ente, que uno mismo se pon una idea no da poder, pero na “nds alla de nosotros mismos, le s, de vendri creo, de que los trabajos psa frase de chicos y a 188 a a gas consiste en que formulen una que les pido 2 rg un proyecto pedagogico, 0 una investigacién pe- a ogica. Una idea ave puede comenzar por interesante segiin sera mas O meno: snde les lleve. Y les llevara arecer 10C%, © Pi idea haga com ellos, 5 F : mo iden. Y segun lo que disfruten con sa idea les propone. Si entonces pensar es un Prnos IeiOS- drfa a cuento, mas o meno’ enosmo se entreguen t j la cuidamos, o transmite ideas (ni siquiera re senga ideas” o que “dé ‘deas”), sino que crea dispo~ s de generar 0 de inspirar ideas, dispositivos para la pro- duccion 0 para Ja invencion de ideas. ES desde ahi que me gusta decir que mis cursos son “ejercicios de jento”. Ejercicios, ademas, de Jos que no puede anticiparse € dicho de otro modo, que incluyen tranguilamente 1a posibilidad del fracaso Fjercicios que re- quieren una cierta confianza, una cierta gratuidad, una cierta genero- sidad, eso de entregarse al ejercicio sin preguntarse qué es lo que se va a obtener a cambio. Y, en e] semestre que compartimos, ejercicios que combinan varias actividades: leer (y ver pelis), caminar (y hacer mapas) y conversar (¥ escribir). Pero lo importante es que esas actividades nO tienen que ver con aprender “contenidos”, ni siquiera con “investigat”s sino con “pensar”; y con concretamente ; un pensar que eS “inventar”, con formular una idea pedagdgica que en cada una de las disciplinas que compartimos tenta delimitacione Desde este punto de vista, un. profesor ni s diferentes. ene on una idea aparezca esta, me parece, en algunas se leer y conversat, 7 eo en la separacion entre leer y caminar, 0 entre gustaria subrayar. ene caminar y conversar. Pero hay otras que Me Ta materia es lo que ha ero, la separacion entre la materia y el asunto: pensar; y si se prod y que estudiat, Reto el asunto es lo que hay que 5 produce algo, es precisamente porque no coinciden. S&° 1218Seribir algo pasa”. Y seguramente podriamos identificar y desarrollar otras de esas separaciones. Nuestro trabajo consistia también en ayudar a los estudiantes en la for ma de presentaciOn de sus ideas, en el trabajo de darles forma, y una forma que fuera a la vez consistente e interesante para cualquiera. Y ese trabajo con la forma era, en general, muy triste, pero algunas veces era apasionante. Sobre todo cuando trabajar en cémo presentar o hacer publica una idea se convertia también en un ejercicio de pensamiento yno solo en una estrategia de comunicacién. pero el trabajo del profesor no solo tiene que ver con la generacion de ideas, sino que tiene que ver también con tratar de hacer que los estudiantes perseveren en sus ideas, que no desfallezcan, que no las abandonen demasiado pronto, que no las dejen caer, que las desarro- ilen, las cuiden, las sigan y las persigan; en definitiva, que las cuiden. Una de las cosas que comentabamos después de tus tutorias era que los chicos, a veces, tenfan una buena idea en las manos, habian descubierto un pequeiio tesoro, pero no se daban cuenta, 0 se cansaban demasiado pronto y pasaban a otra cosa. Y que tu trabajo en las tutorias consistia en impedir que la dejaran caer, en tratar de que la sostuvieran un poco més, de que la miraran un poco ms, de que la conversaran un poco mas, de que se demoraran en ella para que ella les fuera entregando, poco a poco, sus posibilidades. Igualdad Karen. Cuando leimoscon los alumnos “El odio a la educaci6n publica: La escue- la como marca de la democracia” de Masschelein y Simons, fueron sur- giendo varias maximas, como, por ejemplo: “la escuela es un refugio para la igualdad”, “la escuela visibiliza la igualdad”. Es decir, la palabra “igual- dad” apareci6 constantemente. Me gustaria que abordases esta palabra a partir de ese texto y de las ideas de Ranciere, principalmente aquella de que la escuela es un lugar de verificacién de la igualdad, de que la igual- 2191