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Contenidos:

Prólogo
I - La Astrología
II - Bases y Evolución de la Astrología
III - Cómo funciona la Astrología
IV - La Carta Astral
V - Los Signos. Características
VI - Los Signos. Descripción
VII - Las Casas
VIII - Los Planetas
IX - Los Aspectos
X - Empezando a interpretar tu Carta
XI - Los Grandes Aspectos
XII - Funciones Dominantes
XIII - Los puntos débiles de la Carta
XIV - Integrar tus potencialidades
XV - La salud y la vitalidad
XVI - El trabajo y la economía
XVII - Las relaciones
XVIII - La mente y el espíritu
Apéndice A - La visita al astrólogo
Apéndice B - Tu Carta Astral gratis en Internet
Bibliografía
Notas
Prólogo
Me gustan las iglesias antiguas, así que en cuanto tengo
oportunidad intento disfrutar en silencio de estos lugares
sagrados. Cuando visito uno de esos templos, no pienso en los
arquitectos ni en los constructores, pienso en la gente que ha
orado en su interior, en todas las emociones humanas que allí se
han vivido; en las celebraciones del bautizo o del matrimonio,
también en la tristeza de los funerales. En la quietud de los
templos vacíos, uno casi se puede escuchar el eco de tantas
plegarias murmuradas durante siglos, llenas de deseos, de
temores, o de gratitud. Sentimientos y dudas similares a aquellos
que atraen a la gente a la consulta astrológica, en busca de
inspiración, de consuelo, de ideas.
Aunque generalmente es difícil saber de dónde surgen las
ideas y rastrear su origen hasta la primera chispa de consciencia,
sé que este libro nació un luminoso día de junio, en la iglesia del
Monasterio de Santes Creus, en Tarragona. Mientras contemplaba
las tumbas de los reyes medievales de Aragón, me llamó la
atención la luz natural del templo. Levanté la vista y miré al fondo
de la iglesia, donde descubrí un hermoso rosetón del siglo XIII.
La forma circular de la vidriera me hizo recordar
inmediatamente el simbolismo de la Carta Astral, al que he estado
vinculado durante casi toda mi vida. Pensé entonces en el sol que
iluminaba aquel rosetón y en cómo su luz, de color uniforme en su
origen, se filtraba a través de los cristales coloreados dando lugar
a múltiples tonos. Pensé también, como tantas veces antes de
aquel día, en cómo los seres humanos, al igual que los habitantes
de la Caverna de Platón, preferimos observar los reflejos de la luz
antes que buscar la fuente de todo conocimiento.
Fuera de aquella hermosa iglesia, más allá de los vitrales
coloreados, estaba la fuente original, el Sol. Del mismo modo, la
energía universal, más allá de la particularidad de nuestra propia
Carta Astral, es una fuerza única y completa, el origen de todo lo
que somos.
Creo que los astrólogos somos responsables de muchos de los
errores con los que el gran público identifica nuestro arte. La
equivocación de pensar que una persona es su signo solar, o
incluso que es su Carta Astral, es una de esas simplificaciones que
hacen daño a la Astrología, pero que sobre todo hacen daño a
las personas. La realidad es que todos los seres humanos
poseemos, en potencia, la energía de todos los signos y de todos
los planetas. Nuestras capacidades son infinitas y es sólo nuestro
empeño en pensar que somos de una determinada manera lo que
nos limita.
Ciertamente, hasta cierto punto todos tenemos una
personalidad que reconocemos como propia, unas costumbres y
una historia personal. Pero el reconocimiento de lo que somos no
debe entenderse como una limitación, sino como un punto de
partida hacia nuevas realizaciones de nuestro ser. Así que no
somos nuestra Carta Astral, sino que ella es el origen de lo que
podemos llegar a ser, porque en ella están todas las energías,
todas las posibilidades.
Hablamos de la Carta Astral y de su análisis, pero hay que
dejar clara una idea antes de comenzar cualquier estudio serio
sobre la astrología, y es que no existe una astrología “neutral”.
Cada persona que se acerca a este arte, lo hace con sus propios
conceptos, con su particular visión del ser humano. Hay por tanto,
astrólogos fatalistas que creen que nuestro destino está escrito,
marcado a fuego en los recovecos de nuestra Carta Astral. Pero
también hay astrólogos que creemos que cada ser humano, con
sus virtudes y limitaciones de partida, es dueño de su vida, y que
la consciencia y la voluntad, unidas, pueden hacer milagros.
Pienso que estamos en este mundo por una razón
fundamental, que es la de desarrollar al máximo nuestra
consciencia, porque ella es la llave que abre la puerta a la
totalidad de nosotros mismos. En esta tarea debemos explorar,
con valor y perseverancia, todos los rincones de nuestro ser. La
astrología surge aquí como una herramienta fundamental en esta
exploración, y podemos usarla en combinación con otras
herramientas, como la psicología o las diversas técnicas
espirituales.
Pero del mismo modo que el mejor profesor no puede enseñar
al alumno distraído, siempre he creído que el trabajo del
astrólogo es inútil si el cliente no pone también algo de su parte.
De hecho, nadie puede llegar al fondo de tu alma, ni el mejor de
los astrólogos puede conocer tu vida mejor que tú.
Se hace por tanto imprescindible que cada persona interesada
por el crecimiento personal tenga algunas nociones de astrología,
que pueda conocer su Carta, y sobre todo que pueda trabajar
con ella en su vida cotidiana. Porque del mismo modo que todos
debemos tener algunos conceptos de higiene y nutrición para el
correcto cuidado de nuestro cuerpo, y sólo recurrimos al médico
cuando estamos enfermos, creo que el conocimiento astrológico
básico es una herramienta fundamental para nuestra vida
cotidiana. Así que este libro no pretende sustituir el trabajo del
astrólogo profesional, del mismo modo que el conocimiento de las
normas de vida saludable no sustituyen la acción del médico
cuando este es necesario. Así que no me cabe ninguna duda de
que cualquier persona, con un mínimo interés, puede desarrollar
un grado aceptable de conocimiento astral que le permita vivir su
vida cotidiana con mayor plenitud y consciencia.
Hay un error común a la hora de analizar Cartas Astrales, que
consiste en creer que cada Carta tiene una interpretación
“correcta”, que está escrita en algún lado, y que debemos
encontrar y reproducir. El origen de este error proviene de nuestra
propia educación que nos ha moldeado con la idea del acierto o
la equivocación. Es importante dejar claro aquí que toda
interpretación astrológica, si se basa en el conocimiento del arte
astral, es en sí misma correcta. Por tanto, cualquier persona
puede interpretar una Carta Astral, sobre todo si se trata de la
suya propia.
Pero como habrás notado, el título de este libro no habla de
“interpretar” la Carta Astral, sino de “entenderla”, porque
considero que hay que dar un paso más allá de la mera
asignación entre elemento astral y significado que se da en
muchos libros de astrología. No podemos entender nuestro arte
como una colección de antiguos aforismos, o como uno de esos
diccionarios de citas donde diversos personajes históricos se
alternan para expresar una idea y la contraria. La astrología es
un cuerpo de conocimiento completo, que incluye todos los
aspectos de nuestra vida, y también elementos de carácter
natural, social o político. Sus símbolos tienen una lógica interna,
una jerarquía que debemos entender para poder alcanzar algún
significado que sea de verdad valioso para nosotros. Por ese
motivo, el conocimiento astrológico se presenta en este libro de un
modo compacto y lógico, poniendo un gran énfasis en el
desarrollo de la visión de conjunto de la Carta Astral antes de
descender a los elementos más concretos.
Evidentemente, dar una visión completa de la Astrología y
todos sus elementos ocuparía un espacio mucho mayor que el de
este volumen, sobre todo si se introducen los elementos técnicos y
de cálculo de la Carta Astral. Por fortuna, actualmente existen
aplicaciones informáticas que simplifican el proceso de cálculo de
una Carta, y cualquier persona puede obtener su Horóscopo
instantánea y gratuitamente a través de Internet. Los datos
astrológicos están ya al alcance de todos, y los fundamentos
técnicos del cálculo astral sólo deben interesar al astrólogo
profesional.
Con estas facilidades, analizar tu Carta se convierte en un
proceso para toda la vida, pues su simbolismo está presente en
todos tus actos a través del tiempo, y se va modificando
sutilmente. Tú no eres la misma persona que eras hace siete años,
ya que en el plano físico todas tus células han cambiado, se han
renovado por completo. Tu cuerpo, literalmente, no es el mismo.
Pero también en el plano emocional, en el mental, las
experiencias han ido modificando tu percepción del mundo y la
forma en la que encajas dentro de ese mundo. El mismo proceso
evolutivo que te ha llevado a ser como eres ahora, te llevará en el
futuro a nuevas formas de expresión.
Precisamente uno de los aspectos que hacen fascinante el
estudio de la astrología es que su simbolismo se adapta a todas
las fases de nuestra vida. Así que cuanto mayor sea tu nivel de
consciencia, mayores serán las recompensas que obtengas del
estudio de tu Carta Astral, porque ella siempre tendrá algún
nuevo mensaje para ti.
Por tanto, espero que no te limites a leer este libro una vez,
sino que realices los ejercicios que aquí se proponen, y sobre
todo que lo releas muchas veces a lo largo de los años.
Como astrólogo, creo que mi mejor recompensa será que
encuentres tu Sol más allá de las apariencias.
I - La Astrología
El cielo nocturno es un espectáculo fascinante. Lejos de las
ciudades y su contaminación lumínica, el firmamento de una
noche despejada se nos presenta en toda su majestad y misterio,
exactamente igual a cómo se mostraba a nuestros remotos
antepasados hace cientos de miles de años.
Los seres humanos hemos modificado el paisaje terrestre,
cercando terrenos para el cultivo o la ganadería, construyendo
núcleos urbanos para vivir y vías de comunicación para
desplazarnos. Pero el paisaje del cielo permanece prácticamente
inalterado desde los inicios de la humanidad. Cuando miramos el
firmamento nos hermanamos con esos ancestros, compartiendo el
único territorio que es común para ellos y para nosotros.
Si nosotros, en medio de mil estímulos y distracciones, aún nos
sentimos fascinados por el cielo, no es extraño que los humanos
del remoto pasado sintieran la misma, o quizá mayor atracción
por este espectáculo. De este modo, la Astrología es sin lugar a
dudas, uno de los conocimientos más antiguos de la humanidad.
Hija de miles de años de observación, esta antigua disciplina está
grabada en nuestro interior y nos acompaña de un modo sutil
pero persistente.
Quizá por ello, porque este conocimiento está impreso en
nuestra alma, todos tenemos alguna idea sobre lo que es la
Astrología. En muchos casos, este conocimiento se reduce al signo
solar y a toda una gama de descripciones más o menos
anecdóticas sobre este signo. Así, dependiendo del día del año
en que uno haya nacido, se nos incluye en una de las doce
categorías posibles. Todos conocemos nuestro “signo”, incluso los
detractores de la astrología, y todos sabemos que a cada uno de
los signos le corresponde una definición más o menos elaborada.
Así que de este modo, para muchas personas, el conocimiento
astrológico se reduce a saber que uno es Aries, y por tanto,
impetuoso y extrovertido, o que es Piscis y en consecuencia,
tímido y sensible.
Pero si estás leyendo este libro, es evidente que tu interés por
la Astrología va más allá de estas interpretaciones simples y
apresuradas. Así que seguramente has oído hablar de otros
elementos que conforman el conocimiento astrológico, como el
Ascendente, la Carta Astral, o incluso conoces algo de la
Sinastría o la Progresión del Horóscopo. Estos elementos y
técnicas, que pertenecen a la auténtica y profunda Astrología,
están bastante lejos de la astrología “de masas” que citamos
anteriormente, y forman parte de un esfuerzo serio, llevado a
cabo por muchos profesionales, por alcanzar un conocimiento
más amplio del ser humano y de su relación con el cosmos.
Como en cualquier disciplina seria, no podemos definir la
Astrología a partir de sus elementos o de sus técnicas, y mucho
menos a partir de la idea parcial que muchas personas tienen de
ella. En las páginas siguientes vamos a realizar un recorrido por
el mundo de la astrología, explicando qué es, cómo ha
evolucionado hasta el presente y cuál es su utilidad. Esta
explicación te ayudará a entender nuestro arte, pero como es
preciso enmarcar la cuestión, comenzaremos por ofrecer una
definición clara y directa de la Astrología:
La Astrología es el estudio de las relaciones existentes entre las
posiciones de los cuerpos del Sistema Solar y los fenómenos
terrestres.
Esta es una definición aparentemente simple y evidente, pero
que merece ser analizada con mayor atención. Ya que según ella,
existen determinados fenómenos que ocurren en los cielos y que
tienen una correlación evidente con lo que sucede en nuestro
entorno y en nosotros, que somos parte de la Tierra.
Así que de un lado están los cuerpos del Sistema Solar, que
como sabes son fundamentalmente el Sol y los planetas, a los que
debemos añadir nuestro satélite natural, la Luna. De otro lado,
tenemos la Tierra y todo lo que ésta contiene. Hay elementos que
quedan fuera de esta definición, como por ejemplo las estrellas y
las constelaciones y que, hay que aclararlo de una vez por todas,
no tienen ninguna importancia para la astrología actual. La razón
por la cual se excluye a las lejanas estrellas de la astrología
moderna se dará en un capítulo posterior, pero por ahora baste
saber que lo que de verdad interesa al astrólogo son los cuerpos
del Sistema Solar y no las estrellas[1].
A los cuerpos del Sistema Solar que interesan a la astrología
se les denomina genéricamente “planetas”, por más que el Sol
sea una estrella y la Luna un satélite, y de este modo los
nombraremos en lo sucesivo.
La Astrología, que cuenta con varios milenios de historia, ha
demostrado que las posiciones planetarias tienen una correlación
directa con nosotros y con nuestro entorno. La causa de esta
correlación es aún desconocida, aunque como veremos más
adelante, se han hecho diversos esfuerzos por explicarla. Pero el
hecho de que no podamos explicar esa conexión no contradice la
certeza de que dicha conexión existe. Esta es una realidad que
los astrólogos comprobamos a diario, incluso realizando análisis
ajustados de personas que no conocemos en absoluto. Tú también
lo comprobarás a medida que “entiendas” tu Carta Astral.
Pero antes de entrar en el análisis detallado de la Carta y sus
elementos, es preciso que miremos más de cerca a la Astrología,
porque sin entenderla a ella, difícilmente podremos entender sus
técnicas y sus símbolos. En la definición de astrología decimos
que es “el estudio de...”, pero ¿cuál es la auténtica naturaleza de
la astrología? ¿Es una ciencia? ¿Un arte? ¿Una técnica? ¿Con qué
espíritu debemos aproximarnos a ella?
Muchos astrólogos definen a este saber como una “ciencia”,
lo que ha acarreado severas críticas por parte de los llamados
“escépticos”. La palabra ciencia goza de gran prestigio en
nuestra sociedad y no es extraño que muchas disciplinas deseen
entrar bajo su paraguas para así ganar credibilidad ante el gran
público. La ciencia se basa en el método científico, es decir, en un
conjunto de técnicas que permiten llegar a resultados objetivos y
repetibles por cualquier experimentador.
Si hemos de ser rigurosos, la astrología no es una ciencia en
el mismo plano que las denominadas ciencias exactas
(matemáticas, física, química). Si tiene alguna relación con el
mundo de la ciencia es con las ciencias sociales (psicología,
sociología, medicina), pero ciertamente exhibe una
interdisciplinariedad que no se observa en ninguna otra rama del
saber. La astrología se alimenta de muchas fuentes y tiene una
naturaleza propia y diferenciada.
La astrología, a mi juicio, puede ser mejor entendida como un
“arte”, es decir, como una disciplina creativa en la que cada
practicante pone su sello personal para crear una obra única e
irrepetible. El arte y la ciencia representan dos formas de ver el
mundo, pero en ningún caso se trata de visiones incompatibles. El
arte y la ciencia se complementan porque representan el saber
subjetivo y objetivo. Donde la ciencia no puede llegar, llega el
arte, y viceversa.
Para entender la diferencia entre ciencia y arte te propongo un
sencillo ejemplo. Si entregamos a veinte personas sendos
termómetros para que midan la temperatura de una habitación,
obtendremos veinte resultados iguales. La medida de una
magnitud física (la temperatura) es independiente de quien la
realice, siempre que se haga con el instrumento adecuado (un
termómetro). Los resultados son repetibles, objetivos y
comprobables, lo que indica que nos hallamos ante un acto
científico.
En cambio, si hacemos que veinte pintores reflejen esa
habitación en sus lienzos, indudablemente tendremos veinte
pinturas diferentes, tanto en su contenido como en las técnicas
empleadas. Esto se debe a que cada artista hará una
interpretación personal del tema retratado. Esta interpretación
estará influida por tres factores: la personalidad de cada pintor,
la técnica pictórica que cada cual emplee, y lo que vean en su
modelo. Incluso aunque utilicen la misma técnica, los resultados
serán completamente dispares. Eso sí, si se trata de veinte artistas
de talento, no cabe duda que en todas sus obras “veremos”, en
todas sus variantes, la habitación que han dibujado.
En la interpretación astrológica sucede algo similar. Tenemos
por un lado a nuestro modelo, es decir, la carta astral y la
persona a quien corresponde esa carta. Del otro lado está el
artista, el astrólogo, que tiene una personalidad definida, una
serie de técnicas y una visión personal del modelo. La visión de
veinte astrólogos sobre una misma persona aportará matices
diferenciados y ciertamente enriquecedores sobre ella. Pero de
nuevo, si se trata de veinte astrólogos de talento, en cada
interpretación veremos reflejada a la persona analizada.
En cualquier caso, hay algo en lo que el arte astrológico se
diferencia de las bellas artes. El material de la astrología no es
algo inanimado, como un lienzo, un instrumento musical o una
página en blanco. El material con el que trabaja la astrología es
el ser humano, vivo, palpitante, con sus conflictos y sus
esperanzas. El astrólogo no puede modificar esta materia, no
puede cambiar a su cliente y convertirle en otra persona, pero sí
puede aportarle algo nuevo: una visión más amplia y
enriquecedora sobre su vida interior y exterior.
Entender la astrología como un arte es algo que inquieta a
algunas personas. El arte nos parece algo lejano, propio de
genios o de personas especiales. Pero al pensar esto olvidamos
que por cada genio que produce la historia, existen cientos o
miles de artistas que expresan libremente sus inquietudes. Estos
artistas no necesitan aspirar a la excelencia para hacer disfrutar a
muchas personas con sus creaciones. Todos podemos aprender a
pintar, y aunque nunca lleguemos a ser Picasso o Van Gogh, no
por ello vamos a dejar de disfrutar con una afición que nos llene y
nos permita expresarnos.
El arte requiere también de disciplina y de técnica, no sólo de
inspiración o talento. Para tocar un instrumento musical y dar
conciertos, primero hay que aprender y practicar durante años, lo
mismo que para pintar o para escribir. Tras el arte hay siempre
técnica, que es la base que permite al artista expresarse de un
modo coherente y atractivo.
El arte astrológico tiene también sus técnicas. Unas se
relacionan con el cálculo y otras con la interpretación, que son las
que analizaremos detenidamente en las páginas de este libro.
Pero la astrología en sí no es una técnica, ni un conjunto de ellas,
es más que eso, es una visión del mundo y del ser humano, una
forma artística de entender la realidad y, para los profesionales y
serios aficionados, una vocación vital, una llamada del espíritu. El
viejo árbol de la astrología nos permite a todos sentarnos bajo su
sombra, tanto a los aprendices como a los conocedores. Te invito
a que juntos, nos sentemos junto a ese árbol, y mirando hacia lo
alto, intentemos conocerlo.
Las ramas del árbol astrológico
La doctrina y la práctica astrológicas revelan que los planetas
no sólo influyen en las personas, sino que su influjo se detecta
también en todo lo que nos rodea (el mundo natural, el desarrollo
histórico o la sociedad actual en la que vivimos). Para estudiar
estas influencias, las ramas del árbol astrológico se despliegan en
diversas direcciones (Fig. 1). Entre ellas podemos destacar:
La Astrología Natural que estudia la influencia astral sobre
fenómenos como las mareas, el clima, la atmósfera o las
estaciones. La astrología natural también está relacionada con
actividades humanas como la agricultura (seleccionando días
propicios para la plantación, la poda o la cosecha) e incluso con
la pesca o la caza.
La Astrología Mundial, que analiza la relación entre los
planetas y los grandes acontecimientos políticos, sociales o
económicos que dan forma a la historia de la humanidad.
La Astrología Horaria, que es el análisis de una cuestión o
problema que se plantea en un momento determinado, levantando
una carta astral para ese instante. La Astrología Horaria es
bastante similar en su funcionamiento a la lectura de las cartas del
Tarot u otros medios serios de adivinación.
La Astrología Horóscopica se dedica a hacer predicciones
diarias, semanales o mensuales a partir del signo solar. Es la
astrología que conoce el gran público ya que corresponde a la
sección de “horóscopos” de la prensa. La astrología horoscópica
tiene escaso crédito entre la mayor parte de los profesionales,
pero realizada con rigor y, dentro de sus muchas limitaciones,
puede llegar a ser una herramienta interesante.
Figura 1. Las ramas del árbol astrológico

Algunas de estas ramas que tuvieron gran desarrollo en el


pasado, han caído actualmente en el olvido, mientras que otras,
como la horoscópica, han padecido los abusos de la sociedad
mediática en la que vivimos. Pero esto no nos debe llevar a
despreciar a unas, por olvidadas, o a otras, por su uso frívolo. Al
contrario, la existencia de estas otras disciplinas astrológicas
indica con claridad que el ser humano ha comprendido desde
antiguo la influencia de los astros en todos los aspectos de la vida
terrestre, incluyéndonos a nosotros mismos.
Existe una quinta rama del árbol astrológico, la Astrología
Personal, que es la que se centra en el estudio de la relación entre
los planetas y nuestra personalidad, nuestras relaciones y el
desarrollo de nuestra vida. La astrología personal se basa en
datos que identifican a cada ser humano de un modo individual y
crea documentos personalizados como la Carta Astral, los
estudios comparativos, la progresión o el tránsito del horóscopo.
A diferencia de la astrología horoscópica, que trabaja para las
masas, la astrología personal hace análisis singulares para cada
ser humano.
La Astrología Personal se puede dividir en tres grandes
campos de estudio:
La Astrología Natal, que analiza la influencia planetaria en
el momento del nacimiento de una persona. A partir de los datos
de nacimiento, la astrología natal elabora e interpreta un
documento denominado Carta Astral que refleja la personalidad y
las potencialidades de un individuo concreto.
La Astrología Comparativa o Sinastría, que estudia la
atracción entre las personas, así como las relaciones que se
establecen entre ellas a partir de sus Cartas Astrales y de
determinados estudios propios de esta disciplina.
La Astrología Progresada o Predictiva, que explica el
desarrollo de las fuerzas astrales a lo largo de la vida así como
los ciclos por los que pasamos durante nuestra existencia. Como
en el caso anterior, la base de los cálculos predictivos es la Carta
Astral, complementada con algunas técnicas específicas.
En este libro nos vamos a centrar en el conocimiento de la
primera de las ramas de la Astrología Personal, es decir, del
estudio Natal, que normalmente conocemos como Carta Astral.
Como se puede entender a partir de esta explicación, la Carta
Astral no es una herramienta aislada, ni una elucubración en el
aire, sino que se trata de una técnica que se halla incluida en un
amplio cuerpo de conocimientos. Este árbol de anchas ramas, que
es la Astrología, abarca tanto el estudio de la naturaleza como de
la sociedad y la historia, hasta descender a la escala humana, es
decir, a ti, a tu vida y a tus intereses más próximos.
¿Qué nos aporta la Astrología?
Para quien la mira desde fuera, sin conocer todo lo que hemos
explicado sobre ella, la Astrología puede parecer una creencia
antigua y ya desfasada. Ciertamente, este arte nació en un tiempo
muy remoto, en que los seres humanos miraban al cielo limpio de
la noche y buscaban respuestas para sus preguntas más
acuciantes: ¿cuándo lloverá? ¿Encontraremos buena caza?
¿Habrá alimento para nuestros hijos?
Las inquietudes de estos hombres parecen muy lejanas en el
tiempo, olvidadas en una época como la actual en que nos
enfrentamos a retos como la globalización de la economía y la
política, la comunicación instantánea, la riqueza o pobreza de las
naciones, las consecuencias ambientales del progreso o la
manipulación genética. Retos que prometen, según quien los
analice, el paraíso o el infierno.
Pero detrás de estas grandes palabras que hoy dominan el
debate mundial, detrás de los conceptos grandilocuentes con que
continuamente nos bombardean los medios de comunicación,
detrás de todo eso hay algo que de verdad no ha cambiado
desde aquella época remota: el ser humano y sus preguntas.
Gracias a Internet o a la televisión por satélite, podemos saber
lo que está sucediendo ahora mismo en el otro extremo del
planeta. Sin embargo, el espacio más próximo a nosotros mismos,
nuestro propio ser, continúa siendo un enigma. ¿Por qué hacemos
cosas que sabemos que no nos satisfacen, o incluso que nos
dañan? ¿Por qué nos enamoramos y por qué precisamente de esa
persona y no de cualquier otra? ¿Por qué en ciertas épocas
necesitamos consumir en exceso, o beber en exceso, o comer en
exceso? ¿Por qué a veces nos entristecemos sin motivo aparente?
¿Por qué abandonamos nuestra vocación para contentarnos con
un puesto de trabajo aburrido pero mejor remunerado? ¿Por qué
somos capaces de ayudar a los demás mientras nuestras propias
vidas parecen vagar sin un rumbo determinado? ¿O por qué
negamos ayuda a quien nos la pide? Seguramente, si te detienes
a pensar un instante, verás un reflejo de tus propias inquietudes
en estas preguntas, e incluso podrías sumar otras cuestiones a este
catálogo de dudas existenciales.
Además, si a las dudas que tenemos sobre nosotros mismos y
nuestra vida, añadimos el inmenso misterio que para nosotros
representan los demás seres humanos, entonces el volumen de
nuestro desconcierto adquiere proporciones colosales.
A diferencia de nuestros remotos antepasados, ahora vivimos
en un tiempo en el que no nos preocupa dónde dormiremos esta
noche o si mañana tendremos asegurada la caza. Pero el mundo
sigue siendo igual de complejo que lo era para ellos, simplemente
hemos cambiado unas preocupaciones por otras.
Ante estas dudas, la astrología se presenta como una ayuda
eficaz, una más entre muchas, que no rechaza otros caminos de
crecimiento sino que los agrupa. Evidentemente, en nuestro tiempo
contamos con herramientas como la psicoterapia, la filosofía, la
religión o la medicina, que nos ayudan a integrarnos en el mundo
y a dar mayor sentido y calidad a nuestra existencia. Pero la
astrología tiene también su lugar entre estas herramientas, ya que
aporta elementos diferenciales que la hacen valiosa. A
continuación se detallan algunas de estas cualidades únicas que
nos aporta el saber astrológico.
La astrología evoca sentimientos de pertenencia y
conexión con el mundo que nos rodea. Para el saber
astrológico, el ser humano es un elemento más en la vasta red de
la vida que relaciona a los lejanos planetas con la naturaleza y
con nuestra propia existencia. Por tanto, no estamos solos y
podemos sentirnos confortados en todo momento, ya que
podemos comunicarnos con la totalidad de lo que existe por
medio de lenguajes como el sentimiento, el arte o la vivencia de
los símbolos astrales.
Por otro lado, como cada persona posee una Carta Astral que
es única e irrepetible, el sentido de individualidad no sólo
se mantiene intacto, sino que es promovido. Cada uno
de nosotros es un pequeño nudo de esa inmensa red de la vida,
pero también es un nudo diferente a los demás, especial, y por
tanto valiosísimo. La astrología nos ayuda a recuperar la
autoestima y nos demuestra que somos mucho más que aquello a
lo que lo que la sociedad muchas veces pretende reducirnos, que
poseemos un alma que conecta con todo lo que existe, al tiempo
que lucha por mantener los límites de la individualidad.
A diferencia de los pacientes de las diversas formas de
psicoterapia, la astrología humanista tiende a analizar a las
personas de un modo menos clínico y patológico. Para el
astrólogo, su cliente no es un enfermo al que haya que etiquetar y
ofrecer un remedio más o menos estandarizado. El cliente es
una persona que está buscando desarrollar su alma
en medio de la duda y la ilusión. La tarea del astrólogo es
ofrecer alimento a ese alma en formación; alimento en forma de
consejos, de símbolos y de explicaciones personalizadas, hechas
a la medida del consultante.
El conocimiento astrológico se adapta a nuestro
nivel de conciencia, por lo que se hace más profundo y
revelador a medida que ampliamos nuestro saber y nuestra
experiencia de la vida. No importa cuánto tiempo viva una
persona, el simbolismo astrológico siempre tendrá para ella
nuevas sorpresas y le abrirá constantemente nuevos caminos de
conocimiento.
La astrología no es un conocimiento cerrado o
limitado en sí mismo, sino que en su frescura y novedad, está
abierta a todos los campos del saber. Los astrólogos nos
alimentamos por igual de las ciencias exactas (la astronomía, la
física moderna o la estadística) como de las sociales (la
psicología, la sociología o la medicina). La filosofía y la
antropología tienen también su lugar en el conocimiento
astrológico, del mismo modo que la mitología o la historia del
arte. Lejos de la endogamia que padecen actualmente muchas
áreas del conocimiento, la astrología se alimenta gozosamente de
todos los saberes que puedan aportarle algo de valor.
La astrología nos regala además un sentido de
orden en nuestra vida. Nada de lo que nos sucede es
resultado del azar o del caos. Todo tiene un origen, un
significado y un propósito. En cada encrucijada de la existencia,
la astrología nos puede inspirar un sentimiento de control, de
finalidad, que nos permite afrontar los retos con mayor claridad y
también con mayor serenidad.
La astrología es una forma de ver y entender el mundo que es
válida en la medida en que demuestra ser útil para cada persona
que se acerca a ella.
En el capítulo siguiente analizaremos las bases filosóficas de
la astrología, lo que te ayudará a entender mejor cómo funciona y
cuál es el origen de sus símbolos y técnicas fundamentales.
II - Bases y Evolución de la
Astrología
Ahora que ya tenemos una idea bastante definida acerca de
qué es la Astrología y de cómo puede ayudarnos en nuestra vida,
conviene que nos detengamos unos instantes a analizar las bases
teóricas sobre las que se sustenta nuestro arte. Estas ideas
fundamentales, que se han ido generando a través de la historia,
te ayudarán a entender algunas de las claves del arte astrológico
que serán de gran utilidad a la hora de poder entender tu propia
Carta Astral.
Podemos decir que la astrología se basa, al menos, en tres
conceptos fundamentales:

Ciclo
Correspondencia
Símbolo o mito
Ciclos
El concepto de ciclo puede definirse del siguiente modo:
Un Ciclo es una de una serie de fenómenos interrelacionados
que se repiten ordenadamente en el tiempo.
Como aprendimos en la escuela, los seres vivos nacen, crecen,
se reproducen y mueren. Así que si observamos a los seres
vivientes en su conjunto, podemos entender que la vida es un ciclo
que se repite en todos ellos. Incluso, algunas religiones proponen
la idea de la reencarnación, gracias a la cual el ciclo de la vida
se repetiría una y otra vez en cada ser humano.
La naturaleza es esencialmente cíclica, y nosotros, que somos
un elemento más del entorno natural, vivimos en medio de
múltiples ciclos, tanto físicos como emocionales, intelectuales o
espirituales. Ciertamente es muy difícil ser consciente de todos los
ciclos y procesos que nos envuelven en cualquier momento de
nuestra vida, pero eso no evita que los estemos experimentando.
El concepto de ciclo está íntimamente ligado al de “círculo”.
Por tanto, los ciclos se pueden asimilar a una rueda que gira y
siempre vuelve al punto en que comenzó, repitiendo en cada giro
los mismos pasos. En Astrología, el círculo es una figura muy
importante, y no es casual que muchos elementos astrales tengan
formas circulares, elípticas o esféricas, ya que el concepto de
ciclo está profundamente arraigado en todas las manifestaciones
de la naturaleza[2].
Nos corresponde ahora analizar los cuatro ciclos astrales
principales, que son:
El día y la noche
Las fases de la luna
Las estaciones del año
Los movimientos planetarios

El primer ciclo del que tuvo consciencia el ser humano es la


sucesión del día y la noche. De hecho, los animales conocen este
ciclo y se adaptan a él de diversas maneras. Así, mientras la
mayoría realizan sus actividades en las horas diurnas, no pocas
especies tienen hábitos nocturnos, aprovechando las horas de
oscuridad para buscar alimento.
El día y la noche, así como sus astros dominantes, el sol y la
luna, tienen un papel fundamental en la formación de nuestra
psique. El sol simboliza el mundo masculino mientras que la luna
se asocia con lo femenino. De aquí surgen múltiples dualidades
que están muy presentes en todas las culturas y que son un reflejo
del inconsciente colectivo de la humanidad, es decir, de la suma
de los mitos y creencias que las personas hemos ido creando a lo
largo de los tiempos. Los mitos relacionados con el día y la noche
están grabados a fuego en nuestro interior desde el tiempo en que
éramos aún animales irracionales.
Hay un fenómeno muy importante que recuerda la importancia
del ciclo día-noche. Cuando el sol y la luna se cruzan en los
cielos, en puntos muy determinados conocidos como “nodos”, se
producen los eclipses de sol y de luna. Cada cierto tiempo suele
haber un eclipse total de sol, que proyecta la sombra lunar en
algún segmento de nuestro planeta. La zona que recibe la sombra
en pleno día, cae en una noche rápida y de breve duración.
Esta mágica noche del eclipse provoca en los animales el
desconcierto y el temor. En las zonas salvajes, el bullicio natural
cesa repentinamente y todos los seres huyen a ocultarse en sus
nidos o madrigueras. Mientras la noche se adueña del día, los
sonidos de la naturaleza cesan por completo y cae un espeso
silencio. Cuando vuelve la luz del sol, pocos minutos después, los
animales viven el renacimiento como el comienzo de un nuevo día
y lo celebran con cantos o gritos de alegría.
El sol, en su movimiento diario normal, tiene también una
extraordinaria influencia en la vida del ser humano. Este ciclo ha
marcado desde tiempo inmemorial las actividades cotidianas del
hombre, sus horas de actividad y de descanso. Sólo en los últimos
tiempos, la luz artificial ha cambiado algunas de nuestras pautas
de comportamiento, ampliando nuestro horario laboral y creando
nuevas modalidades de empleo, como los turnos de noche.
Pero este progreso, que ha permitido el extraordinario
desarrollo de nuestra civilización, nos hace pagar un precio por
alejarnos del ritmo natural del sol. Todos sabemos que cuando
robamos demasiadas horas al descanso, o cuando trabajamos en
oficinas sin luz natural, padecemos un cansancio crónico que
deriva en estados de fatiga, depresión o irritabilidad. Así, los
estudios médicos indican que las personas que trabajan en
horarios nocturnos sufren una importante disminución en sus
expectativas y calidad de vida.
Es un hecho demostrado que la drástica disminución en el
número de horas de luz solar que se produce en invierno en
latitudes norteñas provoca una mayor incidencia de enfermedades
depresivas. Como trágica consecuencia, los países del norte de
Europa padecen un índice de suicidios mucho más alto que los
del sur. Se puede afirmar por tanto, que la afluencia turística de
los ciudadanos del norte a los soleados paraísos del Mediterráneo
y el Caribe se debe a una necesidad fisiológica del ser humano,
que necesita al Sol para cargarse de energía y vitalidad.
En el plano puramente físico, el Sol tiene también una
influencia claramente definida. Cantidades moderadas de luz
solar son necesarias para diversos procesos metabólicos como la
producción de vitamina D a partir de sus precursores biológicos.
Esta vitamina es fundamental para la fijación del calcio en los
huesos, reforzándolos y evitando enfermedades degenerativas.
El siguiente ciclo que llamó la atención de nuestros
antepasados estuvo sin duda relacionado con la Luna. Mientras el
Sol tiene siempre la misma apariencia, la Luna varía su faz a lo
largo de los días. A partir de una delgada línea en el cielo, cada
día la Luna aumenta su volumen aparente hasta convertirse en un
brillante disco. Pero su ciclo no acaba aquí, sino que desde la
plenitud ha de volver lentamente a la delgadez del inicio.
En los 29 días y medio de duración de este ciclo, la luna pasa
por cuatro fases: nueva, creciente, llena y menguante. El ciclo
completo dio origen al mes lunar del que se derivan los meses de
nuestro presente calendario. A partir de las cuatro fases, que
duran 7 días cada una, surgió el ciclo semanal.
Desde antiguo se ha establecido una conexión entre el mes
lunar y el ciclo menstrual de la mujer. Ambos períodos tienen una
duración parecida y presentan algunas similitudes. Del mismo
modo que la luna crece hasta alcanzar su plenitud hacia la mitad
del mes, el óvulo madura hacia el día 14 del ciclo menstrual,
alcanzando su volumen máximo y trasladándose a través de las
trompas de Falopio hasta alcanzar el útero.
La luna nueva se asimila al momento de la menstruación, en el
que el óvulo no fecundado se elimina, acompañado de un cierto
flujo de sangre. Los días de luna nueva debieron intrigar mucho a
nuestros antepasados, ya que durante ellos la luna desaparecía
por completo del cielo. Esta fase lunar era por tanto un tiempo de
magia y confusión, y quizá por ello los días de sangrado de la
mujer han estado también rodeados de mitos y tabúes. El propio
flujo menstrual se consideró durante siglos una potente
herramienta mágica asociada a rituales amorosos y de fertilidad.
A la vista de estas similitudes, no es extraño que en la gran
mayoría de las culturas se dé una conexión simbólica entre la luna
y la femineidad. Esta conexión tiene un efecto muy profundo en
nuestro lenguaje. La palabra “menstruación” viene del latín
menses, que significa literalmente “flujo menstrual”, pero que
también es el plural de mensis, que significa “mes” y de donde
viene el adjetivo “mensual”. Estos términos latinos provienen a su
vez de una palabra griega: mene, que significa “luna”. Por otro
lado, la raíz mens- sirve, por ejemplo, para construir el verbo
“mensurar”, que significa medir, y también el sustantivo
“agrimensura”, que es la medición de los terrenos.
Con todas estas asociaciones lingüísticas en mente
observamos que hay una asociación simbólica entre:

La luna, que es un cuerpo celeste muy visible y con un ciclo


determinado.
La menstruación, que es un ciclo biológico relacionado con la
procreación.
La medida del tiempo o incluso del territorio físico.

Las investigaciones modernas ofrecen resultados


contradictorios a la hora de asimilar el ciclo menstrual con el
lunar. En cualquier caso, parece que efectivamente los días de
menstruación y ovulación tienden a coincidir con la luna nueva o
llena más que con los cuartos creciente o menguante. Por otro
lado, es un hecho conocido que dormir con una luz tenue
encendida entre los días catorce a dieciséis del ciclo (imitando la
luz de la luna llena) ayuda a regularizar el período menstrual.
Estos indicios permiten suponer que con un tipo de vida más
próximo a la naturaleza, los ciclos menstruales y lunares tenderían
a ser simétricos, cosa que seguramente sucedía con nuestras
antepasadas.
La Esfera Celeste
En un mundo conectado directamente con la naturaleza, y en
el que había una dependencia directa de los recursos vegetales y
animales, es lógico suponer que el siguiente ciclo en ser
observado y reconocido fuera el de las estaciones. Este ciclo es el
origen de otra medida muy importante del tiempo: el año.

Figura 2. El movimiento de la esfera celeste

Para comprender el ciclo estacional desde una perspectiva


astrológica, debemos imaginar el cielo nocturno no como
sabemos que es, un inmenso espacio vacío ocupado por
lejanísimas estrellas, sino tal como lo vemos, es decir, como una
cúpula que se despliega sobre nosotros. El firmamento que
observamos se puede equiparar a una esfera de la que vemos en
cada momento una mitad, ya que la otra se encuentra bajo el
horizonte, oculta por la tierra que está a nuestros pies. Esta esfera
está salpicada de estrellas que desde nuestra perspectiva parecen
fijas, ya que ninguna se mueve con respecto a las demás.
Pero la esfera, vista en su conjunto, sí parece moverse. Las
estrellas salen cada noche por el este y, en varias horas cruzan la
bóveda celeste para desaparecer por el oeste (Fig. 2). Es como si
toda la esfera girara sobre un eje y como si todas las estrellas
estuvieran “pintadas” en ella, de forma que no pudieran tener
ningún movimiento propio. Esta esfera emplea 23 horas y 56
minutos en completar un giro sobre su eje, que es en realidad el
tiempo que tarda la tierra en dar un giro sobre sí misma. Para que
la medida del tiempo sea más sencilla, el día “de reloj” ha sido
ampliado a 24 horas, por lo que podemos deducir que una
estrella determinada sale cada día cuatro minutos antes que el día
anterior.
Como todos sabemos, la esfera celeste y su movimiento son
sólo apariencias, ya que quien se mueve de verdad es la Tierra
en su eterna danza alrededor del Sol. Incluso las estrellas, que
parecen estar a la misma distancia, se hallan separadas entre sí
por enormes espacios. Es la Tierra quien gira sobre su propio eje
y en torno al Sol, lo mismo que el resto de los planetas[3].
Pero como vimos en la definición de astrología, lo que interesa
a esta disciplina son los fenómenos celestes tal y como se
observan desde la Tierra. Por eso hablaremos de la esfera celeste,
y analizaremos el movimiento del Sol y los planetas como si
fueran ellos los que giraran alrededor de nosotros.
Si tuviéramos en cuenta el movimiento solar durante un año,
observaríamos que nuestro astro varía su posición en el cielo de
un modo leve pero constante a través de los días. En verano, el
sol del mediodía alcanza su mayor altitud sobre el cielo,
coincidiendo con los días más largos y las noches más cortas del
año. Por el contrario, en invierno su altitud sobre el cielo del
mediodía es mucho más baja que en el verano. Del mismo modo,
las noches son mucho más largas y los días se acortan de un
modo evidente. Como consecuencia, el verano es cálido y el
invierno frío.
Pero entre los extremos del verano y el invierno hay dos
estaciones intermedias, que son la primavera y el otoño. El sol del
mediodía alcanza entonces una altitud media, al tiempo que la
longitud de los días y las noches se iguala, y la temperatura
tiende a ser más templada.
La razón de todos estos cambios reside en el hecho de que las
órbitas planetarias alrededor del sol no están en un mismo plano,
sino que presentan diversas inclinaciones. La órbita terrestre está
girada sobre el plano en una medida angular de 23,5 grados, lo
que hace que en unos momentos del año veamos el sol más bajo
y en otros, más alto en cielo.
En la Figura 3 puedes observar el movimiento solar tal y como
se observa desde nuestro planeta. El sol se eleva desde sus
posiciones invernales hasta la máxima altura del estío, llamado
solsticio de verano, y luego desciende. A lo largo del año, el
movimiento solar abarca una banda imaginaria en la esfera
celeste. Esta banda se conoce con el nombre de “Eclíptica”, y
como veremos, será de gran importancia en capítulos posteriores.
Figura 3. La eclíptica y el movimiento solar anual

En el punto medio de este tránsito del invierno al verano, el sol


pasa por el llamado Punto Vernal, que es el lugar exacto donde
cruza el centro de la eclíptica. Todos los años, el sol pasa por este
punto vernal que va cambiando lentamente con el paso de los
siglos. El paso del sol por este punto es el momento preciso en el
que da comienzo la primavera (equinoccio de primavera). En esta
jornada, que suele coincidir con el 21 de marzo, el día y la
noche tienen la misma longitud. En el hemisferio sur del planeta,
ese día coincide con el equinoccio de otoño.
Cuando el sol decrece en altura, es decir, cuando pasamos
del verano al nuevo invierno, nuestra estrella cruza por el lugar
exactamente opuesto al punto vernal. Este paso del sol marca el
equinoccio de otoño del hemisferio norte (primavera en el sur),
donde de nuevo la longitud del día, que ha venido decreciendo
paulatinamente desde el verano, se iguala a la noche. A partir de
este día, que suele coincidir con el 22 de septiembre, las noches
crecerán hasta que el sol alcance su posición invernal (solsticio de
invierno).
Es interesante señalar aquí que diversos monumentos
megalíticos están orientados de forma que sus piedras señalen el
punto donde surge el sol el día de los equinoccios o solsticios. El
ejemplo más conocido es la majestuosa construcción de
Stonehenge, al sur de Inglaterra, pero existen muchos otros
ejemplos en todos los continentes. Sin duda, estos monumentos
son la prueba fehaciente del interés de nuestros ancestros por
conocer y predecir el ciclo de las estaciones. Un ciclo que era
vital para su supervivencia, tanto para los pueblos cazadores-
recolectores, como para los agricultores.
Precisamente fue la agricultura la indirecta responsable del
siguiente salto en nuestro saber astral, el estudio de los
movimientos planetarios. Analizar y codificar los movimientos de
los planetas requiere una infraestructura material e intelectual que
no estaba al alcance de nuestros más remotos antepasados. Éstos,
observando el cielo nocturno descubrieron que determinadas
“estrellas”, al contrario que el resto de los astros de la esfera
celeste, sí se movían con respecto a las demás. Estas estrellas, en
número de cinco, fueron denominadas “errantes” o
“vagabundas”, y corresponden a los planetas visibles al ojo
humano (desde Mercurio hasta Saturno). De hecho, nuestro
término “planeta”, proviene del griego planete, que significa
precisamente “vagabundo”.
Los planetas no se mueven arbitrariamente por cualquier
región del firmamento, sino que lo hacen siguiendo el círculo de
la eclíptica. Esto se debe, lógicamente, a que todos ellos giran en
realidad alrededor del sol y por tanto siguen su mismo camino en
los cielos.
Pero una cuestión es darse cuenta de la existencia de estos
astros vagabundos y otra muy distinta es anotar y predecir sus
movimientos. Hubo que esperar mucho tiempo a que se dieran las
circunstancias propicias para que el saber astral diera este paso
adelante. Dichas circunstancias se dieron en un lugar de oriente
medio.
Mesopotamia es una región situada entre los ríos Tigris y
Éufrates, en lo que actualmente es el territorio de Irak. Esta región
es una de las cunas de la humanidad, ya que la fertilidad de sus
tierras propició el nacimiento de la agricultura que sedentarizó a
poblaciones hasta entonces nómadas. Los pequeños poblados
dieron lugar a agrupaciones urbanas y a las primeras sociedades
complejas. De hecho, fue en Mesopotamia donde se inventó la
escritura, acontecimiento que determina el fin de la Prehistoria y el
nacimiento de la Historia.
Esta región fértil, rica en recursos agrarios, vivió durante
cientos de años en una constante inestabilidad, con diversos
pueblos luchando por controlarla. Pero en el segundo milenio
antes de la Era Cristiana, dos pueblos asumieron un papel
dominante en Mesopotamia: los Babilonios en el sur y los Asirios
en el norte. Si los asirios tomaron las riendas del poder político,
correspondió a los babilonios la supremacía cultural. Parece claro
para los historiadores, que los anteriores pueblos mesopotámicos
dedicaron mucho tiempo a la observación de los cielos, pero
fueron los babilonios quienes de verdad se empeñaron en
observar y anotar de forma continua y rigurosa los diversos
fenómenos celestes.
El motivo que les impulsó a llevar a cabo estos estudios fue
doble:

Si el movimiento de los planetas es cíclico, como son cíclicas


las fases lunares o las estaciones, conociendo las posiciones
pasadas de los cuerpos celestes se pueden estimar las
posiciones futuras con un grado de fiabilidad razonable.
Si las observaciones empíricas revelan de un modo repetido
que, cuando un determinado acontecimiento celeste tiene
lugar, se producen unos efectos sobre las personas, es de
gran valor poder predecir la repetición de ese fenómeno y
por tanto, de los acontecimientos que lleva asociados.

Así que a partir del concepto de ciclo, surge la segunda base


fundacional de la astrología: el principio de correspondencia.
Correspondencia y Símbolo
Podemos definir el concepto de Correspondencia en astrología
del siguiente modo:
Correspondencia es la relación que existe entre los diversos
elementos o símbolos astrales y los fenómenos terrestres.
Como puedes ver, la definición de correspondencia es
bastante similar a la definición general de Astrología que vimos al
principio del Capítulo I. De hecho, la astrología se podría definir
también como el estudio de las correspondencias astrales.
Muchos astrólogos prefieren sustituir este término por el de
“influencia”. Aceptan por tanto que los astros, con algún tipo de
fuerza desconocida, actúan sobre nosotros. De hecho, en la
práctica habitual de la astrología es bastante habitual emplear
este último término de una forma coloquial. Como este libro no
pretende ser un manual ortodoxo de alta astrología, sino una
obra de divulgación, emplearemos indistintamente ambos
términos. Pero hay que dejar bien claro que desde un punto de
vista riguroso:

La correspondencia implica que cuando ocurre el hecho


“A” siempre ocurre el hecho “B”, sin entrar a valorar la causa
de esta coincidencia.
La influencia implica que el hecho “A” es la causa efectiva
de que suceda el hecho “B”.

Como veremos en el próximo capítulo, el estudio de las


influencias planetarias es algo que ha preocupado a los
astrólogos desde el inicio de nuestro arte, y aún hoy no hay una
respuesta definida sobre las causas de las correspondencias
astrales.
Pero volvamos brevemente a Mesopotamia, donde nació la
escritura y la sociedad urbana. Aquí surgió una clase social muy
importante para nosotros: los sacerdotes-astrólogos. Liberados de
la necesidad de trabajar la tierra y poseedores de un alto nivel
cultural, los primeros astrólogos ordenaron erigir pirámides para
establecer en su vértice sus observatorios astronómicos. Estos
astrólogos carecían de telescopios, por lo que su visión del cielo
correspondía a aquellos planetas que pueden apreciarse a simple
vista. A través de sus observaciones y anotaciones se
establecieron las primeras tablas de movimientos planetarios.
Venus, el brillante lucero, era uno de los planetas que más
llamaba la atención de los pueblos mesopotámicos. No es extraño
por tanto que las primeras tablas que conocemos correspondan a
movimientos de Venus. En realidad, para ellos, este hermoso
planeta no era otra que Ishtar, la diosa de la belleza y una de sus
principales divinidades.
La asociación entre planetas y dioses es muy antigua, y da
origen a todos los mitos que están en la base del conocimiento
astrológico. Las propias constelaciones han sido creadas a partir
de mitos, ya que en realidad no hay ninguna base lógica para
agrupar a las estrellas de un modo determinado y darles uno u
otro nombre. Es la fuerza del mito, que está grabado en nuestro
inconsciente, quien proyecta estas historias en el cielo.
Muy unido al concepto de mito está el de Símbolo, que es el
tercer pilar sobre el que se asienta la astrología moderna. Es
difícil definir el símbolo, porque se trata de una idea intuitiva,
profundamente arraigada en nuestro interior y con una enorme
carga emocional. El símbolo ha de ser experimentado para ser
comprendido, porque pertenece al reino de los sentimientos y de
la intuición, no al mundo intelectual de las palabras y las
definiciones. Está repleto de significados y es por tanto
paradójico, siendo capaz de llevar a la mente a profundos
estados de comprensión que están más allá de las palabras.
Podemos decir, por ejemplo, que la Luna simboliza lo
femenino. Pero ¿qué es lo femenino como símbolo? Es una
determinada sensibilidad, una actitud receptiva, la posibilidad de
crear y nutrir a una nueva vida, una forma de existencia más
cercana a los ciclos del cuerpo, etcétera. Se podrían llenar
bibliotecas enteras hablando de “lo femenino” y de la Luna como
su símbolo astral fundamental, sin olvidar los profundos
sentimientos que este símbolo puede evocar en nosotros. Esta es la
fuerza y la profundidad del símbolo.
Así que lo que nuestros antepasados identificaban como
dioses y mitos, son para nosotros, los astrólogos del presente,
símbolos. Estos símbolos son la mejor herramienta para entender
la astrología y para comprendernos a nosotros mismos de un
modo que sea riguroso, pero a la vez creativo y mágico.
En el próximo capítulo expondré brevemente las distintas
explicaciones que se han dado del hecho astral. En él se
profundizará más en los conceptos de correspondencia-influencia
y mito-símbolo.
III - Cómo funciona la
Astrología
El Hecho Astral
La definición de astrología indica que existe una
correspondencia entre las posiciones de los cuerpos del Sistema
Solar y las tendencias o variaciones del carácter humano. Esta
realidad, que llamaremos “hecho astral” y que es aparentemente
irracional para nuestra cultura occidental, se demuestra en la
práctica cotidiana de la astrología, incluso realizando análisis
certeros de personas que nos son completamente desconocidas,
contando únicamente con su Carta Astral.
Así, sabemos que una persona con una marcada influencia de
Marte, tenderá a ser impulsiva, activa, y que puede llegar a la
violencia si se le somete a presión. En cambio, el carácter influido
por Saturno suele ser moderado, económico en gestos y palabras
y dado a la melancolía.
Pero el hecho astrológico, que con tanta claridad demuestra la
relación entre símbolos astrales y caracteres humanos, no nos
sirve para resolver la verdadera naturaleza de dicho vínculo. De
aquí surgen, necesariamente, las preguntas a las que todos los
astrólogos nos enfrentamos con frecuencia: ¿por qué funciona la
astrología? ¿Cuál es la naturaleza real de la conexión entre
planetas y personas?
Lamentablemente, estas cuestiones, hoy por hoy, no tienen una
respuesta definida. Pero esta falta de definición, lejos de
desanimarnos, debe ser un acicate para que busquemos
respuestas, para que nos replanteemos las auténticas raíces de
este viejo arte.
Para comenzar esta reflexión, te invito a que nos acerquemos
a las respuestas que los astrólogos, a lo largo del tiempo, han ido
aportando al debate sobre las explicaciones del hecho
astrológico.
Los Planetas como Dioses
No es casual que los planetas sean conocidos actualmente con
los nombres de los grandes dioses del panteón romano. Este
hecho es un reflejo de la antigua asociación entre divinidades y
astros. Así, el hermoso lucero que actualmente conocemos por el
nombre latino de Venus, fue antes Afrodita para los griegos e
Ishtar para sumerios y babilonios. Todas estas diosas tienen en
común el ser patronas de la belleza y la fertilidad.
La primera teoría que intenta explicar la validez del hecho
astrológico está pues íntimamente ligada con las creencias
religiosas de los pueblos de la antigüedad. Si un determinado
planeta tiene una influencia concreta en una persona, esto se
debe al poder del dios que está física o simbólicamente asociado
a dicho planeta. El planeta Venus aporta belleza porque la diosa
del mismo nombre tiene ese atributo y puede, con su poder
sobrenatural, otorgarlo a los humanos.
Aunque en la actualidad este planteamiento nos parezca
primitivo, ya que todos sabemos que los planetas no son dioses,
sino cuerpos físicos que orbitan en torno al sol, no debemos
olvidar las raíces míticas de las asociaciones planetarias. Estos
mitos han sido grabados a fuego en nuestro inconsciente colectivo
durante milenios y serán muy importantes a la hora de analizar
los significados astrológicos de los planetas, como veremos más
adelante.
La influencia astral
A medida que el conocimiento humano se fue desarrollando,
la teoría astrológico-religiosa que prosperó en el mundo antiguo,
fue perdiendo vigencia. Los viejos dioses fueron sustituidos por el
nuevo dios crucificado. El auge del cristianismo y su rechazo del
arte astrológico hizo que el estudio de las influencias astrales
pasase a ser patrimonio exclusivo de los pueblos islámico y
hebreo. Sólo después de un amplio paréntesis, la astrología volvió
a la cultura occidental sin que en ese intervalo se hubieran hecho
avances significativos en cuanto al estudio de su naturaleza.
Después de las nieblas medievales, y con la llegada del
Renacimiento, la astrología volvió a ser objeto de estudio por
parte de los intelectuales europeos. Personajes de la talla del
florentino Marsilio Ficino (1433-1499) contribuyeron a dar un
nuevo auge a los estudios astrales y aportaron un enfoque más
humanista y personal, en consonancia con la filosofía imperante
en su época. A partir de esta época, la astrología deja de ser un
instrumento político en manos de los gobernantes y comienza a
convertirse en lo que es ahora, una herramienta al alcance de
todas las personas.
Pero el humanismo renacentista vino acompañado de una
revolución, que al principio se manifestó de forma silenciosa, pero
que con el paso de los siglos ha acabado triunfando. Esta
revolución se basó en lo que por entonces era una forma
novedosa de entender la realidad, el pensamiento científico.
Para los nuevos revolucionarios de la ciencia, los hechos
físicos no suceden por voluntad divina, sino que hay causas
materiales que provocan efectos tangibles. Estos efectos pueden
ser además medidos y repetidos en experimentación. Aunque
como sabemos, este nuevo pensamiento chocó al principio con la
animadversión de la Iglesia, con el tiempo se fue haciendo un
hueco cada vez más ancho en la sociedad.
Es cierto que los primeros astrónomos modernos, como Kepler,
fueron también astrólogos, pero no cabe duda de que el
pensamiento científico, desde su inicio, empezó a erosionar las
bases de la astrología. Si no es posible conocer y medir la
relación entre astros y hombres, ¿cómo se puede afirmar que tal
relación existe?
No es extraño por tanto, que a principios del siglo XX, los
astrólogos comenzaran a investigar las influencias físicas de los
astros sobre la Tierra. Las emisiones electromagnéticas del Sol y la
influencia gravitatoria de la luna son hechos incuestionables que
empezaron a esgrimirse como probables causas originarias del
hecho astral. Del mismo modo que estos cuerpos regulan la vida
sobre la Tierra, no se puede descartar que, en menor medida, el
resto de los planetas del sistema solar tengan un efecto
gravitatorio o magnético sobre nosotros.
Pero la teoría de la influencia astral (también llamada
cosmobiología) presenta una dificultad derivada de su propia
formulación. Si se pretende explicar la influencia planetaria desde
una perspectiva física, deben presentarse pruebas físicas que
avalen esta pretensión de forma categórica. Esto debe ser válido
no sólo para los casos más evidentes como el Sol y la Luna, sino
para el resto de los planetas. La verdad es que dichas pruebas,
referidas al resto de los planetas, no existen hoy por hoy.
Por otro lado, esta teoría presenta otra debilidad evidente, y
es que si hay una influencia física de los planetas, ésta tendrá que
ser proporcional a la masa, a la distancia de ese planeta con la
Tierra y a otros valores como la fuerza de su campo magnético.
Pero si Plutón está 40 veces más lejos de la Tierra que el Sol, y su
masa es 157 millones de veces menor que la de nuestro astro, el
Sol debería ser inmensamente más importante que Plutón en una
carta astral. Llevando este argumento a sus últimas consecuencias,
y dado que el Sol contiene el 99,8% de la masa total de nuestro
sistema solar, parecería absurdo analizar la influencia de
cualquier otro planeta que no fuera él.
Pero la realidad del análisis astrológico es otra muy diferente.
Plutón sí es importante en una Carta Astral, y esto se debe a que
aporta un simbolismo que no podemos encontrar en ningún otro
planeta. Como la potencia astrológica de un planeta depende de
su situación en cada Carta concreta, puede muy bien suceder que
Plutón sea trascendental para una persona, al tiempo que su Sol
tenga una influencia bastante débil. La teoría de la influencia
astral falla a la hora de explicar estos hechos que, por otro lado,
son bastante comunes.
En el contexto del pensamiento actual, en el que se buscan
hechos empíricos que expliquen todos los acontecimientos, la
teoría de la influencia astral resulta atractiva a algunos astrólogos.
No cabe duda que algunos de los descubrimientos asociados a
ella son muy importantes y que debe profundizarse más en la
investigación de las influencias magnéticas y gravitatorias de los
planetas. Pero el saber astrológico es algo más que causas físicas,
y por esto, en las últimas décadas del siglo XX ha surgido una
nueva visión del arte astral: la astrología simbolista.
La astrología simbolista
Cuando una explicación de la realidad (un paradigma) se
vuelve universal, tiende a suprimir toda explicación alternativa,
hasta el punto de que el paradigma dominante se confunde con
una verdad absoluta, capaz de explicarlo todo. Actualmente
vivimos completamente sumergidos en el mar del cientifismo y esto
nos impide sacar la cabeza a la superficie para ver que hay otras
explicaciones, otras verdades posibles. Estas explicaciones no se
oponen a la ciencia, ni a sus logros más positivos, sino que la
complementan y amplían nuestra visión.
Así, más allá de las pretensiones cientifistas de la astrología
cosmobiológica, la astrología tuvo que volver sus ojos a lo
esencial de su doctrina, el símbolo. Porque la realidad simbólica
tiene un papel fundamental en nuestra vida psíquica, que es, al fin
y al cabo, uno de los principales motores de nuestros actos.
Podemos entender el símbolo como la expresión de un concepto
que posee algún profundo significado, no sólo intelectual, sino
también emocional.
Así, todos los elementos que maneja la astrología: los
planetas, los signos, las casas y los aspectos, pueden ser vistos y
comprendidos como símbolos que conectan directamente con
nuestras vivencias interiores y que están directamente
relacionados con nuestra motivación a la hora de ser como somos
y de actuar del modo en que actuamos.
Pero ¿cómo actúa el símbolo? Quizá la mejor manera de
entenderlo sea a partir de un ejemplo. Para un cristiano ferviente,
un crucifijo tiene un significado muy profundo, ya que representa
el sacrificio de Cristo para redimir los pecados de toda la
humanidad. El crucifijo es para él un símbolo, en la medida en
que su sentido le afecta en un plano intelectual y emocional. En
cambio, un no-cristiano entenderá el significado “intelectual” del
crucifijo, pero evidentemente no encontrará en ello ninguna
implicación personal ni sentimental.
Los símbolos que usamos en astrología tienen un significado
universal, que es independiente de las creencias o la filosofía de
cada cual. Por este motivo, la astrología es válida para todas las
personas y para todas las culturas, porque se mueve en el terreno
de los arquetipos, de los mitos y símbolos básicos que están en las
mentes de todos los seres humanos. Porque del mismo modo que
existe un inconsciente personal, existe también un inconsciente
colectivo que es patrimonio de toda la humanidad.
Para la astrología simbolista, el mundo se asemeja a un ser
vivo en el cual todo lo que existe está interconectado. Siguiendo
el viejo precepto esotérico de “lo que está arriba es igual a lo que
está abajo”, todo lo semejante mantiene un cierto tipo de
conexión, como los eslabones de una misma cadena. Por lo tanto,
cada suceso que se registra en un extremo de la cadena repercute
en la totalidad. Nada está aislado y nada de lo que hacemos o
dejamos de hacer cae en el vacío o en el olvido.
Así que dada la complejidad del saber astrológico, no parece
que su explicación pueda hallarse en el contexto de la física
clásica. La mera idea de que los acontecimientos tengan causas
simples e identificables está cada vez más lejos de ser una verdad
asumida por todos los sectores del pensamiento y la ciencia
modernos.
Precisamente las nuevas tendencias en el mundo de la ciencia,
están empezando a apoyar las antiguas concepciones místicas
sobre la realidad. En el campo de la biología, la hipótesis Gaia
considera al planeta Tierra como un ser vivo, en el cual sus
elementos constituyentes: el sustrato físico, la naturaleza, el ser
humano, producen un resultado que es más que la mera suma de
dichos elementos, del mismo modo que nosotros somos mucho
más que la suma de nuestros órganos corporales.
En el terreno de la física, las teorías cuánticas nos describen
un universo complejo, en el que las partículas elementales se
influyen de forma instantánea aun cuando se hallen a enormes
distancias, y en el que el observador modifica lo observado. No
hay espacio en ella para una “verdad” objetiva, ni marcos de
referencia privilegiados. Así que la ciencia de vanguardia está
llegando a la conclusión de que la base última realidad no es la
materia, sino la conciencia y la percepción.
La psicología humanista, a su vez, evita el determinismo y
explica el comportamiento humano a partir de la complejidad de
nuestro sustrato mítico y de nuestras aspiraciones espirituales. La
conducta humana no se puede reducir a esquemas simplistas del
tipo “estímulo-respuesta”, sino que debe verse en un contexto más
amplio en el que tengan cabida los símbolos más profundos y
también aspectos más misteriosos de la realidad como los que
analizaremos a continuación.
La sincronicidad
El término “sincronicidad” fue propuesto por el célebre
psiquiatra suizo Carl Gustav Jung (1875-1961), de quien
hablaremos extensamente en este libro. Jung definió la
sincronicidad como una serie de acontecimientos simultáneos que
no parecen estar unidos por una relación de causa-efecto, pero
que tampoco podrían entenderse como casualidades debidas al
azar.
El ejemplo más típico de lo que es la sincronicidad sucede
cuando pensamos de repente en una persona a la que hace años
que no vemos y al doblar una esquina, nos tropezamos con ella.
Otro acontecimiento sincrónico muy común consiste en acordarse
de alguien querido, justo antes de que suene el teléfono y lo
descolguemos para descubrir que es esa persona la que nos está
llamando. Estos sucesos, que probablemente todos habremos
experimentado alguna vez, no pasarían de ser meras
casualidades si no fuera porque muchas veces traen consigo
destellos de significado o nuevas oportunidades a nuestra vida.
Si analizamos nuestra existencia, seguramente descubriremos
que muchas de enfermedades o accidentes que nos han
aquejado, se produjeron en momentos especialmente conflictivos.
Alguien se fractura una pierna cuando se siente inmovilizado por
los acontecimientos, o cuando es incapaz de avanzar en la
dirección que desea. O bien tiene problemas con su casa cuando
se siente a disgusto consigo mismo. Pero también hay
sincronicidades positivas. Por ejemplo, podemos encontrar el
amor en el transcurso de un viaje, viviéndolo así como parte de
un proceso de cambio, de apertura o de novedad, un salir de uno
mismo en dirección a la otra persona. O quizá encontramos un
empleo nuevo cuando estamos llevando a cabo un proceso de
“limpieza” interior.
La sincronicidad está estrechamente ligada con la intuición,
pero también se nutre de un proceso de interiorización y toma de
conciencia. En la medida en que vivimos este proceso de
evolución interior, los sucesos sincrónicos se multiplican a nuestro
alrededor, trayendo pistas valiosas sobre la mejor dirección a
tomar en nuestro camino. Pero también es cierto que resulta muy
difícil ser objetivo con la propia vida. Además, entender estos
hechos sincrónicos, representa un esfuerzo que muchas personas
no están dispuestas a acometer, ya que no son conscientes de que
los resultados son tan valiosos que justifican con creces cualquier
desvelo.
Como se ha insinuado más arriba, los acontecimientos
sincrónicos son acausales, es decir, carecen de causa conocida o
bien esta es irrelevante. En sincronicidad, en vez de preguntarse
¿por qué?, es más adecuado preguntarse ¿para qué? Es decir, en
vez de cuestionarnos sobre el origen del hecho, es más productivo
indagar en nuestro interior con preguntas tales como: ¿cuál es el
significado profundo de este acontecimiento? ¿Qué mensaje
aporta a mi vida?
La Astrología y la sincronicidad están estrechamente unidas.
Por un lado, los sucesos sincrónicos implican una conexión
acausal entre el mundo interior y el exterior. Precisamente esto es
lo que sucede entre astros y seres humanos. Los planetas, en sus
diferentes posiciones, construyen símbolos, y esos símbolos
aparentemente lejanos tienen una clara conexión con nuestras
vivencias.
Por otro lado, la sincronicidad nos devuelve un genuino
sentido de realidad. No podemos generar acontecimientos
sincrónicos de forma deliberada, ya que estos simplemente
“suceden”. Del mismo modo, en nuestra vida hay muchos sucesos
que no podemos controlar y que nos influyen decisivamente. El
propio movimiento planetario al que se refiere la astrología es
algo completamente ajeno a nuestros deseos o expectativas. Pero
todo lo que sucede en nuestro mundo sincrónico tiene sentido si
estamos abiertos a descubrirlo e interpretarlo. Siendo conscientes
de este significado, podemos tomar decisiones vitales más
realistas y fluir de manera más eficaz hacia nuestros objetivos. De
este modo nos liberamos de un destino cruel, abriéndonos a una
vida más constructiva y consciente, es decir, cambiamos el círculo
vicioso por la espiral creativa.
IV - La Carta Astral
El objetivo de este libro es que “entiendas” tu Carta Astral,
pero ¿qué es de verdad la Carta?
Tu Carta Astral, también denominada Carta Natal, Horóscopo
o Natalidad, es un mapa esquemático del cielo tal y como podía
contemplarse en el momento y desde el lugar de tu nacimiento.
En el diseño de tu Carta puedes ver la situación de la eclíptica
con respecto a la Tierra en el momento de tu llegada al mundo.
También descubrirás cómo se relaciona la eclíptica con el
horizonte local del lugar concreto en que naciste, y por supuesto,
los planetas y las relaciones que forman entre ellos.
En este capítulo y en los siguientes vamos a introducir algunos
conceptos nuevos. Probablemente conocerás algunos y quizás
otros te resulten novedosos, pero es muy importante que leas
todas las ideas y procures entenderlas aunque te sorprendan. La
visión de la astrología que aquí se presenta puede ser algo
diferente a la de otros libros que hayas podido leer sobre el tema.
Aquí no verás planetas “buenos o malos”, ni aspectos “benéficos
o maléficos”. No se habla del destino, ni de lo inevitable, sino de
la consciencia y de impulso positivo que puede hacer que todos
mejoremos en nuestra vida.
Desde luego, no es mi propósito imponerte estos conceptos.
Pero sí creo que es importante que abras tu mente a todas estas
ideas, que las conozcas y las valores. Luego, quédate con todo
aquello que sea útil para ti.
Figura 4. Los elementos de una Carta Astral
Los elementos de la Carta Astral
En la Figura 4 puedes observar una Carta Astral y sus distintos
elementos constituyentes. Estos elementos se pueden reunir en
cuatro categorías:

Los Signos, o divisiones de la eclíptica, que componen el


Zodiaco.
Las Casas, que indican la porción de cielo que podía
observarse desde el lugar de nacimiento.
Los Planetas en sus signos y casas correspondientes.
Los Aspectos, que indican las relaciones que se establecen
entre los planetas.

Otra forma de entender la Carta sería analizándola como tres


círculos concéntricos:

El exterior que corresponde a los Signos.


El intermedio, que contiene las divisiones de Casas a partir
del Ascendente, que es la flecha que sobresale a la
izquierda. Dentro de estas divisiones están los Planetas.
El círculo interior, que muestra las líneas de los aspectos.

De momento no es necesario que comprendas la función de


estos elementos, pero sí es importante que puedas identificarlos en
la carta de ejemplo y en tu propia Carta Astral.
Figura 5. Carta Astral de Marilyn Monroe

En la Figura 5 observamos la misma carta del ejemplo


anterior, sólo que ampliada y sin indicaciones explicativas. Se
trata de la Carta Astral de la actriz Marilyn Monroe[4]. ¿Eres
capaz de reconocer el círculo de los signos y el de las casas?
¿Ves dónde están situados los planetas y cómo desde cada uno
de ellos surgen líneas de aspectos? Dedica unos instantes a ver la
estructura de la Carta de Marilyn y la de propia Carta, si la
tienes[5].
Probablemente tu Carta Astral presente algunas pequeñas
diferencias de diseño con la que se muestra en el ejemplo. Hay
que señalar a este respecto que no existe una uniformidad de
criterio a la hora de trazar las Cartas entre los diversos
astrólogos. Por ejemplo, en algunos modelos, los planetas se
sitúan en el exterior, en otros, se ignoran las líneas de aspectos.
Pero si entiendes cuáles son los elementos que conforman una
Carta y observas los símbolos que señalan los signos y los
planetas, podrás hacerte una composición bastante exacta de
cómo está diseñada la tuya.
Como es lógico, entre tu carta y la de Marilyn no sólo habrá
diferencias de diseño, sino que su contenido será diferente. Los
planetas estarán en otros signos y los aspectos dibujarán otros
patrones de energía. La Carta Astral, como ya se ha explicado, es
un documento personal, que te identifica como un individuo único,
así que no hay dos iguales.
El Origen de la Carta Astral
Ahora que ya eres capaz de identificar los elementos
fundamentales de tu Carta, es el momento de comprender de
dónde surgen los diversos componentes de la misma.
Si observas la posición de los planetas en la Carta Astral, te
darás cuenta de que cada uno de ellos puede ser analizado con
respecto a dos sistemas de referencia: los signos y las casas. Es
decir, que un planeta, como la Luna de Marilyn, está al mismo
tiempo en el signo de Acuario y en la casa 7ª. Así, la posición de
cada uno de los planetas puede descomponerse en dos:

La posición Zodiacal, que es la situación de los planetas


con respecto a los signos.
La llamada posición Mundana, que se refiere a la
situación de los planetas en las casas.

A continuación entenderás el porqué de esta distinción.


