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Resumen corrientes, unidad 3

Ficha :“Oscar Masotta. El extranjero”

Lo primero que vamos a hacer es contextualizar al autor dentro de los sub


periodos que trabajamos en la Breve historia de la Argentina. Masotta
empieza a trabajar la inflexión del ’66 al ’76, en el año ’66 se produce el
golpe de Estado de Ongania, es una época de ruptura de la universidad.
En el ’66 hubo un exilio masivo de intelectuales, y en el ’76 con el Periodo
de Reorganización Nacional, como lo llamaron los militares, se produjo el
gran exilio de Argentina. La universidad deja de ser el centro de
producción intelectual, este se desplaza a grupos o instituciones que no
son estatales. En el plano de las ideas, enlazado a la producción de estos
grupos, hay un desplazamiento también del existencialismo al
estructuralismo que empieza a ser el movimiento de moda, corriente
novedosa de los años ‘60/’70.
Podemos decir que en el plano de las ideas (1er plano)), del
existencialismo al estructuralismo, y el desplazamiento de la universidad
(2do plano) a otros lugares que tienen que ver por ejemplo con el instituto
Di Tella o el instituto de Pichon.Riviere. Lugares donde pasaban cosas
muy novedosas y de donde circulaba la producción “vanguardista” tanto
intelectual como artística. No solamente instituciones sino también grupos
de estudios privados que empiezan a ser muy fuertes. Por ejemplo, los
grupos de estudio de Oscar Masotta junto con otro que fue Sciarretta
fueron los que instalaron esta forma de circulación del conocimiento que
no pasaba por la universidad. Y a su vez ellos fueron los que introdujeron
a Lacan en Argentina.
Biografía de Masotta: vive muy pocos años. Nace en 1930 y fallece en
1979, vive 49 años al igual que Bleger. Es un intelectual, diferente a los
“universitarios”. No obtuvo ningún título, ingreso dos veces a filosofía pero
no se integraba a esa forma de transmisión de conocimiento. Discutía con
sus profesores, sabía que leía más que ellos. Era una especie de esos
genios indomables a los que la escuela los aburre.
El texto de Jotgelina Corbatta Oscar Masotta, divergencias y
convergencias, plantea 3 momentos biográficos.
El primer tiempo: la primera cuestión o contribución que hace Masotta, es
la participación en una revista que fundan algunos amigos o conocidos
suyos. Una revista muy estudiada por los historiadores, se llama
“Contorno”, estamos hablando de crítica literaria. En argentina hay una
cultura de escritura de ensayo muy abierto, muy de ir registrando
pensamiento, del desarrollo de ese pensamiento que no necesita una
conclusión precisamente. Todos los jóvenes que participaban de la revista,
se pliegan al género ensayístico. Por ejemplo: Leon Rozitchner, Masotta,
Sebreli, Carlos Correas, Tulio Halperin Donghi, Noé Jitrik. Intentaban
hacer una revista que tendiera puentes entre la literatura y la política. La
revista salió desde el año ’53 hasta ’59. Mucha gente leía para ver que
pensaban, y eso generaba opinión. La información circulaba de una
manera muy diferente a lo que es ahora. Ellos se propusieron generar una
opinión pública y realmente lo hicieron. Se establecían debates muy
fuertes entre distintos grupos ideológicos y políticos. También eran
peronistas pero no filo partidarios. Una especie de peronismo crítico.
También venían de una formación marxista.
Masotta formaba como un sub grupo junto con otros dos compañeros,
Correas y Sebreli. Ellos eran muy jóvenes, estaban en bs as de los años
’60, circulaban por bares donde se juntaba la gente a discutir ideas. Eran
existencialistas sartreanos. A Masotta le gustaba dar muchos discursos, le
gustaba ganar siempre en la conversación.
Este grupo de tres, (Masotta, Sebreli, Correas) funcionaba bajo una serie
de mitos que tenían que ver con ciertas películas que ellos veían en ese
momento y les influían mucho. Vivian la vida bajo la lógica de estos mitos.
El “mito del aventurero” y el “mito del hombre que se va”, o sea ese
hombre que viene, acomoda las cosas en una sociedad y después se va.
Jorgelina Corbatta dice que estos mitos también lo marcaron a él y su vida
también tuvo que ver con esta forma de abordar la vida, porque Masotta
fue fundando cosas y se fue yendo también. No tuvo recorrido académico,
no se dedicó a un solo tema, no estuvo siempre en un mismo lugar.
El segundo tiempo tiene que ver con su pertenencia, con su participación
al Instituto Di Tella. Fue un lugar de producción intelectual y artística
vanguardista y novedosa de los años ’60. El Di Tella fue fundado en 1958
con fondos de una gran empresa que había en esa época, Siam Di Tella,
empresa que había acrecentado con el peronismo. Tenía dos ámbitos: uno
para estudios artísticos y otro para estudios sociales y culturales.
Los artistas del Di Tella empiezan a hacer intervenciones urbanas en
lugares donde no es adecuado para eso ni está pensado que va a suceder
algo artístico.
Hay algo vivencial, y después eso se pierde.
Masotta participa activamente de la crítica cultural de estas producciones.
No se pone a hacer instalaciones sino que participa de la lectura, de la
interpretación de lo que está sucediendo ahí.
Hay un libro de Masotta que se llama “La historieta en el mundo moderno”,
es un crítico literario de época. No está cerca del psicoanálisis todavía
