:do pucciar
i, ana castellani
afios del is
chnerismo
alfredo puociareli, ana castellani
los afios del kirchnerismo
LOS ANOS DEL
KIRCHNERISMO
la disputa hegeménica tras la crisis,
del orden neoliberal
alfredo pucciare
jos mats, Los aos deka ana castellani
rico para ¥ Parspeciva aun presente en el que parece coordinadores
* consruyéndose, de k mano dal gobierno de Cambiemos,
nueva hegemore,
spa sre.ae7so076583- Un proyecto politico con objetivos
econémicos
Los limites de la estrategia kirchnerista”
Femando Porta
Juan E. Santarcéngelo
Daniel Schteingart
Los estimulos sostenidos a la expansi6n de la demanda interna
constituyeron uno de los rasgos mas distintivos de la politica econémica
kirchnerista y favorecieron una dinamica virtuosa de crecimiento por lo
‘menos hasta 2011. Ahora, si bien transité sobre un sendero macroeco-
némico que permitis expandir el ingreso, incrementar el empleo, crear
‘numerosas empresas en diversas ramas de actividad, apuntalar politicas
de redistribuci6n y mejorar la cobertura y el impacto de las politicas so-
ciales, la estructura econdmica heredada de los afios noventa no cambié
en lo esencial. La heterogeneidad del aparato productivo y su intrinseco
caricter regresivo limitaron la posibilidad de profundizar esos avances
tuna vez que la coyuntura internacional se torné relativamente desfavora-
ble; a su vez, la posterior reaccién frente a este nuevo contexto también
se reveld insuficiente.
‘Alguna ver, en un debate sobre Ia eventual existencia de un modelo
‘econdmico K, Alfredo Zaiat caracteriz6 al kirchnerismo como un “proyec:
to politico con objetivos econémicos";! Cristina Ferndnder de Kirchner,
centonces presidenta, hizo suya de inmediato esa definicién que exponia
con claridad la subordinacién de la economia a la politica, una de las
Principales méximas kirchneristas. Asumimos acd que el proyecto poli-
tico que lideraron Néstor Kirchner y Cristina Ferniindez de Kirchner se
articulé sobre tres grandes pilares: “memoria, verdad y justicia", “amplia-
in de ciudadania” e “inclusién social”. Si la consecucién del primero
* Lor autores agradecen fs valioso comentarios de Alfredo Pucia
(Castell, Paula Canelo, Julén Zicari, Lulsina Pereimite, Mariana
Sergio Woyechewen, Matias Kulfy Gustavo Ludmer, a quienes eximen de
Igulcr responsabilidad sobre el contenido de ext capitulo,
“Proyecto politica”, Pagina/12, 2/9/2012, disponible en cya. paginal2.com,
sar /dario/economia/2.202442-201209.02 hun,100 108 AROS DEL KIRCHNERISMO
ica de derechos humanos y en la
0 de los gobiernos anteriores, y el
requirié un cambio dristico en la
visién de la
segundo fue
de nuevos derechos
manera directa ala
En la concepcién
intimamente asociada a la procura de mejoras
queda de un crecimiento acelerado a través de incentivos permanentes
a la expansién de la demanda fue el modo predominante para alcan-
otras politicas tendientes a transformar de forma sustancial la estructura
productiva conspiré contra aquella decisién. Estos limites se revelaron
de modo incipiente ya en 2007 y con mayor seriedad a partir de 2011. En.
