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9933883 388838383038633 1H PRIMESTORIA DE AMERICA ‘10n ineapavos dle Naver frente a la aridez del Altitermal. Los recolectores de Viocinitns proeosaron alimentos vegetales usando manos, metates, cantos gran- dou y toscos, y raspadores. Abundan los restos de moluscos en los sitios Enci- ‘ils, pero los huesos de mamferos y peces son raros,y también las toscas pun- ‘ny de lanza en forma foliéeea que usaban en las cacerias. Esta evidencia suglete un cambio de direccin, de la caza a una dependencia fundamental de la recoleccién de semillas y moluscos. La tradicién Encinitas permaneci6 has- { 1000 .C. cerea de San Diego, pero en Ia costa de Santa Barbara, c. 3000 (C. fue seguida por Ia tradicién Campbell. Un aumento en el mimero de pun- 1s, ebchillos yraspadores sugiere que la caza comenzaba a ser més importan- nientras que la aparicidn de morteros de tolva, y morteros y manos de pie~ ica cierta importancia de la bellota. )bjefos de arcilla eocida han sido recientemente excavados en dos sitios al sur de California. Estos fragmentos de vasijas y figurillas no tienen ain fechas seguras; los andlisis de C14 de conchas asociadas dan ¢. 5000-4000 .C; pero las fechas obtenidas por termoluminiscencia indican una edad de 1600-1200 a.C. (Moratto, 1984). Aunque las fechas mas tardfas fueran de mayor exacttud, este material es importante porque representa uno de tos primeros desarrollos de Ia tecnologia cerémica en Norteamérica. Curiosa- mente, la fabricacién de cerdmica nunca fue muy practicada por los indios tardfos de California, quienes prefirieron como recipientes las canastas. Creemos que este es un raro ejemplo en el que los arqueSlogos tienen ante si una tecnologia experimental que no tuvo una amplia difusiGn, Existe al rmnos otfo caso comparable en América del abandono de la manufactura cerdmica: la tardia cultura Thule de los esquimales prehistoricos, La GRAN CuENCA, 3000 4.C-1800 D.C. _ En el noreste de Ja Gran Cuenca, la adaptacién arcaiea temprana a ls orillas det lago, ejemplificada en la eueva Hogup, continus hasta 1200 a.C. cuando ef nivel del Gran Lago Salado subis hasta cubri los bosdes panta- nosos Esto provoes la disminuciéa del camalote y un dréstico aumento de las aves acuaticas. Después parece que la cueva Hogup sélo estuvo habita- da brevemente por partidas de cazadores que desechaon ali huesos de an= tiope americano y bisonte. Algunos arquedlogos (Madsen y Berry, 1975), que amplian is secvencia de Hogup a toda la Cucnea noreste, sugieren que Ja subida del lago agot6 los recursos del pantano y esto hizo que la gente que depencia de ellos abandonara el érea. Aunque otros especialistas dis repan (Aikens, 1978), existe consenso en que los recursos encontrados en las tierrasaltas adguirieron mayor importancia después de 1500 a.C; esto ppuede haber eausado cambios en el patrén de los movimientos estacionales. ‘Como ya hemos dicho, es posible que los pinones, base de la comida inver- ral de los shoshones histéricos, no estuvieran disponibles hasta 1000 a.C. En la Cuenca oosidental, una cultura bastante rica esté representada en LOS RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS 149 el complejo de la cueva Lovelock, datada desde c. 2500 a.C. a 500 d.C. La Cova estaba situada cerca de un estanque poco profundo rodeado de pan- {anos Los habitantes de la cucva recogian peces, moluscos, tubérculos comes {ies safees semillas,y juncas con los cuales fabricaban canastas. Los corde tbe de fibra vegeial se usaban para hacer trampas y redes con las que {apturaban conejes y péjaros. Hicieron mantos de plumas de aves o piel de Conejo. y para cl xestido usaban corteza deshilachada. Los canastos para re~ oger scmllas y les cestas en forma de jarras y bandcjas se hacfan con a Tele y entrelazado. Las conchas de Olivela muestran que Jos habitantes de ci velbck estaban conectados por una red de intercambio que alcanzaba in- tduso la costa pacifiea de California, De hecho, la semejanza con las cultu- fas de Californie, especialmente 1a cultura Windmiller, sugiere que la poblacién de Lovelock pudo haber estado més relacionada con los de habla enutia de California y Oregén, que con los antepasados de los paiutes del Ferfodo del contacto en la regi6n. Los niveles més tardios deL.sitio dieron frcos y fechas, canastas en espiral; mocasines, sandalias; pipas tubalares; puss de puerco espin trabajadas y trampas para patos. En sitios relaciona- Bor en ef area se han encontrado figurillas de arcilla, madera y piedra, que representa seres humanos, 0s0s, peces, buhos, saltamontes y animales fan- téstcos, Restos de edificaciones que parecen wickiups pajute histGricos se des- Cubrieron en el sitio Humboldt Lakebed. El modo de vida Lovelock se habris, Sostentado en un eficente uso de los recursos de la orilla del Iago, los cuales permitian una existencia sedentaria que contrastaba con Ia imagen némada {gue se evoca con la etiqueta de «cultura del desiertor (Aikens, 1978). ‘En la Cucnea central Jos resultados de la prospeccion de Thomas en el ‘alle del io Reese indiean que el patrén de los movimientos estacionales en tre las colinas y las Hanuras de artemisias, que Steward registré entre los Shoshones histGricos del area, ya podia haberse establecido en 2500 a.C. “Thomar también excavé sin sitio con una estratificacién profunda, Gateclift Shelter, donde les niveles mis bajos datan c, 4000 a.C. En el abrigo OMa- Iley, ot sitio en el sur de Nevada que fue habitado hasta 4500 a.C., la ocu- pacion reaparece alrededor de 2600 a.C. y llega hasta 1000 a.C. El comple- Jo de este periedo incluia puntas de flecha de los tipos Elko, Pinto y Gypsum. Las puntas de estos mismos tipos aparecen también en Cuenca ‘oflental, por ejemplo en el abrigo de Sudden, donde fueron encontradas en ddepésites bien estratificados fechados en 5800-1300 a.C. Pen el valle Surprise, California, en la esquina noroccidental de la Cuen- ca, las casas semisubterréneas de la fase Menlo ya no se construyeron des- pués de 2500 a.C. Fueron reemplazadas por viviendas menos sélidss —pe~ uefas viviendas wickiups con techo de ctipula trenzada. Considerando que Tas casas mas antiguas pueden haber contenido de 12 a 15 personas cada tuna, las wickiup: de la fase Bare Creck probablemente alojaban familias nu- Cleares Las gentes de Bare Creck eazaban menos bisontes, ciervos y cabras, pues dependian més de la carne de conejos y aves acusticas. También hubo Eambios en la creaciOn de artefactos; se introdujeron las puntas de flecha 150 PREHISTORIA DE AMERICA Ficura 33. Punta Elko con escotadura lateral basal (1500 a.C-500 4.C), Nevada (iamafio natural) Ficuns 34. Punta Pinto, sur de California (longitud ¢ 3,5 em). (De Heizer y Elses a ongitud ¢ 3,5 em). (De Heiser y Els Lipo Finto y manos de mortero y metates, Un clima més célido y seco pudo haber obligado a los habitantes a trasladarse, a-dispersarse més, a patrones de asentamiento menos sedentarios, para ajustarse a una reduccién de la movilidad. Los cambios en las edificaciones, en los tipos de artefactos y en las preferencias dietéticas puede que no reflejen una readaptacién de la po- DlaciGn de Ia fase Menlo, sino su sustitucién por los ancestrales paiutes de habla numic, quienes estaban mejor adaptados al seco medio ambiente. La evidencia linguistica, sin embargo, sugiere que la expansién de hablantes nu- mic aparece mucho después, por lo que existe alguna duda sobre esta iden- lificacién de la poblacién de Bare Creek. En cualquier caso, la fase Bare (Creek llega hasta c 1000 a.C;; las fases subsecuentes hasta el perfodo hist6- rico fueron esencialmente similares difiriendo s6lo en algunos cambios de es. tilo y en la introduccién del arco y la flecha después de 500 4.C. Los residen- tes de la fase Menlo que