pero las lecturas que él va haciendo lo preparan para recibir a Lacan.
Lacan introduce referencias externas en el psicoanálisis que son: la
antropología estructural de Levi Strauss y la lingüística de Saussure.
Entonces hay una cuestión con la extranjeridad. Masotta es extranjero en
la Universidad y extranjero en los temas internos del psicoanálisis. Eso es
lo que le permite, justamente, acercarse a la lectura de Lacan.
En esa segunda época, se situan estas lecturas.
Ahora pasamos a la tercera época, que es la época donde ya se introduce
el psicoanálisis. Es introductor de Lacan en Argentina. El empieza a leerlo
a Lacan porque Pichon-Reviere se va a Francia, trae textos de Lacan en
francés y el mito dice que un día se los da, porque él los tenía sin interés
de leerlos y Masotta era un devorador de textos y lo lee.
En esa época el instituto de Pichon-Reviere da una conferencia que es
inaugural. Es la primera vez que alguien habla de Lacan. Del Lacan
psicoanalista.
Masotta retoma a Politzer (era quien quería articular psicoanálisis y
psicologia, decía que había que ir a lo concreto) para criticarlo y para
presentar a Lacan. Para decir dos cuestiones: que hay que volver al
lenguaje via el estudio también de la lingüística, porque lo que Lacan dice
es que el inconsciente está estructurado con el lenguaje. En esa vuelta,
Masotta propone volver a Freud. En el APA se había dejado de leer a
Freud, lo cual provocaba cualquier tipo de lectura de disparada del
psicoanálisis a cualquier terreno que no era el psicoanálisis.
La APA tenía una matriz teorica kleniana, por lo tanto no podía leer a
Lacan. Entonces en el interior del psicoanálisis, hay un pasaje en los años
‘60/’70 de una matriz teórica kleniana a una matriz teórica lacaniana, que
es lo que impera actualmente.
Por otro lado hay un basamento filosófico que también tiene que virar para
que pueda ingresar Lacan que es: del existencialismo al estructuralismo.
En el año ’67 Masotta abre su primer grupo de estudio sobre psicoanálisis
en su casa. Eran cuatro personas. A los tres o cuatro años ya tenía 300
alumnos, lo cual constituía un sustento económico.
En los ’70 aparecen unos grupos que critican la ortodoxia, la formalidad y
las condiciones de la APA. Los grupos de Masotta fueron abriendo los
posib ilidades de criticar eso, socavando un poder. Se destapa algo,
entonces un montón de gente empieza a hablar de psicoanálisis y a querer
ser psicoanalista sin las condiciones que planteaba la APA, que tenían que
ser médicos. Entonces hay un movimiento enorme sumado a que como
Masotta toma la consigna de Lacan de leer a Freud, se vuelve a leer a
Freud. Y este decía que no había que ser médico para ser psicoanalista.
Después comienza otra época en Argentina, la Triple A, el golpe de estado
de ’76 y Masotta se exilia. Da conferencias en varios lugares. Los textos
de Masotta son entendibles, no entra en un léxico profesional, toma
modelos comunes de la vida cotidiana. Masotta tuvo mucho que ver con la
instalación o reinstalación del psicoanálisis en España con la colaboración
de muchos de los psicoanalistas que se habían exiliado desde el ’76 en
adelante. En ’79 Oscar Masotta falece por un cáncer de pulmón. En los ’80
con la vuelta de la democracia en Argentina, se elabora una especie de
alianza entre universidad y psicoanálisis que perduro hasta ahora.
Para el final quedaron las diferencias entre existencialismo y
estructuralismo. Sartre intenta en Francia en el periodo de posguerra
recuperar la fenomenología alemana. Este lee mucho a Heidegger, Hegel
y Husserl, las 3H, que es la formación de Lacan también, que era
contemporáneo de Sartre. Lo que hace a partir de estas lecturas, es
fundar una especie de fenomenología existencial, con predominación de la
conciencia. Dicen que los objetos tienen una conciencia de objeto pero
que la del ser humano esta como desdoblada ya que dice que el ser
humano es el único que tiene la posibilidad de estar viviendo y al mismo
tiempo registra lo que está viviendo conscientemente.
En cambio el estructuralismo de la mano de Levi Strauss va a hablar del
inconsciente. Que hay una estructura que nos precede, que nos aliena. Es
decir, hay un yo como desconocimiento. Dice que el yo es una especie de
servidor del ello y del superyó. Desconoce su propia condición. El
inconsciente lo comanda. Nos comanda algo que nosotros no sabemos.
Otra cuestión de Sartre dice que si la conciencia es algo que nosotros
tenemos que registrar, que no es algo fijo, en realidad es algo que nos
acerca más a la nada del ser. Lo importante para Sartre es el proyecto.
Esa libertad de la que uno vive, poder ir eligiendo de acuerdo a un
proyecto. Es una cuestión de elección.
En cambio los estructuralistas van a plantear que hay un determinismo, no
libertad. Un determinismo que nos da la propia estructura que nos habilita,
que nos constituye.
En el existencialismo el sujeto es un centro organizador de la experiencia y
en el estructuralismo el sujeto es un efecto de esa estructura.
Ese cambio de matriz filosófica de pensamiento, encarnada en la figura de
Oscar Masotta, tuvo que estar presente para que la lectura Lacan se
pueda instalar en argentina y haya un cambio entonces de esa matriz mas
kleniana, inglesa del psicoanálisis a la propuesta lacaniana.
Entre Paris y Buenos Aire.