otros téminos, una de ls debilidades del proyecto kirchnerista fue que
que, en materia econémica, el kirchnerismo fue més reactivo que estra-
tégico, a diferencia de otros planos de la accién de gobierno (de modo
notable en el
‘ico, en economia el kirchne:
més que a adelantarse o prevenit
~ Durante los gobiernos kirehneris
ras en la esfera de circulacién del excedente que en
de las condiciones de su generacién (Porta y otros, 201
capturé excedente bal (0s mecanismos (retenciones
UN PROYECTO POLITICO CON ORJETIVOS ZCONOMICOS 101
‘Tabla 5.1. La Argentina 2003-2015, Fases y resultados
Paton Resides" Problnar
snecarsctnciéa *Cieciniento + Prioner
dedeuda donee Iotconarian
lermos kirchneristas, con la intencién de contribuir a
anse, por ejemplo, Coatz y
Kulfas, 2016) y al debate respectivo. Se identifican tres fases
es que se corresponden de tun modo bastante ajustado con cada
le los perfodos politicos; cabe sefialar que esta correspondencia no
5 sélo burocrtica y se debe, mas bien, a cambios en el contexto econé-
Y politico a nivel local e internacional, y en el cuadro de medidas y
Politcas econémicas predominantes. A su vez, en cada una de estas cta-
as pueden distinguirse resultados y tensiones particulares y especiicos.
Ena tabla 3.1 se muestran, a modo de resumen, las principales caracte-
Hfsticas de cada una de las tres periodizaciones analizadas.102 LOS ANOS DEL KIRCHNERISMO
de la crisis financiera internacional y de los contlictos politicos internos
sobre el proceso de acumulacién durante el primer mandato de Cristina
Fernandez de Kirchner, y se consideran los mecanismos que transforma-
ron la abrupta recesién en rapido crecimiento (2007-2011). La tercera
seccién analiza el segundo mandato de Cristina Fernandez de Kirchner,
cen el que la profundizaci6n de las contradicciones y desequil
tentes derivé en un proceso de estancamiento econdmico (2011-2015).
En la cuarta seccién, se concluye con una
nes generales sobre este largo periodo, Fi
x0 estadistico con la evoluci6n de los principales indicadores soci
EL PRIMER GOBIERNO KIRCHNERISTA (2003-2007):
(CRECIMIENTO ACELERADO DE LA PRODUCCION Y EL EMPLEO
La tendencia al déficit crénico de la cuenta corriente? de la balanza de
ppagos fue el talén de Aquiles de la convertibilidad (Brenta, 2002). Su
in extranjera directa, ade-
én del aparato productivo
fuertes transferencias posteriores al exterior e
no generarse capacidad genuina de repago, su renovacién y aumento
se pactaba en condiciones crecientemente onerosas. En el marco de la
fines de 2001.
El presidente interino Adolfo Rodriguez Sai ~quien ocupé la jefatura del
Poder Ejecutivo tras la renuncia de Fernando de la Ria~-declaré el default
ntaconiente se compone del sido ene las exportacionsse importr
lar empress y de lon pagos (cbs
‘ontrapartda de la cuenta corrente eta cuenta capil
“aldo de amas surge la variacign de reservasintemacionaes
‘monetaria, en este caso el Banco Central (BCRA).
‘UN PROYECTO POLETICO CON onyErIv0s ECONOMICOS 103
de la deuda externa; en los primeros dias de 2002 un nuevo presidente
“Eduardo Duhalde- anuncié la derogacién de la Ley de Convertbitidad
yen pocas semanas, la paridad cambiaria pas6 de 1 a 8 pesos por délar,
hasta aleanzar un pico de 4 pesos en junio.
El gobierno de Duhalde impuso retenciones alas exportaciones agro
industriales ¢ hidrocarburiferas dispuso la lamada pesficacién asim:
‘rica de deudas y depésitos,* pesificé y congels las tarifas de los servici
piiblicos privatizades, introdujo una serie de regulaciones en el merca-
do cambiario, entre elas la obligacin de liquidar exportaciones supe-
jn de délares? y mantuvo la cesaci6n parcial’ de pagos
de la deuda externa, en un marco de fuertes rspideces con el Fondo
Monetario Internacional (FMI)? La devaluacidn del peso se trasiadé
relatvamente poco a los precios, por lo que el tipo de cambio real se
deprecié més del 120% e indyjo un cambio abrupto en la estructura de
Jos precios relatos a favor de los sectores transables (en particul
industria) y en desmedro de los no transables, en especial de los servicios
pblicos privatizados. La clase trabajadoray los perceptores de ingresos
fijos fueron grandes perdedores: et salario real cayé en el orden del 25%;
fen contrapartida, los margencs unitaios de las empresas se recompusic-
ron de un modo signficativ. Las firmas que operaban en sectores tran-
sablesy que ademis se habian endeudado en détares en tos aios previos
se vieron doblemente benefciadas: por un lado, por el nuevo marco de
precios relativos; por el otro, por el sineamiento de sus patrimonios.