Como recordarás, la eclíptica es la franja o banda de la
esfera celeste que recorren el sol y los planetas. Dentro de esta
banda señalamos un punto concreto, el Punto Vernal, que es
aquél en el que el Sol cruza el ecuador de la eclíptica indicando
el inicio a la primavera. Este Punto Vernal es extremadamente
importante para la astrología, ya que marca el inicio del primer
signo astrológico: Aries. Es decir, que cuando el sol alcanza esta
zona del firmamento, está a su vez señalando dónde comienza el
signo de Aries.
A partir de aquí, los astrólogos dividimos la eclíptica en doce
partes iguales que corresponden a los doce signos del zodiaco.
Estas divisiones permanecen fijas para el resto del año, hasta que
el sol vuelva a pasar por el punto vernal en la primavera
siguiente.
La división en doce partes iguales se realiza de la siguiente
manera. Si situamos la eclíptica sobre un plano, es decir, si la
miramos “desde arriba”, lo que observamos es, lógicamente, una
circunferencia. Como sabes, una circunferencia es una figura
geométrica que mide 360 grados. Si dividimos esa figura en doce
partes iguales, tenemos que cada una de ellas mide 30º. Así,
cada uno de los doce signos comienza por el grado 0 y se
extiende hasta el 29 (es decir, treinta grados de longitud).
En la Figura 6 puedes observar la eclíptica dividida en doce
signos a partir del punto vernal. Lógicamente, cuando miramos la
eclíptica sobre un plano, lo que tenemos ante nuestros ojos es el
círculo de los Signos de la Carta Astral. Así que cuando decimos
que la Luna de Marilyn está en el signo de Acuario, lo que
indicamos es que se halla a una determinada distancia del punto
vernal, que corresponde a esa división geométrica de la eclíptica.
Figura 6. La división en signos a partir del punto vernal

Una cuestión que hay que conocer sobre la posición zodiacal


de un planeta es que, para un instante determinado, esta posición
es la misma que se puede observar en cualquier lugar de la
Tierra. Esto se debe a que los planetas se calculan con respecto al
centro de la Tierra y no a ningún punto de su superficie. Por este
motivo, cualquier persona que hubiera nacido al mismo tiempo
que Marilyn pero en otro lugar del mundo, tendría los planetas en
los mismos signos. Pero ¿acaso no hemos dicho que la Carta
Astral es un documento personal y único?
La respuesta a esta pregunta hay que buscarla en la posición
mundana.
Para entender el funcionamiento de las Casas, volveremos a la
carta de Marilyn. Ella nació a las 9:30 horas de la mañana, por
tanto era de día y el sol estaba bastante elevado sobre el
horizonte. En cambio, una persona que hubiera nacido en el
mismo momento, pero en el extremo opuesto del planeta, habría
nacido de noche, con el sol bajo el horizonte local. Los planetas
estarían en los mismos signos, pero la posición entera de la
eclíptica se vería invertida.
En la Figura 7 puedes ver el horizonte local en el momento del
nacimiento de Marilyn. Todo el círculo gira hacia la derecha, en
el sentido de las agujas del reloj. Así que en ese momento el Sol
estaba a medio camino entre el horizonte y la parte superior del
cielo, que en astrología llamamos Medio Cielo (M.C.). Al mismo
tiempo, la Luna está a punto de ocultarse. A la izquierda asciende
el signo de Leo, que por este motivo se denomina Ascendente
(Asc.). A la derecha está el signo que desciende hacia la parte
oculta de la esfera celeste, Acuario. Este signo es el Descendente.
Figura 7. El horizonte natal en el nacimiento de Marilyn

Como ves, la posición mundana sirve para hacer referencia a


la situación geográfica y temporal del nacimiento de la persona.
Quien hubiera nacido en el mismo momento, pero en el otro
extremo de la Tierra tendría todos los planetas en posición
invertida. Los que aquí están sobre el horizonte, estarían ocultos.
Y los que aquí son invisibles (Saturno y Neptuno), en lo más alto
del cielo.
Los puntos fundamentales que dan forma a la posición
mundana son el Ascendente, el Descendente (que juntos forman el
horizonte), así como el Medio Cielo y el Bajo Cielo (I.C.). Este
último punto no puede verse en la imagen ya que es justamente el
opuesto al Medio Cielo y está por tanto por debajo del horizonte.
A partir de estos cuatro puntos se calculan las doce casas de la
Carta Astral, que definen con exactitud la posición de cada
planeta con respecto al horizonte local.
Las casas no tienen nombre, como los signos, sino que se
numeran desde la primera a la número doce en sentido
antihorario. La numeración se hace en sentido opuesto al giro de
la eclíptica (Fig. 8). Así que:

El Ascendente es por tanto el inicio de la casa 1ª (que es la


primera bajo el horizonte).
El Bajo Cielo es el inicio de la 4ª.
El Descendente marca el comienzo de la 7ª (opuesta a la
1ª y además, la primera sobre el horizonte, donde vimos que
estaba la Luna de Marilyn).
El Medio Cielo, que da principio a la casa 10ª (opuesta a
la 4ª).
Figura 8. Numeración de las casas

Por tanto, cuando un planeta surge por el horizonte, lo hace


en la casa 12, desplazándose luego a la 11 y a la 10. A partir
de la 9 comienza a descender hasta desaparecer por el horizonte
al entrar en la casa 6. Si ese planeta es el Sol, y está en la mitad
inferior de la Carta, significa que la persona ha nacido de noche;
en cambio, si está en la superior, señala un nacimiento diurno.
Hay que hacer una última consideración acerca de las Casas.
Si los signos tienen todos la misma longitud, 30º, las Casas suelen
tener longitud variable. La explicación geométrica de este hecho
está más allá de los límites de esta obra, pero básicamente se
debe a las diferencias que se dan en la observación de la
eclíptica desde las diversas latitudes terrestres.
Queda por aclarar el origen de los aspectos, es decir, las
líneas que podemos observar en el interior de la carta de Marilyn
y probablemente de la tuya. Los aspectos son simplemente la
medida de la distancia entre los planetas. Así que cuando dos
planetas se hallan a una determinada distancia entre sí, se dice
que están “en aspecto”.
Existen diversos tipos de aspectos que corresponden a varias
distancias angulares que vienen definidas desde muy antiguo. Por
ejemplo, en la carta de Marilyn (Fig. 5), Neptuno (el planeta con
forma de tridente a la izquierda) y la Luna se encuentran en
posiciones opuestas. La distancia angular entre ambos planetas
es, aproximadamente, de 180º (o sea 360 dividido entre 2). Por
lo tanto, astrológicamente decimos que ambos planetas se hallan
en aspecto de oposición.
Por supuesto, si dos planetas se hallan a una distancia que no
está definida como aspecto, decimos que no se da ningún tipo de
relación angular entre ellos. El sol de Marilyn, que es el planeta
con forma de círculo en la parte superior izquierda, sólo está
conectado con la Luna, pero carece de líneas que le unan a los
demás planetas.
El significado de los aspectos se dará en el Capítulo IX, pero
como se puede suponer a partir de estas explicaciones, cuando
dos planetas están en aspecto es porque comparten algún tipo de
relación especial. Los planetas que no comparten aspectos están
desconectados y no hay relación entre ellos.
El Alfabeto Astrológico
Al observar tu Carta Astral o la que usamos como ejemplo,
habrás notado que en ella aparecen diversos símbolos que
designan la posición de los signos y de los planetas.
Algunos símbolos son fáciles de identificar, por ejemplo la
Luna, pero otros parecen bastante extraños y caprichosos. Estos
símbolos son internacionales y son utilizados, con ligeras
variantes, por todos los astrólogos. La ventaja evidente de utilizar
este sistema de anotación astrológica es que con él cualquier
astrólogo puede entender una Carta independientemente de
dónde haya sido confeccionada. Del mismo modo que la música
escrita en una partitura es un lenguaje internacional, el lenguaje
astrológico salta las fronteras físicas y temporales gracias a su
alfabeto.
En el presente libro evitaré hacer uso de estos símbolos, pues
pueden crear alguna confusión si no se dominan. Pero como es
imprescindible conocerlos para descifrar tu Carta Astral, te los
muestro en la Tabla 1.
Si profundizas en el estudio de la Astrología, aprenderás a
familiarizarte con todos estos símbolos y los usarás con la misma
soltura con que usas el alfabeto para escribir. Pero, para los
propósitos de este libro, no es necesario que los aprendas de
memoria, ya que en cualquier momento puedes consultar estas
tablas.
Tabla 1. Símbolos usados en Astrología

Otra presentación de la Carta Astral es la Tabla o Lista de


Datos. En la Tabla 2 puedes ver los datos de nacimiento de
Marilyn Monroe.
Idealmente, toda carta debería estar acompañada de una hoja
de datos, pero esto no sucede siempre. En algunos casos, sobre
todo en algunos servicios gratuitos de Internet, podemos obtener
nuestra tabla de datos, pero no nuestra carta. Como sucede con
las cartas, las tablas de datos presentan diversos formatos con
variada información.
Generalmente, una Tabla de Datos suele contener tres tipos de
datos:
Lista de los diez Planetas astrológicos con su posición en
signo y casa.
Lista de las Casas con su posición por signo[6].
Rejilla con los Aspectos que se dan entre los diversos
planetas.

Planetas:
Planeta Longitud Signo Casa
Sol 10º 27' Géminis 11ª
Luna 19º 06' Acuario 7ª
Mercurio 06º 47' Géminis 10ª
Venus 28º 45' Aries 9ª
Marte 20º 44' Piscis 8ª
Júpiter 26º 50' Acuario 7ª
Saturno 21º 26' Escorpio 4ª
Urano 28º 60' Piscis 8ª
Neptuno 22º 13' Leo 1ª

Plutón 13º 23' Cáncer 12ª

Casas:
Casa Long. Signo
ASC 13º 04' Leo
2ª 06º 08' Virgo
3ª 03º 40' Libra
M.C. 06º 00' Tauro
11ª 10º 35' Géminis
12ª 13º 30' Cáncer
Aspectos:
SOL LUN MER VEN MAR JUP SAT URA NEP PLU
SOL -- TRI CON -- -- -- -- -- -- --

LUN -- -- -- -- CON CUA -- OPO --
35'

MER -- -- -- -- -- -- -- -- --
40'
VEN -- -- -- -- -- SEX -- -- TRI --
MAR -- -- -- -- -- -- TRI -- TRI TRI
7º 1º
JUP -- -- -- -- CUA -- OPO --
48' 55'
2º 0º 5º
SAT -- -- -- -- TRI CUA TRI
25' 43' 23'

URA -- -- -- -- -- -- -- -- --
33'
3º 6º 1º 4º 0º
NEP -- -- -- -- --
12' 31' 30' 36' 47'

PLU -- -- -- -- 20' -- 8º 3' -- -- --

Tabla 2. Tabla de Datos de Marilyn Monroe

Es decir, que una Tabla de Datos contiene la información


fundamental que nos sirve para dibujar una Carta Astral, ya que
nos muestra los elementos que hemos visto: signos, casas,
planetas y aspectos. Así, da igual disponer del dibujo o de la
tabla, siempre dispones de los datos necesarios para analizar tu
Natalidad.
Empezando a entender la Carta
Astral
Ahora que ya sabemos cuál es el fundamento astronómico de
la Carta Astral, llega el momento de empezar a analizar su
simbolismo, que es la tarea a la que vamos a dedicar el resto de
nuestro tiempo. Para entender la función de los diferentes
elementos que constituyen una Carta, vamos a utilizar una
analogía muy sencilla en la que compararemos al horóscopo con
una función teatral.
En el espectáculo teatral nos encontramos con varios elementos
que trabajan coordinadamente para dar vida a la representación.
Estos elementos se explican a continuación.
El texto de la obra, que es un elemento fijo que modela
toda la representación y al que todos los actores deben obedecer.
El texto puede ser equiparado con el funcionamiento de los
signos, ya que ellos son los que dan forma a la Carta, siendo el
origen de toda la interpretación astrológica. Los signos, como los
textos clásicos del teatro, nos conectan con las grandes energías
del universo, con los mitos del pasado, en los cuales nosotros
vivimos inmersos.
La escenografía, es decir, el escenario, las luces, el
decorado y los efectos especiales. Toda la escenografía de un
espectáculo está al servicio del texto, pero también se ve limitada
por factores materiales como el lugar donde se representa o el
presupuesto del que dispone la compañía. Las casas de la Carta
Astral son la escenografía de nuestra vida, ya que indican cómo
utilizamos la energía de los signos en nuestra vida cotidiana. Las
casas, por decirlo de algún modo, materializan la energía astral y
la hacen próxima y manejable.
Los actores, que deben atenerse al texto y al decorado que
se ha preparado para ellos. Los actores son los reyes de la
representación, pues son los que dan vida a los papeles, los que
llenan el escenario, y es de ellos de quienes depende al final el
éxito o fracaso de toda la función. Astrológicamente podemos
asimilarlos con los planetas, pues son éstos quienes dan vida a las
energías de los signos y las casas, filtrándola de un modo único y
personal para nosotros.
La representación misma, que implica el uso del texto, de
la escenografía y el concurso de los actores. Estos últimos deben
interactuar y pueden hacerlo mejor o peor, según su
profesionalidad o afinidades personales. La representación es, a
nivel astrológico, el conjunto de aspectos que se interconectan y
que nos hablan de las relaciones de los planetas entre sí. Estas
relaciones planetarias hablan de nuestra propia relación con
nosotros mismos y con las personas de nuestro entorno.
Cuando acudimos como espectadores al teatro, participamos
de un espectáculo bastante definido, pero también abierto al
cambio. Es decir, los actores conocen su papel, han ensayado
juntos, el decorado está dispuesto y todas las personas que van a
trabajar ese día, desde el actor principal, hasta la persona que
atiende la taquilla, saben cuál es su cometido. Pero al mismo
tiempo, cada representación es diferente de las anteriores. Existen
matices nuevos en la interpretación, y la reacción del público no
es siempre la misma. Esa es la magia del teatro, que es algo vivo
y cambiante.
En la Carta Astral sucede algo similar. Utilizamos símbolos que
son comunes a todas las personas y que sin embargo, se
comportan de forma diferente en cada uno de nosotros. Todo lo
que existe en la Carta Astral son símbolos que apelan tanto a
nuestra mente intuitiva como a nuestra mente lógica y que cada
uno de nosotros podemos entender al nivel que deseemos.
A continuación dedicaremos varios capítulos a explicar, uno
por uno, los diferentes símbolos o elementos que integran una
Carta Astral. En este momento es muy importante que dejes tu
Carta a un lado. Guárdala de momento, olvídate de ella. Ahora
voy a proporcionarte una gran cantidad de información genérica,
que debes asimilar de esa manera, genéricamente. Si intentas
analizar tu Carta a medida que lees cada descripción de cada
signo o planeta, sólo conseguirás crearte una gran confusión
mental y no entenderás nada: ni la información que te presento, ni
tampoco tu Carta. Como supongo que no te gustará perder el
tiempo ni confundirte innecesariamente, espero que hagas caso
de este consejo: guarda tu Carta y no la mires hasta que te lo
indique más adelante.
Emprendamos por tanto la apasionante tarea de conocer los
símbolos básicos de la Astrología.
V - Los Signos.
Características
Cuando pensamos en los signos del zodiaco, solemos tener en
mente las descripciones más o menos acertadas que hemos leído
en determinados libros. Estas descripciones suelen indicar cómo
son los signos solares y qué tipos de personalidades se derivan de
ellos. En ocasiones, parece por estas descripciones que en nuestra
vida sólo vivimos bajo la influencia de un solo signo y que este
impregna completamente nuestra personalidad y comportamiento.
Por otra parte, las descripciones se suelen presentar de un modo
caprichoso y sólo se hace referencia a vagos conceptos como el
aire o el agua que no son suficientes para individualizar ni
explicar plenamente cada signo.
Realmente los signos no son otra cosa que diferentes
manifestaciones de la energía universal. Muestran cómo se
modula la energía del mismo modo que en un receptor de radio
están presentes todas las emisoras. Moviendo la rueda del dial
podemos escoger una u otra estación y escuchar lo que nos
apetezca. Pero todas están ahí, porque las ondas de sus
emisiones están a nuestro alrededor.
Como es lógico, cada estación emisora transmite su señal en
una frecuencia determinada, ya que si todas lo hicieran en la
misma, sería imposible distinguirlas. Por eso es necesario modular
su energía a través del arco de frecuencias, asignando a cada
una su porción del espacio radioeléctrico, es decir, un punto
concreto del dial en nuestro receptor.
Los signos actúan de la misma manera. Cada uno es una
emisora que nos envía constantemente su energía. Es nuestra
consciencia (o nuestra inconsciencia) quien mueve el dial. Los
signos no son personalidades, ni formas de vivir. No son
definiciones caprichosas heredadas de un pasado remoto. Los
signos son doce energías que todos poseemos y que se refuerzan
por la presencia de los diversos planetas en unas u otras
posiciones.
Más allá de las descripciones populares que a veces rayan en
la caricatura, en Astrología tenemos una forma precisa de definir
y entender cómo se modula la energía universal a través de los
signos. Esta forma de definir la energía se realiza a través de sus
Funciones. En este libro llamaremos Funciones astrológicas a las
características propias de cada signo que lo individualizan con
respecto a los demás. La comprensión de estas características es
fundamental para el entendimiento de cada uno de los signos.
Las funciones se dividen en cuatro conjuntos que representan
cuatro formas de manifestación de la energía:

Polaridades
Cualidades
Elementos
Orientaciones

Cada signo pertenece a una polaridad, a una cualidad, a un


elemento y a una orientación concretas, y no hay dos iguales. Así
que al leer las descripciones que siguen, lo más importante es
entender la esencia de cada función más que memorizarla o
aprender los signos que la contienen. Al final de las descripciones
encontrarás una tabla con los doce signos y sus características
que podrás consultar en cualquier momento. Así que no es tan
importante saber ahora si Leo es un signo de fuego, sino qué es el
fuego como elemento astrológico.
Las Polaridades
La clasificación por polaridades divide a los doce signos en
dos grupos de seis. A cada signo le corresponde,
alternativamente, ser activo o pasivo. Astrológicamente, las
polaridades muestran cuál es nuestra forma de entender el mundo
y como nos expresamos en él. Como veremos más adelante, las
polaridades dan origen a los cuatro elementos que representan
una visión más refinada de la dualidad energética.
Las polaridades astrológicas son, por tanto:
Activo (masculino, yang o positivo). La energía activa
está volcada en el mundo exterior. Interesada en las relaciones,
en el contacto con los otros, esta polaridad se ocupa de participar
en experiencias inmediatas. En el plano psicológico refleja la
extroversión. El principio activo es la voluntad de acción, el deseo
de manifestación.
Los signos activos son: Aries, Géminis, Leo, Libra, Sagitario y
Acuario.
Pasivo (femenino, yin o negativo). El principio pasivo se
basa en el reflejo que las experiencias externas producen en
nuestro interior. Aquí todo lo que se experimenta se pone relación
con el propio yo. Psicológicamente es una energía introvertida. El
principio pasivo representa la matriz o el terreno donde las
energías activas pueden actuar.
Los signos pasivos son: Tauro, Cáncer, Virgo, Escorpio,
Capricornio y Piscis.
Como habrás visto, al describir las energías activas y pasivas
he incluido entre paréntesis otras denominaciones posibles que
aparecen en diversas obras astrológicas. Evitaré esos términos en
lo sucesivo porque a mi juicio se prestan a confusión. Pero si
tienes alguna duda sobre su significado, voy a aclararlo
brevemente a continuación.
Por ejemplo, los términos “masculino” y “femenino” me
parecen confusos, pues un hombre puede tener un predominio de
energías pasivas en su carta sin que eso tenga nada que ver con
su orientación sexual. En cambio, el término “pasivo”, ayuda a
entender que este hombre simplemente tiene una vida interior más
intensa que cualquier otro hombre más activo, y que por esta
razón sus acciones no son inmediatas, sino que requieren un
proceso interior de maduración. Decir que un hombre
heterosexual es “femenino” o que una mujer es “masculina”,
significa complicar innecesariamente el análisis.
Los términos “introvertido” y “extrovertido” que acuñó Jung
han pasado al lenguaje cotidiano, perdiendo parte de su
significado original. Hoy en día, por ejemplo, asociamos la
introversión a la timidez, lo cual no es totalmente cierto. La
energía introvertida es centrípeta, es decir, recoge las vivencias
del mundo exterior y las pone en contacto con los propios valores,
reflexiona sobre ellas. Que una persona sea introvertida no
significa que sienta vergüenza o temor a la hora de relacionarse
con los demás, ya que ese sería el aspecto patológico de la
introversión. Un introvertido sano es una persona que necesita
reflexionar sobre lo que sucede a su alrededor, un individuo al
que no le gusta hablar o actuar de un modo impulsivo, sino que lo
hace a partir de un convencimiento interior de que lo que hace lo
correcto.
En cambio, la energía extrovertida es centrífuga. Sale de
dentro hacia fuera, poniendo al yo en contacto con la experiencia
externa. En nuestra sociedad extrovertida se valora mejor a las
personas divertidas, directas e impulsivas. Pero una persona
extrovertida, llevada a su grado patológico, es alguien que se
expande tanto hacia los demás que les impide ser ellos mismos,
ahogando su expresión. El extrovertido sano, en cambio, busca la
experiencia inmediata y compartirla con los demás de un modo
generoso y abierto.
La introversión y la extroversión son dos formas de ser que
nunca se dan de forma pura en ningún ser humano. Todos
reflexionamos en mayor o menor medida y todos podemos actuar
a veces de modo sanamente impulsivo. Ambas cualidades son
valiosas siempre que sean un reflejo sincero de nuestro ser.
Por último, creo que hay que rechazar totalmente los términos
“positivo” y “negativo” a la hora de hablar de polaridades, pues
inducen a creer que estas energías tienen un matiz moral que es
completamente incierto, como acabamos de explicar.
Las Cualidades (Modalidades o
Cuadruplicidades)
Las Cualidades reflejan el movimiento de nuestra energía.
Representan las diferentes formas en que puede desarrollarse el
impulso productivo de la persona. Hablan de cómo nos
enfrentamos a la vida, o sea, de cómo creamos y modelamos la
realidad.
Las Cualidades astrológicas son las siguientes.
Cardinal. Los signos cardinales conquistan el mundo a partir
de su fuerza interior, son los iniciadores, los pioneros, quienes
dan el primer paso adelante. Empiezan las cosas sin preocuparse
demasiado de si éstas seguirán adelante. No les interesa pensar
si serán capaces de mantener el esfuerzo inicial, y generalmente
no lo son. Les falta persistencia, pero les sobra empuje e
iniciativa. El sol transita por ellos al comienzo de cada estación y
por ello rigen los inicios de cualquier actividad. Cuando surgen
los obstáculos, la energía cardinal se opone a ellos, si cabe, con
mayor fuerza y empuje.
Los signos cardinales son: Aires, Cáncer, Libra y Capricornio.
Fijo. La energía de los signos fijos tiende a recoger y a
conservar todo aquello que se ha ganado a lo largo de la vida. Si
los signos cardinales conquistan nuevos territorios, el papel de los
fijos es retenerlos y mantenerlos bajo control. Los signos fijos
carecen de iniciativa, nunca buscarán un horizonte nuevo, pero
son obstinados en su defensa de lo que ya existe. Ante los
problemas reaccionan con cautela y esperan vencer por
agotamiento del rival. Esta energía es la base de nuestra
estabilidad interior en los tiempos de crisis.
Los signos fijos son: Tauro, Leo, Escorpio y Acuario.
Mutable. La función mutable es una mezcla de lo cardinal y
lo fijo. Su acción es fluctuante, pulsante. Actúan en un constante
avance y retroceso. Son los que modifican la realidad, los que
imponen las nuevas ideas. Su mundo es el cambio y la
adaptación a todo lo que pueda surgir. No ganan terreno ni lo
conservan, pero sí abren los ojos a los demás para que
descubran que existen nuevos horizontes. Representan una
energía flexible que sobrevive a cualquier terremoto. Ante la
dificultad, ellos buscan un camino diferente que sorprende a
todos. Así que no atacan de frente ni esperan con paciencia, sino
que rodean el obstáculo.
Los signos mutables son: Géminis, Virgo, Sagitario y Piscis.
Los Elementos (Triplicidades)
Los elementos son cuatro energías que muestran nuestra forma
de ver el mundo y de entenderlo. Se relacionan directamente con
nuestra capacidad de percibir la realidad. Ellos explican cómo
nos comunicamos con el universo que nos rodea. En cierto modo,
los elementos construyen nuestra realidad, pues ésta, al fin y al
cabo, no es más que un reflejo de nuestras propias creencias. Por
esta razón se relacionan muy directamente con la vida cotidiana.
Los cuatro elementos astrológicos reciben los nombres de los
elementos de la tradición occidental: fuego, tierra, aire y agua.
Hay que aclarar que estos elementos no tienen relación con los
elementos químicos de que está compuesta la materia. Los
elementos astrológicos son energías, no materia.
Las energías de los cuatro elementos se pueden definir de la
siguiente manera:
Fuego. La energía del fuego es activa y dominante. No busca
adaptarse al mundo, sino cambiarlo. El fuego es voluntad,
empuje, chispa. Es el movimiento que no soporta ser encarcelado
ni detenido. Por ser la primera energía, es la base sobre la que se
pueden desarrollar el resto de los elementos. El fuego no espera el
momento adecuado para manifestarse, sino que actúa cuando le
place. Sabe ser generoso y perseverante, pero también
impaciente e improvisador.
Los signos de fuego son: Aries, Leo y Sagitario.
Tierra. Los signos de tierra están firmemente asentados en el
mundo material. Su comprensión de la realidad parte de aquello
que es tangible, de lo que se puede captar con los sentidos. Los
signos de tierra no son capaces de aventurarse más allá del
dominio del sentido común. Estos signos son prácticos y fiables,
estables como la tierra que pisamos y fértiles como ella. Son los
que hacen realidad los sueños del fuego. Pero también son signos
limitados por su propia materialidad, que no pueden ir más allá
de lo físico.
Los signos de tierra son: Tauro, Virgo y Capricornio.
Aire. La energía del aire se desarrolla en el plano intelectual.
Este elemento transmite las ideas y se relaciona directamente con
todas las formas de comunicación. Es activo igual que el fuego,
pero tiene con él algunas diferencias. Mientras el fuego se
muestra de forma intensamente personal, el aire actúa mejor en el
plano social. El aire es indirecto en su acción, no se le puede
retener ni está interesado en vivir emociones intensas. Lo que le
atrae es el mundo abstracto de los conceptos y es muy adaptable.
Es también un elemento que tiene profundamente enraizado el
sentido de la justicia y la moral. Su principal defecto consiste en
que es demasiado cambiante y también en su dificultad para
entender el mundo emocional.
Los signos de aire son: Géminis, Libra y Acuario.
Agua. El agua representa una energía que capta la realidad
como un todo continuo. Del mismo modo que el agua tiende a
cubrir los huecos, presentando una superficie plana y regular, el
mundo simbólico del agua tapa todas las diferencias y las
equilibra. El agua es sentimiento, emoción. Es la energía que nos
ayuda a cultivar la empatía y la compasión. Contiene todo
aquello que el aire no puede captar, y también todo lo que el ser
humano puede sentir pero es incapaz de expresar con palabras.
El agua penetra en todo y va a la raíz, por tanto representa el
mundo inconsciente, la mente más profunda. Es también el mundo
de la imaginación y la creatividad. El mayor defecto del agua es
que las emociones solas, sin ayuda de la ética y la razón, tienden
a ser asfixiantes y manipuladoras.
Los signos de agua son: Cáncer, Escorpio y Piscis.
Como se explicó anteriormente, las dos polaridades son el
origen de los cuatro elementos. De esta manera:

Todos los signos de Fuego y Aire pertenecen a la polaridad


Activa o yang.
Todos los signos de Tierra y Agua pertenecen a la polaridad
Pasiva o yin.
La Orientación
La función de orientación revela el ámbito de actuación de la
energía, es decir, dónde se despliegan las fuerzas universales. Los
signos se orientan así en tres escenarios:
Personal. La orientación personal está centrada en el “yo”:
mi mundo, mis deseos, mis ideas, mis posesiones, mi trabajo. Es
la orientación más individual, centrada en el aquí y ahora, en el
presente.
Los signos personales son los cuatro primeros del horóscopo:
Aries, Tauro, Géminis y Cáncer.
Social. Los signos sociales introducen en concepto de “tú”: tú
y yo, tu realidad y la mía, tus deseos y los míos. Estos signos
reflejan la interacción entre las personas, las conexiones. El
campo de acción se amplía, y la referencia temporal es también
mayor, pues cuando tratamos con los demás, muchas veces
tenemos que modificar nuestro tiempo para adaptarnos al de
otros.
Los signos sociales son los cuatro centrales del horóscopo: Leo,
Virgo, Libra y Escorpio.
Universal (transpersonal o colectivo). La orientación
universal o transpersonal amplía considerablemente el campo de
atención. Aquí, más allá del tú y el yo, entra en acción el mundo,
la realidad, el universo. Los signos universales se relacionan con
las ideas, las causas, los grandes conceptos, el desarrollo de la
humanidad. Las lecciones del plano universal se aplican a un
tiempo y un espacio más indefinido, más amplio. Son lecciones
para toda la humanidad, para todas las épocas, y sin embargo
son lecciones que se aplican también a nuestras vidas
individuales.
Los signos universales son los cuatro finales del horóscopo:
Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis.
Regencias
Las Regencias son un conjunto de características algo
diferentes de las anteriores y por eso no las hemos citado en el
esquema inicial. Según la tradición astrológica, avalada por la
práctica moderna, cada signo tiene un planeta que, por decirlo
de algún modo, se encuentra especialmente cómodo cuando se
halla en él. A este planeta que se asocia a cada signo se le llama
“regente” y cuando el regente está en su signo de regencia se
dice que se halla “en domicilio”.
Como puedes suponer, la correlación entre determinados
signos y planetas se debe a que sus características son similares.
Así, el regente de Aries no puede ser otro que el fogoso Marte
mientras que el de Leo es el brillante Sol.
Como hay doce signos y sólo diez planetas, es evidente que
no hay regentes únicos para todos. Actualmente se considera que
hay dos planetas que rigen a su vez en dos signos. Mercurio rige
a Géminis y a Virgo, mientras que Venus lo hace sobre Tauro y
Libra.
En la Tabla 3 se muestra un cuadro con todos los signos y sus
características. En él podrás comprobar los regentes de cada uno
de los signos. Esta tabla será muy importante para referencia
posterior.

Aries:

Polaridad: Activo
Cualidad: Cardinal
Elemento: Fuego
Orientación: Personal
Regente: Marte

Tauro:

Polaridad: Pasivo
Cualidad: Fijo
Elemento: Tierra
Orientación: Personal
Regente: Venus

Géminis:

Polaridad: Activo
Cualidad: Mutable
Elemento: Aire
Orientación: Personal
Regente: Mercurio

Cáncer:

Polaridad: Pasivo
Cualidad: Cardinal
Elemento: Agua
Orientación: Personal
Regente: Luna

Leo:

Polaridad: Activo
Cualidad: Fijo
Elemento: Fuego
Orientación: Social
Regente: Sol

Virgo:

Polaridad: Pasivo
Cualidad: Mutable
Elemento: Tierra
Orientación: Social
Regente: Mercurio

Libra:

Polaridad: Activo
Cualidad: Cardinal
Elemento: Aire
Orientación: Social
Regente: Venus

Escorpio:

Polaridad: Pasivo
Cualidad: Fijo
Elemento: Agua
Orientación: Social
Regente: Plutón

Sagitario:

Polaridad: Activo
Cualidad: Mutable
Elemento: Fuego
Orientación: Universal
Regente: Júpiter

Capricornio:

Polaridad: Pasivo
Cualidad: Cardinal
Elemento: Tierra
Orientación: Universal
Regente: Saturno

Acuario:

Polaridad: Activo
Cualidad: Fijo
Elemento: Aire
Orientación: Universal
Regente: Urano

Piscis:

Polaridad: Pasivo
Cualidad: Mutable
Elemento: Agua
Orientación: Universal
Regente: Neptuno

Tabla 3. Características de los Signos


VI - Los Signos. Descripción
Ahora que hemos estudiado las funciones (o características) de
los signos zodiacales, ha llegado el momento de analizar cada
uno de ellos de forma individual. En el estudio de cada signo
utilizaremos las funciones que se han explicado en el capítulo
anterior, lo que nos permitirá definirlos con precisión, al tiempo
que afianzamos nuestros conocimientos sobre las diversas
funciones.
Hay que repetir aquí que lo que estamos describiendo no son
signos solares, es decir, si uno es Géminis o Acuario. Lo que se
describe a continuación son doce energías que todos poseemos
en nuestra Carta Astral y que nos afectan en mayor o menor
medida. Así que con estas ideas en mente, comencemos por el
primero de los signos, el que da origen a todos los demás, Aries.
Aries
Características: Activo - Cardinal - Fuego - Personal
Regente: Marte
Aries, por ser el primer signo de la rueda zodiacal, representa
la energía en su estado más primario. La suya es una fuerza que
no tiene dirección concreta. Es por tanto un signo lleno de
voluntad, pero sin una ruta fija, sin un propósito permanente
hacia el que dirigir esa voluntad tan poderosa. Esto se debe a su
cualidad Cardinal y a su polaridad Activa. Con la fuerza del
Fuego, sus intenciones pueden variar rápidamente, por lo que con
la misma vehemencia que muestra hoy hacia algo se vuelve
mañana hacia otro objeto de interés.
La energía de Aries es fertilizadora, no en vano el Sol entra en
este signo al inicio de la primavera, cuando la naturaleza
despierta tras su letargo invernal. Aries es un signo cardinal, de
inicios, que abre brecha. Pero también tiene una fuerte tendencia
personal, por lo que los planetas situados en él tienden a reforzar
el propio ego, a destacar la individualidad.
Cuando Aries es prominente en la Carta, la persona tiende a
cumplir sus deseos por encima de todo, sin necesidad de dominar
a otros, simplemente manifestando su voluntad.
Del mismo modo que su dirección vital no es fija, tampoco su
cólera es permanente. Aries es el primer signo de fuego y es por
tanto entusiasta y vital, rápido y auténtico. Su forma de
enfrentarse a la vida se basa en propinar frecuentes ataques de
corta duración más que en un esfuerzo lento y sostenido. Es fiel a
sus principios, aunque estos sean algo primarios y por ello no
suele comprometerse en acciones ilegales o inmorales.
Los retos de Aries son, por un lado, aprender a reconocer las
necesidades de las otras personas y por otro, encontrar una meta
definida y estable hacia la que dirigir su potente energía.
Los planetas en Aries se manifiestan de manera rápida,
decidida y orientada hacia el propio yo.
Tauro
Características: Pasivo - Fijo - Tierra - Personal
Regente: Venus
Tauro es el medio a través del cual las energías de Aries
pueden crear algo sólido y estable. La naturaleza de Tauro es tal
que permite hacer realidad muchos de los deseos arianos. Su
energía es fiable y determinada.
Este es el primer signo de tierra del horóscopo y es además un
signo fijo. Así que donde Aries es impulsivo e inconstante, Tauro
es deliberado y persistente. Cuando Tauro encuentra una meta
por la que luchar, se dirigirá como hacia ella una apisonadora,
derribando los obstáculos con la fuerza de su terco avance.
Pero Tauro no es esencialmente un destructor, sino un
constructor. Él es quien da forma a la materia y quien moldea los
sueños en realidades tangibles. Es fértil como la tierra sobre la
que se asienta. No ve el mundo como un escenario ni como un
instrumento, sino que desea formar parte de él, ser uno con la
tierra. Por eso Tauro disfruta del mundo físico, de los placeres
estéticos y sencillos. Ama la buena mesa y el arte decorativo, es
un buen creador aunque quizá adolece de cierta falta de
originalidad.
Es lento para irritarse, pero cuando su vaso se colma, estalla
en una furia destructiva y demoledora. Cuando Tauro da un golpe
sobre la mesa, el resto de los signos pueden empezar a temblar.
Evidentemente, este signo es, a la larga, mucho más
productivo que el anterior, pero su empecinamiento puede tener
también un lado negativo. Si su meta no es la adecuada, a Tauro
le costará darse cuenta del error y perderá mucho tiempo y
energía hasta encontrar un objetivo mejor.
El enfoque de Tauro sigue siendo claramente personal y por
eso este signo no precisa del aplauso ajeno ni de la aprobación
de los demás. Es feliz en su mundo, aunque realmente es muy
sensual y disfruta de los placeres eróticos sin demasiadas
complicaciones.
Los planetas en Tauro se vuelven más lentos y deliberados en
su acción. El enfoque de estos planetas es decididamente práctico
y en ellos se busca la seguridad y la estabilidad.
Géminis
Características: Activo - Mutable - Aire - Personal
Regente: Mercurio
Con Géminis llegamos al primer signo de aire, que es además
mutable. Por eso, él marca nuestro primer contacto con el mundo
mental. Géminis se mueve tan rápido como el viento y puede
pasar de un tema a otro con gran velocidad. Por este motivo, es
adaptable y sabe sobrevivir en cualquier medio. Su acción es
lógica, racional y mentalmente muy decidida. Ciertamente es
inconstante como lo es el viento, y en muchas ocasiones pecará
de una gran incoherencia. Las ideas que hoy defiende con
vehemencia, mañana las rechazará para sustituirlas por otras
igualmente brillantes.
No es este un signo que sea capaz de profundos apegos
sentimentales, aunque disfrute con la comunicación y el libre
intercambio de ideas. Le gusta la novedad y es el más curioso e
indiscreto de todos los signos. A Géminis le gusta hablar, discutir
y nunca se sentirá satisfecho hasta que haya convencido a todos
de lo que para él son sus geniales ocurrencias. Porque Géminis es
un signo personal, no social, y sólo vive el contacto con los demás
como reafirmación de sí mismo.
Uno de los principales problemas de Géminis es que le falta
empatía y profundidad emocional. Sabe entender, pero le cuesta
sentir el dolor o la alegría ajena como propia. El mundo de los
sentimientos le provoca perplejidad y se siente sorprendido de
que existan zonas de la realidad que no estén al alcance de su
mente. Otro de los problemas de este signo, que se da en los
niveles evolutivos más bajos, es su afición a los trucos, al doble
juego, e incluso a la mentira. Probablemente lo que excita a estos
Géminis es el desafío mental, la posibilidad de engañar a otros
sin que se den cuenta, o el gusto por el enredo.
En cualquier caso, todos los Géminis son muy aficionados a
los trucos de manos y a los juegos de inteligencia. Así, Géminis
no ataca directamente los problemas, sino que tiende a rodearlos,
buscando soluciones alternativas y originales. Este
comportamiento oblicuo es sin duda una de sus mejores
cualidades. Si se ve presionado, no atacará de frente sino que
buscará una solución alternativa. Esta habilidad hace que
Géminis sea desconcertante para los signos fijos.
Los planetas situados en Géminis tienen un efecto claramente
mental. Actúan con rapidez y tienen una gran influencia en la
capacidad de comunicación.
Cáncer
Características: Pasivo - Cardinal - Agua - Personal
Regente: La Luna
Cáncer es el último de los signos personales y el primero de
los acuáticos. En la rueda zodiacal, los signos de agua indican el
final de una orientación concreta y anuncian el inicio de la
siguiente que comenzará con un signo de fuego.
En Cáncer se inicia el despliegue de las energías emocionales
del ser. Donde Géminis se encontraba con la sorpresa de la
emoción, Cáncer se abre a una nueva dimensión basada en los
sentimientos. Representa por tanto nuestra conciencia emocional.
La energía de Cáncer se manifiesta a partir de la necesidad
de formar parte de algo. Es el apego a la familia, al pasado.
También indica la necesidad que tenemos todos los seres
humanos de experimentar el sentimiento de hogar, un refugio
estable en el que resguardarnos de las tormentas del mundo
exterior. No se trata aquí sólo del hogar físico, de las cuatro
paredes de nuestra casa, sino también del hogar interior, del
sentimiento de seguridad y de autoprotección.
Se dice muchas veces que Cáncer está recubierto de una dura
concha protectora, como ocurre con el cangrejo que da nombre a
su signo. Pero dentro de esta concha, la carne del cangrejo es
blanda. Cáncer es un signo susceptible, que sufre mucho con la
crítica aunque ésta sea constructiva. Este es su peor defecto, ya
que le hace ser rencoroso y en ocasiones posesivo. La
posesividad de Cáncer aparece en los segmentos menos
evolucionados del signo, cuando éste siente que sus desvelos
emocionales no son correspondidos en la misma medida.
La función del signo de Cáncer en el horóscopo es el de
proporcionar la necesaria nutrición emocional. Vuelve aquí el
sentido familiar de este signo, ya que Cáncer es quien apoya a
los demás, quien se ocupa de los necesitados, quien lucha por la
cohesión de la comunidad.
El sentido de familia se puede ampliar desde lo más íntimo a
lo más general. Cáncer es entonces el patriota, aquel que se
siente a gusto con la bandera, con la lengua natal y dentro de los
límites de su país. No es beligerante con otros pueblos, pero
siente el orgullo de pertenecer al suyo. Este interés por el país y el
pasado hace que muchas personas que tienen destacado este
signo en sus Cartas se interesen por el estudio de la historia o se
dediquen al coleccionismo de antigüedades o a la conservación
de museos.
Los planetas en Cáncer se tiñen con un tono muy emocional y
sensible. A través de ellos se busca la creación de un sentimiento
de familia y se formula un deseo de protección.
Leo
Características: Activo - Fijo - Fuego - Social
Regente: El Sol
Leo, con su energía de fuego, abre el capítulo de los signos
sociales de la rueda zodiacal. Aquí el fuego busca expresarse de
una forma afirmativa en el ámbito interpersonal, pero esta es una
expresión aún muy basada en el yo.
Leo desea ser admirado, aplaudido por los demás. Es un signo
que necesita impresionar, ser el centro de atención. Es el “yo soy”
del horóscopo y su pensamiento es: “si yo soy fascinante, los
demás deben sentirse fascinados por mí”. Pero Leo no fingirá ni
buscará ser diferente para llamar la atención, busca ser admirado
porque realmente es importante, y no sólo desea aparentarlo.
En su deseo de estar por encima, Leo es obstinado con toda la
fuerza de su cualidad fija. Como el signo fijo anterior, Tauro, Leo
sabe ser persistente. Si tiene una meta, luchará por ella sin
dudarlo. Pero si Tauro busca enraizarse en la tierra a la que
pertenece, el signo del león lucha por brillar. Él no puede vivir en
el vacío, fuera de la sociedad. Necesita al grupo aunque su
energía social recientemente estrenada no le permita aún aceptar
plenamente a los demás. Ciertamente, el nivel más bajo de Leo es
presuntuoso y arrogante, demasiado teatral en su conducta.
En las personas más elevadas, la energía de Leo se asimila al
poder del Sol que anima la consciencia. Este signo se convierte en
una fuente de poder que irradia toda la personalidad y se
extiende hacia los demás. Representa el desarrollo sano del ego,
así como la confianza en uno mismo y en nuestras capacidades.
Es un signo creativo y muy expresivo, con una cualidad dramática
muy excitante.
Otra de las buenas cualidades de Leo es su honradez, ya que
mientras se sienta respetado, él siempre actuará con integridad
hacia sus propios valores morales y con lealtad hacia los demás.
Como todos los signos de fuego, a Leo no le gustan los dobles
juegos, se presenta tal como es y no suele esconder nada. Es fiel
a sí mismo y si no le entorpecen, puede ser un buen ejemplo para
los demás.
Los planetas situados en Leo desean brillar y extender hacia el
exterior sus mejores cualidades. Actúan de manera estable y
determinada, no exenta de cierta exageración.
Virgo
Características: Pasivo - Mutable - Tierra - Social
Regente: Mercurio
Virgo es el signo del trabajo y de la responsabilidad. Mientras
Leo se vanagloria de sus éxitos, el humilde Virgo trabaja en la
trastienda, ordenando y cuidando cada detalle. Este es un signo
modesto e incluso tímido, que se conforma con la honrada
satisfacción del deber cumplido. Virgo se sentirá satisfecho
consigo mismo cuando haya terminado su jornada laboral, sin
que le importe el reconocimiento ajeno ni necesite presentar
grandes logros para impresionar a los demás.
La energía terráquea de Virgo busca destacar a través de la
eficiencia, enfrentándose al universo material e intentando
vencerle en un combate que a la larga siempre perderá. Porque el
mundo físico es demasiado grande para ser dominado por
cualquier individuo. Pero Virgo siempre buscará adaptarse a él,
unas veces abriéndose camino, otras esperando pacientemente su
oportunidad.
Virgo es cuidadoso, le gusta analizar cada detalle y poner
orden en los elementos dispersos. Es el signo del trabajo
meticuloso y he aquí una de sus mayores virtudes y al tiempo uno
de sus grandes defectos. A Virgo no se le puede hablar de
grandes conceptos, ni se puede esperar de él que solucione
problemas de amplio alcance. Actúa con sencillez y de forma
realista. En los espacios abiertos se pierde, prefiriendo refugiarse
en su pequeño universo conocido y estable.
Siendo tan cuidadoso con el detalle, es fácil que pierda la
visión de conjunto. Le cuesta entender que el todo es mucho más
que la suma de sus partes, que el ser humano, por ejemplo, es
mucho más que un conjunto de órganos, o que la sociedad es
más que un grupo de individuos.
De todos los signos sociales, este es quizás el que con más
dificultad se adapta a la convivencia. En el fondo, lo que él desea
es cambiar el mundo, cambiarse a sí mismo y a los que le rodean.
Es intensamente crítico con la realidad y esta es, de nuevo, una
fuerza y una debilidad. Sin crítica no se puede reconocer el error
y enmendarlo, pero la crítica excesiva puede ser un ácido que
destruya cualquier tipo de convivencia. Virgo busca la perfección,
la pulcritud. Por eso, este es el signo de la medicina y de la
higiene. Su energía es necesaria para que podamos enfrentarnos
con éxito a las diversas exigencias del mundo material.
Los planetas en Virgo tienden a funcionar de forma más
precisa y cuidadosa. Virgo acentúa las cualidades críticas de
cada planeta y busca enfrentar su energía con los retos materiales
de la vida cotidiana.
Libra
Características: Activo - Cardinal - Aire - Social
Regente: Venus
Con Libra, la socialización de los signos llega a su más alto
grado de madurez. El terreno de Libra son las relaciones y el
contacto con las personas. De hecho, Libra es el signo más hábil
en el trato con los demás y sabe resolver cualquier conflicto con
una sonrisa.
Libra representa una energía que derrocha encanto y
elegancia. Detesta la fealdad y busca construirse un mundo bello
en el que poder vivir. La búsqueda de la belleza de Libra le
acerca al talento creativo, pero la suya es una creatividad
tranquila y algo conformista. No le gusta el arte de vanguardia y
evitará las obras de carácter emocional o dramático. Al fin y al
cabo, este es un signo de aire, que no acepta con facilidad las
profundidades emotivas.
Siendo un signo aéreo, Libra tiene un profundo sentido de la
justicia y no en vano, muchas de las personas que tienen este
signo destacado en su carta sienten un profundo interés por los
temas jurídicos. Si hay algo que de verdad irrita al tranquilo Libra
es la injusticia o el trato desigual. Libra tiene la necesidad de
entenderse con los demás en un plano equitativo. No busca el
contacto con la masa, sino el encuentro cara a cara, la
conversación entre dos.
Verdaderamente, Libra ama el diálogo y es, junto a Géminis,
uno de los mejores conversadores del zodiaco. Pero en
contraposición a este otro signo de aire, a Libra le disgustan los
debates, la discusión. Prefiere el entendimiento cordial y elude
cualquier tipo de querella o disputa, actuando con la proverbial
suavidad del aire. Es por tanto un buen diplomático, siendo ésta
una de sus grandes virtudes.
El principal defecto de Libra es que por ser tan dependiente
del contacto social, de la aprobación ajena, muchas veces cede
con facilidad ante las opiniones o exigencias de las demás
personas. En este sentido, quienes tienen a este signo destacado
suelen apoyarse excesivamente en los otros, sin que parezca que
sean capaces de expresar una idea propia. Libra actúa muchas
veces como una veleta, que se mueve al ritmo de los vientos
reinantes. Todo esto se debe a su perpetua indecisión, a la
necesidad que tiene de ver el mundo en términos de blanco y
negro, sin saber nunca hacia qué lado inclinar su simbólica
balanza.
En un plano más positivo, la naturaleza de Libra nos ayuda a
recordar que el ser humano forma parte de la sociedad, que el
resto de las personas son necesarias para nosotros y que cuando
una injusticia se comete sobre algún ser humano, en gran medida,
también se comete contra nosotros mismos.
Los planetas en Libra se centran en el área de las relaciones,
del diálogo con la otra persona. De naturaleza pacífica y ligera,
Libra impregna con su energía equitativa a los planetas que
albergue en la Carta Astral.
Escorpio
Características: Pasivo - Fijo - Agua - Social
Regente: Plutón
Al llegar a Escorpio nos encontramos con el signo que
seguramente arrastra la peor fama de todo el zodiaco. Como ya
se ha dicho, en este libro no trataremos los signos en términos de
“buenos” y “malos”. Todo signo representa una energía, o mejor,
un conjunto de energías que pueden ser empleadas para
cualquier propósito que sea compatible con ellas. Las energías de
Escorpio pueden ser muy positivas si se dirigen adecuadamente.
Escorpio es el signo de la transformación. Es el último de los
signos sociales y como ya hemos visto en el caso de Cáncer, el
final de un ciclo de orientación coincide siempre con un signo de
agua, que representa la hondura del sentimiento que es necesaria
para afrontar cualquier proceso de cambio. La transformación de
Escorpio implica abandonar el limitado núcleo social en el que
nos desenvolvemos normalmente para entrar en el amplio mundo
de las energías transpersonales o universales.
La palabra que mejor podría definir a Escorpio es “intensidad”
ya que este signo necesita sentir que todo lo que hace, y todo lo
que vive tiene un profundo significado que impregna cada fibra
de su ser. Pero la intensidad de Escorpio es acuática, es decir,
emocional. Los significados que busca no son conceptuales (esto
pertenece al reino del aire), ni su intensidad es apasionada o
chispeante (atributos del fuego). Escorpio busca más bien llevar a
la consciencia hacia lo más profundo. Por eso detesta la
superficialidad y huye de lo banal o de lo fácil.
Este es el signo de los investigadores, de los científicos, y está
muy destacado en muchas cartas de psiquiatras. Las personas con
un Escorpio fuerte necesitan ir más allá de las apariencias,
provocar cambios, transformarse y transformar a los que les
rodean. Como signo fronterizo que es, Escorpio prefigura el
enfrentamiento con lo trascendental que se producirá en los signos
transpersonales que le siguen en la rueda zodiacal, y como signo
fijo, es perseverante en su inmersión.
A Escorpio le gustan los misterios, lo desconocido y siente una
especial predilección por todo lo prohibido u oculto. Con
frecuencia se asocia a Escorpio con el sexo. Pero lo que busca
este signo en la experiencia erótica no es puramente el placer,
sino la trascendencia, la profundidad de sentimientos que provoca
el orgasmo. Su interés por los aspectos más ocultos de la
experiencia le hace bordear continuamente la línea que separa lo
socialmente aceptable de aquello que es perseguido por las
normas y las costumbres. Esto puede acarrearle problemas, pero
también representa un impulso para el desarrollo social, para que
se normalicen aspectos del ser que hasta ese momento estaban
escondidos.
Otro de los problemas de Escorpio es que puede captar
muchas cosas a través de su intuición, pero le falta capacidad de
expresión. El agua sólo se expresa en el instante en que aflora el
sentimiento, y por tanto, no alcanza el grado de abstracción
necesario para que se dé una comunicación fluida (esa es una
cualidad del aire). Por eso, Escorpio parece taciturno y a veces se
enfada sin motivo. No es que sea un signo negativo en sí mismo,
sino que no encuentra la forma de expresar lo que quiere, aunque
lo sienta con todo su ser. En la confrontación es temible, pero a la
hora de alcanzar la verdad, por escondida que esté, no hay
nadie que le supere.
Los planetas en Escorpio muestran una gran capacidad
transformadora. Aquí se vive con una intensidad dramática poco
común y es importante buscar que estos planetas se expresen de
forma positiva y directa para que no se conviertan en focos de
conflicto. Por otro lado, estos planetas pueden ser una llave para
acceder al mundo inconsciente.
Sagitario
Características: Activo - Mutable - Fuego - Universal
Regente: Júpiter
Con Sagitario entramos de lleno en el campo de los signos
universales o transpersonales. Sagitario representa la energía que
nos impulsa a descubrir las normas sociales, a entenderlas y a
buscar en ellas nuestra propia forma de expresión. La sociedad
aquí no es sólo el pequeño núcleo que nos rodea, sino el gran
referente que representa una cultura o unas costumbres que
compartimos con millones de personas.
Animado por la energía del fuego, que siempre da inicio a
cada orientación zodiacal, Sagitario muestra nuestro primer
intento por entender el contexto social. Este es por tanto el signo
de los filósofos, de los idealistas y de las personas profundamente
religiosas. Pero si bien el fuego de Sagitario busca una expresión
individual en todos estos campos, también es cierto que este es
uno de los signos que con mayor facilidad acaban integrándose
en la ortodoxia.
Sagitario sentirá interés por la religión, pero generalmente no
incurrirá en los terrenos más renovadores del pensamiento
religioso, sino que se mantendrá dentro de las normas
establecidas. También será un buen estudiante, que disfrutará de
su paso por la Universidad, pero falto de la necesaria rebeldía
que separa a la persona inteligente del genio.
Esta aparente paradoja, entre la necesidad de una expresión
propia y la aceptación de las normas, se debe probablemente a
que Sagitario aún no ha aprendido a manejar las energías
transpersonales, sino que es testigo de ellas y de su poder. Como
buen signo mutable, Sagitario siempre se debatirá entre la
obediencia y la rebeldía.
En muchos casos, Sagitario es un amante de la libertad que no
duda en ir contra corriente, buscando un espacio que le permita
expresar su individualidad aunque esta expresión sea algo
incoherente. En otros casos, la energía de este signo se integra en
la trama social y permite desenredar los hilos de esa estructura.
Ambas energías pueden ser muy creativas si se manejan
adecuadamente.
Sagitario es un amante de los viajes, de las culturas
extranjeras, de los idiomas y de todo lo que suene a exótico. La
idea del viaje como aventura o como forma de expandir la
conciencia en el contacto con otras realidades, es típicamente
sagitariana. En los niveles más inferiores representa al turista
ávido de novedad. Pero en los superiores es el viajero consciente,
el explorador que busca a través del recorrido un camino hacia su
propio interior. Este signo viaja con su mente tanto como con su
cuerpo y necesita espacio libre para poder expresarse y crecer.
Los planetas situados en Sagitario incrementan la necesidad
de libertad de la persona y buscan expresarse de una forma
independiente pero constructiva. Ellos son el impulso hacia el
estudio superior y la curiosidad general por el mundo y sus
gentes.
Capricornio
Características: Pasivo - Cardinal - Tierra - Universal
Regente: Saturno
Como segundo signo universal, Capricornio está interesado
por el mundo social al igual que el signo precedente. Pero su
aproximación a esta realidad es bastante diferente. Capricornio
busca un acercamiento objetivo a la verdad. No le gustan las
disquisiciones filosóficas, sobre todo si se hacen en el vacío.
Siendo un signo de tierra, Capricornio persigue la eficacia, un
conocimiento del mundo que no sólo se adapte a las
convenciones sociales, sino que sea operativo. Él es un
constructor, o para ser más precisos, un arquitecto que diseña los
edificios de realidad que otros signos terrestres deberán
materializar.
No desea depender de los demás, sino ser él quien controle y
decida. Por esta razón, los capricornianos buscan elevarse sobre
una posición dominante que les permita tomar decisiones que
tengan un impacto en la sociedad o en el núcleo más cercano. Lo
que busca Capricornio no es el poder por el poder, sino que todo
lo que hace viene marcado por un profundo sentido del deber.
Según su idea, nadie organiza la realidad mejor que él, así que
es natural que le dejen al timón de los acontecimientos. Cuando
Capricornio está al mando, su actuación no es sino una
continuación de los antiguos métodos, de las ideas ya definidas y
aceptadas.
Ciertamente Capricornio no es original, pero sí eficaz. La
responsabilidad es su religión y desde muy joven sentirá la
necesidad de tomar posiciones de poder en el mundo exterior.
Capricornio está interesado en los principios tanto como Sagitario
y es un signo bastante ético en su comportamiento. Pero el deseo
de ascensión social, de controlar la realidad, es demasiado fuerte
y puede crear, en las personas menos evolucionadas, todo tipo de
conflictos.
Capricornio es el signo de los banqueros, de los empresarios,
de los economistas y también de las figuras de autoridad ya que
él es quien está encargado de materializar las normas sociales,
de lograr que se transmitan de generación en generación. Su
principal defecto puede ser el materialismo. Su mayor virtud, la
capacidad de sobrevivir en los conflictos del mundo real.
El efecto de Capricornio en los planetas es el de enraizarlos
en la realidad material. Los planetas muestran aquí la capacidad
de adaptarse a las normas sociales establecidas.
Acuario
Características: Activo - Fijo - Aire - Universal
Regente: Urano
Acuario es el tercero de los signos universales y, por ser de
aire, muestra el punto de máxima afirmación colectiva. Este es un
signo que se desenvuelve bien en medio del grupo, ya que aquí el
yo se subordina a los deseos de la mayoría, al impulso del
colectivo.
El sentimiento de Acuario es gregario, en oposición a Leo, que
es profundamente individualista y que se sitúa en el otro extremo
de la rueda zodiacal. Donde Leo dice: “yo soy”, Acuario
manifiesta: “nosotros somos”. Aquí el yo se disuelve en el grupo
porque se siente cómodo en él, pero también tiene tendencia a
dirigir el movimiento grupal.
Acuario valora la amistad y se vuelca de manera activa y
dispuesta en el desarrollo de las vivencias colectivas. Sus
emociones no son intensas, ya que se trata de un signo de aire,
por lo que su impulso hacia los demás es de carácter más
humanitario que sentimental. El aire es un elemento ético, moral, y
por tanto Acuario busca la igualdad del género humano, la
solidaridad entre los pueblos, el desarrollo social. Pero las
relaciones entre personas individuales, el “tú y yo” donde el
anterior signo aéreo, Libra, se mueve con tanta facilidad, se
queda pequeño para las grandes ideas de Acuario.
Al signo de Acuario le atraen las ideas nuevas, los
comportamientos radicales, la reforma. Ama la libertad por
encima de todo y no se atará por cuestiones sentimentales. Es
imparcial y sabe actuar con el desapego que se requiere en
muchas situaciones vitales. Pero no hay que olvidar que se trata
de un signo fijo, por lo que una vez que sus ideas se ponen en
práctica, no las abandona jamás.
El principal problema de Acuario es que ama a toda la
humanidad, pero el ser humano concreto le resulta demasiado
complejo para ser entendido. Por eso busca sumergirse en el
grupo, para evitar las relaciones directas y emotivas en las que se
siente desplazado.
Los planetas en Acuario tienden a funcionar en un plano social
y revolucionario. Acuario aporta una visión sorprendente de los
asuntos relacionados con el planeta en cuestión.
Piscis
Características: Pasivo - Mutable - Agua - Universal
Regente: Neptuno
Con Piscis llegamos al final de la rueda zodiacal. Este signo
representa, por tanto, el final de todos los ciclos que se dan en el
seno de las energías celestes. Con Piscis el yo llega a su
trascendencia, siendo el punto desde donde podemos dar el salto
a niveles superiores de consciencia. Para captar la esencia de
Piscis debemos entender a la rueda zodiacal no como un círculo,
sino como una espiral, en la que este signo representa el punto
donde el círculo inicial se amplía en un nuevo giro de mayor
conocimiento.
Todo cambio requiere pasar por un proceso de muerte y
resurrección, y en esa muerte simbólica está la semilla de un
nuevo comienzo. A diferencia del signo anterior, Piscis no se
sumerge en la sociedad, sino en el universo entero. Por eso, éste
es el signo más espiritual de todo el zodiaco, aquel en el que el
concepto de religión (que viene del latín re-ligare, volver a unir),
adquiere su más pleno significado. Si en Aries, el yo surge del
Todo universal para comenzar su rueda evolutiva, en Piscis el yo
busca de nuevo reintegrarse en el Todo del que partió.
En un nivel más terrenal, la energía de Piscis nos impulsa a
disminuir el valor del yo. Piscis es un signo receptivo y por tanto
está abierto a todo tipo de influencias externas. Es mutable y
acuático, por lo que fluctúa con los acontecimientos y éstos le
causan un profundo impacto anímico.
En los casos menos evolucionados, la persona que tiene este
signo destacado en su Carta Astral tiende a dejarse influir por
aquellos que están en su entorno, como si careciera de
personalidad. Este Piscis es pasivo y sufriente. Se mueve por el
mundo como una víctima de la maldad ajena, o acosado por los
fantasmas de su mente fantasiosa, sin atreverse a dar el paso
siguiente en su evolución, en la espiral de la vida.
En los casos más evolucionados, Piscis actúa como una antena
abierta a los mensajes del mundo. No en vano, este es el signo
de las personas con dotes psíquicas y de aquellos que tienen una
gran intuición. Los Piscis superiores sienten compasión hacia el
dolor ajeno y se encuentran con facilidad en los hospitales y en
las instituciones benéficas. Es el signo de la más alta
espiritualidad y del amor universal. Estos Piscis están de verdad a
punto de iniciar el nuevo giro de la espiral.
Los planetas situados en Piscis reducen el poder del yo,
incrementando la empatía y la receptividad. Estos planetas se
manifiestan de un modo creativo e imaginativo, lleno de
compasión y humildad.
En el próximo capítulo comenzaremos a explicar la posición
mundana, es decir, el conjunto de las Casas de la Carta Astral.
En él aprenderemos a ver cómo la elevada energía de los signos
comienza a concretarse en el plano cercano de nuestra vida
cotidiana.
VII - Las Casas
Al hablar de las Casas entramos en el terreno de la posición
mundana de los planetas. En Astrología, el término “mundano”
significa simplemente “del mundo”, o sea, “de la Tierra”. De este
modo, la posición mundana dibuja la situación de los planetas tal
como se observa desde el lugar y para el momento concreto en
que nace una persona.
Como vimos en el Capítulo IV, la posición mundana traza la
situación de los planetas con respecto al horizonte local, dando
origen al sistema de Casas. Si los signos tienen el mismo tamaño,
o sea, treinta grados cada uno, las casas presentan una longitud
variable. También, a diferencia de los signos, las casas no se
identifican mediante nombres, sino a través de una numeración
correlativa que comienza con la casa que está por debajo del
Ascendente y sigue en sentido contrario a las agujas del reloj.
Por otro lado, sabemos que las doce casas están enmarcadas
por cuatro puntos fundamentales, que se denominan “ángulos” del
horóscopo: Ascendente, Bajo Cielo, Descendente y Medio Cielo.
Estos ángulos, que se agrupan por oposición en dos parejas, dan
lugar a dos líneas divisorias muy importantes, también llamadas
“ejes”: el Horizonte y el Meridiano.
El Horizonte (Línea Ascendente-
Descendente)
La línea del horizonte divide el espacio de la Esfera Celeste en
dos mitades (Fig. 9). Por un lado está el cielo, la zona que
podemos ver. En la otra mitad está la masa de la Tierra que
impide la visión de los planetas que están bajo ella. Lo que existe
por debajo de la masa de la Tierra es algo que no puede ser
percibido directamente. Descubrir lo que hay “ahí abajo” requiere
por tanto un esfuerzo de la mente, mientras que lo que está sobre
el horizonte se puede percibir con claridad, ya que es evidente a
la mirada.
Figura 9. El horizonte y las casas

El horizonte marca la frontera simbólica entre el mundo interior


y el exterior, entre lo que está fuera de nosotros y lo que está en
nuestro interior. La línea del Horizonte señala una división que
puede resumirse así:

Hemisferio inferior. Yo, lo personal, lo inconsciente, lo


subjetivo, el pasado, la familia, el origen. Abarca las casas 1
hasta la 6.
Hemisferio superior. Lo que no es yo, lo social, lo
consciente, lo objetivo, el futuro, la sociedad, el destino.
Comprende las casas 7 a 12.
El Ascendente

El Ascendente es el signo que está surgiendo por el horizonte


oriental en el momento del nacimiento. Como ya sabemos que la
esfera celeste se mueve de este a oeste, el signo está literalmente
“subiendo” por el cielo, es decir, ascendiendo. El grado del
Ascendente marca el inicio de la casa 1 (en terminología
astrológica, el inicio de una casa es su “cúspide”), y por lo tanto
configura la línea del horizonte y todo el sistema de casas de la
Carta Astral. Es un punto fundamental para el correcto análisis del
Horóscopo.
Desde el punto de vista de la interpretación, el Ascendente es
un punto de manifestación del yo, ya que es el lugar donde las
energías del hemisferio inferior salen al encuentro del mundo
exterior. Muestra la cara que damos al mundo, cómo nos ven los
demás, nuestra apariencia, tanto en el carácter como físicamente.
Arquetípicamente, si el Sol representa al héroe que va a
emprender su tarea, el Ascendente simboliza las armas del héroe.
El ascendente nos ayuda a enfrentarnos al mundo, es un factor de
socialización muy importante en nuestra personalidad. En el plano
psicológico es la Máscara, el compromiso entre la realidad
interior y las demandas del mundo exterior.
Pero las armas del héroe pueden ser de dos tipos: ofensivas o
defensivas. Del mismo modo que hay ascendentes que parecen
tan afilados como una espada y que ayudan a la persona a
abrirse camino eficazmente en el mundo, hay también
ascendentes que cumplen a la perfección su papel de máscara, o
mejor, de escudo frente a las agresiones externas. Son éstos los
ascendentes defensivos, que se construyen como el caparazón de
los insectos, es decir, a partir de capas protectoras que se van
superponiendo con el paso del tiempo.

Descendente
El Descendente es el punto opuesto al Ascendente en la Carta
Astral. Representa la zona del cielo donde los signos se ocultan
para entrar en el hemisferio inferior de la Carta. La línea
Ascendente-Descendente es la línea del horizonte y este punto es
la cúspide de la Séptima Casa.
Simbólicamente, el Descendente indica el efecto que los demás
causan en nosotros. Es decir, lo contrario al Ascendente. Es la
vivencia del mundo externo en el plano interno. En una dimensión
más profunda, se podría decir que indica aquellas cualidades de
uno mismo que reconocemos en los demás a través de las
relaciones.
El Descendente se alinea directamente con los procesos de
atracción o de rechazo entre las personas. Describe lo que
buscamos en los otros, o lo que proyectamos en ellos. Por eso es
muy importante en el análisis de las relaciones.
El Meridiano (Línea Medio Cielo-
Bajo Cielo)
Si el horizonte es una línea fácil de entender, basada en las
direcciones este y oeste, el meridiano se basa en los puntos
superior e inferior de la esfera celeste. Efectivamente, cuando
estamos en un punto de la superficie terrestre, existe un “arriba”
en la esfera, que está justo sobre nuestra cabeza y un “abajo”
que se proyecta debajo de nuestros pies.
El meridiano es la línea que une el punto más alto de la
bóveda celeste con el punto más bajo que se encuentra debajo de
la masa de la Tierra. El punto superior se conoce como Medio
Cielo o Mediodía, ya que es el lugar donde se encuentra el Sol
en ese momento del día. El punto Inferior, que no vemos porque
nos lo oculta la propia superficie de nuestro planeta, se llama
Bajo Cielo. Por supuesto, a la inversa de lo que ocurre con el
Medio Cielo, el Sol visita el Bajo Cielo a medianoche.
La línea del meridiano divide de nuevo a la Carta Astral en
dos mitades o hemisferios (Fig. 10):

El hemisferio oriental (este), señala el punto donde los


planetas nacen. Se relaciona directamente con la
manifestación del yo interior en el mundo exterior. Por tanto,
este hemisferio es activo y se considera sometido al control
personal.
El hemisferio occidental (oeste), indica la zona donde
los planetas se ponen. Indican la forma en que percibimos el
mundo y la influencia que recibimos de él. Este hemisferio es
pasivo y tradicionalmente se considera que se halla fuera del
control personal.

El Medio Cielo
El Medio Cielo se conoce también por su nombre en latín:
Medium Coeli o M.C. y como se ha dicho, representa el lugar de
la bóveda celeste que se encuentra justo encima de nuestra
cabeza.
Figura 10. El meridiano y las casas

El Medio Cielo es el punto de la máxima exteriorización del


yo. Es el mundo social, que se relaciona muy indirectamente con
el mundo personal. Generalmente se asocia al Medio Cielo con la
profesión y en general con todo lo que uno hace en esta vida.
Muchas personas se identifican con su profesión, y es cierto que
cuando no conocemos bien a alguien lo asociamos con el oficio
que desempeña. Así, muchas personas de nuestro entorno social
son para nosotros simplemente: el cartero, el médico, el empleado
del banco, etc.
La idea más importante con respecto al Medio Cielo es su
relación con el “hacer”. Si el Ascendente se relaciona con el
“ser”, sobre todo en relación con el mundo exterior, el Medio
Cielo tiene una gran importancia en nuestra vida activa. En un
plano más elevado, podemos decir que este punto señala la
actividad que es necesaria para crecer como seres humanos. En
nuestro arquetipo solar-heroico, el Medio Cielo es la función, la
tarea del héroe. Este es por tanto un punto muy importante de la
Carta Astral.

El Bajo Cielo

Conocido por su nombre latino (Imum Coeli o I.C.), el Bajo


Cielo señala el punto opuesto al Medio Cielo en la rueda
zodiacal.
La posición del Bajo Cielo ya nos indica que es el lugar de
mayor interiorización del yo. Representa los orígenes, la familia,
lo más íntimo. Es nuestra idea del hogar, allí donde encontramos
el sentimiento de mayor seguridad personal. Como el Bajo Cielo
señala a la tierra que está bajo nuestros pies, este punto indica
nuestra vinculación con la tierra, con las raíces. Es la base interior
a partir de la cual nos abrimos al mundo exterior que está
representado por el Medio Cielo.
Los cuatro ángulos de la Carta son, como vemos, puntos muy
importantes que definen aspectos básicos de nuestra relación con
nosotros mismos y con el mundo que nos rodea. En Astrología, a
cualquier planeta que se halle cerca de estos puntos se le
denomina “angular” y puede ser muy importante en la
interpretación.
Las dos líneas fundamentales: horizonte y meridiano, dividen
la carta en cuatro partes, llamadas “cuadrantes”. El significado de
las casas se deriva de estos cuadrantes y de la clasificación que
analizamos a continuación.
Clasificación de las Casas
Si recuerdas nuestro ejemplo teatral, mientras la posición
zodiacal indica la obra que se ha de representar, la posición
mundana señala la escenografía de dicha representación. Es la
materialización de las ideas del autor: el escenario, la
iluminación, el vestuario, los efectos de sonido, etc. Del mismo
modo, si los planetas en los signos nos hablan de las grandes
influencias celestes, la posición en las casas señala cómo se
desarrollan esas influencias en nuestro mundo material, en la vida
cotidiana.
Para poder conocer el significado de cada una de las casas
vamos a estudiar brevemente sus características, del mismo modo
que se hizo con los signos.
Las casas se pueden dividir por elementos de la siguiente
manera:

Casas de Vida. Son las casas de la inspiración y el


dinamismo: 1, 5 y 9.
Casas de Sustancia. Son las casas de la estabilidad y los
asuntos prácticos: 2, 6 y 10.
Casas de Relaciones. Indican nuestra vinculación con
otras personas: 3, 7 y 11.
Casas de Término. Es el área de la sensibilidad y la
liberación de las ataduras materiales: 4, 8 y 12.

También se pueden dividir por cualidades:

Casas Angulares. Son los ejes del horóscopo, el inicio de


los cuadrantes. Indican la acción dinámica: 1, 4, 7 y 10.
Casas Sucedentes. Se preocupan de dar firmeza y
estructura: 2, 5, 8 y 11.
Casas Cadentes. Representan la adaptabilidad y la
mentalidad: 3, 6, 9 y 12.

Como verás, hay una correspondencia clara entre los


elementos de los signos y los elementos de las casas. Por ejemplo,
las casas de Vida se asemejan a los signos de Fuego. Del mismo
modo, cuando leas los significados de las casas, descubrirás que
se asemejan a los de los signos que les corresponden por orden
de exposición.
Estas similitudes son reales. La casa 3 recuerda efectivamente
a Géminis y la 6 a Virgo, pero ten en cuenta que se trata de
“Casas” y que su rango de significados es algo diferente al de los
“Signos”. Las casas hablan de la vida cotidiana y de lo
inmediato. Por esta razón, junto a la numeración de cada casa se
da una palabra clave que la defina. Esta simplificación que es
posible en las casas, no lo sería en el caso de los signos, cuyo
significado es mucho más amplio. Por este motivo, también
dedicaremos un espacio más corto y conciso para describirlas.
Las doce Casas y sus significados
Primera - La máscara

Casa de Vida, Angular.


Esta casa es la indicadora de la máscara que nos ponemos,
de la cara que presentamos ante los demás, o de cómo nos
gustaría ser reconocidos. La casa primera señala también cuál es
la apariencia física, el aspecto e incluso la salud y la vitalidad. Su
cúspide es el Ascendente.

Segunda - Los valores

Casa de Sustancia, Sucedente.


Refleja nuestra relación con el dinero y los valores de tipo
monetario (ahorros, acciones, planes de jubilación), así como la
actitud que tenemos ante la riqueza y la propiedad. En un plano
más amplio, la casa número dos representa también los valores
morales o espirituales.

Tercera - La comunicación
Casa de Relaciones, Cadente.
Es la mente en su forma de actuación más rutinaria, en lo
cotidiano. Representa nuestras capacidades de comunicación y
de escucha, también las cartas, los mensajes de Internet y los
escritos. Este es el terreno de los viajes cortos y los
desplazamientos que realizamos de forma habitual. También es la
casa de los hermanos, primos y vecinos.

Cuarta - El hogar

Casa Terminal, Angular.


La casa cuarta es la más personal, la que conecta con nuestra
vida más íntima. Es la casa del hogar y de la propia patria como
extensión del hogar. Representa a aquel de nuestros progenitores
que estuvo más cerca de nosotros en la infancia (generalmente la
madre). Es también la casa del pasado, las tradiciones, los
terrenos y los bienes inmuebles. Su cúspide es el Bajo Cielo.

Quinta - La creatividad

Casa de Vida, Sucedente.


Este es el hogar de la autoexpresión y la creatividad.
Representa el juego, el azar, la diversión, el deporte y la
especulación financiera. Es también el lugar donde se refleja
nuestra actitud ante el amor, las aventuras sentimentales, la
natalidad y los hijos.

Sexta - El trabajo

Casa de Sustancia, Cadente.


En la casa sexta nos ocupamos de las relaciones laborales, el
trabajo y las obligaciones de la vida material. Indica a las
personas que están a nuestro servicio o debajo de nosotros en el
escalafón. Es también la zona donde se desarrollan las
enfermedades y se relaciona estrechamente con la higiene y la
nutrición.
Séptima - Los demás

Casa de Relaciones, Angular.


Si la casa primera representa al yo, el dominio personal, su
opuesta, la séptima, es la casa de los demás, el dominio de los
otros. Indica las relaciones estrechas como las que se dan en el
seno del matrimonio. Es también la casa de los socios y los
consejeros. Aquí se dirimen los conflictos manifiestos y los
procesos legales. Su cúspide es el Descendente.

