, InTRODUCGION, 13 han sido inevitables algunas superposicionas teméticas. No obstante, se considera que estas mitadas superpuestas ofrecen enfoques complementa-- rios, al abordar distintos aspectos y enmarcarse en diferentes contexios co- munitarios y/o institucionales, presentando en conjunto un abanico de apor- ‘tes conceptuales, experiencias y reflexiones, intentando arribar a una visién abarcativa dal tema, Si bien los trabajos resultan complementatios, pueden también ser lefdos y comprendidos en forma separada. La obra se organiza en dos partes. La primera parte, Perspectivas grupales en Trabajo Social. Aportes conceptuales retine cinco capttulos cuyo objeto es el desarrollo teérico de cuestiones que se consideran basales en este nivel de abordaje. Integran conceptos provenientes de diferentes perspectivas, presentando las elabo- tactones propias de sus autoras. ‘A modo de capftulo introductorlo, Amelia Dell’Anno aborda una serie de ‘cuestiones inherentes al proceso grupal, destacando una perspectiva cul- tural. Realiza un recorrido conceptual, partiendo de la idea de persona, para ‘uego abordar la nocién de grupalidad y sefialar aspectos que considera de importancia para la comprensién de dicho proceso. Desarrolla el tema de la cultura, interrogéndose acerca de las implicancias de los conceptos a ella asociados, al interior de fa vida grupal. Enfatize el papel de los grupos, en orden al efianzamiento de una cultura de la solidaridad, proponiendo como perspectivas de andlisis @ intervencion: la de desarrrollo psicosocial, la intercultural, y la de ciudadanfa, En su capitulo, Ruth Teubal integra a las tradicionales conceptualizaciones referidas a los grupos, paradigmas mas recientes, complejizando ta mi- rada sobre fo grupal. Su trabajo aborda cuatro tépicos principales: en pr mer lugar, desarrolla un marco terminolégico y epistemolsgico referido al objeto de estudio, enfatizando la multidimensionalidad de lo grupal. Luego, partiendo de una mirada sociopoittica, desarrolla la cuestién de! trabajador social ante las nuevas subjetividades.’ Desde diferentes marcos conceptua- les, le sigue el desarrollo de factores grupales que generan cambios, para coneluir con un sub-capitulo dedicado a aspectos tebrico-técnicos referidos a la intervencién en los grupos. La entrevista que realiza Ruth Teubal a Susana Abad desarrolla una serie amplia de temas que fueron y son preocupacién de los trabajadores socia- les latincamericanos. Se abordan, entre otras cuestiones, las ambigieda- des en la autodefinicién profesional, sus limites, el horizonte de nuestra pro- fesion mareado por los consensos éticos y de convivencia social de cada momento histérico-politico, sintetizados hoy en fa defensa de los derechos humanos, £1 didlogo entablado va reflejando miitiples tensiones y dificuta- des conoretas y cotidianas que entrentan los trabaiadores sociales en ol des- empefo del rol. Aporta algunas respuestas a dichos planteos, destacando y “4 RESIGNIFCANDO LO GRUPAL EN EL TRABAJO SOCIAL fundamentando a la vez el valor del trabajo grupal. Integra aportes de Paulo Freire, de Enrique Pichon-Riviére y otros, plasmados en su experiencia en el ambito educativo en general y en el de la educacién popular en particular. El trabajo realizado por Sonia Daulte, Marfa Amelia de Lucia, Linda Dwek, Marcela S. Ferri, Elvira F. Levy y Luisa F. Pérez se reflere a’su como profesionales autoconvocadas que ofrecen un espacio de super a trabajacores sociales, en ef marco det Colegio de Asistentes Sociales y Tra- bajadores Sociales de la Provincia de Buenos Aires, Distrito San Martin. Las autoras, integrantes de dicho equipo, plantean la necesidad de la supervi- sién analitica extema, brindada por trabajadores sociales a trabajado- res sociales. Esta propuesta se apoya en conceptualizaciones fundamenta- das sobre el tema y analiza cuestiones tales como el riesgo profesional en un contexto social de alta confictividad, el sindrome de burn-out, el stress labo- ral y el afianzamiento de la identidad profesional. Se destacan los elementos procesuales de la supervision, que abarcan tanto niveles manifiestos como latentes y el valor de la petspectiva grupal aplicada a la misma. En el capitulo de su autoria, Verénica Céneo centra su analisis en la in- tervencién profesional del Trabajo Social en el