5 Se estableleron retenciones del 20% al pets crudo y del 3% anus der
os, del 10% acarnes, cereals, oleaginosas aceite, y del 5% al resto de ae
‘manufacturas, cualquiera fuera su orien
4 Las devas nominal en dolares se pesfcaron 1a 1,en canto que los
rereado cambiaco se amplio de
igaciones com los organismoe
‘muldlaterales (FMI y Banco Mundial), con quienes procuré negociar sabe
tod en lox primer radon Fescon que perm
eyulacién plena
e as variables Bnancierasy cambiaras, lo que muy probablementehabria
Nevado a una profunda concentracin del stems hancarioy una exampi-
dda sun mayor del dolar.104 LOS ANOS DEL KIRCHNERISMO
El abandono del régimen de convertibilidad y el default implicaron,
pasados los primeros y turbulentos meses de 2002, una recomposici
de la capacidad del Estado para ejecutar politica publica’ Si bien la
caida del producto bruto interno (PBI) en 2002 fue del 11% respecto
del afio anterior, el peor momento de la crisis se produjo en abril; entre
mayo y octubre, la actividad econémica se estabiliz6 y, a partir de no-
viembre, comenz6 una acelerada recuperacién que marcaria el inicio
de mas de cinco afios de crecimiento a “tasas chinas”? Varias razones
explican el rebote: en primer lugar, el mayor espacio fiscal del gobier-
no lo habilité a aumentar ~de manera modesta en 2002 y con mayor
{mpeuza partir de 2003 el gasto piblico, por ejemplo, a través del
Jefes y Jefas de Hogar y de la obra publica; en segundo lugar, por la
difusién, por parte de las provincias, de las “cuasimonedas” creadas en
ue en la practica suponia aument ante en manos del
piiblico; en tercer lugar, el saneamiento patrimonial, que permiti6 que
jadas dejaran de comprometer una parte sustan-
cial de sus ingresos en intereses de la deuda y mejoraran la dinamica de
timo, la devalu:
¢ ganaron compet
Ia cadena de pagos entre proveedores;
expansiva en algunos sectores que de reper
E] modo en que se process el colapso de Ia convertibilidad y la sali-
da de la crisis es parte de las condiciones iniciales que favorecieron la
evolucién de la economia kirchnerista: cuando Néstor Kirchner asumi6
e125 de mayo de 2008, lo peor de la “tormenta macroeconémica” pa-
recfa haber pasado, si bien quedaba por delante la dificil tarea de la
reconstruccin. Tanto Ia actividad econémica como el empleo privado
registrado habian comenzado a crecer a fines de 2002;
para aminorar la gigantesca deuda soci
desempleo, la pobreza, los bajos salarios,
LUN PROYECTO POLITICO CON ORJETIVOS ECONOMICOS 105
Asimismo, la cuestién del default no se habia resus tema fi
cen situaci6n critica y diversas,
(Kulfas, 2016). La normaliza-
iativos a la deuda social existente, constituyeron
Jos elementos centrales de la agenda econémica del primer gobierno
kirchnerista
En sus primeros afios de gobierno, Kirchner mancuvo una marcada
continuidad con la politica econémica de Duhalée; la permanencia de
Roberto Lavagna como ministro de Economia es un buen simbolo. La
tendo una mayor tolerancia
cias y habilitando la permanencia
de las cuasimonedas por su potencial de financiamiento del gasto. La
firmeza ante las exigencias del FML y el uso de instrumentos expansivos
se redoblaron cuando Kirchner lleg6 al poder.