partieron desde el valle de Surprise pueden haber sido los ancestrales klamath, y pudieron haberse establecido en el area del Jago Klamath al sur de Oregén, donde existe evidencia de la continuidad de Ja cultura Klamath desde c. 400 a.C. hasta tiempos histéricos (Aikens, 1978). [LOS RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS ast Ficuta 35. Punta del desierto de Nevada, con escotadura lateral (después del 1300, 4C) (tamao natural) En Ia Cuenca sury en el sur del desierto de California, la fase San Di guito (c. 7000-5000 a.C.) fue seguida por la fase Pinto Basin, la eval estaba Caracterizada por cazadores yrecolectores ndmadas. Esta fase pudo comen- rare 5000 aC: finalizar c 1900-1500 a.C. En cl desierto de Mohave fue— seguida por la fase Amargesa, que duré hasta 1000 d.C. En el valle de Owens la fase Rose Spring, con puntas triangular pedunculadas con mues- cay otto 2rtefactos parecidos a los de Amargosa,extéfechada entre 1500 aC. y 500 d.C. Ambes, Amargosa y Rose Spring, eran bésicamente una continuacién de formes de vida més antiguas. En 1000 &C. ls individuos de lengua numic estaban defnitivamente asentads en este area; ademas de puntas de proyectil Desert y Cottonwood triangulares con muesca, usaban raspadores, manos y metates, morteros ¥ cerdmica tosea de color marrén, "Ya hemos aludido brevemente al problema arqueologico derivado de Ia expansion mimic. Cuando se produjo el contacto con los blancos, la poblacién aiimie ocupd el desiero al sur de California, In zona norte del suroese, la to- taidad dela Gran Cuenca y gran parte de Tas Hlanuras del noroeste. Los gr- ‘os de lengua numic se dividlan en tes ramas,y ata wna de ella compren- ‘fa dos lenguas: mono y paiute formaban la rama occidental; panamiut ¥ Shoshon, la rama centrals y Kawaisee y ute, Ia rama sur. Parece que los individvas que hablaban estas lenguas se expandieron en direccién norte y éste desde su lugar comin oriinario en el sureste de Californias los lingtis- tas estiman que su expansion ocurié aproximadamente on 1000 dC. Recientemente se ha sugerido (Bettinger y Baumhof, 1982) que 1 es- tratepias de subsstencia de la poblacién numic difiere significativamente elas de sus prodecesores. Los grupos prenumie parecen haber sido los tnicos responsables del extenso y elaborado arte rupestre de la Gran Cuenca, y eran desconocides por los numie histrieos. Estos petrogifos menudo representan cabras montesasy otros animals, y las armas emplea- das en la exza indican que el arte rupestre se hacta en un contexto de tales de caza. Algunas veces parece que los individves mumie hubiesan es ttopeado intencionadamente el trabajo de sus predecesores. Ello también establecieron eampamentos y molieron semillas en los lugares que antes es {aban reservados para petrogifos y In ciza. Mientras que fs eazadores pre humic organizaban pequetioscampamentos de cnza Ijos de sus campaieh ‘SaLABAEL ELLE ® © Qos 9K AFAFKGADIAGDS 12 PRIHNSTORIA DE AMERICA, ie s6lo operaron fuera de sus campamentos situados donde los alimentos vegetales podian ser yor eficacia. Las poblaciones del Arcaico temprano iban hoees de asta para cosechar las semillas y cestas planas tejidas por plval para aventarlas y tostarlas. Por el contrario, los numic usaban cuer~ ‘das treneadas en forma de pala para golpear las semillas y cestas hondas ‘de forma triangular, tambisn con entrelazado, para ventcarlas. No esté uly claro e6mo este equipo diferente permitié a los numic cosechar pe- {quetas semillas de modo mis efieaz. En cualquier caso, estas distintas evi denciasindican que éstos enfatizaron la recoleccién de semillas a expensas de In caza, Esta diferencia con sus predecesores en las estrategias de sub- sistencia pudo tener cierta implicacién demografica. La proporciGn de los sexos en las sociedades prenumic podrfa haber estado desequilibrada en favor de los varones, cuyo rol econdmico como eazadores era de importan- cia crucial; por otro lado, el rol de las mujeres como reeotectoras de semi llas podria haber conseguido, en la poblacién numic, un mayor equilibrio cen la proporcién de hombres y mujeres. En situaciones donde estos gru- pos competian por el mismo territorio, la ventaja numic en el numero de ‘mujeres podria haberlos Uevado a mantener un alto indice de nacimientos, por lo que superarian la poblacién de sus rivales. Otro factor que pudo ha ber afectado el resultado de esta competencia fue el uso del arco y la fle- cha por eazadores prenumie después de 600 d.C; esto pudo originar una sobreexplotacién de la caza, haciendo que la estrategia de subsistencia pre- rnumic fuera menos efectiva y mis susceptible de ser reemplazada por los numic que estaban por llegar. Bettinger (1989) ha sugerido que el valle de Owens, al este de California, puede haber sido el lugar originario de los ‘oumic. El ve pruebas de una creciente presidn demogrifiea, manifestada c. (600 d.C,, en varios aspectos del registro arqueoldgico: aparicién de la ocu- ppacién permanente de las aldeas en las tierras bajas; comienzo de la reco- Jeccién de piftones; cosecha intensiva de semillas; y una disminucién de la ccaza a larga distancia. Enfrentados a la carestia de los alimentos, una par- te de los habitantes podria haber emigrado, Sea vélido 0 no este modelo explicativo, la evidencia lingustica de una reciente y répida expansién de los numic por la Gran Cuenc®y sus regiones adyacentes parece ser incontrovertible. Esto quiz constituya un problema serio para los arquedlogos, los cuales generalmente tienen asumido que exis- 16 un desarrollo continuo desde e] Arcaico del desierto hasta las culturas del petiodo historico; tendrén que reexaminar culdadosamente las diversas se- ‘cuencias culturales locales en busca de discontinuidades estilisticas y adap- tativas 1000 dC. Por ejemplo, Adovasio (1986) indica que las canastas ‘trenzadas caracteristicas de la cultura Lovelock desapareced en la Cuenca ‘occidental ¢ 1000 d.C., mientras que las formas tejidas entrelazadas, pr ‘camente idénticas a los especimenes etnogréficos, aparecen repentinamente cen la Cuenca central ¢ 1000-1400 4.C. Al mismo tiempo, en la Cuenca sep- tentrional surgen nuevas variedades de cesteria anillada, acompaiiadas por | | TOCENICOS 153 Fiouna 36. Figura de cerémica Fremont (més o menos 1/2 del tamaio natural). nuevos tipos de puntas de flea, como Ias punta cel Desierto de lados con tscotadra las Rose Spring de base indenada, La into lussion de estos ‘nuevos tipos de arlefactos coincide con la desaparicion de algunos articulos itadicionates de la cultura arcaica local, como las sandals tejdas. ‘Aleste de a Gran Cuenca, la ruptura en la secuencia cultural loca cau sada por la intrusidn numic est particularmente clara. Agus, la cultura Fre- ‘mont, cuya subsistencia estaba parcialmente basada en el cultivo del matz, vino esiablecenec 800d. I esi dels punta Fremont, de lads y bordes con mucscas,y sus canastas en espiral (Adovasio, 1979), sugieren que estos pucbign eran cazadorsreclecores locales que habia adoptado el taltivo del matz de los mogollén o los anasazi, También aprendieron de sus Yecinos del sur cémo hacer cerdmica gris y marrén. Gracias al almacena- Imiento del maiz, Ia gente Fremont podia vivir en poblados todo el ao. Sus poblados eran pequefios y consstan en casas-pozo y algunas estructuras en Eiperticie construidas de picda 0 adobe. La arquitectura en superficie pe- retida ala de los indios Pueblo y la cerémica pintada s6lo eran caracteristi- as del tea suroriental Fremont en la meseta de Colorado; esta rca per- rmaneci6 cerrada a los anasaziy fue la més influida por ellos Los grupos més Occidentale y septentrionales eran menos parecides a los anasaz, sin em Bergo muctiansemelanas son las cures dels Tlanorasocientles Los rasgos que estan presents en los cinco grupos