Octava - Lo trascendente
Casa Terminal, Sucedente.
La casa ocho es el dominio de las transformaciones. Todo
cambio supone una muerte y una resurrección. Por este motivo
este es el lugar de lo trascendente. Representa el mundo del
ocultismo, la videncia, pero también el orgasmo, el apego a los
demás y la transformación final que representa la muerte.
Ciertamente esta es una casa difícil para todos nosotros, pero
representa una parte real y fundamental de nuestras vidas.

Novena - El estudio

Casa de Vida, Cadente.


Esta es la casa que representa a la mente en sus funciones
superiores. Es la zona de la filosofía, la moral, la religión y el
estudio universitario o especializado. Rige los viajes largos, la
aventura y las exploraciones tanto físicas como mentales.

Décima - La sociedad
Casa de Sustancia, Angular.
La casa diez muestra nuestra relación con el mundo social,
aludiendo a valores como el honor, la reputación o el poder. Es el
terreno de la carrera profesional y de la promoción laboral.
Representa las relaciones con el poder, los jefes, la administración
o el estado. Por otro lado, al ser opuesta a la cuarta, esta casa
representa también a aquel de nuestros progenitores con quien
tuvimos una relación menos estrecha durante nuestra infancia
(generalmente el padre). Su cúspide es el Medio Cielo.

Undécima - Las aspiraciones

Casa de Relaciones, Sucedente.


Si la casa quinta habla de la creatividad expresada de forma
tangible, la casa número once indica los deseos o aspiraciones
que pueden ser puestos en práctica o no, es decir, las ambiciones
de todo tipo. Este es el terreno de los amigos, del círculo social.
Indica a personas con las que tenemos una relación más mental
que emotiva.

Duodécima - Los sacrificios

Casa Terminal, Cadente.


La casa número doce es la de todo aquello que está oculto.
Rige los secretos, la vida interior, el subconsciente. También se
aplica a la necesidad de sacrificarnos en bien de otros, es la
autonegación y la vulnerabilidad. Representa la salud emocional
y mental, así como la necesidad de restaurar nuestras energías
psíquicas de vez en cuando. Esta casa indica nuestros puntos
débiles, nuestros secretos.
Aunque ya se ha apuntado en la descripción de las casas, una
forma muy sencilla de entenderlas es estudiando las oposiciones
entre ellas (Tabla 4).

Casa 1, que simboliza: Yo, Cómo me veo


Frente a Casa 7, que simboliza: Los otros, Cómo me ven
Casa 2, que simboliza: Valores materiales, Seguridad
Frente a Casa 8, que simboliza: Mundo espiritual,
Transformación
Casa 3, que simboliza: Mente cotidiana, Viajes rutinarios
Frente a Casa 9, que simboliza: Mente superior, Viajes de
aventura
Casa 4, que simboliza: Hogar, Progenitor amoroso
Frente a Casa 10, que simboliza: Mundo profesional,
Progenitor que socializa
Casa 5, que simboliza: Expresión personal, Amores
Frente a Casa 11, que simboliza: Expresión social, Amigos
Casa 6, que simboliza: >Simboliza: Obligaciones, Salud
Física
Frente a Casa 12, que simboliza: Evasión, Salud Mental-
Emocional
Tabla 4. Oposiciones entre Casas
El Regente de la Carta
El Regente de la Carta es un planeta muy importante en
nuestra Carta Astral. Técnicamente, es el planeta regente del
signo Ascendente y significa una influencia de gran repercusión
en nuestra vida. Su importancia real se verá más adelante, pero
de momento conviene que te familiarices con este término. De este
modo, si el Ascendente de Marilyn es Leo, el Regente de su Carta
es el Sol.
Al llegar al Regente de la Carta estamos tocando el reino de
los planetas, que serán el objeto de estudio en el próximo
capítulo.
VIII - Los Planetas
Funciones de los Planetas
Analizaremos a continuación la energía planetaria. Como ya
se indicó en nuestro símil teatral, los planetas representan a los
actores de la función, es decir, son entes animados a través de los
cuales se personifican las energías celestes y terrestres. Así que es
en el trato con nuestra energía planetaria donde podemos
desarrollar plenamente nuestras cualidades humanas.
Los planetas astrológicos incluyen a los ocho cuerpos
principales del sistema solar, con exclusión de la Tierra: Mercurio,
Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón[7].
Además, se consideran “planetas” a las dos luminarias: el Sol y la
Luna[8].
Para una mejor comprensión de su naturaleza, debemos tener
en cuenta que los planetas forman un conjunto, y que el
simbolismo de cada uno de ellos está íntimamente relacionado
con el de los demás. Del mismo modo, los planetas se pueden
dividir en varios grupos como hemos hecho con los signos y las
casas.
Según su orientación se pueden dividir en cuatro categorías:

Luminares: Son el Sol y la Luna, los portadores de luz. Se


trata de los planetas más importantes de la Carta.
Personales: Mercurio, Venus y Marte. Conectan con
aspectos muy íntimos de la personalidad humana.
Sociales: Júpiter y Saturno. Se relacionan con la
socialización del individuo.
Universales o transpersonales: Urano, Neptuno y
Plutón. Nos transportan a otras dimensiones de carácter
supraconsciente.

Según su polaridad pueden ser:

Activos: Sol, Marte, Júpiter y Urano.


Pasivos: Luna, Venus, Saturno y Neptuno.
Neutros: Mercurio y Plutón.

Del mismo que cada actor de nuestra obra teatral tiene su


papel, cada planeta posee una energía propia, una naturaleza
genuina. Para construir una personalidad plena y una vida que
sea reflejo de esa personalidad, los seres humanos tenemos la
obligación de conocer y desarrollar la energía de todos los
planetas de un modo completo y armónico.
La energía planetaria, como la de cualquier elemento
astrológico, se manifiesta por grados. Así que, si bien su
naturaleza es esencialmente pura y elevada, su manifestación a
escala humana estará siempre condicionada por el nivel evolutivo
de cada persona.
Por ejemplo, Marte puede ser un motor para la acción, pero
también puede ser el germen de una personalidad violenta y
disociada. Venus trae armonía y comprensión, pero también
puede ser autocomplaciente y snob. Saturno promueve un
crecimiento ordenado y es eficaz en el trato con los asuntos
materiales, pero puede ser también frío y egoísta. Desarrollar una
u otra parte de la energía planetaria es algo que depende
enteramente de nosotros, de nuestra consciencia y nuestra
voluntad.
Conozcamos por tanto a los planetas, los verdaderos actores
de nuestra vida. Comprender su simbolismo es fundamental para
poder entender nuestra carta.
El Sol
Regente de Leo.
Al Sol, nuestra estrella, le corresponde el honor de ser el
primer planeta astrológico a analizar. No en vano, nuestro astro
es el elemento más importante para la vida de la Tierra. Su calor
y su luz promueven la existencia de todos los seres vivos, dan
origen a las estaciones y tienen un efecto trascendental en el
equilibrio natural.
Astrológicamente, el Sol es el símbolo de la voluntad.
Representa mejor que ningún otro planeta la energía creativa, es
decir, la capacidad de expansión, la actividad y el deseo de
“querer hacer”. La energía solar intenta modificar la realidad. No
se contenta con lo que ya existe, sino que busca cambiar,
expandirse, mejorar en todos los terrenos.
Este planeta representa también al yo y la autoconciencia. En
el Sol se contiene la idea que tenemos de nosotros mismos, que
no siempre coincide con la visión que los demás puedan tener
sobre nuestro ser. En contacto con nuestro Sol y sus símbolos nos
reconocemos y damos sentido a nuestros actos.
Ciertamente, la naturaleza solar trata de cómo soy y de cómo
me veo a mí mismo, pero también va más allá de eso.
Conjugando las dos ideas que se expresaron en los párrafos
superiores: la actividad y el yo, podemos decir que la función de
la energía solar es ampliar el terreno del yo, expandirlo por
medio de la acción. No trata sólo de cómo somos, sino de cómo
deberíamos llegar a ser.
Nuestro Sol natal muestra un camino de crecimiento hacia la
perfección, hacia la meta de llegar a ser totalmente nosotros
mismos. El Sol es el arquetipo del héroe que se enfrenta a todos
los peligros para desarrollar por completo su valor y su fuerza.
Pero él no se enfrenta a los peligros por una cuestión de orgullo.
La verdadera lucha del héroe mítico no es contra los enemigos del
exterior, llámense dragones o gigantes, sino que lo que él busca
es vencer a sus enemigos interiores: el miedo, la ignorancia o el
apego. El combate exterior no es sino una representación de su
combate interior.
El Sol brilla sobre nosotros durante una parte de la jornada,
pero también debe descender a las regiones oscuras de nuestro
ser para que allí pueda librar su combate interior. Tras esa lucha,
cada día, el Sol renace y se vuelve a mostrar en todo su brillo y
majestad. Por eso el Sol astrológico no siempre es luminoso, sino
que debe profundizar en regiones sombrías con la única fuerza
de su brillo. El Sol es entonces la antorcha de la conciencia que
penetra en nuestro interior.
Como el héroe solar, todos tenemos desarrollada una parte de
nuestro yo, pero debemos profundizar aún más en la tarea de ser
plenamente nosotros mismos. Este es un trabajo que nunca se
completa y por ello el Sol debe morir cada día para volver a
nacer en un ciclo interminable. Pero de ese movimiento entre la
claridad y la oscuridad, entre el nacimiento y la muerte, surge la
vida, no sólo en la Tierra, sino en nosotros mismos.
El resultado de la batalla solar, como cualquier empresa que
realizamos los seres humanos, depende en gran medida del nivel
de consciencia de la persona que la ejecuta. Es cierto que cuando
el héroe logra una victoria debe sentirse orgulloso de su éxito.
Pero cuando el orgullo es excesivo, tiende a dominar toda la
personalidad con peligrosos resultados, ya que nos aísla y nos
debilita. El Sol es individualista y no le gusta trabajar en equipo.
Él considera que todos los planetas son sus súbditos, pues todos
brillan gracias a su luz, pero no debe olvidar que los planetas
están ahí para ampliar la conciencia, para añadir matices a su
potente personalidad.
Las personas fuertemente solares tienden a ser orgullosas, a
sobreestimar su valor y, por decirlo de un modo gráfico, tienen su
yo tan hinchado como un globo. Este es el mayor peligro del Sol y
debemos estar prevenidos contra él, porque cuanto más
arrogantes seamos, mayor será nuestra debilidad. Si el globo de
nuestro yo está muy hinchado por el orgullo y se pincha en
contacto con la realidad, su explosión puede ser devastadora.
El Sol es claramente uno de los símbolos masculinos de la
carta, de hecho es el más importante. Por esta razón es también
uno de los símbolos de la paternidad. Él es quien construye la
parte activa y consciente del hijo, quien le impulsa a superarse, a
ser creativo y a tener un sentimiento de orgullosa individualidad.
Por ser el símbolo masculino básico, las mujeres suelen tener
problemas con su Sol natal y, como veremos más adelante, tienen
tendencia a proyectarlo en los hombres de su entorno. La
progresiva incorporación de las mujeres a la vida laboral parece
estar cambiando esta tendencia[9].
La posición del Sol en los signos es bastante importante y muy
fácil de calcular debido a que el movimiento solar es consistente
con el calendario que empleamos (de hecho, es su origen). Estos
dos factores, su importancia y su facilidad de cálculo, han
contribuido en gran medida a la popularización de la Astrología
Horoscópica, pero también a su vulgarización.
Todos sabemos cuál es nuestro signo solar (popularmente
conocido como “el signo”) y tenemos una idea de los significados
que se atribuyen a dicha posición. Pero muchas veces estos
significados que se atribuyen a cada signo son poco rigurosos o
no están bien definidos y sobre todo, tienden a simplificar en
exceso la fascinante complejidad que representa cada ser
humano. Sólo a través del análisis de la carta astral con todos sus
planetas y las relaciones entre ellos se puede llegar a una
comprensión plena de la propia individualidad. Atribuir al sol más
poder del que realmente tiene es una forma de desvirtuar su
auténtica energía, tan importante para nuestro pleno desarrollo
personal.
En la Carta Astral, el Sol representa la forma en que nos
vemos a nosotros mismos. También nuestra voluntad consciente, el
camino por el cual podemos llegar a ser la totalidad de nosotros
mismos.
La Luna
Regente de Cáncer.
La Luna es el segundo planeta fundamental de una Carta. Si
bien el Sol ha sido objeto de todos los estudios desde el inicio de
la Astrología como disciplina, la Luna sólo ha comenzado a ser
plenamente valorada en los últimos años. Seguramente esto es
debido al progresivo afianzamiento de la posición de la mujer en
la sociedad. Ciertamente, el arquetipo lunar es de una naturaleza
tal que sólo en los tiempos modernos hemos empezado a
apreciarlo, y sin duda ganará más predicamento en el futuro.
Si el Sol es el símbolo fundamental de lo masculino y la
paternidad, es evidente que la Luna representa los valores
femeninos y la maternidad. Desde antiguo se conoce la relación
entre las fases lunares y el ciclo menstrual de la mujer y ya que la
razón de este ciclo fisiológico está relacionado con la fecundidad
y el potencial de procreación, las conexiones entre la Luna y el
embarazo parecen bastante evidentes.
Simbólicamente la Luna es la matriz, el núcleo donde una
semilla puede crecer hasta hacerse fuerte. Todos los seres vivos
pasan por una etapa de debilidad previa a su nacimiento en el
que deben ser protegidos de las agresiones del mundo exterior.
Esto ocurre con la semilla en el seno de la tierra o con el animal,
sea en el útero de su madre o bien protegido por el cascarón del
huevo. Pero incluso tras el nacimiento, el nuevo ser es aún
indefenso y debe ser cuidado y alimentado durante un espacio de
tiempo. Estos primeros momentos de la vida son muy importantes,
pues en ellos se producen aprendizajes fundamentales para el
desarrollo posterior.
La Luna indica nuestra necesidad de protección, así como
nuestro deseo de encontrar un lugar en el que podamos sentirnos
a salvo del mundo exterior, alimentados y seguros. Este lugar
puede ser físico o simbólico, pero es necesario para nuestro
bienestar psicológico. La Luna es la protección, pero también
representa una energía pasiva. Es la tierra en la que germina la
semilla, el origen de la vida. Por esta razón muchas personas
asimilan el hogar a la patria, y ésta a la madre. Las personas muy
lunares tienden a sentir gran apego por el lugar natal, por la
familia de origen. Pero esto no quiere decir que su relación con
estos símbolos sea siempre fácil.
Lo que se aprende en los primeros años de vida tiende a ser
guardado en esa parte de nuestra mente a la cual no tenemos
fácil acceso, el inconsciente. Estos aprendizajes iniciales pueden
ser positivos para nuestro desarrollo, pero también pueden ser
limitantes. Muchos de nuestros conflictos de la vida adulta surgen
de estas pautas aprendidas en la infancia, cuando nuestra mente
es aún impresionable. De hecho, la Luna se asocia con la
memoria y con los aspectos menos controlados de nuestro
comportamiento.
La conexión de la Luna con nuestra vida emocional es así
bastante evidente. Las emociones forman parte de aquella parte
de nuestro ser que no podemos controlar con facilidad, y se
construyen a partir de las vivencias tempranas de nuestra vida.
Muchas de nuestras emociones son en realidad herencia de
nuestra familia y la Luna está ahí para reafirmarlo.
La Luna es femenina, maternal, y por ello rige aquellos
aspectos de nuestra madre que mayor impacto han causado en
nuestro desarrollo. Del mismo modo que las mujeres suelen tener
problemas con su Sol natal, los hombres tienden a entrar en
conflicto con su Luna. La diferencia fundamental en este caso es
que mientras las mujeres parecen haberse puesto manos a la obra
para solucionar sus carencias, no puede decirse lo mismo acerca
de la aceptación por parte de los hombres de su lado lunar. Sólo
en hombres dedicados al desarrollo espiritual o en algunos
artistas se encuentra un adecuado tratamiento de sus elementos
lunares.
Otra de las características de la Luna que han señalado todos
los mitógrafos es que si bien el Sol siempre se nos presenta con la
misma apariencia, la Luna va cambiando la suya a lo largo del
mes. Esta capacidad de cambiar indica que la Luna es símbolo de
renovación. Es el nacimiento, pero también el crecimiento y el
marchitamiento. Ella muere y vuelve a nacer, lo que indica que la
vida es un proceso continuo que nunca se detiene. La relación
entre la Luna y las diosas de la antigüedad se basa en este
proceso de muerte y renacimiento, haciendo que lo divino
femenino se conciba en un aspecto triple: la juventud luchadora,
la madurez reproductiva y la vejez hechicera. De hecho, aún hoy
las denominadas “religiones de la tierra” reviven los misterios de
la Luna a través de ritos que conectan con la antigua mitología
que rodea a este astro.
Hay otra conexión de la Luna con el renacimiento y es la idea
de reencarnación. Una escuela astrológica, llamada Astrología
Kármica se basa en gran medida en la posición de la Luna y sus
Nodos, que conoceremos más adelante. Se supone que en estos
puntos está la memoria de las anteriores vidas y sus enseñanzas
para la existencia actual. Trataremos estas cuestiones al final de
este libro, pero baste esta pincelada para darnos cuenta de otra
conexión entre Luna y memoria, entre lo inconsciente y lo pasado.
Por último hay que señalar que, en oposición al Sol que
representa nuestra conexión con el yo, la Luna indica la
capacidad de estar en contacto con todo lo que nos rodea en un
plano de igualdad. En la percepción lunar todo es uno, la
consciencia es un continuo y nosotros somos una parte de esa
unidad del cosmos, del mismo modo que un niño recién nacido
está conectado a su madre aunque el cordón umbilical se haya
roto.
En la Carta Astral, la Luna representa nuestra conexión con el
mundo emocional y el recuerdo familiar. Rige nuestra mente
inconsciente y la parte femenina que nos conecta con la realidad
más amplia y desconocida.
Mercurio
Regente de Géminis y Virgo.
Si el Sol representa nuestro yo más profundo y la Luna es
aquella parte de nosotros que nos remite a lo colectivo e
indiferenciado, la función de Mercurio, el siguiente planeta
astrológico, está íntimamente relacionada con estas energías. En
el proceso de consciencia que nos permite despertar al yo,
separado de los demás, la función de Mercurio consiste en cubrir
las distancias que nos separan del resto del mundo.
Uno de los métodos que hemos inventado los humanos para
acortar las distancias entre nosotros es la comunicación y por eso
Mercurio es, por encima de todo, el planeta de la expresión.
Mediante la palabra o la escritura las personas se ponen en
contacto y transmiten conocimiento, emociones o inquietudes.
Otra de las atribuciones de Mercurio, que está íntimamente ligada
con la expresión, es el mundo de las ideas y los conceptos.
Cada persona percibe la realidad, su realidad, de un modo
único e irrepetible. El mundo de las ideas y el lenguaje es un
intento de salvar una distancia hasta cierto punto insalvable. Mi
concepto de “belleza” probablemente no es el mismo que el tuyo,
pues está teñido de mi experiencia vital y mis ideas. Pero hay
alguna parte de ese concepto en el que seguramente estaremos
de acuerdo y esto es lo que nos permite entendernos.
Gracias a Mercurio yo puedo escribir estas palabras, que son
la traducción de unos conceptos que están en mi mente. Y gracias
a Mercurio, tú puedes descifrar los signos escritos y convertirlos
en conceptos que a partir de ahora estarán en tu mente. Mercurio
es quien salva las distancias no sólo físicas, sino temporales, pues
los conceptos que tú ahora recibes salieron de mi mente hace
años. Mercurio se expresa así, salvando las distancias físicas y
temporales entre las personas.
Mercurio, pese a ser un planeta frecuentemente
menospreciado, es un elemento fundamental de la Carta Astral. A
través de él valoramos nuestra capacidad mental y la habilidad
para formular conceptos propios y entender los conceptos ajenos.
Mercurio nos dice cómo nos comunicamos en un mundo donde la
expresión tiene cada día un papel más importante. No en vano,
rige también el teléfono, la radio, la televisión, y los nuevos
medios de información como Internet o las redes sociales.
Otra de las atribuciones tradicionales de Mercurio son los
viajes, pero no los viajes a larga distancia, sino los
desplazamientos cortos que se realizan de forma cotidiana. A
través del movimiento buscamos también la cercanía de los demás
seres humanos y podemos entender estos traslados como una
materialización de la expresión verbal. Ampliando el simbolismo
lunar, Mercurio rige también a los parientes con los que podemos
sentir especial cercanía por razones de edad o crianza
compartida, es decir, los hermanos y quizá los primos.
En la Carta Astral, Mercurio representa la capacidad de
comunicación, la mente lógica, los viajes de corta distancia, así
como los parientes cercanos.
Venus
Regente de Tauro y Libra.
Venus es un planeta que inspira muchas ideas encontradas en
nuestra cultura. Evoca por un lado la idea del placer, el amor y el
erotismo, pero por otro, también puede representar el despilfarro,
la pérdida moral o la holgazanería. Una forma equilibrada de
aproximarse a este planeta es a través del análisis objetivo de su
energía.
La naturaleza de la energía venusina tiende a unir a los
elementos dispersos, sean éstos personas u objetos materiales. Su
fuerza es el amor entendida como una elevada energía cósmica
de la cual el amor humano es sólo un pálido reflejo.
Las uniones que propicia Venus se basan en el conocimiento y
la aceptación de la propia naturaleza y de la naturaleza de la
otra parte. La energía de Venus exige amar a la otra persona tal
como es realmente, no como lo queremos ver a través de nuestros
sueños o proyecciones. Sus uniones son voluntarias, no impuestas.
En estas uniones, las diferencias se complementan para crear una
fusión que sea de un rango superior a las partes que la forman. El
amor de Venus no es necesariamente romántico, sino que también
incluye la amistad sincera e incluso la capacidad de amar y
comprender determinadas facetas de nuestra propia
personalidad.
Cuando una persona es capaz de aceptar la fuerza de Venus
en su vida, empieza a desarrollar el auténtico sentido de la
belleza. Lejos de las ideas materialistas que nuestra cultura intenta
imponer como cánones estéticos, la belleza es una energía que
tiende a hacer que las personas o los objetos se expresen de una
forma más completa y genuina. Lo bello se asimila a lo verdadero
y la búsqueda de la belleza es una persecución sin tregua de la
autenticidad. No en vano siempre se ha dicho que la auténtica
belleza está en el interior.
Venus busca provocar la armonía a su alrededor basándose
en la propia realidad de cada ente. Intenta que las personas sean
conscientes de sí mismas, de los demás y del mundo. Y esta
consciencia se debe desarrollar en armonía y concordia. Cuando
estos elementos se dan, Venus actúa como un poderoso agente de
atracción mutua.
La energía de Venus es tan fascinante y enriquecedora que en
algunas ocasiones tendemos a abusar de ella. Es aquí donde
surgen sus aspectos más negativos. Si nos volcamos demasiado
en el ser amado perderemos nuestro propio sentido de la
individualidad. Venus busca el placer, pero si esta búsqueda se
lleva a cabo por encima de las exigencias de la vida práctica
(trabajo, obligaciones), puede acarrearnos grandes problemas
materiales y morales.
Venus, en la Carta, indica nuestra capacidad de amar y de
unirnos a otras personas. Se relaciona con la comprensión y la
aceptación a todos los niveles, así como con la armonía y la
belleza.
Marte
Regente de Aries.
Frente a la dulzura de Venus, la fuerza de Marte es impositiva.
Busca unir elementos dispersos sobre la base de la fuerza y la
coerción. Marte es el arquetipo del guerrero y del conquistador.
Históricamente se puede asociar a la acción de todos los imperios
que han intentado someter a otros pueblos e imponerles unas
normas y una cultura.
La energía de Venus y la de Marte están íntimamente
relacionadas en sus efectos finales, aunque difieren en sus
orígenes. Ambos unen elementos dispersos, pero Venus lo hace a
partir de la comprensión mutua y Marte lo logra por la fuerza.
Visto así, el poder de Marte puede parecer despótico y negativo.
Pero este planeta tiene también su faceta positiva, ya que a
diferencia de Venus, en las uniones que propicia Marte cada uno
de los elementos conserva su propia identidad.
Marte es la fuerza que permite mantener nuestra
individualidad intacta. Frente a la inmersión en el otro que
propone Venus, la fuerza marciana refuerza los límites de nuestro
ser y defiende esos límites frente a las agresiones externas.
Cuando nos sentimos atacados, el cuerpo físico genera
adrenalina y es esta sustancia la que activa la mente y tensa
nuestros músculos. La energía de Marte se relaciona directamente
con el instinto de supervivencia, con la respuesta de “ataque o
fuga” que se genera en nosotros cada vez que nos enfrentamos a
un peligro inminente. Marte es por tanto, quien nos salva la vida
cuando nuestra integridad física o moral está en peligro.
Su energía nos impulsa además a ser competitivos y audaces.
Es el planeta suyo simbolismo está más próximo al Sol y por esta
razón es orgulloso y centrado en el “yo”. Esto se debe a que
Marte está muy relacionado con la autoafirmación y los
sentimientos de identificación. En la vida cotidiana podemos
sentirnos muy cercanos a elementos que en realidad son ajenos a
nosotros mismos, como nuestro trabajo, nuestra reputación,
nuestras creencias o nuestra familia. Esa profunda identificación
hace que veamos estos elementos como extensiones de nuestro
propio ser. Así, el éxito laboral puede ser una victoria del “yo”
por más que el trabajo sea un ámbito que realmente es ajeno a
uno mismo. Este es quizá el aspecto más primitivo de Marte pues
implica reducir nuestra autoconsciencia a elementos externos que
no están bajo nuestro control.
En su aspecto más elevado, Marte es la fuerza que anima la
individualidad, la integridad personal y la sana competición. Es la
energía del pionero y la del deportista. Marte posee una
agresividad que, bien encaminada, puede ser muy positiva, pues
sin ella estaríamos a merced de las exigencias ajenas y de los
vaivenes del mundo exterior.
En la Carta Astral, Marte representa la energía individualista
que permite mantener la integridad del ser frente a las agresiones
del mundo exterior. Es la energía de la competitividad y la
agresividad.
Júpiter
Regente de Sagitario.
Con el análisis de Júpiter pasamos del nivel personal al nivel
social. Los planetas Júpiter y Saturno indican cómo nos
relacionamos con el mundo inmediato que nos rodea.
La naturaleza de Júpiter es expansiva y nos pone en contacto
con la realidad circundante, con nuestra familia y con la
sociedad. Representa el momento de la evolución personal en que
despertamos al descubrimiento de que el mundo es algo ajeno a
nosotros. Cuando aprendemos que hay una diferencia entre el
“yo” y todo lo que no es “yo”, es decir, las demás personas, los
objetos materiales o la realidad social.
El descubrimiento de que somos un ser separado de lo demás
no se produce de forma repentina, sino que es un conocimiento
que vamos adquiriendo paulatinamente a lo largo de nuestros
primeros años de vida. Cuando somos plenamente conscientes de
nuestra existencia como individuos, empezamos a sentir la
necesidad de expandir nuestro mundo, de alcanzar todo aquello
que ya no forma parte de nosotros para reincorporarlo. En esta
época, que corresponde a los últimos años de la infancia y la
primera juventud, nuestro cuerpo crece con mayor rapidez,
nuestra mente se amplía y el ámbito de nuestras vivencias se abre
a experiencias nuevas en el campo de los sentimientos.
En nuestra vida adulta, Júpiter representa la energía que nos
ayuda a extendernos para alcanzar aquello que está lejos y que
deseamos incorporar. Es la expansión en todos los terrenos, pero
también la integración. Porque cuando nos estiramos (física o
simbólicamente) hacia un objetivo, es con el propósito de hacerlo
nuestro, de asumirlo.
De este modo, Júpiter está íntimamente relacionado con la
expansión de la conciencia, es el planeta del aprendizaje
superior, de la filosofía y la espiritualidad. Rige el crecimiento
físico, así como los viajes de larga duración, es decir, aquellos
que sirven para abrir el abanico de experiencias y que tienen un
efecto dinamizador en nuestras vidas. Júpiter desea abarcar todo
lo que pueda, quiere experimentar y es la chispa que nos anima a
ir más allá de nuestros límites.
En su aspecto más negativo, Júpiter puede ser derrochador y
demasiado autoindulgente. Todo crecimiento necesita unos límites,
pues cuando algo crece descontroladamente lo hace a costa de
unos recursos que en nuestro universo siempre son limitados. Por
eso, cuando el impulso de Júpiter es positivo, nos ayuda a crecer
de forma ordenada y éticamente sostenible. La naturaleza de este
planeta se relaciona íntimamente con la idea de legalidad y de
ortodoxia, ya que Júpiter es integrador, y la cohesión de los
individuos en el seno de una sociedad sólo puede realizarse bajo
el ámbito del estado de derecho.
Por último hay que señalar que Júpiter es también otro de los
símbolos planetarios de la paternidad. En este caso indica el
apoyo paterno que todo hijo debería recibir, el sustento que los
padres deben a sus hijos y también los retos de carácter positivo
que deben proponerles a fin de que se conviertan en seres
autónomos.
En la Carta Astral, Júpiter representa las áreas donde nuestro
ser puede expandirse y crecer. Es la energía que busca la
integración de los elementos dispersos en torno a un núcleo
estable que es el yo.
Saturno
Regente de Capricornio.
Saturno es un planeta que desde siempre ha padecido los
efectos de lo que actualmente llamaríamos una “mala campaña
de prensa”. De hecho, en la antigüedad se le conocía como “el
maléfico mayor”, lo que indica bien a las claras la opinión que de
él tenían los astrólogos del pasado. Se le consideraba un astro
frío, lento, avaro, enfermizo, seguramente por el hecho de que
era el último planeta visible por el ojo humano y porque su
movimiento celeste era el más parsimonioso de los conocidos
hasta entonces.
Realmente Saturno es un planeta fundamental en el desarrollo
del ser humano y por tanto su efecto puede ser tan positivo como
cualquier otro. Pero para conocer sus efectos debemos analizar
con cuidado su simbolismo.
Si Júpiter es el planeta de la expansión y el crecimiento, la
función de Saturno es la de poner los límites a ese crecimiento.
Como ya vimos anteriormente, el crecimiento nunca puede ser
infinito ya que los recursos son limitados. Por esta razón,
cualquier crecimiento que vaya más allá de los límites de lo
sostenible es potencialmente peligroso. En este sentido, Saturno
existe para protegernos del exceso y para que pongamos los pies
en la tierra.
En nuestra cultura actual la idea de “límite” puede parecer
negativa y frustrante, pero si lo pensamos bien, todo nuestro
concepto de la realidad está formado a partir de este concepto. Si
eres capaz de percibir el libro que tienes delante de tus ojos es
porque puedes ver sus límites materiales. Cada letra de cada una
de estas palabras se distingue y se entiende sólo a partir de sus
límites. Si estas letras crecieran descontroladamente, llegaría un
momento en que dejarías de ver sus límites y por tanto, dejarías
de percibirlas como tales. De hecho esto es lo que sucede con
nuestro universo, no podemos imaginarnos sus dimensiones
simplemente porque no vemos sus límites, y hasta nos cuesta
imaginar que vivimos en un pequeño planeta en un rincón del
cosmos simplemente porque sólo podemos ser conscientes de
aquello que está en los límites de nuestra percepción.
La conciencia que tenemos de nosotros mismos también
necesita límites. El “yo” se define a partir de todo lo que no es
“yo”, del mismo modo que sólo podemos definir la luz a partir de
la oscuridad o la vida por la existencia de la muerte.
Saturno es quien pone las reglas del juego, quien dice lo que
podemos y lo que no podemos hacer. Por este motivo, está muy
relacionado con lo socialmente aceptado, con las normas y
también, por qué no decirlo, con las diversas formas de coerción
que un estado puede ejercer sobre sus ciudadanos (impuestos,
leyes, vigilancia). Si Júpiter indica las leyes personales, las leyes
de Saturno son colectivas. Uno de sus elementos es el tiempo y
por eso se lo asocia frecuentemente con la vejez. De este modo,
este planeta también se relaciona con la paternidad y más
concretamente con la obligación de los padres de socializar a sus
hijos, es decir, de enseñarles unas normas de comportamiento que
les permitan convivir respetando a los demás. La función positiva
del padre-Saturno es mostrar las leyes que rigen en la sociedad,
de forma que el hijo evite el castigo que se produce cuando estas
leyes son violadas.
Está claro que a nadie le gusta pensar que no puede lograr lo
que desea o que hay límites a sus deseos, pero como es evidente
que estas limitaciones existen en la medida en que somos seres
imperfectos, es positivo conocerlas y vivir de acuerdo con ellas.
De este modo evitamos el sufrimiento que sigue a la frustración de
nuestros deseos. Pero también hay que recordar que cada planeta
tiene su dosis, y el exceso de Saturno también causa rigidez y
envejecimiento en el alma. Ser conscientes de lo que no podemos
hacer es bueno para evitar sufrimientos inútiles, pero del mismo
modo que tenemos un Saturno en nuestra carta, también tenemos
a un Júpiter que nos reta a saltar esos límites. Todos los seres
humanos nos movemos en esta dualidad, y gracias a ella
podemos vivir el milagro de la Vida.
Saturno simboliza en la Carta Astral los límites que nos impone
la realidad y cómo nos adaptamos a esos límites. Es el regente
del tiempo y de las lecciones éste que nos trae, así como de las
normas sociales que debemos aceptar.
Urano
Regente de Acuario.
Más allá de Saturno comienza el reino de los planetas
descubiertos recientemente. Tanto Urano, como Neptuno y Plutón
son cuerpos invisibles al ojo humano, ya que su brillo es
extraordinariamente débil debido a su lejanía. Hasta la invención
del telescopio se suponía que Saturno era el último planeta del
sistema solar, pero como sabemos actualmente, más allá de su
órbita esperaban nuevos actores que sumar a nuestra función
teatral.
Los planetas transaturninos pertenecen al reino de lo
transpersonal o universal. Esto significa que su naturaleza se
relaciona con aquellos conceptos que son comunes a toda la
humanidad, con las grandes enseñanzas de la vida y con los
retos que todos debemos afrontar en uno u otro momento. Los
planetas transpersonales se viven a veces como fuerzas externas,
como una intromisión del “destino” en nuestras vidas. En realidad,
su función es la de recordarnos que por mucho que queramos
vivir en un universo reducido y manejable, la realidad es mucho
más amplia, y que las energías del universo son demasiado
potentes como para que podamos dominarlas completamente.
Ciertamente son como un terremoto que destruye las creaciones
del orgullo humano y que nos devuelve la humildad.
El movimiento de estos planetas es extraordinariamente lento,
y por tanto su influencia es de carácter más generacional que
personal. En cualquier caso, como todos tenemos en nuestra
Carta a un Urano, un Neptuno y un Plutón propios, es preciso que
analicemos detenidamente sus significados astrológicos.
El arquetipo de Urano se define muy bien en contraposición al
de Saturno. Donde Saturno impone límites y normas, Urano busca
romper esos límites y transgredir esas normas. A diferencia de la
energía de Júpiter, que actúa de forma ordenada y previsible, la
fuerza de Urano es desordenada y mutable.
Allí donde Urano se manifiesta, la realidad toma un carácter
excepcional, diferente de lo cotidiano. Es un indicador de
cambios y actúa de forma eléctrica, súbita y renovadora. Su
acción puede ser difícil de aceptar para las personas que están
muy habituadas al orden que impone Saturno, pero
indudablemente él sabe traer esa chispa de novedad que a veces
es tan necesaria para que nuestra vida se ilumine. Los cambios
que trae Urano, cuando se buscan de manera deliberada, traen
renovación y nuevas expectativas.
Urano, para ser experimentado de forma positiva, exige
desapego, y esta es una lección difícil de aprender para todos
nosotros, pues el mundo que nos rodea tiende a hacernos
egoístas y rígidos. Por este motivo se suele ver a Urano como un
elemento negativo en muchas Cartas, porque los seres humanos
tendemos a aferrarnos a todo lo que nos rodea como si de verdad
fuera de nuestra posesión. En cambio, cuando aceptamos que la
realidad es mutable, que las ideas no son invariables, que las
ganancias materiales o la posición social son algo pasajero, y
que nuestro ser está por encima de todo ello, es cuando de
verdad podemos vivir la experiencia de Urano de una forma
creativa y luminosa.
Este planeta es el padre de las revoluciones y por eso su
energía es progresista e incluso anárquica. En las relaciones tiene
un carácter más amistoso que amoroso. Su impulso es
humanitario, mental e independiente. En el plano humano no es
un planeta de cortas distancias, sino que su acción es en cierto
modo fría. No habla tanto al ser humano concreto como al
colectivo.
Dejo para el final una nota casi anecdótica: Urano es el
regente de la Astrología y como tal, suele tener un papel
destacado en las cartas de los astrólogos y de todas aquellas
personas que se interesan vivamente por este arte.
Urano, en la Carta Astral, muestra nuestras necesidades de
cambio y las cualidades que reunimos para efectuar esos cambios
y crecer con ellos. Indica nuestro impulso más progresista y
humanitario.
Neptuno
Regente de Piscis.
La naturaleza de Neptuno es de difícil explicación por cuanto
él representa el acceso a la realidad última que está más allá de
todas las apariencias del mundo. En muchos escritos astrológicos
se señala que Neptuno representa la fantasía, el engaño o la
ilusión, pero quizá esto sea definir a un planeta en su aspecto
menos evolucionado.
Como todos los planetas transpersonales, Neptuno también se
opone a Saturno, pero de una forma diferente a Urano. Si
Saturno representa la realidad y Urano el cambio que es capaz
de modificar esa realidad, Neptuno muestra la realidad
alternativa que se puede lograr por medio de sentidos que están
más allá de lo físico. Es decir, nos abre a una verdad más amplia,
de la cual el universo material-saturnino no es más que una
pequeña porción.
De este modo, Neptuno es el regente de todo aquello que es
inmaterial: las facultades paranormales, la percepción
extrasensorial y también el anhelo místico o la inspiración
creativa. Para tener una vivencia plena de las energías
neptunianas es preciso haber vivido alguna profunda experiencia
de tipo religioso o espiritual, o bien haber sentido la disolución
del ego que se produce en el consumo de algunas drogas
psicotrópicas (LSD, mescalina, ayahuasca, etc.), con el riesgo que
esto supone.
Evidentemente, este es uno de los peligros de Neptuno, ya que
la naturaleza de este planeta exige eludir las reglas del universo
material e introduce por ello un factor de inestabilidad muy
importante. Cuando una persona inmadura debe enfrentarse
demasiado pronto a la realidad del mundo (Saturno), puede caer
en la adicción a las drogas, que están bajo el reino de Neptuno.
Hay que aclarar, en esto punto, que no cabe achacar la culpa al
planeta por estos errores. Ninguna energía planetaria es de por sí
negativa o positiva, como espero que estés comprendiendo a
través de estas explicaciones. Es el uso que hacemos de esas
energías el que puede dar lugar a efectos benéficos o
destructivos. Neptuno es realmente el señor de la realidad total,
pero si no se entiende su energía, puede dar lugar a muchas
fantasías e ilusiones.
La disolución temporal del yo y su integración en un contexto
de realidad más amplio es el objetivo que han perseguido los
místicos desde que el mundo existe, y es sin duda una de las
experiencias más engrandecedoras que puede vivir un ser
humano. De hecho, todos podemos experimentar la energía
neptuniana en aquellos momentos en que nos sentimos en
comunión con la naturaleza, por ejemplo frente a un bello
atardecer o bajo el cielo nocturno estrellado. Los efectos más
negativos de Neptuno se dan si nuestro nivel evolutivo es
demasiado bajo como para poder entender y manejar con
seguridad las energías de este planeta.
Como se indicó más arriba, uno de los campos de acción de
Neptuno está íntimamente ligado con la creatividad o, por ser
más precisos, con el concepto de “inspiración”. Un artista
netamente creativo hace uso de sus energías neptunianas para
lograr esa integración en un orden mayor del que acabamos de
hablar. El acto creativo, cuando se vive intensamente, es también
otra experiencia cumbre y aunque tradicionalmente se ha
asociado a Neptuno con ramas del arte muy concretas como la
música, la danza o la poesía, podemos seguir su rastro en
cualquier área que requiera del don de la inspiración.
Al final, cuando se capta la esencia neptuniana en su más
pura expresión, la enseñanza que recibimos es enriquecedora y
también paradójica: es la certeza de que en realidad, el “yo” no
existe y que en el fondo todos formamos parte de una gran
unidad, y que por este conocimiento merece la pena realizar
grandes sacrificios, a sabiendas de que los mismos sacrificios son
tan ilusorios como lo es nuestra propia existencia. Esta es la
diferencia entre la plena consciencia del místico y la plena
inconsciencia en la que vivimos casi todos los seres humanos, que
con mucha suerte sólo llegamos a entender los niveles intermedios
de la energía neptuniana. Pero afortunadamente estos niveles
intermedios son suficientes para llevar una vida positiva y en
armonía con este misterioso planeta.
En la Carta Astral, Neptuno señala nuestra capacidad de
acceder a planos de realidad más elevados. Indica nuestra
cualidad creativa, nuestra imaginación y nuestra espiritualidad, y
cómo poner estas virtudes a contribución de una vida más rica.
Plutón
Regente de Escorpio.
Con Plutón llegamos al final del Sistema Solar habitualmente
conocido[10]. Como en el caso de los planetas anteriores, una de
las funciones más importantes de Plutón es la de romper los
esquemas de realidad que crea Saturno. La fuerza de Plutón se
relaciona con la transformación radical de la conciencia. Es el
planeta de la muerte, pero no de la desaparición física, sino de
los procesos vitales en que sentimos que algo muere dentro de
nosotros (una relación, una vocación o una faceta de nuestra
personalidad).
Frente a la rapidez de Urano, los efectos de Plutón se
manifiestan de forma lenta, debido a la propia lentitud de este
planeta en su movimiento celeste. Plutón actúa de forma
deliberada, analizando cada porción de nuestro ser y
desintegrando todo aquello que es antiguo o caduco. Por esta
razón, se suele considerar que Plutón es un planeta muy negativo
en su acción. Pero realmente su función es la de mostrarnos todo
aquello que es negativo en nosotros mismos, nuestros errores y
adherencias del pasado.
En la naturaleza, los animales carroñeros se encargan de
limpiar los cadáveres de otros animales hasta dejarlos en los
huesos. El aspecto físico y la actividad de estos animales puede
resultarnos repulsivo, pero su acción es fundamental para evitar
que se propaguen enfermedades. Plutón es similar en su acción a
estos animales, efectuando en nosotros una función purificadora.
Como Plutón es el agente de la transformación y del cambio
profundo y radical, también es el responsable del renacimiento
que sigue a estos procesos de muerte simbólica. Por eso, después
de una ruptura sentimental podemos pasar por una fase depresiva
en la cual ponemos a examen todas nuestras creencias sobre el
amor y las relaciones. Pero pasado un tiempo, cuando la acción
de Plutón ha removido hasta el último átomo de nuestro ser,
asistiremos a un proceso de renacimiento tras el cual surgen
nuevas inquietudes vitales, quizás nuevas relaciones, o quizás un
proceso de sublimación del amor en beneficio de otras
expresiones del ser.
Tras un período de muerte simbólica podemos experimentar un
aumento de poder que transforma completamente nuestra vida. La
idea de “poder” está también asociada a este planeta y por ello
él rige todos los aspectos relacionados con la autoridad y también
con la dominación sobre otras personas. Las energías de Plutón, si
no se controlan adecuadamente, dan lugar a todo tipo de
perversiones que tengan como centro la supremacía sobre otros
seres humanos. Los políticos y los grandes líderes suelen ser
personalidades muy plutonianas, pero la forma en que ejerzan su
poder, despótica o democráticamente, depende básicamente de
su grado de evolución personal.
Plutón se asocia también con las energías sexuales, y hay en
esto una parte de verdad. Rige el orgasmo, que cuando es pleno
y profundo se convierte claramente un proceso de muerte y
renacimiento. Pero la vida sexual de los seres humanos es mucho
más amplia que el breve instante del orgasmo. El resto de los
aspectos de la experiencia afectiva-sexual, como son la
seducción, la imaginación, el deseo, la ternura o la comunicación
están regidos por los planetas que ya hemos conocido. Lo que sí
es evidente es que las personas con fuerte influencia plutoniana
suelen destacar por su magnetismo sexual, aunque generalmente
no desarrollan su vida erótica por los canales más
convencionales.
En un universo donde todo lo que existe está en continua
evolución, las energías de Plutón nos animan a vivir el cambio sin
aferrarnos a las antiguas estructuras. Si aceptamos las energías
plutonianas como una parte necesaria de nuestra evolución vital,
sin aferrarnos al mundo de Saturno, podemos obtener de él un
gran conocimiento.
Plutón representa en la Carta Astral las profundas
transformaciones que pueden dar un giro a nuestra existencia, así
como nuestra capacidad y deseo de renovación. Este planeta
muestra la necesidad de eliminar nuestras pautas más negativas a
fin de que podamos experimentar la plenitud de la vida.
Otros Puntos de la Carta
Aparte de los planetas que ya hemos conocido, existen otros
puntos de la Carta Astral que suelen ser considerados por los
astrólogos. Con la excepción de los Nodos Lunares y otros puntos
de los que hablaremos, no existe unanimidad sobre su
importancia y ni siquiera sobre su uso[11]. Por este motivo no nos
ocuparemos aquí de ellos, dejando su uso a los profesionales de
la astrología.
Algunos de estos puntos son cuerpos físicos que existen
realmente en nuestro sistema solar, pero su elevado número hace
que su utilidad sea bastante dudosa. Otros puntos, en cambio,
son planetas “hipotéticos”, es decir, cuerpos cuya existencia física
no es aceptada por la ciencia ya que no existen observaciones
fiables. En este capítulo entran los ocho planetas de la Escuela
Uraniana, y cuerpos como Vulcano, Isis, Nibiru, etc.
Un tercer grupo de puntos de la Carta son las llamadas
“Figuras Planetarias” que se calculan a partir de determinadas
operaciones matemáticas. Dentro de las Figuras estarían las Partes
Árabes, los Puntos Medios y otras.
En un cuarto grupo tenemos los Puntos que se derivan de las
órbitas planetarias. Dentro de este grupo están los Nodos Lunares,
que vienen empleándose desde muy antiguo en la interpretación
astrológica y que sí describiremos brevemente.

Los Nodos de la Luna


Los nodos son los dos puntos donde la órbita lunar cruza el
plano de la eclíptica. No son planetas ni cuerpos físicos, sino
lugares específicos del espacio.
Como ya se ha explicado, todas las órbitas planetarias,
incluyendo la lunar, presentan un cierto grado de inclinación con
el plano de la eclíptica. Cuando se superponen ambas órbitas en
el espacio, éstas se tocan en dos puntos, que son los nodos (Fig.
11). Los nodos se encuentran en posiciones opuestas en el cielo,
uno hacia norte y otro hacia el sur. Por tanto, conociendo la
posición del nodo norte, es fácil calcular la del nodo sur. Así por
ejemplo, si el nodo norte está a 10º de Libra, el nodo sur está
exactamente a 10º de Aries, su signo opuesto.
Figura 11. Los nodos lunares

La posición de los nodos lunares es conocida desde el


principio de la observación astronómica, pues tanto el Sol como
la Luna se encuentran cerca de los nodos cuando se producen los
eclipses. Esto es lógico, pues para que haya una ocultación de un
astro por parte del otro es necesario que sus órbitas estén muy
próximas. Los nodos dan una vuelta completa al zodiaco cada
18,6 años y lo hacen en sentido contrario al movimiento normal
de los planetas.
Básicamente, los nodos representan nuestra forma de conectar
con otras personas. Esto se deriva de los dos planetas que
intervienen en su definición: el Sol es el yo y la voluntad, mientras
que la Luna es la conexión con el mundo a través del sentimiento
de que “todo es uno”. El Nodo Norte simboliza por tanto nuestros
lazos de unión con otras personas. Es un lugar de sociabilidad,
de contactos. En cambio el Nodo Sur representa las separaciones,
el distanciamiento. Es todo aquello que tiende a alejarnos de los
demás. Mientras que el nodo norte intenta vincularnos con la
sociedad, el nodo sur lucha para que nuestra individualidad se
mantenga intacta (en este sentido, nos recuerdan a Venus y
Marte).
Evidentemente, todos tenemos un nodo norte y un nodo sur y
en todos nosotros existe la tendencia a la unión con otra
personas, tendencia que está en permanente conflicto (oposición)
con la necesidad de tomar distancia. Los seres humanos nos
movemos en esta dialéctica, y a partir de ella nos relacionamos
con el mundo y con nosotros mismos.
La Astrología Kármica concede gran valor a los nodos. El
Nodo Sur representa las vidas pasadas y sus enseñanzas mientras
que el Nodo Norte indica cómo se desarrolla la vida actual y los
retos que debemos afrontar. En otras palabras, el nodo sur
representa las experiencias de vidas anteriores, mientras que el
norte indica el impacto de estas experiencias en la vida presente.

La Parte de la Fortuna

La Parte de la Fortuna o, de manera más simplificada,


“Fortuna”, es un punto de la Carta Astral que proviene de la
tradición astrológica más antigua, aunque sigue siendo utilizada
por muchos astrólogos en la actualidad.
Usualmente se considera que la Fortuna es uno de los
denominados “Puntos arábigos”, pero realmente, su uso es muy
anterior al desarrollo que hicieron los astrólogos árabes de la
Edad Media.
Para entender qué es este punto de la Carta tenemos que
entender que como en el caso de los nodos lunares, existen
elementos de la carta, descubiertos por la astrología antigua, que
no se corresponden con la posición de ningún planeta ni cuerpo
físico. Además, hay que señalar que este punto de la Carta fue el
origen de un sistema de Casas alternativo al que usamos
actualmente, aunque explicar todos estos detalles con profundidad
escapa por completo del alcance de esta obra.
Fortuna se calcula a partir de tres elementos esenciales de la
Carta Astral: el Sol, la Luna y el Ascendente.
Existen dos formas de calcular a Fortuna. Uno es el método
moderno, más simple, y otro es el método tradicional, que
recomendamos aquí.

Para realizar el cálculo de la Parte de la Fortuna según el


método moderno, la posición de la Luna en grados totales se
suma a la del Ascendente, y de aquí, se resta la posición del
Sol.
Según el método antiguo, hay dos formas de calcular la Parte
de la Fortuna:
En los nacimientos diurnos, con el Sol ubicado por
encima del Ascendente, Fortuna es la suma de la Luna
con el Ascendente, a al que se resta la posición solar.
Esta opción es idéntica a la que se aplica en el método
moderno a todos los nacimientos.
En los nacimientos que se producen por la noche, cuanto
el Sol está por debajo de la línea del horizonte, los
términos se invierten. De este modo, la Fortuna de los
nacidos por la noche es igual a la suma de la posición
del Ascendente más el Sol, a la que se resta la posición
de la Luna.

Afortunadamente no es necesario que calcules la Parte de la


Fortuna correspondiente a tu nacimiento, puesto que ésta se
puede mostrar en una carta realizada a través de Internet si eliges
las opciones adecuadas (para más información sobre este punto,
puedes consultar el Apéndice II de este libro). Aunque sí es
importante que entiendas que este elemento del horóscopo
focaliza la energía de tres elementos esenciales de tu Carta: el
Sol, la Luna y el Ascendente.
Con respecto al significado de Fortuna en la Carta Astral, se
considera que este poderoso punto natal representa un lugar
donde encontrarás suerte y éxito. Puede indicar riqueza heredada
o el camino por el que puedes obtener la riqueza. Es un punto
donde se concentra todo aquello que es bueno y que contribuye
al progreso en todos los niveles.

Quirón

Quirón es un pequeño cuerpo celeste que se mueve entre las


órbitas de Saturno y Urano. Fue descubierto en 1977 y
astrológicamente se representa a través de un símbolo que
asemeja una llave. Su órbita es de largo recorrido, ya que tarda
aproximadamente 50 años en dar un giro completo alrededor del
Sol.
Quirón era el más importante de los centauros de la mitología
griega, seres que eran mitad hombre y mitad caballo y que
poseían grandes conocimientos y una fuerza indómita.
Actualmente es un punto muy empleado en la astrología, gracias,
en parte, al trabajo de la astróloga Melanie Reinhart, quien ha
profundizado ampliamente en el simbolismo de este cuerpo
celeste.
Se considera que Quirón está relacionado con las enseñanzas
que expanden la conciencia, así como con la iniciación y el
conocimiento que supone un despertar espiritual. Quirón, que era
un sanador en el relato mitológico, es también afín a la curación
del alma a través del sacrificio personal. Es un elemento de gran
simbolismo, que se hace cada vez más importante a medida que
la conciencia universal progresa hacia nuevas formas de
espiritualidad y nuevas vías de sanación física y emocional.
IX - Los Aspectos
Para entender el simbolismo de los Aspectos debemos
empezar por recordar que las posiciones planetarias en la
eclíptica se proyectan en una circunferencia plana que
denominados Carta Astral. Así, cada planeta tiene una posición
zodiacal que se expresa en grados desde el punto 0º Aries o
desde el inicio del signo en que se encuentra.
Hasta aquí todo es correcto, pero falta un detalle importante.
Si nos limitáramos a analizar cada planeta en su signo y casa
correspondiente, obtendríamos como resultado una lista de
significados sin mucha conexión entre sí. Esto sucede porque
estamos viendo a los planetas como entidades aisladas, actuando
de forma independiente. Pero si los planetas son verdaderamente
elementos de nuestra personalidad, deberían actuar de una forma
unificada y coherente, ya que nuestra personalidad tiene (o
debería tener) un alto grado de unicidad y coherencia.
La realidad es que los planetas interactúan, que están
conectados por canales de energía que transmiten información.
Siguiendo con nuestro símil del teatro, los actores no se limitan a
subir al escenario para recitar su papel, sino que se relacionan
con el resto de personajes de la obra. Intercambian miradas,
gestos, complicidades o desacuerdos. Los planetas de la Carta
Astral se comportan del mismo modo al establecer sus canales de
energía. En estos canales, que están representados por las líneas
de aspectos de la Carta, los planetas comparten información,
forman grupos, discuten, cooperan entre sí o se entorpecen
mutuamente. Por decirlo de otro modo, los planetas de nuestra
carta dialogan constantemente, y de ese diálogo surge toda la
riqueza, la variedad y la actividad de nuestro ser.
Para analizar la interacción entre los planetas, es decir, para
conocer cómo se relacionan entre sí, utilizamos una herramienta
fundamental en Astrología: los aspectos.
Según la teoría astrológica, se considera que el hecho de que
dos planetas se hallen a una distancia determinada, es altamente
significativo. La distancia entre dos planetas se mide de forma
angular, es decir, en grados. Cuando esta distancia se
corresponde con un patrón preestablecido, se dice que ambos
planetas están “en aspecto”.
Por ejemplo: Si Neptuno está en la posición 5º del signo de
Capricornio y Marte en la posición 5º de Cáncer ambos planetas
están en aspecto, concretamente en Oposición.
Veamos por qué:
Neptuno: 5º Capricornio, o sea, 275º desde el Punto Vernal
(inicio de Aries).
Marte: 5º Cáncer, o sea, 95º desde el Punto Vernal.
Restamos: 275º - 95º = 180º
Como la distancia de 180º corresponde a uno de los patrones
establecidos para los aspectos (que analizaremos más adelante),
decimos que ambos planetas están en Oposición[12].
Existen muchos tipos de aspectos, o sea, muchos patrones
angulares ya establecidos, pero nosotros nos vamos a centrar
solamente en los más fuertes, llamados también Aspectos
Mayores. La razón de esta elección es doble. Por un lado, vamos
a evitar la confusión que se produce cuando se maneja
demasiada información. Limitando el análisis de los aspectos a los
más potentes, nos centramos en aquello que es verdaderamente
importante, más allá de lo anecdótico. Por otra parte, los propios
astrólogos no nos ponemos de acuerdo en el número total de
aspectos aplicables, aunque hay un consenso mayoritario acerca
de la importancia de los aspectos mayores.
En la Astrología tradicional se divide a los aspectos entre
“benéficos” y “maléficos”. Según este concepto, los aspectos
adquieren una característica moral que es independiente de
cuáles sean nuestros deseos e intenciones. Algunos astrólogos
modernos han suavizado estos términos, hablando de aspectos
“armónicos” e “inarmónicos”. Pero nuestra opinión es que todos
los aspectos pueden ser positivos, neutros o negativos. Depende
del uso que se haga de ellos.
Ciertamente hay aspectos tensos y otros que fluyen con mayor
facilidad, pero esto no implica un juicio de valor. La tensión
puede ser muy estimulante y productiva, mientras que un aspecto
apacible puede llevar con facilidad a la dejadez y el abandono.
Los aspectos son herramientas que podemos y debemos utilizar en
nuestro provecho. Y todos sabemos que no hay herramientas
moralmente buenas o malas, es el uso lo que las hace productivas
o destructivas.
Cada tipo de aspecto tiene un margen de tolerancia medido
en grados que llamamos “orbe”. Es decir, que un aspecto puede
ser exacto, como en el ejemplo anterior, o puede tener cierto
margen de diferencia. Este margen es mayor cuanto más
importante sea el aspecto, aunque no todos los astrólogos se
ponen de acuerdo en los márgenes que utilizan.
En este libro, voy a dar los orbes que empleo normalmente en
mi práctica astrológica (8 grados en los aspectos más fuertes y 5
en los más débiles). Así, si en el ejemplo citado, Marte se
encontrara en el grado 2, tendríamos una diferencia de 3 grados
con el aspecto exacto, como es un orbe admisible, en este caso
también se hablaría de una oposición entre ambos planetas.
Los Aspectos Mayores que vamos a conocer y aplicar son los
siguientes:

Conjunción. 0º (orbe de 8º)


Oposición. 180º (orbe de 8º)
Cuadratura. 90º (orbe de 8º)
Trígono. 120º (orbe de 8º)
Quincuncio. 150º (orbe de 5º)
Sextil. 60º (orbe de 5º)
Conjunción (0º exacto, orbe de
8º)
Intensidad
La Conjunción (Fig. 12) es un aspecto fácil de comprender ya que
conecta a dos planetas que están juntos, a una distancia
generalmente no mayor de 8 grados. A un nivel puramente
intuitivo, entendemos que dos planetas que están juntos, tienden a
unir sus energías. Pero ¿cuál será el resultado de esta fusión?
Figura 12. Conjunción

Dos planetas, al igual que dos personas pueden unirse para


buscar un beneficio propio, o para cooperar en un proyecto
constructivo. Pero también vemos que las personas se unen
muchas veces con fines menos edificantes, por ejemplo para
conspirar, para criticar o para dañar.
La conjunción es un aspecto neutro, que se tiñe con el color de
los planetas que intervienen en ella. Evidentemente hay planetas
que parecen bastante compatibles entre sí, pero esto se presta a
una interpretación muy subjetiva. Para conocer el efecto real de
una conjunción debemos mirar con detenimiento los planetas que
la configuran así como el lugar de la carta en el que están
situados (signo y casa).
Por ejemplo: El Sol en conjunción a Júpiter en el signo de
Géminis y en la casa 9 puede indicar que el crecimiento (Júpiter)
de la autoconciencia (Sol) surge una profunda necesidad de
aprendizaje, de expresión y de comunicación (Géminis), y se
pondrá en juego a través de viajes o estudios superiores (casa 9).
Una persona con esta configuración estará siempre animada por
un fuerte deseo de aprender y de expresar todo el conocimiento
que va adquiriendo.
Este ejemplo nos servirá también para aclarar el concepto de
“compatibilidad” entre planetas. El Sol y Júpiter parecen planetas
bastante compatibles. Los dos representan una energía fuerte,
creativa y expansiva. Pero del mismo modo que una conjunción
entre ambos puede dar lugar a mucho crecimiento, también
puede resultar apabullante para los demás. La persona del
ejemplo anterior puede ser un gran estudiante y a la vez un gran
maestro, pero si carece de la humildad necesaria, la potencia de
esta conjunción podría convertirle en el prototipo del gurú
intransigente, dogmático y egocéntrico que a veces se da en
algunos ambientes pseudo-espirituales.
Oposición (180º exacto, orbe de
8º)
Polaridad
Como su propio nombre indica, el aspecto oposición (Fig. 13)
agrupa a dos planetas situados en extremos contrarios de la
Carta. Estos planetas están a una distancia angular de 180º, con
un orbe de 8º.
Figura 13. Oposición

Podemos imaginar la oposición como dos personas tirando


con fuerza de los dos extremos de una misma cuerda.
Seguramente alguna vez has probado ese juego, y como habrás
comprobado, en una situación así se produce una situación de
equilibrio muy inestable.
En la oposición astrológica, dos planetas están en los extremos
de una línea energética y cada uno de ellos intenta atraer hacia sí
a su contrario al tiempo que evita ser arrastrado por él. La
oposición representa por tanto inestabilidad, una energía
dinámica que enfrenta a dos extremos. Si un planeta está en un
signo de aire, su opuesto está en un signo de fuego; si uno está
en tierra, el otro pertenece al agua.
Pero del mismo modo que hay una disparidad en los
elementos de los planetas, es cierto que también hay algo en
común entre ellos, ya que si te fijas bien, los planetas en
oposición comparten una misma cualidad. Así, las oposiciones
pueden ser cardinales, fijas o mutables. Más adelante, cuando
analices las oposiciones de tu Carta Astral debes tener en cuenta
no sólo los planetas y su situación (por signo y por casa), sino la
cualidad de la oposición. Las cardinales suelen ser constructivas y
dinámicas ya que generan una competitividad que es muy
productiva. En cambio, las fijas tienden a ser lentas y crean
tensiones y luchas interiores, aunque pueden ser positivas si se
saben manejar. Las oposiciones mutables oscilan entre lo cardinal
y lo fijo. Si se estudian a fondo pueden dar grandes
oportunidades de cambio.
La oposición representa un salto cualitativo muy importante
con respecto a la conjunción. Cuando dos planetas están juntos,
resulta muy difícil separar sus energías. En cambio, la oposición
nos obliga a reconocer la dualidad y la diferencia entre ambos
planetas, del mismo modo que los seres humanos nos conocemos
mejor a nosotros mismos en contraste con el resto de las personas
de nuestro entorno. La oposición trae consigo, por tanto, un
incremento de la consciencia.
Lejos de la percepción antigua de que la oposición es un
aspecto negativo, tenemos que ser conscientes de que este
aspecto puede ser altamente creativo, ya que implica lucha,
competencia. Contiene el grado de tensión necesario que nos
impulsa a superar las dificultades.
Cuadratura (90º exacto, orbe de
8º)
Conflicto
En la Cuadratura (Fig. 14) tenemos a dos planetas en una
distancia de 90º. Ambos planetas pertenecen a elementos
diferentes, pero comparten de nuevo una misma cualidad.
Figura 14. Cuadratura

La cuadratura es un indicador de cambios, ya que las energías


que se encuentran en este aspecto son muy dinámicas. Es un
aspecto de conflictos, igual que la oposición, pero aquí los
planetas implicados no chocan directamente. Dos planetas en
cuadratura actúan sin comprenderse, o por decirlo de otro modo,
se evitan en su acción. Si los planetas en oposición se rechazan
pero se necesitan, los planetas en cuadratura chocan de una
manera tan fuerte que tienden a evitarse.
Este aspecto planetario plantea tensiones, conflictos. Pero
también podemos verlo como un gran desafío. La cuadratura es
una fuente de insatisfacción que puede tener dos efectos. En las
personas con un grado de consciencia bajo, representa un
obstáculo, un muro contra el que no se puede avanzar. Estas
personas viven la cuadratura como resistencia y dificultad. En
cambio, para las personas con un mayor grado de sabiduría, la
cuadratura es un acicate que impulsa a actuar. Sólo aceptando el
cambio que genera la cuadratura, sin reprimirla o sin quedarse en
uno de sus extremos, podemos aprender a convivir con este
aspecto. El potencial de crecimiento de cada persona está
presente en sus cuadraturas. Por eso es importante conocerlas y
trabajar a partir de ellas.
Trígono (120º exacto, orbe de 8º)
Facilidad
El Trígono (Fig. 15) es un aspecto mucho más suave en su
acción que los tres citados anteriormente. Implica a dos planetas
que están a una distancia de 120º, o cuatro signos de distancia.
Los planetas en trígono comparten el mismo elemento.
Figura 15. Trígono

El trígono favorece la interacción entre los planetas. Es un


aspecto fluido, que indica creatividad y talento en el manejo del
elemento al que pertenece. Es el aspecto de la habilidad y de la
suerte. A la persona con muchos trígonos en su carta parece que
todo le llegara sin esfuerzo y quizás por ello no sabe valorar los
frutos de esa fortuna. A veces, tras la suerte aparente hay un gran
esfuerzo personal, pero esa dedicación está oculta por el brillo de
los trígonos. Algunos astrólogos comparan acertadamente al
trígono como el descenso de una ladera nevada sobre unos
esquís. No hay que hacer grandes esfuerzos, tan solo esquivar los
obstáculos que se presentan. En cambio, las cuadraturas y las
oposiciones representan el esfuerzo de echarse los esquís al
hombro y remontar la pendiente caminando (¡sin telesilla!).
Los trígonos representan también el centro estable desde el
cual la vida puede progresar sin contratiempos. Es necesario, por
tanto, comprender la naturaleza de nuestros trígonos natales y
sentirnos agradecidos por ellos. Los trígonos son el refugio que
nos ayuda a sobrevivir en los momentos de gran inestabilidad.
Si bien en la astrología antigua se considera a la oposición o
la cuadratura como aspectos negativos, existe una cierta
tendencia a considerar al trígono como un aspecto
extremadamente positivo. Esta es una verdad a medias. Es cierto
que el trígono promueve un crecimiento tranquilo y ordenado,
pero también puede ser un estímulo a la indolencia, porque
cuando todo llega con facilidad, el ser humano pierde el interés
por luchar, por desarrollarse. Sin el contrapeso de los aspectos
más duros, un exceso de trígonos puede ser bastante negativo.
Quincuncio (150º exacto, orbe de
5º)
Elección
A diferencia de todos los aspectos anteriores, el Quincuncio
(Fig. 16) implica a dos planetas que no tienen absolutamente
nada en común entre sí. Los planetas en quincuncio, a 150º
grados de distancia, no comparten elemento, ni cualidad, ni
orientación, y ni siquiera comparten polaridad.
Figura 16. Quincuncio

El quincuncio es un aspecto que exige muchos reajustes, ya


que estas energías que no tienen nada en común son difíciles de
integrar. En cierto modo, este aspecto se relaciona con todo
aquello sobre lo que no tenemos ningún control y que representa
una tensión molesta. Es un aspecto que muestra dilemas,
decisiones en las que no podemos quedarnos con las dos
opciones, sino que tenemos que escoger una.
Los quincuncios en la Carta Astral suelen indicar la polaridad
entre dos caminos mutuamente excluyentes. Generalmente uno de
estos caminos promete un mayor nivel de consciencia que el otro,
y por tanto es necesario conocerlo para poder seguirlo.
Sextil (60º exacto, orbe de 5º)
Oportunidad
El sextil (Fig. 17) es la mitad de un trígono e implica a dos
planetas que se encuentran a una distancia de 60º, o dos signos.
Como en el caso anterior, el orbe para el sextil se reduce a 5º.
Figura 17. Sextil

Si el quincuncio conecta a dos signos que no tienen relación


alguna entre sí, en el caso del sextil, la conexión entre los
planetas es también relativamente débil, ya que sólo comparten
polaridad y en ocasiones, orientación.
El sextil está muy relacionado con el trígono y representa como
él la facilidad de expresar las energías de los planetas
implicados. Esta expresión se da a través de la polaridad
compartida por ambos planetas. Pero a diferencia del trígono, el
sextil representa energías que deben ser movilizadas a fin de
obtener el provecho que este aspecto promete. Es por tanto un
aspecto más activo que su hermano mayor, ya que si con el
trígono parece que las circunstancias se resolverán solas, con el
sextil existe la necesidad de colaborar.
Este es el aspecto de las oportunidades. Representa puertas
abiertas, energía disponible, pero requiere un alto grado de
consciencia para ser aprovechado.
Los Grandes Aspectos
Como ya se ha explicado, los Aspectos planetarios forman
ejes de energía que unen a dos planetas. Sin embargo, en
determinadas Cartas Astrales observamos la presencia de
Grandes Aspectos, también llamados Aspectos Compuestos.
Un Gran Aspecto es una configuración de planetas (tres o
más) que, unidos entre sí por aspectos, forman figuras
geométricas en la Carta Astral. Estas figuras geométricas son la
representación gráfica de las importantes redes de energía que
unen a estos planetas.
Por explicarlo de un modo más sencillo, mediante un gran
aspecto, varios planetas forman un club restringido con fuertes
lazos de unión que son sus aspectos mutuos. Cuando surge un
gran aspecto en una carta, esta red de planetas tiende a
acaparar una gran parte de la energía de la persona, dando
lugar a pautas de comportamiento muy determinadas.
Antes de analizar los grandes aspectos, hay que aclarar dos
cuestiones. La primera es que no todas las Cartas Astrales
contienen grandes aspectos, sino una porción de las mismas. Por
otro lado, hay que decir que ciertamente los grandes aspectos
engloban a varios planetas en una red energética propia, pero
que estos planetas suelen compartir aspectos con otros que no
pertenecen a la red. Estas “conexiones exteriores” son muy
importantes, pues sirven de punto de escape a las energías
concentradas en el aspecto compuesto. Cuantas más conexiones
exteriores existan, tanto más fácil será manejar el potencial del
gran aspecto en nuestro provecho. En caso contrario, se
convertiría en una red demasiado cerrada y poderosa que
anularía por completo cualquier esfuerzo de la voluntad.
A continuación vamos a describir brevemente la forma y el
significado de estos grandes aspectos. Esta descripción es
solamente una primera aproximación a este importante tema.
Haremos un análisis más detallado en el Capítulo XI.
Estelio. Consiste en cuatro o más planetas que se hallan en
conjunción. Esta configuración planetaria da un gran énfasis al
signo o la casa en la que se encuentre.
Yod (Fig. 18). Un Yod o “Dedo de Dios”, está formado por
tres planetas: dos de ellos (A y B) se hallan en sextil y forman a su
vez sendos quincuncios al tercero (C), que se convierte en foco o
eje de la configuración. El planeta focal del yod está bajo una
gran tensión y se trata de un punto muy sensible que obliga a
hacer cambios en la vida. Los planetas en sextil son los que dan
la clave para realizar dichos cambios.
Figura 18. Yod

Cuadratura-T (Fig. 19). La Cuadratura-T (también llamada T-


Cuadrado) es un gran aspecto que involucra también a tres
planetas. En este caso, dos planetas (A y B) se hallan en
oposición, y a su vez están enviando sendas cuadraturas al
tercero (C). Como en el caso del Yod, este tercer planeta es el eje
de la configuración. La Cuadratura-T es un aspecto que exige
grandes reajustes. Tanto la oposición como el planeta focal crean,
en las personas que poseen este aspecto, un sentimiento de
insatisfacción permanente que les impide disfrutar plenamente de
la vida. Pero cuando se aprende a vivir con él, este es un gran
aspecto muy dinámico y creativo, como ya veremos.
Figura 19. Cuadratura-T

Gran Cruz (Fig. 20). La Gran Cruz implica a cuatro planetas


que se forman cuadraturas y oposiciones entre sí. En la figura
adjunta se observa que:

A y B están en oposición.
C y D también están en oposición.
Como consecuencia, los pares de planetas: A-C, A-D, B-C y
B-D se hallan en cuadratura.

Es decir, que una Gran Cruz es similar a la Cuadratura-T, pero


con un planeta en oposición a C. Este aspecto otorga una gran
energía y capacidad de realizar enormes esfuerzos. Es un factor
de extraordinaria importancia en cualquier horóscopo en que se
presente.
Figura 20. Gran Cruz

Gran Trígono (Fig. 21). Para configurar un Gran Trígono se


necesitan tres planetas que formen Trígonos entre sí. En la Carta
se aprecia entonces la figura de un triángulo equilátero. Aquí la
energía fluye libremente, hay un gran potencial de acción y una
gran inspiración.
Figura 21. Gran Trígono

El problema del gran trígono es que tiende a la pereza, ya


que todo le resulta tan fácil que no siente la necesidad de actuar.
Las personas con grandes trígonos suelen crearse su propio
mundo y no salen de él a menos que las circunstancias les
obliguen.
Existen otros grandes aspectos que pueden darse en una Carta
Astral, pero los que se han señalado son los más importantes y los
más habituales.
Una vez que hemos analizado los diferentes elementos que
integran una Carta Astral, ha llegado el momento de poner manos
a la obra para interpretar la tuya.
Al concluir el Capítulo IV te indiqué que dejaras a un lado tu
Carta. Pues bien, a partir del próximo capítulo vamos a empezar
a trabajar de verdad con ella, así que toma de nuevo tu Carta y
procura tenerla a mano durante el resto de tu lectura. Como
comprenderás después de leer estas explicaciones sobre signos,
casas, planetas y aspectos, es imposible entender la naturaleza
de estos elementos si al mismo tiempo estamos mirando de reojo
dónde está nuestro Marte o cuántas cuadraturas tenemos. Es
preciso tener una idea objetiva del simbolismo astral para poder
entrar con provecho en la subjetividad de nuestra propia Carta
Astral. Pues bien, ese momento ha llegado ya.
X - Empezando a
interpretar tu Carta
Ahora que posees un conocimiento amplio de los elementos
que usamos en la práctica astrológica, ha llegado el momento de
aplicar estos conceptos a tu propia Carta Astral.
Para poder entender todo el simbolismo que se oculta en las
profundidades de tu Carta, vamos a seguir un método que irá
desde lo general a lo particular. Así, en el análisis que vamos a
llevar a cabo, comenzaremos por conocer las grandes energías
que hacen que tu personalidad sea singular y única. Estas
energías son los motores fundamentales de tus actos y se
desarrollan en dos campos de la consciencia.
El Consciente representa aquella parte de nuestra
percepción a la que accedemos de un modo normal en la vida
despierta. En nuestra vida consciente captamos el mundo exterior
y nos relacionamos con él. Su componente más importante,
aunque no es el único, es el “yo”, es decir, aquella parte de
nuestro ser que nos proporciona la sensación de existir.
El Inconsciente, por su parte, es el conjunto de procesos y
contenidos mentales a los que el yo consciente y despierto no
tiene acceso normal. Representa nuestro mundo interior más
profundo. Los procesos y contenidos del inconsciente afectan a
nuestra conducta aunque no nos demos cuenta de ellos.
Una vez que hayas aclarado cuáles son tus energías
conscientes e inconscientes, analizaremos diversos métodos que te
permitirán lograr una mayor integración de tus cualidades
innatas. Como verás, el conocimiento y la integración de las
diversas corrientes que forman tu personalidad es la base para
vivir una existencia más plena y positiva.
Sin dejar de lado estos importantes conocimientos, en los
capítulos finales de este libro nos dedicaremos a analizar
aspectos más concretos de tu existencia a partir de determinadas
zonas de tu Carta Astral. Nos centraremos entonces en aquellas
grandes cuestiones que a todos nos inquietan en uno u otro
momento de nuestra vida: la salud, las relaciones, el trabajo o la
vida espiritual. De este modo verás cómo, desde las grandes
líneas de conducta hasta la realidad más cercana, el antiguo arte
astrológico tiene respuestas apropiadas para ti.
Las Mitades de la Carta
Para iniciar nuestro análisis de las grandes energías que dan
color a tu vida, vamos a contar el número de planetas en las
mitades de tu Carta. Te recuerdo que para realizar estos análisis
solamente tomaremos en consideración los diez planetas
principales de la tradición astrológica: el Sol, la Luna, Mercurio,
Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón. Si en tu
Carta aparecen otros planetas o puntos, debes ignorarlos.

