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UNIVERSIDAD SALESIANA
DE BOLIVIA
CARRERA DE DERECHO
DOSSIER
DERECHO PROCESAL CIVIL I
Unidad 6: EL PROCESO......................................................................................................................29
1. Teoría y objeto del proceso.-.............................................................................................................29
2. Desarrollo histórico del proceso civil.-...............................................................................................30
3. Proceso civil y proceso penal.-..........................................................................................................31
1. Teoría contractualista.-......................................................................................................................33
2. Teoría de cuasi-contracto..................................................................................................................33
3. Teoría de la relación jurídica procesal.-.............................................................................................34
4. Teoría de la situación jurídica.-..........................................................................................................34
5. Teoría de la puraidad de relaciones o complejo de relaciones.-.......................................................34
6. Teoría de la institución.-.....................................................................................................................34
Unidad 1:
EL ESTADO Y LA FUNCIÓN JURISDICCIONAL
1. Idea general del Estado
“El Estado es algo que está. Por eso la sociedad política y jurídicamente organizada
se llama Estado. La idea del derecho y la idea del Estado están por tanto,
íntimamente relacionadas: no hay Estado sin derecho, ni derecho sin Estado”
En el Estado moderno existen tres clases de funciones que son:
Determinar el orden jurídico mediante la creación de normas de derecho que regulen
las relaciones entre los componentes de esa comunidad (Legislativo).
Determinar igualmente el mantenimiento de ese orden jurídico, restableciéndolo
cuando fuere violado (Judicial).
Establecer la forma para conseguir la satisfacción de las necesidades de seguridad,
cultura y bienestar de la colectividad (Ejecutivo).
2. Historia y evolución del derecho
El derecho no es más que un producto social que ha existido desde tiempos
inmemoriales y era una función privada en la que prevalecía la fuerza.
Posteriormente, cuando la familia, en su largo devenir se consolidó, dio lugar a la
intervención de sus componentes, y estos facilitaban la solución de los conflictos o
diferencias que se producían entre ellos. Esta intervención da lugar a la presencia
de una figura: la conciliación, y cuando ella no era lograda, necesariamente,
debieron intervenir terceros para buscar la solución. Este hecho dio nacimiento al
arbitraje.
No es raro afirmar que con esos arbitrajes hechos por terceros, hayan habido
vencidos que no querían dar cumplimiento a la decisión del árbitro. En este último
caso, el deseo de hacer cumplir lo resuelto por el árbitro, dio lugar al uso de la
fuerza.
La humanidad siguió adelante, dando lugar a la aparición de los grandes núcleos
sociales, en los que para mantener la paz social, se atribuye la facultad de
administrar justicia al jefe militar, quien al mismo tiempo tenía la dirección política.
Es innegable que del jefe de la tribu, la facultad de hacer justicia pasó a la persona
del príncipe, quien en los primeros tiempos consideró que esa facultad era un
atributo de su persona y, de ahí que, ese atributo derivó a la soberanía del Estado
moderno.
3. Diferentes hipótesis para el ejercicio de la función jurisdiccional.
En el proceso civil, el Estado no actúa de oficio, pero su intervención está
establecida por la presencia de determinadas circunstancias que al final constituyen
las diferentes hipótesis para el ejercicio de la función jurisdiccional. Ésta es la razón
fundamental para que en el proceso civil, los jueces no puedan proceder de oficio.
Si en las múltiples relaciones jurídicas que tienen las personas, las obligaciones que
contraen son cumplidas voluntariamente, así como las leyes, no se produce ninguna
alteración del orden jurídico establecido, porque ellas se cumplen por solo el imperio
de su fuerza moral.
José Luis Vallejos Calero
Unidad 2
EL DERECHO PROCESAL
1. Concepto
“Derecho Procesal es el conjunto de normas que regulan la actividad jurisdiccional
del Estado para conseguir la aplicación de las leyes sustantivas o de fondo y su
estudio comprende”:
La organización del Órgano Judicial
La determinación de la competencia de las autoridades judiciales que la integran y
La actuación de los jueces y de los sujetos procesales que intervienen en la
substanciación de los procesos” (Hugo Alsina).
Jorge A. Clariá Olmedo quien en su libro Derecho Procesal dice: “Lo cierto es que el
Derecho Procesal consiguió jerarquía científica cuando fueron puestos en evidencia
sus principios teóricos, una vez cortado el cordón umbilical por el cual se alimentaba
exclusivamente el derecho sustantivo”.
Podemos agregar con Clariá Olmedo “Que el Derecho Procesal es la ciencia que
estudia un conjunto sistemático de principios y de normas referentes a la actividad
judicial que mediante el proceso cumplen los órganos predispuestos del Estado y
demás intervinientes para la efectiva realización del derecho sustantivo”.
“El Derecho Procesal en cuanto disciplina científica es una disciplina jurídica
independiente de todas las manifestaciones del derecho sustantivo porque tiene”:
Principios rectores exclusivos
Finalidades específicas y
Un objeto de conocimiento y método de estudio propios”.
2. La norma procesal
La norma jurídica es un mandato hipotético de carácter operativo impuesto por
autoridad competente para regular una o unas situaciones concretas dentro de un
conglomerado social.
La norma procesal es una norma jurídica.
Toda norma de derecho o cualquier artículo del Código Civil, el Código de Familia y
otros de carácter sustancial, está constituida en primer lugar de una regla a la que el
individuo debe ajustar su conducta. Esa regla no ha sido dada por el legislador con
carácter persuasivo o doctrinario, sino que ella ha sido impuesta y, por ello
constituye una orden emanada de los órganos del Estado. Todo orden supone la
posibilidad de su cumplimiento y la más de las veces contra la voluntad de los
sujetos y es por esa característica que la norma constituye la garantía de su
eficiencia.
Carga y obligación
En el campo de la sujeción jurídica hay que saber diferenciar la carga de la
obligación.
José Luis Vallejos Calero
La carga
Es el requisito previo para obtener el beneficio de una situación jurídica y que se
cumple en interés propio.
“La carga procesal es una situación jurídica instituida en la ley consistente en el
requerimiento de una conducta de realización facultativa, normalmente establecida en
interés del propio sujeto y cuya omisión trae aparejada una consecuencia gravosa para
él” (Couture)
La Obligación
La obligación supone la existencia de una deuda y se cumple en interés ajeno.
Elementos de la norma procesal
Así comprendida la norma jurídica que está integrada de los tres elementos ya
indicados, la norma procesal contiene los mismos. En otros términos la norma
procesal contiene una regla para actuación del juez, de los sujetos procesales y
aún de terceros que pudieran intervenir en la substanciación del proceso.