CAPITULO IV: “La creación de las carreras de psicología”

La primera presidencia de Perón (1946- 1952) luego de la S.G.M, periodo de


prosperidad, redistribución de la riqueza, y de beneficios sociales. En su segundo
mandato (1952- 1955) conflictos políticos con la Iglesia y las Fuerzas Arma, y una
crisis económica progresiva, por la caída de baja de las exportaciones, la caída de los
precios de la producción agrícola, y el aumento de los costos del Estado de bienestar,
en 1952, la muerte de Evita, marcó un hito. Y el general iba a alejarse cada vez más
de sus bases sociales. Dedicándose más bien a resolver las intrigas del poder. Frente
a la movilización obrera, se implanto el estado de sitio en todo el país, pero no alcanzo
para prevenir las conspiraciones en el seno de las Fuerzas Armadas, molestas por una
tímida ley de divorcio y por la ruptura del gobierno con la Iglesia. Perón fue derrocado
en septiembre de 1955.

El nuevo gobierno, conducido por el general Eduardo Leonardi respondía al ala


liberal del Ejército, y se hizo llamar “Revolución Libertadora”. Su consigna era la
reconciliación nacional bajo el lema “m ni vencedores ni vencidos”, ese militar blando
fue reemplazado a los sectores más duros del ejército que llevaron a la presidencia a
Aramburu. Era el final de una década que había transformado profundamente el tejido
social de la Argentina y el principio de una crisis de legitimidad del sistema político que
iba a extenderse aún más allá del retorno de Perón al poder en 1973.

Ningún gobierno, fuera o no dictatorial, podría obtener un mínimo de legitimidad


sin el acuerdo dl líder exiliado, dando lugar a una nueva etapa de estabilidad
socioeconómica.

El peronismo estaba negado a la idea de modernizarse de la Argentina. Entre


1955 y 1959 se crearon seis carreras de psicología en seis universidades, dejando de
ser una solo una disciplina de conocimiento para transformarse además en una
profesión, se implantaría en la cultura accediendo a un público masivo por medio de
editoriales y publicaciones.

Las editoriales y las revistas permitieron esbozar un proyecto intelectual que poco
tiempo después lograrían plasmar en el ámbito universitario. Para el peronismo, la
universidad en general había representado un problema político o policial más que un
reto intelectual o cultural.

Cobraron nueva vida las instituciones como la UPAK y la CLES, en la difusión de


nuevos conocimientos, incluyendo psicoanálisis, psicología y ciencias sociales. Lo
intelectuales podía impartir sus enseñanzas son restricciones. Varias editoriales y
numerosas revistas imponían al público en contacto con las últimas novedades de la
cultura occidental.

Jaime Bernstein (1917-1988) y Enrique Butelman (1917-1990) dos jóvenes de


veintisiete años en busca de una actividad lucrativa, fundaron una editorial.

Bernstein era inmigrante judío, estudio pedagogía, también formo parte del
Instituto de Sigmund Freud, fundado por Bela Székely, un psicólogo. Bernstein fue
subjefe de la sección de pedagogía.
En 1945 fundaron Paidós, acababa de recibir una pequeña herencia, lo cual
facilitó el emprendimiento. Era auxiliar en el “Seminario de psicología aplicada a la
educación”.

Enrique Butelman era un estudiante crónico de filosofía. Había realizado sus


estudios primarios en Alemania y completo la secundaria en Suiza. Aprendió a hablar
francés, alemán e inglés.

Paidós se dedicó al campo de la psicología infantil. El primer libro fue traducido


por la segunda esposa de Butelman “Los conflictos del alma infantil” de Gustav Jung.
Ambos habían logrado satisface las demandas de un público heterogéneo, que
comenzaba a construirse como tal, y habían ampliado su oferta extendiéndola a otros
dominio como la psicotecnia, el psico- diagnóstico, las nuevas corrientes psicológicas
y el psicoanálisis. Pretendía apoyarse en la novedad de las ciencias sociales y el
psicoanálisis, prefería traducir culturistas norteamericanos, publicaba libros más
cortos, en el dominio de las técnicas proyectivas y la psicosociología.

