You are on page 1of 20
Dexpnés de trea horas do lucha horoien nuestros va lorosos marinog habfan aprosado 10 buques ronlistag con 70 oficialos y 860 soldndos y eehado uno a pique, mion tras Laborde con lo rostante de su flola hufa apresurnda mente para Cuba. Valenciae Go “Barquisimoto /Carabobo Fin de ta Guerra de la Independencia en Venezuela —- Ands de 1822-1823 106. Capitulacién de Morales. — Rendicién de Maracaibo. Morales, encerrado en Maracaibo, acosado por tierra por las tropas de Francisco Esteban Gémez, venidas de Rio Hacha, y perdidas las esperanzas que cifra- ra en su poderosa escuadra, firmé con Padilla y Manrique, la capitula- cién del 3 @e agosto de 1823, por la cual, en su calidad de. Capitin Ge- neral de Costa Firme, entregaba a Colombia el resto de su flota, la ciudad de Maracaibo, el Castillo de San Carlos y la Plaza de Puerto Cabello. Tratado noblemente por los pa- triotas, Morales recibié 5.000 pesos Morales para gastos de viaje y el 15 de agosto salié para Cuba. 120 El triunfo de Maracaibo sellé en eiorto modo la In dopendoncia do Vonozuela y ol Libertador pndo diasponer de todos los recursos de Colombia para las operaciones del Sur, Spraca aan = ent “ote K2¢de mayo. 2 eysitro PERU ° La Paz 107. Toma de Puerto Cabello. eda, Sobernador militar de Puerto Cabello, no iso reconocer I, eanitulacién de Maracaibo y se nego ciudad logré aduefiarse de ella, gracias a un singular mo. yimiento estratégico. Por Ia noche del 7 al 8 de noviembre de 1823, 50 hombres guiados por cl Sargento Manuel Cala, con agua hasta la cintura, atravesaron cl manglar que se encuen- tra al este de la ciudad y sin ser vistos, penctraron en la poblacién, que ocuparon tras corto lidiar. Dos dias después Calzada entregaba la fortaleza de San Felipe. Con esta entrega los espafioles perdian el Yillimo palmo de territorio que ocupaban en Venezuela, CapiruLo XXXII 108. Campafia del Perd. — Batalla de Junin y de Ayacucho. El Libertador.comprendié que para consolidar la li- bertad de la Republica era preciso acabar con los realis- tas del Pert, que podian en cualquier momento reaccio- nar contra Colombia. Por este motivo cuando los patriotas peruanos fue- ron derrotados por los realistas en Toraté y Moquegua e imploraron su auxilio en enero de 1823, el Libertador mandé 6.000 hombres de tropa al Pert y salié personal- mente a dirigir las operaciones. Fué recibido en Lima en medio de las aclamaciones del pueblo (1° de setiembre de 1823), 109. Junin. A pesar de la divisién de los patriotas peruanos y de la pérdida del Callao y de Lima, Bolivar con una habili- dad extremada, logré dominar la situacién. Después de equipar y organizar el ejército en el Norte del Pert, com- puesto de 7.700 combatientes, de los cuales 900 eran de caballeria, se puso en marcha en busca del enemigo acan- tonado en el Alto Perdé. Por caminos intransitables, sal- vando precipicios y venciendo obstdculos sin nimero, atra- ves6 la formidable altura de Pasco. 122 El General Canterac, al saber el avance de Bolivar salié a su escuentro y en la pampa de Junin, al sur de la laguna del mismo nombre, al cacr de la tarde del 6 do agosto de 1824, la caballeria patriota, que se habfa ade. lantado a la infanteria, entré en batalla con la caballeria realista; la derroté y puso en fuga. La batalla de Junin fué un combate silencioso, un duelo a arma blanca y duré algo mds de media hora; 340 muertos y 80 prisioneros quedaron en el campo de bata- lla. Escarmentado con esta derrota Canterac se retiré para Cuzco. 