Eficacia de la norma procesal
La eficacia de la norma procesal, en este caso, está asegurada por diversas clases
de medidas:
En algunos casos por la imposición de una carga, como la interposición de la
demanda, porque el que tiene esa pretensión no puede hacerse justicia por sus
propias manos; la contestación en el plazo que la ley procesal determina,
acumulación de pruebas;
En otros casos por una sanción jurídico- procesal, como las nulidades de actos
procesales que estuvieren establecidos en el Código Procesal Civil.
En otros casos con una pena pecuniaria como la multa que impone el representante
del órgano jurisdiccional, sanción que autoriza el artículo 401 del Código Procesal
Civil.
Categorías de las normas jurídicas
El Profesor Francesco Carnelutti las agrupa en dos categorías:
Unas que resuelven directamente las controversias entre las partes, y que actúa
sobre la misma controversia. Se llaman materiales o sustantivas
Otras disciplinan los requisitos de un acto encaminado a solucionarlo y regulan los
medios para dictar la solución o imponerla atribuyendo para el efecto un poder
jurídico a un determinado sujeto. Se llaman instrumentales o formales.
3. Autonomía
La separación del Derecho Civil y el Derecho Procesal es relativamente moderna
porque tiempo hace poco, el procedimiento estaba confundido dentro de la
legislación sustantiva.
La relación de medio a fin del Derecho Procesal y el Derecho Material, demuestra
que examinan el mismo hecho pero no regulan la misma conducta, tal como sucede
con la comisión de un delito: “El Derecho Procesal Penal -expresa Oderigo – regula
el proceso y el segundo, o sea el Derecho Material regula la pena que en sentencia
debe aplicar”. Lo mismo sucede con el Derecho Procesal civil, o sea que éstas
regulan la conducta de las personas que deben intervenir en la ejecución de la
sentencia, vale decir en la redistribución de los bienes de la vida, de los que alguien
haya sido injustamente privado.
La separación vislumbrada demuestra que el legislador, así lo hizo sólo a partir de la
Ordenanza Francesa del 1670 y después la legislación procesal napoleónica de
José Luis Vallejos Calero
comienzos del siglo XIX. Pero quiénes en el campo doctrinal dieron esta pauta
fueron Wincheid y Vulgo. El primero en su libro “La acción en el Derecho Civil
romano desde el punto de vista del derecho moderno” (Duilsseldorf en el año 1856)
y el segundo en la “Teoría de las excepciones procesales y los presupuestos
procesales” (Giessen 1868).
Posteriormente en la legislación española se advierte un principio de separación.
Así en el Fuero Juzgo, en el Fuero Viejo de Castilla, en las Leyes de Partidas, se
leen capítulos dedicados especialmente al procedimiento.
La Revolución francesa ocurrió en 1789 y en 1792 se proclama la segunda
constitución liberal. En 1806 se dicta en Francia el código de Procedimiento Civil
Francés, el que sirvió de modelo a los posteriores Códigos sancionados por los
demás países europeos, los que a su vez fueron fuentes de nuestra legislación
4. Relaciones con otras disciplinas
El Derecho Procesal es una rama del derecho público porque regula una función del
Estado, o sea, la función jurisdiccional, que acuerda a los jueces, amplias facultades
en la dirección del proceso.
La constante evolución de la ciencia del Derecho, nos permite afirmar que el
Derecho Procesal forma parte del Derecho Público y es por ello que tiene relación
con el Derecho Constitucional y el Derecho Administrativo.
Con el Derecho Constitucional
El Derecho Procesal tiene una estrecha vinculación con el Derecho Constitucional,
porque institutos procesales como la competencia tienen origen en la Constitución
Política del Estado (Art. 178 y siguientes), norma constitucional que debe ser
observada por todo juzgador, porque su incumplimiento da lugar a la declaratoria
de nulidad.
Con el Derecho Administrativo
En cuanto se refiere al Derecho Administrativo, el Estado en su función de poder
administrador, ejerce también ciertas facultades jurisdiccionales, cuando resuelve
pretensiones de sus súbditos y cuando las relaciones son de derecho público. Así
tenemos el procedimiento contencioso administrativo que corresponde al Derecho
Procesal.
Con el Derecho Internacional
“Igualmente, el Derecho Procesal tiene relaciones con el Derecho Internacional
porque existen normas de Derecho Procesal Internacional, las cuales se orientan
en función de importantes principios como la ejecución de sentencias o de laudos
arbitrales dictados por tribunales extranjeros; las normas o tratados sobre
extradición de personas penalmente condenadas o procesadas y otros que
omitimos citar”
Con el Derecho Sustancial
Pero, la relación más estrecha que tiene el Derecho Procesal, es con el Derecho
Substancial o de fondo, en el que están comprendidos el Derecho Civil, el Derecho
Comercial, el Derecho Familiar y otros.
En este caso, el Código Civil no sólo contiene normas expresas de actuación, sino
también institutos autónomos que tienen importancia en el desenvolvimiento del
proceso. De entre ellos el más importante es la capacidad para actuar en juicio
que también se llama capacidad procesal. La capacidad se adquiere a los 18 años
José Luis Vallejos Calero
Unidad 3
LA NORMA PROCESAL
1. Concepto
Así como la norma sustantiva contiene una regla de conducta, la norma procesal
contiene también igual determinación, a la que los sujetos procesales y el juez
deben sujetar sus actos durante la substanciación del proceso, porque la norma
impone un deber jurídico a aquellos.
Sobre lo afirmado agregamos que no sólo las normas procesales tienen ese valor
sino también las determinaciones de un tribunal superior; así sucede con las
resoluciones de los jueces, cuando autorizados por la ley regulan el procedimiento,
o sea, el caso de las nulidades procesales, siempre que aquellas afecten al orden
público. Esta facultad se encuentra en el artículo 105 y 106 del Código Procesal
Civil, que determina que “ningún trámite o acto judicial será declarado nulo si la
nulidad no estuviese expresamente determinada por la ley”.
Sin embargo, en la substanciación de un proceso civil existen casos en los que la
nulidad se impone, tal como preceptúa el artículo 16 del Código Procesal Civil,
cuando se produce la pérdida de competencia del juez. Ejemplo: Excusa declarada
legal, Recusación probada, y otros.
Existen normas procesales y también sustantivas que ordenan la nulidad; es a ellas
que se refiere el artículo 105 del citado Código.
En la práctica judicial, tanto jueces como abogados hacen uso abusivo de la nulidad
sin distinguir si son normas que afectan al orden público o sólo afectan intereses
privados. Es esta la razón que impone distinguir las normas de orden público y las
normas de orden privado.
Se llama orden público al conjunto de condiciones fundamentales de la vida social
instituidas en una comunidad jurídica, las cuales por afectar centralmente a la
organización de ésta no pueden ser alteradas por la voluntad de los individuos.