Fremont reconocidos incluyen fEgurilas humanas de arclla sin cover, grandes piclogramas de antropomorfos 14 PREMISTORIA DE AMERICA TAS CULTURAS RIBERERAS DE LA MESETA, 3000 A.C-1800 nic A 10 largo del curso bajo del rfo Snake, al est i Cascade fn 2 Snake, al este de Washington, Ia fase ‘manos y plomadas para salmones del rio. 1LOS RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS 155 Jos de comercio euroamericano y arreos de caballo. Esta fase indudablemen- te representa a los nez pereé del periodo histérico. La linea ancestral de los nez percé probablemente retrocede en el tiempo al menos hasta la fase Har. der, incluso antes (Willey, 1966; Irwin, 1975) ‘Los nez percé eran de lengua sahaptiana, como los yakima, umatilla,te- sino y otras tribus de Ia meseta meridional y oocidental, hasta el rfo Kla- math al sur, cerca del limite Oregén-California. Los hablentes de lenguas chinookan, relacionadas con las lenguas penutia de California, ocupaban el valle del fo Columbia y estaban presentes también en la cesta del Pactico. Las tribus de la meseta septentrional eran de lengua salish: (os Kalispel, flat. head y wenatchi, y los shuswap de la Columbia Briténica. 21 mismo grupo de Ienguas estaba representado en la costa por los salish de. Golfo en la fe. sién de Georgia, y los bella coola, que vivian mis al norte Estas conexio- Bes lingbisticas entre Tas tribus de la meseta y la costa noroeste se rellejan en Tos resistros arqueol6gicos, que muestran inleracciones continuas entre estas éreas culturales en la prehistoria, EI rio Dalles, rico en salmén, y el curso medio del Columbia quedan en Ia zona de transicin entre la meseta seca y la costa noroeste humeda y boscosa. La gente acampé en el Dalles hasta el 8000 a.C. El periodo tar ‘dio de esta drea comienza c. 4100 a.C. y termina en tiempos hist6rieos. Las Puntas de piedra hechas durante este largo perfodo incluyen puntas fob eas parecidas a las de Cascade, puntas triangulares con muesca basal se ‘ejantes alas de Ia fase Harder y pequefas puntas finamente talladas con ‘muesea basal y barbadas que se parecen a las de la fase Piquuin. Alrede- dor de 1000 a.C., varios artefactos de piedra pulida se aftadieron al con. junto, que incluye mazas, manos, pesas de ailal, orgueras de peces, pipas {ubulares, dos fibulas de gorgueras y esculturas de animales, Las técnicas de piedra tallada y pulida probablemente fueron adoptadas de la costa no Teeste, donde se usaron desde antes de 2500 a.C. Sin embargo, la presen sia de gorgueras en particular despierta la sospecha de que los habitantes el Columbia pudieron tener algiin contacto con las culturas del Arcaico {ardio del noreste (Willey, 1966). Existe evidencia linguistica acerea de Ia conexién noroeste-noreste: los yurok y los wiyot, que vivian en la costa no- toeste de California, hablaban lenguas que estaban relativamente distantes de las lenguas algonquinas de los bosques orientales (Heizer, 1978). Quiza fl comicnzo de una nueva tecnologia de piedra pulida en Ia meseta estu- Yo asociada con ta legada de grupos de habla algonguina. Sin embargo, la comparacién de un vocabulario bésico sugiere que la divergencia del yu- [DK Y wiyot de las lenguas algonquinas comenz6 mucho antes de 1000 aC. ‘Los hipotéticos lenguajes ancestrales proto-algic pudieron heber existido $000 © 6000 a.C. Qluizd la aparicion en la regién del escudo canadiense de tos fabricantes de las puntas Agata Basin de las llanuras septzntrionales re Dresenta la expansién inicial hacia el este de los grupos de habla proto-al Bic (Fedel, 1991). ‘La secuencia cultural que revelan las excavaciones en los: ios Lochno: >5dHHKHH4H44444035 16 ISFORIA DE AMERICA FeNesikep tobre el rio set, en el extremo septentrional de la regién de © hubo algun tipo de interaccién entre los primeros ha- ta y los portadores de un conjunto instrumental deriva. tio del Antico, Entre ef 5500 y el 4000 a.C. se hicieron puntas folidceas janes puntas con muescas laterales en estos sitios, donde han aparecido luescas basales y lados triangulares. La pesca del salmén co- ‘menz6 en S100 a.C. y comtinué a través de las fases culturales subsccuentes Durante el periodo medio, del 3000 a.C. al 1 d.C., las puntas con muescas cestaban junto a un tipo podunculado con base indentada. Cunas de asta, cin. eeles.bechos con ineisivos de rocdores, hachas y mazos de piedra pulida se uusaban para trabajar madera. Los profundos fondos de cabaia comenzaron construirse en 1700-1500 a.C. Es cvidente la migracién o la difusion cultu- al desdesel Artico por el gran numero de microlitos y micronticleos que contiene el conjunto del periodo medio; en el conjunto instrumental del pe- iodo anterior también estin presentes, pero no son abundantes. Estos ins ‘rumentos parecen representar una extensién meridional de la industria de microliminas del Paleodirtico, que tuvo sus raices en el norte de Asia. Las ‘microléminas dejaron de utilizarse gradualmente durante el periodo tardio Gel 1 d.C. a los tiempos histéricos (Dumond, 1983). El modo de vida que se observ6 en el siglo XIX a lo largo de los rfos de Ja. meseta habia comenzado a gestarse ya en 5000 a,C. Aunque hay muy po- 08 restos de vida aldcana en poblaclos antes de este tiempo, Ia evidencia de pesca del salm6n antes de 5000 a.C: y las casas de tierra en él curso bajo del ro Snake datadas en 3000 a.C. indican un origen niuicho més antiguo del pa- {én de subsistencia y de asentamiento. Los habitantes de la meseta en el i= slo xix pasaban el invierno en poblados con cinco a diez casas de tierra: es {as aldeas estaban situadas en los cafiones abrigados de los rios Columbia y Fraser, donde la temperatura es 5® C més cilida de promedio. Alli los indios cavaban ciervos y comfan calmén eurado, que habia sacado con #4 0 lan 2a durante el desove de verano. En primavera y otoio dejaban las aldeas y Se instalaban temporalmente en campamentos en los caftones secundatios ¥ €n las tierras altas, donde eazaban y recolectabian raices y bayas. LA costa NoROESTE Algunos hallazgos de puntas tipo Cascade en sitios dle la costa boscosa del Pacifico en Oregén, Washington y Columbia Britiniea mucstran que los Primeros grupos de la mescta penetraron en esta drea c 60%) a.C: Entraron 9 contacto con los pueblos que tuvieron que migrar desde Alaska bajando Por la costa y que levaban con ellos la tecnologia de las microlaminas y mi ‘roniicleos del Paleodrtico) La interaocién de los grupos procedentes del Antico y los de la meseta 58 demuestra por Ia apariciGn de microlarinas y untas de forma folidcea en los mismos conjuntos c. 3500 a.C., por ejemplo ‘en Namu, en fa costa sur-central de la Columbia Briténica. Estos antiguos LOS RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS 157 habitants cazaban wapitis cers foci, ecoletaban marisco yatrapas an salmones y otros peces. Borate e 230 nos fabrcaron mlrlimings en i mayor parte det costa entre Alskay Vancouver Los instumentos de pizarea pla J eso comenzaban a apaeter,ylosconchersy Tos hvesos de mamiferon mmarinos prucban una erentcion marina, La seevenia prchistrca dls {uturs J la costa a sido mejor investiga cn fossils ereano la do Sembocadura del rio Pasr, en Ia orila exe del entrecho de Georaa, que Separa I sla de Vancouver de era firme. Ea esta rea, a fase Eayam (© hares) daré desde apronimadamente 2500 hasta 1200'.C. Los stor de fete perfodo proporcionan punts de picra‘llada con peduncuo, punts de para tallaa y parcialment pub, y cull: Estos instrumenton de led pulida impican alguna forma de iotericin entre las gentes de la sie norte yn ean contempt: ey sls Koi se Eayam fue sepuia por la etapa Locarno Beach os pcos counton Loar no Beach tienen punastlladas de basal, casio de pzaratallads, Groldminas, punta y euchllos de pizara pls, pequetas azadas de jade pollo, adoros