marco del papel del Es- tado y la administracién publica. Reflexiona acerca de la situacién socioeconémica argentina, las formas de ia administracién pablica y los modelos de Estado. Destaca el proceso de adopcién de decisiones, para referirso a los grupos como ambitos de partioipacién cludadana. Como con- ccepto basico aborda la organizacién grupal-territorial como fortaleza de gobernabilidad. A través de su desarrollo, realiza un andlisis critica de la responsabilidad de! Estado y del rol del trabajador social En fa segunda parte, Grupos, instituciones y comunidad, se presentan cuatro capitulos que dan cuenta de diferentes experiencias, acompafiadas en todos los casos de consideraciones tedrices que las sustentan y realizén- dose un andlisis eritico de las mismas, tanto a nivel micro como macrosocial. En el capitulo sobre su experiencia como'coordinadora de un grupo de mujeres de una casa de acogida de Madrid, Espafta, Marcela Lockett ofrece tun minucioso relato del desarrollo de un proyecto de abordaje con metodolo- gla de taller, destinado a mujeres victimes de violencia doméstica. Parte de tn anélisis tedrico de esta problematica, para luego explayarse en los conte- nidos, oriontaciones, actividades y resultados de esta experiencia grupal. El objetivo general del proyecto se centra en “generar un proceso grupal de reflexion y andlisis de la situacién de desigualdad y vulnerabilidad que viven las mujeres en la sociedad tendiendo a favorecer procesos de cambio" en las participantes. Ello conileva un meduloso trabajo tendiente al logro de una mayor autenomla, promocién do actitudes asertivas, como también replan- teo de los vinculos patentofiiales. Se destaca la contribuoién que realize la autora en la sistematizacién tedrico-practica de una experiencia institucional, wrmoouccION s/ Desde otra realidad y otro contexto, Rosa Entel también nos presenta una ‘experiencia de Trabajo Social en la asistencia a mujeres en situacién de violencia familiar, Analiza el desarrollo de un grupo de ayuda mutua y re- flexién, aportando dos perspectivas de interés. Por un lado una indagacion sobre esta probiematica, a través del relato de las participantes, permitién- donos conocer sus facetas subjetivas y caractetizar con agudeza sus situa- ciones. Por otra parte, al presentar un modelo de andlisis de dicho grupo, muestra el proceso de éste, con énfasis en la interrelacién horizontalidad ~ vertcalidad y destacando la posibilidad de critica de la vida cotidiana que puco llevarse a cabo y el Impacto de esta experiencia de encuentro sobre las par- tioipantes. Culmina con refiexiones sobre el Trabajo Social y sus modelos de intervencién. Se destaca en este trabajo una ciara perspectiva de defensa de los derechos humanos en general y los de género en particular. Miriam M1. Sicoli presenta sus elaboraciones acerca del papel de lo grupat en los actuales programas de acci6n social, realizadas en base a los resu- tados de una investigacién por ella efectuada, Analiza las condiciones en que se desarrolian dichas propuestas, como modo de accién social gubemamen- tal, como as{ también las particularidades de las demandas que las autorida- des le hacen al trabajador social. Seftala la discordancia existente entre los enunciados formales de los programas, en los cuales se requiere del trabajo ‘rupal,y el nivel real de ejecucién. Analiza desde un marco conceptual acerca Gel Trabajo Social y de la participacién en grupos, posibies orientaciones aplicables en dichos programas, teniendo en cuenta las caracteristicas de ta actual cuestion social, Concluye con el planteo de interrogantes sobre la intervencién profesional, invitando a la reflexion colectiva sobre la misma. La historia y la actualidad de la Red por los Derechos del Nifio y of Adolescente del Partido de La Matanza, Buenos Altes, Argentina, es abor- dada por Fernando Rabenko. Partiendo de las concepciones de Herbert Blumer referidas a la investigacién del mundo empitico, desarrolla una inda- {gacién fundamentada en elementos tanto conoeptuales como axiolégicos y practices. Se refiere con amplitud al modelo de redes sociales e institucionales, teorizando reflexivamente sobre diversos temas vinculados al mismo. En este marco, realize una descripcién contextual de la experien- cia, con referencia a las condiciones de vida de