“El orden público -expresa Adriano de Cupis- se halla integrado por las normas que
inspirándose en razones de interés general, son consideradas como esenciales por
la sociedad y no pueden ser derogadas por los particulares”.
Lo expuesto hasta aquí es aplicable al Derecho Procesal porque en él existen
también normas procesales que interesan al orden público, o sea, las leyes que
interesan más al Estado.
Ahora bien, en la substanciación de un proceso, se puede violar una norma procesal
que afecta al orden público, dicha violación entraña un vicio de nulidad, que debe
ser declarada de oficio en cumplimiento de lo determinado por el artículo 106 del
Código Procesal Civil, y ella puede ser ordenada en cualquier estado de la causa.
Las normas legales que constituyen la Organización de los Tribunales de Justicia,
como la Ley del Órgano Judicial, son de orden público porque estructuran a un
órgano del Estado. Igualmente las leyes que regulan la competencia de los jueces,
son también de orden público, y las partes o litigantes no pueden modificar; por el
contrario deben someterse a sus disposiciones.
José Luis Vallejos Calero
procesales, es necesario distinguir entre los actos a cumplirse por el juez y los que
corresponden a las partes. Ejemplo, formalidades para la recepción de la prueba,
requisitos de la sentencia, etc. El primer caso afecta a la situación de los litigantes,
en consecuencia pueden aplicarse a los trámites posteriores. En el segundo habrá
que examinar el caso concreto que nos permita dar una solución adecuada.
3. La ley procesal en el espacio. Sus efectos
Un resumen tanto de la Ley Civil como de la norma constitucional nos lleva al
principio de la territorialidad de la ley, entonces, así promulgada y publicada una ley,
carece de eficacia fuera de los límites de nuestro territorio, como tampoco pueden
tener eficacia alguna las leyes extranjeras.
Sin embargo de lo expuesto afirmamos que el hombre en sus múltiples relaciones
jurídicas, no siempre las lleva a cabo dentro del territorio boliviano sino que al
presente, teniendo en cuenta las facilidades con que cuenta, puede trasladarse a
países extranjeros y adquirir bienes y mantener relaciones contractuales con otras
personas que pertenecen a territorios extranjeros, que a su vez tienen otra clase de
legislaciones y, de esa manera dan lugar al nacimiento de relaciones jurídicas que
se encuentran sometidas a legislaciones distintas.
Para la solución de estos problemas jurídicos se conocen dos sistemas
fundamentales: el de la personalidad de la ley, por la que ésta, o sea la ley
acompaña al sujeto donde quiera que se encuentre; y el otro es de la territorialidad
de la ley que somete no solamente a los nacionales sino también a los extranjeros a
la ley de su residencia.
Frente a esta situación en la que se presentan conflictos diversos en las múltiples
relaciones humanas que se llevan a cabo en otros territorios, se ha dado una
acertada solución en la fórmula “locus regit actum” que significa que el acto, en
cuanto a la forma y solemnidades debe ser juzgado de acuerdo a la ley del lugar en
que se celebró dicho acto, por ser la que los contratantes tuvieron en vista ese
momento.
Existen excepciones a esta regla y son las que constan en los incisos 1) y 2) y
parágrafo II del artículo 1143 del Código Civil y artículo 1376 del mismo
ordenamiento legal, o sea que, los testamentos otorgados en Bolivia por súbditos
extranjeros como de los bolivianos que testan en el extranjero surten sus efectos en
Bolivia.
La otra excepción está contenida en el artículo 1376 del mismo Código que dice:
“Las hipotecas constituidas en el extranjero sobre bienes radicados en Bolivia,
surtirán sus efectos en Bolivia si se otorgaron con sujeción a los requisitos de
validez previstos para los actos solemnes celebrados en el extranjero, y si están
suficientemente legalizados por las autoridades competentes”.
Finalmente en cuanto se refiere a los exhortos y cartas rogatorias que tengan por
objeto citar al demandado, o para recibir prueba de testigos o practicar otras
diligencias de tipo judicial, serán cumplidas de acuerdo a los tratados suscritos entre
Bolivia, Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Perú y la República Oriental del Uruguay
que suscribieron el tratado de Derecho Procesal de Montevideo en 11 de enero de
1889, que al presente se encuentra en vigencia. Su estudio corresponde al Derecho
Internacional Privado.
José Luis Vallejos Calero
Unidad 4
SISTEMAS PROCESALES
1. Concepto.-
Todo proceso al substanciarse, en el que actúan los sujetos procesales y el juez
debe, llevarse a cabo en un orden preestablecido por la ley. Así en algunos, la
iniciativa corresponde a los particulares, o sea que, estos son los que inician la
sustentación del proceso. Este se llama sistema dispositivo, en otros, es una
facultad del juez o de un órgano del Estado y se conoce como sistema inquisitivo.
Ahora, durante el desarrollo del proceso los medios de expresión admitidos durante
la tramitación, pueden ser la palabra o la escritura, caso en el que el proceso será
oral o escrito. Puede ser público o secreto, según se permita o prohíba el acceso de
los sujetos procésales o también de terceros. Existen casos en los que la justicia se
administra por jueces técnicos y en otros por legos: unas veces la ley determina la
forma de valorar las pruebas (pruebas legales) y en otras deja librada al criterio del
juez (libres convicciones) etc.
A todo este conjunto de modos o formas de substanciar el proceso se llama
“sistemas procésales”.
2. Sistemas dispositivo e inquisitivo
El primer sistema concede a las partes la facultad de intervenir como sujeto activo
en los actos de procedimiento y en el impulso procesal, con dominio en el
procedimiento. Sus reglas fundamentales son: el juez no puede iniciar de oficio el
proceso; no puede tener en cuenta los hechos ni medios de prueba que no han sido
aportados por las partes (principio de presentación) debe tener por cierto los hechos
en que aquellas estuviesen de acuerdo; La sentencia debe ser conforme a lo
alegado y probado; el juez no puede condenar a más ni a otra cosa que la pedida
en la demanda (ultra petita).
En el sistema inquisitivo, es el juez el que debe investigar la verdad material
prescindiendo de la actividad de los sujetos procesales (principio de Investigación
Judicial); no solo puede iniciar de oficio el proceso sino que está facultado para
buscar los hechos descubiertos a través de los que ya conociere utilizando cualquier
medio tendiente a la averiguación de la verdad.
Haciendo una confrontación de los dos sistemas procesales sacamos las siguientes
conclusiones: solo a los sujetos procesales corresponde dar conocimiento del juez,
tal como se desprende del contexto de los Arts. 310 y 130 del Código Procesal Civil.