labiaes,pendentesy diverts nsrumentos de hueso y asa Pusan barbadas cusas varias yarponesaxodlindos. Cenealmente, os a= {actos de material perecedero se encontraron en buen estado de reser Gin en un so de fase Locarno Beach saturado de agua cetea dela de- sembocadra dl ro Hoko, en el angle norocte dl estado de Washington. Us intrumento de madera para tjer om desmadejador— oni un an. go tllao en forma de dos pajros con los pos juntos Fechado antes do S00 a.C, cs el ejemplo més antguo concedo de abseto-de arte de madera tallada prootdeate dela costa noroeste, Tanga se encontraron anzueles, Sedsles de pesca yflotdores este equipo se wha para atrapar poces dela familia del fenguado, uyos huesos dominan ex el rgstro dela una, Elsi No Ho re probabement un crmpamenio de pes tmp, opal Gf los meses de primavera verano, Se ban encontrade eolisinas de Suarao con mangos de cedro que eran wSads como cud. Se hallaron tn rests foe, come eps las sande Hr ecko retor cl po el eves, Laban do ios de soir so lao to con a Paste alta abultada, Este utimo era oso dniramente por Tos nobles et focledades histories de Ia costa noroeste ax qe au presencin sugire que ‘enista una jeraruizacion antes de 300 aC (Crocs, 1588. EI Locarno Beach fe seguido en 200 .Cepor i lapa Marpol, en la aus sno ols y pin de ee lps cm a Ineremento en el aso dela piarra polda pra oer punts lagas Y ul Saban aon bad ara carat menerosmarnestablen mien Saimén y otto pecesmariscon, mamafleros marino: ¥ pares. Lt aca Maypole ran andes a ces exten sobre vara hee léreag'y probablomente consstian en conus hechas de madera de eedro Semejanter as que consruin os sali costes istics en la misma e- sé La construcion de eanoas sea afer de la presencia de numero- 158 PREHISTORIA DE AMERICA Figura 37. Desmadejador del sitio de Hoko; fechado ¢ 800 a.C. es Ia obra de arte {de madera tallada preservada més vieja de la costa noroeste (de Croes, 198). $08 instrumentos para trabajar la madera —azadas, mazos y cufas Los en- terramientos Marpole varian en Ta cantidad y la calidad de las ofrendas fu- rerarias que los acompafian, una probable indicacién de qe el rango por estatus ya estaba desarrollado (Ames, 1981). La deformacién crancal, que s6lo se observa en alguncs enterramientas, también podia ser una sefal de alto rango. Mas al norte, en el rea de Prince Rupert Harbor, aparece la mis- 1a evidencia, lo que sugiere la existencia de una jerarquizacion e500 aC 1Los contenidos de las tumbas de este periodo Varian en la eantidad de co: bre, cuentas y collares de concha, y dicntes de nutria marina. En algunos ¢s- queletos se han observado lesiones que implian violencia y en varias tumbes se colocaron calaveras como trofeo, lo cual apunta a un aumento de la ie euencia de la guerra. Durante la época Marpole se guardaban como artfculos de valor las cuentas de concha demalium, el cobre nativo y las puntas larges ‘muy bien talladas, igual que en el periodo de contacto de las culturas de la costa noroeste y norte de California. Estos objetos de valor podrian haber sido acumulados y después distrbuidos por los caciques en fiestas cere- moniales, parecidas a los potlaich histricos. Las esculturas de asta y estea- tit, que incluyen cuencos de piedra hechos en forma de personas o anima: Jes sentados,indican que la elaboracién del arte del perfodo de contacto de Jas eulturas de Ia costa noroeste fue tomando forma durante la etapa Mar- pole. El material preferido por los artistas tardios fue, por supuesto, la ‘madera, la cual rara vez se ha preservado en los sitios prehist6ricos. La cul- tura dela etapa Marpole se desarroll6, con pocos cambios, dentro de ia tar- dla etapa prehistsrica del golfo de Georgia, c. SU0OIN d.C. Esta tradici6n LOS RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS 159 FoURA 38, Cuenco de piedra z00mor(o, fase Marpole (altura 35 em). cultural fue continuada por los salish de la costa a principios del sigho XIX. En el sur, el clésico modo de vida de la costa noroeste parece que cO- menz6 a establecerse en la desembocadura del Columbia ¢ 1 4.C. Sin em- bargo, la mayoria de los sitios conocidos en esta drea datan de los tiempos prehist6ricos finales o protobistéricos. El més notable es el sitio Ozette, don- de parte de una aldea makah de grandes casas de madera de cedro desapa- recid bajo tna capa do barro c. 1850 d.C. Esto dio como resultado la preser- Yyacién de las mismas casas y también de mucls artefactos de madera y btros materiales orgénicos que ellas contenfan. Entre estos artefactos habia tajas de madera, canastas llenas de instrumentos o comida, arpones lanzas, ccuencos, instrumentos para trabajar madera y objetos cuidadosamente talla- dos. Uno de ellos, que representa una ballena con aletas engastada con con- has, se parece al que vio el capitén Cook en esta region en 1778. La rigueza y complejidad de las sociedades de la costa noroeste que Cook y otros exploradores descriieron ofrecen un notable contraste con la imagen generalizada de los cazadores-recolectores, bisada en la obser- vacién de grupos que vivian en ambientes relativamente inhOspitos. A di- Terencia de la mayorfa de los prupos cazadores-recolectores, los de la cos- ta noroeste casi no se desplazaban; permanecian Ia mayor parte del afio en aldeas permanentes formadas por casas alargadas, hechas de tablones. En algunos casos, cada casa cobijaba a un linaje entero. Algunas aldeas estaban ‘ocupadas por varios cientos de personas. Una intensa labor por parte de Jos ‘ldeanos en determinadas épocas, cuando el salm6n y otros peces abunda- baa, permitia obtener suficiente comida para el resto del afio sila pesca era 40303934 4,334 3433833935 10 PREHUSTORIA DE AMERICA, bom esa y almacenada, aceite de fca y de ballena desempens un fiptonte pape la deta, quia para suphr Ia earencia de carbokidra. tot derivado de tas plantas La dependencia de fs provisonesalmacena- thse pees y de aceite era wna buena razén para que la gente permane- Siena ef mismo Ngaela mayor pare del ano. Las sociedades de a costa s Yucron fualtrias hay notables diferencias invites en oh {stots socal eredadoy la riqueza E estas era determinado por la eer Sania distancia de la Wea de descendencia con rlacén al fnaje real Esteyshtema jerérquico era generalmente més rgido en los grupos ms sepicoain oe gy aetna sera ae to exista'y s© habia perdido Ta jerarquizacgn entre los grupos sm fiionales, inluidos tos salish, Las socedadesjerarquizadss estan di tidas To lego de tna escala,en nobles y gente comin. Al final de Ia cseala social estaban los eseavos que habian sido capturados ea la guerra, a Tos que se sacnificaba aplastandols bajo un poste cuando se contra Una nueva casa, o se les malaba para vsrlos como , Algunoe postes eran monumentesfunraros de ees cauertos otros se levenfaban frente a tas casas Evidentementey el tallado Ge {as imponentes escultras es anterior sl contacto con les blancos, quienes les proporcionaroninstrumentos de hierro pata Iacitarles el treba sobre ia madera. Los postes que observaron fos primeros vstantes blancos ala Costa noroeste, ene siglo XV, hablan sido riidos aos antes de su Nees da (Ducker, 1963). os CCAaLtroRNta, 3000 0.C-1700 D.C. California, al igual que Ta costa noroeste, fue una de las pocas regiones donde abundantes recursos soportaron una densa poblaciGn de cazadores-re- colectores hasta el perfodo hist6rico. Generalmente, los arquedlogos han di vidido la prehistoria de California en tres regiones, que se corresponden con Jas zonas cool6gicas y las éreas culturales delineadas por los etndlogos. Estas son la costa sur la costa central y e valle interior, y Ia costa noroeste. 