La preferencia por un tipo de cambio real depreciado ~que mejora
1a competitividad de los productos argentinos-, el disciplinamiento de
tos servicios piblicos privatizados y a redistibucién de parte de la renta
agraria y petrolera, tres engranajes clave de la gestién macroeconémica
del gobierno de Kirchner, resultan lineas de continuidad con el gobier-
no previo (Kulfas, 2016). Por otra parte, Néstor Kirchner fue marcando
‘cada vez mas algunos quiebres e imponiendo nuevos criterios. Esta claro
‘que veia con mejores ojos que Duhalde y Lavagna una fuerte y répida
recomposici6n salarial, aun cuando eso ¢
tro de Economia que se arrastraba desde
ire con Kulfas (2016) en que el pedido
de renuncia a Lavagna tras el rotundo triunfo kirchnerista en las legis
lativas de octubre de 2005 y su reemplazo por Felisa Miceli, de un perfil
‘mucho mas bajo, es la culminacién de ese propésito.
En los acdpites que siguen se analizan las caractersticas centrales del
Proceso de crecimiento acelerado, inclusivo y difundido del periodo
2003-2007, de la evolucién del sector externo y de la cuestién del endew-
amiento y la normalizacién financiera del pats.106 Los AROS DEL KIRCHNERISMO
pero su efectividad fue en particular elevada entre 2008 y 2007, en un
‘marco de altos niveles de capacidad ociosa, un tipo de cambio real depre-
ciado, elevados margenes unitarios y patrimonios empresariales sanea-
dos, ademas de buenas condiciones en el frente externo. Varias herra-
‘mientas expansivas fueron utilizadas en este subperiodo. Por un lado, un.
fuerte aumento del gasto piblico real, que crecié un 82%;" en especial,
Ia inversién piiblica (en su mayorfa en obras de infraestructura) registr6
lo que quebré una larga tendencia de més
gobierno impulss una
un crecimiento exponenci
de treinta afios de pobre evel
profunda recomposicién del
del 50% en términos nominales entre junio y diciembre
ive- y de los haberes
11,6 millones de personas mayores en un lapso de dos afios.
Este impulso a la demanda doméstica supuso una répida recuperacién
del mercado interno y favore
empresas, en especial de las industriales y la construcc
cidad ociosa disponible, aumentaron con rapidez los n
les de produc
cién y empleo, al tiempo que desde 2003 el niimero de empresas en ac-
tividad volvi6 a crecer, y se inauguré un quinquenio de gran dinamismo
empresarial, sobre todo en pequeiias y medianas empresas (pymes)."*
entre 2008 y 2007, el PBI creci6 por encima del 8% anual promedio (véa-
se grifico 3.1). En términos acumulados, la economia creci6 52% entre
2002 y 2007, y alcanz6 en 2005 los niveles de 1998 ampliando fuertemen-
11 Lo dat son de laboracin propa sobre Ia base de informnacisn del
ba)
14 Segin dats del Obsenatorio de Empleo y Dinas Empresaral(OEDE),
‘en 1998 habia 490 000 empress formales, 80 000 en 2002, 407 000 en 3008
1587 000 en 2008,
[UN PROYECTO POLITICO CON onjETIVOS ECONOMICOS 107
te la capacidad instalada a partir de 2006. A diferencia de los noventa,
cuando buena parte de los incrementos de productividad se explicé por
el aumento del desempleo, en estos aiios el crecimiento convivié con
tuna tasa de generacién de puestos de trabajo altamente dinamica. El de-
sempleo pas6 de un 22,5% en 2003 a alrededor del 9% en 2007 (véase
igrfico 3.2), a la vez que se redujo de forma paulatina la informalidad,
del 41% en 2004 al 36,3% en 2007."
Las politicas de empleo kirchneristas no s6lo procuraron incentivar
una ripida generacidn de puestos de trabajo, sino que se propusieron
también reconstruir una institucionalidad laboral que habia sido des
montada en los noventa, reinstaurando la vigencia de los convenios co-
lectivos de trabajo y tendiendo hacia la homogeneizacién salarial. En
fen 2004 se homologaron 348 convenios que representaban a
‘para 2007 tales cifras n elevado a
los asalariados peores pagos (el mejor ejemplo de ello es que el salario
rminimo se incrementara muy por encima del salario medio), lo que con-
teibuyé al achatamiento de la pirdmide salaral. Algo similar ocurriria en
materia jubilatoria, ya que se favorecié mucho més a los haberes mini-
mos que a los medios.