En otros términos sólo los sujetos procesales pueden fijar los hechos controvertidos
José Luis Vallejos Calero
4. Publicidad o secreto.-
El principio de la publicidad tiene mucha importancia porque constituye un freno
contra el fraude y porque a la sociedad le interesa conocer la forma en que se
administra justicia. Por eso la publicidad es una de las características de todo
régimen democrático, que permite a la opinión pública controlar la actuación de los
órganos del Estado.
Por ello, la observancia de este principio es la condición indispensable para la
administración de justicia, porque asegura no sólo la resolución recta, rápida, justa y
fundada de la ley, sino que es la mejor salvaguardia del prestigio del Órgano
Judicial y de los intereses de las partes discutidos en la controversia.
5. Jueces técnicos y jurados
A quienes el Estado inviste con la dignidad de magistrados constituyen la
administración de justicia.
A esas personas que administran justicia se los llama jueces técnicos porque son
profesionales abogados designados para ese fin.
En este sentido, son funcionarios del Estado, permanentes, porque son designados
para determinados casos. Los fueros contencioso, administrativo y eclesiástico, han
sido abolidos por leyes especiales.
El juez debe tener cultura profesional y poseer conocimientos generales de las
ciencias que tengan vinculación con los estudios jurídicos. Finalmente deben tener
dignidad de vida que se traduce en buena conducta, moralidad intachable, etc.
Por lo expuesto, su misión no puede ser ni más augusta, ni más delicada; a él le
está confiada la protección de honor, la vida y los bienes de los conciudadanos. Por
eso se les exige condiciones excepcionales para desempeñar el cargo, y, a él se le
debe rodear de garantías que aseguren su independencia y su rectitud de sus
fallos. Su inconducta se castiga con severas sanciones.
Estos son los llamados jueces técnicos.
En cuanto se refiere a la institución del jurado, este se remonta en sus orígenes a la
época de los egipcios, pero donde se desarrolla hasta adquirir su verdadera
fisonomía, es en Inglaterra, de donde pasó a los Estados Unidos de Norteamérica y
otros pueblos donde existe ese sistema procesal.
En nuestro país no existe la institución del jurado; es más aplicable como ya se ha
dicho en materia penal. En el proceso civil no ha tenido aceptación y existen
razones para ello. Decir culpable o no al encausado es cuestión de convicción y
requiere de conocimientos jurídicos.
6. Pruebas legales y de libres convicciones.-
El principio de la prueba legal se rige bajo la forma de reglas generales que
permiten al juez una valoración razonada de la prueba.
Para distinguir la política legislativa de apreciación de la prueba en juicio que
reglamenta el mérito de los distintos medios admisibles, es mejor hablar de “sistema
de la tarifa legal de las pruebas, como también suele denominarse, porque así se
especifica, claramente su significado, o de sistema de la prueba tasada, como
prefieren designar otros”.
De conformidad con lo previsto por el artículo 1333 del Código Civil, el juez no está
obligado a seguir las conclusiones de los peritos, pero debe fundar las propias:
José Luis Vallejos Calero
Unidad 5
FUENTES DEL DERECHO PROCESAL
1. Concepto.-
El vocablo fuente en su prístina acepción se refiere al manantial de agua, pero en
sentido figurado significa también aquello que es principio fundamental u origen de
algo, o sea una serie de actos creadores del derecho en general.
En Atenas, el comienzo de las litis consistía en la intimación que hacía el
demandante al demandado para que compareciere ante los jueces. Cuantas veces
el demandado no cumplía con la intimación, caso en el que el demandante se veía
obligado a llevarlo con la ayuda de la fuerza pública. Una vez en presencia de los
jueces, el actor hacía una exposición de la demanda y el demandado oponía sus
defensas o excepciones. Pasado este momento se presentaban las pruebas y sobre
ellas los oradores hacían las defensas. Uno de los oradores de más categoría que
hasta ahora es admirado, fue Demóstenes.
2. El procedimiento en el derecho romano.-
En la antigua Roma se han conocido tres sistemas procesales distintos que
corresponden a los tres periodos de la historia política de aquel país.-
El sistema llamado de las “legis actiones”, corresponde a la monarquía. En ese
entonces la función judicial era ejercida por el Senado, el pueblo y el Rey. Esto se
debe a que en Roma aún no se conocía la separación de los poderes u órganos del
Estado.
Al comienzo, hacía de Tribunal el Rey, en persona, pero aparecida la monarquía, la
facultad de administrar justicia pasó a los Cónsules, y el año 387 cuando los
plebeyos alcanzaron esa dignidad, los patricios, para reservarse la facultad de
administrar justicia, la confiaron a un nuevo magistrado llamado Pretor.
La instancia comprendía dos partes: ante el magistrado (in jure) y luego ante el juez
(in iudicium), el que era designado por los litigantes y en su defecto por el
magistrado.
Durante la República fue creado el procedimiento formulario que tuvo vigencia en el
segundo período. Este procedimiento nuevo consistía en que el magistrado después
de oír a las partes en controversia, entregaba al actor una instrucción escrita
José Luis Vallejos Calero
también llamada fórmula que comenzaba con la designación del juez y comprendía
cuatro partes que eran; “la demostratio” o exposición de los hechos: “la intentio” o
resumen de las pretensiones del demandante; “la condenatio” o sea la facultad que
el juez tenía de condenar o absolver u finalmente la “adjudicatio” facultad de
adjudicar la propiedad de la cosa litigada.
El sistema formulativo tuvo corta duración porque fue sustituido por el procedimiento
extraordinario impuesto por dioclesiano en forma definitiva.
En el sistema extraordinario que para entonces fue una avanzada, el magistrado
conocía directamente la litis, o controversia y la resolvía.
3. El procedimiento entre los germanos.-
Entre los pueblos bárbaros la facultad de administrar justicia residía en el pueblo.
Los juicios se resolvían de acuerdo a las tradiciones conservadas por los ancianos,
porque no tenían leyes escritas.
El proceso germano se desarrollaba ante el pueblo reunido en asamblea. Esta
asamblea tenía la facultad de dirimir antes que resolver. Era pública se dividía en
dos etapas: una para afirmar y otra para probar, la primera se iniciaba con una
citación del demandante al demandado; luego se escuchaba la exposición del actor;
el demandado hacía su defensa y seguidamente se dictaba la sentencia
interlocutoria, muy parecida al Auto que en nuestro procedimiento abre el término de
prueba.
Los medios de prueba conocidos en el procedimiento germánico eran; el juramento
de purificación, el testimonio prestado sobre la credibilidad de la parte en cuyo favor
declaraban los testigos: pero el principal medio de prueba de los pueblos bárbaros
era el “juicio de Dios”, llamado también “ordalías”.