110. Batalla de Ayacucho (9 de Diciembre de 1824). Poco después de la batalla de Junin, el Libertador pa- _ 86a Lima para preparar nuevos contingentes y entregé el ejército a Sucre, que se adelanté hasta las cercanfas de Quzco, cuartel genéral de los realistas. El virrey La Serna reconcen- tr6 12.000 soldados bien discipli- nados y apertrechados y avanz6 contra Sucre. Este joven e inte- ligente General, que sélo dispo- nia de un ejército de 6.000 hom- bres, por medio de una retirada estratégica y de maniobras ha- bilmente dirigidas, atrajo a La Serna a una posicién favorable para batirlo. Las fuerzas patriotas a las érdenes de Sucre y formadas por tres divisiones, al mando de los expertos generales José Maria Cérdoba, La Mar y Jacin- to Lara, tomaron ventajosa posicién en la altura de Qui- nua; y los realistas ocuparon el cerro de Condorcunca. En la pequefia sabana de Ayacucho, situada entre ambos cerros, se libré la batalla. Los realistas lograron ventaja sobre nuestra izquier- da; pero el héroe de la jornada fué el General José Maria Cérdoba: al frente de sus tropas se baja del fogoso corcel General José Maria Cérdoba 123 que monta, de un tiro de pistola lo mata delante de sus soldados, exclamando: ‘‘No quiero medios para escapar, tan sélo me queda la espada para pelear’’ y con toda la energia de su alma de héroe da a sus batallones la orden siguiente: ‘‘;Soldados! Armas a discrecién y paso de ven- cedores”’. La divisién Cérdoba se precipité entonces sobre el centro realista, lo hunde y desbanda; la victoria esté ganada. La capitulacién de Ayacucho (Copia de A, Herrera Toro, dol original de Tovar y Tovar) El virrey cayé prisionero, asi como también muchos oficiales y 3.500 soldados. En el campo de batalla queda- ron 1.800 heridos y 700 muertos. Nuestras pérdidas eran de 920 bajas entre muertos y heridos. El ejército realista del Peri quedaba completamente destruido (9 de diciem- bre de 1824). Con este triunfo la: independencia del Pera y de América estaba asegurada. Suere ofrecié a los vencidos una capitulacién, por la cual debian entregar el resto del ejército del Pert con sus almacenes y parques. Los espafioles podian regresar a la Peninsula, pagandoseles el pasaje, o bien quedarse en el pafs. El Congreso del Peri dié al Libertador el titulo de 124 Padre y Salvador del Perti y a Sucre el de Gran Mariscal de Ayacucho. En testimonio de su gratitud, puso a disposicién del Libertador la cantidad de dos millones de pesos: uno pa- ra él y otro para sus soldados. Bolivar acepté el millén para sus soldados, pero no quiso nada para él. 111. Creacién de Bolivia. Después de Ayacucho, Sucre siguié hacia el Alto Pera. Los realistas entregaron las armas, menos Olaiieta; pero al fin vencido y muerto éste en un combate, el pais quedé libre. Suere convocé inmediatamente una asamblea para que las provincias del Alto Pera decidieran su suerte. Los diputados de dichas provincias se reunieron en Chuqui- saca el 6 de agosto de 1825, aniversario de Junin, y pro- damaron la soberania del Alto Perd, con el nombre de Repiblica de Bolivia. Encargado de redactar la constitucién de la nueva ro- publica, el Libertador escribié entonces la célebre ‘‘Consti- tucién Boliviana'', que fué aprobada por el Congreso del pafs. Sucre resulté electo Presidente Vitalicio, pero acept6 la presidencia por dos aos solamente. 