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Vestimenta blanca
Normalmente se describe a la Llorona como el espectro de una mujer vestida de blanco.
También cubre su rostro con un velo.
Llama la atención que, el blanco es en muchas ocasiones el color que representa a las deidades.
Este color contrasta con la oscuridad de la noche, asimismo se relaciona de forma estereotipada
con el color de fantasmas y espíritus.
Los gritos
De una forma literal, el lamento de la Llorona se justifica por la pérdida de sus hijos, al cometer
ella misma el crimen. Uno de los gritos más conocidos es el de: ¡Ay mis hijos!
Tal y como apuntan en su investigación Alberto y Aitana Martos García, los gritos de la llorona
se han llegado a interpretar de una forma “derrotista”. Es decir, en el plano denotativo, se ha
entendido como un lamento del pueblo americano por la calamidad sufrida durante la
conquista.Por otro lado, el grito de la llorona va más allá del lamento por sus hijos. Si se escucha
este espectro es señal de mala suerte, lo que ocurre después de percibir su lamento es una
sucesión de desgracias. En este sentido, el grito de la llorona podría funcionar como señal de
mal augurio.Historia de la Llorona El origen de la leyenda de la Llorona es incierto. La primera
vez que aparece registrada de forma escrita es durante el siglo XVI a cargo de Fray Bernardino
de Sahagún.
Algunos estudios apuntan afinidades con otros espectros procedentes de la cultura
prehispánica. Otros, a que las distintas versiones que se conocen hoy día de la leyenda datan de
la Época colonial. Veamos.
La Llorona is a ghost of Spanish-American folklore originating from
the Pre-Hispanic World that, according to oral tradition, is the soul
in pain of a woman who drowned her children, who later, repentant
and cursed, searches for them at night through rivers, towns and
cities, frightening those who see her with her overwhelming
crying...
la leyenda de la llorona y por ello la más aceptada, es la que cuenta sobre un hombre
rico y poderoso, quien se encontraba casado con una mujer de su misma alta clase social
pero que a su vez mantenía un relación secreta con una muchacha pobre que había
conocido como parte de su servidumbre.
Con el paso del tiempo, la relación dio como fruto dos hijos. El hombre siempre prometía
dejar a su esposa e irse a vivir con la muchacha para hacer una vida juntos.
Una noche, la pareja decidió que la joven se regresaría a su pueblo para preparar la boda
con el que había sido su patrón. Ella siguiendo el plan se fue con sus hijos. La fecha de la
boda llegó y ella esperó impaciente en la entrada de la iglesia. Todo estaba listo para un
servicio discreto, los minutos pasaron rápidamente y el hombre jamás se apareció.
El hecho llenó de furia a la joven que perdiendo todos los estribos, esa misma noche
ahogó a sus propios hijos usando el vestido de novia blanco en un lago cercano al
pueblo. Desatando que desde ese momento su alma anduviera en pena lamentando
haber asesinado a sus niños cada madrugada por las calles junto con gritos
perturbadores de arrepentimiento.
The legend of La Llorona, and therefore the most accepted, is the one that tells about a rich and
powerful man, who was married to a woman of the same high social class but who in turn had a
secret relationship with a poor girl who he had known as part of his servants.
Over time, the relationship produced two children. The man always promised to leave his wife
and go live with the girl to make a life together.
One night, the couple decided that the young woman would return to her town to prepare the
wedding with the one she had been her patron. Following the plan, she left with her children.
The wedding date arrived and she waited impatiently at the entrance of the church. Everything
was ready for discreet service, the minutes passed quickly and the man never showed up.
The event filled the young woman with fury and she lost all her temper, that same night she
drowned her own children wearing her white wedding dress in a lake near the town. She
unleashed that from that moment her soul was in pain, regretting having murdered her
children every morning through the streets along with disturbing cries of repentance.