También estaba Kapelusz, otra editorial ligada a la educación y a la psicología,


fundada en 1907 por un inmigrante español, Adolfo Kapelusz, empezaron con textos
de Víctor Mercante. Pretendía prolongar la tradición experimental, traducía autores
franceses, privilegiaba trabajos exhaustivos, focalizados en la psicometría

Ambos tenían interés por los test y la evaluación psicológica.

En la carrera de psicología, la perspectiva de los fundadores de Paidós sería


mucho mejor recibida, los directores de sus colecciones ocuparían puestos
importantes en las careras de Psicología de Rosario, Buenos Aires y La Plata. La
psicología que interesaba a Kapelusz seria rápidamente relegada a departamentos de
Ciencia de la Educación o a carreras de psicología más alejadas del Rio de la Plata.

Durante el primer peronismo vieron la luz toda serie de revistas independientes,


que reunían una buena parte de lo que se llamó “anti peronismo intelectual”. Sus
contenidos nos permiten analizar las características del campo intelectual
extrauniversitario de la época. Encontramos ya a algunos de los actores más
importantes de la etapa subsiguiente, particularmente a algunos jóvenes intelectuales
que iban a favorecer la institucionalización de la psicología en la universidad.

Estaba la revista Sur que fundó Victoria Ocampo en 1931, publicación muy
respetada, aristócrata, letrada, y fervientemente anti peronista, destinada a marcar el
camino a las elites literarias, funcionando como instancia suprema de consagración
intelectual.

Por otro lado estaba la revista Contorno, eran autores más jóvenes, menos
conformes con el orden social y cultural previo al peronismo, y más críticos de los
cánones establecidos. Esta revista estaba a punto de tomar la posta de la universidad
peronista, constituida por estudiantes y jóvenes graduados de la Facultad de Filosofía
y Letras de la UBA incluyendo a Oscar Masotta, Ismael Viñas, etc. Buscaba romper
con los valores de sus mayores. Iba mucho más allá del peronismo.
Sin ser peronista, la revista iba a ser racional y popular, sin ser ortodoxa, se
identificaba con el marxismo, y sin poder perteneces a la tradición liberal de los
consagrados, buscaba establecer nuevos criterios de legitimación.

En 1953 aparece otra publicación llamada Imago Mundi, fundada por


historiadores y filósofo, como José Luis Romero. Este grupo de antiguos profesores
trataba de ubicarse más allá de la coyuntura política nacional, con el fin de resituar los
problemas de la Argentina en un contexto internacional y en una temporalidad de más
largo alcance, donde lo político no era más que uno de los ingredientes de “la cultura”.
A través de la historia cultural, trataban de recomponer una visión global, una Imago
Mundi que la modernidad había fragmentado. Funcionaba como una verdadera
universidad en las sombras, proveyendo a sus lectores las referencias omitidas en la
enseñanza superior.

Después del golpe que derrocó a Perón, graduados, profesores tomaron


universidades nacionales. Lonardi nombra un interventor, paran poder normalizar la
universidad, dejando de estar tan intervenida por el Estado. Entre 1955-1966 se
produce la Edad de oro de la universidad, nuevos cargos, democratización.

A fines del mes de diciembre la situación se hizo más tensa, cuando el gobierno
naciones a instancias de su ministro de Educación, aprobó una ley que establecía
condiciones para la organización de las universidades nacionales, enunciando la
necesidad de excluir de los claustros a todos aquellos que hubieran colaborado con el
peronismo.

En 1955 la creación de la primera carrera de Psicología de la Argentina en la


ciudad de Rosario, en la UnL. En la apertura, la clase inaugural fue dictada por Alberto
Graziano, senador nacional antiperonista. Se reformuló el plan de estudio de
Psicología y algunos profesores fueron reemplazados,

Entre los nuevos estaba Jaime Bernstein, que fue nombrado jede del
Departamento de Psicología Educacional de la Dirección de Psicología de la Provincia
de Buenos Aires. Fue designado profesor de Psicología Educacional en la Facultad de
Filosofía de Rosario, Bernstein fue convocado a participar de una comisión encargada
de elabora un nuevo plan de estudio, y se propuso un plan de 28 materias, distribuidas
en cuatro años, que sería adoptado a partir de 1956. También Butelman estuvo a
cargo de la materia Historia de la Psicología, no poseía ningún diploma universitario.

En 1957 la creación de la carrera de Psicología en la Universidad de Buenos


Aires, estuvo claramente ligada a la renovación institucional que se produjo en el seno
de la universidad a partir de la caída de Perón., fue pos la solicitud de estudiantes de
la UBA, pretendían crear una extensión universitaria y una carrera de sociología.

Marcos Victoria sería nombrado director de la RUBA. Tuvo por concurso la


cátedra de Psicología en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. Gino Germani
según Nuria Cortada de Kohan, decía que era el más interesado en que se formara la
carrera de Psicología.

Telma Reca asumió la cátedra de psicología de la niñez y la adolescencia.


Soñaba con promover la práctica clínica autónoma de los futuros psicólogos,
1905, se crea la Universidad Nacional de La Plata, 1906, sección pedagógica
para formación de profesores, a cargo de Víctor Mercante, Calcagno había sido su
alumno, iba a privilegiar la experimentación del laboratorio, desde una perspectiva más
afín a la tradición alemana.