Mitad Inferior: 2 Planetas


Mitad Superior: 8 Planetas
Comprobación: 10 Planetas

Mitad Izquierda: 4 Planetas


Mitad Derecha: 6 Planetas
Comprobación: 10 Planetas
Tabla 5. Distribución planetaria de Marilyn Monroe

En la Tabla 5 puedes ver la distribución planetaria de Marilyn


Monroe. Para conocer cómo se distribuyen tus planetas, toma
papel y bolígrafo y traza dos listas como las que se muestran.
Vamos a rellenar los datos contando los planetas que se sitúan
en cada mitad.
Mitad Inferior: Cuenta los planetas que se encuentran en las
casas que van desde la 1 hasta la 6. Estos son los planetas que se
hallan por debajo del Horizonte.
Mitad Superior: Cuenta los planetas que aparecen desde la
casa 7 hasta la 12, o sea, los que se encuentran por encima del
Eje del Horizonte.
Como comprobación, suma ambas cifras. El resultado debe
ser 10.
Hacemos lo mismo con la izquierda y la derecha de la Carta
en la segunda cuadrícula.
Mitad Izquierda: Cuenta los planetas situados en las casas
10, 11, 12, 1, 2 y 3. Es decir, aquellos que se encuentran a la
izquierda del Eje del Meridiano.
Mitad Derecha: Suma los planetas situados desde la casa 4
hasta la 9, o por decirlo de otro modo, los que están a la derecha
del Meridiano.
Comprueba que todo es correcto sumando ambas cifras.
Como hay diez planetas a considerar, ese debe ser el resultado
de la suma. Si no es así, busca qué planeta o planetas te faltan y
dónde están situados.
Una vez que tengas los datos, mira en cada una de las dos
cuadrículas dónde se concentra el mayor número de planetas. Ten
en cuenta que de cada una de las dos tablas vamos a extraer un
dato. Así que lo que vamos a obtener son dos datos: el
predominio inferior o superior y el predominio a izquierda o
derecha.
Las dos mitades que acumulen más planetas te darán pistas
sobre cómo se dirigen tus energías básicas. A continuación vamos
a analizarlas de acuerdo con las descripciones que se dieron en
el Capítulo VII.
Predominio de la mitad Inferior. Con un porcentaje
elevado de planetas en las casas inferiores de la Carta Natal, tu
personalidad está sin duda muy volcada en tu propio mundo
interior. Cualquier nuevo conocimiento que provenga del exterior
debe ser filtrado antes de que pueda ser asimilado y la naturaleza
de ese filtro interior se relaciona directamente con tus experiencias
del pasado, con tus propios conceptos filosóficos. De este modo,
las relaciones con tu familia, con tus orígenes, te influyen de un
modo muy notable. Vives de dentro hacia afuera. Por este motivo.
Cuando sufres un conflicto interno, nada de lo que pueda suceder
a tu alrededor, por positivo que sea, te hará feliz. Pero si en
cambio te sientes confortable con tu propio ser, harás llevadero
cualquier conflicto exterior.
Predominio de la mitad Superior. Si la mayor parte de
tus planetas están situados entre la casa 7ª y la 12ª, tu centro de
interés estará desplazado hacia el mundo exterior. Las relaciones
con los demás son muy importantes para ti y en muchas ocasiones
sentirás que tu propio bienestar está íntimamente ligado con el de
las personas de tu entorno. Con un gran impulso social, puedes
ser muy sensible a los halagos o a las críticas. Pero no cabe duda
de que tus habilidades en el terreno de las relaciones pueden
ayudarte mucho en el terreno laboral. De un análisis más
detallado de tu Carta se podrán derivar conclusiones más
precisas, pues hay un espacio muy grande entre el sumiso y el
líder, y ambos tipos de personalidad pueden surgir de esta
configuración.
Igual número de planetas en ambas mitades. Señala
un equilibrio entre ambas tendencias, es decir, entre la necesidad
de dar valor a tu propia vivencia interna y el desarrollo de las
relaciones con el mundo exterior. Esta disposición planetaria
puede ser muy provechosa si la sabes utilizar, aprovechando lo
positivo del contacto con tu interior y con los demás.
Predominio de la mitad Izquierda. Indica que eres una
persona bastante activa, con una gran necesidad de expresar tu
personalidad. Tienes deseos de transformar el mundo, o al menos
la pequeña porción del mundo en la que te mueves de forma
cotidiana. Sientes que las situaciones que se dan en tu vida te
obligan a actuar sin descanso, muchas veces de un modo que
pone en riesgo tus propias energías. En ocasiones actuarás de un
modo irreflexivo por lo que es necesario desarrollar un poco más
de sentido común y de planificación. Te ahorrarás muchos
esfuerzos innecesarios.
Predominio de la mitad Derecha. Si en tu Carta la
mayoría de los planetas se distribuyen por el hemisferio
occidental, tu tendencia es la de ser un sujeto pasivo frente a los
conflictos de la vida. Probablemente tengas inquietudes de tipo
espiritual o filosófico y un gran sentido de la justicia, pero te
costará decidirte a luchar por lo que deseas. Ante los conflictos de
la vida adquieres muchas veces una actitud de paciente
aceptación. En el mejor de los casos, este patrón indica a alguien
que sabe esperar su momento, aprovechando los problemas como
fuente de crecimiento. Pero también puede indicar al resentido, al
que se esconde para no afrontar sus problemas. De ti depende el
buen uso de esta energía.
Igual número de planetas en ambas mitades. Señala
de nuevo un equilibrio entre actividad y pasividad, entre lucha y
aceptación. Si tu Carta muestra esta distribución planetaria, eres
una persona capaz de encontrar un punto medio entre acción y
reflexión. Pero ten en cuenta que esta es una cualidad que
deberás seguir desarrollando de un modo consciente durante el
resto de tu vida.
La Estructura de la Carta
Como has podido comprobar en el apartado anterior, el
estudio de hemisferios de la Carta aporta un primer acercamiento
a los grandes rasgos de tu personalidad. Pero sin necesidad de
entrar aún en detalles muy concretos, podemos afinar mucho más
nuestra interpretación con la ayuda de un método visual y muy
sencillo que ha demostrado con creces su eficacia.
El análisis de la Estructura de la Carta proviene del trabajo del
astrólogo norteamericano Marc Edmund Jones (1888-1980). En
sus estudios, Jones definió siete estructuras o patrones básicos que
se observan en la mayor parte de las Cartas Astrales. Estas
estructuras se refieren a la disposición de los planetas en torno al
círculo del zodiaco, que forman diversas figuras a las que se
conocen con nombres bastante descriptivos. Lógicamente, a cada
patrón le corresponde un tipo de personalidad.
Así que, con tu Carta en la mano, intenta averiguar cuál es el
patrón que mejor se ajusta a la disposición de tus planetas.

Salpicadura
Si tu Carta muestra este patrón, los planetas se encontrarán
esparcidos a través del mayor número de signos posible. Como su
nombre indica, es como si estuvieran “salpicados” en la Carta, es
decir, distanciados unos de otros (Fig. 22). Normalmente no
habrá conjunciones estrechas en ninguna parte del trazado y se
observarán pocos signos libres de planetas.
Figura 22. Salpicadura

Una Carta tipo Salpicadura indica una personalidad


interesada por todo lo que le rodea. Si este es tu caso, sin duda
sientes grandes deseos de ampliar conocimientos sobre todas las
ramas del saber. Esto es muy positivo ya que te da el
conocimiento y la flexibilidad necesarios para resolver con
inteligencia cualquier conflicto. Tu principal problema puede ser
la dispersión de energías, ya que tiendes a luchar en demasiados
frentes al mismo tiempo. Aprende a terminar lo que empiezas.

Haz
Aquí, los planetas se agrupan en un arco muy limitado, tal
como se observa en la Fig. 23. Ten en cuenta que en este como
en todos los casos aquí presentados, la figura es un ejemplo. Si
posees un haz, éste puede estar situado en cualquier parte de la
Carta, arriba, abajo, a la izquierda o la derecha.
Figura 23. Haz

La Estructura en Haz indica al especialista. Si tu Carta sigue


este patrón, seguramente tendrás una gran facilidad para
profundizar en un tema concreto, que estará indicado por los
signos y casas implicados. La rigidez de pensamiento puede ser
uno de tus mayores problemas y tendrás que aprender a mirar
más allá de tus estrechos horizontes. Sin duda tienes grandes
posibilidades de llegar a lo más alto en el desarrollo de tus
habilidades, pero no debes descuidar otros aspectos de la
experiencia vital ya que no existe una única verdad ni un sólo
camino.

Locomotora

La estructura tipo “Locomotora” presenta a los planetas


agrupados en dos tercios de los signos. Aquí hay que prestar
especial atención al planeta focal, que es el primero que
encontrarás siguiendo el orden de las manecillas del reloj. En la
Fig. 24 puedes observar esta estructura y su planeta focal,
indicado por una flecha.
Figura 24. Locomotora

Animada por una gran energía y mucha decisión, la persona


Locomotora avanza con firmeza por la vida. Generalmente estas
gentes suelen vivir su existencia como una batalla permanente,
pero en muchas ocasiones malgastan su energía luchando contra
molinos de viento. Si este es tu caso, es preciso que aúnes la
estrategia con la fuerza. Por otro lado, el planeta focal es
especialmente importante y debe ser analizado con cuidado. Su
propia naturaleza, así como el signo y la casa que ocupa te dará
una pista sobre qué retos sueles afrontar y las estrategias
(conscientes o inconscientes) que utilizas para afirmar tu avance.
Este planeta es la auténtica locomotora de tu vida, al que siguen
los demás como vagones de un convoy. Si no puede expresarse
libremente creará conflictos, pero bien aprovechado es
excepcionalmente valioso.

Cuenco

Este patrón es muy fácil de ver, ya que los planetas ocupan


una mitad de la Carta, tal como se observa en la Fig. 25. La
estructura será más potente cuando todos se agrupan a un lado
de los ejes (Horizonte o Meridiano) y más débil si se distribuyen a
uno y otro lado de estas líneas tan importantes.
Figura 25. Cuenco

La persona tipo Cuenco tiende a ser reservada en sus


contactos con el mundo exterior. Si tu Carta presenta un Cuenco,
sin duda eres alguien que prefiere acumular experiencia antes de
actuar. No te gusta saltar en el vacío y mides bien tus pasos.
Incluso aquellos que por otras características de su carta tienden a
la extroversión, ven su personalidad matizada por esta
configuración planetaria. El principal problema con esta estructura
es la timidez que puede provocar, pero por otro lado, ser
reflexivo es algo positivo en muchas ocasiones.

Cubo
Podemos imaginar el “Cubo” como la figura de un cubo de
agua, o por decirlo astrológicamente, como una estructura tipo
Cuenco al que se añade un planeta focal (Fig. 26). Este planeta,
el “asa” del cubo, es un astro aislado que se opone a los otros
nueve, convirtiéndose así en el eje de la estructura.
Figura 26. Cubo

Si tu Carta es del tipo Cubo, tu personalidad seguramente está


dirigida hacia un solo objetivo que está indicado por el planeta
focal, y su posición por signo y casa. Lo que te impulsa es la
consecución de tus objetivos y en esta tarea es probable que
dejes de lado tu instinto de conservación. Los nueve planetas
agrupados indican los elementos vitales que te dan energía o
seguridad, mientras que el asa del Cubo simboliza el canal por el
que se desarrolla tu actividad, lo que te llama la atención o
aquello que fija tu conciencia.

Columpio
La estructura “Columpio” requiere pocas explicaciones. Los
planetas se agrupan en dos conjuntos opuestos e idealmente
debería haber cinco en cada grupo, aunque no siempre es así.
Como en todos los casos, en la Fig. 27 se presenta un ejemplo de
columpio. Si hay uno en tu Carta, éste puede estar situado en un
eje superior-inferior, izquierda-derecha o quizá en diagonal.
Figura 27. Columpio

En el tipo Columpio tenemos a una persona que está


acostumbrada a ver los dos lados de la cuestión antes de tomar
decisiones. Si este es tu caso, probablemente verás la vida a
través de enfoques contrastados. Tu defecto principal puede ser la
tendencia a verlo todo en términos de blanco o negro. No olvides
que también existe el gris y el resto de los colores. Por otro lado,
la idea de “justicia” está muy enraizada en tu mente y siempre
buscarás resolver los conflictos de un modo equilibrado y
favorable para todos. La indecisión puede ser tu mayor enemiga y
quizás deberías dejarte llevar un poco más por los impulsos del
corazón.

Despliegue

Esta es una estructura difícil de ver, y que se puede confundir


con la “Salpicadura”. En una estructura de Despliegue (Fig. 28),
los planetas se hallan distribuidos por la Carta, pero agrupados
en pequeños conjuntos. Hay varias conjunciones y son también
varios los signos que quedan vacíos, lo que ayuda a diferenciarla
de la Salpicadura. Generalmente existirá un Gran Trígono,
aunque no siempre es así.
Figura 28. Despliegue

La persona que tiene una Carta tipo Despliegue suele ser un


individualista. Si tu Carta presenta esta configuración,
seguramente sentirás rechazo por las formas de vida demasiado
organizadas. La rutina no es para ti, ni las normas demasiado
rígidas. Sientes que eres especial, que no formas parte de
montón, e intentarás vivir según tus propias normas. No sería
extraño que destacaras en tu núcleo social, o al menos desearás
destacar. Otra cuestión es que de verdad tengas tanto talento
como crees. Si quieres sobresalir, tendrás que desarrollar primero
la humildad y cierta dosis de disciplina. Con esas bases puedes
avanzar mucho en tu camino vital.
Hay que señalar que en algunos casos, la estructura de una
Carta es muy evidente y se reconoce en cuestión de segundos.
Pero en otros, estos patrones no son tan fáciles de descubrir.
Algunas cartas presentan una mezcla de dos o más patrones de
distribución y conviene ser flexibles a la hora de analizarlos. En
cualquier caso, te recomiendo que a la hora de analizar la
estructura de tu Carta optes siempre por la solución más sencilla y
evidente, que suele ser la correcta.
Como resumen de todo lo explicado, y por si tienes
dificultades para “ver” la estructura de tu Carta, ten en cuenta
estos pequeños trucos:

Dos grupos de planetas opuestos crean el tipo Columpio.


Si hay un planeta aislado de los demás, seguramente se trata
de una Carta tipo Cubo.
Si hay un Gran Trígono, es muy probable que se trate de una
Carta de Despliegue.
El tipo Despliegue se puede confundir con el Salpicadura,
pero en este último no hay planetas en conjunción estrecha.
Si todos los planetas están agrupados, cuenta el número de
signos que ocupan:
4 ó 5 signos construyen una Carta Haz
Unos 6 signos indican una Carta Cuenco.
Unos 9 signos dan una Carta Locomotora.

Si observas la Carta de Marilyn, puedes observar que todos


los planetas forman un grupo, con la excepción de Saturno, que
aparece en solitario en la parte inferior. Siguiendo las
indicaciones que se indican más arriba, un planeta solitario
indica que se trata de una Carta tipo Cubo.
Por otro lado, hay un Gran Trígono que agrupa a Saturno,
Plutón y Marte. Lo que puede hacernos dudar de si se trata de
una Carta Despliegue. Este caso podemos verlo como una mezcla
de estructuras, siendo el Cubo la más evidente y por tanto la que
mejor se adaptará al personaje.
De este modo podemos decir que Marilyn era una persona
que se movía hacia un único objetivo, que está indicado por
Saturno en el eje del Cubo. Como hemos visto, la figura de
Saturno se relaciona con el simbolismo del padre. Al parecer,
Marilyn nunca conoció la identidad de su padre y de hecho fue
registrada al nacer con el apellido del hombre que era en ese
momento pareja de su madre.
La enfermedad mental de Gladys, su madre, hizo que Marilyn
se criara en diversos hogares de acogida, e incluso pasó dos
años en un orfanato. No es difícil suponer que la inestabilidad
emocional que sufrió en diversos momentos de su vida tuviera
como probable origen la falta de un hogar seguro en sus años de
infancia. Sus tres matrimonios fracasados supusieron sendos
intentos fallidos por encontrar esa seguridad al lado de un
hombre. No deja de ser sintomático que en todos los casos, ella
acabara con la sensación de que la ilusión que la llevó al
matrimonio era un espejismo.
Por otro lado, la estructura de Despliegue nos indica a una
mujer que quiere sobresalir, que necesita ser vista por todos y
aplaudida. Sin duda, ella se sentía especial y quería que la gente
de su entorno reconociera ese sentimiento. Una amiga de su
madre, Grace McKee, despertó en ella el deseo de ser artista,
llevándola con frecuencia al cine y abriéndole los ojos al mundo
de ilusiones que se refleja en la pantalla.
Lógicamente, no siempre hay que ver la parte más patológica
en las estructuras. Saturno también tuvo una influencia beneficiosa
en Marilyn. Descontenta con los papeles de “rubia tonta” que se
le asignaban, siendo ya una estrella, tuvo el coraje y la humildad
de acudir al Actor’s Studio para aprender interpretación con Lee
Strasberg. Se podría decir que Saturno la impulsó a buscar la
parte más real y sólida de su oficio.
Poco a poco iremos profundizando en la Carta de Marilyn y,
paralelamente, en la tuya propia, pero como puedes ver, el
simple análisis de su estructura proporciona interesantes vías de
exploración.
Primeros pasos en la
interpretación
Si has seguido las indicaciones que se han dado
anteriormente, en este momento tendrás ante ti tres datos muy
importantes de tu Carta. Por un lado el predominio de planetas en
la parte superior o inferior de la Carta, por otro el predominio a
izquierda o derecha del meridiano, y por último, su estructura. Sin
duda, has leído ya las interpretaciones que doy para cada uno de
esos datos. Ahora ha llegado el momento de que empieces a
hacer tu propio análisis.
Toma de nuevo bolígrafo y papel y anota, bajo las tablas que
hiciste anteriormente, los nombres de las dos mitades de tu Carta
que cuentan con mayor número de planetas. A continuación,
escribe una pequeña descripción de su significado. No copies lo
que está escrito aquí, sino que debes intentar describir con tus
palabras lo que significa tener una mayoría de planetas en una u
otra mitad. Tu descripción puede ser tan larga o elaborada como
desees.
Añade las sugerencias que esta descripción te provoque. Así
por ejemplo, si tienes muchos planetas en la parte superior quizá
desees explicar por qué necesitas el contacto y la aprobación de
los demás. Formúlate preguntas, analiza el hemisferio opuesto y
pregúntate cómo podría cambiar tu vida si adoptaras algunas de
sus características. Si eres una persona muy activa ¿acaso no te
vendría bien un poco de reflexión? Si vives muy hacia dentro ¿no
te favorecería el contacto con otras personas?
Lógicamente, todas las preguntas y sus respuestas no surgirán
inmediatamente. Deja bastante espacio para futuras reflexiones.
En el futuro te gustará releer lo que has escrito y ampliarlo con
nuevas ideas. Como indiqué desde un principio, el análisis de la
Carta no es una tarea que se haga en cinco minutos, es un
trabajo para toda la vida, que se irá enriqueciendo a medida que
crezcas como persona.
Así que una vez que hayas escrito sobre las mitades de tu
Carta, anota el nombre de su estructura y haz lo mismo que en el
caso anterior. Escribe una descripción sobre su significado y a
continuación, las ideas que te aporte esta descripción. Si tienes
una Carta tipo Despliegue, ¿en qué sentido te sientes especial?
¿Crees que los demás te reconocen como tal? ¿Has tenido
conflictos por ello?
Si en la estructura fundamental de tu carta hay un planeta
focal, analiza someramente su naturaleza. Si es necesario, vuelve
al Capítulo VIII y lee la descripción de ese planeta. En estos
análisis preliminares no es necesario que desciendas a grandes
profundidades, quédate con las ideas esenciales y piensa hasta
qué punto el planeta tiene que ver contigo y con tu vida. Así por
ejemplo, si eres una mujer con una carta tipo cubo y la luna en el
eje de la configuración, quizás deberías plantearte el papel de la
maternidad en tu vida. Las relaciones con tu madre y con los
hijos, si los tienes, pueden ser un buen motivo de reflexión.
En este caso como en el anterior, es preciso dejar espacio,
tanto en el papel como en tu mente, para futuras reflexiones. Si tu
vida ha sido especialmente difícil, no cabe duda de que incluso
con estos análisis preliminares habrán empezado a aflorar
cuestiones muy importantes. Si este es tu caso, es probable que
haya partes de tu vida que te cueste mucho aceptar y que incluso
puedes negar (las personas que han sufrido abusos en su infancia
saben lo que significa esta negación). Pero sea cual sea tu caso,
te recomiendo que tengas paciencia y no fuerces demasiado las
interpretaciones. Afortunadamente no todos tenemos una vida tan
dura como la de Marilyn, ni acabaremos como ella. Hay tiempo
para asimilar y comprender todos los símbolos, y el mejor
equipaje en este camino es la sinceridad, el respeto y el amor a
uno mismo.
En el siguiente capítulo vamos a analizar uno de los elementos
más importantes de una Carta Astral, los Grandes Aspectos. Con
ellos continuaremos nuestro viaje de profundización en la Carta y,
por supuesto, en tu interior.
XI - Los Grandes Aspectos
En el Capítulo IX ya analizamos brevemente los Grandes
Aspectos que pueden darse en una Carta Astral. Como
recordarás, los grandes aspectos son potentes redes de energía
que conectan a diversos planetas a través de extensos sectores de
la Carta. Estas redes de energía dibujan figuras geométricas que
resultan muy evidentes al observar el trazado de las líneas de
aspectos. Excepcionalmente, en el caso del estelio, no se
observan estas líneas, sino un grupo de planetas reunidos en un
espacio reducido.
Hay que aclarar que no en todas las Cartas existen grandes
aspectos, sino sólo en un porcentaje de ellas. De todos modos, mi
experiencia personal me indica que un elevado porcentaje de
personas interesadas por la Astrología disponen de este tipo de
configuraciones. Ya que son patrones energéticos tan potentes, su
interpretación es de suma importancia, porque cuando existen
tienden a modelar el carácter de un modo muy determinado.
Existen diversos tipos de grandes aspectos, pero para los
propósitos de este libro nos centraremos en los más importantes.
Te recomiendo que si tienes un gran aspecto, no te centres
exclusivamente en la interpretación que doy de él, sino que leas
todo el capítulo detenidamente. Así tendrás una idea clara y
amplia de la importancia de estas configuraciones planetarias. Si
no tienes ningún gran aspecto tampoco lo pases por alto, pues
esta información te será de utilidad para entender mejor los
próximos capítulos.
Cómo averiguar si tienes un
Gran Aspecto en tu Carta
Actualmente se suelen incluir las líneas de aspectos en el
dibujo de la Carta Astral, aunque no siempre es así. Si tu Carta
contiene estas líneas, te resultará bastante fácil localizar tus
grandes aspectos, si es que existen. Esta facilidad puede ser
engañosa en algunas ocasiones, ya que algunos astrólogos
tienden a trazar líneas de aspectos entre planetas y ángulos de la
Carta, o incluso entre planetas y otros puntos tales como partes
árabes, asteroides, etc. Mi criterio personal es que sólo hay que
tener en cuenta los grandes aspectos que estén formados por
planetas.
Así que si en tu Carta puedes ver el trazado de algún gran
aspecto, asegúrate de que esté formado únicamente por los
planetas astrológicos que ya conocemos. Por supuesto, eres libre
de tomar en cuenta esos otros grandes aspectos, pero en ese caso
te recomiendo que los interpretes del modo más flexible posible.
Por otro lado, algunos astrólogos tienen la buena costumbre
de señalar a un lado, mediante signos o por escrito, los grandes
aspectos de una Carta Astral. Si este es el caso, puedes ahorrarte
mucho trabajo.
Si tienes que localizar los grandes aspectos, empezaremos por
observar los que dos existen en la Carta de Marilyn (Fig. 5). Por
un lado hay un Gran Trígono (un triángulo equilátero) formado
por Saturno en la parte inferior (casa 4ª), Marte, a la derecha
(casa 8ª) y Plutón a la izquierda (casa 12ª). Por otra parte, posee
una Cuadratura-T (un triángulo rectángulo) que tiene a Saturno en
su eje (casa 4ª), con la Luna y Júpiter a la derecha (casa 7ª) y
Neptuno a la izquierda (casa 1ª).
Ahora que entiendes la forma que adquieren los grandes
aspectos en la Carta, puedes averiguar si tienes alguno en la
tuya. Observando los patrones que se muestran en el Capítulo IX
(Figs. 7 a la 10), busca figuras similares en tu Carta. Ten en
cuenta que pueden estar situadas en diversas posiciones.
A continuación, si dispones de una Tabla de Datos, podremos
comprobar tus grandes aspectos de un modo más fiable. Sigue
estas instrucciones paso a paso:
1. En la Tabla de Datos localiza la rejilla de aspectos. Esta
rejilla la reconocerás rápidamente porque muestra en su parte
exterior los planetas y en el interior los aspectos que forman entre
sí y, en ocasiones, su orbe o grado de exactitud. Para saber si
dos planetas comparten un aspecto, mira el punto donde se
cruzan. Si existe aspecto, allí estará el símbolo que le
corresponde. Si no hay aspecto, aparecerá un espacio vacío, un
punto o una línea. En ocasiones, esta cuadrícula tiene forma
piramidal, pero su lectura es exactamente la misma.
2. Para localizar si tienes un Estelio, busca en la rejilla todas
las conjunciones y haz una lista de los planetas implicados. En el
caso de Marilyn hay dos conjunciones:

Sol - Mercurio
Luna - Júpiter

Para que exista un estelio tiene que haber, como mínimo,


cuatro planetas en conjunción unos con otros.
Evidentemente, en el caso de Marilyn no se da este tipo de
conjunción en cadena (no hay conjunción entre la Luna y
Mercurio), por tanto, no posee ningún estelio. Pero si tú posees
uno, apunta los planetas implicados, así como el signo y casa en
que se encuentran.
3. Busca a continuación los sextiles en tu rejilla. Haz una lista
con ellos como en el caso anterior. Siguiendo la Carta de Marilyn
tenemos un solo sextil:

Venus - Júpiter

A continuación, comprueba si cada uno de los planetas en


sextil hace quincuncio a la vez con otro planeta. Si esto
sucediera, estaríamos ante un Yod. En el caso de Marilyn, ni
Venus ni Júpiter hacen quincuncio a la vez con un tercer planeta
(de hecho no hacen ninguno). Si tú tienes un yod, toma nota de
los planetas que lo forman, su posición por signo y casa. Rodea
con un círculo el planeta focal (C), que es quien recibe los
quincuncios.
4. Para localizar Grandes Cruces, has de buscar cuatro
planetas que hagan cuadraturas entre sí. Para ver si tienes
alguna, haz una lista con todos los planetas en cuadratura en tu
Carta. Para Marilyn:

Luna - Saturno
Marte - Saturno
Júpiter - Saturno
Saturno - Neptuno

Asigna letras a los planetas y comprueba si siguen el


esquema. En el caso de Marilyn, si Júpiter hiciera cuadratura a la
Luna, tendríamos una gran cruz, pero no es así. En realidad
Júpiter y la Luna están en conjunción. Por tanto ella no posee
ninguna gran cruz. Si crees tener una gran cruz, compruébalo
analizando las oposiciones. Si todo es correcto, anota los
planetas, sus posiciones y la cualidad a la que pertenecen sus
signos (cardinal, fija o mutable).
5. Para localizar las Cuadraturas-T hacemos algo parecido al
caso anterior, sólo que ahora nos interesa encontrar sólo tres
planetas que sigan un esquema de cuadraturas y oposición.
Hagamos una lista con las oposiciones de Marilyn:

Luna - Neptuno
Júpiter - Neptuno

La Luna y Júpiter están en conjunción, y ambos hacen


cuadraturas a otro planeta: Saturno. Su planeta opuesto, Neptuno
también hace cuadratura a Saturno. Por tanto, aquí tenemos una
cuadratura-t. Si tienes una, apunta los planetas, su posición y la
cualidad. En el caso de Marilyn, los signos implicados con
Acuario, Leo y Escorpio, que son signos fijos. Por tanto, su
cuadratura-t es fija.
6. Localizar Grandes Trígonos resultará bastante fácil gracias
a la práctica que has adquirido en pasos anteriores. El gran
trígono sigue un esquema de tres trígonos conectados entre sí. Así
que haz una lista de trígonos en tu Carta. Los de Marilyn son:

Sol - Luna
Venus - Neptuno
Marte - Saturno
Marte - Neptuno
Marte - Plutón
Saturno - Urano
Saturno - Plutón

De todos estos trígonos hay una combinación que describe un


gran trígono: Marte, Saturno y Plutón. De nuevo, si posees algún
gran trígono en tu Carta, toma nota de los planetas y su posición.
Analiza el elemento en el que se hallan los planetas, ya que será
el de la configuración. En el caso de Marilyn, se trata de un gran
trígono de agua.
Se requiere algo de tiempo y cuidado para analizar los
grandes aspectos, pero si sigues los pasos con atención, no
tendrás dificultades en hallarlos. De paso, tendrás una visión muy
clara de la cantidad de aspectos que contiene tu Carta y cómo los
planetas se conectan entre sí. A continuación analizaremos a
fondo el significado de cada uno de los grandes aspectos.

Estelio

Como ya hemos visto, el estelio consiste en cuatro o más


planetas en conjunción. Si todos estos planetas se encuentran en
un mismo signo o casa otorgan un gran énfasis a las energías
asociadas con ese segmento de la Carta Astral. Por el contrario,
si los planetas en estelio se distribuyen entre el final de un signo o
casa y el principio de la siguiente, tienen una influencia mucho
más diluida.
El estelio, como es lógico, provoca un gran énfasis en los
asuntos relacionados con el sector en que se encuentre. Si el
estelio no incluye al Sol, actuará como un segundo foco solar de
la Carta. Su efecto tiende a reforzar los sentimientos de identidad.
Esto produce una gran subjetividad en el carácter por lo que se
hace difícil entender cualquier forma de vida que sea diferente de
la propia. La energía, dirigida en una sola dirección, es muy
poderosa y creativa, pero también puede caer con facilidad en la
intransigencia.
Las personas con un estelio tienen un gran sentimiento de
propósito, saben lo que quieren y cómo lograrlo. Pero cuando los
obstáculos que surgen en el camino son demasiado grandes,
pueden sufrir. La imposibilidad de desarrollar una vocación, el
fracaso de los proyectos o el descubrimiento de que el mundo no
funciona como a uno le gustaría son circunstancias dolorosas
para todos nosotros. Pero de un modo u otro, todos acabamos
adaptándonos. Ese no es el caso de aquellos que tienen una
herida en el campo de actuación de su estelio.
No todas las personas que poseen un estelio llegan a este
bloqueo. De hecho, saben superar los obstáculos mejor que la
mayoría de la gente. Pero en todos los casos es importante
analizar los aspectos que forman los planetas del estelio con el
resto de la Carta. Estos aspectos indican vías de salida, caminos
alternativos que la fuerza del estelio no permite ver, pero que la
astrología revela con claridad.
En la interpretación del estelio hay que tener en cuenta el
significado del signo y la casa en que se encuentre. El signo te
indicará qué energías están en juego; la casa, el segmento de tu
vida en la que se desarrollan esas energías. El resto de planetas
en aspecto con el estelio señala la existencia de otras opciones.
Concédete tiempo para comprender todas las energías
implicadas. No será tiempo perdido.

Yod
El yod es un gran aspecto bastante común que consiste en tres
planetas conectados cuyas líneas de aspectos forman la figura de
un triángulo isósceles (Fig. 18). El lado “corto” del triángulo
corresponde a un sextil que une a dos planetas que a su vez
forman quincuncios con el tercero. El planeta que recibe los dos
quincuncios se convierte en el foco de la configuración y algunos
astrólogos le denominan “dedo de Dios”.
Sin duda, este nombre anticipa algunos de los sentimientos
que experimentan las personas que poseen un yod. Estas
personas pueden sentir en muchos momentos de su existencia,
que una fuerza superior (algo así como Dios o el destino) rige sus
pasos. Los procesos de crisis son especialmente importantes en
estos casos. Tras ellos, uno puede hundirse completamente o
resurgir como ave Fénix de sus cenizas.
El yod exige hacer reajustes, cambios. Su palabra clave puede
ser “regeneración”. Este aspecto ayuda a quienes decidan vivir su
existencia de un modo consciente, pero sin duda puede ser difícil
de sobrellevar para aquellos que decidan dejar su vida en manos
del “destino”. El planeta focal señala qué energías pueden
producir conflictos en nuestra vida y, por tanto, qué aprendizajes
tenemos que llevar a cabo. La casa en la que se halla este planeta
indica el ámbito vital en el que experimentaremos esas energías y,
por tanto, el lugar donde podemos vivir alguna crisis.
La profundidad de esa crisis y sus efectos pueden variar de
acuerdo a los planetas implicados. Puede ser una espina clavada
durante mucho tiempo, que no haga mucho daño, pero que se
convierta una molestia constante. O puede ser un acontecimiento
imprevisto, que nos obligue a reconsiderar con urgencia la forma
en que conducimos nuestra vida. En cualquier caso, el planeta
focal es un punto sensible de la Carta y su simbolismo se
manifestará en diversas facetas de nuestra existencia, señalando
con claridad carencias o dificultades.
Los dos planetas en sextil indican las herramientas de que
disponemos para superar la crisis o el conflicto. Estudia su
simbolismo y el de las casas en que se encuentran y busca cómo
utilizar su energía en tu día a día. Si el planeta focal señala lo
que es necesario regenerar, los planetas en sextil señalan las
oportunidades de regeneración.
Hay que dejar muy claro que el planeta focal, tanto en esta
configuración como en otras, no es el “malo de la película”.
Todos tenemos que realizar cambios en nuestra vida, sólo que
quienes tienen un yod (sea por razones kármicas o de otro tipo)
están más obligados a efectuar estos cambios. Esta configuración
les da una gran oportunidad de mejorar. Porque si posees este
gran aspecto en tu Carta, ten por seguro que no podrás evitar el
cambio en tu vida. Pero eres tú quien tiene que decidir si el
cambio se produce de forma consciente y positiva, o bien
obligado por las circunstancias y en medio del dolor.

Yod Compuesto o Bumerán


Este tipo especial de Yod se forma cuando un cuarto planeta
está en oposición al foco de la configuración (Fig. 29). Este
planeta, que podríamos llamar “segundo eje”, tiene un efecto
transformador que se puede utilizar en la vida práctica.
Figura 29. Yod Compuesto o Bumerán

De hecho, el segundo eje de la configuración bien puede


actuar como un canal de salida de las energías del yod. Cuando
la transformación se produce, este planeta indica tanto por su
naturaleza como la casa que ocupa, el campo vital en el que
podemos manifestar nuestra recién adquirida sabiduría. En
muchas ocasiones, este planeta aporta soluciones creativas, vías
insospechadas que nos permiten salir del círculo vicioso en que a
veces se convierte el yod. Es una tercera herramienta que viene a
sumarse a los dos planetas en sextil.

Cuadratura-T
La Cuadratura-T (Fig. 19) es, entre los grandes aspectos, uno
de los más comunes y quizá por ello, de los más estudiados. De
hecho, existen libros enteros dedicados a estudiar esta
configuración[13].
La cuadratura-t es un gran aspecto bastante desequilibrado y
tenso, pero como veremos, es también el más dinámico de todos.
Se podría decir que es una gran cruz a la que le falta un brazo, y
esa carencia es fundamental a la hora de analizar su significado.
Algún astrólogo ha definido acertadamente esta configuración
como “energía al acecho”. Verdaderamente, quien tiene una
cuadratura-t en su carta posee una gran capacidad de acción,
pero se trata de una energía que no es inmediatamente accesible.
Está escondida, presa de una gran tensión y a la espera de ser
liberada.
El sentimiento más común entre quienes tienen esta
configuración es la de estar fragmentados, divididos entre varias
partes. Este desgarro puede ser profundo y doloroso si las
condiciones de vida en la infancia fueron especialmente difíciles.
Pero incluso en las mejores circunstancias, el efecto de esta
configuración provoca una escisión en la persona. Los planetas en
oposición están en conflicto y, cada uno por su lado, tiran del
planeta focal, intentando arrastrarlo a su terreno.
El planeta focal es, por tanto, un foco de tensión, de
inestabilidad. Se debate entre los dos extremos, pero al tiempo
mira al vacío que está frente a él, es decir, al brazo que le falta.
Esta inestabilidad es una fuente de cambios, pero también de
compulsiones. Los comportamientos adictivos suelen estar
asociados con esta configuración y se dan cuando la persona
oscila de un modo apremiante entre el planeta focal y la zona
vacía que está frente a él. Pero este desequilibrio que es inherente
a la configuración, puede ser también un factor de cambio muy
importante para la persona.
Si bien la astrología tradicional considera a la cuadratura-t
como un aspecto “negativo”, actualmente creemos que su
inestabilidad puede ser un don, siempre que se sepa aprovechar.
La clave aquí, como en todo análisis astrológico, es la
consciencia. Si tienes una cuadratura-t en tu Carta, analiza su
naturaleza, los planetas que intervienen en ella y también las
casas en las que están estos planetas. Observa cómo fluctúan tus
energías al moverte entre los dos planetas en oposición y cómo
vives las tensiones del planeta focal. Estudia las aplicaciones más
positivas del simbolismo de este planeta y, sobre todo, enfréntate
al vacío que está frente a él. Probablemente los temas de la casa
opuesta al planeta focal forman parte de tu mundo inconsciente,
del que hablaremos más adelante.
La naturaleza de una cuadratura-t se define a partir de la
cualidad que comparten sus planetas. En algunos casos, los
planetas estarán situados en signos de cualidades diferentes, lo
que indica que la cuadratura es más débil de lo normal, pero lo
más habitual es que todos estén en la misma onda energética. He
aquí una descripción de los tres tipos de cuadraturas-t.
Cuadratura-T Cardinal. Dotada de una gran actividad,
esta cuadratura-t gusta de actuar de forma inmediata. Los desafíos
de la existencia están hechos para las personas con esta
configuración y quizá arriesguen más de lo debido. En momentos
de crisis, suelen perseverar en la lucha. Pero cuando descubren
que no todo se soluciona con la fuerza, pueden aprender las
lecciones de la moderación y la diplomacia. En los momentos de
zozobra, estas personas surgen de la masa para guiar a los
demás. Su energía es entonces bien recibida. Si dejan a un lado
su temor a caer en la rutina pueden aprender que la persistencia
es también una forma eficaz de lograr sus objetivos.
Cuadratura-T Fija. La fuerza de voluntad anima a las
personas con esta configuración. Saben ser determinados y
tenaces, analizando con cuidado los problemas antes de
implicarse en su solución. En la vida cotidiana, acumulan energías
y se reservan para el momento de la acción. Entonces avanzan
con una fuerza desconocida que sorprende a todos los que le
rodean. No dan fácilmente su brazo a torcer y en los peores
casos, pueden dar lugar a personalidades fanáticas. En las
personas más evolucionadas, esta configuración produce una
fuerte adhesión a los principios éticos y el deseo de no ser
controlados por los demás. Aunque tienen cierto temor al cambio,
lo necesitan para liberar su energía de un modo constructivo.
Marilyn Monroe posee una cuadratura-t fija en su Carta Astral.
El planeta focal de este aspecto es Saturno en la casa 4ª. En un
extremo de la oposición encontramos a Neptuno en la casa 1ª,
mientras que en el otro extremo están Júpiter y la Luna en
conjunción en la casa 7ª.
La lucha de Marilyn parece desarrollarse entre los extremos
del amor propio (casa 1ª) y la necesidad de ser aceptada por los
demás (casa 7ª). Los planetas que se hallan en estos extremos nos
señalan una visión de sí misma algo borrosa y desdibujada
(Neptuno), donde las fantasías y la falta de autoconocimiento
crean enormes dudas sobre el propio potencial. Marilyn buscaba
en los demás una figura paterna creativa e inspiradora (Júpiter en
la 7ª), pero también una presencia nutricia y protectora (Luna). De
hecho, en sus relaciones buscaba el padre y la madre que nunca
tuvo. ¡Demasiada presión para cualquier hombre! No es extraño
que sus matrimonios fracasaran, aunque lógicamente no podemos
culparla sólo a ella.
Al ser una cuadratura-t fija, su energía no fluía de un modo
directo. El conflicto entre estos polos enfrentados se desarrollaba
a un nivel muy profundo, que ella no era capaz de comprender y
superar. Su capacidad de respuesta estaba retardada y el temor a
emprender cambios profundos pudo complicar la solución. Los
conflictos de su desgraciada infancia ayudaron a que este gran
aspecto mostrara aquí su cara menos agradable.
El planeta focal, Saturno en la casa 4ª, es de nuevo otra figura
paterna, pero más limitante. La necesidad frustrada de encontrar
una figura paterna y protectora en el hogar podría haberse
solucionado con el desarrollo de su vida profesional (casa 10ª).
De hecho, hizo grandes esfuerzos para mejorar sus cualidades
interpretativas y de haber vivido más tiempo, quizás hubiera
tenido oportunidad de demostrar estos logros. ¿Habría mejorado
su autoestima? ¿Habría logrado vivir su vida sentimental con
mayor realismo? Su cuadratura le ayudaba a ser perseverante,
pero su temprana muerte nos impide saber adónde podría haber
llegado[14].
Cuadratura-T Mutable. Atraída por la gente, por el
cambio o por todo aquello que es variable, la cuadratura-t
mutable puede ser bastante inestable en su acción. Las personas
con esta configuración saben ser adaptables y versátiles. Su
inquietud les impide quedar atascados en conflictos del pasado.
Ellos miran al futuro con un ansia pocas veces contenida, pero
con frecuencia les vence la indecisión. Aceptan bien los cambios,
pero su voluntad flaquea con facilidad. Si no obtienen resultados
inmediatos tienden a abandonar cualquier esfuerzo y por ello
deben aprender constancia y determinación. Estas personas, con
su poderosa energía, están destinadas a mostrar los caminos que
los demás deben transitar.

Gran Cruz o Cruz Cósmica

La Gran Cruz es una configuración que agrupa a cuatro


planetas que forman cuadraturas entre sí (Fig. 20). De hecho es
una cuadratura-t en la que el brazo vacío aparece ocupado por
un cuarto planeta. Este aspecto engloba cuatro cuadraturas y dos
oposiciones, lo que significa una gran cantidad de energía
ocupando un espacio muy grande de la Carta Astral.
Generalmente agrupa a planetas en cuatro signos que comparten
una misma cualidad. Por otro lado, los cuatro signos contienen la
energía de los cuatro elementos.
Como es fácil de suponer, una gran cruz se convierte en un
elemento fundamental de la personalidad de quien la posee. Su
potencia es apabullante y parece que no dejara ningún resquicio
para que la persona pueda desarrollarse sin estar bajo su
sombra. Como ocurre en el caso del yod, este aspecto se ha
relacionado desde antiguo con la idea del “destino”. Esto se
comprende mejor comparándola con su hermana menor, la
cuadratura-t. Podemos imaginar a ésta como dos personas
sujetando los brazos de una tercera que está en medio y tirando
cada una de un lado. Quien haya hecho alguna vez este ejercicio
sabrá que se trata de una situación bastante inestable.
La gran cruz, en cambio, simboliza a cuatro personas que
sujetan sus manos entre sí y tiran, cada uno intentando arrastrar a
los demás. Las fuerzas en este caso están más equilibradas y si
uno tira con más fuerza, los otros tres se unen en su contra. Este
es un juego que parece condenado a la inmovilidad. Así, quien
tiene en su carta una gran cruz suele estar en medio de esta lucha
de fuerzas y puede sentirse inmovilizado y sin capacidad de
actuar por cuenta propia. De aquí esa añeja asociación con las
fuerzas del destino.
Desde una perspectiva más moderna, podemos entender la
gran cruz como una extraordinaria reserva de energías que están
a disposición de aquel que quiera aprovecharlas
conscientemente. Los aspectos que reciban los planetas de la gran
cruz, sobre todo trígonos y sextiles, indican posibles formas de
poner en marcha esta energía en nuestro provecho. Si posees una
gran cruz, analiza su cualidad. Investiga de los planetas
implicados y las casas que ocupan. Pero sobre todo busca
trígonos o sextiles que se apliquen sobre sus planetas. ¿De qué
planetas provienen estos aspectos? Estudia su simbolismo y
despiértalo en tu vida. Esto te ayudará a tomar el destino en tus
manos.
Gran Cruz Cardinal. Esta gran cruz es capaz de producir
una actividad muy grande. Dotada de una gran energía, esta
configuración se mueve hacia un fin determinado y lo hace con la
fuerza de un huracán. No importa que en el pasado hubiera crisis
o dificultad, dondequiera que hay un problema, se puede hallar
una solución. Si tienes una gran cruz cardinal en tu Carta Astral,
sin duda eres alguien que necesita alcanzar un alto grado de
implicación personal en todo lo que realiza. Todo tiene sentido si
sirve para reforzar tu yo, si surge de ti y es para ti. Pero los
derroches de energía pasan factura y en muchas ocasiones
tendrás que pasar de la plena actividad al reposo absoluto. Es el
auténtico descanso del guerrero.
Gran Cruz Fija. La base de esta configuración es la
necesidad de crear un soporte firme sobre el que obrar. Pero en el
origen de esa necesidad suele venir marcado por un alto grado
de frustración interior. De hecho, este aspecto es el que con
mayor claridad tiende a acumular tensiones y puede, con mayor
facilidad que otros, reprimir sus sentimientos o cualquier otro tipo
de expresión que considere inaceptable. La necesidad de
planearlo todo es muy fuerte y puede provocar cierta rigidez. Con
un adecuado propósito, esta gran cruz puede ser muy útil, ya que
tiene fuerza y persistencia, haciendo que la persona sea capaz
de lograr cualquier meta que se proponga.
Gran Cruz Mutable. Diseminando su energía en los cuatro
puntos cardinales, esta gran cruz se adapta a cualquier
circunstancia. De hecho, se adapta en exceso, ya que en muchas
ocasiones tiende a modificar su propia esencia con tal de
agradar a los demás. Motivadas por la necesidad de
comunicarse, de conectar con los demás, las personas con una
gran cruz mutable, tienden a dejarse aconsejar por todo el mundo
y acaban sumidas en la confusión. Estas personas necesitan
desarrollar un sentimiento de orgullosa individualidad.

Gran Trígono
Si las cuadraturas-t y grandes cruces han tenido que soportar
el peso de una mala fama que viene de antiguo, los grandes
trígonos suelen describirse como aspectos “benéficos”, aunque
como ya sabemos, estas simplificaciones no suelen ajustarse a la
realidad. Como vimos en el caso de las Cuadraturas-T, no todo lo
aparentemente malo es en realidad negativo. Como veremos
ahora, tampoco todo lo que se promete como bueno es siempre
enteramente positivo. Todo depende del uso que hagamos de
estas poderosas energías.
Cuando tres planetas forman un gran trígono (Fig. 21), los tres
suelen estar en signos que comparten el mismo elemento. De este
modo, la energía de un gran trígono se define a partir del
elemento que lo forma. Básicamente, el gran trígono funciona
potenciando de un modo extraordinario la energía de su
elemento. Por tanto, esta energía se convierte en un recurso fácil
de utilizar, e incluso de derrochar.
La persona que posee un gran trígono puede parecer muy
afortunada en los temas relacionados con el elemento de la
configuración. En realidad es la propia facilidad para desarrollar
esa energía es lo que atrae la fortuna. Un antiguo adagio dice
que la suerte sonríe a quienes se esfuerzan. Quizás los demás no
son capaces de ver este esfuerzo, e incluso la propia persona
puede tener dudas sobre hasta qué punto el azar le ha ayudado
en sus logros. Pero lo cierto es que la gran reserva energética del
trígono ayuda a que cualquier proyecto relacionado con él tienda
a rendir sus mejores frutos.
Con el gran trígono se da una libre circulación de energías,
de oportunidades y cierto talento. Esta facilidad puede llevar a la
pereza y a cierta inercia en los comportamientos. Todo resulta tan
fácil que cuesta buscar desafíos, repitiendo constantemente las
costumbres del pasado. En el ámbito del elemento es fácil
mostrarse eficaz, pero por esa misma razón, la persona con esta
configuración se acostumbra a esta parte de sí misma y evita
desarrollar otras zonas de su personalidad.
Para sacar el mayor rendimiento de un gran trígono, debemos
verlo como un desafío antes que como un regalo de los dioses.
Así por ejemplo, quien tiene un gran trígono de aire debe
plantearse constantes retos intelectuales y no acomodarse en los
logros mentales que ya haya logrado. El agua a su vez puede ser
sensible, pero también manipuladora. El fuego vivaz, pero
también violento. La tierra estable, pero también materialista.
A la hora de analizar un gran trígono hay que detenerse a
considerar los planetas que lo forman. Estudia despacio su
naturaleza e intenta ver cómo sus energías se desarrollan en tu
vida. Pon esta información en relación con el elemento del gran
trígono. A continuación estudia, más que el signo, la casa en la
que se halla cada uno. De este modo podrás ver en qué
segmentos de tu vida cotidiana se desarrolla la energía del gran
trígono. Recuerda: los planetas son los actores, las casas son el
escenario.
Si tienes la sensación de que el gran trígono ha hecho que te
acomodes a una cierta forma de actuar y quieres romper las
ataduras, analiza los aspectos que forman sus planetas con el
resto de la Carta. Los grandes trígonos no suelen estar aislados,
así que cualquier línea de salida permite encontrar un cuarto o un
quinto planeta que actúe como liberador. Toma buena nota de
quién es este planeta y aprende todo lo que puedas sobre él.
Por otro lado, cuando uno de los planetas del trígono forma
parte a su vez de otro gran aspecto, está sugiriendo una
poderosa vía de escape. Un gran trígono puede ser muy positivo,
pero hay que hacerle funcionar para que nos dé lo mejor de sí.
Esto se logra movilizando a los planetas que conectan con él por
medio de aspectos[15].
Conozcamos las principales características de los diferentes
tipos de grandes trígonos:
Gran Trígono de Fuego. Desbordando energía y
entusiasmo, el gran trígono de fuego empuja a las personas a la
actividad. Con una vitalidad inagotable, lo que resulta más difícil
en estos casos es reducir la velocidad, ponerse al mismo nivel de
quienes caminan más despacio. Aun así, si posees este gran
trígono, posees una envidiable capacidad para conectar con los
demás ya que tu optimismo es agradecido por todos. La actividad
física está hecha para ti, pero no por ello dejas de tener
aspiraciones más elevadas. Puedes inspirar a las personas de tu
entorno, pero aprende a terminar lo que empiezas.
Gran Trígono de Tierra. Si posees un gran trígono de
tierra en tu Carta, tienes grandes cualidades para funcionar en el
mundo material. El saber actuar de forma responsable y la
laboriosidad son cuestiones muy importantes para ti. Las
preocupaciones del mundo físico pueden ser demasiado intensas
y no deberías olvidarte de levantar la vista del suelo de vez en
cuando. Hay mucho más en el mundo de lo que crees y en ello
está gran parte de tu felicidad. Sin duda, puedes solucionar
cualquier problema práctico con facilidad, y por la misma razón
alcanzarás una gran estabilidad material y personal.
Gran Trígono de Aire. Con un gran individualismo, el
trígono de aire sabe crearse un mundo propio en el que vivir. Este
mundo estará habitado por las ideas, las lecturas y una gran
pasión por los viajes. Las facultades mentales se desarrollan al
máximo bajo esta configuración y, a la hora de relacionarse con
los demás, estas personas buscan retos intelectuales, gente con la
que conversar o compartir reflexiones. Detestan el trabajo
rutinario y pueden sufrir algunas crisis por su dificultad en
conectar con su parte más emocional. Si tienes un gran trígono de
aire seguramente soportas con dificultad las ataduras
sentimentales, pero necesitas aprender más generosidad y sentido
práctico. En otras palabras, aterrizar de vez en cuando en el
mundo real.
Gran Trígono de Agua. Actuando a partir de una gran
sensibilidad, el trígono de agua tiene un enorme potencial
compasivo. La intuición es su mejor herramienta y puede
desarrollar una gran cualidad creativa. Como el agua que todo lo
cubre, estas personas carecen de sentido del límite y pueden ser
algo asfixiantes en sus afectos. Saben sufrir lo indecible, pero
cuando se rebelan, la liberación de su rabia contenida es temible.
Toman grandes precauciones antes de actuar, pero su poder
emocional se derrocha en todas las personas que le rodean.
Marilyn posee un gran trígono de agua, formado por Saturno,
Marte y Plutón. Como hemos visto, Saturno es el planeta focal de
su Cuadratura-T, y también de su estructura de Cuenco, lo que
hace que este planeta sea, sin duda, el más importante de su
Carta. Su permanente búsqueda de la estabilidad sentimental
parece emanar directamente de este símbolo astral.
La relación de Marilyn con el célebre deportista Joe DiMaggio
estuvo marcada por los celos de él, quien deseaba que se
comportara como un ama de casa tradicional. En varias
ocasiones, Marilyn mostró los signos de haber sido víctima de los
malos tratos de su esposo. En sus otros dos matrimonios, demostró
también bastante paciencia en situaciones que hubieran sido
insoportables para otra persona.
Los planetas de esta configuración nos revelan algunos
detalles de cómo se desarrolló la energía del agua en su vida.
Saturno en la 4ª nos trae de nuevo a su necesidad de encontrar
una pareja protectora y hogareña, simbolizando la unión con el
padre desconocido. Marte en la 8ª indica su necesidad de buscar
hombres fuertes y sexualmente activos. Esta posición puede
indicar también una relación violenta con la pareja. Plutón en la
12ª señala la necesidad de manejar los hilos desde la trastienda.
Probablemente Marilyn sabía cómo manipular los sentimientos de
los demás, o al menos cómo dar a los demás lo que esperaban
de ella, para lograr a cambio el cariño que nunca tuvo. Así que
en este caso concreto, este aspecto señala tanto la búsqueda del
amor y la protección como los intentos de retener ese amor que
tan necesario le resultaba.

Gran Trígono Compuesto o Cometa

Esta configuración aparece cuando a uno de los tres planetas


del trígono se le opone un cuarto planeta. En la Figura 30 puedes
ver el esquema de una Cometa. Los planetas A, B y C forman el
gran trígono, mientras que el planeta D se opone a C formando
sextiles con A y B. Lógicamente, la oposición se puede producir a
cualquiera de los tres planetas del gran trígono.
Figura 30. Gran Trígono Compuesto o Cometa

Una cometa es, básicamente, un gran trígono que resulta más


potente de lo habitual. Esto se debe fundamentalmente a que
engloba gran cantidad de energías y aspectos diversos. Sin duda
es una configuración que actúa de forma independiente al resto
de la Carta, a menos que alguno de los planetas forme a su vez
otro gran aspecto.
Aquí, el planeta en oposición es muy importante, ya que actúa
como eje de la configuración. Este planeta focal es un canal de
expresión de las poderosas energías del gran trígono. Al mismo
tiempo, este eje puede convertirse en una puerta de entrada de
nuevos retos e información que hagan actuar al gran trígono. La
cometa es por tanto una configuración mucho más dinámica y
creativa que el gran trígono.
Si posees una cometa en tu Carta, analiza detenidamente el
planeta focal, tanto su simbolismo, como su posición por signo y
casa. Verás en él una de las claves para construir tu vida de una
forma más consciente.
Una de las principales ideas que quisiera dejar clara en este
capítulo y espero que a lo largo de todo este libro es que todos,
absolutamente todos, poseemos cualidades innatas que están
reflejadas en nuestra Carta Astral. No importa si tienes grandes
aspectos o no, al fin y al cabo, todos tenemos planetas y redes de
energía planetarias. Lo verdaderamente importante es conocer
cuáles son nuestras fuerzas y, sobre todo, cómo movilizarlas en
nuestro provecho y en el de las personas de nuestro entorno. La
Carta Astral es sólo el punto de partida.
El Premio Nobel de la Paz, Albert Schweitzer, médico
misionero que fundó el hospital de Lambaréné en Gabón, tenía
una gran cruz fija. En cambio, el médico nazi Josef Mengele,
siniestro torturador en Auschwitz, tenía un gran trígono de agua.
El primero usó una difícil configuración para construir una
personalidad perseverante y benéfica. El segundo se dejó llevar
por el lado más manipulador y perverso de su energía. Ninguno
de nosotros estaremos en esos extremos, ángel o demonio, pero sí
podemos aprender a conocer y aprovechar mejor nuestros
recursos.
XII - Funciones Dominantes
En el Capítulo V hablamos de las características que definen a
los doce signos del zodiaco. Como recordarás, a cada signo le
corresponden cuatro características, que llamamos polaridad,
cualidad, elemento y orientación. Sin duda, todos tenemos a
todos los signos en nuestra Carta Astral, pero es la posición de los
planetas en unos u otros lo que da un mayor énfasis a
determinadas energías. En el presente capítulo, aprenderás a
conocer cuáles son las energías más importantes de tu Carta y,
por tanto, de tu personalidad.
Para que no haya confusión en los términos, llamaremos
Funciones a las diferentes energías que se derivan de las
posiciones planetarias en los signos, ya que las funciones son los
medios a partir de los cuales nosotros “funcionamos” en el
mundo. Así que para conocer el efecto de estas funciones en tu
caso particular vamos a hacer unos sencillos cálculos, muy
similares a los realizados en el Capítulo X. Es importante que
hagas estos cálculos despacio, comprobando a cada paso lo que
haces para evitar errores.
En la Tabla 6 puedes ver una lista donde hemos situado las
posiciones de los planetas de Marilyn Monroe. Como puedes
comprobar, en esta lista tenemos los diez planetas astrológicos, su
posición por signo y las características que corresponden a cada
uno de los signos, tal como vimos en el Capítulo V.

Sol
Signo: Géminis
Polaridad: Activo
Cualidad: Mutable
Elemento: Aire
Orientación: Personal
Puntos:3

Luna

Signo: Acuario
Polaridad: Activo
Cualidad: Fijo
Elemento: Aire
Orientación: Universal
Puntos:2

Mercurio

Signo: Géminis
Polaridad: Activo
Cualidad: Mutable
Elemento: Aire
Orientación: Personal
Puntos:1

Venus

Signo: Aries
Polaridad: Activo
Cualidad: Cardinal
Elemento: Fuego
Orientación: Personal
Puntos:1

Marte

Signo: Piscis
Polaridad: Pasivo
Cualidad: Mutable
Elemento: Agua
Orientación: Universal
Puntos:1

Júpiter

Signo: Acuario
Polaridad: Activo
Cualidad: Fijo
Elemento: Aire
Orientación: Universal
Puntos:1

Saturno

Signo: Escorpio
Polaridad: Pasivo
Cualidad: Fijo
Elemento: Agua
Orientación: Social
Puntos:1

Urano

Signo: Piscis
Polaridad: Pasivo
Cualidad: Mutable
Elemento: Agua
Orientación: Universal
Puntos:1

Neptuno

Signo: Leo
Polaridad: Activo
Cualidad: Fijo
Elemento: Fuego
Orientación: Social
Puntos:1

Plutón

Signo: Cáncer
Polaridad: Pasivo
Cualidad: Cardinal
Elemento: Agua
Orientación: Personal
Puntos:1
Tabla 6. Lista Planetaria de Marilyn Monroe

Tu tarea consiste en construir una cuadrícula como esta, pero


lógicamente con tus planetas situados en sus signos, tal como se
reflejan en tu Carta Astral. Toma pues, papel y bolígrafo y haz
una lista en la que copiarás los encabezamientos que aparecen
sombreados en la muestra. Para rellenarla con tus datos, sigue los
siguientes pasos:
1. Comienza por la columna “Signo”. Con tu Carta en la
mano, anota el nombre del signo en que se halla cada uno de los
diez planetas. Observa dónde está tu Sol, dónde tu Luna y sigue
hasta Plutón. Verás que algunos signos se repiten y en cambio
otros ni aparecen. Esa es tu marca planetaria personal, que
vamos a desarrollar en las siguientes columnas.
2. A continuación rellena la columna “Polaridad”. Para ello,
observa en cada línea el nombre del signo y anota la polaridad
que le corresponde. Para una rápida referencia, los signos que
pertenecen a cada polaridad son:

Activo: Aries, Géminis, Leo, Libra, Sagitario, Acuario.


Pasivo: Tauro, Cáncer, Virgo, Escorpio, Capricornio, Piscis.

3. Sigue con la columna de “Cualidad”. Toma de nuevo el


signo de cada planeta que se muestra en la segunda columna y
anota su cualidad:

Cardinal: Aries, Cáncer, Libra, Capricornio.


Fijo: Tauro, Leo, Escorpio, Acuario.
Mutable: Géminis, Virgo, Sagitario, Piscis.

4. En la columna “Elemento” hacemos exactamente lo mismo


con cada uno de los signos:

Fuego: Aries, Leo, Sagitario.


Tierra: Tauro, Virgo, Capricornio.
Aire: Géminis, Libra, Acuario.
Agua: Cáncer, Escorpio, Piscis.

5. Llegamos a la columna “Orientación” y tomamos nota de


esta característica en cada uno de los signos en los que se hallan
nuestros planetas:

Personal: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer.


Social: Leo, Virgo, Libra, Escorpio.
Universal: Sagitario, Capricornio, Acuario, Piscis.

6. La última columna, llamada “Puntos” nos servirá para


valorar la importancia de cada uno de nuestros planetas. El Sol
no tiene el mismo valor que Mercurio, y el regente de la Carta (es
decir, el planeta que rige al signo ascendente) es también muy
importante y debe ser valorado. Así:

El Sol y la Luna tienen dos puntos cada uno.


Al resto de los planetas se les asigna un punto.
Al Regente de la Carta se le suma un punto más.

De este modo, si tu Ascendente es Leo, el Sol, regente de tu


Carta, valdrá 3 puntos (2 + 1). Lo mismo sucede con el
ascendente Cáncer (cuyo regente es la Luna). Para el resto de los
planetas, ser regente vale 2 puntos (1 + 1).
En la rejilla planetaria de Marilyn Monroe puedes ver que su
Sol está en el signo de Géminis, y por tanto este planeta está en
un signo que es Activo, Mutable, de Aire y Personal. Al Sol le
corresponden dos puntos, pero como es además el Regente de la
Carta (ya que su Ascendente es Leo), le sumamos un punto más,
así que vale tres puntos. La Luna vale dos puntos y el resto de los
planetas, uno cada uno.
Como comprobación final de tu rejilla, suma toda la columna
de puntos. El resultado correcto debe ser 13 y si no es así,
comprueba el modo en que has repartido las puntuaciones.
Cuando hayas rellenado tu rejilla te darás cuenta de que
dispones de una gran cantidad de datos sobre tus planetas. De
hecho ahí están desplegadas todas tus energías. Pero para poder
entender estos datos debemos agruparlos en conjuntos
homogéneos. Así que tomando como base la rejilla vas a
elaborar cuatro cuadros más pequeños que nos servirán para
conocer tus energías fundamentales.
En la Tabla 7 hemos desarrollado las cuatro listas que
corresponden a las Polaridades, las Cualidades, los Elementos y
las Orientaciones de los planetas de Marilyn. Junto a cada
planeta se encuentra, entre paréntesis, su puntuación. Esta
puntuación se suma en la tercera columna, siendo el resultado
total, 13.
Así que, tomando los datos de tu rejilla planetaria debes
elaborar cuatro listas como las que se muestran. Tómate tu tiempo
y revisa cada uno de los datos. Suma las puntuaciones y
comprueba que el resultado final sea 13 en todos los casos.
Cuando termines estos cálculos, observarás que hemos
conseguido dar un valor objetivo a las diferentes energías o
funciones que conforman tu Carta. En cada lista, a la función que
tiene una puntuación más alta la hemos llamado Función
Dominante, mientras que aquella que posee la puntuación más
baja, se denomina Función Inferior. Entre la función dominante y
la inferior están aquellas que tienen valores intermedios, a las que
llamamos Funciones Auxiliares. Valora las puntuaciones tal como
se ha hecho con Marilyn y descubrirás cuáles son tus Funciones
Dominantes, Auxiliares e Inferiores.
Por supuesto, puede suceder que en algún caso haya dos
funciones que tengan la misma puntuación y que esta sea la
máxima o la mínima. En ese caso, hay que considerar que ambas
son dominantes o inferiores. La interpretación que hagamos de
estas funciones debe tener en cuenta las características de ambas.

Polaridad

Activo
Planetas: Marte (1) Saturno (1) Urano (1) Plutón (1)
Puntos: 4
Tipo: Inferior
Pasivo
Planetas: Sol (3) Luna (2) Mercurio (1) Venus (1) Júpiter
(1) Neptuno (1)
Puntos: 9
Tipo: Dominante
Comprobación: 13

Cualidad

Cardinal
Planetas: Venus (1) Plutón (1)
Puntos: 2
Tipo: Inferior
Fijo
Planetas: Luna (2) Júpiter (1) Saturno (1) Neptuno (1)
Puntos: 5
Tipo: Auxiliar
Mutable
Planetas: Sol (3) Mercurio (1) Marte (1) Urano (1)
Puntos: 6
Tipo: Dominante
Comprobación: 13

Elemento

Fuego
Planetas: Venus (1) Neptuno(1)
Puntos: 2
Tipo: Auxiliar
Tierra
Planetas:
Puntos: 0
Tipo: Inferior
Aire
Planetas: Sol (3) Luna (2) Mercurio (1) Júpiter (1)
Puntos: 7
Tipo: Dominante
Agua
Planetas: Marte (1) Saturno (1) Urano (1) Plutón (1)
Puntos: 4
Tipo: Auxiliar
Comprobación: 13
Orientación

Personal
Planetas: Sol (3) Mercurio (1) Venus (1) Plutón (1)
Puntos: 6
Tipo: Dominante
Social
Planetas: Saturno (1) Neptuno (1)
Puntos: 2
Tipo: Inferior
Universal
Planetas: Luna (2) Marte (1) Júpiter (1) Urano (1)
Puntos: 5
Tipo: Auxiliar
Comprobación: 13

Tabla 7. Distribución por Funciones de Marilyn Monroe


La Función Dominante
La Función Dominante indica una zona de seguridad en
nuestra vida. Representa el territorio en el que podemos expresar
nuestro yo de un modo natural, con facilidad. Cuando manejamos
sus energías sentimos que todo fluye, que no hay conflictos y que
no tenemos que realizar ningún esfuerzo especial.
Otra forma de definir la función dominante es en términos de
consciencia. Si bien es cierto que explorando su significado
tenemos la sensación de que “yo soy así y esta es mi
personalidad”, hay que aclarar que, como veremos más adelante,
nosotros somos bastante más que la energía dominante. Tenemos
motivaciones ocultas y energías escondidas. Lo que ocurre es que
como la función dominante suele manifestarse en el plano más
consciente, más inmediato, nos resulta muy fácil identificarnos con
ella.
La funciones inferiores serán analizadas en el próximo
capítulo, pero para que tengas una idea de su significado,
diremos que si bien la función dominante se relaciona con la
consciencia, la función inferior indica el territorio del inconsciente,
es decir, todo aquello que está en nuestro interior y a lo que no
tenemos fácil acceso. Siguiendo con esta lógica, las funciones que
se hallan a medio camino entre la dominante y la inferior, es
decir, las funciones auxiliares, están en la frontera entre los reinos
de la consciencia y la inconsciencia. Estas funciones pueden ser
muy útiles a la hora de integrar diversos elementos de nuestra
personalidad.

Interpretación de las Funciones


Dominantes

Activo. La persona activa tiende a vivir en el “hacer” antes


que en el “ser”. Muy centrada en lo exterior esta función indica
una personalidad que necesita movimiento y cambio, que busca
expresarse en todo momento.
Pasivo. La energía pasiva se centra en las vivencias
interiores. La persona con esta función dominante prefiere
aprender y observar antes que lanzarse a la acción.
Cardinal. Con gran iniciativa, la función cardinal se ocupa
de abrir brecha, de comenzar cualquier esfuerzo. Las personas
cardinales son innovadoras, pero quizá les falta la energía
suficiente para mantener el esfuerzo a largo plazo. Se crecen ante
los conflictos, pues son luchadores natos, pero cuando encuentran
un gran obstáculo les cuesta mucho buscar estrategias alternativas
para enfrentarse a él.
Fijo. Los signos fijos son conservadores, con una marcada
tendencia a defender todo aquello que poseen. Les cuesta
cambiar de criterio y saben desarrollar cualquier idea hasta sus
últimas consecuencias. En el terreno práctico son perseverantes y
vencen en cualquier combate a largo plazo. Su estabilidad es una
de sus mejores cualidades, aunque quizá les falte algo de
espontaneidad.
Mutable. La misión de la función mutable es la de enseñar al
mundo lo positivo del cambio y las novedades. La persona
mutable es flexible y muy adaptable. No es un innovador ni un
conservador, sino un revolucionario. Avanzando y retrocediendo,
cambiando constantemente, la persona mutable necesita
adaptarse y generalmente lo logra.
Fuego. Sin ajustarse a normas establecidas, el fuego se
mueve a partir de su propia voluntad. Muy capaz de abrirse
camino por sí misma, la energía del fuego se derrocha en
múltiples direcciones. Las personas con esta función superior son
apasionadas, activas y vehementes, defendiendo con firmeza sus
puntos de vista. Su tarea es animar a los demás y saben
derrochar encanto, pero no toleran los impedimentos ni los
retrasos. Ellos golpean y avanzan sin pensar en las
consecuencias. Su impaciencia es proverbial y a menudo fuerzan
el curso de los acontecimientos.
Tierra. Centradas en el mundo físico, las personas de tierra
son prácticas y fiables bajo toda circunstancia. Aman los placeres
sencillos y les gusta enraizarse en el suelo. Esta es la razón por la
que pueden soportar bien los vendavales que les asolen. Quizá su
principal defecto es la falta de flexibilidad (a menos que la
cualidad mutable esté destacada) y por ello tienden a seguir un
sendero marcado. A la hora de aprender, se fían de sus sentidos
antes que de especulaciones abstractas. Por eso buscan
conocimientos prácticos sobre los que poder construir edificios
estables.
Aire. El interés de las personas de aire se centra en el mundo
del conocimiento y las ideas. Variable como el viento, el aire
puede adaptarse a cualquier situación, pero no le gusta ser
retenido ni controlado. Las demandas emocionales le cogen
siempre por sorpresa y le cuesta mucho adaptarse a sus propios
sentimientos y a los de los demás. A estas personas les gusta ser
activas en la resolución de problemas, pero nunca golpean
directamente. Su sentido de la justicia les ayuda a entender las
razones de los demás, y su necesidad de comunicarse hace que
busquen soluciones diplomáticas antes que enfrentamientos
directos. Si consigue fijar un poco su atención, la persona de aire
puede ser muy productiva.
Agua. Profundamente emocional, el agua se asemeja al
fuego en sus intensos sentimientos. Pero mientras el fuego se
deshace en pasión y lucha, los sentimientos del agua son más
compasivos y abarcantes. Las personas de agua buscan las
profundidades y por ello necesitan implicarse con los demás y con
sus propias emociones. Quieren incorporarlo todo y se resienten
cuando el objeto de sus desvelos se les escapa. El principal
problema del agua es el chantaje emocional, en el que pueden
caer con cierta facilidad. Su inmersión en el sentimiento no es
siempre feliz, ya que en las profundidades habitan muchos
monstruos. Pero no cabe duda de que son estas personas, con su
ternura, las que hacen que el mundo sea un poco más humano y
habitable.
Personal. Quien tiene destacada la orientación personal en
su Carta suele ser una persona muy centrada en lo individual. Le
gusta vivir el presente y se preocupa por lo más inmediato. Esta
orientación puede dar lugar a modelos de acción individualistas.
Son personas con un gran interés por los procesos interiores.
Social. La orientación social nos vincula con las personas que
nos rodean y por ello, quienes tienen esta función dominante en
su Carta, necesitan vivir en contacto con los demás. Si otros
elementos de la Carta lo confirman, esta persona puede ser muy
dependiente de las opiniones ajenas, pero también es alguien que
sabrá conectar con los otros.
Universal. Interesados en los grandes temas que dan sentido
a la existencia, las personas con esta función superior tienden a
preocuparse por cuestiones de índole colectiva. Quizá se
interesen por la política o por la ecología, o quizá sean eternos
buscadores de respuestas. Sin duda, en muchos momentos de su
vida se perderán en especulaciones, pero no cabe duda de que
alcanzarán un gran desarrollo personal a poco que lo intenten.

