IIL. El yo y ef superyé (ideal del yo) Si el yo focra silo Ia parte def ello meaificads por cl influ del sister: percepeién, el subrogado del mendo ex terior real en lo. animico, estarfamos frente a un estado Ge cosas simple. Pero se area algo mis. n ottos textos Se expusieton los motivos que nos movie ron a suponer la existencia de un grado (Stufes ambin, ‘estadion) en el interior del yo, una dilerencagién denteo Ge dl, que ha de llamarse idea.3o" 0 supersé.* Elos con- srvan su vigenca,* Que esta pieza del yo maniene un incilo: menos firme con Ia conciencia, he ahi Ia novedad cg ie clan, j ; of tencinos gue sbarear un terreno algo més ampli, Hablamos logtado scarcer dl sfrimieno dolore de Te nnelancolla mediante el supuesto de que un objeto perdide ‘© vuelve a crigir en ef yo, vale decir, una invest dura de clsjeto es relevada por una identiicacién.® En aquel momen- {5, empero, no cohociamos toda la signifietvidad de este proceso y no sablamos ni cun frecoente ni cin tipo es Desde emtonces hemos cemprendido que tal sustituton par- ticipa en considerable medida en Ia conformacién del yo, y © din ln ol ty lie op Sg oer seta tty 7 RSs ee a ce Seer yo el ap Hoeaeaee wre Bias eae Piper a tae af 20 contribuye esencslmente, a producit Jo que se denomina su cardcter.* Al'comien2o de todo, en la fase primitiva oral de inglvi duo, es por completo imposible distinguir entee invstidura de objeto e identficacidn.” Mis tarde, lo unico que puede suponerse es que ls investidutas de objeto parten del ello, ‘gue siente las aspraciones erties como necesiddes. El yo, toalavia endeble al principio, recibe novicia de las investi ras de objeto, es presta su aquigscencia 0 busea delenderse de ellas mediante el proceso de la represion.* Si un tal objeto sexual es resigoado, porque parece que debe serlo 0 porque no hay otro remedio, no es Haeo que 4 cambio sobrevenga la alteracién del yo que ¢s preciso escribir como etzccén del objeto en el yo, lo mismo que een la melancolia; todavia no nos resultan familiares las cunstancas de esta sustitucién. Quizis el yo, mediante esta introyeccion que es una suerte de regresién al mecanismo de la fase ors facile o posbilite la resignacidn de. objeto. ‘Quiads esta idntiicacén sea en general la condicién bajo la ual el ello resigna sus objetos. Comoquiera que fucse, es teste un proceso muy frecucnte, sobre todo en fases tempra: nas del desarrollo, ¥ puede dar lugar a esta concepcisn: ef carer del yo es una sedimentacién de las iavestiduras de objeto resignadas, conticne la historia de estas eleccio- nes de objeto, Desde luego, de entrada es preciso atribuir una escila de 'a eapacidad de resistencia {Resistenz) la medida en que elcardcter de una persona adopta estos influ jes provenientes de Ia historia de las elecciones eréticas de ‘Abjcto 0 se defiende de ellos. Fn los rasgos de caricter ide mujeres que han tenido muchas experiencias anorosas, tuno cree poder pesquisa fécilmente los saldos de sos inv tiloras de objeto. También eabe considerar una simultane dad de investidura de objeto ¢ identiieaciin, vale deci, una alteracién del earécter antes que el objeto haya sito resig- 1 fo nny pil a, [Er lata fe mp ay ALM, ip | ee EF le cea Bion tats ny ta Basin ta sable ous ancl consis ieee Pie ates aoe a Bios SLD BaR OR, BS ee a a esrado. En este cao, Ia alteracién del carter podkia sobre: ‘vie al vinulo de cbjeto,y conservarlo en cierto sentido Ouro punto de vista enuncia que esta trasposicion de una dleccin erdtica de objeto en una slteracin del yo es, ade ‘nis, un camino que permite al yo domsinar al ello 5 ofan. dinar sus vinculos con el ello, aunque, por cceta. costa dle una gran dociidad hacia sus vivencias. Cuando el yo ‘obra lo rasgos del objeto, por asi decir se impone dl misme Al ello camo obfto de amor, busca repacile. su pda dicigndole: «Mirs, puedes amarme tambicn a my; Soy tan azecido al objet.» ‘ba trasposicin as cumplida de libido de objeto en libido rarcsista coplleva, manifiestamente, ua resignacién de las tetas sextiles, una desexualizacin