Dedicó su tiempo al diseño y confección de más de 30 nuevos aparatos de


medición. El laboratorio de Psicología comenzó a ser conocido como “el laboratorio de
Calcagno”.

Fue elegido decano de la facultad, presidente de la universidad y diputado


nacional de la U.C.R.

Después de la llegada del peronismo al poder, muchos profesores fueron


expulsados y el mismo Calcagno. También convocó a Fernanda Monasterio, joven
médica para que dé una cátedra de psicología de la niñez y la adolescencia y para que
dirija el instituto de Psicología. Otro papel importante en la comisión especial lo
desempeño Ángel Garma, y también Luis María Ravagnan.

1958 la carrera de Psicología de Buenos Aires había comenzado a funcionar y


otras dos carreras acababan de ser creadas en las ciudades de Córdoba y San Luis.
Calcagno y Monasterio propusieron no solo la creación de un profesorado en
Psicología, según el encargo original, sino también la creación de una carrera de
psicólogo profesional.

Para monasterio, el campo de acción del psicólogo, es clínico, laboral,


psicopedagogo. Así el perfil del psicólogo se da en tres especialidades.

El proyecto Calcagno- Monasterio fue rápidamente aprobado.

Garma era el único que se interesaba en la carrera de Psicología como lugar de


difusión para el psicoanálisis.
Breve historia de la psicología en Argentina, 1896-1976.

Dafgal señala que él hace una periodización imperfecta -de la historia del campo
psi en Argentina- puesto que se afirma sobre una suma de criterio disciplinares,
culturales, políticos, sociales y epistemológicos. Trata, además, de mostrar que en
cada etapa la psicología junto al objeto y al método, se orientaban de acuerdo a las
cosmovisiones del momento.

Cinco son los sub-períodos de Dafgal:

1) El nacimiento de la Psicología en Argentina: positivismo y nación (1896-1925).

La psicología nace en un contexto de la generación de los ’80, la fundación de la


argentina como estado moderno y el estado unificado.

Ésta psicología tenía dos características: por un lado la definición como ciencia
natural de la concepción positivista, y por el otro su filiación privilegiada con el
pensamiento francés. El positivismo es una forma de ver el mundo con su fe ilimitada
en la ciencia y el progreso y una confianza extrema en los métodos naturales en
especial la observación y la experimentación.

Una figura importante es la de José Ingenieros (psiquiatra, sociólogo y


criminólogo), fue uno de los primeros profesores de psicología en la UBA. Desarrolló
una “Psicología biológica”, porque afirmaba (esto lo hizo en una crónica que envió
desde Paris al diario La Nación) que los hechos psicológicos son muy complejos
puesto que deben analizarse desde una perspectiva biológica aunque sea desde
conocimientos generales y era labor de los fisiólogos.

Para Ingenieros solo era cierto lo proveniente de lo clínico, el laboratorio. Éste


apoyo en la clínica fue lo que caracterizó a los que integraron la escuela de Buenos
Aires.

En 1905 en la ciudad de La Plata, después de la creación de la Universidad


Nacional, se desarrolló una psicología no médica. En 1906 en la Facultad de Ciencias
Jurídicas se abre una sección pedagógica con la finalidad de formar profesores, el
director era Víctor Mercante que era cultor de una pedagogía científica y pretendía
apoyar sus descubrimientos en los principios de la psicología experimental y la
antropología biológica. Se forma luego la escuela de La Plata donde se desarrolla una
corriente psicológica no clínica (Víctor Mercante, Rodolfo Senet, Alfredo Calcagno).

El positivismo no es solo una forma de ver el mundo, porque también pretendía


cambiarlo a toda costa, con una cosmovisión no religiosa, que involucraba a las
acciones del Estado y sus políticas. En este contexto las psicologías desarrolladas se
orientaban en problemas concretos. La neurosis y la histeria (Psicopatología) las
masas (Psicología de las masas) delitos (Psicología criminal), etc.

Hay otros personajes importantes José María Ramos Mejía, Rodolfo Rivarola,
Octavio Bunge, quienes incentivaron las obras de Spencer, Comte, Darwin, etc.

2) La reacción anti- positivista: psicología y filosofía (1925-1943).


La reacción anti- positivista señalaba en qué sentido el hombre no podía ser
reducido a su ser natural. Se da por diferentes factores; uno es la visita del
renombrado filósofo español José Ortega, que promovió a intelectuales como
Brentano, Husserl y Dilthey, se rehabilita el lugar de la conciencia y la experiencia
subjetiva, dejándose de lado el positivismo, y lo que antes era observación y
experimentación paso a ser comprensión e interpretación. La psicología se orientaba
ahora a los valores, la libertad, la creación y la vida misma, desde una perspectiva
histórica y filosófica.

El horror de las millones de muerte que provocó la Primer Guerra Mundial también
ayudo a que se desconfiara del progreso y la ciencia.