112. Antonio José de Sucre. — Rasgos biograficos. El General Antonio José de Sucre nacié en Cumani el 3 de febrero de 1795; era descendiente de una noble familia oriunda del Norte de Francia. Fueron sus padres el Coronel Vicente de Sucre y Doiia Maria Manuela Alcala. Recibié sn primera educacién en Caracas, donde se inicié en el estudio de las Matemiticas para dedicarse a la ingenieria. Apenas principiadas las guerras de la independencia, se alisté en las filas patriotas; fué uno de los Libertadores 125 Seer do Oriento y oficial del Mstado Mayor del ejéreito de aquolla rogién, Comisionado por ol Libertador, en 1820, negociéd en Jas Antillas armas y municiones para ol equipo de nues- tras tropas; poco después recibié el importantisimo car- go de Jefe dol Hstado Mayor del Wjército Libertador, y en esta calidad negocié el Armisticio y Ja Regularizacién de Ja guorra. . En calidad de General on Jefe del ejército del Beua- dor, obtuvo el gran triunfo de Pichincha; y como Jefe Supremo del] Ejército del Pert, maniobré con tanto acier- to que, con pocas fuerzas y menguados recursos, gané la batalla de Ayacucho, la mas brillante Victoria que vieran Jos hijos del continente americano. Influyé mucho en la creacién de Bolivia, cuya presidencia ejercié durante dos ailos. . Invadida Colombia por el Pert, Sucre alcanzé en Tarqui un espléndido triunfo sobre los invasores. En Quito contrajo matrimonio con la Marquesa de So- landa y en la capital del Ecuador aspiraba a vivir tran- quilo, retirado de la-vida publica, cuando fué alevosamen- te asesinado en la selva de Berruecos, el 4 de junio de 1830, a los 35 afios de edad. Sus restos reposan en la ca- tedral de Quito. Cariruto XXXIIT 113. Tendencias separatistas en 1826. Mientras el Libertador estaba en el Pert, Venezuela estuvo a punto de separarse de la Gran Colombia. El hecho sucedié de la siguiente manera: Paéez que habia recibido érdenes del gobierno central de Colombia de alistar tropas, convocé a todos los’ ciudadanos de Cara- cas, en el convento de San Francisco, pero al ver que la concurrencia era poca, destacé patrullas armadas por to- da la ciudad para llevar a viva fuerza a todos los hom- bres. De esta suerte muchos ciudadanos fueron vejados. Como el Intendente Escalona y el Concejo Municipal de Caracas se quejasen de este atropello, Paez fué Namado 126 go, los envid uma delogacién compuesta de Martin Tovar, Santingo Marifio y del Dr. Ignacio Mornfindes Pefia, pero después do conferencias intililes ambas comisiones regre- saron a sus capitales, Poco después, ol 6 de mayo de 1830, el Congreso do Venezno- la compuesto do 33 diputados, 80 reunfa en Valencia y confirmaba Ja separacién de Venezuola de Colombia; conferfa a Pfez ol ear- go de Jefo Supremo, pedfa In ex- pulsién del Libortador y elabo- raba la Constitucién que debia regir a Venezuela. Juan José Flores, jefe del Ecuador, imit6é el ejemplo de Paez, pero, mas adicto que éste al Libertador, esperé que Bolivar se separara de Colombia para convocar los pueblos del Ecuador a elecciones y el 10 de agosto de 1830 el Congreso proclamé la Republica del Ecuador y su separacién de Colombia. EI congreso ecuatoriano lejos de imitar al de Vene- zuela, que pedia la expulsién de Bolivar, votaba los-ma- yores honores a su grata memoria. General Juan José Flores : Capiruto XXXIV 115. Asesinato del General Sucre (4 de Junio de 1830). Al regreso de su misién a Venezuela, el General Sucre dispuso irse de Bogota para Quito, para vivir con su espo- sa y para dedicarse a las apacibles faenas agricolas, lejos de los afanes de la vida publica; pero los enemigos del Libertador que se regocijaban de su separacién del gobier- no y de su salida, resolvieron en sus concilidbulos dar muerte al Gran Mariscal de Ayacucho, que consideraban como unico obstaculo a las ambiciones de su partido. Sucre seguia camino de Quito por la via Pasto-Po- payan cuando el General José Maria Obando, jefe militar de las fuerzas de aquellas plazas, en connivencia con 10s soplombristns de Bogoti, comision6 a Apolinar Moritle para