la poblacién en general y de la infancia en particular, que llevan a la conformacién de esta red. Profundi- za aspectos vinculados a la participacién y solidaridad, la relaci6n Trabajo Social - modelo de redes, el desarrollo de programas especificos y el em pleo de herramientas de planificacién estratégica, Su andlisis incorpora pers~ pectivas grupales ilustrativas del proceso llevado a cabo. Todo el capitulo evi- dencia una mirada eriica sobre la articulacién Estado - sociedad civil Para finalizar, la eleccién del titulo de esta obra, Resignificando lo grupal en el Trabajo Social, alude a una expectativa de indagacién e integracion 8 RESIGNIFICANDO LO GRUPAL EN E2 TRABAJO SOCIAL, conceptual abierta a progresivas redefiniciones, en el marco de nuestra so- Ciedad cambiante, inserta en un mundo globalizado. Desde hace varias dé- cadas hablamos da los provesos sociales y sus cambios y advertimos su ritmo vertiginoso y las situaciones de crisis. La hora actual muestra una profundi- zacién de esta tendencia y un fuerte impacto sobre la interioridad de los seres humenos, que se iraducs muchas veces en incertidumbre, aisiamiento y vul- nerabllidad. La intervencién del trabajador social para el fortalecimiento do los grupos en diferentes contextos apunta, segin nuestro crterio, al afianza- miento de la persona, a su dignidad, al desarrollo de la solidaridad por enc ma del individualismo, a fa fuerza de la accién colectiva, al desarrollo cultu- ral, @ la puja por la ampliacién y la defensa de los derechos civles, politicos y sociales y a la equidad distributiva, tanto material como simbélica, Deseamos expresar nuestro agradecimiento al Profesor Natalio Kisnerman, quien nos ha honrado al aceptar prologar estas paginas y ou- yas palabras nos impulsan a continuar indagando, trabajando y creciendo. A nuestros compafieros, co-autores de esta obra, por su esfuerzo, por su experiencia que nos nutre a todos y por su confianza al entregamnos sus roducciones. A Osvaldo Dubinl, por su disposicion y su estimulo como editor, que han hecho posible esta publicacién. A nuestros alumnos, cuyos interrogantes y expectativas nos confirman en nuestra vocacién docente. A nugstros compafioros de equipo en diferentes Ambitos a lo largo de nues- tra’ carreras, junto a quienes hemos construido aprendizajes, compartido experiencias siempre fecundas, ampliando capacidades de andlisis y edi cando un pensamiento interdisciplinario, sobre a base de consensos y disensos, Ellos nos han permitido nuestra propia partcipacién grupal y nos han enriquecido continuamente con sus aportes. A todes las personas que han integrado los diferentes grupos en los que hemos actuado como coor- dinadoras y/o como trabajadoras sociales, pues en uitima instancia ellas nos dan la principal motivacién con relacién @ nuestra identidad profesional. Por otra parte, una de las compiladoras, Ruth Teubal, desea agradecer a todos los compaferos y compaferas coordinadores/as de grupo, como también a les docentes de la Primera Escuela Privada de Psicologia Social fundada por Enrique Pichon-Riviére, en donde desarroll6 su experiencia inicialmente ‘como alumna y luego, durante muchos aos, como coordinadora de grupos, Y que fue crucial para su formacién en el tema Creemos que somos muchas las personas, profesionales 0 no, que com- parlimos bisquedas e ideales en fa lucha por un mundo mejor, aun sin la Seguridad de alcanzario algcn dia. Como trabajadores sociales, hemos in- tentado brindar nuestras reflexiones, desde nuestro propio campo, en la ‘esperanza de contribuir a una integracién de ideas, experiencias y valora- ciones ético-politicas que ubiquen el trabajo con grupos como espacio & instrumento para la promocién de los dereutios humanos, ‘Buenos Ales, Agosto de 2005 PRIMERA PARTE Perspectivas grupales en Trabajo Sociai. Aportes conceptuales Carino | TRABAJO SOCIAL Y PROCESO GRUPAL. HACIA UNA CULTURA DE LA SOLIDARIDAD Asieua Dew’ANNo Palabras preliminares En estas notas se procura actualizar, a modo de confiuensia de la propia trayectoria, el marco de referencia presentado por la autora en anteriores publicaciones, retomando algunos conceptos para petmitit continuar con la linea de pensamiento iniciada en las mismas." Luego de veintisiete ahos de ‘cétedra universitaria en Trabajo Social con Grupos (Universidad Nacional del