Conflictos con la Función Dominante

Por lo que hemos visto, la Función dominante no debería ser


una fuente de problemas para las personas. Pertenece a nuestra
zona consciente y es aquello con lo que nos identificamos con
mayor facilidad. Pero la realidad cotidiana nos indica que esto no
siempre es tan sencillo. Porque, ¿qué ocurre cuando el desarrollo
de nuestra función dominante choca frontalmente con el ambiente
que nos rodea?
Este es uno de los puntos donde la Astrología alcanza sus
límites. Tu Carta puede decir cuáles son tus funciones dominantes,
pero lo que no puede decir (al menos no de un modo categórico)
es hasta qué punto has integrado estas funciones en tu vida. O
por decirlo de otro modo, hasta qué punto el ambiente que te
rodea, es decir, la familia o la sociedad, te ha permitido
integrarlas.
Por ejemplo, imaginemos la Carta de una mujer que tiene
entre sus funciones dominantes, la polaridad activa, la
cardinalidad y el fuego. Esta persona tendrá sin duda una gran
propensión a derrochar sus energías, será atrevida y le gustará
abrir camino en la vida. En el terreno sentimental puede ser
apasionada y en el trabajo no se dejará apabullar por ningún
hombre. Si esta mujer ha nacido en alguna gran ciudad de
Europa o Estados Unidos podemos imaginarla como una
arriesgada empresaria o trabajando en alguna profesión liberal.
Pero ¿qué ocurriría si hubiera nacido en una pequeña
comunidad rural conservadora? Si sus padres tenían una
mentalidad religiosa muy estricta ¿habrían permitido un normal
desarrollo de sus fuertes impulsos sexuales? Y si vive en un país
subdesarrollado ¿tendrá esta mujer las mismas oportunidades
profesionales? Incluso en las sociedades más avanzadas una
mujer con estas energías tiene bastantes dificultades para vivir su
vida laboral o sentimental con la libertad que ella desearía.
A mi juicio, uno de los principales problemas de la Astrología
actual es que tendemos a olvidar con demasiada frecuencia los
condicionantes socio-culturales que son fundamentales en el
desarrollo de la persona. Queremos verlo todo en la Carta, y no
todo está ahí. Tu familia, el ambiente social de tu infancia, las
costumbres de tu país, son cuestiones que tienen una notable
influencia y que pueden tener un considerable impacto sobre el
modo en que vives tus funciones dominantes.
En ocasiones, la función dominante es aceptable para la
sociedad y para la familia. En ese caso no habrá ningún conflicto
y esta función se desarrollará de un modo armónico y productivo.
Los padres terráqueos-fijos serán muy felices con su hijo asesor
bursátil. La feminista madre de agua, por su parte, verá con
buenos ojos que su hija trabaje como psicóloga en un centro para
mujeres maltratadas.
En otros casos, la función no está en total sintonía con el
ambiente, pero tampoco suscita un rechazo frontal. Quizá las
funciones auxiliares sí están en la línea de lo que social y
familiarmente se considera “aceptable”. O bien la familia está
formada por personas tolerantes que aceptan la diferencia como
algo natural. En estos casos habrá que hacer ajustes. Es probable
que la función dominante no se desarrolle completamente y
precise de la ayuda de las funciones auxiliares, pero la persona
no sufrirá un gran daño en su desarrollo.
Hay que dejar muy claro en este punto que todas las funciones
son igualmente aceptables y que todas pueden dar lugar a
desarrollos muy positivos. Del mismo modo que no hay signos
“buenos” ni “malos”, tampoco hay energías o funciones más
aceptables que otras. De aquí se deriva una enseñanza
fundamental para todos nosotros, y es la necesidad de ser
tolerantes y respetuosos con las energías de los demás. Si a los
niños se les proporciona en la familia un ambiente donde se
favorezca su autoestima y se les permita desarrollar su
personalidad, crecerán como adultos integrados consigo mismos,
incluso aunque la sociedad no les acepte plenamente.
Pero, tristemente, también hay ocasiones en que las energías
que propone la función dominante son completamente
inaceptables para el entorno familiar. En un ambiente muy hostil e
intolerante, ni siquiera las funciones auxiliares ayudan a lograr
una integración. La persona debe aprender a sobrevivir con sus
impulsos no desarrollados y sufre un terrible conflicto para el que
sólo existen dos salidas:

Rebelarse contra el ambiente hostil, lo que implica o bien


abandonarlo en busca de otros horizontes más amplios, o
bien quedarse, soportando el estigma de ser “diferente”.
Asumir la represión y esconder en el interior los elementos
más rechazados por el entorno.

Tanto la rebelión como la represión son soluciones que están


cargadas de resentimiento y por tanto, antes o después, acaban
por hacer daño a quien las padece. En estos casos, también la
sociedad o la familia pueden convertirse en víctimas de aquellas
personas que en su momento fueron rechazadas. La rebelión
puede conducir a alguien a la delincuencia o al mundo de la
drogadicción, pero la represión puede tener también efectos
perniciosos sobre la sociedad. El individuo apacible que de
repente estalla en un arrebato de ira contra su familia o vecinos,
quizá fue una víctima antes de convertirse en verdugo. La
segunda enseñanza que debemos extraer de aquí es que una
sociedad sana debería aceptar a las personas tal como son y
estimularlas a dar lo mejor de sí mismos.
En cualquier caso, y sin llegar a los niveles más patológicos y
destructivos, es cierto que todos hemos sufrido en nuestra vida un
cierto nivel de represión y de rebelión. Ninguna familia es
perfecta, como no lo es ninguna sociedad. Afortunadamente, los
casos más graves no son tan comunes, pero la necesidad de
reprimir ciertos elementos de nuestras funciones superiores es una
fuente de dolor interior que debemos tener en cuenta a la hora de
analizar nuestra Carta Astral.

La Máscara

Si viviéramos en un mundo ideal, nos bastaría con desarrollar


nuestra función superior para ser aceptados por las personas de
nuestro entorno. Pero la realidad, como acabamos de ver, es que
esa plena aceptación nunca se da del todo así que no podemos
ser completamente auténticos en contacto con los demás. En el
encuentro de nuestro yo con el mundo exterior necesitamos un
filtro que nos permita adaptarnos a las exigencias de la sociedad,
sin perder por ello nuestra individualidad. Este filtro es lo que
llamamos la “Máscara”.
La máscara es aquella parte de nuestra personalidad que
permite conectar nuestro mundo interior con la realidad externa:
relaciones, obligaciones, normas sociales, etc. Es un compromiso
a medio camino entre lo que somos y lo que los demás esperan
de nosotros. La línea de conexión entre el yo y el exterior se
efectúa a través de la máscara y es animada por la energía de las
funciones superiores.
Uno de los nombres con los que se conoce a la máscara es el
término latino persona, que se usaba en la antigüedad clásica
para designar las máscaras que usaban los actores en las
representaciones teatrales. El término persona proviene de la
expresión per sonare, que significa literalmente “sonar a través
de”. Las máscaras del teatro tenían una doble función. Por un
lado servían para que la voz del actor resonara a través de ellas,
permitiendo una mejor audición por parte del público. Por otra
parte, servían para subrayar la transformación que experimentaba
el actor al transformarse en su personaje.
El término español “persona” deriva de esta palabra latina, y
viene a señalar con claridad que todos, queramos o no, usamos
máscaras en nuestra vida cotidiana. La fantasía adolescente de
que podemos ser exactamente tal como deseamos debe despertar
a la dura realidad de que el ambiente nos condiciona de manera
poderosa a través de costumbres, normas sociales y leyes.
La máscara es aquella parte de nosotros que los demás
perciben inmediatamente y por ello, es con la que más fácilmente
se nos identifica. Esto puede provocar conflictos interiores, ya que
con quien de verdad nos identificamos es con nuestro yo, no con
la máscara. Si abandonamos el yo y nos dejamos llevar por la
imagen que los demás se han fabricado de nosotros, nuestra
máscara dejará de ser un auxilio en la integración social y pasará
a ser un elemento esclerótico, una auténtica máscara teatral,
rígida y sin vida. Así que no hay que olvidar que una máscara
sana debe comportarse como un adecuado canal de expresión
entre lo interno y lo externo.
La idea de la máscara procede de la psicología de Jung, pero
¿en qué medida está relacionada con la astrología? Nuestra
máscara, como cualquier elemento de nuestra personalidad se
observa en diversas zonas de la Carta Astral. Pero no cabe duda
de que su representación más evidente podemos encontrarla en
nuestro signo Ascendente.
A continuación se ofrece una descripción de los doce signos
ascendentes. Cada uno de ellos expresa una forma de adaptarse
al mundo, tan válida como cualquiera de las otras. Algunas
máscaras son claramente defensivas, mientras que otras son más
activas. Conocer esta parte de nuestro ser es fundamental para
que pueda integrarse en el contexto de nuestra personalidad y ser
así un elemento vivo y creativo.
Aries. Más que acercarse al mundo, la máscara de Aries
exige enfrentarse a él. Sean cuales sean sus sentimientos
interiores, esta persona no actuará con diplomacia, y puede ser
agresiva si se siente acorralada. De una forma voluntariosa y
dinámica, el ascendente Aries derrocha iniciativa y pasión por
vivir. Aunque quieran ocultarlo, las personas que tienen este
ascendente dependen en gran medida de los demás y de sus
opiniones. Bajo una apariencia autosuficiente, están ávidos de
cariño. Vivir positivamente esta máscara exige que tengamos un
gran amor por la vida y un perpetuo deseo de comenzar nuevos
proyectos.
Tauro. La máscara de Tauro pide observar el mundo con
serenidad. Con tiempo, las impresiones del exterior pueden
introducirse en la consciencia y lograr que los valores internos se
impongan en la vida material. Este ascendente es muy positivo a
la hora de afirmarse en el mundo práctico, de conquistar
posiciones y consolidarlas. Cuando, desde el interior, se pide a
Tauro que persevere en valores superiores a los materiales, lo
hace con tenacidad. La estabilidad de este ascendente puede ser
muy útil en cualquier tarea pero hay que vigilar que no caiga en
comportamientos repetitivos.
Géminis. Este signo, cuando se halla en el ascendente,
inclina a las personas a adaptarse por medio de la comunicación.
La capacidad verbal de esta máscara es superior a lo normal y
gracias a ello logra conectar rápidamente con las personas del
entorno. La facilidad de Géminis para acoplarse a cualquier
situación es otra de las herramientas que nos regala esta posición.
Gracias a su inteligencia práctica y su versatilidad, la máscara
geminiana se mueve con facilidad por el mundo. El principal
problema de esta posición es su falta de estabilidad y la extrema
variabilidad de su carácter. Es necesario tener un propósito
elevado para que esta energía no se malgaste en palabrería.
Cáncer. Situado en el ascendente, el signo de Cáncer
representa el valor de los sentimientos a la hora de socializarnos.
A partir de una cierta timidez natural, esta máscara nos permite
conectar con las energías de la nutrición, del amor incondicional
y la afabilidad en el trato con los demás. La conexión con los
valores tradicionales, tales como la familia, la patria o las
costumbres, permiten estabilizar el carácter y darle un tono más
afectivo que es bien recibido por los demás. De este modo, la
energía de Cáncer canaliza al exterior nuestros mejores
sentimientos. El principal problema de esta máscara puede ser su
extrema sensibilidad, por lo que puede convertirse fácilmente en
un caparazón defensivo. Se necesita un entorno favorable para
que este signo dé lo mejor de sí.
Leo. Con una notable presencia, la máscara leonina sabe
imponerse a los demás sin necesidad de grandes demostraciones
de poder. Sin duda, Leo es honesto y directo en el ascendente. Su
orgullo es muy importante y sabe mostrar una cara agradable y
simpática ante los demás. En ocasiones, este ascendente tiende a
la ostentación y conecta con el mundo a partir de una sensación
de grandeza y auto-importancia que no todos saben entender.
Aunque a Leo le importa poco lo que piensan los demás, acepta
el aplauso porque sabe que lo merece. Su calor humano es su
mejor arma y con ella puede conquistar a los demás.
El Ascendente de Marilyn era Leo, y en este caso podemos
llegar a entender muy bien lo que puede llegar a ser una máscara
esclerótica. Todos tenemos en mente su apariencia física cuando
era una estrella: ojos grandes y brillantes, melena rubia y curvas
generosas, sin duda una apariencia muy leonina. Pero ella no fue
siempre así. Como hemos visto, fue una niña desamparada que
nunca llegó a conocer el auténtico amor familiar, lo que marcó su
carácter con un sello indeleble.
En cierto modo, cuando inició su carrera artística hizo algo
más que cambiar su nombre natal (Norma Jean por Marilyn), o
teñirse el cabello (de castaño a rubio platino). Marilyn se
identificó completamente con su máscara, literalmente, se dejó
absorber por ella. Brilló como sólo sabe hacerlo una persona con
la máscara de Leo. La pequeña Norma Jean acabó enterrada en
un cuerpo deslumbrante, siendo la estrella que siempre quiso ser.
Pero su sol en Géminis, necesitado de comunicación sincera, de
juego y retos intelectuales, debió sentirse muy desvalido bajo tal
apariencia.
Virgo. El ascendente Virgo se relaciona con la vida práctica.
Su sentido común es envidiable, así como su capacidad para el
trabajo ordenado y riguroso. Las cualidades analíticas de esta
energía permiten construir una máscara bien asentada en el
mundo laboral especializado. En las relaciones, estas personas
pueden caer con facilidad en la crítica desmesurada ya que
tienden a ser demasiado puntillosos con los demás. Las bases
físicas de Virgo se elevan a terrenos más intelectuales que en el
caso de Tauro, y por este motivo esta máscara puede ser muy
eficaz para dar salida a inquietudes de tipo mental o espiritual.
Libra. En su búsqueda del equilibrio, Libra es un ascendente
inclinado a la búsqueda de la paz en el interior y el exterior. Su
deseo de ser apreciado le empuja a ser diplomático y conciliador.
Necesita el contacto con los demás, y más concretamente con su
pareja o las personas más próximas a él. En cada conflicto le
cuesta tomar partido, ya que busca conocer todos los datos y cae
en una perpetua indecisión. La máscara de Libra es muy
apropiada para la vida social y permite que nuestro yo se
expanda en armonía con aquellos que viven a nuestro alrededor.
Su afán igualitario es una de sus mayores virtudes.
Escorpio. Con una gran sensibilidad unida a un carácter
firme, Escorpio sabe hacerse respetar por los demás. Esta
máscara es una de las más complejas, ya que está muy volcada
hacia el interior. Bajo un aspecto apacible, Escorpio es complejo
y profundo, dotado de una capacidad innata para la reserva.
Cuando se siente herido, reacciona con sarcasmo y sabe cómo
herir a quienes le hieren. Este ascendente es claramente defensivo
y necesita un cierto desarrollo espiritual para que permita dar
salida a sus poderosas energías inconscientes.
Sagitario. Amistoso e interesado en todo lo que sea
conocimiento, el ascendente Sagitario es el más idealista de
todos. En las reuniones sociales no pasa inadvertido, pues es
animado y con un carácter muy colorista. Esta máscara da lo
mejor de sí en aquellas personas que saben ver la vida como un
continuo aprendizaje. Ama la libertad, pero su forma de actuar es
bastante más ortodoxa de lo que parece a primera vista. Su
inquietud puede ser a veces excesiva y esto le hace actuar de
forma poco considerada en algunas ocasiones. Aprendiendo y
expandiéndose, la energía de Sagitario busca manifestar los
logros interiores en un mundo sin fronteras.
Capricornio. La ambición es la seña de identidad de la
máscara capricorniana. Como todos los signos de tierra, este
ascendente es laborioso y capaz de lograr lo que se proponga.
Pero el objetivo de sus esfuerzos no es alcanzar la estabilidad ni
cumplir su deber, sino alcanzar el éxito. En muchas ocasiones,
Capricornio no necesita que los demás le aplaudan, sino que se
contenta con demostrarse a sí mismo de lo que es capaz. Este
ascendente aporta paciencia y una actitud disciplinada ante los
retos de la vida. Su apariencia es con frecuencia demasiado seria
y apagada, pero el paso de los años le favorece y suaviza mucho
su carácter. Capricornio ayuda a lograr resultados tangibles en la
vida, siempre que este ascendente se viva con la necesaria
ligereza y sentido del humor.
Acuario. Su gran placer es sentirse diferente a los demás y
de hecho lo es, ya que sus intereses suelen estar por encima de
los de la media. La energía del ascendente Acuario se despliega
con facilidad en todo aquello que indique novedad, rebeldía y
renovación. En el trato personal hace gala de cierto magnetismo y
esto ayuda a que algunas de sus cualidades más extrañas sean
fácilmente aceptadas por los demás. En sus tareas cotidianas
tiende a aferrarse a su manera de hacer las cosas y puede pecar
de cierta cabezonería. El que sus métodos sean novedosos no
quiere decir que sean siempre los mejores. Su obligación vital es
la de abrir camino a las nuevas ideas.
Piscis. La emotividad de los signos de agua llega a su punto
culminante bajo este ascendente. Sabe servir a los demás y sin
duda ha venido a este mundo para aprender las duras lecciones
de la compasión. Su capacidad práctica no es muy grande, pero
sabe atraer a la conciencia todos los frutos de su fértil
imaginación. La tarea de Piscis consiste en hacer un poco más
habitable este mundo, no sólo en contacto con sus seres queridos,
sino con todos los individuos de este mundo. La intuición es su
principal arma y con ella puede conectar con los demás así como
con las profundidades de su ser oceánico.
En el próximo capítulo, vamos a analizar los puntos débiles de
tu Carta Astral.
XIII - Los puntos débiles de
la Carta
Una vez que has conocido las principales energías que
mueven tu consciencia, ha llegado el momento de hablar de todo
aquello que podríamos llamar “debilidades” de la Carta, es decir,
de las funciones inferiores y los elementos que faltan en ella.
La función inferior representa un ámbito de nuestra vida donde
se crea una gran cantidad de tensión. Esto es especialmente
importante en aquellas funciones que sólo cuentan con uno o
ningún planeta. Esta función muestra todo aquello que nos resulta
difícil de entender, lo que nos cuesta trabajo integrar, ya que se
trata de energías muy vinculadas con el material inconsciente.
La función inferior es, en muchos casos, un foco de dolor que
está escondido dentro de nosotros, un clavo bien hundido en el
corazón. Su efecto suele ser paradójico, ya que aunque esté
oculta consume una parte importante de nuestras energías y
puede ser una fuente de comportamientos adictivos o compulsivos.
Esta función, como veremos, suele estar reprimida, pero en
ocasiones emerge con toda la fuerza de un volcán provocando
sentimientos de confusión o culpabilidad, ya que todo lo
escondido tiende a salir a la superficie antes o después.
Cuando la función inferior está habitada por dos o más
planetas resulta más fácil integrarla y puede convertirse en una
función auxiliar a poco que decidamos trabajar con ella. Pero
incluso una función inferior completamente vacía de planetas
puede ser integrada, siempre que hagamos el esfuerzo de ser
conscientes de su poder. En este punto la Astrología se presenta
como una herramienta muy útil, ya que sistematiza de forma muy
clara las diferentes energías que dan forma a la personalidad
humana.
Interpretación de las Funciones
Inferiores
Pasivo. La polaridad pasiva convertida en función inferior,
indica la propensión a vivir con los elementos masculinos de la
personalidad, rechazando la parte más femenina y sensible de
nuestro ser. Cuando ambas polaridades presentan un gran
desequilibrio, es una señal inequívoca de que se debe buscar un
equilibrio, reforzando la parte receptiva del ser.
Activo. Cuando esta polaridad es función inferior, la persona
puede sentir que falla su conexión con las energías activas o
masculinas de su ser. Si la diferencia entre ambas polaridades no
es muy elevada, esta falta no se notará en exceso, pero es
conveniente tenerla en cuenta.
Cardinal. La capacidad de iniciativa parece estar bloqueada
en las personas con esta carencia. Constantemente surge en ellas
la necesidad de “hacer algo”, pero por alguna razón siempre
aparecen impedimentos de todo tipo que retrasan la acción.
Muchas veces, la inacción trae a la persona el profundo
sentimiento de que carece de suerte, de que nunca logra lo que
desea, lo que da lugar a una gran autocompasión. Este
sentimiento puede dar lugar a actos de heroísmo que resultan
paradójicos en alguien sin motivación, pero que por ser tan
extemporáneos, no suelen dar los mejores resultados.
Fijo. Cuando hay pocos o ningún planeta en los signos fijos,
la persona puede sentir que le falta la persistencia necesaria para
llevar a término lo que empieza. Sin duda tendrá iniciativa y
flexibilidad, pero le costará alcanzar la estabilidad en sus
empeños. Menos atada a las convenciones o las costumbres, esta
persona puede experimentar una gran sensación de libertad. Pero
en el fondo de su corazón, sentirá el deseo siempre insatisfecho
de echar profundas raíces en algún lugar o con alguna persona.
Mutable. La falta de adaptabilidad es un rasgo destacado en
este caso. La mente parece seguir una sola dirección y cualquier
esfuerzo por cambiar parece destinado al fracaso. La rigidez del
carácter dificulta bastante las relaciones, por lo que la persona
que tiene a la energía mutable como función inferior suele
desarrollarse de un modo autónomo, lejos de los demás y su
influencia. Los procesos de cambio son especialmente angustiosos
para estas personas, así como todo aquello que venga a trastocar
sus planes perfectamente establecidos.
Fuego. La falta de fuego en la Carta es un claro indicador de
la falta de pasión y entusiasmo de la persona. Si no tiene algún
tipo de ambición, será difícil que logre algo importante en su
vida. En las relaciones aparenta ser soso y apagado. Como
sucede con otras funciones inferiores, la carencia de fuego se
puede sobrecompensar manifestándose en bruscos estallidos
pasionales. El material reprimido salta a la consciencia de un
modo exagerado y extemporáneo que puede causar conflictos
con el entorno. No es extraño que estas personas, aparentemente
apacibles, se dejen llevar por estallidos de ira o por bruscos
apasionamientos.
Tierra. Cuando la Tierra es función inferior en una Carta, la
persona tiene grandes problemas para vivir en la realidad
cotidiana. Soñando siempre con imposibles, existen bastantes
dificultades para ganar dinero y conservarlo. Los sentimientos
relativos al dinero o las posesiones materiales son paradójicos,
sintiendo un gran rechazo mezclado con una profunda y oculta
atracción por el lujo. La persona con esta carencia tiene
problemas para llegar al fondo de los conflictos, dedicándose a
construir montañas a partir de simples granos de arena. En el
fondo busca la realidad, porque necesita establecerse y sentir la
tierra debajo de los pies.
Marilyn Monroe carecía de planetas en signos de Tierra. Esta
es sin duda, su función inferior más importante y en la que nos
centraremos aquí. Incapaz de sentirse a gusto en el mundo, toda
su vida parece una eterna carrera en pos de la estabilidad.
Siendo el agua su función dominante, no cabe duda que era una
persona emotiva, pero seguramente daba una excesiva
importancia a los conflictos emocionales. Si hubiera aprendido a
descubrir su tierra, enraizándose en la realidad más amplia,
probablemente habría encontrado la estabilidad dentro de ella
misma.
Aire. Las habilidades mentales o expresivas pueden estar
seriamente limitadas cuando faltan planetas en signos de aire.
Cuando se carece de esta energía, las emociones suelen tomar las
riendas de la personalidad, haciendo actuar a la persona de un
modo apasionado y vehemente, pero poco racional. El efecto
paradójico de las funciones inferiores hace que se provoque una
gran curiosidad intelectual en personas que sufren esta carencia.
Pero la persona, por más que lea o estudie, siempre tiene la
sensación de que no aprende todo lo necesario. Ocurre lo mismo
a la hora de comunicarse, por mucho que lo intente, la persona
siente que no es capaz de expresarse claramente.
Agua. La carencia de agua en la Carta puede indicar la
dificultad para conectar con la parte más sensible de la
personalidad. La persona con esta falta puede encontrar que le
resulta muy difícil expresar sus sentimientos, o quizá lo haga por
medios poco usuales. El mundo que les rodea, les influye en muy
pequeña medida, por lo que resulta especialmente complicado
conectar con los problemas o alegrías de los demás. La falta de
empatía es un grave problema en las relaciones interpersonales
por lo que estas personas pueden vivir grandes conflictos con los
demás.
Personal. Si la orientación personal es función inferior en la
Carta, la persona tiende a sentirse desvalorizada con respeto a su
entorno. La autoestima suele ser baja en estos casos y debido a
ello hay una perpetua sensación de sentirse inadecuado, falto de
recursos.
Social. Cuando falla la orientación social en la Carta, las
relaciones con las personas del entorno tienden a ser más
conflictivas de lo habitual. Falta la capacidad de sintonizar con
los demás, el deseo de reunirse con otros. Esta carencia puede
dar lugar a efectos paradójicos, como la excesiva dependencia
del entorno.
Universal. La orientación universal se relaciona con el
mundo en su sentido más extenso. Su carencia se suele notar en la
edad adulta, como una sensación de falta de ideales o una
búsqueda infructuosa del sentido de la vida. Algunas personas
con esta falta se adhieren ciegamente a cualquier credo, mientras
que otras caen en el escepticismo y la intransigencia intelectual.
Carencia de Aspectos
Otra importante carencia de la Carta puede ser la falta de
algún tipo de aspecto planetario. Para descubrirla, simplemente
recorre la rejilla de aspectos de tu Carta y comprueba si están
todos. Los aspectos representan las diversas formas que tenemos
de enfrentar los acontecimientos de la vida y el hecho de que falte
alguno, indica la dificultad de responder de una manera
determinada a los acontecimientos, o por decirlo de otro modo,
una falta de recursos en algún segmento de nuestra vida.
En la mayor parte de las Cartas se dan todos los aspectos
posibles, pero si en la tuya falta alguno, aquí tienes sugerencias
sobre su posible significado:
Carencia de Conjunciones. La falta de conjunciones hace
que la persona se disperse en muchas direcciones. Sin duda se
trata de alguien muy versátil, capaz de enfrentar varias tareas al
mismo tiempo. Pero tanta versatilidad hace que la energía se
derroche y en muchas ocasiones, se pierda. La falta de
concentración provoca muchos conflictos en el plano laboral, pero
también en las relaciones, ya que la dispersión de los sentimientos
puede provocar muchas quejas por parte de las personas
queridas.
Carencia de Oposiciones. Una persona sin oposiciones
tiende de una forma natural al individualismo. Le cuesta mucho
darse cuenta de los demás, de sus deseos e incluso de su mera
existencia. En ocasiones, la persona sin oposiciones cree que
comprende muy bien a las personas de su entorno, pero en
realidad sólo los ve como un reflejo de sí misma. Sólo descubren
que algo va mal cuando ya han provocado la ira de sus
familiares o amigos. No entienden que se les acuse de egoístas,
pero la realidad es que son incapaces de ver a los demás como
personas independientes.
Carencia de Trígonos o Sextiles. Para la persona que
carece de trígonos o sextiles, la vida es una lucha permanente
contra todo y contra todos. Cuando falta alguno de estos
aspectos, falta la capacidad de relajarse, de disfrutar de las cosas
buenas de la vida. Algunas veces la motivación de estas personas
es la sensación de no tener nunca lo suficiente, lo que les provoca
una profunda insatisfacción y también cierta incomprensión por
parte de los demás. Todo lo que se emprende cuesta un enorme
esfuerzo y la persona parece incapaz de valorar sus propios
recursos y de aprovecharlos de un modo productivo.
Carencia de Cuadraturas. Aunque a ninguno de nosotros
nos gusta encontrar obstáculos en nuestro camino, es evidente que
las dificultades son un estímulo para actuar. Así por ejemplo, si
nuestros padres no nos hubieran soltado de la mano en algún
momento, nunca habríamos aprendido a caminar. La persona que
carece de cuadraturas en su Carta suele ignorar los conflictos que
surgen a su alrededor. No está acostumbrada a luchar y se
adapta con facilidad al entorno. Puede soportar condiciones de
vida muy dolorosas durante demasiado tiempo antes de sentir que
es necesario cambiar. Pero los problemas están ahí, creciendo a
su alrededor. Así que cuando son demasiado acuciantes, la
persona no puede afrontarlos y se siente superada en todos los
frentes. La crisis es entonces inevitable.
Carencia de Quincuncios. La falta de quincuncios puede
provocar una marcada incapacidad para entender las vidas,
ideas y sentimientos de los demás. A diferencia de la carencia de
oposiciones, no es que la persona sienta que los demás son como
él, sino que le resultan incomprensibles. El individualismo alcanza
grandes proporciones con esta configuración y en algunos casos
provoca fuertes conflictos con el entorno.
Planetas sin Aspectos
Del mismo modo que la falta de un aspecto puede tener una
importante influencia en nuestra vida, creando puntos ciegos que
pueden generar conflictos, el hecho de que alguno de los planetas
esté aislado con respecto a los demás, tiene un efecto similar.
Para descubrir si tienes algún planeta aislado, recorre la rejilla
de aspectos de tu Carta planeta por planeta. Un planeta sin
aspectos tendrá todas sus casillas vacías y en el diseño de la
Carta, no estará unido a ningún otro por líneas de aspectos. Si
tienes algún planeta en estas condiciones, te ofrezco a
continuación una breve descripción de sus efectos:
Sol sin aspectos. Indica que el sentido del “yo” puede estar
seriamente herido. En algunos casos se manifiesta en el
sentimiento de no ser comprendido por los demás, dando lugar a
una sensación de aislamiento. La autoestima puede sufrir
bastante, lo que en algunos casos puede dar origen,
paradójicamente, a la necesidad de brillar por encima de los
demás. O bien, uno puede sentir que carece de fuerzas para
manifestarse y se convierte en actor secundario de su propia vida.
Luna sin aspectos. Señala que las emociones están
encapsuladas en nuestro interior, impidiendo que nos impliquemos
afectivamente con los demás. Cuando una persona tiene a su
Luna aislada del resto de los planetas, las áreas prácticas de su
existencia se desarrollan sin el obstáculo de las emociones, lo que
puede hacerla muy productiva. Pero no hay que dejar de lado
que la falta de empatía causará grandes problemas en las
relaciones.
Mercurio sin aspectos. Sin contacto con el resto de los
planetas, Mercurio tiende a aislar todo el proceso mental del resto
del horóscopo. En muchas ocasiones, las emociones no
encontrarán una vía de expresión, o bien las ideas y los
sentimientos pueden viajar por caminos opuestos. La capacidad
de comunicación puede sufrir bastantes bloqueos, y en todo
momento la mente no deja de funcionar, eliminando cierta
espontaneidad en la vivencia del amor o del sexo.
Venus sin aspectos. Aquí falla la capacidad de integración
en el entorno. La persona que tiene a Venus aislada tiende a ser
muy autosuficiente, pero puede sufrir porque no es capaz de
acercarse a los demás o quizá porque siente que los demás no se
acercan a ella. En algunos casos, quien tiene a Venus en soledad
se esfuerza por dar amor a los demás, pero no se siente
retribuido de igual manera.
Marte sin aspectos. Marte, cuando se halla aislado del
resto de los planetas, representa una energía que no encuentra
oposición ni vías para canalizarse positivamente. La persona
tiende a gastar sus fuerzas con rapidez, actuando de un modo
agresivo y pasional, pero carente de fundamentos. Pero si las
energías marcianas han sido reprimidas, se puede sentir una gran
rabia interior que no se manifiesta de un modo creativo. La
persona puede estar bloqueada en todos los frentes, sin salida.
Júpiter sin aspectos. Si Júpiter representa la capacidad de
crecer, de extenderse más allá de los límites, cuando este planeta
se encuentra sin aspectos, puede ser un indicio de que deseamos
expandirnos mucho más allá de nuestras fronteras naturales. El
filósofo innovador y heterodoxo puede surgir de esta
configuración. En otros casos, Júpiter aislado indica un área de
crecimiento que no está conectada con el resto de la
personalidad. Uno puede desarrollar su inteligencia, su
capacidad práctica, o cualquier área de la personalidad, pero sin
que eso revierta de un modo positivo en el resto de nuestra vida.
Esta área vendrá indicada por el signo y casa en que se
encuentre el planeta. En los casos más comunes, Júpiter indica
excesos, gastos de energía o de recursos que pueden dejar
exhausta a la persona (o a su cuenta corriente).
Saturno sin aspectos. Saturno representa la zona de
nuestra vida en la que alcanzamos nuestros límites, es nuestra
ancla en el mundo real. Saturno sin aspectos puede hacer que la
persona sea demasiado exigente con su entorno, como en un
intento de crearse muros y límites en todas direcciones. La
necesidad de lograr autocontrol es muy grande y cuando se
comete algún “pecado”, cosa muy normal cuando el nivel de
autorrepresión es alto, el sentimiento de culpa puede ser
abrumador.
Urano sin aspectos. Urano aislado crea singularidades en
la personalidad. Quien tiene esta configuración, sin duda se
siente diferente, y busca sobresalir como alguien especial en el
ámbito que indique la posición de Urano por signo y casa. El que
lo logre o no dependerá del resto de la Carta.
Neptuno sin aspectos. Relacionado con la creatividad y el
mundo inconsciente, Neptuno sin aspectos puede otorgar una
gran sensibilidad artística o espiritual. Otra cuestión será integrar
esa poderosa energía en la vida práctica, cuestión que no todos
logran fácilmente.
Plutón sin aspectos. Plutón es el planeta de la
transformación, pero también rige aspectos como el poder
personal y los elementos más obsesivos de la personalidad.
Aislado, este planeta puede exigir grandes cambios en la
persona, pero la capacidad de integrarlos en la conciencia se
vuelve dificultosa.
La Sombra
Todos los elementos que hemos descrito, tanto las funciones
inferiores como las carencias de aspectos, forman parte de lo
que, usando términos de Jung, podríamos denominar nuestra
“Sombra”. También las funciones superiores que hayan sido
furiosamente reprimidas por el entorno pueden llegar a formar
parte de la Sombra (Fig. 31).
Figura 31. Zonas de la personalidad humana

La Sombra junguiana es el depósito en el que guardamos todo


aquel material reprimido que nuestro “yo” o “ego” no es capaz
de aceptar. Se trata por tanto de una parte escindida de nuestra
consciencia, una parte oculta. Es el territorio de lo inconsciente,
de lo ignorado.
En nuestra cultura occidental, tan centrada en los conceptos
del “bien” y el “mal”, tenemos cierta tendencia a ver la sombra
como algo negativo, como una parte de nosotros mismos que hay
que erradicar. El propio término “sombra” parece evocar todas
las circunstancias oscuras y siniestras que desearíamos apartar de
nuestra existencia. Pero la realidad es que todos tenemos sombra,
y por más que queramos, no podemos correr más deprisa que
ella y dejarla atrás. Nuestra sombra está pegada a nosotros
constantemente y suele ser más visible para quienes nos rodean
que para nosotros mismos.
En contra de lo que se puede pensar, la sombra psíquica no es
un elemento negativo, sino que es la ignorancia acerca de la
propia sombra la que nos lleva a tener comportamientos que son
dolorosos para nosotros o para los demás. Reconocer la sombra y
hacerla consciente de un modo paulatino, nos ayuda a tener una
vida más plena y creativa.
Por ejemplo, una persona que carece de planetas en el
elemento aire puede relegar a la sombra todos los elementos
intelectuales de su ser. Los efectos de esta represión pueden crear
la íntima sensación de no ser lo suficientemente inteligente, o bien
puede sentir un rechazo irracional hacia las personas
intelectuales. En un efecto paradójico, que es muy común cuando
tratamos con la sombra, esta persona puede sentirse fuertemente
atraída por los elementos de esta función interior, y en este caso
leerá sin descanso, pero con la sensación de no estar nunca
aprendiendo nada. O quizá se enamore de una persona de
características mentales para luego quejarse de su frialdad.
Mientras esta persona ignore que su sombra está compuesta
de aire, vivirá en la insatisfacción. Pero si aprende que el aire es
su función inferior, si empieza a analizar su relación con esta
energía y se permite vivir esta energía de un modo consciente,
logrará integrar esta parte de su ser.
Al leer las descripciones de los elementos astrológicos
relegados a la sombra habrás observado que en algunos casos se
ofrecen interpretaciones opuestas para una misma configuración.
Esto se debe en parte, a que nuestro yo no acepta fácilmente a la
sombra y así ésta no puede manifestarse de un modo directo.
Todo aquello que está relegado a la sombra, permanece por
definición lejos de nuestra conciencia ordinaria, pero al mismo
tiempo se manifiesta a través de ella sin que nos demos cuenta.
Por un lado todos tenemos la necesidad de expresar e integrar
nuestra sombra, incluso aunque nunca hayamos oído hablar de
ella. Pero por otra parte, nuestro ego tiende a sofocar esos
elementos que surgen del interior y que causan temor. Esta lucha
constante se refleja en los diversos “mecanismos de defensa
psíquica” que analizamos a continuación.
Los mecanismos de defensa
Llamamos “mecanismos de defensa” a las diversas estrategias
que usamos para relacionarnos con nuestra sombra en la vida
cotidiana. El hecho de que la sombra esté oculta para la mayor
parte de las personas no quiere decir que no conozcamos su
existencia. De hecho, todos tenemos cierta percepción de la
sombra, pero en la medida en que nuestro yo es más o menos
consciente de ella, desarrolla distintas actitudes defensivas ante su
aparición.
Figura 32. Mecanismos de defensa psicológicos

En la Fig. 32 se muestran los principales mecanismos de


defensa psicológicos. Como puedes observar, estos mecanismos
varían en la medida en que cambia la consciencia que tengamos
sobre ellos. Cuanto mayor es la consciencia, los mecanismos son
más sutiles y por tanto, la sombra se hace más visible y podemos
tratar mejor con ella. A continuación analizamos estos
mecanismos con más detalle.
La Negación, como indica su nombre, consiste en negar la
existencia de una determinada función. Representa el nivel de
consciencia más bajo. Cuando negamos algo en nosotros mismos,
tenemos la tendencia a distorsionar o anular determinadas
realidades internas por considerarlas desagradables o
vergonzosas.
La negación se basa en un pensamiento de esta naturaleza:
“es imposible que una persona como yo haga algo tan
despreciable como eso”; y se manifiesta en frases como: “yo
nunca me enfado”, “nunca he cogido algo que no sea mío”,
“jamás miré a otra persona que no fueras tú”, etc. Evidentemente
estas afirmaciones se basan en algo falso: todos nos enfadamos,
todos hemos cogido alguna vez algo que no era nuestro y todos
hemos sentido interés, curiosidad o atracción por terceras
personas. Por tanto, la negación representa un nivel de
consciencia muy bajo, similar al niño que acaba de romper el
jarrón y aun así proclama: “no fui yo”.
Cuando funciona la Represión, somos parcialmente
conscientes de esta función inferior, pero luchamos por
mantenerla alejada de la plena consciencia. Si la negación
implica simplemente cerrar los ojos a un determinado patrón de
conducta, la represión se manifiesta como una lucha constante
por mantener alejado dicho patrón que amenaza con emerger
una y otra vez.
La represión se basa en un diálogo interno como el siguiente:
“sí, esto existe, pero es demasiado inaceptable, así que intentaré
no pensar en ello”. El mecanismo represivo consume una gran
energía, ya que debe estar siempre preparado para actuar.
Generalmente la represión ataca directamente a la conducta
sexual, pero puede estar implicada en muchas facetas de nuestra
vida. Además, cuando una conducta es reprimida, nos resulta
muy molesto verla en los demás, lo cual da paso al siguiente
mecanismo de defensa, la proyección.
En la Proyección existe la consciencia sobre la función
inferior, pero como no podemos admitirla, la vemos reflejada en
los demás. De este modo se reduce gran parte de la tensión
asociada a la represión, pero al alejar de nosotros la consciencia
del patrón de conducta nos queda un gran poso de
incomprensión interna.
La proyección actúa sobre esta premisa: “no puedo aceptar
este aspecto en mí, así que prefiero verlo en ti”. Como es lógico,
la proyección tiene un peso fundamental en nuestras relaciones.
Muchos de los enamoramientos repentinos están íntimamente
ligados a los procesos de proyección. Pero este mecanismo
también puede causar grandes problemas en las relaciones, ya
que tiende a crear falsas percepciones del comportamiento de los
demás. Esto se debe a que la función proyectada se percibe en
los otros de forma exagerada. Así, si una persona tiene al fuego
como función inferior, puede sentir una gran atracción por
personas vitalistas y apasionadas, que manifiesten el fuego de un
modo muy evidente. Pero con el tiempo, el fuego de la pareja se
puede convertir en un gran obstáculo, y lo que era pasión se
percibe como violencia, falta de tacto o crueldad. Por eso,
muchas veces lo que más nos atrae es también lo que más
rechazo nos provoca.
En un nivel de consciencia superior está la Sublimación. A
través de ella reconocemos plenamente la función inferior, pero
en vez de dejarla fluir de forma natural, intentamos encauzarla en
otra dirección. Con la sublimación se consigue economizar
energías en una faceta de nuestra vida, energías que se vuelcan
completamente en otras que nos resultan más aceptables.
Es el caso, por ejemplo, de algunas personas con limitaciones
físicas o con un aspecto que no coincide con los patrones de
belleza que admite la sociedad. Estas personas, en muchos casos,
deciden olvidarse de su cuerpo y dedicarse a actividades de tipo
intelectual en las que alcanzan una gran brillantez, pero a costa
de una desvalorización muy grande de su físico.
La Compensación como defensa psicológica propone irse
al extremo opuesto a la negación. En este caso, la función inferior
ocupa toda nuestra consciencia y nos dedicamos a ella por
completo. Cuando un patrón de conducta ha sido negado durante
demasiado tiempo puede dar lugar a actitudes compensatorias.
En algunos casos, la compensación puede surgir a partir de
algún suceso vital, como un accidente, una enfermedad grave o
una crisis de madurez. Ante sucesos de este tipo, algunas
personas se liberan bruscamente de sus represiones y caen en
conductas de tipo adictivo. Por otro lado, la compensación se
puede vivir de un modo más positivo y consciente, que consiste en
“darnos permiso” a nosotros mismos para expresar plenamente el
material reprimido a fin de que se normalice.
Como has podido entender en esta enumeración, los
mecanismos de defensa psicológicos no son conceptos netamente
separados, sino que representan la progresiva modulación de la
consciencia desde la negación de una determinada energía hasta
su plena aceptación. Por otra parte, los mecanismos que usamos
pueden variar con el transcurso del tiempo. De la negación a la
compensación hay un largo camino que debes recorrer (que
seguramente ya has recorrido en parte), y que ha de llevarte al
objetivo final, que es la integración de la sombra y de todos los
elementos dispersos de tu ser.
Pero si bien es fácil descubrir cuáles son nuestras funciones
inferiores, reconocer cuáles son los mecanismos defensivos que
estamos aplicando sobre ellas es algo que difícilmente puede
deducirse del análisis de la Carta Astral. De hecho, este
conocimiento se alcanza mejor a través de la observación y la
reflexión sobre nuestro comportamiento cotidiano. La razón de
que los mecanismos no se observen con tanta facilidad en la
Carta se debe a que éstos dependen de factores como nuestra
educación infantil o el grado evolutivo que hayamos alcanzado
en el momento actual de nuestra vida.
La sombra en la vida cotidiana
Como ya se ha explicado, en nuestra vida cotidiana vivimos la
constante lucha del yo por sofocar las apariciones de la sombra,
pero nuestra sombra es una parte de nosotros que busca ser
integrada para que nuestra vida sea plena. Así que ahora que ya
conoces los elementos que pueblan tu sombra, puedes comenzar
a observar cómo intentan manifestarse en tu vida y cuáles son los
mecanismos de defensa que emplea tu yo. A continuación te
ofrezco algunos ejemplos de estas manifestaciones de la sombra
en la vida cotidiana.
Sentimientos y emociones exageradas. Todo aquello
que nos provoca una alegría desproporcionada o una angustia
fuera de lo común puede estar relacionado con el territorio de la
sombra. Sobre todo, los sentimientos de vergüenza o humillación
pueden ser un buen exponente de nuestra relación con la sombra,
ya que solemos ocultar todo aquello que nos hace sentir
inferiores, relegándolo al mundo inconsciente. Por otro lado, los
estallidos de ira suelen ser también bastante significativos, como
veremos a continuación.
Actos impulsivos que a nosotros mismos nos sorprenden. Si
alguna vez, al expresar una opinión o un reproche te has
sorprendido pensando: “¿soy yo quien dice esto?”, es muy
probable que estés tocando muy de cerca a tu sombra. Muchos
de nuestros actos impulsivos, o de las palabras que decimos sin
pensar en un momento de rabia, provienen directamente de
nuestra región de sombra. Sobre todo hay que prestar especial
atención a las expresiones que contienen los adverbios “siempre”
o “nunca”, como por ejemplo: “yo siempre digo la verdad”.
Cualidades que nos enamoran de otra persona y que
luego se perciben como negativas. Los “flechazos” suelen ser un
terreno abonado para las proyecciones de la sombra, lo que no
quiere decir que el enamoramiento imprevisto sea algo negativo.
Si hemos hecho algún esfuerzo por comprender nuestra sombra,
nos resultará más fácil desprendernos de algunas de nuestras
fantasías, viendo a la otra persona de un modo más realista. Una
mezcla de ilusión y de certeza ayuda a que el amor sea
interesante y duradero. Pero si la sombra es un terreno
inexplorado, el espacio entre la pasión y el odio es tan estrecho
que difícilmente podemos librarnos de recorrerlo.
Relaciones con personas de nuestro mismo sexo. Los
sentimientos de desconfianza o competitividad extrema con
personas de nuestro sexo, tanto en el ámbito familiar como en el
de las relaciones o en el mundo laboral, pueden indicar el estado
de nuestras relaciones con nuestro propio mundo inconsciente. Un
detalle interesante es estudiar la aparición en nuestros sueños de
personas de nuestro mismo sexo y de edad similar a la nuestra,
ya que suelen ser emisarios de nuestra sombra.
Todo aquello que nos provoca un profundo rechazo
en los demás. Una pregunta que todos deberíamos plantearnos
seriamente y que representa una de las claves más seguras para
conocer nuestra propia sombra es: “¿qué comportamientos ajenos
me provocan un especial rechazo?” Quizá sientes aversión a la
violencia y es comprensible. Pero no hay que olvidar que todos
tenemos a Marte en algún lugar de nuestra Carta y que hasta
cierto punto las energías agresivas son necesarias en nuestra
vida. Si no pudiéramos decir “no” en algunas ocasiones, si no
pudiéramos defender nuestra individualidad, nuestra vida estaría
completamente invadida por los demás. No tenemos por qué
soportarlo todo, ni por supuesto tenemos que aguantar la
violencia. Pero si sientes un ataque de ira porque alguien, en
pleno uso de su libertad, te dice “no”, quizás estás pisando un
terreno pantanoso dentro de ti.
Lo que nos parece negativo en otras razas, países o
religiones. En gran medida, los prejuicios raciales, la
intolerancia o la xenofobia tienen su origen en la mala
asimilación de nuestro material sombrío. Si ya es difícil poner
etiquetas a una persona, desde una perspectiva racional resulta
bastante absurdo etiquetar a todo un conjunto social formado por
millones de seres humanos. Sin embargo, muchas personas lo
hacen sin rubor. ¿A qué se debe esto? Sin duda el componente
emocional se sobrepone aquí a cualquier atisbo de razón y el
origen de esos sentimientos está en el desconocimiento de la
propia sombra. Así que cuando pase por tu cabeza algún
pensamiento de este tipo, te recomiendo que lo pongas en
primera persona y analices en qué medida estás culpando a una
masa de aquello que ves como una debilidad oculta en ti.
En el próximo capítulo nos ocuparemos de buscar medios
prácticos para equilibrar los factores fundamentales de tu Carta,
tanto visibles como ocultos.
XIV - Integrar tus
potencialidades
Ahora que conoces los elementos fundamentales de tu Carta y
a través de ellos las energías conscientes e inconscientes que
operan en tu personalidad, ha llegado el momento de buscar la
integración práctica de estos elementos. La Astrología, lejos de ser
una disciplina especulativa, puede ser una buena herramienta de
trabajo práctico si aprendemos a usarla con un poco de
imaginación.
La mejor forma de integrar a la Sombra es realizando un
trabajo consciente y permanente en este sentido. La consciencia
representa el primer paso en este camino. Es un aspecto
fundamental, porque cuando eres consciente de algo, ya no hay
forma de ignorarlo. No se puede mirar a otra parte, ni valen los
autoengaños.
Integrar la sombra es un proceso largo, que necesita de una
cierta dosis de paciencia y de benevolencia con uno mismo.
Como el conocimiento de la propia Carta, es un proceso para
toda la vida.
Una cuestión que nunca deja de sorprenderme es que todos
sabemos que no hay una fórmula mágica que nos haga perfectos
y felices en 24 horas y sin embargo muchas veces actuamos como
si tal fórmula existiera. Si un método no funciona de manera
automática, caemos en el resentimiento. Queremos cambios y los
queremos ya. Queremos que sean indoloros, pero al tiempo que
sean eficaces. Todos sabemos que esas soluciones mágicas no
existen, y sin embargo seguimos creyendo en ellas.
A lo largo de mi experiencia como astrólogo he aprendido
que cuando nos liberamos de la fantasía del cambio instantáneo,
es cuando empezamos a cambiar de verdad. En este capítulo
exploraremos diversas técnicas que te permitirán comenzar a
realizar esos cambios.
La Imaginación Activa
La imaginación activa es una de las prácticas más poderosas
con las que contamos para el desarrollo de nuestra
individualidad. Aunque los ejercicios relacionados con la
imaginación y la visualización son muy antiguos, su formulación
más moderna la debemos al propio Jung. En algunas de sus
cartas encontramos indicaciones acerca de cómo pensaba que
debía desarrollarse este ejercicio.
Aunque Jung pensaba que la imaginación activa debía
emplearse con las figuras y acciones que surgen en nuestros
sueños, nosotros vamos a adaptar esta técnica al simbolismo
astrológico. Para trabajar de forma imaginativa con los elementos
conflictivos de la Carta te recomiendo que sigas los siguientes
pasos:

1. Piensa en el planeta, signo o energía con la que quieres


trabajar. Analiza todas las ideas que tienes acerca del
elemento, lo que hayas podido leer sobre él e incluso los
mitos o símbolos que se le asocien.
2. Entra en un estado de relajación profunda, si es posible antes
del sueño.
3. Introduce en tu mente el elemento con el que deseas trabajar.
Ten en cuenta que lo que vas a hacer en estos momentos es
imaginar el elemento, no reflexionar sobre él. Busca
imágenes que puedas asociar con él y mantenlas en tu
mente.
4. A medida que te introduces en la relajación más profunda, o
incluso en el sueño, deja que el elemento cambie o se
convierta en otra cosa. No intentes hacer nada con él, no
pretendas cambiarlo. Limítate a observarlo, a imaginarlo.
5. El objeto o concepto analizado se modificará o actuará de
acuerdo a una serie de asociaciones espontáneas que no
debes juzgar ni analizar.
6. Si es posible, entra en el cuadro mental. Puedes limitarte
observar o bien puedes actuar, pero procura que tus
movimientos estén guiados de un modo espontáneo y no
premeditado. Si alguien habla, escucha, si alguien actúa,
observa.
7. Es muy probable que los elementos analizados se
introduzcan en tus sueños bajo diversas apariencias. Si es
así, toma buena nota de tus sueños al despertar y úsalos
como base para nuevos ejercicios de imaginación.

Al principio, este ejercicio puede resultar algo difícil, sobre


todo si nunca antes has realizado ejercicios de relajación o
visualización, pero con perseverancia puedes alcanzar resultados
muy positivos.
Como ya habrás comprendido, el objetivo de este ejercicio no
es la reflexión mental consciente, sino conectar con la parte
inconsciente de tu ser donde se ocultan muchas de las respuestas
que estás buscando en tu vida. Es por esto por lo que es tan
importante no forzar los resultados, sino actuar con paciencia,
noche tras noche, hasta que empieces a encontrar respuestas. La
forma en que lleguen estas respuestas no será siempre en forma
de ideas.
Probablemente, si te dedicas con intensidad a esta práctica,
notarás cómo a tu alrededor se producen coincidencias
sorprendentes y plenas de significado. O por decirlo en palabras
de Jung, sincronicidades. Si tienes alguna experiencia del
elemento en tu vida cotidiana mientras realizas el ejercicio, ten en
cuenta cómo cambia tu relación con él. Toda la información que
recojas será de gran valor y significado.
Las Cartas familiares
Un ejercicio altamente recomendable para aclarar tus
relaciones familiares desde el punto de vista astrológico consiste
en comparar las Cartas Astrales de tus padres, y eventualmente
de tus hermanos, con la tuya.
Uno de los hechos más llamativos de la astrología consiste en
observar cómo los hijos “heredan” el simbolismo planetario de su
familia. En todos los casos estudiados, y en contra de lo que
dictaminaría la fría estadística, padres e hijos comparten diversas
posiciones planetarias, o bien sus planetas se sitúan en signos del
mismo elemento. Lo más sorprendente es que esto no suele ocurrir
con cualquier planeta, sino que generalmente afecta a los
planetas más directamente relacionados con el simbolismo
familiar.
Si dispones de las Cartas Astrales de tus padres, compara sus
posiciones planetarias con las tuyas, en particular, analiza la
posición de tres planetas: el Sol, la Luna y Saturno. Estudia qué
signos compartes con ellos y si hay alguna relación entre las
funciones superiores e inferiores de todos.
En el caso de que no puedas conseguir las Cartas Astrales de
tus padres, al menos podrás obtener sus posiciones planetarias a
partir de su fecha de nacimiento. Cuando se ignora la hora de
nacimiento de una persona se puede recurrir a la llamada “Carta
de equilibrio solar” que consiste en trazar un horóscopo realizado
para el momento exacto del amanecer. Si dispones de una Carta
de equilibrio te recomiendo que no tengas en cuenta las
posiciones de los planetas en las casas, pero sí en los signos.
Analizar las Cartas de tus padres y compararlas con la tuya es
una herramienta fascinante que puede dar lugar a muchas horas
de reflexión. A través de esa comparación puedes ver qué has
heredado de ellos y qué elementos de tu personalidad les
resultaban difíciles de aceptar. Por ejemplo, si tu Carta está llena
de fuego y uno de tus padres carecía de planetas en este
elemento, no cabe duda de que la relación entre ambos ha
estado marcada por la mutua incomprensión.
Una nota final. En casi todas las familias que he analizado
mediante este método, he descubierto que si bien casi todos los
hijos heredan muchos rasgos astrales de sus padres, suele existir
uno que parece no heredar nada, o que exhibe rasgos opuestos a
los de sus progenitores. Este suele ser el hijo problemático, la
“oveja negra” de la familia. Si este es tu caso, tendrás que
dedicar muchas horas a encajar todas las piezas del
rompecabezas familiar. Te recomiendo que tengas paciencia y
que emplees el perdón y la comprensión, incluso si tus padres ya
han fallecido. El rencor nunca conduce a un buen resultado.
Integrar los Elementos
Los cuatro elementos representan cuatro modalidades de la
energía universal, cuatro formas de manifestación. Todos tenemos
una idea concreta de lo que significan, ya que de un modo u otro
los hemos experimentado en nuestra vida. Lo que te propongo es
que experimentes la energía de los elementos de un modo más
consciente.
Para integrar los elementos en tu personalidad, te recomiendo
que sigas estos tres pasos:

1. Conocer tus elementos inferiores y superiores.


2. Ser consciente del significado de cada elemento.
3. Utilizar las energías de los elementos en tu vida cotidiana.

Ya hemos dado el primero de estos tres pasos en capítulos


anteriores, lo que te permite saber cuáles son los elementos con
los que te sientes más a gusto, es decir tus elementos superiores, y
también cuáles son los más difíciles para ti. Lógicamente, a la
hora de desarrollar al máximo tus potencialidades, lo que debes
hacer es trabajar con los elementos inferiores, ya que los
superiores están perfectamente integrados en tu consciencia. Por
otro lado, es importante dedicar un tiempo a reflexionar sobre los
mecanismos de represión que estás aplicando al contenido de tu
sombra y cómo liberarte de ellos a través del desarrollo de la
consciencia.
A través del conocimiento que ya tienes sobre estos elementos
y de las descripciones de este libro, te habrás hecho una idea
bastante amplia del significado de los cuatro elementos. Pero hay
que dar un paso más en esa dirección, desde el “saber
intelectual” hasta el “ser consciente de”. Sin duda es muy
importante tener un conocimiento intelectual de los elementos,
pero ser consciente implica ir más allá en el aprendizaje. Para ser
conscientes necesitamos utilizar todos nuestros recursos, no sólo
mentales, sino también físicos y emocionales.
Realmente esta es la razón por la cual muchas personas
encuentran grandes dificultades a la hora de avanzar en el
terreno de la mejora personal. Piensan que basta con leer un libro
y llenar su mente con determinadas ideas para que esas ideas
comiencen a funcionar en su vida. Confunden así el conocimiento
con la plena consciencia. La clave para adoptar cualquier
concepto o energía es asimilarlo a través de todos nuestras vías
de aprendizaje. No basta con saber teóricamente qué es el agua,
hay que sumergirse literalmente en ella y sentirla plenamente,
para luego poder expresarla.
A continuación te presento algunas sugerencias para
experimentar al máximo cada elemento. Por supuesto, estas
prácticas que requieren contacto con la naturaleza se deben
realizar cuando tengas oportunidad de hacerlas, con tiempo y
paciencia. Te recomiendo que las repitas muchas veces ya que de
hecho, como todo el análisis de la Carta Astral, son ejercicios
para toda la vida, que a lo largo del tiempo te proporcionarán
conocimientos más profundos.
No pienses que estos ejercicios tienen poco valor por el simple
hecho de ser sencillos. Al contrario, su sencillez es lo que los hace
poderosos, porque se pueden realizar en cualquier ocasión.
Para adquirir consciencia del Fuego, debes primero recordar
que es un elemento activo, es decir, se trata de una energía cuyas
características son la sequedad y el calor.
La forma más sencilla de conectar con el elemento fuego
consiste en dedicar unos minutos a observar la luz de una vela. Si
cierras los ojos después de mirar la llama durante un buen rato,
verás la imagen del fuego proyectada en tus párpados. Esta
imagen que se produce en los ojos cerrados se denomina
“fosfeno” y obedece a un fenómeno fisiológico. Estudia esta
imagen hasta que se desvanezca, céntrala en tu mente. Cuando
necesites evocar la energía del fuego, proyecta esa imagen en tu
mente.
El sol es nuestra fuente natural de calor y luz, y como ya sabes
tiene un profundo significado astrológico. Los baños de luz solar
son una forma muy cómoda de conectar con la energía del fuego.
La finalidad aquí no es broncear la piel, sino experimentar de un
modo consciente la fuerza del fuego en nuestro cuerpo. Unos
pocos minutos al sol permiten realizar esta experimentación. Por
supuesto, ten en cuenta las recomendaciones de carácter general
que hay que cuidar al exponerse al sol: evitar las horas centrales
del día, cubrir la cabeza, proteger la piel y nunca mirar
directamente al disco solar. En cambio, es muy recomendable
dirigir los ojos al sol, pero con los párpados cerrados y relajados.
La luz así filtrada no provoca daños y ayuda a sentir la energía
solar de un modo agradable. Usado con moderación, el sol nos
permite conectar con toda la potencia de la energía ígnea.
La Tierra es un elemento pasivo, que se distingue por ser una
energía seca y fría.
Cuando salgas al campo, acuéstate directamente sobre la
tierra. Procura sentir su solidez y fuerza bajo tu espalda. Cierra
los ojos e intenta sentir la tierra bajo cada palmo de tu piel. Si
puedes, duerme sobre ella y analiza a la mañana siguiente cuáles
han sido tus sueños. En verano deja que tu piel esté en contacto
directo con el suelo y si es necesario cúbrete por encima con una
manta o una sábana.
Enterrarse en la arena es un divertido juego de playa que
puede ser muy apropiado para adquirir mayor consciencia del
elemento tierra. Con ayuda de otra persona, haz un hoyo en la
arena y déjate cubrir por tu ayudante. Por supuesto, dejarás fuera
la cabeza y te cubrirás con un sombrero si hace sol. Relájate unos
minutos y déjate llevar por la sensación de inmovilidad y peso
que se siente en todo tu cuerpo. Bastan unos minutos para tener
una profunda percepción de la energía terrestre. Eso sí, no
realices este ejercicio si padeces claustrofobia.
Las características del Aire se manifiestan a través de su
temperamento activo. Es un elemento que tiende a ser húmedo y
templado, aunque puede sufrir cambios de acuerdo con el
ambiente.
En los lugares elevados, cerca del borde de un acantilado o
incluso en la azotea de un edificio alto, puedes sentir con fuerza
el impulso del aire que asciende. En los días de mucho viento te
puedes desplazar a algún lugar apartado donde poder
experimentar libremente. Ante la fuerza del viento, extiende los
brazos como si volaras, o deja que el aire se meta libremente en
tu ropa. Observa cómo la naturaleza se doblega ante los fuertes
vientos. En zonas de vientos constantes, verás cómo los árboles
estarán retorcidos, inclinados. La propia tierra está profundamente
modelada en estos lugares. No puedes atrapar al viento, pero si
sentirlo y conocer sus efectos.
Una de las prácticas más beneficiosas en cualquier proceso de
desarrollo personal consiste en respirar conscientemente. Hay
muchas técnicas respiratorias, pero aquí te propongo una muy
simple. En un lugar natural, siéntate cómodamente, cierra los ojos
y simplemente respira. Concéntrate en las sensaciones que te
aporta el aire al entrar por la nariz. Huele el aire y analiza la
información que te trae acerca del entorno que te rodea. Su
temperatura, su humedad y su naturaleza. Recuerda que el aire es
transmisor de información. Siéntelo penetrando en tus pulmones y
saliendo de nuevo a través de la boca. Simplemente respira, pero
de un modo consciente, sintiendo el aire como algo vivo.
El Agua. Este elemento se presenta bajo múltiples formas en
nuestro entorno. El Agua es húmeda y fría como corresponde a un
elemento fuertemente pasivo. Como sabes, el agua se presenta de
diversas maneras en nuestro entorno, a veces calmada, a veces
en movimiento, lo mismo fría que tibia.
Para experimentar la esencia del agua es fundamental que
busques conectar con este elemento en su estado natural. Los ríos
caudalosos te permiten experimentar el flujo de la corriente,
sumergiéndote en ellos. En cambio, si encuentras un arroyo o un
pequeño manantial, siéntate en la orilla en una postura cómoda,
sobre un piedra o en cuclillas, y pon las manos sobre la corriente.
Cierra los ojos y concentra tu atención en tus manos. Siente cómo
el agua fluye por debajo de tus palmas y cómo a veces salta por
encima. Escucha su relajante sonido y procura no pensar en
nada. Simplemente acumula sensaciones.
El mar te dará la oportunidad de experimentar el flujo y reflujo
de las olas. Frente al carácter directo de los ríos, la energía del
mar es pulsante y cíclica. Concéntrate en ese movimiento
situándote cerca de la zona donde rompen las olas. De hecho, si
la concentración ha sido profunda podrás sentir, varias horas
después y ya fuera del agua, el movimiento incesante del mar en
tu cuerpo.
Ejecuta estas prácticas u otras que se te ocurran tantas veces
como puedas, siempre con el propósito de incrementar tu
consciencia. A medida que adquieras una mayor consciencia del
elemento, observarás que te resulta más fácil evocar la energía de
ese elemento en tu vida cotidiana. Después de cada ejercicio,
concéntrate en los sentimientos que hayas experimentado, en las
ideas que te haya inspirado. Es muy importante que realices una
recapitulación, incluso tomando notas, de todas tus percepciones
físicas, emocionales y mentales. Cuando más amplias y profundas
sean estas percepciones, más provechosa habrá sido la
experiencia.
El tercer paso en tu tarea consiste precisamente en emplear la
fuerza del elemento en tu vida. Para ello, nada más fácil que
jugar a ser esa energía. Deja que lo que has aprendido fluya a
través de ti, que se exprese. Imagina que tú eres el elemento. Si el
grado de consciencia que has adquirido es elevado, el elemento
se expresará fácilmente a través de tus actos y sin darte cuenta se
convertirá en una parte fundamental de tu personalidad. Serás
literalmente fuego, tierra, aire o agua.
Siempre he pensado que nos tomamos a nosotros mismos
demasiado en serio, que tendemos a meternos en moldes muy
estrechos de los que luego no podemos salir. Pensamos “yo soy
así” y no es cierto. Como ya has aprendido, todos tenemos una
sombra que es lo opuesto al “yo soy así”, pero que también forma
parte de nosotros. Si eres una persona muy emocional, ten por
seguro que dentro de ti hay una parte racional que está
esperando a ser descubierta, y viceversa.
Como ya hemos visto, el elemento inferior tiende a ser
relegado a la sombra. Asimilar la sombra consiste en gran
medida en jugar a ser esa parte oculta y esto sólo se logra a
través de la consciencia y la práctica cotidiana. No hay fórmulas
mágicas.
Viviendo con tus planetas
Otro de los focos de conflicto que impiden alcanzar una plena
integración de nuestra personalidad es la presencia de planetas
“conflictivos” en la Carta Astral.
Hay que aclarar que lo que dificulta nuestra relación con
algún planeta no es su propia naturaleza, sino precisamente
nuestra dificultad a la hora de conectar con la energía que
representa, y lograr así expresarla en la vida cotidiana. Por este
motivo, el primer paso para normalizar la relación con un planeta
es estudiar su simbología y alcanzar el máximo nivel de
consciencia.
Como hemos visto al analizar la carta de Marilyn, su planeta
conflictivo era Saturno. Este planeta se encuentra en el eje de su
cuadratura-t, formando el asa de su cubo. Es evidente que gran
parte de sus dificultades vitales provienen de la mala relación que
tuvo con este símbolo astral.
He aquí algunas prácticas que te ayudarán a adquirir un
mayor grado de conciencia de cualquier planeta.
Estudia el simbolismo del planeta. Comienza por las
descripciones que se dan en este libro y busca en otras fuentes
tanta información como sea posible. Lee todas las opiniones y
saca tus propias conclusiones, ya que se han publicado obras
muy buenas dedicadas íntegramente a analizar planetas
concretos. En la Bibliografía Comentada encontrarás algunas
sugerencias, aunque te recomiendo que busques los nuevos títulos
en librerías especializadas, ya que el mercado editorial crece
constantemente.
Analiza toda la mitología asociada con el planeta
en cuestión. Como sabes, los planetas tienen nombres de
divinidades latinas que se corresponden con equivalentes del
panteón griego. Así, Saturno, que tantos trastornos provocó a
Marilyn, es también el Cronos helénico. Pero podemos ir más allá
para descubrir que en los mitos mesopotámicos, este planeta se
asociaba al dios Ninurta, hermano de Nergal (Marte). Los mitos
nos reservan grandes sorpresas y están llenos de historias que
pueden inspirarnos. Cronos arrancó el poder de las manos de su
padre y fue a su vez destronado por su hijo, pero su gobierno no
fue una época triste, sino una auténtica era dorada. Los conflictos
entre padres e hijos están llenos de estas historias.
Piensa en personas de tu entorno que por su
personalidad te hagan recordar algunas características
del planeta. Céntrate en una o dos personas que conozcas
bien. ¿Qué sentimientos te suscitan? ¿Cómo son o cómo han sido
tus relaciones con ellas? Piensa en los comportamientos que más
te molestaban de esas personas, pero también en los aspectos
más atractivos de su personalidad. Quizá esas personas hayan
aparecido en tus sueños en alguna ocasión. Si es así, intenta
recordar cómo actuaban en el sueño. Si se trata de alguien que se
repite en múltiples sueños, sin duda se ha convertido en un
símbolo muy importante de tu inconsciente. Toma buena nota de
estos detalles y dialoga mentalmente con esas figuras.
Conviértelos en personajes teatrales y juega con ellos.
Utiliza la imaginación activa para trabajar con ese
planeta. Personalízalo a partir de la representación que los
planetas han tenido en el arte. Analiza cuáles son sus detalles
característicos, las sandalias aladas de Mercurio, la hoz de
Saturno, etc. Con todos estos detalles construye tu imagen mental
y juega con ella en sesiones de imaginación activa. ¿Qué
mensajes te aportan los planetas? ¿Cuáles son sus movimientos,
sus gestos? Con el tiempo puedes adquirir un gran conocimiento
sobre ellos a través de estas prácticas. Incluso es posible que se
introduzcan en tus sueños con resultados fascinantes.
A medida que incrementes tu consciencia sobre el planeta
conflictivo, descubrirás que tus relaciones con él se hacen más
fluidas. Ese es el primer paso antes de intentar vivir plenamente el
simbolismo del planeta en tu vida cotidiana. Juega también con
los planetas que se oponen a él. Piensa en las distintas parejas de
planetas como el Sol y la Luna, Venus y Marte, o bien Júpiter y
Saturno. Vive los planetas como si fueran personajes reales en tu
existencia y verás cómo te sorprenden los cambios que se operan
en tu personalidad.
Usando los aspectos
Los aspectos conectan a los planetas e indican el movimiento
dinámico de la energía planetaria. Como recordarás, en nuestro
símil teatral, si los planetas son los actores, los aspectos indican
cómo se desarrolla la interpretación de la obra. Los aspectos, más
que ningún otro elemento astrológico, indican acción y son
ideales para romper cualquier situación de círculo vicioso,
introduciendo nuevas energías en nuestra personalidad.
Cualquier planeta conflictivo, focal, o aislado en una función,
puede compartir aspectos con otros planetas y conviene
aprovechar esas vías energéticas para integrarlo en el resto de la
Carta. Para lograrlo, estudia la naturaleza de ambos planetas y la
del vínculo energético que les une. He aquí algunas sugerencias
sobre cómo utilizar la energía de los diferentes aspectos.
Conjunción. Si en el eje de un gran aspecto hay dos
planetas en conjunción, ambos tienden a unir sus energías. Esta
unión hace que el gran aspecto sea más potente, pero también
introduce un elemento de renovación y cambio. Los planetas, de
acuerdo a su naturaleza, señalan diferentes formas de expresar el
gran aspecto, es decir, diversas opciones. Lo mismo sucede con
cualquier zona de la Carta que se presente conflictiva y que
exhiba una conjunción planetaria. Estudia ambos planetas, piensa
qué opciones te ofrecen y aprovecha esas opciones.
Oposición. Dos planetas en oposición tienden a tirar de la
energía en direcciones contrarias. Las opciones que presentan
están por tanto más enfrentadas. Si un planeta mal integrado
recibe una oposición de otro planeta, debes analizar la cualidad
de dicha oposición, es decir, si es cardinal, fija o mutable, y
emplear esa energía, así como la naturaleza del planeta opuesto,
para integrar al conflictivo.
Cuadratura. La cuadratura es muy dinámica en su acción y
presenta desafíos. El planeta que hace cuadratura con aquel que
está mal integrado, indica el tipo de desafío que debemos
afrontar. El simbolismo del planeta en cuadratura es la clave para
actuar, pero también la cualidad del aspecto. Una cuadratura
cardinal indica la necesidad de usar la energía de un modo
activo y valeroso. Si es fija, señala que hay que actuar con
paciencia y determinación. Si es mutable, implica actuar con
rapidez y versatilidad.
Trígono. Cuando un planeta difícil de integrar recibe un
trígono de otro planeta, éste puede servir como vía de escape
para las energías planetarias. El trígono favorece la expresión de
las fuerzas de los planetas y lo hace a través de su elemento. Si es
de fuego, implica actividad y energía. Si se trata de un trígono de
tierra, señala una vía de integración más estable y pacífica. Los
trígonos de aire indican la necesidad de racionalizar el vínculo
planetario y buscar soluciones mentales. Por último, si es de agua,
implica un acercamiento emocional a la energía planetaria.
Quincuncio. La conexión de dos planetas mediante un
quincuncio señala un reto muy fuerte en tu vida. El reajuste del
planeta conflictivo a través de este aspecto es algo bastante
difícil, pero no imposible. Aquí se hace imprescindible elevar al
máximo el nivel de consciencia y utilizar el aspecto más elevado o
espiritual de la energía planetaria.
Sextil. Si un planeta mal integrado hace sextil con otro, éste
nos indica qué tipo de acción es necesaria para integrar al
planeta conflictivo. Como ya hemos visto, el sextil es un aspecto
que pide actividad, colaboración por nuestra parte. La polaridad
es fundamental aquí. Si ambos planetas están en signos activos,
exigen decisión y movimiento. Si están en signos pasivos, piden
comprensión y reconocimiento.
Otras terapias
La Astrología no es el único camino hacia el
autoconocimiento, sino una técnica más entre las diversas terapias
de autoayuda. La ventaja de la astrología sobre otras ramas del
conocimiento es que puede servir para descubrir qué otros
caminos de consciencia son apropiados para ti. Algunas de estas
técnicas pueden ser muy beneficiosas, pero te recomiendo que si
te interesa alguna, te informes bien de sus posibilidades reales, ya
que no todas son apropiadas para resolver todos los conflictos
que puede padecer una persona.
Usando las palabras de Donna Cunningham, que suscribo
plenamente, los astrólogos estamos en la “primera línea del
frente” en nuestro trato con los clientes. De hecho, no es raro que
personas altamente desequilibradas acudan antes al consejo
astrológico que a la consulta del médico o el psicólogo. Según su
razonamiento, quien va al psiquiatra es porque está “loco”, y en
cambio lo peor que se puede decir de alguien que acude al
astrólogo es que es un poco “raro”.
Realmente la astrología es mucho más válida cuando se aplica
a personas sin graves problemas psíquicos, es decir, a aquellos
que no están pasando por una fase aguda de depresión o
ansiedad y que no presentan alteraciones graves de la
personalidad (psicopatías). Así que una de obligaciones de
cualquier astrólogo consiste en detectar los casos graves y
aconsejar a estas personas que acudan adonde realmente deben
ir, a la consulta psicológica.
Como supongo que ese no es tu caso, te presento algunas
técnicas que resultan apropiadas para tratar las dificultades que
puedas encontrar en tu Carta Astral[16]:

Los grupos de autoayuda son muy apropiados para las


personas que tienen dificultad para conectar con su
orientación social.
Las técnicas basadas en el pensamiento positivo e incremento
de la autoestima son muy valiosas cuando la orientación
personal es muy baja.
El estudio de las grandes religiones o sistemas filosóficos es
especialmente recomendable para aquellos a quienes les
cuesta conectar con su orientación universal.
Las diversas técnicas de relajación y meditación son positivas
para todos, pero especialmente para quienes tienen
problemas para relacionarse con su fuego o con la cualidad
cardinal. Las clases de interpretación o el participar en
representaciones teatrales ayudan también a estas personas.
Las técnicas de masaje trabajan el elemento tierra de tu Carta
Astral así como con la cualidad fija.
Las psicoterapias humanistas (análisis junguiano,
transpersonal, Gestalt, constelaciones familiares) te pueden
ayudar a profundizar en los temas más candentes de tu vida.
Estas psicoterapias ayudan a tratar con la energía del aire.
Asimismo, las técnicas respiratorias como el pranayama son
también muy beneficiosas para trabajar con el elemento aire.
La danza es un ejercicio muy apropiado para las personas
que tienen dificultades con el elemento agua, y con planetas
como Venus y Neptuno. En particular, la danza oriental
(danza del vientre) es muy recomendable para las mujeres
con dificultad para conectar con su energía receptiva.