Bergson fue uno de los más importantes en este periodo, fue quien le dio un duro
golpe a los fundamentos de la psicología experimental, afirmando que la medición y
las matemáticas que eran pilares de la experimentación, no podían ser aplicados a los
hechos psicológicos en cuanto no se los despojara de su característica principal que
era la de ser cualidad no cantidad. Por otro lado también señaló que los datos
inmediatos son los que proporcionaba la conciencia, no la experiencia subjetiva; una
vez más la subjetividad y lo personal golpeaba a la objetividad de la ciencia. Además
de Bergson, había otras figuras importantes: Korn (filósofo, psiquiatra y político),
Mouchet (psiquiatra) y Alberini (Profesor de Filosofía).

3) Las psicologías aplicadas: psicotecnia y orientación profesional (1943-1955).

Con la industrialización de los ’40, las poblaciones rurales emigraron hacia la


ciudad. Se constituyen las clases obreras que encontraron en el peronismo una salida
política.

La educación busca nuevas prácticas que se basan en la psicología aplicada. La


escuela tiene un papel crucial en cuanto a distribución de las posibilidades sociales y
la aseguración de la adhesión popular.

Por primera vez en Argentina los docentes de las escuelas se formaron para
administrar cuestionarios psicológicos y pruebas psicométricas.

La difusión extendida de las prácticas psicológicas llevaron a la organización del


Primer Congreso Argentino de Psicología, en 1954, en San Miguel de Tucumán,
donde participaron más de doscientas personas, entre ellos, sacerdotes, profesores de
psicología, filósofos, psiquiatras, psicotécnicos, y por primera vez alguno
psicoanalistas.

Se propusieron la creación de la carrera de psicología que se abrió en Rosario el


6/04/55, y cerró en septiembre por el Golpe de Estado, reabriendo en 1956.

4) La invención del psicólogo: psicología y psicoanálisis (1955-1966).

Hubo un auge de los estudios universitarios de psicología. En este periodo se


produce una renovación cultural y social donde las universidades se democratizan,
hay incorporación de nuevos profesores y se modernizan los planes de estudio. Así
entre 1957 y 1959 se crean cinco carreras de psicología en universidades nacionales:
Buenos Aires, Córdoba, La Plata, San Luis y Tucumán.
La psicología se forma como profesión y el psicoanálisis deja de pertenecer al
terreno de los médicos.

Entre 1959 y 1962 los psiquíatras y psicoanalistas ligados a la orientación de la


salud mental eran los precursores fundamentales para los estudiantes de psicología.

Se da un proceso de Clinización psicoanalítica, donde en el país la mayoría de los


psicólogos se apoyaban en la clínica, pero particularmente en el psicoanálisis.

Los personajes importantes son Enrique Butelman (dirigió la carrera de psicología


en Buenos Aires); Jaime Bernstein (dirigió la carrera de psicología en Rosario); Gino
Germani (dirige l carrera de Sociología en la UBA). Juntos promovieron la
incorporación de nuevos profesores y de la renovación del plan de estudio. Publicaron
en la editorial Paidós a autores locales y tradujeron a extranjeros. Enseñaron materias
fundamentales para la formación del psicólogo, y dieron elementos teóricos de gran
importancia para poder entender la psicología como ciencia natural.

La identidad del psicólogo se da de dos maneras:

 Proactiva: donde psiquiatras reformistas, profesores y psicoanalistas le


brindan un modelo para una orientación clínica.
 Reactiva: se rechazan los roles de los psicólogos y se lo orienta a ser un
consejero y testita.
Los primeros graduados de psicología en la UBA se juntaron para formar la
Asociación de Psicólogos de Buenos Aires.

Se empiezan a integrar al rubro de la psicología las mujeres.

5) El psicólogo como psicoanalista: la recepción del lacanismo (1966-1976).

El discurso de salud mental convivía con el psicoanálisis inglés y con la forma de


entender el objeto de la psicología de la tradición francesa.

En la década del ’60, con la recepción del estructuralismo francés se produce una
disyunción excluyente entre psicología y psicoanálisis y con la llegada del lacanismo,
la adquisición de sus enseñanzas por parte de los psicólogos, y en vez de adoptarla
como una referencia teórica privilegiada, la tomaron como una matriz identitaria por lo
que en menor o mayor medida se fueron apartando de su esencia de psicólogos para
ser psicoanalista.

Luego se produce el rol que se conoce en la actualidad, articulando psicología y


psicoanálisis.

En 1971 en la APA se producen disturbios y se separan en grupos Plataforma y


Documento.

En 1974 se crea el primer instituto lacaniano en el Río de La Plata.


Vida y obra de José Bleger. (Luisina Bourband)

Los trayectos singulares nos permiten entender ciertos momentos de la psicología


Argentina. Esos trayectos han sido protagonizados por estos autores como Pichon-
Riviére, José Bleger y Oscar Masotta. Bleger es de la segunda generación de
psicoanalistas, es discípulo de Pichon-Reviére y se analizaba con el. José Bleger nace
en 1922, vive solamente 49 años y muere el 20 de junio del ´72. Es de esas personas
que uno piensa que hubiera sido si hubiera seguido produciendo.