1L0$ RECOLECTORES FOSPLEISTOCENICOS 161 En el sur de California, la tradicién Encinitas, que se origin ¢ 5000 a.C., duré hasta 1000 d.C. en el rea de San Diego, En la costa, cerca de Santa Barbara, la tradiciGn Campbell (o Hunting) siguié a Encinitas, c 3000 a. Numerosas puntas, cuchllos, raspadores, asf como huesos de ciervo, alee, ‘sos y pequefios mamiferos,indican que la caza fue una actividad importan- te. Los restos de focas, peces y mariscos muestran que la gente Campbell ‘también hizo uso de los recursos costeros. Los hallazgos de morteras de tol- va, canastas con fondos asegurados con brea, morteros céncavos de piedra y manos sugieren que Ia bellota, la planta comestible fundamental de los in- ‘ios més tardios de California, empezaba a procesarse y comerse. El apoeo {Uc la tradicion de la costa surefia a finales de Ia prehistoria estd representa do por la eultura Canalito que era la antecesora directa de Ta cultura Chu ‘mash del periodo histdrico. La cultura Canalifo habia comenzado a adap- tarse al mar, usando canozs de madera para travesias costeras, pesca y caza de mamiferos marinos-La recoleccién de la bellota era también una activi- ‘dad muy importante para la subsistencia, y Ia carne adicional se obtenia me diante la caza de mamiferos terrestres. En el tiempo del contacto, algunas aldeas chumash tenfan casi 1.000 habitantes. Sus edificaciones consistian en casas circulates, abovedadas, hechas de estacas cubiertas con esteras dé Gaia. El promedio del diémetro de las casas era de cuatro a siete metros. Entre las edificaciones, cada aldea generalmente inclufa una casa-taller se- rmisubterrdnea, techada con pesados palos y tierra, un piso para bailar de tie~ tra apisonada y un recinto ceremonial circular, de piedra. Los canalino-chu- mash tallaron cuencos de piedra arenosa y esteatita, y también hicieron esculturas de esteatita, representando animales y objetos como ballenas y canoas. En un cementerio chumash, en Medea Creek, el cual estaba asocia- do a un pequefio poblado de 30 a 60 habitantes, las mayores cantidades de ‘cuentas de concha tienden a aparecer en Tas tumbas de los ninos, que eran fnterrados en el sector oeste del cementeric. Esto ha sido adecustlainente interpretado como la evidencia de una organizaciOn social jerarquizada, en Ja cual los nifios que pertenecfan a la jerarquia superior y a los linajes pode- rosos eran enterrados con ricas ofrendas funerarias (King, 1969) Ea California central, alrededor de Sacremento, la secuencia cultural he sido definide ampliamerde a partir de los enterramientos excavados. Esta comprende Ia fase Windmiller (2300-500 a.C.), la fase Costumnes © patron Berkeley (500 a.C.-600 .C.), la fase Hotchkiss o patrén Augustine (600 6.C- period histérico) (Elsasser, 1978; Moratto, 1984). El complejo Windmiller, ‘Conocido enteramente a partir de tumbas,incuye puntas de flecha largasy pe- ‘sadas para cazar, puntas de arp6n de asta, y manos, metates y morteros para rmoler semillas. Las tumbas Windmiller también proporcionaron artfeulos no Utilitarios como cuentase concha, paletas rectangulares de piedra, pipas tu- bulares y amuletos de piedra. Los amuletos,largos yfinos, son objetos de pie- ra cuidadosamente pulida en forma félica o de aguja, y a menudo estén per- forados para poderlos colgar. Las analogfas eimograficas sugicren que podrian colyarse de las ramas sobre lugares preferentes en los arroyos, ya sea para pe- Fours 39. Figura de una ballena en esteatta, cultura Canalifo (longtud 18 em), dir protecish o para exorcicar una influeneia magica. Si asumimos que los ‘muertos eran cxpuestos mirando els, Ia orieatacin de os esqucets ind ca que e180 por 100 fueron enterrados durante los meses deinviemno, cuando tatia probatlemente un poblado en la vecindad del cementerio. Vaio es Gquelet Windmillrcontenianpuntas de proyectlencsjadas, lo que demves- tala existenci dela guerra. Algunos rasgos de la cultura Windmill eran compartdos con los habitatescontempordncos del rea de la bahia de San Francisco, pero estas gents costerastenian un patton difrente de subse cia que enfatzabala pesca, Ja recolecin de mariscosy sella, asf como la ata Se aviertenesrechas semanas entre las punta bs instrumentos de Iveco y ls punta de piedra de la cultura Windmillertemprana y los artetac tos dela cultara contempordnea de Lovelock al norte de Nevada (Morato, 1984; Aikens y Witherspoon, 1986). Tos sitios Cosumnes, que aparccen tanto en a costa central como en el valle central, han dado puntas de lana barbadas para pescar también mas torteros y manos que fos que aparecen en asetamientes dela fase Wind miler, 10 que implica uaa gran dependenca dela beiota para la aliment Gién. Los omamentos fonerarosinloan cuentas de condi Oltvellay Hax tots (abelones), dientes de coyote y mandibulas de os. La jerarquzacion se ha inferido a partir J la ditibucin de bienes funerérios en un cemen- tero en las coinasTiburén, sobre el lado noroeste dela bahia de San Fran- tinco (King, 1976) En este cementrio cya fecha es de ¢ 1 6, el area ental conta enerramentos mascalios incinerados, de adultes ni 4 femeninos acompaiados de numerosas cuentas de Olela Halon, pew. Gentes yslbatos de hveso. Alrededor del recino eft se dkpusieron los fenterramentos masculines formando un allo, sin ornanentosasociadex, ¥ fn el exterior del recinto, un grupo desordenado de adultos mascalinos yf ‘eninos on cuales fueron enferados con pocos atefatos.Algunos nd ‘duos Cosuzmes suieron muerte violentas como se deduce por las pun tas inerustadas en varios eoqueletos. [a incineraci6n se vuelve més comin en los enferramientos de la si- auiente fase, Hamada Hotebkse (0 patron Augustine) Exste evidondia de ceremonits mortworis elaboradas como la cemacion de las fends fane- Ficuna 40. Amuletos de piedra, de California central ¢ 2900-1000 a.C. (longitud 16.5 cm), (Figs 39 y 40 de Heizer y Elsssser, 1980.) rarias antes del enterramiento, y de diferencias en el tratamiento funerario, 15 que implica estratfieacién social. Los abundantes morteros. y manos :muestran la importancia de la bella para el pucblo Hotchkiss. Las puntas ‘pequetias de lados con mucseas (y barbadas) eran probablemente de flecha; Ins lanzas barbadas de hueso se usaban para atrapar peces. Los fragmentos de canastascarbonizadas y punzones de hueso atestiguan la fabricacién de fanastas, que era tna artesania altamente desarrollada en California en cl momento del contacto. Es muy posible que los utensilios de arcilla cocida hhubieran susttuido alas piedras calentadas al rojo para cocinar el pusé de bellotas Omamentos y cuentas de concha Haods, mejillones, magnetita v esteatita estaban presentes en los enterramientos Hotchkiss. Esta tradicién prehistdricatardia fue Ia antecesora de los wintun, miwok y yokuts, qe 0©0- aban California central en el momento del contacto. ‘La dsiribucion de Keupues nativas eo California central om la 6poca del contacto stigiere que una cua intrusiva de individuos de habla penutia ha bia segmentado a los aborigenes de lengua hoka en cuatro dreas aisladas Tas lenguas hoka se hablaron tambiéa en California del Sur, fueron separa- das de los miembros de su familia septentrional por poblaciones intrasivasuto laztecas, ue quizé legaron c 3000 2: Los antevesores de fos hablantes hoka Se remontan hasta la “Tradicion de los Lagos Pluviales». Los antecesores de los hablantes yukia, del norte de California, fisica y lingbsticamente diferem tes, pueden estar representados por los habitantes del sitio temprano de Mostin, Aunque los grupos Windmller se han considerado a menudo de lew gua hoka, recientemente han sido sefialados como probables penuti int Sivos. Las semejanzas entre los artefactos Windmill y los de la cultura Lo- Velock de Nevada sustentan In tegpfa de una intrusin penutia en California ‘central desde la cvenca occidental c. 2300 a.C. La propagacién subsecvente de la fase Cosumnes, «patron Berkeley», desde la regidn de la babia de Sin Francisco, puede reficjar la expansién de individuos de habla to protomt ‘Woks, qu feemplzzaron ala poblacién yuki local (Moratto, 1984), 339393934 »- o = lot PREMISTORIA DE AMERICA Lap culturas prehistéricas-con vinculos en California central y 1a Gran ne ouparon las colinas de la Sierra Nevada. En las colinas septentrio- halos la wechericia cultural comienza c. 1000 aC, y en las colinas del sur & 400 aC. (informes preliminares de recientes trabajos de campo en la Sierra Neva adelantan Ia ocupacién inicial antes de los tiempos paleaindios: lox piso de casas, asociados con puntas parecidas a las San Dieguito, datan an- tes de 7000 aC). Los arcos y flechas parecen haber sido introducidos c. 600- 1800 d.C. después de 1400 d.C. se observa un aumento en la frecuencia de mortgros y manos, lo que demuestra que la bellota se habia convertido en la base de la alimentaci6n, En el depdsito Buchanan, al sur de Yosemite, va- ros cementerios fechados «. 