quo lo asesinara a an paso por aquolla regién, Por Ia mafiana del 4 de junio de 1830, Hnere atrave saba la selva de Berruecos, sifuada a unos 60 kilémetrog al Norte de Pasto, en compafifa de Gareia Tréllez dipn. tado de Cuenen, y do los asistentes Lorenzo Caicedo y Francisco Colmenares. Al cruzar una parte pantanosa y cerrada de la selva, tres bandidos, eapitaneados por Apo- linar Morillo y pagados por Obando, dispararon sus ar- mas contra cl Mariseal, quien al instante cayé muerto, con dos heridas en la eabeza y un balazo en el corazén. Su cadaver fué sepultado por Caicedo al pie de un Arbol; y poco después, por disposicién de la viuda, Dofa Ma- riana Carcelén, Marquesa de Solanda, sus restos fueron Nevados al Ecuador. Hoy dia reposan en hermoso mau- soleo en la catedral de Quito. 116. Muerte del Libertador Simén Bolivar (17 de Diciembre de 1830). El Libertador, habiendo entregado el mando del go- bierno de Colombia,-en mayo de 1830, salié de Bogota rumbo hacia Cartagena para irse al exterior; pero la fal- ta de recursos y sobre todo la enfermedad que lo minaba, la tuberculosis pulmonar, no le permitieron realizar su proyecto. De Cartagena pas6é a Barran- quilla y de allf fué conducido por mar a Santa Marta y al llegar a esta ciudad era ya tal su estado de salud, que fué preciso cargar- lo en silla de mano desde el bu- que hasta la casa. El célebre médico francés Ale- jandro Préspero Révérend, le prodigé ‘sus cuidados y traté de conjurar el mal que lo agobiaba; pero todo fué en vano. El Libertador, mas que de su en- fermedad corporal, padecfa moralmente al contemplar la desmembracién de Colombia, su obra dilecta, y al ver la 129 Dr, Alejandro P. Révérend ingratitud de sus coneiudadanos, para quienes to habia wy crificado todo. La noticia do Ja muerte tragica de Suere acrocenté también su pena. Kl dia 6 do diciembre fué trasladado a Ja quinta de San Pedro Alejandrino, a 5 kilémetros de Santa Marta, propiedad de un buen espafiol, Don Joaquin de Mier, que gencrosamente Jo brindé hospitalidad. Allf recibié la visita de algunos amigos, en especias de los Generales José Sarda, Laurencio Silva y Mariano Montilla, y la del Doctor J. M. Wsteves, obispo de Santa Marta, quien le dispuso a recibir los Santos Sacramentos, Por la tarde del 10 de diciembre el Libertador se confess con el sefior Obispo y por la noche del mismo dia recibié el vidtico que le fué traido del vecino pueblo de Mamatoco. Después de este acto supremo de religién, Bolivar otorgé su testamento y dicté sus tltimas voluntades, y también su tltima proclama en la que decia: ‘*; Colombia- nos! Habéis presenciado mis esfuerzos para plantear la libertad... He trabajado con desinterés abandonando mi fortuna y atin mi tranquilidad... He sidd victima de mis perseguidores, que me han conducido a las puertas del sepulcro. Yo los perdono... ““Colombianos! Mis iltimos votos son por la felici- dad de la Patria. Si mi muerte contribuye para que ce- sen los partidos y se consolide la unién, yo bajaré tran- quilo al sepulcro”’. Pasaron todavia unos dias de grandes sufrimientos; y el 17 de diciembre, a la una y siete minutos de la tarde, expiraba el Libertador, a la edad de 47 afios. Su cadéver embalsamado por Révérend, durante tres dias quedé expuesto en capilla ardiente y fué depositado en uha béveda en la catedral de Santa Marta. En acata- miento a su Ultima voluntad, en 1842 sus restos fueron trasladados solemnemente a Caracas. Hoy dia reposan en el Panteén Nacional, donde son objeto de la venera- cién universal de los pueblos. 