y, por tanto, una suerte de sublimacién. Mas ain: aqui se plantea una cuestin que Ineroce ser uatada a fondo: 2No es este el camino universal Jaci le sublimaciin? ¢No se cumpliea toda sublieién por In medicién del yo, que primero muda la libido de objeto en libido narcisisa, pata: después, acoso, ponesle {serzen) ‘tea meta?” Més adelante hemos de ooupaenos de averiguac 3.5 odio oo pole ter come come oe stinos de pulsiéa: prodicr, por ejemplo, una desmercla de has diferentes pusiones fusionadas ent si.” ‘Constituye una digresin respecto de nuestra met, si bien una digesion inevitable, que fijemos por un momento nues tea atencién en las identficaiones-objeto del vo. Si estas redominan, se ynelven demasiado numetosas ¢ hiperinten: S15, € inconciliabks entte si, amenaza un resutade patolé sico, Puede sobrevenie una fragmentacién del yo si Tas di ‘ersisidentificaiones se segregan unas a otras mediante re sistencis; tal ver el secreto de los casos de la Tlamada ersonclidad maliple resida en que las ientiicaiones si pulatesatracn hacia si, alternativemente, la concienia. Pero aun si no se lege tan lejos, se plantea ef tema de los con- Fictos entre las ciferentes identfieciones en que el vo s¢ separa, conflictos que, después de todo, no pueden calif cars enteramente de patolipicos + ora, Iuego de ta separacdn ente el yo y el elo, seme cone aslo camo cl grin teservoro de 1s libido en el sentido de Sinroduci et nacismoy (1914) TAE. 14, por 7231 La bdo {gue ative al 0 2 aver de las dentition desert. proce Bedi recndrn ie pants vets mis dle Sp pe Saale al tema de ee pra ina, pigs 46 y 58, El cgnceto de mesa y ames de fs pulsonesse expla er as, ‘SS""Ehon imino a hablan sido Inuogocder en umd ts ‘Bax antelos de evcklopedine (1923s), AE. AW. pg 233.) Ahora bien, cemoquiera que se plasme después la resis- tencia (Resistenz| del caréctr frente a los influjos de inves tiduras de objeto resignadas, los efectos de las primeras identificaciones, las producidgs a la edad més temprana, serin universales y duraderos. Esto nos reconduce a la. g& resis del ideal de! yo, pues tras este te esconde la identifi- ceciGa primera, y de mayor valencia, del individuo: la cid con el padre® de la prehistoria personal. A vista, no parece el resultado ni el desenlace de una investi dara’ de objeto: es una identifiacion directa € inmediata {a0 mediada), y més temprana que cualquier investidura de objeto." Empero, las clecciones de objeto que corres: ponden a los prineres periodos sexuales y ataiien a padre ‘y madre parecen tener su desenlace, si el ciclo es normal; en luna identificacién de esa clase, reforzanda de ese modo la identifiescién primatia, Y bien; estos rexos son tan complejos que requicren set descritos mais a fondo. Dos factores son los culpables de esta ‘cemplicacin: la disposicién triangular de la constelacién det Edipo, y la bisexsalidad constivucional del individuo. EI caso del nto. varén, simplificado, se plasma de la siguiente manera. En época tempranisima desarrolla una investidura de objeto hacia 1a madre, que tiene sx punto de arrangue en e! pecho materno y muestra el ejemplo ar uetipico de una cleccidn de objeto seqtin cl tipo del apun- talamiento {anacltico |; del padte, el varoncito se apodera por identificacién. Ambos vineulos marchan wn tiempo uno junto al otro, hasta que por el refuerzo de los desecs sexua- Jes hacia la madre, y por la percepcisn de que el padte es un obstdculo para estos descos, nace el complejo de Fdipo."* La identificacin-padee cobra ahora una tonalidad host, se trueca en el deseo de eliminar al padre pars sustituiso junto ala madre. A partir de ahi, 1a relacin con el padre 25 ambi valente; parece como si hubicra devenido manifiesta Ia am- oie Sn tc ee See Lick fee crhc mata Sree i Saat Pepe pee Stage e Se's Roe SLen a areca se Te SEB ee To (Ce Psicologia de la mayer (1924), AE, 1B, pig. 99.) 