El ha logrado que lo estemos nombrando y recuperando, Bleger nace en Ceres,


que es una ciudad del norte de Santa Fe, era judío, de padres rusos, tanto la familia de
su madre como de su padre se dedicaban a ramos generales. A los 12 años, como no
había escuela secundaria en Ceres lo mandan a estudiar a Rosario, en el año ´34 se
fue a vivir a una pensión ahí, después entra a la universidad nacional del litoral, en la
facultad de medicina se perfilaba como un alumno bastante brillante. El trabajaba en
persona con Clemente Álvarez en la cátedra de clínica. Tenía una orientación
comunista, higienista de salud mental que en esa época todavía no se llamaba salud
mental sino higiene mental. Es antifascista y por lo tanto antiperonista lo cual le trae
bastantes problemas porque cuando él se recibe con esta orientación comunista, por
supuesto que su pretensión es ingresar en algún servicio de salud de servicio público
y en esa época si no eras peronista no entrabas. En al año ´46 con su mujer decide
irse a Santiago del Estero, ser médico del pueblo, de familia.

Bleger ha sido un gran investigador y tenemos que preguntarnos ¿Qué encuentra


para no deprimirse? Encuentra que puede relacionarse con distintas provincias como
por ejemplo Tucumán, allí conoce a un ruso que se llama Gavrillov, que había venido
de Rusia y que había traído las teorías de Pavlov. Gavrillov es una curiosidad dentro
de la psicología de Argentina porque es el primero que intenta hacer un cruce entre el
psicoanálisis y la reflexología pávloviana. Entonces a Bleger que es de una mente muy
abierta, le interesa esto, se pone en contacto y estudia con él. Viaja a córdoba en
muchas oportunidades y se encuentra con un psiquiatra, Gregorio Berman. El tenía un
instituto neuropatico. Bleger empieza a ser como su discípulo, su protegido, comienza
a tener acceso a su biblioteca. Empieza a atender de vez en cuando en este instituto
neuropatico, comienza a empaparse con el psicoanálisis y lo que nos muestra es que
todo el tiempo está reflexionando, teorizando y creando teorías acerca de lo que está
haciendo y lo que está leyendo.

Situémonos en el contexto: Santiago del Estero. ¿Era posible, por ejemplo, un


psicoanálisis a largo plazo? ¿Someter a un paciente a una terapia a largo plazo?
Aparte de que él no estaba habilitado por la APA, empieza a pensar en tratamientos
cortos, o sea, una especie de psicoanálisis simplificado y en tratamientos que
confiaban mucho en los medicamentos. En la farmacología, tratamientos que incluían
fármacos. Pichon-Riviére también había escrito un libro sobre la narcolexia, acerca de
cómo la administración de fármacos habilitaba ciertos accesos a la conciencia. Bleger
también, el primer libro que escribe sobre este tema se llama teoría y práctica del
narcoanálisis. En el año ´52 comienza a viajar a buenos aires a participar de ciertas
actividades de la APA y sobre todo a analizarse con Pichon-Riviére. Luego en el año
´54 se postula como candidato para ingresar a la Asociación Psicoanalítica de
Argentina y lo aceptan. Allí decide mudarse para buenos aires, ya había tenido dos
hijos.

Llega a buenos aires, sigue siendo parte del partido comunista y empieza a trabajar
en una clínica que es emblemática de esa época, ahí estaban varios psiquiatras,
incluido Pichon-Riviére. Todos los que trabajaban la trayectoria Bleger en general
comienzan acá, en el libro psicoanálisis y dialéctica materialista. Este libro intenta
poner en discusión, en dialogo, el psicoanálisis y el marxismo. La reflexología
pávloviana, esa era la teoría que al marxismo le parecía científica, correcta,
revolucionaria, que podía colaborar a promover y consolidar un hombre nuevo. No el
psicoanálisis, en ese momento la cosa estaba de esa manera. Además había ido
cambiando la APA, de ser una institución que se había postulado como de
investigación a ser una institución que formaba psicoanalistas con ciertas condiciones
para una práctica privada de consultorio.

En el momento en que se fundan las carreras de psicología desde el año ‘56, para
ingresar a la APA, a que te analizara un analista de la APA había que esperar 6/8
años. Simultáneamente Bleger critica las instituciones en las que participa pero no se
va de ellas. El decía que el debate había que darlo adentro de la institución. En el ’56
se abre la primera carrera de psicología en Rosario. En el ’75 la de Buenos Aires. En
el ’58 surge este libro, psicoanálisis y dialéctica materialista, donde Bleger trata de
conciliar lo inconciliable de ese momento: psicoanálisis y marxismo. Para explicarle a
los miembros del partido comunista que el psicoanálisis era revolucionario y para
explicarle a los psicoanalistas que se podía hacer algún tipo de práctica que no tuviese
que ver con esa ortodoxia que ellos estaban realizando.