200-800 d.C. muestran en su seccidn oeste un grupo de jndividuos adornados con cuentas de concha, y formado por hom- bres, mujeres y niftos; los enterramientos en la seccién este contienen mencs, ornamentos, Este patrén sugiere que la sociedad estuvo dividida en dos cla~ ses, segiin la distribucin del estatus hereditario (King, 1976, 1978). En los siglos posteriores la poblacién de la regién parece haber declinado y la or- ganizaciGn social perdié complejidad, En la vasta extensién de la costa norte, la fase Borax Lake (c. 5000 a.C- 500 d.C.), con conjuntos formados por puntas, buriles, manos y metates, fue seguida c. 500 a.C. por la fase Hux, que persistié hasta el momento del con- tacto y fue probablemente la antecesora de las cultura histGricas Pomo y ‘Yuki. El cambio mas significativo en el equipo instrumental fue la sustitu- cién de la mano y el metate por la mano y el mortero, lo que indica una me- yor importancia de la bellota En la época del contacto, la costa noroeste de California estaba babite= da por los wiyot, yurok, karok, hupa y tolowa. Sus rasgos culturales, como las casas de madera, Ia dicta’ basada principalmente en el pescado y la jimportancia de la riqueza y el prestigio, muestran que estos grupos formé- ban una extensiéa meridional marginal de la cultura del area de la costa no- roeste (Heizer, 1978). Las evidencias linguisticas indican que sOlo los karok de lengua hoka eran antiguos residentes de la regiGn; los wiyot y yurok hi- blaban lenguas relacionadas con el algonquino; los tolowa y hupa eran de lengua stapasea, y podian haber venido originariamente del oeste de Cana dé. La evidencia arqueBlbgica también indica que estos grupos se establecic~ ron en el rea en una época muy tardfa, c. 900-1300 d.C. Restos de fos anti- guos habitantes, fechados ¢ 300 a.C., fueron excavados en el sitio de Point St Geurge, por nv hiay evidencia de continuidad de csta cultura temprans, pobremente conocida, en las culturas tardias de la region mejor atestigua~ das, Entre los distintos rasgos de estas culturas tardias habia azadas de mano para tallar piedra, cuentas de dentalium y largas laminas de obsidiana. En tiempos histéricos, loy-yurok emplearon la dentalia como una forma de mo- nneda; las laminas largas eran objetos altamente valorados, asi como los tro- feos de péjaros carpinteros escatlata y Ia piel de ciervo albino, de los que no cexisten evidencias arqueoldgicas. Los asentamientos prehistéricos tardies imbién ineluyen artefactos que ya no se produjeron después del contacto: | LOS RECOLECTORES ROSPLEISTOCENICOS 165 figurillas de arcilla cocida y mazas de piedra con forma de animales. Estas se conocen popularmente como «mata esclavos» por su parecido a las a mas que usaban para este fin en la costa noroeste. Es poco probable que Is iezas de California fueran usadas de esa manera, pero se desconoce st fun- real LA ETAPA DEL «ARCAICO EVOLUCIONADO* Catornia, al igual qe ta costa noroeste es mis interesante como cem- po de lon mone ida sedentarios J ln organizacin socal comple que ae sen denon ene ls earadore-ecoiecores, Los habitants de es Teas estaba fararizados con los concepos bisios de It agielra, Sas se en el eliv del tabaco por los yuOK y por algunos grup de (ee orccrtc I mat el joly a calabara slo fueron clivados en ch thls surest de Calforia por los mohave y os grupos relacionados de ha tie ytena vivian en el vale de bajo Colorado Sus antcesoes, epre ‘endldor ob e egstroarqueolgico por la tradein cla Hamada Taka {Spun evidenemente tomaronpresadat a agscltray a elaboracin dela eytnes de lor hohokam Je Arizona, 500.900 dc. Por qu a agrcuty sear goers mde a note? Elena de California puede haber eausado Teun aealtad on el avance de f agvcultura, ya que el mate no se adap- TRE. una natural ala pouta de verano scco-inviemo humedo. Ademds Ine ventas de la aprcaltora padieron no eta laras para los nds de Ca Torna flues mententanvegularmente poblaiones densas —d= 23 per~ sonas por km? en algunas éreas— mediante la recolecciGn de bellotas y sc- ml cazandoy pesando. Pascce que inicta basa fandameatalmente en I bello fe, en toda Catfoyas, dn dcearrli mn bien tao, set bien reistrada a varacon Ga ls ieebenca de mortros ¥ manos en los asentamienos arqueol6neos En todas as ea de Calflora, Independencia de as bella parece he- herigo'en aumento alguna vez entre 1000 aC: y 1000 4. Las blloias de- Man de sex molds, caladas en agus y después hervidas antes de comers El sutento ene to de est recurso. que require un abajo tensiv0 pe Te ae So una oporiana respuesta sla preston cemografie. La eviden- Gh de muerte wolenta en los enterramieatos dela fase Cosumnes (500 2C coo a elena cry del ep Buchanan, donde el 10 por 100 de foe cequictos omen punts clavadas ola indicciones de violent Sere duet resulta de la presi demogréfica fue una mayor ec ee ges guera. La induction del arco y Ta fecha, © S00 doing el goles dela caza, que a su yeu provoco un mayor consumo de Pell ean compensa la perdi de eam enla det, La dependeneia de ete fray probablomente fo cere conscuencis vuales Las belles slo Fonda secoletare en bosquecilon de acon, cya stuncion era per manent, y mediante sua iste o recpintes de made- =o 166 PREHISTORIA DE AMERICA a. este allmento podia estar disponible todo el afo. La situacién fija de este Tecurso, y su almacenamiento, pudieron evar al establecimiento de aldecs ‘uas diferentes las cuales estaban divididas en dialectos locales, (Sin ember. 0, cas vez estd mas claro que la inmigracin de gentes de reglones ada, GUuRS & determinante en la complejidad lingiistica tipo mosaics ae California —véase Moratto, interesante intemto de correlacio. ay las evidencias linglsticas con las arqueolégicas) Debido a que lee i Gos te California carecfan dela movilidad y la fuider social distrutade por apn como moneda (King, 1978). La presencia arqueol6pica de coves Circa. Haliots y dentaluan sugiere que tales sistemas de intercambio va odin haber aparecido en 2000 a.C. En Ia época del contacto con los bla £05 los jefes eran responsables por herencia de mantener la unién con Ios fiunes vecinos, mediante el establecimiento de alianzas, danzas ceremonia 165 shui ¥ seuniones comerciales (Bean y King, 1974; Heiser 1978), La pelted politica més comin entre los nativos californianos fue la tiibu (Kroc, las tumbas de los jefes y de sus parientes El sedentarismo, la alta densffad poblacional y los érdenes de rango so- : Sgrmativas» de otras regiones basadas en la dercoutura. Sin embargo, tas evidencias reales indican que no fueron pro. Guctoras de alimentos; la densidad de su poblacicn pudo mantenene carne. Cimento estaba finalmente limitado por el acceso a los alimentos silvestees ‘te los cuales dependian. Podemos reconoccr la continuidad de sa suede de 10S RECOLECTORES POsPLEISTOCENICOS 161 subsistencia en los grupos tempranos del