La mayor ereacién de empleo, el aumento de la cobertura jubilatoria
yla mayor homogeneidad en salarios y ubilaciones implicaron una sig-
nificativa mejora en la dstribucién personal del ingreso: el coeficiente
de Gini cayé de 0,583 en 2002 a 0,468 en 2007.” Esta mejora, de casi
¢1 18%, fue la més elevada de América Latina durante ese periodo."*
‘A modo de comparacién, en 1998 el coeficiente de Gini habia sido de
0,501 (grafico 3.2).
fio de Trabajo, fuente no cuestonada,
18 Calcul propio sobre la base de datos del Centro de Estudios Distbutivos
{aboraesy Sociales (Cea).108 LOS ANOS DEL KIRCHNERISMO
Grifico 3.1. Variacién del PBLy nivel del PBI y PBI industrial
(1998 = 100), 1998-2015,
Fuente: Elaboracin propia sobre datos del [adec. La variacin del PBI de
2002 es comparade contra 1998.
Un dato adicional es la fuerte recomposicién de los ingresos reales (y,
c en 1998. Ello tuvo dos consecuencias claras: por un lad
disminuy6 a pasos acelerados y pass del 57.5%
al 27,2% en 2007, cifra levemente mayor a la
En segundo lugar, en tanto los salarios s
Inaeidn de la canasa bases toa, encareciendola un 39% en relacicn con
‘medicion wadiciona einuoduciendo,respectn de ess, 12.8 puntos porcen
‘wales de pabres. Ete guarimo est expliciado en la nue metodologia p+
beads pore! Indee en noviembre de 4016, donde el organise seiala que
{en 2000 a pobreza, con ef neva método, habia sido del 4,95 en lugar det
29,15 sgn la medicin tradicional
LUN PROYECTO POLITICO CON ORJETIVOS ECONOMICOS 10g
Gréfico 3.2. Tasa de desocupacién, tasa de pobreza y
+ coeficiente de Gini, 1998-2015
LA
wT .
Fuente: Elaboracién propa sobre la base del Inde, el Ces yet Centro de
Informacion y Formacion de a Repiblica Argentina (Cita). Los dat
tficiente de Gini fueron tomados para el ingreso per cipita fam
terreno perdido con la devaluacién de
1 82,5% del PBI generado por
Que la dindmica de crecimiento -aunque con diferencias~ alcanzara a
todos los sectores y ramas de actividad fue otro de los rasgos distint-
vos del perfodo 2003-2007, La indus ylaconstruccién (175%)
ctecieron bien por encima de Ia medi * y se recuperaron de
de empresas y las exportaciones, que revirtié en parte el proceso de de-
sindustrializacién inaugurado a mediados de los afios setenta. La cons-
truccién, por su lado, sintié el gran impulso a la obra paiblica y, por el
vwuelco del efecto “riqueza” posdevaluacién de 2002, al mercado inmobi-
20 Datos del Indes.Gréfico 8.3. Inflacién y tipo de cambio real, 1998-2015
Fuente: Elsboracin propia sobre la bse del Indec, instieutos de estadisca
proviniales, BCRA y Comtrade.
liario, Las actividades comerciales y de logisti
ciones) también exhibieron un elevado creci
dinamismo de los transables y de las importaciones. Los 5
‘cuario y financiero evolucionaron por debajo de la medi
poco afectado por la recesién previa al colapso de la conver
segundo, uno de los claros ganadores de la década anterior.