Entre el procedimiento romano y el germano existen diferencias muy marcadas. En
el primero se resolvía la litis mediante la convicción del juez; en el segundo, se daba
crédito a uno de los contendientes por su presentación o la intervención divina. La
sentencia para los romanos tenía valor de cosa juzgada solo para las partes que
intervenían en la controversia o conflicto de intereses y, para los germanos se
extendía a todos los que habían formado parte de la asamblea.
4. El proceso romano-canónico.-
Cuando las partes se sometían voluntariamente a la autoridad de los obispos, las
sentencias dictadas por éstos en materia civil tenían fuerza legal. Así lo reconoció el
Emperador Constantino el año 331.
Más tarde, aparecieron los glosadores, quienes elaboraron un procedimiento mixto,
romano-canónico llamado también común.
En este último procedimiento fueron introducidas las instituciones germanas como la
división del proceso en dos partes, la solemnidad de la contestación de la litis. Los
principios fundamentales de la prueba y la sentencia; todos eran de procedencia
romana.
Tal ha sido la influencia del derecho canónico, que el proceso se hizo escrito y el
procedimiento secreto con el sistema de las pruebas legales.
5. La legislación española.-
A partir de la invasión de los germanos, en España comienza la historia del
Procedimiento Civil.
José Luis Vallejos Calero
Los germanos en España, dejaron a sus habitantes regirse por sus propias
instituciones, o sea las romanas; de esa manera se acentúo la división y dio lugar a
la publicación de dos Códigos. La fusión de los dos códigos dio lugar al Fuero
Juzgo, en el que ya se encontraban diferentes clases de magistrados, así como
diversos institutos judiciales.
Con la invasión de los árabes, el Fuero Juzgo quedó en desuso. Es en esa época
que apareció la legislación foral.
En la época de Fernando el Santo, se establecieron jueces anuales en reemplazo
de los Condes; así se origina el Espéculo y el Fuero Real.
Las partidas fueron publicadas en el año 1258 o sea bajo el reinado de Alfonso el
Sabio, de las cuales la tercera reglamenta el Procedimiento Civil.
En 1567 fue publicada la Nueva Recopilación que constituye un ordenamiento de
toda la legislación española vigente, y en 1805 se publicó la Novísima Recopilación
y, finalmente en 1830 se sancionó la Ley del Enjuiciamiento Civil. Estos dos últimos
sirvieron de modelo al procedimiento Civil abrogado.
6. El Derecho Colonial.-
En primer lugar aparecieron los adelantados cuyas resoluciones eran apelables.
Luego los gobernadores que tenían funciones administrativas y también judiciales.
Estos administraban justicia hasta durante sus visitas.
Más tarde se crearon los Cabildos, compuestos por el Alcalde, Regidores y demás
funcionarios de la administración de la ciudad. Solo intervenían en asuntos de
menor cuantía, sus resoluciones eran apelables.
Seguidamente aparecen los intendentes que tenían iguales atribuciones que los
gobernadores quienes llegaron a tener poderes absolutos en las áreas de justicia,
administración, hacienda y guerra.
Finalmente, tenemos el Tribunal de Consulado y el Consejo de Indias. El primer
organismo se componía de un prior, nueve conciliares y un síndico; resolvía las
cuestiones o controversias suscitadas entre comerciantes. El tribunal fallaba sin
forma de juicio, a verdad sabida y buena fe guardada. El segundo residía con el Rey
en la Corte, ejercía el gobierno Superior de las colonias, fue creado por Carlos V en
1524; sus funciones eran administrativas y judiciales y también tenía algunas
facultades legislativas.
7. El Derecho Boliviano.-
La más antigua fuente del derecho procesal en Bolivia se remonta al año 1792 con
la publicación de un prontuario de procedimiento que vino a llamarse “Cuadernillo
de Gutiérrez, por el nombre de su autor que era Francisco Gutiérrez de Escobar”.
Después de la convocatoria del nueve de febrero de 1825 hecha por el Gran
Mariscal de Ayacucho, en 27 de abril del mismo año, se decretó la creación de una
Corte de Justicia en Chuquisaca, con las mismas atribuciones que las antiguas
audiencias españolas. El 15 de diciembre de 1825 fue creada la Corte Superior de
La Paz con las mismas atribuciones que las antiguas audiencias.
“En 1826 fue aprobada la ley proyectada por los Diputados Casimiro Olañeta y
Manuel María Urcullo en la sesión de 22 de diciembre de 1826 en la Asamblea
Constituyente. Se trató la manera de suplir en algún modo la falta de un Código de
Procedimiento. “deseando que la justicia se administre con arreglo a la constitución
de la República, y en cuanto lo permitan las circunstancias”.
José Luis Vallejos Calero
Unidad 6
EL PROCESO
1. Teoría y objeto del proceso.-
El Derecho Procesal Civil en su conjunto comprende: “la organización de la función
jurisdiccional y la competencia de los órganos que la integran, la actuación de los
sujetos procesales, la teoría de la acción, la teoría del proceso y de los actos
procesales, de la cosa juzgada”. “El proceso judicial es un proceso cultural y
constituye una especie de género proceso por lo tanto implica una actividad con un
resultado y una finalidad. El resultado es la sentencia, y la finalidad es la aplicación
del derecho material al caso concreto”.
“El derecho material regula la conducta de las personas en la sociedad,
distribuyendo lo que se llaman los bienes de vida (el derecho a la vida, a la libertad,
al nombre etc.), o, diciéndolo de otra manera, nos otorga derechos e impone
obligaciones y, además, asegura el goce (de dichos bienes de vida), estableciendo
cuáles son las consecuencias jurídicas de la violación de las normas distributivas de
los bienes de vida”.
Producida la insatisfacción jurídica, se pueden dar cuatro situaciones distintas:
Que la insatisfacción quede sin resolver por desinterés social o particular en la
satisfacción (por Ej. Hurto no denunciado, no investigado, documento no ejecutado,
etc.).
Que la insatisfacción sea resuelta voluntariamente por las partes, aplicándose
automáticamente la consecuencia jurídica que establece la norma primaria (por
ejemplo el resarcimiento voluntario de un daño causado a otro mediante el pago de
una indemnización pactada).
Que la insatisfacción no sea susceptible de ser resuelta voluntariamente, y para la
aplicación de la consecuencia es necesario realizar previamente una serie de
operaciones que en su conjunto conocemos con el nombre de proceso (por Ej.: si un
homicida confesare su crimen y su voluntad de que le apliquen la pena prescrita por el
derecho material, el juez igualmente tiene que realizar un proceso para llegar a
José Luis Vallejos Calero
Con la evolución del derecho procesal, al juez se le atribuye una función pública
encaminada al mantenimiento del orden jurídico.
Según esta tendencia publicista, “La litis o controversia” es considerada como un
fenómeno social, cuya solución justa interesa a la colectividad.