Para concluir, debo repetir que los ejercicios que aquí se


proponen son muy sencillos, y paradójicamente, quizás esa
misma sencillez te haga dudar de sus resultados. Por desgracia,
todos en mayor o menor medida, hemos sido condicionados con
la idea de “cuanto más grande, mejor”. En el terreno de la
búsqueda espiritual esto se traduce en: “cuanto más complicado,
cuanto más exótico, cuanto más incomprensible, mejor”. Recuerda
muchas veces que lo más sencillo, lo más evidente, es muchas
veces lo mejor. Amplía tu consciencia sobre los símbolos astrales,
úsalos en tu vida, y verás que a tu alrededor empiezan a suceder
milagros.
XV - La salud y la vitalidad
En capítulos anteriores hemos analizado las energías básicas
que conforman tu personalidad y que influyen en tu
comportamiento tanto consciente como inconscientemente. A
partir de estos datos fundamentales vamos a dedicar los últimos
capítulos de este libro a estudiar determinadas zonas de tu Carta
Astral que proporcionan valiosa información sobre áreas muy
concretas de tu experiencia vital.
Como ya sabes, las casas del tema natal representan la
materialización de la energía astral. En los cuatro próximos
capítulos, estudiaremos las posiciones planetarias a partir de su
situación mundana, poniéndola también en relación con los
signos que ocupan las cúspides de las casas. Este análisis nos
permitirá ir directamente a los grandes temas que a todos nos
preocupan en algún momento de nuestra vida:

La salud y las energías físicas.


El mundo laboral y la economía.
Las relaciones y los sentimientos.
La mente y la vida espiritual.

Para que puedas estudiar esta información de un modo


coherente, no analizaremos las casas por orden, sino
agrupándolas en torno a estos grandes temas.
En la Tabla 8 se presentan una lista que contiene información
sobre las casas del tema de Marilyn Monroe. Aquí presentan las
casas por su orden, así como el signo que está en el inicio de
cada casa (recuerda que el inicio de una casa se denomina
“cúspide”). A continuación se detalla el planeta regente de dicho
signo y la casa en la que está dicho planeta. Como recordarás, a
cada signo le corresponde un planeta regente. Así, la cúspide de
la primera casa (el Ascendente) está en el signo de Leo. Este signo
está regido por el Sol, que a su vez se halla en la casa número
11.

Casa 1ª

Signo de la Cúspide: Leo


Planeta Regente: Sol
Casa del Regente: 11ª
Casa: 1ª
Planetas en la Casa: Neptuno

Casa 2ª

Signo de la Cúspide: Virgo


Planeta Regente: Mercurio
Casa del Regente: 10ª
Casa: 2ª
Planetas en la Casa:

Casa 3ª

Signo de la Cúspide: Libra


Planeta Regente: Venus
Casa del Regente: 9ª
Casa: 3ª
Planetas en la Casa:

Casa 4ª
Signo de la Cúspide: Escorpio
Planeta Regente: Plutón
Casa del Regente: 12ª
Casa: 4ª
Planetas en la Casa: Saturno

Casa 5ª

Signo de la Cúspide: Sagitario


Planeta Regente: Júpiter
Casa del Regente: 7ª
Casa: 5ª
Planetas en la Casa:

Casa 6ª

Signo de la Cúspide: Capricornio


Planeta Regente: Saturno
Casa del Regente: 4ª
Casa: 6ª
Planetas en la Casa:

Casa 7ª

Signo de la Cúspide: Acuario


Planeta Regente: Urano
Casa del Regente: 8ª
Casa: 7ª
Planetas en la Casa: Luna, Júpiter

Casa 8ª

Signo de la Cúspide: Piscis


Planeta Regente: Neptuno
Casa del Regente: 1ª
Casa: 8ª
Planetas en la Casa: Marte, Urano

Casa 9ª

Signo de la Cúspide: Aries


Planeta Regente: Marte
Casa del Regente: 8ª
Casa: 9ª
Planetas en la Casa: Venus

Casa 10ª

Signo de la Cúspide: Tauro


Planeta Regente: Venus
Casa del Regente: 9ª
Casa: 10ª
Planetas en la Casa: Mercurio

Casa 11ª

Signo de la Cúspide: Géminis


Planeta Regente: Mercurio
Casa del Regente: 10ª
Casa: 11ª
Planetas en la Casa: Sol

Casa 12ª

Signo de la Cúspide: Cáncer


Planeta Regente: Luna
Casa del Regente: 7ª
Casa: 12ª
Planetas en la Casa: Plutón

Tabla 8. Casas Planetarias de Marilyn Monroe

Además se añaden los planetas que efectivamente se hallan


dentro de los límites de cada casa. Como puedes observar
algunas casas están vacías, mientras que otras contienen uno o
dos planetas. Así, en la casa primera encontramos a Neptuno,
mientras que la casa dos está vacía. Si tienes dudas sobre cómo
se han elaborado esta lista te recomiendo que tomes la Carta
Astral de Marilyn y compruebes los datos.
Tu tarea consiste ahora en construir una lista como esta, sólo
que con las casas y planetas de tu Carta Astral. Te recomiendo
que compruebes bien los datos antes de seguir adelante, porque
es relativamente fácil cometer algún error. Ten a mano la lista de
los signos y sus planetas regentes y revisa la exacta colocación de
cada planeta.
Una vez que hayas elaborado tu Tabla de Casas, podrás
acceder a la información que te ofrezco en estos cuatro capítulos.
Así que siguiendo el esquema anterior, comenzaremos por
analizar tu realidad física, estado de salud y energías.

Aries: La cabeza y los órganos de los sentidos: ojos, oídos,


nariz, boca.
Tauro: El cuello y la garganta, así como la glándula tiroides.
Géminis: Los hombros, brazos, manos y pulmones.
Cáncer: El estómago y el tubo digestivo, también los senos
femeninos.
Leo: El corazón, la columna vertebral y la espalda.
Virgo: El sistema nervioso y los intestinos.
Libra: Los riñones, la cintura y la vejiga urinaria.
Escorpio: Los genitales y el recto.
Sagitario: El hígado, las caderas y los muslos.
Capricornio: Las rodillas, los dientes y todos los huesos, así
como la piel.
Acuario: La circulación sanguínea, así como las espinillas y
los tobillos.
Piscis: Los pies y sus dedos.
Tabla 9. Los Signos y sus correspondencias físicas

El Sol: El corazón, la espalda y la columna vertebral.


La Luna: El aparato digestivo (a excepción del hígado) y los
senos.
Mercurio: El sistema nervioso central, así como el aparato
respiratorio.
Venus: La garganta, el tiroides y los genitales femeninos.
Marte: Las arterias, los músculos así como los genitales
masculinos.
Júpiter: El hígado y la glándula pituitaria.
Saturno: La piel y los huesos, así como la vesícula biliar.
Urano: El sistema nervioso periférico, la glándula pineal.
Neptuno: El sistema linfático y el tejido conjuntivo.
Plutón: El cerebro y los órganos de eliminación.
Tabla 10. Los Planetas y sus correspondencias físicas

En las Tablas 9 y 10 encontrarás información sobre las


atribuciones tradicionales de los planetas en el área de la salud.
Estas correspondencias son fruto de una larga tradición y puedes
confiar en que son bastante efectivas. Te aconsejo que construyas
tu propia interpretación a partir de estos datos y siguiendo
también el esquema de análisis que te ofrezco a continuación.
Este esquema incluye el estudio de las cúspides de las casas, la
posición del regente y los planetas que puedan hallarse en el
interior de cada casa tratada.
La información que se presenta en este capítulo y siguientes es
de carácter general y se ofrece únicamente como guía o
sugerencia para la interpretación. De hecho, debe ser la base
para que tú encuentres tus propias respuestas, ya que nadie mejor
que tú puede conocer tu realidad.
Si en tu análisis encuentras algún planeta es especialmente
conflictivo o no sabes cómo manejar su energía, analiza los
aspectos que pueda formar con otros planetas de la Carta. Estos
aspectos te pueden proporcionar pistas muy valiosas para obtener
lo mejor de cada planeta.
Por último, recuerda que en cuestiones de salud hay que
contar siempre con el consejo de un profesional sanitario.
El Ascendente
Ya hemos hablado bastante de la influencia del ascendente en
nuestra personalidad, pero en este capítulo nos centraremos en su
importancia en el campo de la salud. El ascendente nos aporta
información general sobre nuestro cuerpo físico y apariencia. Es
importante por dos razones.
Como la primera casa se relaciona directamente con la
cabeza, el ascendente tiene una poderosa influencia en la forma
en que está constituida nuestra cara. Esto es muy importante, ya
que el rostro suele ser nuestra principal tarjeta de visita ante los
desconocidos. Generalmente es lo primero que miramos de otra
persona, y en ella se reflejan todas nuestras emociones. Como
dice el refrán: “la cara es el espejo del alma”.
En segundo lugar, es el indicador del estado de nuestras
fuerzas vitales y de cómo desarrollamos estas energías en nuestra
vida cotidiana, que es precisamente el aspecto en el que nos
centraremos a continuación.

Signo de la Cúspide de la 1ª (Ascendente)

Aries. Existe una gran energía que se despliega de forma


repentina ante cualquier obstáculo. Posees gran iniciativa, pero
no constancia en los esfuerzos. El derroche de tus fuerzas puede
llevar a estados de agotamiento nervioso con dolor de cabeza.
Tauro. La energía se manifiesta de un modo lento pero
deliberado. Tu naturaleza es tranquila y pacífica, y actúas con
bastante cuidado a la hora de hacer valoraciones y de emprender
proyectos.
Géminis. Eres flexible y con gran sentido práctico. Tus
energías se manifiestan de un modo variable y rápido. Gran parte
de tus impulsos se manifiestan a través de la palabra.
Cáncer. Mucha de tu energía se pierde en rememorar hechos
del pasado. Con algo de cariño, puedes dar mucho de ti, pero
como tienes esa tendencia a vivir demasiado hacia dentro, te
resulta difícil exteriorizar tus deseos. No dejes que el ambiente te
influya tanto.
Leo. Tu energía se demuestra de un modo honesto y directo.
Seguramente perderás mucha fuerza en actos ostentosos, ya que
necesitas el aplauso de los demás por más que te empeñes en
ocultarlo. Tu fuerte personalidad tiende a imponerse a los demás.
Virgo. Con orden y disciplina, tus energías se despliegan
fácilmente en el mundo material. Quizá tiendes a perder mucho
impulso en problemas menores o en realizar críticas. No te gusta
actuar de un modo directo, pero sí con eficacia.
Libra. A la hora de desarrollar tus energías, te gusta actuar
con tacto y de un modo diplomático. Como te cuesta tomar
partido, puedes perder mucho tiempo intentando buscar a alguien
que te confirme el camino a seguir.
Escorpio. Sin duda, tus energías no se demuestran de un
modo evidente o directo. Actúas de un modo reservado y discreto,
pero también con una gran profundidad y persistencia. Por eso
nadie es indiferente a tu acción y con tu gran sensibilidad, tú lo
notas.
Sagitario. Con gran jovialidad y optimismo, tus energías se
dirigen a objetivos idealistas. Sabes actuar con generosidad y
afrontas los retos de una forma valerosa. Necesitas libertad de
acción, y si no la encuentras puedes sufrir algún tipo de síntoma
físico.
Capricornio. Las propias fuerzas no se despliegan con
facilidad y por eso quizás en los primeros años de tu vida tuviste
una salud algo frágil. Sabes ser persistente en tus esfuerzos y por
ello al final siempre logras tus objetivos, pero te cuesta alcanzar
esos resultados tangibles que deseas.
Acuario. Las energías se desarrollan en una única dirección,
lo que sucede es que esa dirección suele ser bastante particular y
diferente. A pesar de tu individualismo, sabes arrastrar a otras
personas en tu camino.
Piscis. Probablemente no posees una gran energía física (a
menos que Marte esté en esta casa), pero sí una fuerza emocional
que se muestra en el amor al arte o la compasión por los demás.
Muchas veces te mueves por la intuición y sueles acertar.

Casa del Regente de la 1ª

Regente de la 1ª en la 1ª. El desarrollo de tus energías se


da fundamentalmente en todo lo que tiene que ver con tu propio
ser. Hay una cierta tendencia a la autocomplacencia, a buscarlo
todo dentro de ti. Ante la enfermedad puedes rehusar la ayuda
externa, por lo que debes aprender a escuchar los consejos de los
expertos.
De la 1ª en la 2ª. Derrochas tu energía en el desarrollo de
tu propio sistema de valores. Esto puede ser muy positivo si esos
valores te ayudan a vivir de un modo consciente, flexible y atento
a los demás. Pero debes tener cuidado para no caer en la
tozudez o el materialismo porque la rigidez no es buena ni para
la mente ni para el cuerpo.
De la 1ª en la 3ª. Necesitas comunicarte y por ello empleas
tus energías en el diálogo con los demás. Como deseas
expresarte por encima de todo, los canales de comunicación
deben estar siempre abiertos. Vigila las enfermedades de las vías
respiratorias pues pueden ser un síntoma de que estás
reprimiendo tu natural expresividad.
De la 1ª en la 4ª. Dedicas muchas energías al hogar, la
familia o a todo aquello que se relaciona con tus orígenes. Te
sientes realmente feliz en el entorno del hogar, así que es allí
donde buscarás refugio en los momentos de enfermedad o
cansancio. Los conflictos con padres o personas de mayor edad
pueden ser la causa de esas enfermedades que surgen sin motivo
aparente.
De la 1ª en la 5ª. Sin duda tienes una gran vitalidad y el
deseo de expresarte a través de la diversión, la creatividad o el
amor. Derrochas tus fuerzas con generosidad y por ello puedes
sufrir algún estado de agotamiento. Tu romanticismo es alto, pero
la realidad de la vida lo pone a prueba a menudo. Los
desengaños, grandes o pequeños, pueden ser causa de algún
trastorno pasajero. Afortunadamente para ti, el sol sale cada
mañana.
De la 1ª en la 6ª. Te interesa el trabajo y gastas tus fuerzas
en ser una persona eficiente. De este modo, el agotamiento y el
estrés pueden hacer mella en tu salud, reduciendo tus defensas
inmunitarias de modo alarmante. Aprende a relajarte, y sobre
todo no te lo tomes todo tan en serio.
De la 1ª en la 7ª. Tus energías se dirigen mucho hacia los
demás y concretamente hacia las personas más cercanas a ti,
pareja, amistades íntimas, hijos, etc. La convivencia pasará por
momentos mejores y peores, como nos ocurre a todos, pero sin
duda esos altibajos tendrán en ti un efecto muy fuerte. Necesitas a
la gente, pero no dependas tanto de ella.
De la 1ª en la 8ª. Te atrae el lado serio de la vida, pero
puedes gastar muchas de tus energías intentando responder al
extraño atractivo que provocas en los demás. Tienes carisma,
pero dependes de los otros mucho más de lo que crees. También
las personas de tu entorno necesitan de tu energía, pero esta no
suele mostrarse de un modo directo. Ábrete a los demás con
mayor generosidad y verás cómo tu vida y tu salud mejoran
considerablemente.
De la 1ª en la 9ª. Empleas tus energías en hacer realidad
tus sueños. Son sueños posibles, así que con un poco de empeño
puedes llegar a disfrutarlos. Como tienes cierta vena filosófica o
intelectual necesitas un ambiente estimulante, lecturas, viajes,
gente interesante a tu alrededor. Puedes padecer algún malestar
físico o emocional si te faltan estos estímulos.
De la 1ª en la 10ª. No sabes conformarte con un segundo
puesto, así que necesitas desarrollar tus energías en un ámbito
donde se reconozcan tus valores. Derrocharás tus fuerzas en el
desarrollo profesional o social y puedes extenuarte en el empeño
de subir a lo más alto. Hay una gran unión (que no siempre es
positiva) con uno de tus padres. Quizá él o ella te estimularon en
tu carrera. Lo cierto es que sufrirás si encuentras impedimentos en
tu camino. Sería positivo que desarrollaras otros valores que
puedas sumar a esta sana competitividad.
De la 1ª en la 11ª. Te gustan las aventuras y el contacto
con amplios grupos de gente, y empleas tus energías en alcanzar
tus aspiraciones. Estas aspiraciones pueden ser con frecuencia
demasiado idealistas, por lo que los fracasos son especialmente
dolorosos. Vive un poquito más en el presente y en el mundo real,
así sufrirás menos.
De la 1ª en la 12ª. Tus energías no se desplegarán
fácilmente desde el principio de tu vida, así que necesitarás
desarrollarte como persona a fin de poder transitar el camino que
deseas. No tienes miedo a la soledad, pero demasiado
aislamiento no es bueno. Aprende a convivir con los demás y te
sentirás mejor.

Planetas en la Casa 1ª

Sol. Sin duda hay una enorme vitalidad y un sentimiento


animado de la existencia. La constitución es fuerte y hay buena
salud. Tu extroversión puede ser importante, pero guarda algunas
energías para reflexionar y relajarte.
Luna. Derrochas muchas energías en cuestiones emocionales.
Tu sensibilidad es elevada, pero a veces cambias de opinión o de
objetivo con demasiada facilidad. La relación con tu madre es
muy importante para tu bienestar físico y psíquico.
Mercurio. Empleas tus fuerzas en comunicarte con las
personas de tu entorno. Por este motivo, debes tener cuidado para
no hablar sin pensar. Pero no por ello reprimas tus ideas. Procura
no ser excesivamente racional, deja un poco de espacio para las
emociones puras.
Venus. Te preocupan mucho las relaciones y te gusta
demostrar tus encantos de un modo armónico. Derrochas tus
fuerzas en las relaciones y en todo aquello que sea agradable o
hermoso. Procura ser un poco más diligente.
Marte. Sabes actuar de forma positiva y directa, pero a veces
puedes caer en los extremos de la agresividad. Si hay algo que te
sobra son energías, por lo que no estaría mal que las quemaras
haciendo deporte. Procura que tu dinamismo no sea agobiante
para los demás o para ti.
Júpiter. Con un temperamento optimista y generoso,
derrochas energías en todos los terrenos. Sabes sobresalir en casi
todos los ámbitos, pero no seas tan autoindulgente. Gastas
muchas fuerzas en extravagancias o placeres desmedidos que
pueden pasarte factura. Aprende a dirigir tus fuerzas hacia
objetivos realizables.
Saturno. Con gran reserva, no te gusta derrochar energías
de un modo alocado. Deseas poder, pero no ocultes tus
inseguridades o sentimientos de incapacidad. Reconoce tus
debilidades y te sentirás mejor.
Urano. Tienes mucha originalidad y una visión amplia de la
realidad. Empleas muchas energías en desarrollar tus sueños,
pero procura vivir también en el mundo real.
Neptuno. Gastas demasiadas energías en sueños de difícil
realización, aunque no cabe duda de que sabes comprender los
sufrimientos de los demás mejor que nadie. No estaría de más
que abrieras tu corazón a los otros.
Plutón. Sabes actuar de un modo creativo y empleas tus
fuerzas en alcanzar situaciones de poder. No haces nada a
medias pero deberías aprender a tomarlo todo con mayor
ligereza.
Neptuno en la casa primera de Marilyn Monroe indica que
sus energías se dispersaban en el cumplimiento de sus sueños más
irreales. Las drogas (regidas también por Neptuno) la debilitaron
considerablemente, lo que influyó en su trabajo y fue la causa
probable de su fallecimiento. Ella necesitaba brillar, imponerse,
tal como indica Leo en el ascendente. Este brillo se extendía al
ámbito social (regente de la casa primera en la undécima) y
servía como proyección de los deseos de muchas personas. En
este esfuerzo es muy probable que Marilyn perdiera de vista su
propia realidad, envolviendo su yo en la neblina típica de
Neptuno. Si hubiera aprendido a dirigir sus energías de un modo
más realista, seguramente habría tenido mayores posibilidades de
reconocerse y de expresarse de un modo más positivo para ella.
La Casa 6ª
La casa sexta habla de la enfermedad e indica con claridad
cuáles son nuestros puntos débiles en el campo de la salud. En los
casos de malestar, esta casa indica también las relaciones con los
médicos y la reacción ante los tratamientos. También se relaciona
con la higiene y con todos aquellos hábitos cotidianos que nos
ayudan a mantener un buen estado de salud.
Higiene es un concepto muy amplio, que proviene del griego
higea. Para los antiguos griegos, Higea y Panacea eran dos
deidades asociadas a Apolo, una de cuyas atribuciones era la de
ser el dios de la medicina. Higea simbolizaba el arte de mantener
la salud para no enfermar, o por decirlo en términos modernos, la
medicina preventiva. Panacea, por su parte, era la diosa
encargada de curar la enfermedad declarada. Por tanto, la casa
número seis trata tanto los aspectos de Higea como los de
Panacea en nuestra vida.
Así, en la Casa sexta podemos descubrir los puntos débiles de
nuestra constitución física. Pero también podemos observar, en un
plano más constructivo, aquellas terapias que nos conduzcan a un
mejor estado de salud. Te recomiendo que tengas en cuenta estas
terapias alternativas, pero que en ningún caso dejes de visitar a
un profesional médico en caso de enfermedad.
Si quieres ampliar tus conocimientos sobre una u otra terapia,
es conveniente que leas algo sobre ella. Acude a tu librería
habitual y consulta los últimos títulos aparecidos sobre el tema.
Luego, si crees que esa terapia es buena para ti, busca a un
practicante titulado y formula todas las preguntas que desees.
Nunca aceptes ningún tratamiento cuyo funcionamiento no
puedas comprender.

Signo de la Cúspide de la 6ª

Aries. Tendencia hacia la congestión e inflamaciones en


cabeza o cara. Dolores neurálgicos en la cabeza, migrañas o
nervio trigémino. Hay que prevenir la caída del cabello con una
alimentación rica en vitaminas y minerales. Las terapias basadas
en el masaje son muy apropiadas para ti, así como el ejercicio
físico.
Tauro. Los problemas pueden surgir en la zona del cuello,
nuca y glándula tiroides. También en la boca y la garganta. La
medicina natural, especialmente las plantas medicinales, están
especialmente indicadas para ti.
Géminis. Puede existir una gran sensibilidad en la zona de
los pulmones y bronquios. Hay también predisposición a los
estados nerviosos. Los tratamientos sutiles como la aromaterapia,
homeopatía y flores de Bach son positivos para ti.
Cáncer. Predisposición a las gastritis. Problemas por exceso o
defecto de jugos gástricos. Es aconsejable evitar las tensiones a la
hora de comer. Si eres mujer, debes hacer revisiones periódicas
de los senos a partir de la edad recomendada. Vigila bien tu
dieta y aprovecha los beneficios de la hidroterapia.
Leo. Conviene vigilar las taquicardias o problemas cardiacos
en general. La espalda y la columna vertebral se pueden resentir
de las malas posturas a la hora de trabajar. Los masajes son muy
apropiados para ti, así como los baños moderados de sol, así
como visitar la playa y el campo.
Virgo. Puedes padecer problemas de tipo gástrico o
intestinal. Las glándulas digestivas pueden sobreexcitarse por
causa de estados nerviosos. Sería positivo hacer algún ayuno
bajo control médico. Cuida muy bien tu alimentación pues en ella
está la mitad de tu salud. La otra mitad la hallarás con un ritmo de
vida más sosegado.
Libra. Puedes padecer sensibilidad del aparato renal o del
sistema urinario, así que cuida estos órganos tomando gran
cantidad de líquido. Vigila tu hígado tomando alimentos amargos
de vez en cuando. La curación con plantas o con flores de Bach
es apropiada para ti.
Escorpio. Tienes ciertos riesgos en los órganos genitales, el
sistema urinario y el recto. Aliméntate bien, con abundante fibra y
mucha agua, y sobre todo procura no tragarte tantos problemas.
Busca amigos y habla con ellos, desahógate. La mayor parte de
tus males tienen una base psíquica, así que procura descargar
tensiones, hablando y escuchando.
Sagitario. Tienes predisposición a los problemas de cadera,
como la neuralgia del nervio ciático. También puedes padecer
celulitis. Conviene vigilar el hígado y evitar alimentos grasos, así
como el alcohol. Las plantas medicinales te pueden ayudar,
aunque lo mejor para mantener la salud es que realices bastante
ejercicio.
Capricornio. Hay que cuidar los huesos y los dientes. La
debilidad de las rodillas requiere evitar esfuerzos innecesarios.
Cuida tus huesos con una alimentación sana, tomando el sol con
moderación y realizando ejercicios sencillos pero frecuentes. Los
paseos son muy buenos para ti así como cualquier tratamiento
físico osteopatía, rolfing, masajes, etc.
Acuario. La circulación sanguínea se puede resentir por una
mala alimentación. Hay que cuidar los tobillos y la parte inferior
de las piernas. Remedios novedosos como la radiónica, el reiki, la
imposición de manos o incluso las flores de Bach son muy
apropiados para ti. No olvides hacer un poco de relajación de
vez en cuando.
Piscis. Tienes cierta predisposición a los enfriamientos. Las
retenciones de líquidos pueden causar obesidad. La reflexología
podal es muy buena para ti. Evita tomar medicamentos que no te
sean prescritos, ya que eres muy sensible a cualquier tipo de
sustancia química. Las medicinas alternativas como la homeopatía
son beneficiosas en tu caso.

Casa del Regente de la 6ª

Regente de la 6ª en la 1ª. Existe un gran interés por las


cuestiones de salud y hay un continuo cuidado del propio ser.
Únicamente hay que vigilar que esa preocupación no sea
excesiva.
De la 6ª en la 2ª. Hay que procurar que las cuestiones
monetarias no influyan en el estado de salud. Los gastos en
medicinas pueden ser elevados así que conviene dirigirlos
correctamente.
De la 6ª en la 3ª. Las enfermedades de los hermanos
pueden exigir cuidados. El círculo cercano tiene una influencia
decisiva sobre la propia salud.
De la 6ª en la 4ª. Algunas enfermedades pueden ser de
carácter hereditario. Las convalecencias exigen pasar temporadas
en el hogar.
De la 6ª en la 5ª. El estado de salud puede tener una seria
vinculación con la vida afectiva. Los excesos sentimentales pueden
causar problemas, pero una vida amorosa positiva favorece
ampliamente la salud.
De la 6ª en la 6ª. Esta posición depende en gran medida
de la naturaleza del regente, su situación y los aspectos que
reciba. La salud es muy importante con esta configuración y el
signo de la cúspide debe ser tenido en cuenta a la hora de
estudiar posibles puntos débiles.
De la 6ª en la 7ª. La vida conyugal puede provocar el
contagio mutuo de algunas enfermedades. Habrá que llevar a
cabo cuidados compartidos.
De la 6ª en la 8ª. Hay un cierto temor a que las
enfermedades tengan consecuencias fatales. Es un temor
generalmente infundado, pero que es más pernicioso que la
propia naturaleza de la enfermedad. Cuidado con los males de
transmisión sexual.
De la 6ª en la 9ª. Hay grandes posibilidades de avanzar en
el estudio profundo de las cuestiones de la salud. Las cuestiones
relativas a la medicina pueden llevar a reflexiones de tipo
espiritual.
De la 6ª en la 10ª. La salud y la enfermedad pueden
convertirse en profesión, o bien existe una directa relación entre el
estado de salud y el oficio que se desempeña. Hay que vigilar
que no se produzcan enfermedades por causa laboral.
De la 6ª en la 11ª. La salud está directamente relacionada
con el mundo de las amistades. Puede darse el cuidado de
amigos enfermos, o bien los proyectos e ilusiones inciden
directamente en el estado de salud.
De la 6ª en la 12ª. El estado de salud puede requerir la
hospitalización en algún período de la vida. Es importante que tu
estado físico no te afecte psicológicamente.

Planetas en la Casa 6ª

Sol. Generalmente indica buena salud. Los regímenes


alimenticios equilibrados tienen su incidencia en el propio
bienestar. La rutina en la higiene interna y externa es una práctica
recomendable, así como una actitud positiva ante la vida.
Luna. La mente es muy importante para la salud del cuerpo
físico. De hecho, las enfermedades pueden tener un claro origen
psicosomático por lo que se requiere tener un pensamiento
optimista y relajado ante el futuro.
Mercurio. Los regímenes sanos ayudan a mejorar el estado
de salud. Sin duda es importante dialogar sobre los problemas
para evitar somatizaciones. En este caso, comprender las
enfermedades es tan importante como curarlas.
Venus. Hay cierta tendencia a la autoindulgencia en
cuestiones de salud. Las enfermedades pueden surgir por los
excesos en la alimentación o por los derroches emocionales. Hay
que aprender moderación.
Marte. Si surgen enfermedades, pueden ser debidas a los
excesos mentales o físicos. La vitalidad puede ser positiva si se
deriva hacia el deporte o la sana competitividad. Hay propensión
a los accidentes, fiebres, quemaduras o jaquecas.
Júpiter. Los excesos de cualquier tipo pueden ser causa de
algunas enfermedades. De todos modos, el optimismo de esta
posición puede ser extremadamente positivo para la salud.
Saturno. Las preocupaciones por cuestiones de salud o de
trabajo pueden causar enfermedades. No hay que esforzarse
tanto y de vez en cuando es bueno pedir ayuda a los demás. En
caso contrario se pueden sufrir enfermedades crónicas.
Urano. Las condiciones de salud pueden cambiar de forma
brusca. Es importante mantener ideas positivas en la mente.
Neptuno. Con una gran sensibilidad, se debe tener cuidado
con el consumo desmedido de drogas o medicamentos.
Plutón. Precaución ante los episodios de estreñimiento o
impurificación de la sangre, así como los crecimientos celulares
desordenados.
Marilyn tuvo algunos problemas en el desarrollo de su carrera
debidos a sus retrasos a la hora de incorporarse a los rodajes. Las
enfermedades y los problemas provocados por el abuso de
medicamentos la obligaron a refugiarse cada vez más en su
hogar (regente de la sexta en la cuarta), hasta el punto de que en
sus últimos días apenas lo abandonaba. De hecho, fue en su
hogar donde encontró la muerte.
La Casa 12ª
Tradicionalmente se considera que esta casa habla de las
enfermedades crónicas o los procesos de incapacidad. También
se refiere a la estancia en clínicas, balnearios o centros de
reposo. Por este motivo, todas las enfermedades que precisen una
larga convalecencia u hospitalización dependen de la casa
duodécima.
En los últimos tiempos hemos aprendido que esta casa revela
también los problemas de tipo psicológico o emocional que
podamos padecer en nuestra vida: las obsesiones, los miedos, la
ansiedad o la depresión. Siendo opuesta a la sexta, que habla de
los males físicos, la duodécima se refiere a los males psíquicos
que, como sabes, alcanzan grandes proporciones en nuestra
civilización. Del mismo modo que la sexta habla de la prevención
y la curación, la duodécima habla de nuestros puntos débiles
psicológicos, pero también da medios para alcanzar un mejor
estado de salud mental.

Signo de la Cúspide de la 12ª

Aries. La energía ariana se manifiesta de modo agudo, por lo


que esa posición no predispone a grandes convalecencias. Las
enfermedades crónicas pueden afectar a la cara o la cabeza,
pero en ningún caso serán importantes. A nivel psíquico, pueden
existir trastornos derivados de un exceso de impulsividad y poca
reflexión.
Tauro. Las afecciones crónicas son especialmente
persistentes. Pueden afectar a la región del cuello o la garganta.
Las bajadas del sistema inmunitario requieren largos períodos de
recuperación por medio de la alimentación sana. Pueden surgir
problemas depresivos relacionados con el mundo material.
Géminis. Si existen enfermedades crónicas, se darán en las
vías respiratorias. Pueden existir problemas de comunicación que
influyan en la propia autoestima.
Cáncer. Los males crónicos pueden desarrollarse en la zona
digestiva o en el pecho. No te acostumbres a los cuidados de los
demás y aprende a ser un poco más independiente. Los males
psíquicos pueden provenir de un exceso de emotividad no
expresada. No te preocupes tanto por desprecios que
generalmente son imaginarios.
Leo. Las enfermedades crónicas se pueden dar en la espalda
o en el corazón. Es positivo realizar revisiones periódicas del
nivel de colesterol en sangre. Cuida tu autoestima.
Virgo. Los problemas crónicos pueden afectar al área
digestiva. Se requiere llevar una alimentación equilibrada. Ten
cuidado con los estados obsesivos y con la crítica desmesurada.
Son elementos muy nocivos para la mente y el corazón.
Libra. Si padeces alguna enfermedad crónica, puede estar
relacionada con los riñones. En la edad adulta hazte chequeos
periódicos. No dependas tanto de los demás, pues eso te causa
algún trastorno psicológico.
Escorpio. Las enfermedades crónicas pueden afectar a los
órganos sexuales o al aparato urinario. Si alguna vez has de
pasar por el quirófano procura hacerlo con el ánimo optimista.
Eso reducirá el tiempo de recuperación. No pienses tanto las
cosas y huye de las obsesiones.
Sagitario. Las enfermedades crónicas se pueden dar en el
aparato respiratorio y a través de trastornos nerviosos. No
intentes alcanzarlo todo ya, ten más paciencia.
Capricornio. Las depresiones pueden causarte mucho daño
psicológico. Cuida el estado de tus huesos porque pueden
causarte problemas crónicos.
Acuario. Las afecciones crónicas pueden causar trastornos en
el aparato circulatorio o en la transmisión de los impulsos
nerviosos. Si padeces algún trastorno psíquico será por culpa de
conductas extravagantes.
Piscis. Puedes vivir algunos largos períodos de
hospitalización. Procura que la depresión no te venza y aprende
a tener una mayor autoestima.

Casa del Regente de la 12ª

Regente de la 12ª en la 1ª. La introspección se hace muy


profunda con esta posición y hay una gran preocupación por la
salud psíquica. Tienes posibilidades de llegar a la raíz de tus
miedos y limitaciones, pero debes tener valor para vencer estos
problemas.
De la 12ª en la 2ª. Tienes la posibilidad de utilizar todos
tus talentos ocultos, pero también puedes distraerte del camino de
la introspección a través de un excesivo apego a lo material. Con
esta posición debes elegir, buscar lo interior o perderte en lo
exterior.
De la 12ª en la 3ª. Sientes la necesidad de expresar tus
pensamientos más íntimos al mundo. La depresión o los problemas
psíquicos se resuelven a través del diálogo abierto con un
terapeuta adecuado.
De la 12ª en la 4ª. Tu necesidad más profunda es la de
encontrar tiempo para ti. Crear un rincón propio, desarrollar la
reserva, son elementos que te pueden ayudar a descargar las
tensiones psíquicas. De vez en cuando, toma unas vacaciones en
soledad.
De la 12ª en la 5ª. Tus sufrimientos psíquicos pueden venir
de las relaciones amorosas o de los hijos. Es importante ser
realista en el amor y no demasiado exigente con la prole. Una
visión relajada de la vida será de gran ayuda.
De la 12ª en la 6ª. No huyas de tu mundo interior a través
del trabajo. Las ocupaciones no son una buena vía de escape y
pueden producir problemas psíquicos o físicos a largo plazo.
Dedica tiempo a tu propio bienestar y descanso.
De la 12ª en la 7ª. Intentas comprenderte a través de tu
pareja y esta no siempre es la mejor opción. Los demás pueden
ser un buen espejo si estamos dispuestos a verlos con objetividad,
cosa que no suele ocurrir en las relaciones de pareja. Aprende a
ser más independiente.
De la 12ª en la 8ª. Los apoyos pueden provenir de fuentes
ocultas, pero el trabajo de conocerse a uno mismo es personal e
intransferible. En todo caso hay una profunda necesidad de
explorar los rincones oscuros de la existencia.
De la 12ª en la 9ª. La filosofía o la religión es un gran
apoyo para alcanzar el bienestar psíquico. Desarrolla tus
creencias o ideas y lograrás sentirte bien en el plano psíquico y
emocional.
De la 12ª en la 10ª. El trabajo puede ser de gran ayuda a
la hora de comprender tu mundo interior. Podrías hacer una
buena carrera en psicología o astrología. Procura que tu
profesión no sea una excusa para no enfrentarte a tus conflictos
psíquicos.
De la 12ª en la 11ª. Aprenderás a conocerte a través de
los amigos. Por otro lado, los deseos y los proyectos son positivos
a la hora de mantener la salud psíquica.
De la 12ª en la 12ª. Hay grandes posibilidades de
conectar con tu mundo inconsciente a través de sueños o de
visiones, pero ten cuidado. El instinto es positivo, pero hay que
confiar también en la razón, porque puedes caer con facilidad en
la manipulación a manos de personas sin escrúpulos. Usa tu
sensibilidad pero no dejes que ella te use a ti.

Planetas en la Casa 12ª

Sol. Vives con una gran reserva, pero tienes fácil acceso a tu
mundo inconsciente. Esta conexión la puedes alcanzar a través de
la soledad y la introspección, pero sobre todo teniendo más fe en
ti y en tus posibilidades. Aprende a ser útil y no te dejes dominar
por la autocompasión.
Luna. Tu mundo interior es un gran secreto para ti y para los
demás. Tu sensibilidad es muy alta, pero tiendes a vivir en un
mundo imaginario. La relación con tu madre puede ser algo
difícil, pero su influencia en ti no es fácilmente perceptible. Vigila
tus sueños porque en ellos hay muchas respuestas.
Mercurio. Tienes una mente sutil y cierta capacidad para
racionalizar tus pensamientos más íntimos. Te falta algo de
confianza y puedes tener algunos problemas de comunicación
que deberías superar con el tiempo.
Venus. Sabes alcanzar un gran conocimiento de tu mundo
interior gracias a la conexión con los sentimientos profundos. La
sana emotividad es una buena guía para alcanzar el equilibrio
mental.
Marte. Tus energías son limitadas pero no deberías reprimir
tus expresiones emotivas. No es bueno guardar la rabia dentro,
sácala a través del deporte o por cualquier medio creativo.
Júpiter. El éxito puede tardar, pero con una adecuada
conexión con el mundo interior, se alcanzará. Hay quien ve en
esta posición la sensación de tener un ángel a nuestro lado y algo
de razón hay en ello. Desarrolla lo mejor de ti y no tengas dudas,
encontrarás la recompensa.
Saturno. Te retraes demasiado y deberías comunicarte más
con los demás. El aislamiento puede crear algunos problemas
psíquicos, así como la represión de los instintos naturales.
Aprende a jugar más, a reír más. Es lo mejor para ti.
Urano. Te fascina todo lo misterioso, pero no seas tan
excéntrico. Las rarezas son divertidas hasta cierto punto, pero
recuerda que debes vivir en sociedad, te guste o no.
Neptuno. Tu sensibilidad es sin duda muy alta y deberías
darle salida a través de la creatividad. Puedes necesitar retirarte
de vez en cuando del mundanal ruido. No ayudes a los demás
porque temas la soledad, hazlo de un modo desinteresado y
verás como los otros te responden.
Plutón. Esta es una excelente posición para analizar tu
mundo inconsciente, pero ten cuidado con los problemas
psicológicos que puedas padecer. No pienses que puedes
solucionarlos en soledad, busca la ayuda de un profesional.
Los problemas emotivos de Marilyn, originados en el hogar
familiar (Cáncer en la cúspide de la duodécima) fueron la causa
de graves trastornos psíquicos. Aquí podemos inscribir la
enfermedad mental de su madre, que motivó en Marilyn una gran
sensación de abandono que luego se reflejó en todas sus
relaciones (regente de la doce en la siete). Del mismo modo, la
situación de Plutón en la casa doce agudizó sus obsesiones y la
impulsó a acudir a terapia. Lamentablemente, la terapia
psicológica de su época se basaba en el uso y abuso de
medicamentos, muy alejada por tanto de lo que debería ser un
tratamiento humanista y dialogante.
Un consejo final. Los datos referidos a la salud suelen ser
bastante sensibles y es por ello importante que los tomes con
precaución. Por supuesto, no pienses que las indicaciones que se
dan en este capítulo son una verdad absoluta y definitiva, sino
más bien un consejo o una sugerencia. Esta información es de
carácter general y no tiene por qué ajustarse exactamente a tu
caso. Si tienes algún problema de salud, consulta antes con tu
médico y una vez que tengas un diagnóstico y un tratamiento,
analiza qué información adicional te puede proporcionar la
astrología. Muchos de nuestros males tienen un origen emocional
o psicológico y, junto al tratamiento médico, pueden ser tratados
a través de la reflexión, el pensamiento positivo y el conocimiento
de uno mismo.
XVI - El trabajo y la
economía
La vida laboral y el desarrollo económico son cuestiones
sensibles para muchas personas. De hecho, en determinados
momentos de la existencia pueden convertirse en motivo de
grandes preocupaciones para cualquiera de nosotros.
Afortunadamente, la astrología puede ofrecernos mucha
información valiosa sobre estas cuestiones. Por un lado, a
aquellas personas que están iniciando su andadura laboral o que
desean realizar cambios en esta área, les proporciona
asesoramiento profesional, indicando cuáles son los oficios que se
ajustan mejor a su vocación y que pueden proporcionarles
mayores satisfacciones. Por otra parte, aquellos que ya cuentan
con un puesto de trabajo estable, pueden mejorar su rendimiento
y sus ganancias analizando la forma en que encaran las tareas
cotidianas. La astrología es una herramienta muy válida para
estudiar de un modo objetivo estas cuestiones.
Por supuesto, esta información debe ser analizada en el
contexto general de la Carta Astral. Si tienes una acusada
presencia de planetas en signos de Tierra, está claro que los
temas relacionados con la profesión, el bienestar y los ingresos,
tendrán un papel muy importante en tu vida. Pero si sufres una
completa carencia de este elemento, puedes tener una actitud
demasiado laxa que resultará perjudicial para tus intereses. Los
planetas que se hallan en las casas directamente implicadas
proporcionan pistas muy valiosas sobre cómo vives tu realidad
laboral. Los aspectos que formen con otros planetas señalan vías
para modificar tus esquemas de actuación.
Todos los datos que se presentan a continuación, como sucede
a través de todo este libro, pretenden ser lo más genéricos posible
y puedes tomarlos como punto de partida o como inspiración.
Pero recuerda que lo que de verdad importa es tu interpretación
de los mismos. Si te preocupan los temas laborales o económicos,
analiza el simbolismo profundo de las casas implicadas y de los
planetas que puedas hallar en ellos. Aplica este simbolismo, con
paciencia e imaginación a tu propia vida, y hallarás soluciones
que te sorprenderán.

El Sol: La sana ambición, el deseo de dirigir y triunfar.


La Luna: Popularidad, necesidad de formar equipo,
liderazgo benevolente, fluctuación.
Mercurio: Adaptabilidad, cambios, necesidad de estudiar o
comunicar.
Venus: Buen gusto, sentido artístico, comodidad.
Marte: Actividad, ambición agresiva, riesgo en los negocios.
Júpiter: Suerte financiera, inversiones, derroche.
Saturno: Estabilidad, sentido del deber, responsabilidad,
autoritarismo.
Urano: Riesgo en los negocios, interés por todo lo novedoso,
fortuna inesperada.
Neptuno: Intuición, imaginación aplicada a los negocios,
inocencia peligrosa.
Plutón: Juegos de poder, cambios súbitos, éxito y fracaso.
Tabla 11. Los planetas en el área económico-laboral
La profesión
El primer punto que debemos analizar a la hora de entender
nuestra relación con el mundo laboral es el Medio Cielo, es decir,
la cúspide de la casa décima.
La casa diez es donde se refleja nuestra profesión y no es
casual que sea ella quien sigue a la novena (estudios superiores).
Generalmente, la profesión es la continuación natural de los
estudios, aunque esto no ocurre siempre. Cuando alguien debe
dejar a un lado su vocación para dedicarse por necesidad a otro
tipo de trabajo, abandona los terrenos de la casa diez para
entrar en los de la sexta.
Pero la casa décima, que es la que nos ocupa en este
momento, habla de la vocación y de las aspiraciones laborales.
Representa nuestras mejores oportunidades profesionales,
aquellos oficios en los que podemos entregar lo máximo de
nosotros mismos. Si tienes dudas sobre tu futuro profesional o
estás pensando acerca de qué estudios seguir, debes analizar
detenidamente esta casa y todo el simbolismo que la rodea. Tanto
el signo de su cúspide como la casa en que se encuentra el
regente y los planetas que puedan hallarse en ella, son
fundamentales para comprender hacia dónde dirigir tus energías
y obtener el mejor resultado laboral.

Signo de la Cúspide de la 10ª (Medio


Cielo)

Aries. La profesión tiene su base en la capacidad de


dirección. Existe un carácter emprendedor y gran iniciativa
personal. Quizá personalizas demasiado el desarrollo profesional
y deberías aprender a ver el beneficio que tu oficio puede
proporcionar a los demás. Eres audaz, pero ten cuidado con el
exceso de energía agresiva.
Tauro. Te tomas tu profesión con bastante paciencia y
determinación. Los esfuerzos tendrán sus frutos a medio plazo y
sin duda, serán de carácter permanente. Sientes interés por los
oficios prácticos, o por dar una dimensión tangible incluso a las
profesiones más especulativas. Las finanzas, la agricultura o los
negocios inmobiliarios pueden ser tu área profesional.
Géminis. Tu carrera profesional debe ser intelectualmente
estimulante y también variada en su desarrollo. No soportas el
aburrimiento o la falta de perspectiva profesional. Los oficios
relacionados con la comunicación y la escritura son muy
apropiados para ti, aunque deberías aprender a perseverar un
poco más, con mayor paciencia.
Cáncer. Existe una gran influencia familiar en el desarrollo de
tu profesión, tanto para bien como para mal. Los éxitos pueden
tardar en llegar, por lo que se requiere persistencia. La madre u
otras mujeres pueden tener una clara incidencia en tu oficio.
Leo. Te atraen aquellos oficios en los que puedas brillar,
resaltar sobre los demás. Puedes sentir interés por las profesiones
que impliquen representación, dirección o estar en contacto con el
público. Las artes pueden ser muy positivas para ti, sobre todo
aquellas que se desarrollan en un escenario.
Virgo. El desarrollo de tu profesión puede obligarte a la
subordinación a horarios fijos o una férrea disciplina. Te
adaptarás bien porque eres una persona bastante laboriosa. El
comercio al por menor o las profesiones sanitarias son
especialmente apropiadas para ti. También cualquier oficio que
implique detallismo, paciencia y espíritu crítico.
Libra. Te atraen los oficios artísticos, y sobre todo aquellos
que impliquen no ensuciarse las manos. Rendirás bien en las
profesiones que requieren trato con los demás, pues sabes actuar
con diplomacia. Tu pareja puede tener un papel importante en el
desarrollo profesional, o bien puedes trabajar con ella.
Escorpio. Sabes vivir tu profesión de un modo estable y
determinado. Los oficios relacionados con la investigación son
muy apropiados para ti, o también aquellos en los que hay que
cortar y penetrar para llegar a la raíz de los problemas.
Medicina, cirugía o psiquiatría son ejemplos clásicos. Pero
cualquier profesión que requiera tenacidad, profundidad y
autodominio será apropiada.
Sagitario. Puedes vivir tu profesión con una gran vocación
de movimiento. Los viajes, las enseñanzas superiores, la
diplomacia o el comercio lejano, son campos excelentes para ti.
Quieres llegar lejos en tu oficio, pero profundizando y sobre todo,
aprendiendo.
Capricornio. Tienes tendencia a desarrollar tu profesión en el
ámbito de la administración o de las finanzas. Te gustará escalar
posiciones y lo harás de forma lenta pero segura. Si tu oficio no
tiene posibilidades de promoción sentirás una gran frustración
porque tú siempre aspiras a mejorar.
Acuario. Los oficios novedosos, en el mundo de la invención
o las comunicaciones te atraen mucho. La ciencia o sus
aplicaciones prácticas pueden ser un buen terreno para
desarrollar tu oficio, aunque tus sentimientos humanitarios no son
despreciables.
Piscis. La profesión puede desarrollarse en la sombra, o fuera
de la visión del gran público, pero tendrá una influencia clara en
el ambiente. Podrías tener éxito en oficios como la hostelería, las
actividades sociales u hospitalarias.

Casa del Regente de la 10ª

Regente de la 10ª en la 1ª. Tienes ideas muy personales


sobre la manera en que debes llevar adelante tu profesión. En
muchos casos, ésta se convierte en una forma de reivindicar tu
propia valía. La profesión ayuda a alcanzar la ansiada
independencia personal y sirve también para defenderla.
De la 10ª en la 2ª. La profesión tiene por objeto asegurar
los medios materiales para la subsistencia. Se elige un oficio que
prometa ganancias importantes por lo que el reconocimiento
social no es tan importante para ti. En cualquier caso, el oficio
debe estar en consonancia con tus propios valores morales.
De la 10ª en la 3ª. Las actividades están conectadas con el
mundo de la comunicación o con estudios de carácter práctico.
Los parientes más cercanos, hermanos o primos, pueden tener una
influencia en la vida laboral. La actividad comercial es bastante
lucrativa.
De la 10ª en la 4ª. La influencia familiar en el desarrollo
profesional es muy importante. El oficio puede desarrollarse en el
propio domicilio, o bien en la administración de bienes
inmuebles. El peso de la tradición puede ser muy fuerte con esta
posición.
De la 10ª en la 5ª. Las condiciones laborales pueden ser
muy variables. Ten cuidado con las especulaciones financieras,
pues pueden dar resultados muy buenos o muy malos. Los hijos, si
existen, pueden ser de gran ayuda en el desarrollo profesional.
De la 10ª en la 6ª. Si triunfas en tu profesión será por tu
propio esfuerzo, ya que sabes trabajar duro. La salud puede
afectar al buen desarrollo profesional aunque también podrías
lucrarte en las profesiones sanitarias. Vas poco a poco en tu
oficio, empezando desde la base, lo que garantiza el éxito a
medio plazo.
De la 10ª en la 7ª. El éxito profesional se ve favorecido por
el matrimonio o mediante asociaciones convenientemente
planificadas. No cabe duda de que sabes tratar con los demás en
tu oficio, pero no dependas tanto de la opinión de los otros.
De la 10ª en la 8ª. Tu oficio bien puede ser heredado, pero
también puede implicar duros esfuerzos y un carácter
determinado. En algunos casos, esta posición indica la
dedicación a profesiones poco comunes, relacionadas con el
sexo, la muerte o la psiquiatría.
De la 10ª en la 9ª. Los estudios superiores son de gran
ayuda en el desarrollo profesional y generalmente el oficio es una
continuación de éstos. La enseñanza, el aprendizaje continuo y
los viajes, pueden ser parte de tus responsabilidades.
De la 10ª en la 10ª. La profesión tiene un papel central en
tu vida. Analiza cuidadosamente el signo de la cúspide y el
regente porque tiene un papel relevante en tu desarrollo laboral.
Ten en cuenta de que en esta faceta de tu vida puedes lograr lo
que te propongas.
De la 10ª en la 11ª. Los amigos pueden ser de gran ayuda
en el desarrollo profesional, o bien puedes trabajar con ellos. Es
importante tener proyectos para desarrollarlos en común con los
amigos. Los oficios relacionados con cuestiones sociales son muy
apropiados.
De la 10ª en la 12ª. Las condiciones profesionales suelen
ser algo oscuras, lo que te obligará a trabajar entre bastidores.
Puedes aspirar a cargos de confianza, pero siempre envueltos en
la discreción. La profesión puede requerir algunos periodos de
aislamiento.

Planetas en la Casa 10ª

Sol. La profesión es muy importante para ti, básicamente


porque sientes la necesidad de probar tu propia valía a través de
ella. Posees una dosis considerable de ambición, pero es un
deseo sano de mejorar, de demostrarte que puedes alcanzar lo
máximo. Esta es una posición ideal para la política y también
para la dirección de empresas.
Luna. Puedes sufrir algunos cambios en tus intereses
profesionales. Necesitas trabajar con el público y a ser posible
con mujeres o en áreas relacionadas con el mundo de la mujer.
Te preocupa mucho tu reputación y por ello actúas de un modo
digno en el ámbito social.
Mercurio. El éxito laboral te puede llegar en áreas
relacionadas con el mundo de la comunicación, tales como el
periodismo, la escritura o el trato con el público. Tienes diversas
aspiraciones y puedes iniciar varias carreras al mismo tiempo.
Procura que la dispersión no sea excesiva.
Venus. Tu oficio te obliga a ser agradable y a usar la
diplomacia, lo que no te costará demasiado. Puedes tener
bastante éxito en profesiones relacionadas con el público, ya que
posees una gran simpatía natural. La gente te ayudará en muchos
momentos de tu vida.
Marte. Tu naturaleza es muy activa en el plano profesional ya
que tienes una alta motivación de logro. Sin duda tu profesión
ideal será la relacionada con trabajos ejecutivos. Persigues con
energía tus objetivos.
Júpiter. Estás en una excelente posición para triunfar en los
negocios o en el mundo de la política. Tienes mucha habilidad
como líder y una gran confianza en tus capacidades, por lo que
tu profesión se verá coronada por éxitos. Tu integridad moral no
es desdeñable, pero también puedes pecar por exceso de orgullo.
Saturno. La responsabilidad es algo muy importante para ti y
por eso la buscas y la aceptas sin dificultad. Tu ambición es muy
alta y actúas de un modo correcto, calculando cada paso que das
en tu profesión. En la obsesión por escalar posiciones puedes
actuar con crueldad, así que ten cuidado con los enemigos que
puedas crearte.
Urano. Eres original en el desarrollo de tu profesión, pero
tienes muy buenas ideas que deberían ser escuchadas por los
demás. Podrías rendir buenos servicios en organizaciones
filantrópicas, pero siempre que te dejen estar al mando. Necesitas
cambios y nuevas ilusiones pero soportas muy mal la obligación
de cumplir órdenes.
Neptuno. Tu actitud compasiva en el plano laboral te ayuda
a desarrollar trabajos relacionados con la salud y los cuidados.
Eres muy idealista en tu vida profesional y te gusta ayudar a los
demás. Confía en tu instinto, pero no te dejes llevar demasiado
lejos por ilusiones sin base.
Plutón. Confías mucho en tus posibilidades y sabes actuar de
modo innovador en la vida profesional. Los conflictos de poder
pueden crear conflictos, pero tienes cualidades para la política o
el mundo empresarial. Será positivo que adquieras hábitos más
democráticos.
La presencia de Mercurio en la casa diez de Marilyn nos
indica que sus expectativas profesionales estaban relacionadas
con el contacto con el público y la comunicación. Su oficio estaba
basado en la expresión, y sin duda ella sentía la necesidad de
mejorar su modo de comunicarse. De este modo, el regente de la
casa diez en la nueve marca un impulso hacia el estudio
constante, hacia el perfeccionamiento de su arte. La estancia de
Marilyn en el Actor's Studio puede enmarcarse también bajo esta
influencia. Sin duda, su deseo era el de profundizar en el oficio
de actriz y lo hizo con paciencia, comenzando por pequeños
papeles y demostrando poco a poco su talento en interpretaciones
dramáticas. Esto se refleja claramente en la presencia de Tauro en
la cúspide de la décima casa.
El trabajo cotidiano
La casa sexta nos habla del desarrollo de la vida laboral. Aquí
se reflejan las condiciones de trabajo, la forma en que se afronta
la tarea cotidiana y la relación con los compañeros y
subordinados. Esta casa puede dar también alguna pista sobre
nuestras inclinaciones profesionales. La diferencia entre la décima
y la sexta es que la primera habla más del aspecto vocacional de
nuestras aspiraciones laborales. En cambio, la sexta se refiere al
trabajo como obligación, a la responsabilidad de cumplir nuestras
tareas en un horario concreto y bajo unas normas determinadas.
Pero esta casa no solo gobierna a los asalariados. Incluso las
profesiones por cuenta propia están sujetas a plazos de entrega,
disciplina autoimpuesta y contacto con proveedores y clientes.
Todos estos son temas típicos de la casa seis.

Signo de la Cúspide de la 6ª

Aries. En el trabajo eres incansable, siempre esperando el


momento para meter baza y dejar tu huella. Te sentirás bien
trabajando por cuenta propia, o en una posición directiva, ya que
soportas mal las órdenes. No todos pueden seguir tu ritmo y
puedes crearte conflictos con los compañeros. Funcionas mucho
mejor si sientes que te aprecian.
Tauro. En el trabajo eres estable y todos confían en ti. Todas
las ocupaciones que requieran persistencia o paciencia son
adecuadas para ti. Quizás los problemas surjan por tu excesivo
dogmatismo, que tiende a conducirte por caminos ya gastados
por el uso. Es importante aceptar las ideas nuevas.
Géminis. Puedes cambiar de trabajo en varias ocasiones y
esto se debe a que tienes muchas ideas sobre cómo desarrollar tu
vida laboral. En la tarea cotidiana tiendes a dispersar tus energías
en muchas direcciones, intentando abarcar demasiados frentes.
Te preocupa la comunicación con los compañeros y puedes
desarrollar tu oficio en compañía de parientes cercanos.
Cáncer. Ves tu tarea de un modo demasiado emocional, lo
cual puede ser bueno si ésta implica cuidar a otras personas. Pero
los conflictos con los compañeros te hieren muy profundamente.
Trabajar en el hogar es uno de tus deseos más profundos.
Leo. Sabes trabajar con ahínco en cualquier área, pero lo que
no soportas es el servilismo o la obediencia ciega. Si los demás te
aplauden de vez en cuando, si valoran lo que haces, serás un
buen ejemplo para todos. Te gusta dramatizar un poco y quizás
por ello esta sea una buena posición para los actores.
Virgo. En el trabajo sabes ser una persona higiénica, directa
y concienzuda. Te pierdes mucho en los detalles, lo cual puede no
ser tan bueno si estás en una posición en la que debes dirigir o
planificar el esfuerzo de otros. Pero cualquier oficio que implique
paciencia, atención y un trato meticuloso te vendrá bien.
Libra. Necesitas trabajar en un ambiente en el que reine la
armonía. De hecho, los trabajos que requieren mediación,
esfuerzos legales o diplomáticos son muy apropiados para ti. Si
de verdad te gusta tu trabajo, serás perfeccionista. Está bien
escuchar opiniones, pero procura desarrollar tu propio criterio.
Escorpio. En el trabajo eres resistente y también persistente.
Te gusta llegar al fondo de cualquier asunto y soportarás
cualquier dificultad en tu empeño por lograrlo. Las áreas que
requieran un esfuerzo investigador son las mejores para ti. Tu
integridad profesional es muy grande, pero muchas veces tu
trabajo te pone a prueba en cuestiones éticas. Aprende a trabajar
en equipo, de un modo más transparente.
Sagitario. Puedes tener algún problema en el trabajo si éste
no es intelectualmente estimulante. Los oficios que requieren
viajes, investigaciones o reflexión son tus favoritos, pero no caigas
con tanta facilidad en la desidia ante las ocupaciones más
rutinarias. No todo es fascinante ni tiene por qué serlo.
Capricornio. Tienes buenas cualidades para la organización
y la dirección. Los trabajos administrativos son buenos para ti, así
como cualquier ocupación estable y que requiera una gran
responsabilidad. Harás grandes esfuerzos por ascender en la
escala laboral. Vigila el estrés y sus nocivos efectos en la salud.
Acuario. Eres una persona que trabaja mucho, pero con
poca organización. Te guías mucho por tus impulsos y en
ocasiones puedes sentir que el trabajo te destroza los nervios. Las
amistades o los colectivos son beneficiosos en el trabajo y tendrás
deseos de renovar constantemente tus aspiraciones laborales. Es
importante que tengas propósitos muy claros a la hora de ponerte
a trabajar. Dirigirás mejor tus energías.
Piscis. Los trabajos relacionados con el arte, la medicina o la
música son muy favorables para ti. Te preocupas demasiado por
cosas que a veces tienen poca importancia y tiendes a desarrollar
tus esfuerzos de un modo oculto, o a escondidas.

Casa del Regente de la 6ª

Regente de la 6ª en la 1ª. Eres una persona muy


laboriosa, que tiende a ver en el trabajo un espejo de su propia
personalidad. De hecho, te identificas tanto con lo que haces que
te cuesta diferenciar el “hacer” del “ser”. Tu actitud es bastante
servicial y puedes entender tu trabajo como un servicio a la
comunidad. Ten cuidado de no derrochar tus energías, porque el
estrés es tu peor enemigo.
De la 6ª en la 2ª. Sin duda, tú eres una persona que
trabaja por el dinero. Pero tampoco hay que olvidar que tienes
principios, valores morales que te impedirán hacer “cualquier
cosa” por dinero. Puedes incrementar tus ingresos a través de la
salud, las dietas o los alimentos naturales. De hecho, te
preocupan mucho los derechos de los consumidores y la dieta
sana.
De la 6ª en la 3ª. El trabajo exige realizar desplazamientos
de manera cotidiana. Los viajes a corta distancia proporcionan
buenas perspectivas laborales. El trabajo en medios informativos
o en áreas que requieran un buen esfuerzo de comunicación será
provechoso. Los hermanos o primos serán también de gran ayuda
en el desempeño de tus obligaciones.
De la 6ª en la 4ª. Te encontrarás a gusto trabajando en el
hogar o continuando con la tradición familiar. Puedes trabajar en
la empresa de tus padres, o dedicarte a negocios de decoración.
La influencia de tus padres puede ser fundamental a la hora de
realizar tus tareas.
De la 6ª en la 5ª. Tu trabajo puede ser una gran placer
para ti y de hecho, encontrarás la manera de estar siempre
pendiente de tus ocupaciones. Puedes sentir que tu trabajo es casi
más un hobby que una obligación. Si tu ocupación no es de tipo
artístico, al menos buscarás realizarla de forma creativa.
De la 6ª en la 6ª. Eres una persona para la que el trabajo
es muy importante. Analiza con cuidado el regente de la casa,
pues te dará muchas pistas sobre cómo afrontas tus obligaciones
laborales. Puedes desarrollar métodos de trabajo muy eficaces y
provechosos. Cuidado con las enfermedades laborales.
De la 6ª en la 7ª. La vida conyugal y la laboral aparecen
entremezcladas en tu existencia. Incluso aunque no tengas pareja,
puedes sentir la necesidad de tener un amigo cercano como
compañero de trabajo. Puedes trabajar en el terreno legal aunque
quizás seas demasiado dependiente del consejo de los demás.
De la 6ª en la 8ª. Tendrás que buscar ayuda en tu trabajo y
éste podría tener relación con algún tipo de investigación. El
trabajo puede también estar relacionado con la administración de
dinero ajeno. También tienes la habilidad de ocuparte en oficios
relacionados con el sexo, la muerte o el mundo psíquico.
De la 6ª en la 9ª. El trabajo puede implicar largos viajes
por el extranjero, o bien puede estar basado en el interés por
otras culturas, sus idiomas, etc. La enseñanza superior está
íntimamente ligada con la vida laboral, así como los temas
religiosos o morales.
De la 6ª en la 10ª. Puedes llegar a realizar algunos
excesos en el trabajo, pero esto se debe a que tu vocación
coincide con el oficio que desarrollas. Sin duda, esta posición es
muy satisfactoria en el plano laboral, aunque el exceso de trabajo
tiene también sus inconvenientes. Buscarás ocupar posiciones
directivas.
De la 6ª en la 11ª. Puedes trabajar bien en compañía de
amigos o en medio de sociedades, clubes, partidos políticos, etc.
Las actividades de grupo son muy beneficiosas para ti.
De la 6ª en la 12ª. El trabajo causa algunas
preocupaciones a pesar de que te dedicas a él esforzadamente.
Cuando se produce una sobrecarga laboral puedes sufrir alguna
enfermedad leve que te aparte temporalmente de las ocupaciones.
Te gustará estar en la sombra, o trabajar de modo aislado.

Planetas en la Casa 6ª

Sol. Eres una persona bastante laboriosa, y cuando alcanzas


algún resultado tangible mediante tu esfuerzo, sin duda sabes
disfrutarlo. A la hora de trabajar, actúas con determinación y te
preocupas mucho del orden y la disciplina, pues son elementos
que te aportan seguridad. No tendrás demasiados problemas por
tu actitud ante el trabajo, aunque deberías aprender a
desconectar cuando vuelves a casa.
Luna. Puede haber muchos cambios en el tu profesión, pero
tu consideración hacia los compañeros o subordinados hace que
estas mudanzas sean positivas. Esperas mucho de los demás en el
plano laboral y tienes una fuerte tendencia a proteger y servir a
los otros. Tus hábitos pueden ser algo variables.
Mercurio. Te gustan las ocupaciones prácticas y sabes actuar
con gran eficiencia en tu tarea cotidiana. Tus cualidades a la hora
de planificar o dirigir son muy aprovechables. Pero como te gusta
hacer varias cosas al mismo tiempo puede que no logres acabar
ninguna.
Venus. En el trabajo tienes una actitud bastante servicial que
permite que te lleves muy bien con tus compañeros. Si tu trabajo
no está directamente relacionado con el arte, tú harás lo posible
por obtener un resultado hermoso de tus empeños. Cooperar con
mujeres es para ti una bendición, y sobre todo cuando en el
entorno no se impone ninguna disciplina.
Marte. Trabajas muy duramente en tu labor, y el esfuerzo
puede ser tanto físico como psíquico. Tu nivel de exigencia es
muy alto y deberías tener en cuenta que no todos están
capacitados para seguir tu ritmo. Tu vitalidad es muy grande,
pero debes controlar tu genio.
Júpiter. A la hora de trabajar eres bastante optimista y usas
correctamente tu capacidad organizativa. Tu generosidad con los
compañeros es bien recibida y por eso no tendrás conflictos
laborales.
Saturno. Te tomas tu trabajo muy en serio y ves en él una
forma de subir peldaños en la vida. Tu eficiencia es elevada y
tienes un alto sentido de la responsabilidad pero muchas veces
sentirás que no te valoran adecuadamente en el trabajo. Lucha
por defender tus derechos.
Urano. Sin duda te gusta trabajar a tu aire y darías lo mejor
de ti en un empleo por cuenta propia. El movimiento y los
cambios te resultan especialmente estimulantes. Pero debes
aprender a soportar también un poco de disciplina.
Neptuno. En el trabajo puedes ir a la deriva con facilidad.
No sueñes tanto y ponte manos a la obra de inmediato. Puedes
dar lo mejor de ti en áreas relacionadas con la salud.
Plutón. Eres muy individualista en tu trabajo, pero te gusta
llegar al fondo de todos los asuntos. Puedes rendir en áreas
científicas, policiales o médicas.
Podemos especular sobre la influencia familiar en el desarrollo
de la vida laboral de Marilyn. La falta de una familia estable y,
sobre todo, de una adecuada apreciación por parte de los demás
en su infancia pudieron alimentar sus deseos de brillar a través de
un oficio de reconocimiento público como el cine. Capricornio en
la cúspide de la sexta casa nos habla de una seria determinación
a la hora de efectuar su trabajo, de un deseo de ascender
peldaño a peldaño en la ejecución. Pero quizá el peso de la
autoimpuesta necesidad de ser una estrella fue demasiado fuerte
para ella.
La economía
Una vez que hemos analizado nuestra profesión y el
desarrollo de nuestra vida laboral llega el momento de estudiar
nuestra situación económica y para ello nada mejor que analizar
la casa dos de la natalidad.
La casa dos muestra el estado de nuestras finanzas, el origen
de nuestros ingresos e incluso, la forma en que decidimos gastar o
ahorrar el dinero. Aunque, como veremos más adelante, hay otros
lugares de la Carta donde se habla de dinero, la casa dos es el
punto fundamental donde se refleja nuestra relación con el dinero.

Signo de la Cúspide de la 2ª

Aries. La necesidad de ganar dinero empuja a realizar


actividades de carácter emprendedor. La actitud ante las
cuestiones económicas puede ser algo precipitada. Iniciando
constantemente nuevos proyectos, necesitas algo más de
persistencia y de capacidad de ahorro para mejorar tu economía.
Tauro. Los negocios estables y prácticos son una buena forma
de ganar dinero y de conservarlo con provecho. Las ganancias
pueden tardar en llegar, pero sin duda sabrás disfrutarlas.
Géminis. Aprovechas todas las ocasiones para incrementar
tu patrimonio pero lo haces con demasiada poca constancia. Usa
la palabra para encontrar socios o para convencer a otras
personas de las bondades de tus servicios. Esta es una buena
posición para ganar dinero a través de las ventas o la
comunicación.
Cáncer. La familia paterna tendrá un papel destacado en tu
desarrollo financiero. Puedes seguir el negocio familiar o ganar
dinero a través de negocios relacionados con el hogar,
decoración, inmobiliarias, etc. No te tomes los problemas
económicos tan a pecho.
Leo. Puedes ganar dinero a través de actividades de
dirección. Tienes un enfoque muy generoso de la vida y puedes
dar mucho a los demás, pero será de un modo interesado. Para ti,
el dinero puede ser una buena forma de ganar amistades y de
establecer relaciones de mutuo interés con otras personas.
Virgo. El dinero llegará a ti a través del trabajo cotidiano.
No serán grandes sumas, pero como sabrás ahorrar, con el
tiempo podrás construir un buen patrimonio. Analizas muy bien
tus gastos pero a veces caes en la avaricia.
Libra. Las asociaciones de tipo empresarial son muy positivas
a la hora de incrementar el capital. La pareja puede tener
también un papel positivo en tus posibilidades de ganar dinero.
Desde luego, no te gusta recibir ingresos de fuentes poco claras y
podrías ganar dinero a través de pleitos judiciales.
Escorpio. Las cuestiones monetarias tienen para ti un
significado muy profundo y tiendes por ello a vivirlas de una
forma especialmente compleja. Puedes atraer a otras personas
para hacer negocios contigo e incluso, obtener algún legado o
herencia.
Sagitario. El dinero puede llegar a ti desde lugares muy
lejanos, o bien puede ser la consecuencia de viajes a otros
países. Los estudios superiores proporcionan fuentes de ingresos
muy estimulantes. El comercio, la enseñanza o incluso la
publicación de libros pueden ser buenas fuentes de ingreso.
Capricornio. Tienes una gran ambición económica, lo cual
puede ser positivo si se complementa con la dedicación a otras
áreas de la existencia. Ten cuidado, no identifiques dinero con
seguridad, pues puedes te llevar alguna sorpresa desagradable.
Valórate por tus propias cualidades y luego emplea tu potencial
financiero para asegurarte una vida próspera.
Acuario. Los amigos pueden ser una excelente ayuda a la
hora de ganar dinero. Aunque lo que realmente te apasiona es la
idea de incrementar tus ingresos por medios poco ordinarios. Las
inversiones en negocios novedosos pueden ser muy rentables o
desastrosas. El éxito dependerá de que en tu Carta haya otros
elementos más realistas.
Piscis. Te preocupa bastante el dinero y quizá quieras ganar
alguna suma por procedimientos poco claros. Sin duda puedes
ganar bastante con poco esfuerzo, otra cosa es que esas
ganancias sean lícitas. Procura no ser tan sensible en todo lo
relacionado con la economía, y sobre todo juega con las cartas
boca arriba.

Casa del Regente de la 2ª

Regente de la 2ª en la 1ª. Los intereses materiales ocupan


un primer plano en tu vida, así que te dedicarás con ahínco a
ganarte la vida. Los estudios o la cultura son la base sobre la que
cimentar una buena posición social. Hay una fuerte identificación
entre ti y tus finanzas, por lo que es importante que cultives tu
autoestima. De ella depende en gran medida tu bienestar
económico.
De la 2ª en la 2ª. El mundo de la economía es muy
importante para ti y puedes alcanzar ganancias elevadas con
relativamente poco esfuerzo. El signo de la cúspide y los posibles
planetas que se hallen en esta casa te indicarán los medios para
incrementar tus ganancias.
De la 2ª en la 3ª. Los estudios básicos ayudan a
incrementar el patrimonio. Probablemente tengas que realizar
muchos desplazamientos para ganarte la vida, y puedes hacer
buenos negocios con hermanos o primos. El comercio a pequeña
escala o las actividades literarias pueden ser buenas fuentes de
ingresos.
De la 2ª en la 4ª. El hogar o la familia son entornos en los
que te resultará más fácil ganar dinero. La situación económica
tiene una clara incidencia en la estabilidad y bienestar de la
familia. Los negocios relacionados con el hogar o el lugar de
nacimiento son muy provechosos.
De la 2ª en la 5ª. El dinero está relacionado con áreas
como el amor, el deporte o la diversión. Las relaciones son
provechosas también en el plano material, pero puedes tener una
tendencia preocupante hacia el juego. Hay ganancias y gastos
relacionados con el disfrute de la vida.
De la 2ª en la 6ª. Puede haber gastos importantes en
medicamentos o en alimentos sanos. Pero también puedes obtener
buenos ingresos en profesiones relacionadas con la salud,
herbolarios, etc. Los ingresos provendrán casi exclusivamente del
propio esfuerzo.
De la 2ª en la 7ª. Las asociaciones de negocios son muy
provechosas y el cónyuge se presenta como un buen proveedor
en materias económicas. El trabajo con la pareja es muy
provechoso pero intenta no ser demasiado dependiente.
De la 2ª en la 8ª. Puedes ganar dinero a través de legados
o herencias y estás en buena disposición de manejar las finanzas
de otras personas. Negocios de banca, seguros o inversiones son
muy rentables para ti.
De la 2ª en la 9ª. Los viajes y los estudios aportan buenas
perspectivas económicas. De hecho, muchas personas pueden
estar dispuestas a pagarte por tus consejos o enseñanzas. El
comercio con el extranjero o con personas muy lejanas es también
una excelente fuente de ingresos.
De la 2ª en la 10ª. Puedes alcanzar una buena posición
gracias tu propia competencia profesional. El ascenso social está
casi garantizado con esta posición y se producirá gracias a tus
ganancias. Sin duda, buscas una profesión que no solo te guste,
sino que sea económicamente provechosa.
De la 2ª en la 11ª. Los amigos te aportarán grandes
ayudas económicas y tú también deberás corresponderles en un
momento u otro. Es importante disponer de proyectos, tener
esperanzas en un futuro económicamente mejor pues esa es la
base para lograrlo. Las posiciones dirigentes en asociaciones,
partidos políticos o sindicatos, procuran buenos ingresos.
De la 2ª en la 12ª. Te preocupa mucho el dinero y con
frecuencia te sometes a privaciones voluntarias o impuestas. Es
importante que tus fuentes de ingresos no estén ocultas en el
secreto y que cambies la preocupación por la confianza.