Arcaico, pero también se advierte |a emergencia de instituciones sociales y politicas més complejas, en relaciéa con las eulturas de la costa noroeste y California, consideradas «Arcaico evolucionado». Como veremos, en los bosques orientales también se desa- rrollaron culturas complejes, basadas fundamentalmente en una eficaz reco- leccién de los recursos silvestres. EL ARCAICO DE LAS LLANUIRAS El continuo desarrollo desde las tardfascultras cazadoras de finales del Peistoceno a las culturas del Holoceno inicil es mas evidente en las lant, ras, donde ni el equipo instrumental nila estrategia adaptativa cambiaron Iucho, La extincién del mama, el caballo y el camello fore a los cazadores del post-Clovis a centrarse exclusivamente en el mamifero que sobrevivio sds tiempo en las praderas, el bisonte, Partidas bien coordinadas de caza ores podian ahuyentar las manadas hacia acantilados o eaflones, barrancos @ canales, donde cl bisonte era matado a vountad. Al principio, los eaze- dores que usaban las puntas Plainview y Folsom pudieron separar una cir {2 distaneia de Ia manada a pequeftos grupos de animales y entonces perse. fuilos. El nimero de animales representados en cada uno de los matarleros & generalmente del orden de 5 8 25; por ejemplo, se han encontrado res tos de 23 bisontes en el sitio original de Folsom. Sin embargo, como el sitio Olsen-Chubbuck muestra clarainente, manadas enteras estaben siendo cfee- tivamente matadas y descuartizadas c 000 aC. La caza por acoso porsisid 2 las llanuras en el periodo histérico; la aparente continuidad de algunas \éenicas especificas es sorprendente (véase el anterior anlisis dl sitio To. nes-Miley El auticuto mas importante en el equipo instrumental de los primeros ca- zadores de bisonte todavia era la punta de lanza lanceolads finamente taba jada. Las puntas Folsom dec. 8800-8000 a.C. fueron afinadas para enmaigar 4as mediante laremocion de grandes lascas estriadas; se dferenciaban de las {empranas puntas Clovis principalmente por su larga acanaladura. El acana lamiento fue abandonado por los titimos eazadores Plano, quienes afinaron su Puntas mediante un delicado lascado a presion en los bores de ss hojas en vez de en la base. Puntas Plano de estilosligeramente variables aparceen 2 Flacion estratgrafica en el sitio Hell Gap, en el este de Wyoming. Esto se ha tomado como base para delinear una sectencia de fases esiisticas para el Petfodo de 9000 a.C. a 6350 a.C. Existe alguna dda acerca dela relacign cto nolégica de las dos primeras fases La Plainview, la Folsom y las fasestadias ‘én no han sido datadas con precisign, Estas fases, que probablemente ses Perponen, son Midland (5500-000). Agata Basin (8000-7000). Iell Cy (7500), tberta (6500) y Cody (7000-6000). Las puntas Eden y Seottshlult Particularmenterefinadas,pertenecen ala fase Cody, ast como Ws earactet ticoscuchilos de éngulo asimetrice 9793939366066 9 -30-8:'9 688 Dd on PRRIUSTORIA DE AMERICA Micniras la mayor parte det pueblo Plano mantuvo ta tradicién de la ‘umn mayor en ta tlanura de pastos abiertos, otras bandas estaban desa- wllando wn modo de vida diferente en las montanas, coins y valles con ‘r10y0s diveminados en Ia region de las Uanuras. Este modo de vida, que e8 ‘1 mls cercano a las adaptaciones arcaicas de los bosques orientaies y la Gran Cuenca, esta representado por restos de varios sitios en Wyoming. nla y ocho niveles de ocupaci6n fueron reconoeides en Mummy Cave, 1 noreste de Wyoming. En los niveles més profundos se encontraron punts Plano relativamente toscas, datadas antes de 7300 a.C. Las puntas + con muescas laterals y basales aparecen en el nivel 17, ¢ 5700 aC, yen los hiveles tardios superiores. EI material, bien preservado, era de c. 2400 a.C. € incluta pipas tubulares de hueso, canastas ailladas, cordeles y redes, cue 10 trabajado y piedras de moler. En Medicine Lodge Creek, en un sitio es- \ratificado a 160 km al este de Mummy Cave, se hacian puntas de tipo Pla. no en 8000-6500 a.C. Las puntas pedunculadas aparecen «. 6300 a.C. Los restos de fauna —pequetios mamiferos, peces,ciervo, cabra montés y bison- te— indican una dieta de base més amplia que la de los cazadores contempo- réneos de caza mayor. Parece que hubo algiin contacto entre estos recolecto- resy los cazadores de bisonte, los cuales dejaron sus puntas Eden y Scottsbluff en el sitio de Honer Kill, a s6lo 64 km de distancia (Frison, 1978) Entre cl 6000 y cl 5000 a.C, el lima de las Ianuras empez6 a sccarse y calentarse significativamente; este fue el aspecto regional del episodio climé- tico més amplio del Altitermal. El periodo seco dut6 hasta aproximadamen- te 3000 0 2500'2.C. Fl pasto bajo del cual dependian las manadas probable- mente se marchit6 0 murié cuando se produjeron las largas sequias, Los animales que no murieron de hambre migraron a seas donde atin podian encontrar suficiente comida. Al parecer muchos bisontes abandonaron la anura; algunos de ellos pudieron haberse refuyiado en valles con riachue- Jos 0 en drea con colinas adyaccntes donde la fulta de wyua era menos se- vera. Los animales mas pequefios, que podian sobrevivic con menos comida, pudieron tener tna ventaja selectiva sobre los mis grandes, Esto explicaria la reduovion observada en el tamaio del bisonte, lo cual, bassndonos en los hallazgos de Wyoming, debi6 de ocurrir en el periodo entre 4500 y 2500 a. La presién causada por el deterioro climatico podria haber tenido un efec- 10 andlogo sobre las poblaciones bumanas de las Hanuras. El grueso del es- pectro recolector probablemente tuvo mis suerte que los Plano especializa- dos en el bisonte durante el Altitermal. Ya sea que los cazadores Plano -y¥ adoptaran las tSenicas de sus vecinos, ya sea que se mezclaran con ellos © fucran reemplazados por ellos, no lo podemos saber ante la escasa eviden- cia de que disponemos. Slo se conocen unos pocos sitios alttermales, loca lizados en Jos lados norte, este y oeste de las Hlanurss (Wedel, 1983), | Cuando ta zona se volvié relativamente hiimeda c. 2500 a.C, el bisonte eocup6 los pastos de las llanuras, y la poblacién humana también se expan- 4i6. Esto se constata por el gran niimero de sitios, que incluyen mataderos de bisonte, campamentos de pesca y abrigos datados desde 2500 a.C. a 1.d.C. 5 (letras) y sitios (numerados), a 5 2 Fiouta 4 fos de a isla San Lorenzo 10 Lanes aux Maasous 41 Pont au Choke 2 Kew Ph Bare 5 Anaktuvek Pass (Tatu, ving) Mage Hea 5 Sibe de ndeomcance 8 Kalvos, Vakoa, Bk 7 cher 8 Estecno de Bering 4 Norton Sound 5 Brooks Range A Mackense Dietot 1 Geren Grounde 4) Isa Kodi X Cape Nome (fe Banke Mt Groseianla 4 Onion Portage 2 Anangua 8 loutak ° 170 PREHISTORIA DE AMERICA ‘Aunque algunos tipos de punta dé lanza usados en la caza del bisonte eran ‘ain de forma lanceolada, no estaban tan finamente talladas como las de los antiguos Plano y aparecian asociadas con tipos peduneulados y con lados con muescas. Si los individuos post-Altitermal eran descendientes directos de las antiguas poblaciones Plano, lo cual esta por demostrar, est claro que pudieron adoptar elementos de las culturas recoleetoras periféricas. Los ¢a- zadores migratorios de bisonte continuaron habitando las Hanuras del sur hasta periodos hist6ricos, pero hacia 250 a.C., en el mayor de ls valles, co- ‘menzaron a establecerse en aldeas pobladores recolectores y relacionados con las culturas de los bosques orientales. (Cazabones DEL ARTO Y DEL SUBARTICO La parte nore més alejada de Norteamérica ain estaba habitada por ca zadores cuando los europeos comenzaron a explorar la regién en el siglo XVk algunos grupos articos se vieron significativamente afectados por el con- tacto con los blancos hasta comienzos del siglo xx. Esta vasta region septen- trional comprende dos zonas medioambientales. La tundra drtica, que