Resumiendo, el verdadero fin del proceso, puede inducirse considerando la
actuación del juez y de las partes durante la substanciación del mismo. El juez
desarrolla una función pública, y mediante ella se procura el restablecimiento del
orden jurídico, consiguiendo la actuación de la ley. Su misión consiste en declarar
si una voluntad abstracta de la ley ampara una situación concreta y, en caso de
hacer cumplir lo determinado en la sentencia ejecutoriada deberá proceder aun
haciendo uso de la fuerza pública.
El procesalista Chiovenda anota; “De cuanto queda expuesto, resulta que es objeto
del proceso la voluntad concreta de la ley de cuya existencia y actuación se trata, y
el poder de pedir su actuación esto es la acción”.
A ello agrega Carnelutti. “El proceso se hace para la justa composición de la litis; su
objeto es paz con justicia”.
2. Desarrollo histórico del proceso civil.-
Casi en todos los pueblos de América Latina, el proceso civil tiene los mismos
caracteres que el proceso romano, pero no se puede negar la influencia germana,
sobre todo a partir del Fuero Juzgo.
En el proceso romano, cuya estructura ya conocemos, se desarrollaba una actividad
del Estado por el juez, y su misión era declarar el derecho. La intervención del
pueblo romano se reducía al juez, quién era nombrado por el magistrado para que
juzgue los hechos y resuelva la causa. De allí los caracteres del proceso; era una
institución de derecho privado en la que el juez desarrollaba una actividad intelectiva
porque decidía la controversia de acuerdo a su convicción, por eso la prueba
constituía una carga y recaía sobre los hechos particulares. La sentencia obliga sólo
a las partes.
El proceso germano sería distinto, ya que era un medio de pacificación social: la
solución no dependía el convencimiento del juez, sino de ciertas formalidades en las
que el pueblo veía una expresión de la divinidad. La prueba no era sobre los
hechos, sino las afirmaciones de las partes y los medios de manifestación de la
voluntad suprema como emanación de la divinidad; y es quién correspondía la
prueba, y por eso la primera parte del proceso germano, terminaba con una
sentencia llamada interlocutoria. La sentencia definitiva se pronunciaba por la
asamblea, y obligaba no solo a los litigantes, sino a todos los que había asistido a
ella.
Cuando el derecho romano tuvo una nueva preponderancia, no se regresó al
proceso romano puro, sino que se mezclaron con varias instituciones germanas.
Seguían siendo romanos los principios fundamentales sobre la prueba y la
sentencia.
Cuando se comenzó con la costumbre de hacer actas de las diligencias, el proceso
que hasta entonces era oral, fue haciéndose escrito. En esta época tuvo mucha
influencia el derecho canónico que, con la utilización de métodos inquisitorios, le dio
una fisonomía muy particular, sobre todo en materia penal.
José Luis Vallejos Calero
Más tarde, en la época del Papa Clemente, se concretaron sólo en una audiencia
todas las peticiones de la partes, afirmando el poder del juez en la dirección del
proceso. Se admitía el proceso en rebeldía, tal como hoy se lo conoce.
Posteriormente, el proceso francés fue romanizado rápidamente bajo la influencia
del derecho canónico y los estudios del derecho romano. Es en ese tiempo que al
procedimiento oral sustituye el procedimiento escrito, pero con una modalidad muy
especial: los testigos son examinados en secreto como en el proceso canónico; se
suprimen las ordalías y se adopta el sistema de prueba romano.
Posteriormente, apareció un nuevo proceso autónomo que era oral y escrito, pero
muy diferente al proceso feudal que era exclusivamente oral, y del procedimiento
canónico que era escrito. Finalmente, este proceso tuvo su expresión en la
Ordenanza Francesa de 1667 que, por primera vez, tuvo fisonomía legislativa. El
Código de Procedimiento Civil francés de 1806 se inspiró en la Ordenanza Francesa
de referencia.
La evolución histórica que se ha hecho, demuestra la estructura de los Códigos
procesales de aquellos países.
3. Proceso civil y proceso penal.-
En la práctica judicial, la violación de un derecho puede afectar intereses
particulares o generales. El proceso civil se impone para el primero, y el proceso
penal para el segundo.
Sus diferencias son:
El proceso civil tiene por objeto declarar la existencia o inexistencia de un derecho, o la
reparación de un daño, lo cual afecta al derecho privado; el penal tiene por objeto la
averiguación de un delito, la individualización del delincuente y la aplicación de la pena,
e interesa al derecho público.
El procedimiento Civil o impulso procesal, preferentemente corresponde a las partes, al
presente al juez, en tanto que en el penal acuerda preferentemente al juez.
El proceso civil tiene carácter subsidiario, porque solo funciona en defecto de un
entendimiento amigable de las partes, mientras que en el penal es obligatoria. Mucho
más en los delitos de carácter público y, finalmente, no puede existir pena sin proceso.
La acción civil puede ser intentada por cualquiera, la penal solo por el Ministerio
Público, con excepción de los delitos privados comprendidos en el artículo 7 del Código
de procedimiento Penal.
El régimen de las pruebas en lo civil es diferente que en lo penal;
Una controversia civil puede ser sometida a la decisión de árbitros, excepto los que
versan sobre el estado y la capacidad de las personas y, en general, en las que están
interesadas la moral y las buenas costumbres.
El proceso civil puede terminar por una transacción, el penal es irrenunciable. En los
delitos privados puede haber renuncia de agraviado.
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Unidad 7
NATURALEZA JURÍDICA DEL PROCESO
que quedaban fijados los puntos del litigio y del cual surgían los poderes del juez”.
“Los romanos- continua Aruzi- en la realidad nunca dijeron que el proceso fuera un
contrato, tampoco los franceses. Ya que estos últimos simplemente sostenían que
la cosa juzgada provenía de un contrato y no que el proceso fuera un contrato”.
La teoría que procede fue motivo de mucha crítica y centraron en ella varios puntos:
Ella vale decir la teoría, no sirve para explicar la naturaleza jurídica del proceso, porque
solo se dice cuál es el acto que lo origina (el contrato)
En el estado moderno, no se concibe la actividad judicial como el resultado de un
acuerdo de partes, sino como el ejercicio de un poder
Para justificar la obligatoriedad de la sentencia, se recurre a la ficción del contrato, en
lugar de decir que deriva de la ley
Si admitiremos que en el proceso civil existe un contrato entre el demandante y
demandado, las leyes sustantivas ya no tendrían importancia alguna y quedarían
relegadas a las del procedimiento.
2. Teoría de cuasi-contracto
La litis contestatio era un acto bilateral en su forma, y un hecho generador de
obligaciones, pero que el consentimiento de las partes, no era eternamente libre,
dijeron que ella importaba un cuasi-contrato”.