1 [CE fewaducsién ll narcisismon (i914e), AE, 48, pis. 84 y sigs] WP Paiclogia de tat esas (19212, le et %bivalencia contenida en Ta identificacin desde el comicnzo rismo, La actitud (postuza} ambivalente hacia el padte, y In aspiracin de objeto exclosivamente ticrna hacia la madre, ‘czacterizan, para el varoncito, el contenido del complejo de Edipo simple, postiv. Gon la demolicidn del complejo de Edipo tiene que ser resignada la investidura de objeto de la made. Pucde tenet dos diversos remplaros: 0 bien una identificacion eon la madre, 0 un reluer2o de la identificacionpadee. Solemos considetar este iltimo desenlace como el mis notmal; per nite retener en cierta medida el vineulo tierno con fa madre. De tal modo, la masculinidad experimentaria na refer i. en al cinder del varén por bra del sepltaminto lel complejo de Edipo.™ Andlogamente,"* la atitud edipica de la ninita puede desembocar en un refuerzo de su identi- ficacién-madre (0 en el establecimiento de esa identifica iin), que afirme su caricter femenino. Estas identificaciones no responden a nuestra expectativ Le. pig. 311, pues no introducen en et yo al objeto resig nido, aungue este desenlace también se produce y es més Imente observable en la nia que en el vardn, Mu menudo averiguamos por el andlisis que la nia pequena, después que se vio obligada a renunciat al padre como obje to de amor, retoma y destaca su rasculinidad y se identi fica no con fa madre, sino con el padre, estos, con el objeto perdido, Ello depende, manifiestamente, de que sus dispo- ones masculinas (no importa en qué consistan estas) pO- sean la intensidad suficiente La salida y el desenlace de ta siruacién del Edipo en identficacionpadre 0 identficacidn-madte parece dependet jonces, en ambos sexos, de Ia intensidad rclativa de las dos disposiciones sexuales. Este es uno de los modos en. que In bisexualidad interviene en los destinos del complejo. de Ealpo. El otro es todavia més signficativo, a saber: uno ‘ene in impresién de gu el complejo de Epo simple no es. en modo alguno, el mis frecuente, sino Que cortespor 41 una simplificacin o esquematizacién que, por lo demés, @ inna esti stinremente oa pit, Uo nda fcign mis a fondo pone en descubierto, las més de las veces, el complejo de Edipo mas completo, que es uno dup: * (Wee taj del iy ilo 19244, a, 177» sige, donde = examins la evestén con mis detalle [No mucho tiempo despues, Feud abandons la idea de que en lag mia y Ton tarones cl compejg de Ealpo tenia andoga resolu lan. Ch. Alganssconsecucnlas palquss de In dilerencia anatomic nie oy extse (1925), fa, as. 267 ¥ lg.) 34 (19726) (AF, 18. pix. 225). " . ”duos que se siguen unos a otros generacionalmente, se tras pponen, por asi decir en vivencas del ello, cuyas impresiones {improntas} son eonservadas por herencia. De ese modo, ef clo hereditario alberga en su interior los restos de ianume: ‘ables existenciaso, y cuando el yo extrac del ello {la fuerza para) su superys, quizé no haga sino sacar de nuevo a la Je figuras, plasmaciones yoicas mis antiguas, procurares a historia genética del superyS permite comprender que cznilicios anteriores del yo con las investidoras de objeto del ello puedan continuarse en conflictos con su heredero, el superyé, Si el yo no logr6 dominar bien el complejo de Edipo a investidura energetic de est, proveniente del ell, rexomaré su acc elias en la formacion reactiva del ideal del yo. La amplia comunicacién de este ideal con esas mocio: nes pulsionles ie esalverd el enigma de que el deal mismo pueda permanccer en gran parte inconciente inaccesible al ye. La lucha que se habia ibrado con furia en estratos mis profundos,y que no se habia decdido mediante una subi rmicién v una identifieacion stbitas, se prosigue ahora en Lisa regia mis alta, como le batalla contra los bunos en el emdro de Kaulbach 2 [La llamada comsinmente «Batalla de Chilons, det afo 431, «0 que Alf dertotada por los romance ¥ vines. Es ell {BSG Within wom Kaulbach (1803-1874) paca uno deus murals el Nuevo Masco de Bevin, el cual ae Pepreentaa a os gucreeos ‘muettorsontiovando Is lucha en el clo por encima del impo se Uihalla, sepia. una leyenda que se fomoata'a Damasoan, Hesofo rexplaiieo del siglo 8 40