El vertiginoso aumento de la actividad econémica trajo consigo un
incremento en los ingresos fiscal
‘empujé la recaudacién tributaria
de puestos de trabajo formales permi
dos de los aportes a la seguridad s
exportaciones gener6 una fuente adicion: 508 por el cobro de
retenciones y otros derechos. De este modo, los ingresos fiscales se incre-
mentaron un 84% en términos reales entre 2002 y 2007, y el resultado
financiero del Estado nacional pas6 del 0,9% del PBI en 2002 a prome-
iar 3,5% entre 2008 y 2006 (en 2007 fue del 0,6%)."
los ingresos deriva-
el dinamismo de las
‘2 Datos tomados de Ferreres (2010)
LUN PROYECTO POLITICO CON ORJETIVOS ECONOMICOS 111
A partir de 2007, un conjunto de variables econémicas comenzé a
‘mostrar un comportamiento diferente. Si bien la economia y el empleo
siguieron creciendo de manera significativa, ese inflacién salt6 ha-
cia el rango del 25% (grafico 3.3), disminuyendo el ritmo de recompo-
sici6n de los ingresos reales. La aceleracién de la inflacidn obedecié en
buena medida al resurgimiento del conflicto distibutivo-entre el trabajo
yeel capital; los salarios crecientes comieron parte de los extraordinarios
margenes unitarios con que la clase capitalista se beneficié de la forma
de salida de la crisis de la convertibilidad. A esto se sumé una dinamica
ascendente de los precios internacionales de las materias primas que, a
la par que twvo un impacto positivo sobre las cuentas externas, introdujo
precios domésticos.
una fuerte presin sobre
[EL SECTOR EXTERNO: EL, COMBUSTIBLE DEL CRECIMIENTO ACELERADO
Esta’ dindmica de crecimiento acelerada, y difundida se so-
‘tuvo favorecida por la situacién de bonanza en el frente externo.
Histéricamente, en la Argentina, los perfodos de fuerte crecimiento ha-
ban estado acompaiiados de déficits de la cuenta corriente, tal como
predon
iodo 2003-2007 fue que la economia crecié a tases superiores al 8%
anual con un superivit de cuenta corriente que promedié el 2,9% del
PBI (grafico 8.4). El leve déficit promedio de la cuenta capit
ais no leg6 a compensar el fuerte superdvit de la cuenta corriente, 1o
aque permitis una répida recomposicién de las reservas internacional
Gel BORA, que pasaron de poco menos de 9000 millones de délares en
Julio de 2002 a mas de 46 000 millones en diciembre de 2007,
Sila balanza comercial fue tan aiios, se debi6 funda-
> de las exportaciones, cabe tener
fen cuenta que, de haberse mantenido los términos de!
ritmo similar, pero los motores fueron diferentes. Las cantidades exporta-
das crecieron un $0%, en su mayoria por impulso de una economia inter-
nacional muy dindmica, con China a la cabeza y Brasil también en expan-Gréfico 3.4. Saldo de cuenta corriente como porcentaje del
PBI y cérminos del intercambio (1998 = 100), 1998-2015
8 y 2007 el tipo de cambio res
ble y relativamente depreciado (grafico 3.
y de una inflacién acumulada superior
‘en 2007. La raz6n prin
22 Eun
UN PROYECTO POLITICO CoN ORJETIVOS ECONOMICOS 113
de fuerte apreciacién de los tipos de cambio y de 1a entrada masiva de
capitales alentadas por las altas tasas de interés De hecho, en 2005 se
implementaron trabas al ingreso de capitales de corto plazo para evitar
Ia apreciacién real del peso. Segiin Bastian y Soihet (2012), Kirchner
creia que el tipo de cambio competitivo habia sido una de las claves de
la recuperacién econdmica en general y de la industrial en particular, y
abogé por la preservacién de dicha herramienta*
Lalicuaci6n del costo salarial producto de la devaluaci6n de 2002 sen-
16 las bases para una recuperacién del empleo que termin6 fortalecien-
do el poder de negociacién sindical y, con ello, el resurgimiento de la
puja distributiva, Esta pasaria a ser mas adelante, durante el segundo
periodo kirchnerista, un factor ineludible de Ia apreciaci6n cambiaria,
impulsando la disolucién de algunos de los ¢jes centrales del esquema
macroeconémico del primer periodo.