A los psicólogos que habían ingresada hacia 2 o 3 años a la facultad. Los ayudaba
a pensar esta pregunta que es qué hacia un psicólogo, a que se iba a dedicar.
Intentemos ponernos en la situación de ese momento que no tiene nada que ver con la
actual. Por un lado, los psicoanalistas tenían que ser médicos. Por otro lado, los
psicólogos no podían ejercer prácticas terapéuticas. Es algo que en la actualidad
parece demencial. Entonces, ¿Qué hacia un psicólogo? No podían tener un
consultorio y tampoco ser psicoanalistas, porque para eso tenían que ser médicos.
Bleger estaba ahí en ese borde tratando de inventar qué hacían los psicólogos, siendo
él psicoanalista.

En los años ’60, él abre un instituto para atender pacientes en forma gratuita, abrió
como un servicio de la APA, cosa con la que muchísimos no estaban de acuerdo.
Entonces en esa época negociaron abrir ese instituto para atender gratuitamente
desde el psicoanálisis a la comunidad, pero la atención era solamente por un año.
Entonces vos ibas un año y llegabas hasta donde llegabas con tu análisis. Pero vamos
más atrás. Bleger empieza a ser profesor. Primero, en el ’58, es profesor de
introducción a la psicología en la UBA.

En el año ’59 en Rosario dicta la primera cátedra de psicoanálisis de Latinoamérica.


Bleger, aparte de ser un profesor brillante, un gran pedagogo, muy didáctico y muy
riguroso en sus trasmisiones, parece que era muy seductor. Era un hombre alto, flaco,
muy elegante, las salas se llenaban de mujeres que iban a escucharlo. El empieza a
ser, aparte de todo eso, una especie de esperanza de esos psicólogos que
pretendían ser muchísimo más que un auxiliar del médico o simplemente hacer tests
para que otros los utilizaran. Se convierte en un líder de esos grupos jóvenes.

Recién en el ’85 los psicólogos pueden practicar una terapéutica. En el partido


comunista cae bastante mal en libro de Bleger, le critican que él quiere reivindicar al
psicoanálisis, pero en vez de huir o rechazarlos, intenta establecer un dialogo. El
partido comunista le pide a Bleger que se retracte de lo que está diciendo
básicamente, sin embargo no se va del partido, recién se va cuando le tocan una fibra
intima. En el año ’62 viaja a la Unión Soviética y ahí ve algo que lo desarma: como
trataban a los judíos, cuando retorna, renuncia al partido comunista. Incluso la
autobiografía que Bleger estaba escribiendo y no término porque falleció se iba a
llamar, judío, psicoanalista y marxista. El decía que ese orden era el que a él lo
identificaba. En el año ’63 aparece otro libro que se va a reeditar más de 20 veces que
es psicología de la conducta, son las clases de él, una especie de manual que hace el
con consejos.

Desde el año ’62 al ’65 Bleger qué hace, volvamos a esto de qué pueden hacer los
psicólogos que no sea hacer el paramédico, el ayudante del médico. Bleger de alguna
manera empieza a explorar estos ámbitos y dice que el psicólogo tiene que salir del
ámbito privado para dedicarse a lo comunitario. Este muy influenciado por Pichon-
Riviére y el trabajo con los grupos. La idea es que salga a la calle, entonces empieza a
hablar de psicohigiene, de higiene mental, como le decían en esa época. Ahora se
llama salud mental y también empieza a hablar de psicología institucional, ese es el
libro que el publica en el año ’66: psicohigiene y psicología institucional. Que el
psicólogo pueda desplazarse del campo de la enfermedad individual al campo de la
salud comunitaria.

Muchos lo criticaban por esto, que en lugar de presionar para que los psicólogos
hiciesen terapia, los mandaba a trabajar al barrio. Bleger decía: es una pena que el
psicólogo solo se dedique al consultorio cuando tiene toda la riqueza de ser agente de
cambio social. En el ’66 muchos docentes se van de la universidad, y entre ellos
Bleger, de alguna forma como que se retrotrae al consultorio. En el año ’67 se edita un
libro titulado Simbiosis y Ambigüedad. Empiezan a formarse grupos dentro de la APA
que presionan fuertemente para que cambien las condiciones y que los psicoanalistas
pueden hacer otras cosas, entonces estos grupos que fueron dos: plataforma y
documento. Hicieron una presentación y toda una serie de reuniones hasta que
rompieron con la APA.

Bleger que estuvo participando junto a ellos en reuniones, ideológicamente,


aconsejando, en el momento en que hubo que romper no firmo el documento. Decidió
quedarse en la APA, ya que estaba enfermo en esa época del ‘70/’71, ya había tenido
problemas cardiacos y estaba muy débil. Estaba a favor de sostener que el
psicoanálisis era algo específico y no lucha política, por eso Bleger no se fue con ellos.
Tenemos dentro de la APA, por ejemplo, a los psicoanalistas exogámicos que tenían
relación con el afuera. Por ejemplo, Pichon-Riviére y Bleger. Y por otro lado tenemos a
los psicoanalistas profesionales, que son conservadores de la institución. En relación a
los psiquiatras tenemos a los psiquiatras organicistas y a los psiquiatras reformistas. Y
respecto a la psicología tenemos a los fundadores de las carreras y a los jóvenes
profesores.

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