130 LA REPUBLICA Cariturs 1 117, La Republica desde 1830. La Repiblica de Venezuela desde 1830, aio de su se- paracién de la Gran Colombia, hasta nuestros dias, se divide en dos grandes perfodos, el de los Gobiernos Cen- trales y el de los Gobiernos Federales. Los Gobiernos centrales de Venezuela, Hamados asi porque el Presidente centralizaba el poder, es decir, nom- praba directamente los gobernadores de las provincias, rigieron a Venezuela desde 1831 hasta 1858. El Presiden- te duraba 4 afios en el poder y no podia ser reelecto para cl periodo inmediato. Desde 1858 hasta 1863 la Republica atravesé el perio- do de la gran guerra civil, lamada de los Cinco Afos; los gobiernos instables que se sucedicron en el poder du- rante este tiempo fueron los de Julidn Castro, Pedro Gual, de Manuel Felipe de Tovar, Pedro Gual (2da. vez) y la Dictadura de Paez. Los gobiernos federales son Namados asi porque et ellos el poder no se centraliza, sino que habiendo sido la Rer ablica en 1864 dividida en Estados federales autono- mos, cada uno tiene el derecho de hacer sus leyes particu- lares y de elegir sus Presidentes. . a Tos gobiernos federales han regido al pais de 1864 hasta el presente. 133 Cariiene I 118. Gobiernos Centrales, Los gobiernos centrales de Venezuela fueron; Vo Primera Presidencia de Paez (1831-1835). —Sosé Tadeo Monagas se alz6 en el Oriente por no querer reen nocer In separacién de Venezuela de Colombia; pero, al saber Ja minerte del Libertador, hizo paces con Pfez. tin 1882, Colombia reconocié la soberanfa de Venezuela. 2 Presidencia del Dr, José Maria Vargas (1835-1836). . -- A poco de estar en el poder, estallé la Revoluci6n Reformista, encabezada por Santiago Marifio. Pedro Carujo apresé al Doctor Vargas y le dijo: ‘‘Doctor Var- gas, el mundo es de los valien- tes’’, y el presidente le contesté: “Bl mundo es del hombre justo’, y se negé a abdicar el mando. Lo expulsaron junto con el vicepre-’ sidente. Péez tomé las armas contra los revolucionarios y los vencié. . x, pero a poco dimitié. aes Fué electo presidente interino, ais, el general José M. Carrefio goberné hasta. su “Tegada. Durante el interinato de Carrefio, Paez con 60 hom- bres derroté a Farfan que tenia 1.000 hombres y que obe- decia una orden de Santiago Marifio que estaba en las Antillas. Esta jornada merecié a Paez el popular cali- ficativo de ‘‘Leén de Payara’’. 4" Segunda Presidencia de Pdez (1839-1843). — Du- rante este gobierno se acentué la divisién entre los dos partidos politicos Ilamados: liberal y conservador; se hizo con Colombia la divisi6n de la deuda de la independen- cia y a Venezuela le tocé pagar més de 7 millones de 134 ' + pesos. hin 1K42 fueron trafdos a Caracas con gran aolem nidad los restos del Libertador. 6° = Presidencia del General Carlos Soublette (1842-1847), - Durante este gobierno Kispafia re- conoeid la independencia de Ve nezuecla por el {ratado de Madrid; yse cred cl Montepio Militar, que era wn auxilio monetario para Jas viudas, hijos y madres de Jos militares muertos por Ja Patria. 6 Primera Presidencia del Gral, José Tadeo Monagas (1847- 1851). — Monagas apoyado por Soubietse Paez fué electo Presidente, pero a poco goberné por su propia cuenta. A punto de ser en- juiciado por el Congreso Nacional, el 24 de enero de 1948; sus partidarios disolvieron el Congreso por las armas, matando a varios diputados. P&ez se alzé entonces contra Monagas, para vengar el atropello contra el Con- greso, pero fracasé, fué hecho prisionero en Macapo, (Est. Gudrico) y luego expulsado del pais. 7 Gobierno de José Grego- rio Monagas (1851-1855). — Her- mano del anterior, dié la liber- , tad a los 40.000 esclavos que habia en Venezuela, pagando una indemnizacién a los amos. 8°’ Segunda Presidencia de José Tadeo Monagas, (1855-1858).