Comahue y Universidad Nacional de Mar del Plata), ha sido diffol la selec- ci6n temética para este capitulo introductorio, experimentando una necesi- dad de presentar una sintesis conoeptual de algunos contenidos selecciona dos, tomando aportes de diferentes autores y brindando también la propia ‘mirada personal. El rescate de algunos autores clésicos implica el reconocimiento de Id valldez de clertos aportes, que podemos integrar a nuestras actuales pers- pectivas. Las vertientes interdisciplinarias del conocimiento sobre grupos obligan a prestar atencién a los origenes del mismo, sefialando que las su- cesivas y tan diferentes miradas sobre estos temas han ido haciendo bles perspectivas no advertidas con anterloridad. Por otra parte, el campo disciplinar especifico produce de suyo un reoorte en las observaciones, en virtud de su objeto, objetivos y formacién previa, lo cual conlieva también una advertencia sobre una posible y quizds inevitable captacién conceptual parcializada, en nuestra propia éptica,? En las siguientes paginas se presen- ta una sintesis, a modo de sinopsis, que el lector deberd profuncizar y com pletar, y se intenta ofrecer un esquema de andlisis, drigido més que nada a Tesaitar y relacionar algunas cuestiones basioas y a abrir nuevos interrogantes en la busqueda de un marco referencial para el Trabajo Social con grupos. Los capitulos que componen este libro reflejan y dan cuenta de los im- portantes cambios sociales con los que se ha iniciado el nuevo milenio y de las repercusionies de los mismos sobre individuos y grupos. En esta socie~ dad con profundas contradicciones, van produciéndose transformaciones + So remita a dichas producciones, para una vision bésica sobre ol tama de la dieléctiea ‘entre procaso grupal y proceso motocalégico en Trabajo Social (DellAnno, 1997); sobre edu ‘én interoutural (DelfAnno, 1996), y sobre aocién colectva (DeHAnno, 1998). * Véase, para esto toma, Femitdaz - Ds Bresi (1999), 20 RESIGNIFICANDO LO GRUPAL EN EL TRABAJO SOCIAL culturales, que orientan tanto el desarrollo de 10 institucional, como la vida Cotidiana de la gente. Esto romite a la presencia de tendencias muchas ve- ces dicotémicas, contrapuestas y ganeradoras de contlicto social, pero que al mismo tiempo posibilitan el desarrolio de identidades y el retuerzo de actitudes solidarias. Los grupos se recortan en el telido social con sus propios eédigos, con- virlendose en ambitos concretos de apreciacién de las tendencias cultura les. Desarrollan una versién mocificada de las pautas sociales generales, ya ue, incluso en la contraculture, la cultura prevaleciente resulta la referen- cla, Dice Reinhard Bendix: ‘Los ideales son esenciales porque influyen in- ‘luso en la orientacién de quienes no se atienen a ellos", El surgimiento y desarrollo de fa cultura orupal tiane lugar dentro del pro- 880 de todo grupo; ¢s inherente al mismo y podemes afirmar que no hay Posibilidad de que éste existe sin la presencia de un sistema de significacio- Res que permitan el intercambio entre las personas y su proyeccién hacia el medio, Por tal motivo, nos referiremos a elementos que hacen a la comprensién del proceso grupal, planteando algunos interrogantes e intentando una re. flexion sobre la cimensién cultural de los grupos: ¢Qué se entlende por grupalidad? 2Cémo es la relacién contexto social-grupo-persona? ¢Cuel es ! papel de la comunicacin dentro del proceso grupal? 4Cémo se desarro. ‘la la cultura grupal? ¢Cuéles son las orientaciones de /a intervencién profe- sional de! trabajacior scoial, en e/ marco de los procesos grupales? El concepto de alspositivo grupal, ineorporeci al acerbo de dlstintas pro- {esiones, incluyendo el Trabajo Social, alucde a un recurso técnico-profesio. nal, en general disciplinar, que favorece la formacién de un agrupamiento, tra. tando de generar un ambiente propicio para el intercambio, en tomo, gene- ralments, @ motivos coneretos de convocatoria.® Esta modalidad de trabaio Ro dabe confundimos respacto del significado de fo grupal, como exponente de procesos sociales profundos, que responden a orientaciones colectivas y fepresentan el esfuerzo de la comunidad por organizarse y parlcipar en lt vide cludadana, Ello va mds allé de un “dispositivo", més alld de la interven

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