La anterior teoría, ha sido muy criticada porque ella ha omitido tener en cuenta a la
ley como fuente de las obligaciones.
En las dos teorías indicadas, hay algo importante que hacer notar, y es que
habiéndose fijado las cuestiones litigiosas, ni el demandante ni el demandado
podrán variar la demanda ni las defensas.
Según la doctrina moderna, la teoría contractualista ya no es aplicable porque en el
procedimiento romano el juez desempeña una función de árbitro, razón por la cual
sus poderes eran limitados.
3. Teoría de la relación jurídica procesal.-
“Afirma que la actividad de las partes y del juez está regulada por la ley, salvo los
casos excepcionales en que está permitida a aquellas, apartarse de sus preceptos”.
“El proceso determina la existencia de una relación de carácter personal entre todos
los que intervienen, creando obligaciones y derechos para cada uno de ellos pero
teniendo todos a un mismo fin común; la actuación de la ley”.
Resumiendo la teoría que precede, afirmamos que el contenido de la relación
procesal que comprende el conjunto de derechos y obligaciones que tiene el juez y
sujetos del proceso, está condicionado por las establecidas por ley, para la
substancia de los juicios.
4. Teoría de la situación jurídica.-
El proceso no importa una relación, sino, una situación jurídica, porque no media
relación alguna de índole procesal entre el juez y las partes, y explica que el deber
del juez de administrar justicia, no nace en el proceso, sino en el derecho público,
administrativo y constitucional. En caso de incumplimiento de ese deber, aparecen
para él “responsabilidades de orden penal y civil que, como tales, deben hacerse
efectivas fuera del proceso”.
“No existe una verdadera obligación de las partes de someterse a la jurisdicción
estatal, sino, un estado de sujeción que no tiene origen en el proceso, sino en la
relación general que liga al ciudadano con el Estado”.
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Unidad 8
LA RELACIÓN JURÍDICA PROCESAL
1. Los sujetos de la relación procesal.-
Existe una relación jurídica autónoma y compleja de derecho público y progresivo;
relación que tiene por finalidad la aplicación de la ley sustantiva.
La relación judicial procesal sostenida por Bülow, demuestra la independencia de
ella en cuanto se refiere y se enfrenta la relación sustantiva (derecho que se
discute) discutida en el proceso.
La doctrina procesal moderna le asigna los siguientes caracteres a la relación
jurídica procesal:
“Es una relación de derecho público, especialmente porque tiene esa misma naturaleza
el derecho procesal, que regula el ejercicio de los poderes y el cumplimiento de los
deberes de los sujetos procesales que por ella se vincula, y por lo menos, es órgano
público, también, uno de los sujetos de la relación”.
“Es una relación autónoma del derecho material, porque tiene vida por sí misma,
desenvolviéndose independientemente de la relación jurídico-sustantiva, cuya
existencia, modalidades y efectos, debe ser juzgado por el proceso”.
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“Es una relación compleja, porque contiene una multiplicidad de poderes (obligaciones)
y deberes procesales, y, también, porque intervienen por lo menos tres personas en su
conformación integral”.
“No obstante su complejidad, es relación unitaria, porque los poderes y deberes cuyo
ejercicio y cumplimiento la motivan, forman un conjunto indefinido, y están vinculados
por el fin común de la actuación del derecho sustantivo”.
“Finalmente, es una relación progresiva, porque mientras avanza en su desarrollo, va
superándose hasta culminar la pena”.
Hecha la aclaración que precede, desarrollaremos el subtítulo, o sea “Los sujetos de
la Relación Procesal”, es opinión general en los tratadistas de Derecho Procesal, en
sentido de que en el proceso existe una relación jurídica-procesal con derechos y
deberes entre el juez y los sujetos procesales, porque la acción, como ya se ha
dicho, es un derecho que tiene el actor contra el Estado para conseguir de este la
tutela de su pretensión jurídica frente al demandado.
De esa manera resulta que los sujetos de la relación procesal son tres: actor o
demandante, demandado y el juez. Los dos primeros constituyen los sujetos
procesales, o sea las partes en el proceso. Su capacidad, las condiciones para su
actuación en el proceso, sus deberes y facultades, están determinadas por la ley. El
juez, como representante del Estado, ejerce la función jurisdiccional; aquel
reglamento la forma de su designación, determina sus atribuciones y el modo de su
actuación en el proceso.
En la substanciación de un proceso civil, comúnmente intervienen un actor o
demandante y un demandado, pero también pueden intervenir varios (litis
consorcio). Algunas veces las mismas partes se encuentran frente a distintos
procesos vinculados por la misma relación jurídica sustancial, o por cuestiones
anexas, caso en el que se llama pluralidad e procesos.
Resumiendo, tenemos que, es opinión generalizada que los sujetos de la relación
jurídico-procesal, son las partes y el juez con poderes y deberes recíprocos. Es una
relación de derecho público, se inicia con la demanda, continua con la contestación
y se extingue con la sentencia. Es de derecho público porque regula la actividad de
un órgano del Estado.
2. Presupuestos procesales.-
Para la substanciación de un procesal civil, no es suficiente interponer la demanda,
sino que es necesaria la concurrencia de ciertos requisitos para que sea aceptada o
válida. La falta de esos requisitos, no afecta la acción, solo impide la constitución de
la relación procesal. Es esto lo que se conoce con el nombre de presupuestos
procesales.
Así, para estar en juicio, el principal presupuesto de la relación procesal es la
capacidad de los sujetos. La falta de ella, ya sea del actor o demandado, dará lugar
a obtener la excepción de falta de personería.
Al presente, los presupuestos procesales se conocen como excepciones previas, o
sea que, opuestas ellas y probadas no nace la relación procesal, quedando
incólume la demanda y son (Art. 128): la incompetencia del juez, la incapacidad e
impersonería del demandante o sus apoderados, litispendencia o litigio pendiente
en otro juzgado y otros.
El procesalista De Santo expresa que los presupuestos procesales, son “requisitos
o circunstancia relativas al proceso, o más depuradamente, supuestos previos que
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En algunas veces, el actor puede desistir de su acción, o conciliar entre las partes,
hecho que importa extinción de la relación procesal. Se resuelve mediante un auto
motivado que dicta el juez, aceptado el desistimiento.
Finalmente, la relación procesal se extingue también, cuando el demandante
abandona su acción durante seis meses (perención). En este caso, el juez de oficio
o a petición de parte y sin más trámite, declarará la extinción por inactividad, con
costas, de conformidad con lo previsto por el artículo 248 del Código Procesal Civil.
El plazo indicado se computará desde la última actuación.