Planetas en la Casa 2ª

Sol. Tienes una ambición muy positiva en el plano material,


por lo que dedicarás gran parte de tus energías a ganar e intentar
conservar el dinero. El éxito financiero te llegará antes o después
pero la forma de disfrutarlo dependerá mucho del signo en que
esté el Sol. Un consejo, no derroches.
Luna. Habrá muchos cambios en tu economía. Sin duda
posees un sentido innato para los negocios, pero para ti ganar
dinero tiene un valor más emocional que puramente material. En
cierto sentido buscas la seguridad a través de las posesiones, y
esto puede dar lugar a conflictos cuando tus ingresos no sean los
adecuados. Las mujeres pueden tener un papel fundamental en tu
economía.
Mercurio. Valoras mucho todo aquello que tiene resultados
prácticos. A la hora de ganar o de gastar, actúas con rapidez y
en varios frentes a la vez. Pero como tu mente para los negocios
es bastante racional, difícilmente cometes errores. Puedes ganar
dinero en negocios literarios o prestando consejo a otras
personas.
Venus. Sabes ganar dinero, pero sobre todo sabes gastarlo y
disfrutarlo. A la hora de ganarlo prefieres las ocupaciones
agradables y no demasiado exigentes. Pero cuando se trata de
gastar, los objetos hermosos, el agasajo de tu pareja o los
placeres de la mesa, ocupan un lugar fundamental en tus
prioridades. Procura no gastar más de lo que ganas.
Marte. Puedes usar tu ingenio para ganar dinero y sabes
actuar con generosidad hacia los demás. Ten cuidado con los
negocios que prometen riquezas inmediatas, porque suelen ser
una estafa. No te impacientes con el dinero y busca inversiones a
largo plazo.
Júpiter. Sabes arreglártelas muy bien con cualquier cantidad
de dinero. Los negocios serán afortunados y alcanzas la
prosperidad gracias a tu actitud optimista ante los negocios.
Saturno. El dinero llegará lentamente a tu vida y
seguramente te angustias mucho por él. Sabes ahorrar, pero
debes desarrollar más la generosidad. El dinero será importante
en tu vida, pero no te aferres a él como si fuera lo único
importante de esta vida.
Urano. Los altibajos financieros son grandes, debido a que
tus fuentes de ingresos pueden ser bastante peculiares. El deseo
de independencia económica es fuerte, pero debería estar
basado en fundamentos laborales más sólidos.
Neptuno. Tu juicio en finanzas no es demasiado bueno y
tiendes a comprar a crédito muy por encima de tus posibilidades
reales. Busca el consejo de alguna persona de confianza para
administrar tu patrimonio.
Plutón. El dinero te llega de fuentes muy diversas y con
frecuencia extrañas. El materialismo es un problema, pero tu
capacidad de adquirir y conservar es indiscutible.
La economía de Marilyn estuvo ligada a su trabajo, tal como
demuestran Virgo en la cúspide de la segunda y el regente de
esta casa en la décima. La carrera de actriz pudo proporcionarle
buenos ingresos y seguramente no estaba dispuesta a renunciar a
su independencia económica para depender de un marido. Esto,
como veremos más adelante le provocó algunos conflictos en su
relación con Joe DiMaggio.
Ingresos extraordinarios
Existen dos zonas de la Carta donde podemos buscar más
información sobre nuestra situación económica. Las casas cinco y
ocho nos hablan de lo que podríamos llamar “ingresos
extraordinarios”, ya que se refieren a aquel dinero que no llega a
través de nuestro trabajo cotidiano. Se trata de cantidades cuya
afluencia no suele ser periódica, sino esporádica. Estos ingresos
son, por su propia naturaleza, poco fiables, así que sólo deben
analizarse en función de la información obtenida en el análisis de
la casa dos.
Para concretar su significado, podemos decir que la casa
quinta habla de la fortuna en juegos de azar y, por extensión, de
los resultados de cualquier inversión especulativa. La casa octava
nos informa de los ingresos que provienen de fuentes externas.
Tradicionalmente es la casa de las herencias, pero también puede
hablarnos de dinero que proviene de nuestra pareja, o incluso de
préstamos o regalos que podamos recibir.
Como se ha dicho, la importancia de estas casas en el área
económica es bastante relativa, ya que a casi nadie se le ocurre
vivir del azar o depender completamente de la generosidad de
otras personas. Por este motivo te recomiendo que únicamente
tengas en cuenta el significado de estas casas si en tu Carta hay
algún planeta que se encuentre en sus dominios.

Planetas en la Casa 5ª

Sol. Tienes tendencia a derrochar el dinero en gastos


superfluos y probablemente deberías tener mucho cuidado con el
juego. Las inversiones o apuestas pueden ser afortunadas pero no
creas que las rachas buenas van a durar eternamente. Si has de
especular, hazlo con cabeza.
Luna. El éxito económico te puede llegar pronto a través de la
especulación o el juego. Tu popularidad puede ser grande si te
dedicas a estas actividades aunque debes tener cuidado con los
aduladores aprovechados. Tu suerte será muy fluctuante, rachas
excelentes seguidas de otras muy malas.
Mercurio. Esta posición no es muy buena para la
especulación y el riesgo porque existe una gran tendencia a
cambiar constantemente de dirección en las inversiones. Gastar
grandes sumas a corto plazo no es el mejor método para hacer
fortuna. Es conveniente buscar estabilidad e invertir a más largo
plazo.
Venus. Las especulaciones pueden ser bastante afortunadas
para ti. En realidad tienes un cierto talento innato para gastar y
hacerlo bien. Por otro lado, la fortuna te puede sonreír en algunos
momentos de la vida, lo cual no quiere decir que debas gastar
todo tu dinero en juegos de azar. Juega, pero moderadamente.
Marte. Amas la especulación, pero con frecuencia tienes un
mal perder. Cuidado con las inversiones repentinas que buscan
ganancias exageradas a corto plazo.
Júpiter. Te gusta hacerlo todo a lo grande y puedes
especular en apuestas deportivas. Sin duda tendrás fortuna pero
te cuesta saber cuándo es el mejor momento para retirarse con las
ganancias.
Saturno. Sabes especular con prudencia, lo cual quiere decir
que buscas la diversificación y los objetivos a largo plazo. El
juego no te atrae demasiado y tampoco tendrás grandes golpes
de fortuna, pero incrementarás tu patrimonio de un modo lento y
seguro.
Urano. Te gusta la especulación y los juegos de azar e
incluso puedes tener algún golpe de fortuna. Pero si te llega, será
por sorpresa, así que no corras locamente detrás de ella. Desde
luego, no debes invertir en proyectos novedosos a menos que
tengas buenas reservas económicas colocadas en valores seguros.
Neptuno. Puedes tener alguna buena intuición y deberías
seguirla, pero ten cuidado con las personas que tienes como
socios.
Plutón. Con gran interés por el azar, eres una persona
arriesgada. Puedes ganar grandes sumas o sufrir pérdidas
devastadoras. Si tienes un corazón a prueba de infartos, esta es
una posición que asegura entretenimiento sin fin.

Planetas en la Casa 8ª

Sol. Sabes atraer el dinero de otras personas y lo utilizas de


un modo certero y provechoso. Las herencias o legados se reciben
en el momento oportuno y permiten una vida más desahogada.
Luna. Tienes una intuición muy alta y puedes invertir bien el
dinero de las mujeres de tu entorno. Las herencias pueden llegar a
través de tu madre.
Mercurio. Manejas bien el dinero ajeno y puedes recibir
sumas de personas muy cercanas, tales como amigos, hermanos o
primos.
Venus. Las mujeres pueden proporcionarte bastante dinero.
En todo caso será un dinero que sabrás gastar y disfrutar.
Marte. Puedes ocuparte del dinero de otras personas. Las
herencias causan trastornos y quizá disputas entre parientes, por
lo que se recomienda prudencia.
Júpiter. Sabes manejar bien el dinero de fuentes ajenas. Los
legados proporcionan importantes ingresos, pero con la misma
rapidez que llegan se pueden dilapidar.
Saturno. Puedes administrar muy bien el dinero de otras
personas y tendrías éxito trabajando en la banca. Los padres
otorgan alguna herencia, pero quizá te cueste disfrutarla como es
debido.
Urano. A la hora de administrar o recibir dinero de otras
personas conviene ser precavidos. Puede haber problemas, o
también legados inesperados.
Neptuno. El dinero que venga de terceras personas no se
adquirirá con facilidad. Las herencias prometen mucho pero
pueden estar llenas de deudas.
Plutón. Tienes buenas cualidades para invertir el dinero de
otros. Es muy posible que recibas herencias importantes en algún
momento de tu vida.
Marilyn tenía dos planetas en la casa ocho, Marte y Urano. El
primero podría indicar una dependencia masculina a la hora de
obtener ingresos, pero Urano añade un toque de sorpresa y
novedad a la casa. Posiblemente ella tenía grandes dificultades a
la hora de ser mantenida por un hombre y con seguridad sus
ideas autosuficientes causaron algún que otro choque con
personas más conservadoras. Conviene recordar aquí que todos
somos hijos de nuestro tiempo y de la sociedad que nos rodea.
Una postura avanzada en un momento inadecuado puede ser
motivo de grandes conflictos. En cualquier caso, si no hubiera
existido gente como Marilyn y otras mujeres que arriesgaron con
sus sentimientos y su forma de ser, la sociedad no habría
avanzado nada.
La Parte de la Fortuna
Como ya se ha explicado Fortuna es un indicador de talentos
innatos o de acontecimientos que nos pueden llevar al éxito en los
asuntos materiales. Su fórmula de cálculo aúna la posición de tres
puntos esenciales de la Carta: el Ascendente, el Sol y la Luna.
Para conocer el impacto de esta parte arábiga en tu Carta,
debes analizar los siguientes puntos.
Comprueba si hay algún planeta en conjunción (menos de 8
grados de distancia) a la Parte de la Fortuna. Este planeta es un
señalador muy claro de tu talento natural o de la vocación que
puedes desarrollar en tu vida.
Si el planeta es el Sol, la fortuna te puede venir a través de
todo lo relacionado con la creatividad, los hombres o actividades
al aire libre. Si se trata de la Luna, son afortunadas las
relaciones con las mujeres, el desarrollo de la intuición o las
actividades nocturnas. Mercurio cercano a Fortuna te invita a
descubrir el éxito en las áreas de la comunicación y la
enseñanza. Venus indica fortuna en todo lo relacionado con la
belleza, la decoración o el mundo femenino. Marte, con todo lo
masculino, así como en el deporte o el ejército. Júpiter señala
que puedes encontrar la vocación en la enseñanza superior, la
religión, la espiritualidad o la filosofía. Saturno te indica que
hay éxito en temas relacionados con las personas mayores, la
economía o el comercio. Urano inclina a la fortuna en temas
tecnológicos o en la astrología. Neptuno en la medicina, en la
psicoterapia o en el arte, y Plutón en política.
Estudia la casa donde se ubica la Parte de la Fortuna. Su
posición mundana te puede ayudar a saber en qué áreas de la
vida cotidiana desarrollarás tu vocación. Ten en cuenta para ello
los significados esenciales de cada casa, tal como se ha
explicado en capítulos anteriores.
La posición del planeta regente de la casa donde está Fortuna
es también un indicador a tener en cuenta. Así, si Fortuna o el
regente de la casa donde se encuentra, están en la casa 1ª, el
éxito se manifiesta de un modo individual, personal. En la casa
2ª, hay éxito en temas relacionados con el dinero. En la 3ª, en
temas de comunicación y expresión. En la casa 4ª, Fortuna o su
regente, traen éxito en el lugar natal o a través de los
progenitores.
Si Fortuna o su regente están en la casa 5ª, el éxito se
relaciona con la creatividad, el arte o los niños. En la casa 6ª,
hay éxito en temas relacionados con la salud o con el trabajo
cotidiano. En la 7ª será por medio de la relación de pareja o en
temas legales. En la 8ª, a través de la administración del dinero
de otros o en temas relacionados con la sexualidad, la muerte o
los misterios.
Cuando Fortuna o su regente están en la casa 9ª, el éxito llega
por medio de los estudios superiores, la enseñanza, la religión o
la filosofía, también en viajes, idiomas o a través de personas
extranjeras. En la 10ª, la persona tiene gran reconocimiento
público. En la 11ª, el éxito viene a través de amigos o de
proyectos en común con personas cercanas. En la 12ª, por medio
de la psicoterapia o en negocios realizados en soledad.
XVII - Las relaciones
Dentro de todas las preguntas que se pueden hacer en una
consulta astrológica, aquellas que se relacionan con los
sentimientos son indudablemente las que ocupan un lugar más
destacado. Realmente, para una gran mayoría de personas, el
tema prioritario de sus vidas es la mejora de sus relaciones
sentimentales, y toda información que se les proporcione es
bienvenida.
En este capítulo vamos a explorar las casas que nos
proporcionan información acerca de cómo vivimos nuestras
relaciones. Como en capítulos anteriores, te recomiendo que
analices el signo que está en la cúspide de las casas, la posición
que ocupa el regente de la misma y por encima de todo, los
planetas que puedan hallarse en dicha casa. Estos indicadores
son fundamentales a la hora de entender tu vida emocional. Si los
planetas forman aspectos significativos con otros de la Carta, es
conveniente analizarlos, pues estos aspectos proporcionan pistas
acerca de cómo manejar esta energía astral en tu provecho.
Del mismo modo, ten en cuenta que este conocimiento debe
estar en sintonía con lo que hemos analizado en capítulos
anteriores. Si tienes un exceso de fuego o un trígono de agua en
tu Carta, evidentemente esto influirá de un modo definitivo en tu
vida emocional. Las posiciones planetarias en las casas son sólo
la guinda del pastel, pero lo que importa es la tarta completa.

El Sol: Cálida afectividad, expresión emocional. El esposo.


La Luna: Los instintos y costumbres, cariño incondicional. La
madre o la esposa.
Mercurio: Expresión verbal de los afectos.
Venus: Amor receptivo, seducción, ternura. Nuestra parte
femenina.
Marte: Amor pasional, conquista, precocidad en las
relaciones. Nuestra parte masculina.
Júpiter: Generosidad, benevolencia.
Saturno: Fidelidad, represión emocional, amor interesado. El
padre.
Urano: Impacto emocional, amor arriesgado.
Neptuno: Ilusiones, fantasías, amor platónico.
Plutón: Obsesiones, posesividad, sentimientos profundos.
Tabla 12. Significados de los Planetas en el área afectiva
La familia de origen
Quizás suene a tópico manido, pero realmente las relaciones
que tenemos con nuestros padres influyen de un modo radical en
el modo en que vivimos el amor y la construcción de nuestra
propia familia. La práctica nos demuestra que es en el hogar
familiar, en los años de nuestra infancia, donde empezamos a
construir lo que serán nuestras relaciones adultas.
Para conocer la influencia de nuestra familia de origen en
nuestro carácter, debemos estudiar los asuntos relacionados con
la casa cuarta. Esta zona del horóscopo indica cómo percibimos
a nuestros padres, cuál fue nuestra relación con ellos y en qué
medida esas experiencias tienen eco en la vida adulta. Conviene
subrayar aquí que la casa cuarta se refiere a tu percepción
personal y subjetiva de cómo eran tus padres, ya que lo que
estamos analizando es tu Carta Astral, no la de ellos.
Como el hogar paterno es el lugar en el que vivimos en el
período más sensible de nuestra vida, la casa cuarta analiza
también aquellos elementos que asociamos con los conceptos de
seguridad, nutrición y hogar. La familia no es sólo un conjunto de
personas, sino que también es el conjunto de ideas y creencias
que adquirimos en contacto con ella y que llevamos con nosotros,
de una manera o de otra, a lo largo de nuestra vida. Si hemos
crecido en un hogar conflictivo es probable que tengamos
problemas a la hora de sentir seguridad en una relación. Conocer
y aceptar nuestra casa cuarta es un paso trascendental a la hora
de construir relaciones más enriquecedoras, porque como ya
sabes, la consciencia es el primer paso hacia el cambio.
Signo de la Cúspide de la 4ª

Aries. La vida en el hogar paterno puede tener alguna


complicación, ya que sentiste la falta de amor y ternura de tus
padres a edad muy temprana. Emplearás mucha energía en el
hogar buscando mejorar tus sentimientos con respecto a la vida
de familia.
Tauro. El hogar paterno puede ser bastante estable y de
tendencias conservadoras. Los padres crean un ambiente de paz
y su influencia es fuerte y duradera. A lo largo de tu vida
coleccionarás muchas cosas, ya que buscas la seguridad en los
objetos y las posesiones.
Géminis. Las relaciones familiares son muy importantes para
ti y los diálogos en el hogar paterno pudieron dar origen a
muchas reflexiones. En la infancia pudo haber cambios, pero
siempre viviste bajos los efectos de grandes estímulos mentales. La
vida hogareña proporciona muchas novedades y tu casa será el
lugar donde te retires a comunicarte con tus seres queridos.
Cáncer. Tienes un sentido bastante tradicional de la vida
hogareña y por ello la casa es para ti el refugio perfecto. El hogar
paterno quizá no fue un lugar estimulante, pero en tu vida adulta
necesitas construir un hogar a toda costa. Las influencias
familiares son muy fuertes y puedes sentir que mucho de lo que
eres tiene un carácter hereditario.
Leo. El hogar paterno era un lugar animado y lleno de
energía. Probablemente tiendes a ver a tu padre con ojos muy
especiales y sientes orgullo por tus raíces. En tu edad adulta
quieres recrear un hogar feliz y afectivo que sea reflejo de lo que
piensas que fue tu hogar infantil. De todos modos, recuerda que
la memoria es selectiva.
Virgo. Existe la necesidad de trabajar para la familia. El
hogar paterno fue un lugar donde se llevaban a cabo muchas
tareas. Quizás lo peor de tu infancia fue el excesivo sentido
crítico de tus progenitores, que es probable que hayas heredado
en parte. En cualquier caso, las enseñanzas paternas se
centraban en la necesidad de ser laboriosos y honrados.
Libra. El hogar es un lugar donde hallar estabilidad
emocional y belleza. Probablemente los padres se apoyaron
mucho en ti, o te hicieron demasiado dependiente, por lo que
será necesario cortar el cordón umbilical a tiempo. Buscas que tu
hogar sea armonioso y te resientes si hay discusiones o fealdad.
Escorpio. La vida en el hogar paterno pudo estar marcada
por una cierta rebeldía de tu parte. Tienes unos sentimientos muy
fuertes y determinados y puedes sentir que en algún momento de
tu infancia se te hirió. En cualquier caso tienes una gran
necesidad de ponerte a prueba fuera de la protección paternal.
Sagitario. La formación de la mente y el carácter fueron
cuestiones muy importantes en tu infancia. Puedes sentir un gran
orgullo por tu familia, que tendrá alguna relación con el
extranjero. El hogar pudo estar habitado por parientes lejanos. En
tu vida adulta quieres crear un hogar acogedor que sea espejo de
tus múltiples intereses. Quizás debas vivir en otro país.
Capricornio. Hay una gran unión con el hogar paterno
aunque uno o ambos progenitores fueran especialmente distantes.
La vida familiar no fue precisamente alegre, pero tus padres te
enseñaron a ser una persona seria y responsable. Encuentras la
seguridad en el cumplimiento del deber.
Acuario. La vida familiar pudo ser bastante poco habitual y
esta es una de las causas de que sintieras cierta inseguridad en tu
infancia. Probablemente tu pasado te lleve a buscar una vida más
armoniosa en la edad adulta, pero el hogar no siempre será
estable. Necesitas liberarte del pasado familiar y lucharás por
lograrlo.
Piscis. Hay una unión muy emocional a tu familia paterna,
pero probablemente uno de tus progenitores fue una persona que
tuvo problemas de salud, o bien estuvo ausente mucho tiempo. La
familia tenía secretos inconfesables y dolores ocultos. Cuando
madures intentarás crear un hogar donde recargar energías y
poder aislarte del mundo.

Casa del Regente de la 4ª

Regente de la 4ª en la 1ª. Hay una gran influencia de los


factores hereditarios sobre tu carácter y constitución física. No
sólo se trata de la herencia biológica, sino del ambiente del
hogar paterno. El origen familiar es muy importante para ti y
puedes encontrar grandes apoyos en tu desarrollo gracias a la
ayuda familiar.
De la 4ª en la 2ª. Los valores están influidos por la tradición
familiar. Existe la posibilidad de recibir alguna herencia. Se
pueden obtener ingresos por trabajos realizados en el hogar.
De la 4ª en la 3ª. Seguramente existió un gran énfasis en la
comunicación entre los miembros del hogar paterno. La forma en
que hablas está muy influida por lo que aprendiste en tu casa. Los
hermanos o primos tienen un papel importante en tu desarrollo y
en las vivencias del hogar. Pudo haber muchos cambios de
residencia.
De la 4ª en la 4ª. La unión al hogar paterno es muy fuerte y
su influencia en tu carácter es determinante. El signo de la cúspide
y su regente serán muy importantes a la hora de establecer cuál
ha sido esta influencia y cómo la has vivido en la edad adulta.
Buscas un hogar y por ello sientes la necesidad de tener algún
tipo de propiedad.
De la 4ª en la 5ª. La vida familiar fue serena y los niños son
muy importantes en el hogar. En tu vida adulta intentas vivir el
amor dentro del hogar y será este lugar donde busques la
diversión y el reposo. Puedes dedicar mucho tiempo a decorar el
hogar o a realizar actividades artísticas en él.
De la 4ª en la 6ª. Probablemente trabajes en el hogar o
dediques mucho tiempo a su cuidado y limpieza. Tu educación
estuvo dirigida a que te formaras como una persona laboriosa y
ordenada. Te enseñaron a ser servicial y en la edad adulta
puedes tener dificultades para exigir tu salario.
De la 4ª en la 7ª. La seguridad personal se alcanzará a
través de la unión de pareja. La elección del cónyuge puede
afectar a la relación con los padres, o bien estar influida por
ellos, pero no será indiferente a la familia paterna.
De la 4ª en la 8ª. Sin duda, eres una persona muy
reservada. Los asuntos de la familia paterna son un secreto que
debe guardarse celosamente y esta es una costumbre que puedes
continuar en tu vida adulta. Algún fallecimiento en tu edad más
temprana puede causar gran efecto en tu carácter.
De la 4ª en la 9ª. En tu familia puede haber personas de
origen extranjero, o quizá interesadas en cuestiones de alcance
filosófico o espiritual. Encuentras la seguridad en los estudios y
por esta razón puedes prolongarlos durante mucho tiempo. Es
probable que en algún momento debas vivir en otro país.
De la 4ª en la 10ª. La familia tiene una profunda influencia
en tu ascensión social o profesional. Tu padre pudo ser una
persona muy exigente o incluso autoritaria. Como consecuencia,
es probable que desarrolles algún tipo de rebeldía en tu vida
adulta. Puedes desarrollar tu profesión en el hogar.
De la 4ª en la 11ª. La parentela puede ser muy amplia y
ramificada, lo que hace que el sentimiento de familia se diluya en
medio de múltiples relaciones. Los amigos eran bien recibidos en
el hogar paterno y puedes sentir que tus conocidos son tu
auténtica familia.
De la 4ª en la 12ª. Existe en ti una gran fuerza interior que
proviene de una infancia bastante compleja. Alguno de tus padres
pudo estar ausente o quizás era enfermo o alcohólico. Quizás te
cuesta entender a este progenitor, pero debes hacer el esfuerzo
de analizar tu relación con él porque es muy importante para ti.

Planetas en la Casa 4ª

Sol. La unión a tus padres o al ambiente que rodea a la


familia paterna es muy intenso. Hay una gran necesidad de
autoprotección y quizás en tu vida adulta sientes la necesidad de
construir un hogar estable al que poder volver a descansar. Esta
necesidad de autoprotección se puede extender a muchas otras
áreas en tus relaciones. La necesidad de crear una familia es
fuerte, pero ten en cuenta que la familia no es siempre el refugio
ideal.
Luna. Hay una fuerte unión al hogar, y por extensión a la
familia paterna, e incluso a la propia patria. Esta unión puede
estar personalizada en uno de tus progenitores, que muy
probablemente sea tu madre. Probablemente la relación con ella
no fue ideal, pero su presencia en tu vida es muy fuerte. Analízala
y descubrirás el origen de muchos de tus comportamientos.
Mercurio. Sientes un gran interés por tus antepasados y
quizás emprendas en algún momento una investigación de tipo
genealógico. En el entorno del hogar paterno se debatían muchas
ideas y eso puede dar lugar a que tu mente fuera muy activa
desde temprana edad. Puedes tener un pensamiento algo
conservador y un gran interés por el coleccionismo o las
antigüedades.
Venus. Las relaciones con la familia paterna suelen ser
bastante positivas, ya que el ambiente del hogar era en general
muy cálido. Gozas con las relaciones y te gusta traer al hogar a
las personas queridas. Probablemente en tu familia había un
sentimiento de pertenencia mutua que hacía que los límites
personales fueran poco claros. Si tu personalidad es
individualista, acusarás negativamente esta situación. Pero si te
gusta mezclarte con los demás, recordarás tu infancia como un
tiempo feliz.
Marte. Tu necesidad de seguridad es muy grande. Esto quizá
se deba a que en tus orígenes te faltó la sensación de recibir
protección por parte tu familia y puede dar lugar, en tu vida
adulta, a comportamientos agresivos o defensivos ante los demás.
Debes aprender a separarte emocionalmente de ese progenitor
violento o dominante, perdonándole en tu fuero interno y abrir
paso así a una nueva vida.
Júpiter. Sientes una gran lealtad a tu familia, y
probablemente tu padre fue una persona de amplias miras. Te irá
muy bien en tu lugar de nacimiento, pero necesitarás ampliar
horizontes a partir de ahí.
Saturno. El hogar representa una fuente de
responsabilidades, y desde muy joven puedes sentirlo como una
carga o un límite. Sientes una gran unión con tus padres, aunque
las relaciones no hayan sido buenas en el pasado. Con gran
orgullo por los antepasados, te esfuerzas más que los demás
porque en el fondo de tu corazón tienes un cierto sentimiento de
incapacidad que proviene de tus años de infancia. Aprende a
valorarte más y a volar en libertad.
Urano. En el hogar paterno existía un ambiente poco
corriente y eso puede llevar a unas condiciones de vida
especiales en la vida adulta. Probablemente uno de tus padres era
persona muy original.
Neptuno. Tienes una actitud algo idealista hacia tus padres y
es probable que uno de ellos faltara o que sufriera algún tipo de
enfermedad. Tu relación con él no fue buena y deberías
analizarla con cuidado pues contiene muchas claves de los
conflictos de tu vida adulta.
Plutón. Los problemas de autoridad en el hogar paterno
pueden haber causado muchos conflictos que han dejado huella
en tu carácter. En la familia pueden haberse dado
acontecimientos dolorosos que son la causa de algún
resentimiento. Procura no reproducir los problemas del pasado en
tu vida presente.
En el caso de Marilyn, Saturno en la casa cuarta nos invita a
reflexionar sobre la importancia de la figura paterna en su vida.
Sabemos que no conoció a su padre, y con seguridad esta falta
pudo afectar seriamente a sus relaciones con los hombres. El
regente de la cuarta en la duodécima puede ser la señal de ese
padre ausente, oculto, que quizá buscó inconscientemente a
través de sus fallidos matrimonios. Escorpio en la cúspide de esta
casa indica una fuerte herida en su vivencia de la familia, y su
regente Plutón señala la necesidad de hacer cambios, de ir hasta
el fondo para conocer todas las claves a través de la
psicoterapia.
Las amistades y las relaciones
sociales
La casa once ofrece información acerca del ámbito social en
el que nos movemos habitualmente. Indica relaciones en las que
no existen lazos emocionales profundos y por tanto, es el lugar
donde podemos analizar las amistades y el tipo de trato que
tenemos con ellas. Para algunas personas, la amistad tiene un
carácter más distante, incluso hasta el punto de carecer de
amigos íntimos. Para otras, en cambio, las relaciones amistosas se
confunden fácilmente con otros sentimientos como el amor o la
pasión. Entre ambos extremos existe un amplio terreno que
podemos explorar a través del análisis de nuestra casa undécima.

Signo de la Cúspide de la 11ª

Aries. Puedes ejercer una fuerte influencia en tus amigos,


ocupando posiciones de liderazgo en los grupos en los que te
encuentres. Tu problema con los amigos es que te falta algo más
de diplomacia. Tiendes a entrometerte en toda clase de disputas y
tienes bastante ambición, lo que puede complicar bastante las
relaciones amistosas.
Tauro. Si surge algún problema con tus amistades, puede ser
debido al hecho de que actúas de manera posesiva con ellas. En
todo caso, las relaciones se pueden desarrollar de un modo
tranquilo y positivo. Puedes desarrollar sólidos proyectos en
común con tus amigos.
Géminis. Compartes muchas horas de diálogo con tus
amistades. Tu sentido del humor puede ser una llave que te abra
muchas puertas y nuevas relaciones. Los amigos aportan ideas,
pero tu relación con ellos puede ser algo inestable.
Cáncer. Los amigos de la infancia pueden seguir teniendo un
importante papel en tu vida adulta. El lugar de reunión con ellos
es el hogar y por eso prefieres las reuniones íntimas. Puedes
derrochar mucha energía protegiendo y cuidando a tus
conocidos.
Leo. Te gusta rodearte de personas brillantes y de hecho, te
gusta sentir orgullo de tus amigos y sabes mantener la lealtad
hacia ellos. Quieres gustar a los demás y eres una persona
amistosa, pero te puede dominar la vanidad en tus relaciones
sociales.
Virgo. Las amistades pueden surgir en el ámbito del trabajo y
allí se pueden desarrollar muchos proyectos prácticos. Pero te
costará algo más llegar a la intimidad emocional con los amigos.
Tienes una cierta timidez que impide expresiones sociales más
profundas.
Libra. Puedes tener proyectos muy importantes en común con
tus amigos. Quizás una asociación de tipo comercial, o incluso
puede que tu pareja sea una persona con la que previamente
hayas tenido una relación de carácter amistoso. Tienes cierta
tendencia a depender demasiado de la opinión de los amigos.
Escorpio. Sabes actuar con firmeza y determinación con tus
amigos, pero esa profundidad que buscas en los demás no la vas
a encontrar con facilidad. Puedes ser muy exigente con los demás
y deberías aprender más tolerancia. Actúas con una seguridad
que impresiona a todos, pero eres fiel a los que te demuestran
verdadera amistad.
Sagitario. Puedes hacer amistad con personas que vivan en
lugares lejanos o que manifiesten un gran interés por cuestiones
intelectuales. Quizás tus amigos viajen lejos pero te mantendrás
en contacto con ellos. Los viajes en compañía de los amigos son
altamente recomendables.
Capricornio. Quizás no tengas muchos amigos, pero los
tuyos son bastante provechosos para ti. Puedes tener relación con
personas de edad muy diferente a la tuya, pero ellos te ayudarán
en tu ascensión social.
Acuario. Las amistades son muy importantes para ti y por
esta razón tienes mucha iniciativa a la hora de conocer gente
nueva. Las relaciones pueden tener un carácter humanitario o
altruista de carácter muy positivo. Puedes ser muy popular en
sociedad, pero te gusta hacer las cosas a tu manera.
Piscis. Puedes tener amigos con ciertas facultades psíquicas,
pero también puedes sufrir el engaño por parte de personas con
pocos escrúpulos. Actúas con gran generosidad, pero no seas tan
sensible a desprecios reales o imaginarios por su parte. El diálogo
sincero es muy importante con esta posición.

Casa del Regente de la 11ª

Regente de la 11ª en la 1ª. Eres una persona bastante


sociable, pero tiendes a ver a tus amigos como una prolongación
de tu propia personalidad. En realidad, ellos influyen en ti más de
lo que piensas y de la naturaleza del planeta regente depende el
tipo de influencia. Las amistades son duraderas y pueden ayudar
a afrontar proyectos personales de largo alcance.
De la 11ª en la 2ª. Los amigos pueden ser una buena
fuente de ingresos y es probable que haya negocios en común.
Puedes ganarte la vida trabajando en una gran empresa,
rodeado de multitud de compañeros. Pero también necesitas
compartir valores éticos con tus amistades.
De la 11ª en la 3ª. Las amistades pueden surgir en el
ámbito más inmediato, entre vecinos, hermanos o primos. Serán
personas que verás a diario y quizá se dé la oportunidad de
realizar viajes o estudios en compañía, lo que será bien
aprovechado. El intercambio verbal o epistolar con los amigos
será importante.
De la 11ª en la 4ª. Los amigos pueden pasar mucho tiempo
en el hogar y es probable que tengan una estrecha relación con
la familia. Existe un sentimiento de familiaridad con las amistades
y puede existir una relación de mutua camaradería y cariñosos
cuidados entre ellos y tú. Puedes tener amistad con personas de
edad muy diferente a la tuya. En todo caso, tus amistades durarán
toda la vida.
De la 11ª en la 5ª. El amor y la amistad se mezclan
fácilmente en tu vida. Te gusta flirtear con tus conocidos o puede
que sean ellos los que intenten acercarse más a ti. Lo cierto es que
la confusión de sentimientos puede existir. Los hijos también
pueden convertirse en grandes amigos. En cualquier caso, te
gusta disfrutar de los placeres de la vida en compañía de tus
amistades y no existirán conflictos si todos están de acuerdo con
las reglas del juego.
De la 11ª en la 6ª. Te gusta dar mucho a tus amigos y
puedes llegar a actuar de un modo verdaderamente abnegado
con ellos. En el trabajo crearás fuertes lazos sociales, o quizá
desees compartir tareas con aquellos que aprecias. El entorno
laboral puede ser muy fructífero bajo estas condiciones.
De la 11ª en la 7ª. Tu pareja puede ser un antiguo amigo,
y sin duda te gustará sentir que tus relaciones conyugales se
basan en un profundo sentido de la amistad. Puedes asociarte
provechosamente con algún amigo, así que la camaradería se
mezcla ventajosamente con el interés. Sabes hacer sentir
importantes a tus amigos y esa es una gran virtud.
De la 11ª en la 8ª. Los amigos te pueden ayudar mucho en
el plano económico, incluso hasta el punto de recibir dinero o
legados que te permitan vivir cómodamente. Necesitas establecer
un vínculo muy profundo con tus amigos y sin duda compartirás
con ellos mucho más de lo que es normal, incluso en el plano
íntimo. La amistad no es algo que te deje indiferente ya que tiene
un enorme sentido para ti.
De la 11ª en la 9ª. Puedes compartir grandes viajes con tus
amigos, o bien realizar estudios en común. Para ti la amistad es,
por encima de todo, un intercambio intelectual, aunque tiendes a
relacionarte con personas que comparten tus puntos de vista.
Puedes hacer amistad con personas lejanas y mantenerla a través
del contacto epistolar.
De la 11ª en la 10ª. Los amigos te apoyarán en tu
ascensión laboral, por lo que puedes esperar que ésta se dé sin
dificultad. De hecho, sueles buscar como amigos a personas bien
situadas, que sean útiles a tus fines. Aparte de amistades
interesadas, será bueno que cultives otro tipo de relaciones más
emocionales. Sin duda harás muchos amigos en tu entorno de
trabajo.
De la 11ª en la 11ª. La amistad es fundamental para ti, y
de hecho eres una persona que no sabe vivir en soledad. Te
identificas mucho con las personas que aprecias. Frecuentas todo
tipo de sociedades, donde te sientes como en casa, y puedes
cooperar con éxito en tareas benéficas. Puedes llevar a cabo
muchos proyectos con los amigos.
De la 11ª en la 12ª. Tienes cierta dificultad a la hora de
escoger a tus amigos, pues pueden ser personas problemáticas.
No eres la persona más sociable del mundo, pero esto se debe a
que de vez en cuando necesitas tiempo para estar en soledad.
Intenta conjugar soledad y compañía.

Planetas en la Casa 11ª

Sol. Eres una persona muy sociable, con gran deseo de


conocer gente, de trabar constantemente nuevas amistades.
Quizá en el fondo de tu corazón sientes una cierta soledad, pero
como tienes buenas cualidades para el trato con otras personas,
debes aprovechar esta virtud. Tus cualidades de liderazgo son
muy positivas para todos.
Luna. Tienes una fuerte tendencia a asociarte con otras
personas. En los grupos de amigos tiendes a comportarte de una
manera protectora con los demás. En realidad, tus amigos son
como una extensión de tu propia familia, así que tendrás la
necesidad de formar una apretada piña con ellos.
Mercurio. Te gusta compartir ideas con tus amigos, y por eso
en algún momento puedes participar con placer en la
organización de tertulias o reuniones sociales. Tu comportamiento
hacia los amigos es más mental que emocional, pero no por ello
el valor de tu amistad es menos agradecido. Lo más importante
para ti en este terreno es poder comunicarte con muchas personas
sin que los prejuicios creen ninguna barrea para el diálogo.
Venus. Las relaciones con los amigos suelen ser
especialmente agradables. Harás muchas amistades entre
personas del sexo opuesto, y en algunos casos puede ser difícil
separar donde termina la camaradería y dónde comienza el
juego amoroso. En cualquier caso, como eres una persona
especialmente cariñosa con los demás, ganarás muchos aliados
para cualquier causa que te propongas.
Marte. Te gusta ejercer el liderazgo en los grupos de
personas a los que pertenezcas, pero si actúas con demasiada
agresividad, o con un nivel de exigencia muy grande, puedes
dinamitar cualquier reunión. Actúas con gran energía con tus
amistades y ellos deberán ser también personas enérgicas para
aguantar tu ritmo.
Júpiter. Tienes una gran capacidad para unirte a grupos y
hacerlos funcionar. Tu intuición te ayudará a guiar a tus amigos.
Como eres sociable y benevolente, puedes esperar lo mejor de
ellos.
Saturno. Puedes tener muchos amigos de mayor edad, pero
con tu reserva natural es difícil intimar con los demás. Tus
inseguridades internas se resuelven con una gran laboriosidad.
Sabes ser leal con tus amigos.
Urano. Tus amigos pueden ser personas bastante originales y
por eso tu vida puede estar animada por objetivos muy
especiales. Te resulta fácil conocer gente, pero te cuesta lograr
una mayor profundidad emocional con los amigos. En todo caso
te gusta mucho rodearte de personas diversas e interesantes.
Neptuno. Los amigos pueden abusar de ti con cierta
facilidad, ya que tienes un comportamiento demasiado
bondadoso con todos. Sabes actuar con generosidad pero
también puedes resentirte y seguir una conducta totalmente
antisocial. Las relaciones amistosas no son claras y pueden
confundirse con otros sentimientos.
Plutón. Tus amigos son importantes para ti, pero deberás
escoger bien a las personas de tu entorno ya que pueden darte
problemas. Puedes elegir la soledad en algún momento de tu
vida, y sin duda aprenderás mucho de ella.
Seguramente Marilyn fue una persona bastante acogedora
con sus amistades, como señala la presencia de su Sol en la casa
once. Las amistades tuvieron un efecto benéfico en el desarrollo
de su profesión y la impulsaron a buscar nuevas vías de expresión
en su oficio (regente de la once en la diez con Géminis en la
cúspide de la once). En su caso, las relaciones amistosas fueron
realmente positivas.
El amor y la sexualidad
La casa quinta, opuesta a la undécima, representa las
relaciones íntimas, es decir, el amor y la atracción que surge entre
dos personas. Las relaciones sentimentales pueden tener un
aspecto puramente emocional, pero también suelen derivar hacia
el plano físico. Uno de los resultados de esta atracción es el sexo
y las relaciones íntimas.
A la hora de hablar de sexo, hay que hacer una distinción
entre el significado de la casa quinta y la octava. Ambas hablan
de la sexualidad, pero desde una perspectiva diferente. La casa
cinco indica relaciones placenteras, el galanteo y los juegos
eróticos. Es una casa lúdica y muy personal, que depende en
gran medida de los propios sentimientos. La casa ocho, en
cambio, se refiere casi exclusivamente al orgasmo y habla de
cómo la actividad sexual puede transformar la conciencia. Los
sentimientos asociados a la casa octava son profundos y difíciles
de racionalizar, en ocasiones no están unidos con el placer y
dependen en gran medida del estímulo que recibimos de la otra
persona.
Por extensión, la casa cinco es la zona donde puedes
encontrar información sobre cuestiones derivadas de la actividad
sexual, como el embarazo, el parto y los hijos. Si quieres estudiar
tu relación con tus hijos, este es el lugar para analizarla. Por
último, hay que indicar que la quinta es también la casa del
placer en su sentido más amplio, sea el juego o la diversión.

Signo de la Cúspide de la 5ª
Aries. Actúas con gran entusiasmo en el amor. A la hora de
iniciar una relación te mueves con rapidez e ilusión. Quizás te
falta algo más de persistencia en las relaciones, pero no cabe
duda de que disfrutas plenamente del placer y la emoción del
amor. Tus relaciones con los hijos son estimulantes, pero te falta la
paciencia que es imprescindible para tratar con niños pequeños.
Tauro. Eres lo que se dice una persona enamoradiza. Te
gusta disfrutar la sensualidad del amor y saborearlo, literalmente,
con los cinco sentidos. Te costará empezar una relación, pero
luego persistes en ella y soportas con facilidad cualquier oleaje
del destino. Puedes actuar con cierta posesividad hacia el ser
amado. Con los hijos eres paciente y te gustará educarlos en
contacto con la naturaleza.
Géminis. En el amor eres mutable y necesitas mucha
variedad para poder ser feliz. Si no estás saltando de una
relación a otra, será porque la persona amada te ofrece la
nutrición intelectual que para ti es imprescindible en una pareja.
Te gusta hablar del amor y puedes escribir hermosas cartas
expresando tus sentimientos. Con los hijos eres dialogante y
estimulante. La relación con ellos será más intelectual que
emocional.
Cáncer. Puedes ser algo mudable en tus sentimientos y esto
desconcertará a tus amores, ya que las causas de tus cambios son
profundas y tampoco te esfuerzas en explicarlas. Puedes ser muy
protector con tus seres queridos, sobre todo con los hijos, a
quienes te costará dejar marchar. Para ti, el amor es fecundo en
todos los sentidos, tanto en lo biológico como en lo creativo.
Leo. Te entregas al amor con ardor y generosidad, pero
también con un gran orgullo. Para ti, el amor es, en primer lugar,
amor propio. Luego te gusta presumir de tus conquistas, pero no
lo haces por herir a otras personas menos afortunadas, sino como
un medio de recibir alabanzas y poder creer que de verdad tienes
tanta suerte. Eres fiel en tus relaciones siempre que te dejen al
mando. Sabes ser brillante con tus hijos y esperas mucho de ellos.
Virgo. Tiendes a la timidez en el amor, y aunque puedes
establecer alguna relación con personas de tu entorno laboral, te
costará abrirte a una pasión sincera. Quizá tu problema es que
analizas demasiado los sentimientos, tanto propios como ajenos,
y eso limita mucho la expresión más directa de las emociones.
Enseñas a tus hijos a ser personas trabajadoras y cuidadosas,
pero no olvides darles más amor incondicional. No les critiques
tanto.
Libra. Con esta configuración, las aventuras sentimentales
terminan con frecuencia en relaciones estables. Dependes mucho
de los sentimientos de tu pareja y te gusta disfrutar de los placeres
más elevados del amor. Las relaciones son muy importantes en tu
vida. Buscas la equidad en el trato con tus hijos y quieres que
crezcan siendo personas amables, pacíficas y de comportamiento
elegante.
Escorpio. Te interesa mucho el sexo y puedes vivir algunas
relaciones cuya base sea casi exclusivamente sexual. En el amor
actúas con mucha determinación, y esto puede llegar a ser
agobiante para tu pareja. Ten cuidado con los celos, pues pueden
hacerte mucho daño. Sabes amar profunda y apasionadamente, y
sin duda dejas huella en las personas que amas. Con tus hijos
puedes ser algo exigente. Dales algo más de libertad.
Sagitario. Tienes un comportamiento optimista y positivo en
tus relaciones amorosas. Te importa más una buena conversación
que una noche de pasión, pero sin duda disfrutas mucho del sexo.
Tu idealismo en el amor puede llegar a ser peligroso, pero como
ves las relaciones desde el mejor ángulo posible, tiendes a
superar las desilusiones. Puedes encontrar el amor en el transcurso
de un viaje, o con una persona extranjera. Te atraen los
intelectuales y quieres que tus hijos sean también personas de
mente amplia.
Capricornio. Puedes sufrir en el amor por causa de una
cierta timidez. Las relaciones sirven para alcanzar propósitos de
carácter profesional o económico, pero no descuides las
emociones. Quizás sientas atracción por personas de mayor edad
o con un estatus social o laboral superior al tuyo. Eres fiel y
esperas que tus hijos sean personas responsables y ambiciosas.
No olvides que ellos necesitan también mucho amor.
Acuario. Varias veces a lo largo de tu vida, el amor y la
amistad se confundirán. Probablemente esto se debe a que
tiendes a vivir amores muy intelectualizados o bien platónicos.
Pero las necesidades sexuales están ahí y te obligarán a tomar
partido entre la amistad y el amor. Te gusta explorar nuevos tipos
de relación y necesitas estar con personas que estimulen tu mente,
no sólo tu cuerpo. Tus hijos son muy importantes y te gustará
enseñarles, respetando su personalidad.
Piscis. Eres la persona más romántica del mundo, o eso crees.
Ciertamente eres idealista y puedes tener relaciones de carácter
platónico con facilidad. Quizá en algún momento debas vivir
alguna relación secreta, o ames a alguien que está lejos o
enfermo. El amor te exigirá sacrificios. Te preocupan mucho tus
hijos, pero te cuesta entender su personalidad de un modo
objetivo. Intenta al menos que sean personas honradas y de
carácter abierto.

Casa del Regente de la 5ª


Regente de la 5ª en la 1ª. Tiendes a ver tus relaciones
amorosas como una expresión de tu propio yo. Del número y
profundidad de tus conquistas depende tu autoestima. Algunas
personas te pueden acusar de ser una persona demasiado
egocéntrica y quizás no les falte razón. Lo cierto es que no
soportas la soledad porque necesitas mucho a los demás. En el
plano íntimo te gusta recibir placer antes que darlo. Ves a tus
hijos como una prolongación de tu personalidad.
De la 5ª en la 2ª. A la hora de amar tienes muy en cuenta
tus valores morales, pues no concibes una relación que vaya en
contra de éstos. Aun así, las relaciones pueden ser bastante
provechosas en el plano material, ya que puedes unirte a
personas de gran generosidad (si el regente así lo indica). Tu
autoestima está en estrecha relación con los amores que vivas. Te
preocupa mucho que tus hijos sepan ganarse la vida y que sean
capaces de formarse un sistema de valores claro.
De la 5ª en la 3ª. Puedes correr bastantes aventuras
sentimentales, sobre todo en el transcurso de viajes. Los cambios
son para ti más comunes de lo habitual y eso puede sorprender a
alguna de tus conquistas. Te gusta compartir intereses intelectuales
con tu pareja y esperas de ella que te ofrezca variedad tanto en
el plano mental como en el sexual. Te gusta mantener una buena
comunicación con tus hijos intentando ser un amigo más que un
progenitor.
De la 5ª en la 4ª. El hogar familiar es un buen lugar para
expresar los sentimientos más íntimos. Tus relaciones estarán muy
relacionadas con la familia paterna, o bien ésta exigirá dar su
aprobación. Puedes enamorarte de personas de edad diferente a
la tuya. Las relaciones tendrán un trasfondo emocional muy
intenso, llenas de mutuos cuidados. En tu pareja pareces buscar
más la protección que la pasión. Cuidarás mucho a tus hijos,
quizás demasiado.
De la 5ª en la 5ª. El planeta regente es muy importante a la
hora de analizar esta posición. El amor será fundamental en tu
vida, pero su naturaleza y resultados dependen del regente.
Puedes tener mucha fortuna en el amor y mezclarás las relaciones
con una fecunda vida creativa. Los niños serán muy importantes
para ti y quizá sientas que son los que de verdad dan sentido a tu
existencia.
De la 5ª en la 6ª. Sientes un gran cariño por el trabajo y
quizá tu tarea sea tu verdadero amor. Puedes conocer a personas
atractivas en el mundo laboral, o bien puedes tener relaciones
íntimas con compañeros o subordinados. Tendrás que valorar las
consecuencias de estos actos. Los excesos amorosos pueden
causar problemas de salud así que sé prudente y toma
precauciones. Te gusta que tus hijos sean personas laboriosas y
ordenadas, pero cuida bien su salud y su alimentación.
De la 5ª en la 7ª. El matrimonio es la consecuencia natural
de un intenso romance. Deseas que tu pareja sea romántica y
emotiva, y probablemente lo consigas porque lo que tú deseas es
vivir una eterna luna de miel. Los hijos pueden servir para unir a
la pareja, pero en caso de separación auguran batallas
judiciales. Eres demasiado exigente y al tiempo muy vulnerable
con respecto a tu pareja.
De la 5ª en la 8ª. La vida sexual es muy importante para ti
y puede estar aderezada con prácticas amorosas poco usuales.
Puedes recibir dinero o una herencia de una persona amada,
pero ten cuidado en cómo te gastas esos bienes, pues pueden
durar muy poco en tus manos. Te preocupas mucho por tus hijos y
su porvenir, pero debes aprender a tener más confianza en ellos.
De la 5ª en la 9ª. El amor puede surgir en el transcurso de
un largo viaje y puedes sentir gran atracción por los extranjeros.
Necesitas compartir ideas con tus seres amados y sentirás una
gran atracción por las personas de carácter filosófico. Te
preocupa mucho la educación de tus hijos y esperas que lleguen
a lo más alto en sus estudios.
De la 5ª en la 10ª. Puedes amar a personas que ejerzan
sobre ti una protección muy intensa. De hecho, te atraen aquellos
que están un escalón por encima de ti en el plano social o
económico. Quizá tu pareja sea de mayor edad. Las relaciones
sentimentales pueden ejercer una profunda influencia sobre el
desarrollo de la profesión. Tus hijos pueden ocupar posiciones
sociales importantes.
De la 5ª en la 11ª. Tiendes a mezclar el amor con la
amistad y puedes sublimar tus instintos afectivos por medio de
relaciones más intelectuales. Actúas con gran generosidad hacia
los amigos y ellos pueden devolverte los favores en un plano más
emocional. Tus hijos pueden ser personas muy populares y a ti te
preocupa que aprendan a ser sociables.
De la 5ª en la 12ª. Tus relaciones amorosas pueden tener
un cariz muy complejo. Puedes amar en secreto, o bien puedes
dejarte llevar por múltiples fantasías que nunca se cumplen.
Disfrutas con la imaginación y puedes buscar la soledad si lo que
te ofrece el mundo no se adapta a tus elevadas expectativas. Tu
romanticismo es muy alto y podrías llegar a ser un amante en la
sombra, esperando en vano formalizar tus relaciones. Los hijos
pueden causar algunos disgustos, o bien pueden estar lejos de ti.

Planetas en la Casa 5ª
Sol. Sabes ser popular y puedes encontrar una gran felicidad
a través del amor y el sexo. En realidad tienes bastante atractivo
con las personas del sexo opuesto y podrías tener muchas
aventuras si te lo propusieras. Tu principal problema es que eres
demasiado autoindulgente, así que hagas lo que hagas en tus
relaciones, siempre encontrarás una justificación para tus actos.
Emocionalmente actúas con calidez y magnetismo, pero aprende
a ser más estable en tus sentimientos.
Luna. Tus emociones son bastante intensas y expresas con
facilidad sentimientos o ideas románticas. Puedes desarrollar
mucho encanto y creatividad, ya que para vivir necesitas mucho
amor. Tiendes a vivir tus relaciones de un modo muy protector.
Esta posición augura una buena paternidad o maternidad, sobre
todo en los primeros años de tus hijos. Cuando se hagan mayores
te costará dejarles partir, pero así es la vida y debes aceptarlo.
Mercurio. Tu pensamiento es muy creativo y sabes hacer
coloristas exposiciones de tus ideas, que sin duda sorprenderán a
los demás. Esto se refleja claramente en tus relaciones
sentimentales, ya que no buscas sólo compartir emociones, sino
que también necesitas que tus conceptos sean escuchados. El
placer del amor es importante para ti, pero necesitas expresarlo
de un modo verbal y eso te puede distraer en algunas ocasiones
del verdadero disfrute de los sentidos.
Venus. Esta es una posición que promete muchas
oportunidades sentimentales. Las personas del sexo opuesto
pueden sentir mucha atracción por ti, y a poco que quieras
flirtear, conseguirás hacer conquistas. Te gusta seducir y sabes ser
una persona cariñosa y sociable, pero tu búsqueda incansable de
los placeres requiere también de algo de moderación. Busca
relaciones más estables y al final serás mucho más feliz.
Marte. El amor tiene para ti un componente sexual muy
importante, pero no por ello dejas a un lado el romanticismo y
cierto valor a la hora de aproximarte a las personas que deseas.
Puedes actuar de forma muy impulsiva en tus relaciones
sentimentales pero no cabe duda de que tu ardor erótico puede
servir de bálsamo a algunos conflictos. Procura resolver los
problemas por medio de la palabra, no de la violencia.
Júpiter. En el amor te gusta hacerlo todo a lo grande y por
esta razón, porque no aceptas los límites, puedes vivir pasiones
que otros envidiarían. A la hora de afrontar las relaciones actúas
con vigor y derroche, siendo muy sensual y actuando en
ocasiones de un modo protector.
Saturno. Te atraen las personas con un enfoque serio de la
vida, pero tu propia timidez puede hacer difíciles las relaciones.
Hay algunas inhibiciones eróticas que crearán problemas en el
amor. Por otro lado, no cabe duda de que eres una persona leal
y consecuente con tus sentimientos.
Urano. Puedes vivir experiencias muy peculiares en el amor.
Conocer a personas extrañas o de personalidad brillante es algo
que te excita, pero que no augura estabilidad en las relaciones.
Te gustan las aventuras amorosas, la seducción de lo exótico,
pero tiendes a distanciarte con demasiada facilidad ante los
primeros problemas.
Neptuno. Tiendes a amar de un modo profundamente
idealista y romántico y por esta razón podrás vivir amores
platónicos. Puedes querer a una persona que no es libre, o que
está lejos, y disfrutar con esas sensaciones. Lógicamente, hay un
cierto dolor asociado a estas relaciones.
Plutón. La sexualidad es muy importante en tus relaciones
sentimentales y puedes vivirla con una profundidad y compromiso
que no son habituales. Te arriesgas en el amor y sabes atraer a
personas especiales, que te enseñarán mucho aunque te duela. Es
importante que aprendas a huir de la posesividad.
Con Sagitario en la cúspide de su casa quinta, Marilyn debió
ser una persona muy expansiva en el terreno del amor y la
sexualidad. Sus tres esposos comparten algo del espíritu de
Sagitario, un marino que se va a tierras lejanas, un deportista de
éxito y un intelectual de prestigio. En particular, la relación que
mantuvo con Arthur Miller surgió sin duda de la atracción que le
suponía su sabiduría y madurez. La posición del regente de la
quinta en la séptima señala su necesidad de convertir el
enamoramiento en relación estable y a pesar de sus aventuras
sentimentales no podemos dudar de que tenía intenciones serias a
la hora de construir una relación.
La vida de pareja
La necesidad de unirnos a otra persona es un impulso muy
fuerte para la mayoría de nosotros, y aunque viene motivada por
el amor y la atracción (casa quinta del horóscopo), tiene
implicaciones que van más allá de la mera satisfacción
sentimental. Si la casa del ascendente representa nuestra
máscara, que para muchas personas es la expresión externa de
su “yo”, la casa séptima, su opuesta, es el lugar donde vivimos el
“tú” de nuestras vidas. Ese “tú” representa a las personas más
cercanas, y sin duda a la que elegimos como más próxima, es
decir, a nuestra pareja.
En las relaciones heterosexuales podemos experimentar la
expresión externa de nuestra propia dualidad interior. Todos
tenemos una parte masculina y femenina que se reflejan no sólo
en nuestro comportamiento consciente, sino en las personas que
nos atraen y con las que vivimos una relación profunda. La vida
de pareja es por tanto una exteriorización de nuestra vida
interior, sólo que con la incorporación de una segunda persona
que también experimenta esa exteriorización en nosotros. Los
roles masculino y femenino están en continua ebullición y cambio,
ya que a veces la mujer es activa y el hombre pasivo, y viceversa.
Por otro lado, también en las relaciones de tipo homosexual se
produce esta exteriorización ya que incluso en estos casos, los
miembros de la pareja tienden a adoptar diferentes roles que se
complementan mutuamente.
La casa siete representa por tanto a tu pareja y la relación que
mantienes con ella, sea cual sea esa relación. Es también un
indicador del tipo de personas con las que puedes establecer un
vínculo profundo o de aquellas características que te resultan
atractivas en alguien. Si has tenido varias relaciones a lo largo de
tu vida, encontrarás ecos de todas ellas en esta posición astral, y
si aún no has vivido ninguna, sin duda hallarás claves que te
permitirán experimentar tus futuras relaciones de un modo
constructivo.

Signo de la Cúspide de la 7ª

Aries. Puedes tener cierta precipitación a la hora de formar


pareja. La vida matrimonial es muy importante para ti, pero te
falta algo de madurez para saber lo que quieres. Aspiras a tener
una pareja fuerte y decidida, pero cuando la tienes, puede haber
fuertes choques de carácter entre ambos. Eres muy ardiente,
aunque deberías desarrollar algo más de paciencia antes de
embarcarte en cualquier relación.
Tauro. Te gusta unirte a personas estables, de carácter
sensual y amantes de los placeres sencillos. Tu propio carácter es
muy firme y obstinado, y pides la misma lealtad que sabes
entregar. Puedes caer con facilidad en los conflictos de
posesividad y celos, por lo que debes estar alerta. Si tu pareja es
una persona firmemente asentada en el mundo material, la unión
será duradera.
Géminis. Tu pareja debe ser una persona muy liberal, pues
tú eres amante de la libertad. Buscas una unión que sea intelectual
y te atraen las personas que saben expresarse, sea por medio de
la palabra o de la escritura. No tienes prejuicios a la hora de
unirte a alguien y dejas que cada uno viva a su aire. Te gustan los
cambios y novedades en la relación, pero puedes ser inestable en
tus sentimientos.
Cáncer. Los conceptos de pareja y familia son para ti muy
importantes. Cuando te unes a alguien, no lo haces por una
pasión momentánea, sino con el firme propósito de fundar un
hogar y tener descendencia. Necesitas que tu pareja sea tierna y
algo maternal o paternal en su comportamiento. Los sentimientos
románticos son más importantes que el deseo sexual en esta
unión. Por otro lado, necesitas que tu pareja sea aceptada por tu
familia.
Leo. Buscas una pareja que sea orgullosa y fuerte. Esperas
mucha fidelidad por su parte aunque valoras tu libertad. Hay
mucha cabezonería por ambos lados y será necesario desarrollar
más flexibilidad y tolerancia mutua. Te gusta que tu pareja brille y
sea el centro de atención, pero también que se reconozcan tus
méritos por haberla conquistado.
Virgo. Tu pareja puede ser una persona muy laboriosa y
disciplinada. De hecho, es probable que la conozcas en el
trabajo. Esperas de tu cónyuge que tenga los pies en el suelo y
aporte estabilidad a la unión. Sabes actuar con mucha
compasión, pero tu pareja puede ser demasiado crítica contigo y
tú puedes acabar cayendo en el mismo error. Buscas seguridad
en las relaciones y probablemente la encuentres.
Libra. A pesar de que te gusta parecer independiente, lo
cierto es que necesitas unirte a una persona que te comprenda. Te
gusta que tu pareja sea una persona de buenos modales, que
mantenga un buen trato social y que presente una apariencia
agradable. Eres sentimental y tiendes a ser demasiado
dependiente de tu pareja. En contra de lo que parece, cedes
mucho para alcanzar la paz conyugal.
Escorpio. Sabes lo que quieres en tu vida de pareja, y
esperas que tu pareja actúe con la misma determinación. Te
atraen las personas profundas, incluso misteriosas, y el atractivo
sexual es muy importante a la hora de establecer una relación. Si
la vida íntima no funciona, difícilmente funcionará lo demás, así
que tiendes a resolver los conflictos en la cama. Actúas de una
manera muy testaruda en tus relaciones y eso puede dificultar las
cosas si la otra persona es igual de cabezota.
Sagitario. Te atraen las personas exóticas y quizá por ello
busques como pareja a alguien de origen extranjero. Para ti la
relación debe estar fundada más en aspectos intelectuales que
puramente emocionales. Será muy positivo que compartas viajes
con tu pareja, pero sobre todo que haya un fecundo intercambio
de ideas y proyectos. Te costará amar a una sola persona, pero si
te sientes libre en tu relación, ésta puede ser duradera.
Capricornio. Aunque eres una persona sensible, tu pareja
puede ser bastante materialista e interesada en el avance social o
económico. Buscas a una persona madura, que aporte estabilidad
a tus sentimientos, pero luego puedes resentirte por su falta de
emotividad. Te gusta proteger, pero también necesitas sentir en tu
hogar una presencia protectora.
Acuario. Necesitas que tu pareja te estimule intelectualmente,
puesto que tú ya aportas mucho calor emocional a la relación. En
la relación de pareja importa tanto la amistad como el amor, y sin
duda crees que una buena relación amistosa es la base de
cualquier matrimonio. Te gustan las personas originales e incluso
excéntricas, que tengan una personalidad dominante. Pero
cuando convives con alguien, buscas cambiar su carácter,
modelarlo y esto no siempre es posible.
Piscis. A la hora de buscar pareja tú pones la parte práctica y
realista, pero necesitas encontrar a alguien que aporte la dosis
necesaria de idealismo y romanticismo. Puedes unirte a una
persona con problemas, que sea excesivamente imaginativa,
enferma o que pase mucho tiempo lejos de ti. En tu interior hay
unos deseos de redención que pueden ser perjudiciales pues
nadie puede salvar a otra persona si ella no quiere salvarse. Vive
la emoción pero procura que no te ciegue el idealismo.

Casa del Regente de la 7ª

Regente de la 7ª en la 1ª. Tú eres de esa clase de


personas que cambian por completo después del matrimonio. La
influencia de tu pareja sobre tu carácter es muy fuerte y puede
operar grandes cambios en ti, cambios que aceptarás de mejor o
peor grado según sea la naturaleza del planeta regente. En lo
más profundo de tu corazón deseas compartir tu vida con una
persona, aunque quizá te cueste lograrlo. Pero una vez que has
establecido una relación, te sentirás completamente fiel a ella.
De la 7ª en la 2ª. La pareja debe compartir tu sistema de
valores aunque no cabe duda de que en esta unión hay también
un importante trasfondo económico. Puedes ganar mucho dinero
con tu pareja, e incluso sería recomendable compartir trabajo o
realizar inversiones de manera conjunta. En cualquier caso,
alcanzarás el bienestar tras la unión matrimonial.
De la 7ª en la 3ª. La comunicación dentro de la pareja es
fundamental para ti y no podrás ser feliz a menos que haya un
fructífero intercambio intelectual entre ambos. Puedes casarte con
alguien a quien conozcas desde la infancia, una persona con
quien te une una relación más filial que puramente amorosa o
pasional.
De la 7ª en la 4ª. Las relaciones serias son para ti una
forma de alcanzar la seguridad personal por lo que puedes
involucrarte en un matrimonio con alguien de mayor edad o de
más alto rango social. Vives la relación como una prolongación
de tu familia paterna y deseas establecer un hogar donde vivir el
amor. Para ti será fundamental que tu familia acepte a tu pareja.
De la 7ª en la 5ª. Tienes un concepto romántico del
matrimonio y no concibes una relación si no está basada en un
profundo enamoramiento. La pasión sexual es uno de los pilares
de la unión, así como los hijos. Tu pareja puede ser una persona
muy creativa y tú puedes ayudarle mucho a desarrollar sus dones.
De la 7ª en la 6ª. Puedes conocer a tu pareja en el entorno
laboral, y sin duda compartirás con ella muchas tareas comunes.
Hay una cierta tendencia a enfermar al mismo tiempo que tu
pareja, por lo que tendréis que compartir más de una
convalecencia juntos. Para ti la relación se basa en un continuo
trabajo de perfeccionamiento mutuo que permita encontrar un
equilibrio entre ambos. Es una buena idea, pero procura que
haya también más diversión compartida.
De la 7ª en la 7ª. La vida de pareja es muy importante para
ti y su desarrollo dependerá en gran medida de la naturaleza del
regente de la casa. Te identificarás mucho con tu pareja y
necesitas establecer relaciones duraderas y muy significativas. En
general, esta posición augura un feliz matrimonio, aunque para
ello necesitas una aceptación total por parte de tu pareja.
De la 7ª en la 8ª. Tu pareja puede proporcionarte un gran
apoyo financiero y tienes cierta habilidad para obtener lo que
deseas de los demás. Las relaciones sexuales son muy importantes
dentro de la unión y pueden darse prácticas eróticas poco
usuales, pero de profundo significado para ambos.
De la 7ª en la 9ª. A la hora de buscar pareja, te atraen las
personas que pertenecen a otro entorno social, cultural o
religioso. Sientes interés por los extranjeros y puedes formar
pareja con alguien que hayas conocido en el transcurso de un
viaje. Las investigaciones o estudios realizados con tu pareja son
muy provechosos para ambos, y tienden a cimentar la unión. Tu
pareja puede ser fundamental en el desarrollo de tu vida
intelectual o espiritual.
De la 7ª en la 10ª. El matrimonio será muy ventajoso a la
hora de elevar tu posición social o económica. Puedes unirte a
una persona de mayor edad que tú, que te ayudará de forma
inequívoca en tu profesión. Te gusta mirar con orgullo a tu pareja,
que sea una persona de éxito. En gran medida ves reflejada en
ella todas tus aspiraciones.
De la 7ª en la 11ª. La base de tu relación de pareja es la
amistad. Puedes encontrar a tu pareja en tu círculo de amistades,
o bien puedes sentir que la raíz de un buen matrimonio es la
camaradería entre los cónyuges. Tu relación no será
profundamente emocional, sino que estará basada en un
intercambio intelectual. Eres muy independiente y te costará unirte
por lazos demasiado estrechos a otra persona.
De la 7ª en la 12ª. Tu pareja tendrá que aceptar que de
vez en cuando te separes de ella para reponer fuerzas en
soledad. No eres una persona muy dada a las uniones, pero si se
dan necesitarás espacio libre para ti. Las uniones pueden tener un
velo de secretismo o fantasía que no es beneficioso. Procura unirte
a personas que sean libres para amarte como mereces.

Planetas en la Casa 7ª

Sol. La vida en pareja es muy importante para, ti e


independientemente de tus experiencias pasadas, siempre sentirás
que necesitas estar con alguien para ser plenamente feliz. De
hecho es fácil llevarse bien contigo, a menos que el Sol reciba
aspectos muy complicados, así que sabrás convivir con otra
persona. El conflicto puede surgir si te vuelves demasiado
dependiente de tu pareja, por lo que será bueno que aprendas a
ser un poco más independiente.
Luna. Eres muy sensible en tus relaciones. Buscas un
sentimiento de protección mutua con tu cónyuge, y por tanto las
relaciones pueden ser a veces más paternales o maternales que
de pareja. Deberías vigilar tu tendencia a la dependencia
emocional, pues es muy intensa y te deja poca libertad.
Reaccionas positivamente ante las necesidades de la otra
persona, pero cuida que tu pareja no sea demasiado posesiva.
Reclama tu parcela de independencia.
Mercurio. Las relaciones con tu pareja suelen ser bastante
cordiales, ya que están basadas en una plena comunicación entre
ambos. Tienes una visión más mental que sentimental de las
relaciones, lo que no quiere decir que desprecies las emociones.
Simplemente necesitas verbalizar lo que sientes a fin de poderlo
comprender. En algunos casos, esta combinación puede designar
también a alguien que cambia demasiado fácilmente de pareja,
aunque esto debe estar indicado por otros puntos de la Carta.
Venus. La armonía es muy importante en tu vida de pareja y
puedes sacrificar mucho para lograrla. Para ti, la unión
representa la fusión de dos personas en una, lo que puede crear
ciertos conflictos si tu pareja reclama algo más de libertad. Tu
naturaleza es muy cariñosa y seguramente por ello no te faltarán
ocasiones de encontrar el amor.
Marte. Tu fuerte personalidad se demostrará claramente en la
vida de pareja. Puedes tener mucha prisa por iniciar la vida
conyugal, aunque en cuestiones de este tipo las prisas no son
buenas consejeras. Los conflictos de poder en el seno de la unión
pueden ser bastante intensos, así que para ambos es importante
aprender a ceder.
Júpiter. El matrimonio será muy afortunado para ti, pues
representa una situación en la que puedes expandirte y crecer
como persona. Puedes unirte a alguien adinerado, o bien a una
persona con poder o con un comportamiento señorial. Habrá una
gran lealtad entre ambos.
Saturno. Sabes ser fiel en las relaciones, pero el peso de
algunas represiones puede ser muy importante. Quizás sufras
algún gran rechazo en el amor, lo que puede ayudar a que
actúes con precaución. Eres responsable y consecuente, y puedes
construir una relación fructífera con una persona de edad muy
diferente a la tuya.
Urano. Tu pareja puede ser una persona muy especial, o
puedes casarte por un capricho momentáneo. Falta estabilidad en
las relaciones porque eres muy independiente, y porque buscas la
compañía de personas peculiares. Con algo más de cabeza
puedes construir una relación muy emocionante y estable.
Neptuno. Tu romanticismo en las relaciones puede ser
duramente golpeado por la realidad, así que ten cuidado. Debes
aprender a dar sin esperar recompensa, pero eso te cuesta
mucho. Los amores platónicos hacen difícil materializar las
relaciones.
Plutón. Tienes mucho temperamento y esto se aplicará en tus
relaciones de pareja. Los conflictos de poder están a la orden del
día, y es necesario tener paciencia y humildad, cualidades que
no te sobran. Sabes atraer a otras personas gracias a tu
magnetismo, pero debes tener en cuenta que las crisis serán una
faceta importante en cualquier relación. Ellas te ayudarán a crecer
si sabes comprender su significado y exigencias.
Acuario en la cúspide de la casa siete otorgó a Marilyn unas
ideas bastante novedosas sobre cómo conducir sus relaciones.
Esta tendencia le causó muchos problemas con su segundo
marido, Joe DiMaggio. Celoso y de mentalidad anticuada,
DiMaggio no comprendía la carrera de Marilyn y esperaba de
ella que se convirtiera en un ama de casa tradicional. Parece ser
que sus estallidos de celos degeneraron en violencia y sin duda se
trató de una relación conflictiva, como anuncia la presencia del
regente de la séptima en la octava casa.
Los planetas que Marilyn tenía en la casa séptima (la Luna y
Júpiter) forman una pareja que anuncia los temas que ella vivió en
contacto con sus cónyuges. La necesidad de equilibrar lo
masculino y lo femenino, la nutrición y la expresión, son conflictos
que están vigentes en las mujeres de hoy en día. Aunar las
relaciones sentimentales y sus exigencias con los retos de la vida
profesional, con la sana ambición de mejorar laboral y
económicamente, implica valor y unas condiciones sociales
mejores que las actuales. Marilyn debió enfrentar, en peores
condiciones, estos retos que aún están en vigor.
Sin duda, ella era cálida y acogedora en sus relaciones
sentimentales, y las veía como una oportunidad de aprender, de
crecer más como ser humano. Quizá no tuvo suerte a la hora de
escoger sus relaciones, o quizá sus conflictos eran demasiado
profundos como para encontrar una fácil solución. En cualquier
caso, un conocimiento más fiel de sí misma la habría ayudado a
vivir mejor.
XVIII - La mente y el
espíritu
En capítulos anteriores analizamos los contenidos de nuestra
mente consciente e inconsciente, así como las energías que se
manifiestan en uno y otro plano. En este último capítulo no
hablaremos de los contenidos, sino que nos centraremos en el
funcionamiento de esa parte de nuestro ser que configura nuestra
mente y espíritu.
Entre las diversas funciones de la mente destacaremos el uso
de las herramientas de comunicación, la memoria y el
funcionamiento de la mente, tanto en sus niveles cotidianos como
en los reinos trascendentales de la consciencia y la espiritualidad.
Por último, daremos una breve pincelada acerca de las
implicaciones kármicas de tu Carta Astral.
Como en los capítulos anteriores, la información que aquí se
ofrece tiene un carácter genérico, que tendrás que asimilar a tu
propio nivel de conciencia. Evidentemente, no todo el mundo se
interesa por el estudio riguroso de la filosofía o la religión, pero
todos, en un momento u otro de nuestras vidas, nos enfrentamos a
ciertas dudas existenciales. El propósito de la existencia, la
supervivencia del alma tras la muerte del cuerpo físico o la
reencarnación, son cuestiones que pertenecen al reino de lo
trascendente y nadie es totalmente ajeno a ellas.
Te recomiendo que analices estos datos en conjunción con el
resto de la Carta y que prestes especial atención a los aspectos
que los planetas situados en las casas tres, ocho y nueve, formen
con los del resto de la natalidad.
El Sol: Creatividad, ideas optimistas, individualismo.
La Luna: La memoria, emotividad, apegos afectivos.
Mercurio: Expresión del conocimiento, estudios primarios.
Venus: Búsqueda del equilibrio, diplomacia, sentimientos.
Marte: Ideas agresivas, imposición de criterios, discusión.
Júpiter: Interés filosófico, expansión del conocimiento,
estudios superiores.
Saturno: Conceptos conservadores, ideas que persiguen un
resultado práctico.
Urano: Ideas originales, cambios bruscos, interés espiritual.
Neptuno: Fantasía, imaginación, misticismo.
Plutón: Renovación en las ideas, interés por la trascendencia.
Tabla 13. Los planetas y el desarrollo mental
La comunicación y la mente
consciente
En el análisis astrológico, observamos que la mente opera a
varios niveles. Existe un nivel inmediato, que se relaciona con los
contenidos más directamente accesibles y las experiencias
cotidianas de la vida. Es lo que podríamos llamar la “mente
práctica”, la parte de nuestra conciencia que nos permite vivir en
el mundo material. Como en este mundo vivimos rodeados de
personas con las que tenemos que interactuar, este nivel de
conciencia está también íntimamente ligado a nuestra capacidad
de expresión, sea verbal, escrita, o incluso corporal.
La casa número tres es el lugar de la Carta donde podemos
ver reflejadas estas energías. Habla de la mente consciente, de
nuestros actos cotidianos y también puede reflejar relaciones con
personas muy cercanas. La casa tercera indica cómo nos
comunicamos con los demás y qué niveles de comprensión
podemos asumir.