—En este tiempo hubo la terrible epidemia del célera, que causé muchos estragos en Venezuela. Co- mo José Tadeo hiciera revisar la Constitucién para poder seguir en el poder, una revolucién encabezada por Julién Castro le obligé a dimitir y a encerrarse en la Legacién Francesa. General José Tadeo Monagas 135 CaviruLo ILL 119. Gobiernos Federales. Los gobiernos federales de Venezucla han sido los siguientes: 1’ Juan C. Falcén (1863-1868).—Goberné el pais en el desorden social causado por varias sublevaciones pro- vinciales. 2° Gobierno de los Azules.—En 1868 el partido azul, llamado asi por el color de su divisa, formado de oligar- cas y liberales, encabezado por el viejo José Tadeo Mo- nagas, triunfé de Faleén y goberné el pais por espacio de 2 aiios. José Ruperto Monagas, hijo de José Tadeo, asumié Ja presidencia de la Repiblica. 3° Gobierno de ,Guemdn Blanca (1870-1877).—Una nue- va sublevacién dirigida por Guz- man Blanco se apoderé del po- der; Guzman dominé las revo- luciones que quisieron arreba- tarle el mando. Fomenté la ins- truccién y merecié Ips aplau- sos de sus conciudadanos por el interés que tomé en promo- ver el adelanto material de Ve- nezuela; pero fué demasiado General Antonio Gusmén Blane? personal y autécrata en su ad- ministraci6n y se declaré en hicha abierta’ contra la Iglesia. 4° Los gobiernos de Francisco Linares Alcdntara y de José Gregorio Valera (1877-1879), fueron contrarios a Guzman. Pero la Revolucién Reivindicadora de Gregorio Cedefio, presidente de Carabobo, Ilamé a Guzman del extranjero y le entregé el mando. 5° Segundo Gobierno de Guemdn Blanco (1879-1884). —En 188] Guzmén hizo aprobar por las Caémaras una Constitucién, copiada sobre la de Suiza, que reducfa el 136 mimero do Katados a 9 y fijaba en dos afios al periods presidencial, 6 Los gobiernos de Joaquin Crespo, Guemdn Blow co (terecera vex), Juan Pablo Rojas Pail y Andueza Pala cio dirigieron ol pais en una era de paz y tranqnilidad par espacio de 2 afion enda uno (1884-1892). 7 Gobierno de Joaquin Crespo (1892- -1898).— Hn 1892 la Revolu- cidn Legalista de Joaquin Crespo Be adueié de la presidencia. Crespo hizo cambiar la constitucién y fijar en 4 afios el perfodo presidencial. Se hizo un empréstito de 50 millo- nes y se inauguré el Ferrocarril de Caracas a Valencia. 8" Gobierno del General Igna- cio Andrade (1898-1899).—E] Gene- ral José Manuel Herndndez se insu- rretcioné y Joaquin Crespo que lo iomnmdnnd combatia fué muerto en la Mata Carmelera (Etdo. Coje- des). La Revolucién Restauradora de Cipriano Castro oblig6 a Andrade a dejar el poder. 9 Gobierno de Cipriano Castro (1899-1908).—En este periodo se construyeron los palacios de Hacienda, de Jus- ticia, la Academia Militar’y el Teatro Nacional. La po- liticea de Castro fué desacertada y creé al pais serias di- ficultades con varias naciones extranjeras. En 1901 esta- 116 la revolucién Libertadora, encabezada por Manuel An- tonio Matos y por generales de mérito. Llegé a dominar casi toda la Repablica, pero fué dominada ¥ vencida por el General Juan Vicente Gémez, jefe de las fuerzas del gobierno. 10° Gobierno del General Juan Vicente Gémez. — A fines de 1908 un incruento movimiento popular de la ca- pital pidié la destitucién de Castro. El General Juan Vi- eente Gémez, asumié el poder que conservé directa o indi- rectamente hasta su muerte, el 17 de diciembre de 1935. Gémez rigié el pais durante una larga era de paz en la cual se construyeron carreteras, edificios ptblicos, acue- ductos, ete., y se desarrollé la industria del petrdleo, que es 137 una nueva fuente de riqueza nacional. Pero al General G6- mez se le culpa de haber mantenido Ja Reptblica en una dictadura permanente y de haber acumulado grandes bie- nes personales en detrimento de Ja riqueza publica. 