7. Acción y relación procesal.-
Para que la relación procesal se constituya válidamente, se requiere una demanda
revestida de formalidades legales, que los sujetos procesales tengan capacidad
para actuar en juicio, y que el juez tenga competencia para conocer de ella; en
cambio, para que la acción tenga una resolución favorable, es necesario que el
actor justifique su derecho, calidad e interés.
Aquellos presupuestos procesales deben existir al momento de iniciarse la relación
procesal; las condiciones para la acción deben existir en el momento de dictarse la
sentencia, porque no obstante de haberse tratado la relación procesal en debida
forma, la acción puede ser rechazada en sentencia.
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Unidad 9
ESTRUCTURA DEL PROCESO
8. Concepto
La relación procesal se desenvuelve y progresa condicionada por principios que
favorecen su unidad, y explican su mecanismo, como el impulso procesal, la
preclusión procesal, la inmediación y la adquisición procesal.
9. El impulso procesal
El proceso se puede comparar con un organismo sin vida que se mueve y avanza
debido a los actos de procedimiento que ejecutan los sujetos procesales y el juez.
“El impulso procesal propiamente dicho se refiere a los actos inmediatamente
posteriores al de la iniciación misma del proceso; se entiende que este impulso
obedece a un interés que supera el solo interés particular de las partes, al interés de
llevar a término el proceso con obtención de su fin: la sentencia; y en ello, además
de las parte, se ve comprometido el órgano jurisdiccional”.
Existen tres modos de impulsar el procedimiento, que son:
Por los sujetos procesales y se llama dispositivo
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c. Cuando el acreedor que teme que su deudor substraiga sus bienes, pide su
secuestro para garantizar su crédito (precautorias). El tiempo de duración del
proceso puede poner en peligro la satisfacción de la pretensión jurídica”.
“Cada una de las situaciones indicadas dan lugar a la formación de tres procesos
distinto que es: de conocimiento, de ejecución y conservación”
Proceso de conocimiento
El proceso de conocimiento puede a su vez tener distintos objetos, teniendo en
cuenta la acción deducida, la que puede ser de condena, de mera declaración o
que persiga un efecto constitutivo.
La estructura de estos procesos no varía, porque los tres se sustancian por el
mismo procesos ordinario y solemne, pero lo efectos que la sentencia produce,
son distintos.
Los procesos de conocimiento constan fundamentalmente de tres etapas, que son
introductiva, probatoria y decisoria.
Etapa introductiva
La primera etapa comienza con la interposición de la demanda, no obstante, de que en
algunos casos puede prepararse mediante el pedido de ciertos procesos cauterlares,
tal como determina el artículo 310 del Código Procesal Civil. La indicada norma
procesal, dispone trece casos en los que se puede preparar la demanda principal.
En cualquiera de los casos, toda diligencia que se pidiere como preparatoria, se
practicará precisamente con citación de la parte contra quién ha de dirigirse la acción,
bajo pena de nulidad.
En esta etapa de la demanda se corre en traslado al demandado, quien tiene la
oportunidad de contestarla. La contestación no es obligatoria, porque apenas importa
una carga; puede, asimismo, oponer excepciones de previo y especia pronunciamiento
(son las excepciones precias). Ella debe ser opuesta antes de contestar la demanda.
Juntamente con la contestación puede deducir acción reconvencional, la que
necesariamente debe ser trasmitida igual que la demanda.
Etapa probatoria
En la segunda etapa o probatoria del proceso de conocimiento, las partes procesales
pueden producen la prueba ofrecida para sus respectivas defensas. En la que se
señalan la audiencia preliminar y complementaria.
Etapa decisoria
La etapa decisoria, se encuentra establecido en el Art. 638-VII) de la Ley 439, que
después del último alegato realizado por las partes, el Juez tiene la obligación de
pronunciar la sentencia que corresponda. Lo indicado importa la estructura del proceso
ordinario.
Proceso ejecutivo
Los procesos ejecutivos son esencialmente documentados, o sea que, para dar
comienzo a dicho proceso, se acompaña prueba documental preconstituida
firmada por el obligado, que se conoce como título ejecutivo. Estos títulos están
determinados por la ley (Art. 397 y Sgtes. de la Ley 439). De ahí que sus etapas
son cortísimas: demanda, sentencia inicial, excepciones, sentencia definitiva.
Proceso precautorio
Los procesos precautorios o medidas cautelares, en nuestro Código Procesal
Civil, son (Art. 325)
Anotación preventiva
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Embargo preventivo
Secuestro
Inhibición de bienes
Intervención Judicial
Prohibición de contratar.
3. Clasificación de los procesos por el modo
Pueden ser: de conciliación, voluntarios, extraordinarios y ordinarios.
Conciliación
El proceso de conciliación se encuentra establecido en el Art. 234 de la Ley 439, y
pueden ser de dos clases: previa e intraprocesal, Art. 235 de la misma Ley.
Procesos voluntarios
Los procesos voluntarios en los que las partes actúan de común acuerdo y sólo
requieren la intervención del juez para consolidar una situación jurídica.
El título VII Capítulo I Art. 448 y Siguientes del Código Procesal Civil, legisla los
“Procedimientos voluntarios”, los que dan lugar a la organización de los procesos
voluntarios; ellos son:
1. Aceptación de herencia.
2. La apertura, comprobación y publicación del testamento.
3. Aceptación de la herencia con beneficio de inventario.
4. Renuncia de herencia.
5. Sucesión del Estado.
6. Desaparición y presunción de muerte.
7. Mensura y deslinde.
8. Oferta de pago y consignación.
9. Traducción de documentos en idioma extranjero.
10. Inscripción, modificación, cancelación o fusión de partidas en el Registro de
Derechos Reales, así como en otros registros públicos, siempre que no estén
regulados por Ley especial.
11. Otras señaladas por ley.
Todos los procesos voluntarios tienen un mismo procedimiento. Se caracterizan
por el principio de unilateralidad a diferencia del proceso contencioso que se
caracteriza por el principio contradictorio o bilateralidad.
Sobre el particular, el procesalista uruguayo Couture, da la siguiente acertada
opinión: “El acto judicial no jurisdiccional, no tiene partes contra nadie; le falta pues
un adversario. Él no es parte, en sentido técnico, porque no es contra parte de
nadie. Tampoco tiene controversia. Si ésta apareciera y se opusiera a la
pretensión del peticionante por considerarse lesionado por el acto judicial no
jurisdiccional, se transforma en contencioso, y por lo tanto en jurisdiccional”.
4. Clasificación de los procesos por la forma
Pueden ser: ordinarios, especiales y sumarios.
Proceso ordinario
Cuando no existe un trámite especial preestablecido para la solución de una litis o
controversia, debe ventilarse con arreglo a las normas procesales que rige el
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