Signo de la Cúspide de la 3ª

Aries. Tu mente es enérgica en su acción y tienes una gran


voluntad de aprender, de seguir estudios básicos. Captas con
rapidez lo esencial de cualquier asunto, pero te cuesta perseverar
en los estudios cuando estos requieren un trabajo prolongado. Los
métodos activos y prácticos de aprendizaje son muy beneficiosos
para ti, ya que la teoría te aburre. Sabes expresarte de una forma
vivaz, pero toleras mal la crítica.
Tauro. Hay cierta lentitud en el aprendizaje y desde luego
tiendes a mantener tus criterios un poco más allá de lo que sería
razonable. Cuando aprendes algo, lo aprendes de verdad y
puedes adquirir grandes conocimientos si éstos se imparten en un
ambiente agradable o en un entorno natural. Tu mente es práctica
y te gustan las ideas que tengan una finalidad concreta
Géminis. Posees una mente muy curiosa, capaz de captar
una gran cantidad de información en muy poco tiempo. Te
gustará aprender deprisa y tienes una gran facilidad de palabra
además de una gran memoria para los hechos recientes. Sabes
ser flexible y tienes una visión fresca y juvenil de los problemas.
Debes aprender a fijar tu atención por más tiempo para así
profundizar en el conocimiento.
Cáncer. Tu mente puede estar bastante orientada hacia el
pasado. Tu razonamiento se basa mucho en la memoria y la
experiencia pasada. Los sentimientos se mezclan fácilmente con
los juicios y por ello tiendes a crear categorías mentales a partir
de emociones como el afecto o el rechazo. Te guías mucho por la
tradición, y al expresarte lo haces de un modo sensible.
Leo. Posees una mente amplia que se engrandece en el
contacto con personas brillantes. Puedes presumir mucho de tus
habilidades intelectuales y verbales, que verdaderamente son
notables. Tu avidez de conocimientos puede llevarte a realizar
todo tipo de estudios. Puedes tener bastante éxito en pedagogía.
Virgo. Tienes una mente bastante racionalista, que busca
soluciones prácticas a los problemas. Con frecuencia pierdes
mucho tiempo en detalles, pero sabes analizar a fondo toda la
información que se te presenta. Aprendes con rapidez y te
comunicas bien. Tu actitud crítica es útil en determinadas tareas,
pero un exceso de detallismo puede ser contraproducente.
Libra. Tienes cierta facilidad de palabra y puedes argumentar
con éxito en cualquier disputa. Pero también es cierto que odias
las discusiones acaloradas y que prefieres las soluciones
diplomáticas. Tu mente se rige por un sentido de la justicia y la
cooperación que te obligan a actuar de un modo honorable ante
cualquier conflicto. Puedes sentir un gran interés por el arte y
tienes capacidad de realizar estudios profundos en este ámbito.
Escorpio. Te gusta observar lo que hacen los demás antes de
dar tu opinión. En ocasiones, conoces tan bien a los otros que si
te hacen daño, puedes herirles con unas pocas palabras. Procura
que tu expresión sea siempre lo más positiva posible y verás cómo
obtienes lo mejor de cada persona. Tu mente es bastante incisiva
y deberías emplearla en la investigación rigurosa de cualquier
tema que te interese. Los temas ocultos te atraen irresistiblemente.
Sagitario. Posees buenas cualidades para la enseñanza, ya
que sabes hacer accesibles los temas más complejos. Sin duda,
debes hacer uso de esta cualidad cualquiera que sea tu
ocupación. Tu mente puede ser muy profunda e interesarse por
temas trascendentes. Probablemente aprendas mucho en soledad,
sin ayuda de nadie o en el transcurso de viajes. Procura leer todo
lo que puedas, porque te enriquecerá mucho, pero aprende a
seleccionar bien lo que lees.
Capricornio. Tienes una mente muy capacitada para los
temas prácticos y puedes desarrollar tu potencial intelectual a
través de tu profesión. Los estudios tienen por finalidad prepararte
para el trabajo, pero en el transcurso de tu vida tendrás que
seguir aprendiendo y profundizando conocimientos. A la hora de
expresarte puedes hacerlo con un estilo seco y algo frío, lo que
viene motivado por una cierta timidez.
Acuario. Tu mente está volcada en el estudio de todo lo
nuevo. Te gusta que los demás te señalen como una persona
original y puedes defender criterios bastante particulares en
diversos temas. Tu motivación a la hora de expresar tus ideas es
muy grande y tienes una fuerte mentalidad colectivista y
progresiva. Tiendes a acumular información de muchas fuentes,
pero procura que tus ideas no se dispersen también en
demasiadas direcciones.
Piscis. Tu mente es bastante sensible y tienes una intuición
más profunda de lo que puede parecer a simple vista. A la hora
de expresarte, lo haces con tacto y puedes escribir con bastante
imaginación. Te atrae la poesía y la música y quizás veas en
estas artes una buena forma de expresarte. Puedes ser algo
inestable en tus criterios y necesitas soledad y silencio para que
tus ideas se pongan en orden.

Casa del Regente de la 3ª

Regente de la 3ª en la 1ª. Tienes una imperiosa


necesidad de expresar tus ideas a los demás y en líneas
generales posees bastante facilidad de palabra. Sin duda te
domina una gran sed de saber y desde edad muy temprana
puedes tener una gran afición por los estudios. Tu mente y tus
ideas son un coto personal, que deseas cultivar a tu manera y
donde no aceptarás muchas intromisiones.
De la 3ª en la 2ª. Puedes ganar bastante dinero gracias a
tu ingenio, y quizás tu forma de expresarte, sea verbalmente o
por escrito, te resulte muy lucrativa. Necesitas expresar tus valores
y en muchas ocasiones sentirás que construyes tus ideas a través
de la palabra, dialogando con otras personas sobre sus creencias
y las tuyas.
De la 3ª en la 3ª. La expresión y el desarrollo mental son
elementos fundamentales para ti y dependen en gran medida de
la naturaleza del planeta regente. Tienes mucha habilidad
comunicativa, hasta el punto de crearte algunos conflictos por tu
incapacidad de callarte a tiempo. Los cambios de residencia son
frecuentes y pueden afectar positivamente a tu actividad
intelectual. Sabrás dar buena salida a tus estudios.
De la 3ª en la 4ª. Tus habilidades verbales y mentales están
muy relacionadas con el hogar paterno, y probablemente fue allí
donde desarrollaste gran parte de lo que sabes. Puedes
emprender estudios históricos bastante productivos. El hogar es un
lugar ideal para escribir y crear.
De la 3ª en la 5ª. Puedes tener buenas cualidades para la
enseñanza infantil, ya que conectas fácilmente con los niños, y
puedes hablar su mismo lenguaje. Te gustará expresar tus
sentimientos de un modo agradable, pero debes controlar cierta
tendencia a la exageración. Puedes dedicar mucho tiempo a la
lectura de obras de entretenimiento o a disfrutar del cine o el
deporte.
De la 3ª en la 6ª. Te gusta hablar de tu trabajo, de la salud
y de las pequeñas ocupaciones cotidianas ya que de hecho estas
cuestiones ocupan mucho espacio en tu mente. Dedicas gran
parte de tus energías al mundo del trabajo y puedes tener buenas
relaciones con tus compañeros. En algún momento quizás sientas
la necesidad de contemplar ideas más elevadas y deberías
hacerlo.
De la 3ª en la 7ª. Las personas de tu entorno inmediato
pueden ejercer una considerable influencia en tus opiniones. Si es
así, evita pedir consejo constantemente y actúa con mayor
decisión. La necesidad de dialogar con la pareja es imperiosa y
probablemente la relación tenga una base intelectual muy
importante, independientemente de los sentimientos que puedan
existir.
De la 3ª en la 8ª. Te atraen los temas relacionados con la
vida ultraterrena y sin duda dedicarás mucho tiempo a discutir tus
creencias con los demás. Los fallecimientos que inevitablemente
ocurren a nuestro alrededor pueden afectar muy profundamente a
tu pensamiento, otorgándote una visión más amplia del sentido de
la existencia. Sientes rechazo por las conversaciones frívolas y
siempre que puedes, buscas hablar de lo que te parece
importante.
De la 3ª en la 9ª. Tu mente está orientada hacia temas
profundos como la religión o la filosofía. Te gustará compartir tus
ideas con personas de pensamiento afín. Tienes una gran
imaginación y puedes ponerla al servicio de la literatura o de la
invención. Puedes llevar una fluida comunicación, sobre todo con
personas extranjeras, y sin duda sentirás atracción por las
lenguas, las creencias y las costumbres de otros pueblos. Tus
viajes serán fructíferos a todos los niveles.
De la 3ª en la 10ª. Tu aprendizaje tiene un objetivo claro,
que es el desarrollo profesional. Puedes desempeñar con éxito
cualquier oficio que se relacione con la comunicación, ya que es
un tema que te tomas muy en serio. Con tu habilidad verbal
puedes persuadir a muchas personas de tus ideas.
De la 3ª en la 11ª. Tienes muchos proyectos de
comunicación y deseas que tu voz llegue a amplios sectores de la
sociedad. Tus amigos son fundamentales a la hora de llevar a
cabo estudios o proyectos. Te comunicas bien dentro de los
grupos y siempre expresas ideas de carácter novedoso.
De la 3ª en la 12ª. Puedes llevar a cabo diversos estudios
en soledad. Para comunicarte, necesitas estar en un segundo
plano, fuera de los focos, pero puedes desarrollar un gran sentido
del humor. Sabes hablar de un modo sensible pero necesitas
reposo para que tu mente descanse.

Planetas en la Casa 3ª

Sol. La comunicación es fundamental para ti y siempre


buscarás brillar a través de la palabra, sea oralmente o por
escrito. Tu necesidad de hablar es casi compulsiva y puede
ayudarte a salir de muchos aprietos, pero también te puede
causar problemas. No estaría de más que de vez en cuando
pensaras lo que vas a decir. Tienes una gran fe en tu mente
consciente y confías en tu habilidad observadora. Te dejas llevar
por la razón, y generalmente aciertas en tus juicios.
Luna. Puedes ser muy variable en tus esfuerzos mentales, por
lo que quizás te costó completar tus estudios, pero tienes dos
virtudes importantes. La primera es que sabes aprender de los
demás solamente con escucharles. La segunda es que tienes
buena memoria. A la hora de expresar tus ideas, lo haces en un
tono dramático y colorista que llama favorablemente la atención.
No te dejes influir tanto por el ambiente.
Mercurio. Tienes una inteligencia despierta y tu capacidad
de razonamiento está siempre bien afinada. Cuando tienes que
tomar una decisión precipitada, lo haces de un modo
sorprendentemente acertado. La razón es que tu mente consciente
está bien alineada con el inconsciente y por eso haces buen uso
de todas tus capacidades. Sabes expresarte muy bien y podrías
dedicarte a algún oficio que requiera capacidad de
comunicación. Procura no caer en la crítica o la racionalización
excesiva. Deja espacio para los sentimientos.
Venus. Sabes expresarte de un modo armonioso y sensible,
lo que será bien apreciado por los demás. En los conflictos,
buscas siempre el acuerdo con los otros y lo harás por medio de
la palabra. Detestas las discusiones y nunca entrarás en disputas.
Tu mente aúna la lógica con la sensibilidad, lo que puede
proporcionarte buenas dotes para la escritura o la expresión
artística.
Marte. A la hora de comunicarte tiendes a la impulsividad, lo
que puede traerte algunos problemas. Te gusta la franqueza y a
veces olvidas que puedes herir la sensibilidad de los demás. No
discutas tanto y busca más puntos de acuerdo. Tu mente es
curiosa y desea profundizar en cualquier tema, pero las prisas no
son buenas consejeras y puedes juzgar demasiado a la ligera.
Cuida los detalles y pon manos a la obra para llevar a cabo tus
ideas.
Júpiter. La inteligencia debe tener para ti una aplicación
práctica. De hecho, puedes desarrollar bastante tus habilidades
mentales básicas, ya que tu cabeza es inquieta y posees un gran
sentido común. Sabes dar respuestas ingeniosas a las preguntas y
puedes mantener una charla animada durante horas. Pero
procura no exagerar tanto cuando hablas. No todo lo bueno es
glorioso, ni todo lo malo infernal. Recuerda que existe el término
medio.
Saturno. Cuando hablas, sueles hacerlo con mucho tacto y
cierta timidez. Sabes expresarte bien, e incluso, a pesar de haber
sufrido algunas carencias, es probable que aprovecharas bien tu
educación primaria a pesar de haber sufrido algunas carencias.
Aunque tengas dudas sobre tu mente, sabes pensar con seriedad
y propósito.
Urano. Tienes una mentalidad científica y original. Tus ideas
pueden ser muy positivas para todos y debes comunicarlas a los
cuatro vientos. Tu mente está muy despierta y se interesa por todo
lo nuevo, pero procura ser más flexible con tus principios.
Neptuno. Tu mente se mueve a través de destellos de
intuición. La imaginación pesa en tu ánimo más que la razón y
eso puede causar cierta vaguedad en los juicios. Te expresas con
emoción y cierto aire romántico.
Plutón. Tienes una rara habilidad, y es que cuando hablas
no dejas a nadie indiferente. Te gusta expresarte, pero muchas
veces lo haces de un modo poco considerado que puede herir a
los demás. Tu mente es original y adelantada a su tiempo, pero
cuida tu equilibrio psicológico, pues puede ser frágil.
Marilyn buscaba comunicarse de un modo equilibrado y
diplomático, como muestra la cúspide de la tercera casa en el
signo de Libra. Los celos de su segundo marido, Joe DiMaggio
debieron dificultar mucho la relación entre ambos, y podemos
suponer que ella intentó poner paz ante sus arranques violentos
por medio de la palabra. Su tercer matrimonio con el intelectual
Arthur Miller parece motivado por la necesidad de encontrar una
persona con quien compartir sus pensamientos más elevados
(regente de la 3ª en la 9ª), que sin duda tenía, pero que en su
ambiente habitual no encontraban su justa correspondencia.
El conocimiento superior
Nuestra mente no opera solamente en los niveles cotidianos de
conciencia, sino que en diversas ocasiones se eleva a zonas
superiores en las que nos interrogamos sobre el significado de la
existencia. Pocas son las personas que construyen un camino
autónomo en esta materia, así que la inmensa mayoría acabamos
por adherirnos, de manera más o menos ortodoxa, a los grandes
sistemas filosóficos, religiosos o espirituales.
Algunas personas se interesan profundamente por estas
cuestiones, mientras que otras viven cómodamente en su pequeño
mundo cotidiano, sin apenas plantearse preguntas de largo
alcance. La Carta Astral refleja claramente nuestro mayor o menor
interés por los temas filosóficos y lo hace básicamente a través de
la casa novena.
Analizando esta casa, su regente y los planetas que puedan
encontrarse en ella, puedes conocer hasta qué punto los
movimientos del espíritu provocan un impacto en tu vida
cotidiana. Los estudios superiores, los viajes a países lejanos, o el
conocimiento de personas con costumbres o ideas diferentes
pueden ser vías para abrir tu conciencia, para que se introduzcan
en ti nuevas ideas e inspiraciones. La casa novena contiene
información vital para todos los viajeros del espíritu.
Como complemento a esta información, te ofrezco una
interpretación de la posición de Quirón en tu Carta Natal, ya que
este planeta está relacionado con ciertos aprendizajes espirituales
de gran importancia.
Signo de la Cúspide de la 9ª

Aries. Tienes unas ideas bastante audaces y sin duda muy


individualistas. Te gusta experimentar y ves tu paso por la vida
como una expresión natural de tu propia mentalidad. Abres los
caminos del pensamiento que otros deben transitar. A la hora de
realizar viajes o investigaciones, tomas decisiones precipitadas.
Odias el dogmatismo y las explicaciones tradicionales.
Tauro. Tu filosofía vital es muy práctica y te gustan las teorías
que puedan desarrollarse en el plano material. Tus principios
morales son fuertes y estables, y tiendes a mantener tu criterio en
cualquier circunstancia. Te atrae la vida sencilla y puedes recibir
grandes dones a través del contacto con la naturaleza.
Géminis. Te interesan las cuestiones espirituales y filosóficas,
pero te acercas a ellas de un modo autodidacta. Puedes expresar
claramente tus ideas y tienes una gran afición por la lectura. Te
gusta razonar todos conceptos por lo que tiendes a buscar
explicaciones lógicas para todo.
Cáncer. Las ideas pueden estar muy influidas por el ambiente
familiar y quizás te descubras reeditando antiguos esquemas en tu
vida presente. Puedes sentir un gran interés por conocimientos del
pasado, historia, biografías o antigüedades. Tu pensamiento es
algo retrógrado o tradicionalista.
Leo. Eres idealista y tienes un sentido de la vida muy optimista
y generoso. Te interesa el pensamiento y quieres brillar a través
de tus ideas. Con orgullo y benevolencia intentas dominar a los
demás a través del ingenio y la expresividad. Nunca aceptas la
derrota por lo que podrás levantarte tras cualquier caída.
Virgo. La religión y la filosofía deben ser analizadas bajo un
enfoque práctico. Si tu filosofía vital te da beneficios en el plano
material, alcanzarás plena satisfacción. Tienes tacto y puedes
actuar de forma diplomática. Los viajes son fundamentales para ti
y pueden traerte oportunidades laborales.
Libra. Te gustan las ideas que sean armoniosas por lo que
defiendes la paz y la justicia en todo momento. Aprecias el buen
gusto y desarrollas conceptos que aúnan lo bello con lo racional.
Puedes llegar a ser muy idealista. Necesitas que tu pareja
comparta tus ideales, pero también puedes dejarte llevar muy
fácilmente por la influencia de otras personas.
Escorpio. Tus inquietudes mentales son incisivas y profundas.
Descubrir el sentido de las cosas es para ti una cuestión cargada
de intensidad emocional, lo que puede dificultar un acercamiento
racional a las ideas. Te interesan los temas metafísicos y puedes
sentir una profunda adhesión a la astrología.
Sagitario. Sientes un gran interés el mundo de las ideas y la
filosofía profunda. Los viajes son para ti una fuente de aventuras y
conocimientos que no debes desaprovechar. Las lenguas
extranjeras, así como sus culturas o religiones te atraen
enormemente. Tienes un sentido ético muy desarrollado y puedes
desarrollar una existencia muy espiritual.
Capricornio. Tus pensamientos se dirigen a los temas
referidos a la profesión. Puede haber un conflicto muy fuerte entre
las necesidades espirituales y las exigencias del mundo material.
Puedes lograr una buena formación universitaria que será la base
de tu oficio. Respetas las jerarquías en el trabajo y en la sociedad
y puedes tener unas ideas muy conservadoras.
Acuario. La ciencia y los inventos te atraen profundamente.
Tienes una mente activa y una curiosidad despierta que acepta
todo lo nuevo. Tus ideas son muy personales y puedes desarrollar
una espiritualidad propia, alejada de cualquier dogma. Te atraen
las ideas exóticas y puedes desarrollar sentimientos altruistas y
humanitarios.
Piscis. Las ideas se mezclan con los sentimientos en tu mente.
La religión es vista de un modo místico y profundamente
emocional. Conoces el verdadero significado de la compasión y
la empleas con las personas de tu entorno. Puedes hacer muy
buenas obras guiándote por tu sentido espiritual, pero también
puedes sacrificarte sin necesidad por personas que no lo
merecen.

Casa del Regente de la 9ª

Regente de la 9ª en la 1ª. Tu mente está muy centrada en


la reafirmación de tu yo. Te gusta ver las ideas bajo un enfoque
muy personal, ya que tienes tu propia filosofía vital que
probablemente has desarrollado de un modo autodidacta. Puedes
influir a otras personas a partir de una poderosa visión espiritual,
pero difícilmente te dejarás llevar por ideas ajenas. Procura que tu
ego no se hinche en exceso bajo el aplauso de los demás.
De la 9ª en la 2ª. Te gustará obtener un rendimiento
práctico de tus ideas, y si este rendimiento se traduce en dinero,
tanto mejor. Tu filosofía puede ser materialista, pero tienes unos
valores morales muy intensos que teñirán todo tu pensamiento.
De la 9ª en la 3ª. Una profunda sed de saber te mueve a
realizar investigaciones o estudios. Tienes una actitud didáctica
ante la vida porque necesitas que los demás participen de tus
descubrimientos. Puedes realizar viajes de estudio con
provechosos resultados.
De la 9ª en la 4ª. Te interesa estudiar el pasado de tu
familia o de tu país, y puedes desarrollar una buena carrera en
cuestiones relacionadas con la historia, genealogía o biografías.
Tus ideas se desarrollarán en el seno del hogar y pueden estar
influidas por tus padres o por la tradición familiar. Quizá vivas en
el extranjero y sin duda experimentarás un gran cambio de
conciencia en la edad adulta.
De la 9ª en la 5ª. Tu concepción de la existencia es
optimista y despreocupada. Eres fiel a tus propias ideas y no te
inmiscuyes en los problemas ajenos. Puedes hacer viajes de
placer y en ellos aprenderás a través de los sentidos. La música, el
deporte o las aventuras amorosas son fuente de grandes
conocimientos. Tienes buenas cualidades para la enseñanza.
De la 9ª en la 6ª. Tus ideales están mediatizados por la
necesidad de trabajar y ganarte la vida. Puedes desarrollar una
filosofía práctica que te permita llevar una vida ordenada y
laboriosa. Te gusta desmenuzar los conceptos y tiendes a analizar
las ideas de un modo demasiado racional. Quizá sientas la
necesidad de ayudar a otras personas.
De la 9ª en la 7ª. Para ti es muy importante tener una
pareja con la que compartir una similar visión de la vida. Tu
cónyuge te puede ofrecer muchos motivos para la reflexión y
puede modificar tus conceptos sobre la realidad. La atracción
hacia personas exóticas o de carácter filosófico es muy fuerte con
esta configuración. Será necesario hacer muchos reajustes para
que la relación funcione. Por otra parte, te interesan las leyes y la
justicia en su sentido más amplio.
De la 9ª en la 8ª. Existe una gran preocupación por los
temas trascendentales, y sin duda vas a dedicar mucho tiempo a
la elaboración de teorías sobre la vida ultraterrena. Sabes
profundizar de un modo serio en cuestiones de carácter espiritual.
Tu intuición puede ser importante y desarrollarás tu filosofía vital a
partir de los ecos de tu voz interior.
De la 9ª en la 9ª. La filosofía y la espiritualidad tienen una
gran importancia para ti. Puedes desarrollar tu interés por los
temas trascendentes a través de viajes y lecturas, pero sin duda
tendrás también la necesidad de expresar tus criterios en los
ámbitos en que te mueves. Posees una gran integridad y tienes
extraordinarias cualidades para la enseñanza superior. Afina
bien tus ideales, porque estás en disposición de cumplirlos.
De la 9ª en la 10ª. Tus ideas pueden estar íntimamente
relacionadas con la vida profesional. Esta es una buena posición
para los maestros y los pensadores. Pero no sólo te gusta
especular, sino llevar a la práctica lo que piensas. Los estudios
son fundamentales en el desarrollo laboral y no tienes
inconveniente en perseverar en el aprendizaje durante toda tu
vida.
De la 9ª en la 11ª. La amistad es importante para ti, y
buscas rodearte de personas con las que compartir ideas y
proyectos de vida. Tienes una naturaleza optimista y progresiva y
puedes desarrollar ideas muy novedosas en cuestiones sociales o
políticas. Puedes tener amigos en países lejanos y te gustan
aquellas personas que son más inteligentes que tú, porque quieres
aprender de ellas en todo momento.
De la 9ª en la 12ª. En tus ideas se mezclan sentimientos
muy profundos que dan como resultado una visión de la vida
bastante emocional y desinteresada. Puedes realizar grandes
sacrificios con motivo de tus creencias. La religión es importante
para ti y puedes tener una fuerte vocación espiritual.
Planetas en la Casa 9ª

Sol. La vida para ti es una aventura del espíritu, o al menos


desearías que así fuera. Te gusta estudiar y podrías desarrollar
brillantemente cualquier carrera. Ya que sientes una gran
atracción por el mundo del pensamiento y los países extranjeros,
tendrás necesidad de realizar viajes que cimenten tus
conocimientos. Tu viva curiosidad te puede llevar muy lejos en los
terrenos de la filosofía, la espiritualidad o la educación. Pero
recuerda siempre que hay que buscar aplicaciones prácticas a tus
conocimientos.
Luna. Tu filosofía vital está construida sobre una base de
sentimientos y recuerdos muy poderosa. Te aferras a las ideas que
te enseñaron en la infancia y puedes tener una visión de la
existencia muy en consonancia con la sociedad que te rodea. Tu
imaginación es poderosa y aprenderás mucho a través de viajes y
lecturas. Puedes tener destellos de inspiración que deberías tener
muy en cuenta. No olvides expresar tus sentimientos, pues la
gente que te rodea necesita tu apoyo.
Mercurio. Tienes un gran interés por las cuestiones superiores
y a través de los viajes intentarás comunicarte con otras culturas,
ya que también sientes una gran atracción hacia los idiomas. Tu
intuición es elevada y puedes tener profundos intereses
espirituales, que querrás aumentar a través de la lectura y quizá
incluso de la escritura.
Venus. Sabes disfrutar de la cultura y expresas tus
conocimientos de un modo armonioso y emotivo. La filosofía no es
para ti una mera especulación mental, sino que debe nutrirse del
arte y la intuición. Las culturas extranjeras ejercen en ti una
profunda seducción que probablemente no sea sólo mental. De
hecho puedes tener una gran implicación emocional con
religiones extranjeras o con personas de origen exótico.
Marte. Esta posición suele indicar a la persona autodidacta y
escéptica. Te gustará aprender por tu cuenta, pues tienes un
pensamiento muy independiente y creativo. Buscas respuestas, e
irás adonde haga falta para hallarlas. Cierto grado de
escepticismo es sano, pero procura no caer en los excesos, pues
llevan al fanatismo, que es el peor extremo al que puede conducir
esta configuración.
Júpiter. Si aún no has realizado ningún viaje importante ¿a
qué esperas? Para ti la vida empieza siempre un paso más
adelante y sin duda estás deseando avanzar. La enseñanza
superior está hecha para ti, así como la filosofía, la religión o los
idiomas. Tienes una visión ortodoxa de las materias que estudias
y sabes profundizar al máximo en ellas. En tu vida necesitarás
mucha variedad, pero también profundidad para ser feliz.
Saturno. Tienes un enfoque serio y riguroso de la filosofía o
la religión. No te fías de las ideas novedosas y puedes tener una
visión excesivamente conservadora de la realidad. Tu mente es
reflexiva y profunda, pero caerás en el dogmatismo con cierta
facilidad. Puedes sufrir algunas privaciones en tus viajes.
Urano. Te gusta inventar y posees una mente independiente y
muy original. Tus opiniones filosóficas y espirituales son muy
heterodoxas. Te gusta beber de todas las fuentes y tienes una
visión progresista en política. Los viajes están llenos de sorpresas
y sucesos extraordinarios.
Neptuno. La religiosidad es muy importante para ti, pero a
diferencia de otras personas más intolerantes, tú sabes aceptar las
creencias e ideas que difieren de las tuyas. Tienes una enorme
imaginación y puedes vivir interesantes experiencias místicas en
tus viajes.
Plutón. Tienes una actitud aventurera ante la vida y un gran
deseo de experimentarlo todo al precio que sea. Tu mente se
mueve por un gran afán de conocimiento, pero va de un extremo
al contrario, por lo que este conocimiento puede ser adquirido de
un modo muy desordenado. En algún momento de tu vida puedes
sentir la necesidad de cambiar radicalmente de ideas, de país o
de religión.
Marilyn tenía el signo de Aries en la cúspide de la casa nueve.
Sin duda era una mujer de ideas atrevidas, que incluso podían
estar más allá de lo que aceptable en su tiempo. Estas ideas se
relacionaban en parte con la manifestación más evidente de su
sexualidad (Marte, regente de la 9ª, en la 8ª). No es anecdótico
que Marilyn viviera uno de sus mejores momentos vitales durante
su visita a Corea adonde fue a animar a las tropas
norteamericanas. Lejos de su país, en medio de los guerreros,
Marilyn sintió que “por primera vez en mi vida no tenía miedo de
nada, sólo me sentía feliz”.
Seguramente Marilyn se sentía seducida por las personas
intelectuales, como demuestra su tercer matrimonio. La presencia
de Venus en la casa novena nos indica una filosofía vital que
también estaba influida por la necesidad de descubrir su parte
más femenina y amorosa. Unir las energías de Marte y Venus y
darle a esta unión un contenido no sólo emocional, sino también
intelectual, hubiera ayudado a que ella encontrara su equilibrio
interno. Desgraciadamente, Marilyn dedicó gran parte de sus
energías en buscar fuera de ella, a través de sus relaciones, el
conocimiento y la fuerza que realmente estaba en su interior.
Quirón

El planeta Quirón, que no forma parte de los diez cuerpos


clásicos de la astrología, trae un simbolismo muy interesante a tu
Carta, que puede completar algunos aspectos menos conocidos
de tu individualidad. Este astro se relaciona con todo aquello que
representa una herida primordial en nuestro ser, así como con los
aprendizajes espirituales que necesitamos llevar a cabo para
crecer de un modo pleno y alcanzar un mayor grado de felicidad.
Quirón es especialmente importante cuando está en la
cercanía de los ejes de la Carta: ascendente, descendente, medio
o bajo cielo. También si está en conjunción u oposición cerrada
con algún planeta, especialmente si se trata de los Luminares. Si
se da alguno de estos supuestos, te recomiendo que estudies los
significados que se dan a continuación, que indican cómo se
expresa el poder quironiano en las doce casas natales. Si no es
así, tómate las siguientes descripciones con cierta distancia,
aunque no dejes de leer la que corresponda a tu caso.
Quirón en la Casa 1ª. La vida es para ti un viaje de
autodescubrimiento en el que eres muy consciente de la necesidad
de aprender para poder seguir avanzando. Algunas restricciones
de tu pasado te obligan a desarrollarte de un modo muy
determinado. Unas personas con esta posición desearán
apartarse del mundo mientras que otros tienen un gran deseo de
notoriedad. Necesitas encontrar una dirección muy clara en tu
vida para que las poderosas energías de esta configuración no te
consuman.
En la Casa 2ª. La autoestima es un tema central en tu vida.
Quizá es un aspecto poco desarrollado en ti, que necesita ser
reajustado a lo largo de tu vida. Puedes tener opiniones
demasiado arraigadas acerca de tu propio valor, y sobre otros
temas, que tienen que ser confrontadas con la realidad que te
circunda. Lo que es valioso para ti, quizás no lo sea para otras
personas, pero tú sabrás encontrar, a partir de esos desafíos, un
espacio propio en el que crecer y afianzarte.
En la Casa 3ª. En tu infancia ha habido un exceso de
críticas acerca de cómo eras o como te comportabas,
esencialmente en el entorno familiar, lo que te ha producido un
cierto daño emocional. Tu forma de expresarte tiende por ello a
ser un tema esencial en tu vida. Quizás sufras problemas de voz o
quizás, te cueste expresarte correctamente en muchos momentos,
lo que puede llevar a algunos conflictos de comprensión con el
entorno. Necesitas pensar bien antes de hablar y sé indulgente
con tus errores y con los de los demás.
En la Casa 4ª. Los primeros años de vida portan una herida
que necesitarás sanar en algún momento de tu vida adulta.
Quizás había inseguridad en tu entorno, o quizás existe una falta
de confianza hacia tus padres a causa de algunos hechos que
sucedieron. Hay una cierta falta de autoestima que se arrastra
desde esos primeros tiempos. Tienes una gran empatía hacia otras
personas y dedicas muchos tiempo a estar con los demás, incluso
a ayudarles, ya que en el fondo, sientes que tienes que echar una
mano a los que tienen problemas.
En la Casa 5ª. Algunos sucesos han hecho que tengas que
tomarte la vida demasiado en serio desde una edad muy
temprana. Quizás sufriste algún problema con personas que
intentaron ir más allá de lo debido, o que no respetaron tus límites
personales. Por ese motivo, tu necesidad de protección es grande,
ya que no deseas que nadie te lleve a ningún lugar al que no
desees ir. Tu nivel creativo es muy elevado, y puede ser una gran
vía de escape para expresar todo lo que bulle en tu interior.
En la Casa 6ª. Los asuntos de salud son un tema de gran
preocupación para ti. Quizás tuviste que enfrentarte a alguna
enfermedad o accidente en tu edad juvenil, o quizás simplemente
es que tienes miedo y te cuesta aceptar que la vida humana es
frágil. Te obsesiona estar bien, y cuando sientes que algo no
funciona correctamente en tu cuerpo, tiendes a sufrir en exceso.
Por otro lado, esta posición de Quirón te capacita para tener una
gran energía sanadora que puedes utilizar en tu provecho o en el
de los demás.
En la Casa 7ª. Las relaciones íntimas con otras personas se
presentan aquí como un reto importante que tienes que aprender
a superar. Hay ciertos momentos de distanciamiento en tu vida, y
debes descubrir qué es lo que hace que te acerques demasiado o
te alejes bruscamente de los demás. Sabes conectar muy ben con
los otros y hay una gran empatía e incluso cierta telepatía en la
forma en que te relacionas con los otros. Encontrar el equilibrio
entre tú y tu pareja es un reto esencial en tu vida, ya que en caso
contrario, puedes perder mucha energía intentando resolver los
conflictos que surjan.
En la Casa 8ª. La muerte y sus misterios son uno de los
temas que se presentan como esenciales en tu vida espiritual.
Tienes gran interés por los asuntos psíquicos, aunque es probable
que al mismo tiempo, sientas también bastante temor ante estas
cuestiones. Si pierdes el miedo y simplemente aprendes a manejar
correctamente tus capacidades, puedes descubrir secretos que no
están al alcance de todo el mundo.
En la Casa 9ª. Algunas opiniones extremas, o quizás el
deseo de argumentar fuertemente en alguna discusión puede ser
un tema que te cause más de un problema a lo largo de tu vida.
Eres un eterno estudiante, siempre con ganas de aprender cosas
nuevas y con la necesidad de enseñarlas a los demás. Las crisis
espirituales pueden ser una constante en tu vida, a medida que
aprendes a manejar los profundos impulsos que subyacen en tu
psique. También es muy posible, como le sucedió a Marilyn, que
sientas que tu mente no es lo suficientemente buena y busques por
todos los medios un reconocimiento a tu saber.
En la Casa 10ª. Es probable que hayas sentido algún tipo
de rechazo en tu juventud o en la edad infantil que te haga
plantearte la necesidad de obtener aceptación en un momento
posterior de tu vida. Tu deseo de alcanzar un estatus superior
puede llegar a ser obsesiva y quizás te haga olvidar lo más
importante, que es aprender a estar a gusto contigo y valorarte
por lo que eres como persona, no sólo por lo que puedes
conseguir a través de tu trabajo o éxitos.
En la Casa 11ª.En esta posición quironiana, es probable
que hayas sentido cierto rechazo por parte de personas que se
encontraban en tu círculo de “iguales”. Por ejemplo, entre tus
hermanos, compañeros de colegio o de estudios, o bien entre los
compañeros de trabajo. Te costará por tanto estar a gusto en
medio de cualquier grupo humano, excepto si se trata de
individuos muy similares a ti en sus gustos. Sabes conectar con las
personas, a pesar de todo, y puedes tener ciertas dosis de
liderazgo siempre que aprendas a lidiar con todo aquello que
sientes que es diferente a ti.
En la Casa 12ª. La casa duodécima no es un lugar fácil
para Quirón ni para ningún planeta. Seguramente has necesitado
mucho tiempo de soledad o de tranquilidad para poder reubicar
los profundos sentimientos que laten en tu interior. No es
infrecuente que las personas con esta posición tengan habilidades
psíquicas o capacidad de curar a otros. Si aprendes a mostrar tus
habilidades, protegiendo al mismo tiempo tu ser, vivirás
experiencias poco comunes que te ayudarán a evolucionar como
persona.
La Trascendencia
Todos, en algún momento de nuestra vida tenemos que
enfrentarnos a las cuestiones trascendentes. La pérdida de seres
queridos, la enfermedad o incluso el propio paso del tiempo, nos
enfrenta, de un modo paulatino o radical, a cuestiones como el
deterioro físico, la muerte o la posible vida ultraterrena.
La casa octava y sus materias es uno de los rincones más
complejos de la Carta Astral. En una sociedad como la nuestra
donde se esconde la muerte, es natural que veamos a esta casa
como “negativa” y que muchas personas sientan un gran rechazo
a los temas que evoca. Porque esta casa habla de lo trascendente
y de cómo nos enfrentamos a acontecimientos que están más allá
de nuestro control. Como ya hemos visto, en un nivel terrenal
puede hablar del dinero o los bienes que nos llegan de otras
personas. Pero en un plano más elevado, podemos entenderla
como el lugar donde se reflejan aquellos acontecimientos que
llegan a nosotros sin que podamos evitarlos.
Al igual que la casa nueve, la ocho nos enfrenta con
cuestiones de gran calado psicológico. Pero entre ambas existen
diferencias notables. Mientras la casa nueve se refiere a la
filosofía aplicada a la vida actual, la ocho nos acerca a los
aspectos más trascendentales del pensamiento religioso o
espiritual. Por otro lado, el enfoque de la casa novena es mental y
de carácter universal, mientras que el de la casa octava tiene un
componente más íntimo, y por tanto más emocional.
Otro de los significados habituales de la casa 8ª está referido
al sexo, aunque como ya se indicó, realmente habría que
asociarla al orgasmo y los sentimientos sobre los que no tenemos
control y que nos afectan de un modo profundo y completo. Para
algunas personas, los temas de la casa ocho son demasiado
complejos, pero la realidad es que en un momento u otro, todos
debemos experimentarlos.

Signo de la Cúspide de la 8ª

Aries. Puedes tener un acercamiento muy valeroso a las


cuestiones trascendentes. Te preocupan la muerte y la vida
ultraterrena, pero probablemente son temas que no te producen
temor, sino una profunda curiosidad. Son cuestiones a las que te
enfrentas con vigor.
Tauro. Buscas salidas prácticas para tus inquietudes
espirituales. La vida sexual puede proporcionar ciertos placeres,
pero difícilmente se convertirá en una cuestión trascendente.
Mantienes un enfoque relajado y despreocupado sobre estos
temas.
Géminis. Sientes curiosidad por los temas trascendentes,
pero puede ser una curiosidad demasiado superficial. Te interesa
más lo mental que lo sexual.
Cáncer. Puedes tener algunas premoniciones, sobre todo
relacionadas con la familia. Las circunstancias que se relacionan
con la muerte o la trascendencia causan tristeza y alguna
depresión. La sexualidad se vuelve difícil porque abre campos de
conciencia que te resultan difíciles de asumir.
Leo. Tienes un interés sincero y directo por las cuestiones
trascendentes. Deseas llevar la luz a los rincones más oscuros de
la conciencia. Las relaciones sexuales pueden tener un efecto
importante en tu conciencia.
Virgo. Probablemente no te interesen demasiado los temas
psíquicos, a menos que veas en ellos alguna enseñanza práctica.
Las cuestiones materiales te preocupan demasiado como para
dedicar tu tiempo a otras elucubraciones.
Libra. Buscas información equilibrada y seria sobre
cuestiones espirituales. Te atrae todo aquello que sea agradable
en estos temas y crees firmemente en cuestiones como la justicia
kármica.
Escorpio. Te preocupan mucho las cuestiones relacionadas
con la vida ultraterrena. La muerte es algo que tienes presente y
puedes llegar a tener un interés morboso hacia ella. Hay muchas
experiencias profundas que pueden orientarte en esta búsqueda y
el orgasmo puede ser una de ellas. La tensión que rodea a estas
cuestiones hace que sientas una gran atracción o una profunda
repulsión hacia ellas, pero en ningún caso te resultarán
indiferentes.
Sagitario. Tu interés por el más allá es de carácter científico
o religioso. En todo caso se trata de cuestiones que tomas muy en
serio y para las que deseas encontrar respuestas serias. Puedes
dedicar algún tiempo a esta investigación, sobre todo a través de
la lectura de libros especializados.
Capricornio. Aunque puedes tener una vida muy larga,
quizás temes mucho la vejez y la muerte. Deberías desarrollar
más tus valores espirituales y no aferrarte en exceso al mundo
material. Realmente no tienes motivos para temer al futuro y en la
medida en que te liberes de tensión, vivirás más plenamente.
Acuario. Tienes mucho interés por los temas psíquicos y
puedes disfrutar mucho con la lectura de libros sobre la vida
ultraterrena. Tu intuición es importante y probablemente te ayude
a desarrollar una espiritualidad muy avanzada y con sólidas
raíces.
Piscis. Tu sensibilidad en cuestiones espirituales es muy alta y
puedes sentir que debes ayudar a las personas que están
pasando por algún duro trance vital. Seguramente tendrás
algunas intuiciones o revelaciones psíquicas que deberías
compartir con las personas de tu entorno. Evita el consumo de
alcohol o drogas, pues son muy perjudiciales para ti.

Casa del Regente de la 8ª

Regente de la 8ª en la 1ª. Tienes un profundo deseo de


mostrar tus intereses en cuestiones ocultistas. Quizá tengas
necesidad de hablar de la muerte o compartir tus sentimientos
sobre la inmortalidad del alma. Los temas paranormales te
preocupan, pues sientes que te implican directamente. En algún
momento de tu vida puedes sentirte bajo la protección de fuerzas
sobrenaturales.
De la 8ª en la 2ª. Los valores morales te ayudan a superar
los momentos críticos que puedas experimentar en tu vida. Puedes
recibir herencias familiares que no serán sólo materiales, sino que
tendrán un fuerte componente espiritual.
De la 8ª en la 3ª. Te gustará hablar de temas
sobrenaturales con las personas de tu entorno. Puedes dedicar
mucho tiempo a informarte de estas cuestiones, a través de
lecturas o asistiendo a conferencias. La pérdida de un pariente
cercano o un cambio de residencia pueden llevar a un cambio en
tus valores espirituales.
De la 8ª en la 4ª. Los valores morales de tu entorno familiar
han moldeado tus ideas sobre la muerte y la trascendencia.
Envejecerás en el hogar y buscarás vivir tus intereses espirituales
en compañía de la familia.
De la 8ª en la 5ª. Puedes unir la experiencia espiritual al
desarrollo de tu vida sentimental. Desarrollarás un gran interés
hacia la filosofía tántrica y el sexo sagrado. Puedes presentar tus
deseos íntimos de un modo atractivo para los demás. Los hijos
tendrán un efecto muy profundo en tu evolución personal, dando
significado y nuevas energías a tu vida.
De la 8ª en la 6ª. La investigación de las cuestiones
supranormales puede ocupar mucho tiempo y energías. Quizás el
trabajo sea una forma de crecimiento personal, o bien puedes
dedicar tus horas de ocio o tu trabajo a profundizar en los temas
espirituales.
De la 8ª en la 7ª. Tu interés en las cuestiones supranormales
estará muy mediatizado por las opiniones de tu pareja. El
matrimonio puede significar un cambio importante en tu sistema
de valores, haciendo que crezca tu interés por las ideas
espirituales.
De la 8ª en la 8ª. Tienes un gran interés en las cuestiones
espirituales, pero la forma en que desarrolles este interés depende
en gran medida de la naturaleza del planeta regente. Tu vida
puede estar marcada por extraños sucesos relacionados con la
muerte o con vivencias de tipo paranormal. Estos sucesos tienen
una gran importancia para ti y deberías analizar con cuidado su
posible significado.
De la 8ª en la 9ª. Puedes profundizar mucho en las
cuestiones paranormales, ya que te interesan de un modo serio y
consciente. Si tienes presentimientos o sueños significativos
deberías tenerlos muy en cuenta, pues traen destellos de gran
significado. La religión puede tener un gran papel en la forma en
que analizas la existencia.
De la 8ª en la 10ª. Tu profesión puede estar relacionada
con los temas espirituales o con cuestiones relativas a la muerte o
el sexo. Buscas sacar a la luz pública los temas más escondidos
para que sean reconocidos y aceptados por todos.
De la 8ª en la 11ª. Tus amistades pueden tener un papel
fundamental en tu desarrollo espiritual y moral. La pérdida de un
amigo puede cambiar tu visión de la realidad, abriéndote a
materias más sutiles. Quizá formes parte de un grupo de
investigación psíquica o te reúnas en cursillos o conferencias
relacionados con estas materias.
De la 8ª en la 12ª. Te resulta difícil sacar a la luz tus
vivencias espirituales. Pero la realidad es que puedes tener
muchas experiencias extrañas, que deberás llevar en soledad y
silencio. Tus sentimientos son profundos y puedes vivir la
sexualidad como algo sagrado, pero que debe ocultarse. Por otro
lado, tienes la cualidad de acceder al mundo inconsciente a
través de los sueños.

Planetas en la Casa 8ª

Sol. Puedes desarrollar un enfoque muy positivo de los temas


trascendentes. Te interesa la autosuperación y sentirás un gran
interés por temas como la reencarnación o el espiritismo. Te gusta
profundizar seriamente en estas cuestiones y puedes sentir una
gran curiosidad por el sexo, aunque quizás lo veas más como un
desafío que como una práctica placentera. En tu desarrollo
espiritual recibirás muchas ayudas por parte de otras personas.
Luna. Tienes buenas cualidades para desarrollar el lado
psíquico de tu naturaleza. En algún momento de tu vida puedes
recibir inspiración de planos superiores. Pero cuidado, criba muy
bien los mensajes, pues no siempre vas a conectar con seres de
luz. Como tienes una gran necesidad de seguridad y de encontrar
respuestas, puedes sufrir engaños y padecer por ello. Ciertamente
no faltarán premoniciones o corazonadas en tu vida cotidiana, a
las que sí deberías hacer caso.
Mercurio. Tienes una profunda perspicacia a la hora de
tratar cuestiones trascendentales y puedes desarrollar un
pensamiento muy crítico hacia los fenómenos paranormales. En
todo caso, te interesa el ocultismo y tienes cierta facilidad para
escribir sobre estas cuestiones. Te gustará ir al fondo de los
enigmas y darles respuestas racionales, aunque no siempre sea
posible.
Venus. Tus tendencias espirituales se mueven por caminos
muy sosegados. La felicidad y la paz interior pueden ser el
resultado de una profunda búsqueda personal, pero también
habrá otras gentes implicadas en tu crecimiento espiritual. Las
energías sexuales se pueden trasmutar en conocimiento y eso será
algo que siempre desearás explorar.
Marte. Sientes un gran interés por cuestiones relacionadas
con la vida después de la muerte y puedes llegar a desarrollar
cierto instinto morboso. El sexo es una herramienta de
autoconocimiento que es fundamental para ti, pero ten cuidado
con las prácticas arriesgadas o poco higiénicas. Te gusta ir hasta
el fondo en todo aquello que provoca rechazo en los demás,
aunque tu exploración te puede dar algún que otro susto.
Júpiter. Tienes un interés positivo por cuestiones de índole
trascendental. Tu vida puede ser larga y fructífera, así que
aprovéchala para profundizar tus vivencias espirituales. Quizás
veas estas cuestiones bajo el prisma de la ortodoxia religiosa,
pero sería provechoso que ampliaras tus horizontes, estudiando
diversos credos y filosofías. Eso te enriquecerá en gran medida.
Saturno. Tu idea de lo trascendente es muy seria, pero
puedes tener un enfoque muy conservador sobre estas cuestiones.
Quizás tu religión o tu filosofía te limitan en exceso. Pero con una
larga vida por delante, deberás plantearte todas las opciones. El
sexo te interesa, pero puedes tener ciertas inhibiciones en este
terreno.
Urano. Posees bastante intuición en cuestiones psíquicas y
puedes recibir diversos mensajes espirituales por vías poco
ortodoxas. Sin duda te interesa el más allá y la vida ultraterrena,
y puedes sostener criterios muy originales sobre estos temas.
Confía en tu intuición.
Neptuno. Tu habilidad psíquica es muy importante y puedes
tener diversas experiencias de contacto con otros niveles de
realidad. La mediumnidad puede mezclarse con proyecciones
astrales o experiencias de regresión a vidas anteriores. En algún
momento tendrás deseos de experimentar con drogas, o puedes
recurrir a ellas para huir de los destellos de tu intuición. Ten
mucho cuidado.
Plutón. El ocultismo y la vida después de la muerte están
entre tus principales centros de atención. Investigas estos temas
hasta sus últimas consecuencias ya que no tienes miedo de
implicarte en ellos. El sexo está mezclado con la espiritualidad. En
esta posición, Plutón da lo máximo de sí mismo, para bien o para
mal.
Piscis, el signo en la cúspide de la octava casa de Marilyn
señala el peligro de buscar una evasión a través de drogas o
medicamentos. Ella era una mujer dotada de una gran
sensibilidad, pero tuvo que sufrir influencias muy agresivas en su
casa 8 (Marte y Urano). Estos planetas masculinos, sin duda se
reflejaron en relaciones conflictivas con los hombres en el plano
de los sentimientos más profundos. No podemos saber hasta qué
punto las cuestiones trascendentes preocuparon a Marilyn, ya que
no hay suficientes documentos al respecto, pero parece claro que
sus problemas para asumir su parte masculina se reflejaron en
relaciones complejas que contribuyeron a acercarla a su triste
final.
Vidas pasadas y futuras
Uno de los aspectos más discutibles y discutidos del saber
astrológico es la llamada Astrología Kármica. Hundiendo sus
raíces en la astrología hindú, este conjunto de técnicas permite
conocer nuestras supuestas vidas anteriores y su influencia en el
presente. La Astrología del Karma es un tema muy amplio, que
sobrepasa los límites de este libro, pero no quisiera terminar sin
dar un breve apunte de uno de sus elementos más característicos,
el estudio de los nodos de la Luna.
Como recordarás, los nodos son los puntos donde la órbita
lunar cruza la eclíptica. No son cuerpos físicos, sino lugares en el
espacio, y su importancia radica en que son zonas donde la
energía lunar se solariza y se hace consciente. Sabes que la Luna
es el punto de la Carta donde se almacena nuestra memoria, y en
un plano trascendente podemos decir que representa no sólo la
memoria de los sucesos de nuestra vida presente, sino el almacén
de los acontecimientos de nuestras vidas anteriores. Los nodos
lunares serían por tanto los puntos donde esa memoria se hace
consciente.
Los nodos lunares son dos puntos exactamente opuestos en la
Carta Astral y se denominan Nodo Norte y Nodo Sur. Para la
astrología kármica, el Nodo Sur representa las vivencias o
lecciones que se dieron en vidas anteriores, mientras que el Nodo
Norte indica la manera en que esos acontecimientos pasados
repercuten en la encarnación actual. En este breve análisis de los
nodos vamos a evitar los elementos de carácter anecdótico sobre
supuestas vidas anteriores y nos centraremos en las grandes
lecciones que tenemos que afrontar en la vida presente.
Aunque durante mucho tiempo he sido bastante reticente a
este tipo de análisis, la experiencia me ha demostrado que,
independientemente de que creas o no en la reencarnación, la
información que proporcionan los nodos es muy valiosa. Es una
información coherente con el resto de la carta y altamente
significativa, que muestra los retos trascendentales que se
presentan en nuestras vidas.
A continuación vamos a analizar la posición nodal. Como
ambos nodos son siempre opuestos, su posición y significados son
interdependientes. De este modo, estudiando la situación del
Nodo Norte por signo estamos también analizando la del Nodo
Sur.

Nodo Norte en los Signos

Aries. La vida presente trae el reto de aprender a actuar de


un modo independiente y audaz. En existencias anteriores viviste
en medio de muchas vacilaciones, confiando en las personas de
tu entorno más inmediato. Actualmente sientes la necesidad de
buscar un camino propio, independiente del resto de las
personas. Aprender a armonizar la influencia de los demás y tu
propio impulso es un reto para la vida presente. Debes aprender
a desarrollar tu propia identidad.
Tauro. Si en existencias anteriores viviste muchos procesos
dolorosos, de cambio y renovación, en el presente te enfrentas a
la necesidad de alcanzar la estabilidad. La destrucción y la
muerte formaban parte de tus experiencias vitales, y
probablemente existió un abuso de las energías sexuales en
detrimento de otros impulsos. En la actualidad debes aprender a
concentrar tus esfuerzos, a no malgastar energías. El mundo
material será la base sobre la que puedes construir cualquier
deseo.
Géminis. En existencias anteriores dedicaste mucho tiempo a
vivir aventuras, a buscar en países lejanos o en la investigación
filosófica, las respuestas a tus dudas. En el presente ha llegado el
tiempo de aplicar todo ese conocimiento a la vida cotidiana. Con
frecuencia notarás que expresas ideas que surgen de alguna
parte desconocida de tu mente. Estos conceptos no deben
quedarse en el plano teórico, ya que el tiempo presente exige una
aplicación práctica. Quizá añoras la libertad del pasado, pero
ahora debes luchar por integrarte en la sociedad y compartir con
ella tus logros mentales.
Cáncer. La necesidad de ayudar y cuidar a otras personas
proviene de una antigua deuda que has contraído en vidas
anteriores. Ahora deseas construir un hogar estable, sea físico o
simbólico. Esto se debe a que en el pasado dedicaste mucho
tiempo a los aspectos profesionales de la existencia, a costa de la
dedicación a tus seres queridos. Los sentimientos están ahora en
un primer plano y exigen ser satisfechos por encima de otras
prioridades.
Leo. En la vida presente te encontrarás ante situaciones que
exijan una afirmación de tu personalidad. Si en vidas anteriores te
dejaste llevar por las personas de tu entorno, ahora debes
enfrentar la necesidad de adquirir un mayor grado de autonomía.
Sin duda tuviste deseos altruistas y entregaste tus energías en
proyectos idealistas. Parte de estas ideas y de los resultados
kármicos positivos te acompañan en el presente. Debes emplear
estos dones desarrollando la generosidad y el ánimo positivo.
Virgo. Derrochando generosidad y abnegación, en el pasado
te entregaste al cuidado de otras personas. Probablemente no
obtuviste un resultado positivo de esos esfuerzos y por ello te
enfrentas ahora al reto de desarrollar tu espíritu crítico. Es el
momento de afianzar los conocimientos, de desarrollar la mente
en un contexto práctico. El sentimentalismo del pasado origina la
obligación de centrarse en el plano intelectual a fin de equilibrar
esas energías. También el misticismo debe dar lugar a
cristalizaciones prácticas.
Libra. Tras una serie de vivencias individualistas, la vida
presente trae la obligación de desarrollar el contacto con las
personas del entorno inmediato. Las aventuras de vidas anteriores
dan paso a la necesaria integración con el ambiente. Buscas la
cooperación y tienes que desarrollar las virtudes de la diplomacia
y el equilibrio. Ya no es tiempo para imponer tu yo, sino para
desarrollar un sentido de identidad más amplio y generoso.
Escorpio. En el pasado dedicaste tu tiempo y energías a la
tarea de acumular bienes materiales. Esta acumulación pudo ser
demasiado acusada y por este motivo puedes sentir la necesidad
acuciante de realizar grandes cambios en tu vida. En esta
existencia debes aprender a soportar los procesos de renovación
por lo que la vida presente se presenta llena de altibajos
emocionales. El extremismo se debe a que intentas seguir un
camino personal, pero deberás aprender que tras cada pequeña
muerte hay un gran renacimiento.
Sagitario. Tu pasado interés por el conocimiento y las ideas
cristaliza en la vida presente como una necesidad de profundizar
en los conceptos. Ya no es tiempo para ideas superficiales, sino
para ir hasta el final en el desarrollo de tu filosofía personal. Si en
vidas anteriores te relacionaste con un núcleo limitado de
personas, ahora debes ampliar tus horizontes, viajar, buscar
respuestas en las antiguas fuentes de sabiduría.
Capricornio. En vidas anteriores dedicaste tu energía a
ayudar y cuidar a otras personas. Viviste en un entorno familiar,
bajo la limitación de la autoridad paterna, o sintiendo que el
mundo era demasiado ancho para ti. Pero la vida presente trae el
reto de encontrar tu lugar en el ambiente del trabajo y las
obligaciones sociales. Este es un tiempo para salir del caparazón
y reclamar tu lugar en el mundo. El aprendizaje material y social
será duro porque tu alma es muy sensible, pero absolutamente
necesario para alcanzar un equilibrio que te permita seguir
evolucionando.
Acuario. La sociedad, en su sentido más amplio, te reclama
en esta vida presente. Porque si en el pasado dedicaste tus
esfuerzos a desarrollar tu yo, a brillar en medio de los demás, el
presente trae la obligación de entender que el mundo es amplio y
que la humanidad es tu verdadera familia. No hay lugar para
conceptos egoístas, ahora debes desarrollar ideas novedosas. Es
tiempo de derribar las antiguas normas, de acabar con una visión
aristocrática de la realidad para alcanzar una auténtica
democracia de las ideas. Tu destino traerá grandes sorpresas.
Piscis. Las existencias anteriores estuvieron centradas en el
desarrollo del espíritu crítico en medio de un mundo racional.
Pero la vida actual te enseña que el intelecto no es la única ayuda
con la que cuentas a la hora de enfrentarte a los retos que se te
presentan. El desarrollo emocional, la implicación afectiva con
otras personas, son claves en el presente. Los recursos psíquicos
se pueden desarrollar mucho en la vida presente, y puedes vivir
experiencias paranormales que te obliguen a replantearte tus
ideas más escépticas. Confía en tu intuición.

Nodo Norte en las Casas


Nodo Norte en la Casa 1ª. Esta posición nodal implica
que en el pasado dedicaste mucho tiempo a cuidar de tu pareja o
a vivir bajo su protección. En la vida presente se plantea el reto
de aprender a comportarse de un modo más individual, con valor
y atrevimiento. Ya no es tiempo para mirarse en otros, sino para
tomar un camino propio.
En la Casa 2ª. En la vida presente alcanzarás una gran
seguridad a través de los bienes materiales. Pero probablemente
la persecución del bienestar puede ir en detrimento del desarrollo
de otras facetas de tu vida. En el pasado tuviste que vivir muchos
procesos de cambio y renovación, y por eso ahora necesitas
encontrar estabilidad. Si desarrollas tus valores morales, podrás
recuperar gran parte de las capacidades psíquicas que
desarrollaste en vidas anteriores.
En la Casa 3ª. El interés por la comunicación que vives en el
presente hunde sus raíces en antiguas búsquedas de carácter
filosófico o moral. Si en vidas anteriores te interesaron las
aventuras, los países lejanos, ahora debes vivir en un ambiente
más reducido y cercano. Los retos de esta vida se centran en el
diálogo sincero y en la expresión positiva de todas tus cualidades.
En la Casa 4ª. Si vives esta existencia en un espacio muy
reducido, probablemente se debe a una carga kármica que se
remonta a vidas anteriores. El hogar y la profesión se convierten
en un dilema muy importante en tu existencia. Si en el pasado
usaste tus obligaciones profesionales como una excusa para
descuidar a tu familia, en esta vida tendrás que afrontar tus
responsabilidades. Las lecciones que aprendas en el seno del
hogar serán muy importantes para ti.
En la Casa 5ª. La libertad que usaste en el pasado se
convierte ahora en obligación. Los hijos y su educación son una
de los retos fundamentales en la presente existencia, así como las
relaciones amorosas. En muchos momentos querrás vivir
relaciones sin llegar a comprometerte, o quizá busques unirte a
alguien que no desea estar contigo. Tus amores se pueden
convertir en un tira y afloja, entre la necesidad de acercamiento y
la lejanía sentimental. Tendrás que aprender de estas lecciones.
En la Casa 6ª. Los retos del trabajo se presentan de una
forma acuciante en esta vida. Si en el pasado desarrollaste
grandes capacidades psíquicas y una sensibilidad muy
acentuada, el presente te obliga a vivir en el plano material. La
soledad del pasado se transforma en necesidad de relacionarse.
La abnegación, en capacidad de servicio.
En la Casa 7ª. Aprender a convivir con otras personas,
sobre todo en el ámbito más íntimo de la pareja, es el reto
fundamental que debes enfrentar en esta vida. En existencias
anteriores seguramente dedicaste tus esfuerzos a desarrollar tu yo
de un modo individual, sin prestar atención a los deseos de los
demás. Es tiempo de desarrollar las relaciones de un modo
diplomático y afectivo.
En la Casa 8ª. En la casa kármica por excelencia, el nodo
norte se comporta de un modo muy potente, marcando esta vida
como un escalón muy importante en el conjunto de tus existencias.
Toda la estabilidad del pasado se convierte en un territorio de
luchas, de cambios. No hay certezas a las que agarrarse y por
ello puedes desarrollar sentimientos difíciles de controlar. Evita los
excesos negativos como el odio, los celos o la ira. Aprovecha
para desarrollar tus dones psíquicos y para investigar en temas
trascendentes, ya que a través del desarrollo personal puedes dar
grandes pasos en tu evolución.
En la Casa 9ª. Si bien has desarrollado tus facultades
verbales en vidas anteriores, el reto que se te presenta en este
momento consiste en dotar de contenido a tu expresión. Ahora es
tiempo de aprender, de viajar, de adquirir conocimientos
profundos que te permitan crecer como persona. El mundo
reducido del que provienes tiene que ensancharse en esta vida
presente y sólo con un afán aventurero podrás sacar el máximo
partido a las oportunidades que se te van a presentar.
En la Casa 10ª. La profesión será el reto que debes afrontar
en la vida presente. Probablemente en el pasado te dedicaste a
desarrollar los vínculos familiares. Subsistiendo en un círculo
reducido, viendo limitadas tus posibilidades de expansión, la vida
presente trae la posibilidad de desarrollar una brillante carrera.
Seguramente siempre echarás de menos un hogar que sientes que
fue tuyo, pero esta memoria no debe impedir tu desarrollo como
persona activa que reclama su lugar en el mundo.
En la Casa 11ª. Existe una deuda kármica hacia los hijos y
es probable que las relaciones con ellos tengan un cariz muy
especial. En el pasado derrochaste orgullo y quizás vanidad, pero
el presente te obliga a buscar empeños humanitarios, ideas hacia
las que dirigirte. El desapego, la muerte del yo, es una de las
tareas que debes enfrentar. Aprender lo nuevo y rechazar lo
antiguo es otra de tus obligaciones.
En la Casa 12ª. La vida presente y sus retos te obligan a
desarrollar tu afectividad y el sentido de la abnegación. Un
exceso de ocupación en el mundo material obliga a que en el
presente busques respuestas de tipo más emocional. Puedes caer
con facilidad en la autocompasión, ya que el exceso de crítica en
existencias anteriores se puede volver contra ti en el momento
presente. Buscar el amor y la ternura son las claves para obtener
lo mejor de tu vida.
El Nodo Norte de Marilyn, situado en Cáncer en la casa 12ª
ayudó a que desarrollara una gran sensibilidad. El dilema entre el
desarrollo profesional y los factores limitantes de su infancia se
refleja claramente en su Nodo Norte canceriano. Podemos
especular si sus carencias en el ámbito familiar provienen de
antiguas heridas, de deudas kármicas contraídas entre ella y sus
padres, pero lo que es evidente es que esas carencias hicieron
que buscara compensar la falta de cariño de su familia a través
del cariño del público. Como dijo en una ocasión: “Las únicas
personas por las que me preocupo son las de Times Square, a lo
largo de la calle junto al cine, aquellos que no pueden acercarse
cuando entro”. Su sensibilidad, que podemos ver reflejada en el
Nodo en la casa doce, pudo llevarla a tener una gran
autocompasión. Quizá si hubiera dedicado su fama para
desarrollar causas humanitarias, hubiera encontrado un gran
alivio a sus dilemas sentimentales. Como en todo el análisis de su
biografía, descubrimos que un mayor autoconocimiento podría
haber mejorado considerablemente su vida.
Es una lección que todos debemos aprender.
Apéndice A - La visita al
astrólogo
El conocimiento de tu propia Carta Astral es una tarea
relativamente sencilla, como espero que hayas comprobado a lo
largo de este libro. Pero ciertamente hay conflictos vitales que
requieren la ayuda de un profesional, alguien que aporte una
visión objetiva y desapasionada, con conocimientos más
profundos y con el peso de la experiencia acumulada tras muchos
años. Para concluir esta obra, te ofrezco algunas sugerencias que
puedes tener en cuenta a la hora de acudir a un astrólogo.
Antes de solicitar cualquier servicio, tienes derecho a conocer
la orientación filosófica del astrólogo, así que dirígete a él y
pídele que te explique cómo entiende el arte astrológico y cuáles
son sus ideas generales acerca del sentido de la existencia. Con
esta información podrás decidir de antemano si sus consejos
serán apropiados para ti y tus circunstancias.
Un astrólogo debe ser alguien con un sincero interés por
ayudar a los demás. Por lo tanto hay que esperar de él que sea
dialogante, ético, comprensivo y abierto a las preguntas. Como
profesional, debe ganar un sueldo digno, pero no es bueno estar
obsesionado por hacer dinero a toda costa.
Pregunta de antemano cómo va a ser la tarea de
interpretación. Si consta de varias sesiones, cuál se estima que
puede ser su número, la duración de las mismas y su coste. Es
recomendable realizar como mínimo dos o tres sesiones,
separadas por una o más semanas. Así tendrás tiempo de
reflexionar sobre la información recibida y plantear tus dudas.
A la hora de interpretar tu Carta, exige que el astrólogo te
explique sus conclusiones, es decir, que indique con claridad qué
elementos de la Carta le llevan a decir esto o aquello. Si se
escuda en el silencio o alude a incomprensibles términos
esotéricos, desconfía. Quizá su razonamiento esté bien fundado,
pero ¿de qué te sirve a ti si no lo entiendes? Como ya sabes,
entender el simbolismo astral es un paso fundamental a la hora de
introducir cambios en tu vida.
Los servicios astrológicos no se limitan al análisis de la Carta
Astral. Pregunta a tu astrólogo qué más puede ofrecerte. Te
aseguro que nada es más frustrante para un astrólogo que tratar
con un cliente apático, o que se conforma con muy poco. Si tienes
la fortuna de contar con un profesional bien cualificado,
aprovéchalo en tu beneficio. Será positivo para ti, y también para
él o ella.
Apéndice B - Tu Carta
Astral gratis en Internet
Aunque existen diversas páginas de Internet en las que puedes
calcular de forma gratuita tu Carta Astral, te recomiendo que
hagas uso del servicio más completo y profesional que se puede
encontrar hoy en día, la web www.astro.com.
Astro.com es una página que pertenece al grupo Astrodienst
AG, fundado en 1980 por el doctor en física Alois Trendl.
Actualmente tiene su sede en Zollikon, Suiza y ofrece servicios
astrológicos tanto gratuitos como de pago de gran calidad.
Para usar los servicios gratuitos de astro.com debes entrar en
su página web, seleccionar el idioma español en la cabecera, y
hacer clic en el enlace de “login”.
Aquí puedes crear una cuenta nueva, haciendo clic en “Crear
un perfil de usuario registrado gratuito”, lo que te permitirá añadir
los datos de varias personas, o simplemente puedes “Crear un
horóscopo inmediatamente, como usuario invitado”. Esta segunda
opción es la más recomendable, por ser la más rápida.
Haciendo clic en ella, la página te solicita que completes tus
datos personales: nombre, apellidos, género, y sobre todo, tus
datos de nacimiento, es decir, la fecha, la hora y el lugar.
Haciendo clic en “continúe” accedes a los servicios de astro.com.
Aquí debes buscar la opción “Horóscopos gratuitos” y dentro
de los dibujos de carta, hacer clic en “Dibujo de la carta,
Ascendente”. Obtendrás rápidamente una carta de gran calidad,
que incluye tanto el dibujo de tu mapa natal como las tablas
necesarias para poder interpretarla. Para imprimirla, haz clic
sobre ella y obtendrás un dibujo de mayor tamaño que puedes
enviar a tu impresora.
Si lo que deseas es una carta de mayor tamaño, que incluya a
Fortuna, ve a la opción de “Horóscopos gratuitos” y haz clic en
“Extensa selección de cartas”. Esta página muestra muchas
opciones, pero en principio sólo debes bajar hasta donde indica
una lista de “objetos adicionales”. Pulsando la tecla “Ctrl” haz
clic en la “Parte de la fortuna” y en “Chiron”, dentro de la lista. A
continuación, sube al principio de la página y haz clic en el botón
azul “Cliquee aquí para ver la carta”. Como en el caso anterior,
esta carta puede ser impresa haciendo clic sobre ella y
enviándola a tu impresora.
Bibliografía
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Sirio, Málaga, 1989.
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ZWEIG, CONNIE Y STEVE WOLF: Vivir con la sombra.
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Notas
1: Ciertamente existe una escuela muy minoritaria dentro de la
astrología (sideralismo) que sí tiene en cuenta a las
constelaciones. En cualquier caso, a lo largo de este libro nos
mantendremos de dentro de la línea mayoritaria: la astrología
tropical. Volver
2: El ciclo, observado a escala humana, puede ser tanto un
círculo como una espiral. La diferencia entre ambas posibilidades
estriba en que el círculo está contenido en sí mismo, mientras que
la espiral se expande en cada vuelta. La astrología humanista nos
enseña que el ser humano puede dejarse llevar por los ciclos
astrales para sufrir situaciones de “círculo vicioso”, o bien puede
convertir los ciclos en espirales que amplíen su conocimiento y
mejoren su vida. La diferencia entre el círculo y la espiral está en
el grado de consciencia que cada de nosotros quiera desarrollar.
Volver
3: La Luna es el único planeta astrológico que gira en torno a
la Tierra. Volver
4: Marilyn Monroe, nombre artístico de Norma Jeane
Mortenson, luego Norma Jeane Baker. Nacida el 1 de junio de
1926 a las 09:30 horas PST (GMT+8) en Los Angeles, California,
Estados Unidos. Volver
5: En el Apéndice B se explica cómo obtener tu Carta Astral
de manera gratuita a través de Internet. Volver
6: Normalmente solo se dan las posiciones de la mitad de las
casas, ya que la otra mitad surge de las posiciones exactamente
opuestas. Volver
7: Aunque la Unión Astronómica Internacional desbancó a
Plutón de su posición como planeta en el año 2006, para la
Astrología este cuerpo es, y seguirá siendo, un planeta astrológico
de primer nivel, dado que posee un simbolismo muy poderoso
que no puede sustraído a la conciencia humana. Volver
8: Como es sabido, la Luna no emite luz propia, sino que
refleja el brillo solar, pero por cuestiones de costumbre, los
astrólogos seguimos usando el antiguo término de “luminaria”
para referirnos al satélite natural de la Tierra. Volver
9: En cualquier caso siempre hay que distinguir entre progreso
material y progreso espiritual. Mi opinión personal es que si bien
es cierto que en los países industrializados se dan las condiciones
para que la mujer tome mayor conciencia de su parte solar, las
condiciones sociales no bastan para que se produzca un cambio
cualitativo en la conciencia. Se requiere un esfuerzo individual en
cada una de las personas. De todos modos, y salvando las
excepciones, parece evidente que las mujeres están avanzado de
un modo extraordinario en el campo intelectual y espiritual,
superando a los hombres en muchos casos. Volver
10: Actualmente existen diversas observaciones de cuerpos
transplutonianos, pero su incorporación al conocimiento
astrológico no es todavía plena. Volver
11: Mi criterio es que en el campo de la investigación se debe
probar todo, pero a la hora de incorporar elementos a la práctica
astrológica cotidiana, con clientes que esperan respuestas
concretas a sus conflictos, se deberían utilizar sólo aquellos
elementos que cumplan una serie de requisitos:
1. Que existan efemérides y cálculos precisos para esos puntos.
2. Que cuenten con una sólida base teórica: investigaciones,
artículos y libros.
3. Que realmente aporten algo nuevo a la carta, un significado
neto que se pueda diferenciar del significado de los planetas.
4. Que ese significado sea auténticamente relevante en la vida
de las personas.

Volver
12: Si no tienes mucha familiaridad con las matemáticas,
quizá te resulte difícil entender el fundamento de este cálculo. En
realidad es muy sencillo y quizás lo comprendas mejor con otro
ejemplo: Dos automóviles circulan por una carretera en el mismo
sentido. Uno transita por el punto kilométrico 25 y el otro por el 5.
¿Qué distancia les separa? Evidentemente, 20 km. ¿Cómo se
realiza este cálculo? Restando la distancia mayor de la menor: 25
- 5 = 20. Cuando estamos calculando la distancia angular
hacemos exactamente lo mismo. Restamos el valor mayor del
menor y el resultado es la distancia entre dos planetas: 275 - 95
= 180. Así de simple. Volver
13: Si posees una Cuadratura-T en tu Carta te recomiendo la
lectura de Tránsitos Planetarios de Tracy Marks, ed. Urano. Volver
14: La causa más probable del fallecimiento de Marilyn
(conspiraciones al margen) parece ser una sobredosis accidental
de medicamentos. Como Neptuno rige las drogas y las
medicinas, podemos hacer apuestas sobre qué parte de la
configuración la arrastró a su final. Volver
15: En el Capítulo XIV aprenderás cómo hacer funcionar
cualquier elemento de tu Carta. Volver
16: En este apartado hago una lista de diversas terapias o
prácticas que considero especialmente beneficiosas y
recomendables. Esto no quiere decir que comparta totalmente sus
postulados teóricos. Te recomiendo que mantengas la misma
actitud de sana crítica. Volver

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