11" Gobierno del General Eleazar Lépee Contreras, —EI General Lépez Contreras ocupé Ja presidencia tempo- ralmente hasta abril de 1936, fecha en que el Congreso le eligié para un periodo de cinco afios, tiempo legal del man- do presidencial, segtin reforma de Ja nueva constitucién. Lépez Contreras demostré tacto y habilidad en la di- reecién de la Reptiblica durante el periodo dificil del paso de una dictadura a una era de respeto, libertad y demoera- cia. Se crearon nuevos ministerios y se dié impulso a todos los ramos de la administracién nacional. 12° Gobierno del General Isaias Medina Angarita, — Electo en abril de 1941, el General Isaias Medina asumié el mando de la Repiblica en un tiempo de crisis general, provocada por la guerra mundial; sin embargo, a pesar de todo su Gobierno desarrolla una politica que promete ép- timos frutos de progreso para el pais. Capiroto IV 120. Evolucién y desarrollo material y cultural del pais hasta nuestros dias. Desarg0LLo MATERIAL. — La evolucién y el desarrollo material de Venezuela, a pesar de las guerras civiles que lo han paralizado varias veces, ha sido real y constante, so- bre todo durante los periodos de los gobiernos federales, particularmente los tltimos. Fruto de este desarrollo son los 6.000 kilémetros de carreteras que hoy surcan el pafs en todas direcciones; el desarrollo del comercio, de la cria y de la agricultura. Las construcciones de grandes y espaciosos edificios piblicos como el Palacio Federal, el Capitolio, la Casa Amarilla, Ministerio de Hacienda, construccién de cuarteles, casa de Telégrafos y de Correos, Ministerios, etc. Acueductos importantes como los de Caracas, Valencia y Barquisime- to; los 12.000 kilémetros de red telegrafica, la instalacién 138 deestaciones de radio, ote, Consecuencia do aste desarrollo es también Ja caneclacién do In deuda externa de Venenne- Ja efeetuada en 1930 en homenaje al centenario de la muer- to. del Libertador, DrsarnoL.o ouLTuRAL, — Wl desarrollo cultural débese princi- palmente al fomento de la ins- truceién: en 1830.existian en Ve- nezucla unas 100 escuclas prima- yias y wnas 250 a principios de la Revolucién Federal. Hoy dia funcionan en el pais 5.155 plante- les de todo orden, en los cuales trabajan 8.057 maestros que im- parten educacién a 272.000 alum- 0S. © La organizacién de numerosos colegios secundarios oficiales y Taaieal Bail privados, de Escuelas Normales, y el buen funcionamiento de las Universidades de Caracas y Mérida y de varios seminarios y la creacién de las Aca- demias de la Historia, de la Lengua y otras, han contri- puido en alto grado al desarrollo del pais. Los PRINCIPALES HOMBRES DEL DESARROLLO CULTURAL DEL PAfS HAN smo. — En la literatura y poesia: Andrés Bello, el patriarca de las letras americarias, José Antonio Maitin, Juan Vicente Gonzalez, Cecilio Acosta, Felipe Tejera, Ma- nuel Diaz Rodriguez, Udén Pérez, eteétera. En ciencias histéricas: Rafael Maria Baralt, José Félix Blanco, Aristides Rojas, Francisco Gon- zilez Guindn, Lisandro Alvarado, José E. Machado, ete. En la oratoria: Han brillado por la elocuencia y fuerza de palabra: Fermin Toro, Mon- sefior Mariano de Talavera y Garcés, los Pbros. José Ma- Cecilio Acosta 139 nuel Alegria, José Cecilio Avila, Macario Yépez, Monsefior Juan Bautista Castro y el Pbro. Carlos Borges, etc. En las ciencias médicas, naturales y matemdticas: Se han destacado los eminentes sa- bios José Maria Vargas, Juan