INTO ¥ NORMALIZACION FINANCIERA
financiera y la salida del defaul
‘entoncestular del BCRA, de introducir un equema de metas de inflaton,
‘como sugeria el FMI
124 Hay una fuerte controveria sobre a ifluencia del tipo de cambio en el
concn de un dpe de cambio depreiadoy la leuacion dels pasivos
empresas.114 LOS ANOS DEL KIRCHNERISMO
argentina. La
i6 su posicién, al
absorcién y eliminacién de las cuasimonedas
chner-Lavagna y Prat Gay se
imo en septiembre de 2004
yu reemplazo por Martin Redrado, de fluidos vinculos con el sector
financiero,
Como resultado de tas negociaciones emprendidas, en febrero de
2005 la oferta argentina fue aceptada por el 76% de los bonistas."* De
inmediato, el riesgo soberano argentino cayé de 6700 puntos a menos
de 800,® nivel que no se registraba desde principios de 2001. Para fines
‘de 2006, el riesgo ya estaba en torno a los 100 puntos basicos, el més bajo
de la historia, lo que demostraba el cambio de la situacidn financiera. En
enero de 2006, pocos meses después del canje de 2005 ~y ya sin Lavagna
en la conduccién econémica-, Kirchner ordené cancelar la deuda con
‘el FMI con un pago anticipado de 9530 millones de délares. Si bien las
reservas del BCRA cayeron de poco mis de 29 000 de dotares
2 19 500 millones en un solo dia, para septiembre se habia vuelto alos,
niveles de enero.”
Tras la renegociacién y el canje de deuda piiblica realizado en 2008, et
‘endeudamiento externo se redujo de manera sustantiva y pasé de repre-
sentar el 129% del PBI en 2003 al 48% en 2007. El desendeudamiento
tuvo un papel estratégico en el disefio de la economia kirchnerista y fue
tuno de los pilares fundamentales de la gestién; se liberaron recursos
para ejecutar y financiar yy se evité la condicionalidad
de los organismos mul por lo que se ganaron con-
siderables grados de libertad y mayor autonomia en las decisiones de
politica econémica.
tgaria a1 93% en 2010, cxando wine una nueva ronda
onde a deacon os qu se alan esi para
cla de uzun tx ves inpoxiat oinapacindo de
Eumplr con ss abligaionesnancieracon alpn agente extra
tea, wae por emp,
UN PROYECTO POLITICO CON ORJETIVOS ECONOMICOS
[EL SEGUNDO GOBIERNO KIRCHNERISTA (2007-2011):
DDE LA CRISIS CON EL AGRO ¥ LA RECESION INTERNACIONAL,
A UNA RAPIDA RECUPERACION
Cuando Cristina Fernandez de Kirchner se impuso en primera vuelta
con el 46% de los votos en las elecciones de octubre de 2007, la econo
mia argentina seguia expandiéndose por encima del 8% anual y mos-
traba una fisonomia absolutamente diferente a la de mayo de 2008, La~
agenda inicial del gobierno de Néstor Kirchner se habia resuelto exito-
ssamente, pero ya eran evidentes otros desafios. E] mas notorio de el
El gobiemo nunca reconocié de forma abierta Ia stuacién de la
idn, intervino el Indec en enero de 2007 y op
estadisticas de precios. La problemstica de la inflacién mareé deci
mente la agenda politica de los primeros meses del gobierno de Cristina
Fernéndez de Kirchner y derivé en el severo conflicto entre el gobierno
yel sector agropecuario, desatado en marzo de 2008, La disputa con el
agro marcaria un parteaguas en los afios kirchneristas y abrirfa paso a un
clima de creciente conflictividad politica interna que tuvo consecuencias
sobre la gestién econémica.
Por otra parte, la agenda gubernamental comenzs a considerar pro-
bblemas del desarrollo productive. Durante la presidencia de Néstor
Kirchner, el én recuperacion de mérgenes de m:
el nuevo régimen macroec
permitié una notoria recomposici6n del aparato productivo, aunque sin
transformarlo sustantivamente. Los procesos de sustitucién de importa-