M. Cajigal, Luis Daniel Beauper- thuy, el Coronel Agustin Coda- zzi, autor de la primera geogra- fia y del primer atlas fisico y politico de Venezuela; Pablo Acosta Ortiz, José Gregorio Her- nandez y Luis Razetti, Francisco A. Risquez, Enrique Tejera, Juan Iturbe. En la pintura: Martin Tovar y Tovar, Arturo Michelena, el mejor pintor venezolano; Cristé- bal Rojas y Tito Salas. . En misica: Juan Maria Mon- tero, composifor; Teresa Carreiio, pianista; los maestros Pedro Elias Gutiérrez, Vicente Emilio Sojo, Franco Me- dina y J. B. Plaza. Arturo Michelena INDICE (Programa de Guarty Graday pesewbrimtonto y Conquista, qundo conocido para In Apoen del deweubrimbenty de Ambien Vida y vinjo do Colén, 1, pesenbrimiento do Amérien y Venezuela, 1, 2, 8, 108 indios: costumbres, vewtidos; religion, allimentaciin, activide des, gobierno, 6, gribus y caciques principales, 10 y 24, Nombres indigenas de Ja regién, Jos conquistadores, 9, Jos misioncros, 25, Defensores de los indios, 8, fraficantes en indios y esclavos, 8, Jos Belzares, 13. Repartimientos y encomiendas, 18. Fundacién de las primeras ciudades, 24. Conquista del Centro, 20. Pundacién de Caracas, 22. Colonizaci6n de Oriente, 11. Expediciones por el Orinoco, 17. La Colonia. ,Cémo estaba dividida la poblacién colonial?, 39. Gobierno colonial, 29, 80 y 38, La Capitania General, 31, 32. Costumbres coloniales, 41, Aspiraciones de los criollos para disfrutar de los mismos derechos que los peninsulares, 39. Primeros movimientos revolucionarios, 42. Tentativa de Gual y Espafia; sus resultados, 43. Rasgos biogréficos de Miranda, Tentativas de Miranda, 44. Reyolucién del 19 de Abril; su influencia en los sucesos que eul- minaron con la declaracién de la Independencia, 46 y 47. El Primer Congreso de Venezuela, 50, La Sociedad Patriética, 51. Declaratoria de la Independencia. El 5 de Julio, 52. La Primera Repiblica hasta 1812, 53. Terremoto de Caracas, 53. @ Monteverde. Capitulacién de Miranda, 54, Rasgos biogréficos del Libertador, 56. - Bolivar después de la pérdida de Ja Repiblica en 1812. La Cam. fia Admirable, 57. as Libe te. Campafia de 1813, Mariiio, Piar; de. Los Libertadores de Orien' fensa de Maturin, 55. . ; Principales sucesos del afio 1814: La Victoria, San Mateo, Sitio de Valencia, La Puerta. Retirada a Oriente, la Emigracisn, 67, La resisteneia en Oriente, Pérdida de la Republica, rica, 67 (13), Expedicién de Morillo. Marcha de Morillo a Nueva Granada, 68, Levantamiento de Margarita. Herofsmo de Arismendi y de su es. posa Luisa Chsares de Arismendi, 69. Primera expedicién de Haiti. Expedicién de Ocumare, 70, Expedicién de Mac-Gregor, 7. Segunda expedicién de Haiti, 73. Rasgos biogréficos de Pher, us triunfoa, 75. Campafia de Guayana, San Félix, 78 Gcupacién de Angostura, 79 Sublevacién y fusilamiento de Piar, 61. Invasién de Margarita por Morillo, Heroismo do los maryariteiion Campana di Matasiete, 77. Sucesos del afio 19. El Congreso de Angostura, 66 Las Queseras del Medio, 88. va Granada, E) Paso de los Andes, 90 Campaiia sobre Nuev Royacé; Libertad de Nueva Granada, 91 Creacién de la Gran Colombia, 93 El Armisticio y la Regularisacién de la guera, 95 y 96 Entrevista de Bolivar y Morillo, 97 Ruptura de] Armisticio, 98. Batalla de Carabobo, 99. Toma de Maracaibo y de Puerto Cabello, 106 y 107. Tigeros relates sobre los sucesos ocurridos hasta 1430 E! Auxilio al Sur, 101 y 108. Batallas de Bomboné y Pichincha, 102 y 103 Libertad del Pera, Junin y Ayacucho, 108, 109 y 116 Rasgos biogrifiens de Suere, 112. Creacién de Bolivia, 111. Disolociin de la Gran Colambia, 114 Muerte de Snere y Bolivar, 118 y 116

You might also like