se ex- tiende a lo largo de la costa norte desde Alaska hasta Groenlandia, no tiene Arboles y es extremadamente fria; los inviernos duran de $ a 9 meses y las, temperaturas algunas veces bajan a ~72° C. La tundra recibe escasa preci tacion, pero el agua superficial no puede penetrar en la tierra perma-nente- ‘mente congelada, por lo que existen muchos lagos y riachuelos. Los pastos de la tundra soportan manadas de caribiies. A lo largo de las incrustaciones de hielo de Ia orilla, se pueden cazar focas y morsas, y las ballenas frecuen- tan Tas aguas mas profundas lejos de las orillas. Los peces pueden capturar se en los lagos y riachuelos, pero como no proporcionan miicha grasa, un ‘uiente vital para una correcta tuneion corporal bajo condiciones articas, 0 pueden constituir nunca la base dietética. Al sur de la tundra se éxtiende el bosque boreal subsrtico, formado por pequefios abetos, abedules y élamos. El bosque recibe més nieve que la tundra, y sus inviernos, aungue més cor- tos, son igualmente severos. Los veranos son casi el doble de largos que los de la tundra; existen en tos bosques cerca de 100 dias libres de hielo. Como con la tundra, una capa de permafrost es la causa de la abundancia de agua superficial. El cariba y el alce se alimentaban de la vegetacién boscosa, El limite entre la zona de tundra y la zona de bosque no esta bien definido; existen reas de tundra dentro de la zona boscosa y en algunos Iu. gares los drboles se adentran en la tundra. Ademas es importante senialar ue el frente de arboles vari6 hacia el norte y hacia el sur a lo largo de los Siglos en respuesta a los cambios climaticos. ‘Cuando legaron los europeos, la tundra estaba habitada por los esqui- ales y el bosque boreal por los indios. Los indios que vivian al oeste de la bahia de Hudson hablaban lenguas atapascas, y los que vivian al este, len- ‘guas algonquinas. Las relaciones entre los esquimales y los indios fueron ge- IMivadores” LOS RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS m neralmente hostiles, y un echo que lo refleja es cl nombre , el cual se afirma que deriva del desprecio de los indios al referrse asus ve ‘inos como «comedores de carne eruda>. (En afios recientes se ha vuelto iis comin referirse los esquimales como inuit, como ellos mismos se denominan. Aqui conservaré el viejo término, solo porque es mucho mds familiar ea literatura existente) La exclusion mutua de las clturas esqui- sal ¢ india parece haber prevalecido también a lo largo de los tiempos pre- hist6ricos. En lugares como Labrador, donde esquimales e indios prehisté- cos vivieron en estrecha proximidad durante eierias épocas, es notable el escaso intereambio cultural (Fitzhugh, 1976). Cuando el calentamiento del ‘ima caus6 la extensin de los bosques hacia el norte, las cultras que te nan conexiones con culturas arcaicas indias de més al sur se extendieron también hacia el norte y sdlo retrocedieron cuando la tundra reemplaz6 al bosque Fisicamente, los esquimales parecen los cisicos «mongoloides» del Asia oriental, més cereanos a éstos que otros nativos americancs (Laughlin, 1976). Los atapascos parecen estar a medio camino entre los esquimales ¥ los otros indos por varios rasgos genéticos, dentales y anatémicos. Lo més probable es que los primeros esquimales abendonaran Asia algin tiempo espués de que partieran los antecesores de los indios; durante este tiempo, cl pliegue ocular, la cara extremadamente plana y la sangre de lo tipos A y B probablemente se habian convertido en caracteristieas de las poblaciones, ‘saticas, Estos rasgos, que también se han encontrado en los esquimales, po- drian alternativamente ser el resultado de los continuos impulsos genéticos Ge las poblaciones asiticas. Existe evidencia arqueoldgica dela introduccion periédica de rasgos asidtioas en las culturas de la América rtica; esto po- dria sorprender sila ifusin cultural no hubiera estado acompanada de al- sin Ojo de genes. El estatus intermedio de los atapascos puede indicar que Tregaron despues de los indios mis meridionales pero antes de los esquimales. Sin embargo, es mas probable que esto fuera el resultado de algin grado de flujo genético entre esquimales y atapascos a pesar de su mutua antipatia “Todos los esquimales que viven entre Alaska y Groenlandia hablan dia- lectos mutuamente inteligibles de la misma Tengua inupiak, que consttuye una subfamilia diferente llamada yupik. Los habitantes de las sles Aleutia nas que se extendieron hacia el oeste desde el suroeste de Alaska hablan una lengua gue esté bastante alejada del inupiak y yupik. Los lingistas es timan que aleute inuit (la familia que incluye inupiak y yupik) se separan de una lengua ancestral comin c 2500 a.C. y que yupik € inupiak divergen © 900 d.C. La gran diversidad lingtistica de Alaska obviamente sugiere que teste fue el hogar original de los esquimales que hoy habitan la parte mis oriental de las regiones drticas; In notable uniformidad de tas lenguas ins Piak, por otro lado, indica que la migraciéa hacia el este de esquimales d habla inupiak puede haber sido muy reciente. De hecho, los antecesores de los individuos de habla inupiak pueden ser claramente identiicados ent el repistro arqueolégico como Jos portadores de la cultura Thule, La cual vee 3444000 4-3:58-8-88 88S in YmieToRA De ANCRICA | GEARS IEG oe ci cin otic non ae} {ive 1000 JG Las poblacones Thule de algin modo reemplizaron los Doe, descendent de os exuimales que se hablan desplarado hacia el tte M600 aoe anes Como se ¢propiaronexactaments los Thule del ter forto Dore ex un mistrio aunque les arqueélogos sspechan que el am. tNo-limco puede haber so un facter importante Una corelactn aguco- | Wopien pars I sepracin sleuanaesqumel,c 2500 aC, no es ticlment \entcable Dumond (1987) suger que un grupo ancesialesqumal ales timo puede estar epresentado por ls aparicign se conjuntos de arefatos tue poroch pos ncollucos de Sibert. Como hemos visto (cap. 3) Asta y el Yakén han proporcionado una setae ezcseg de dates sobre los anuiguospaleoindog fos cuales dbleron haber suavesedo lo regn en su ra hacia Tas zonas me merdhnales de Nowcamérea, Ante se erefa qu fs (des extratamenterotos del cn cca de Old Crow atestiguaban la presencia de humanos hace 27.000 afiso—|— Meme tecis scarcer Loses plot ula elec. widgets a cure Slots assure god Yan preboblones- tr Saw hatte tn a pescars mt pos eccren Sole incon Sinatsen places Abktonesiness weeps. | ‘acanaladas, pero no en contextos con fechas seguras. Estas se han vueltoa — Seren ees Ge serena | picptoet el cman om eee | | incluso cientos de afios antes, pero abora esta evidencia aparece invalidada | Targas.y en algunos sitios con miiclees discoidales de talla bifacial. Las mi- crolaminas estén notablemente ausentes de los asentamientos Clovis de Norteamérica, y es comprensible que Ia mayoria de los arquedlogos duden ‘en identificar a los fabricantes de microliminas de Alaska como los antepa- sados Clovis. EI recién examinado complejo Nenana, que aparentemente no tione microliminas y data de c. 9300 a.C., puede representar una poblacién ancestral de Clovis, 0 como minimo estar relacionado con ellos. Las fechas radiocarbénicas colocan los sitios paleodirticos de Alaska con dominio de mi- ‘croliminas entre 9000 y 6000 a.C. (Dumond, 1980). La tradicién paleosirtica procedia claramente del noreste de Asia, donde habia microléminas seme- jantes, obtenidas de pequefios niicleos en forma de cufta, en la cultura Dyuk- tai de Siberia en el 14,000 a.C., y en el norte de Japén en 8000 a.C. En el si- tio de Onion Portage, en el noroeste de Alaska, el conjunto Akmak, que inclufa rpicroléminas, ha sido fechado . 7700 a.C. (Anderson, 1968). La ma- yoria de los grupos paleoarticos parzcen haber sido cazadores orientados tierra adentro, pero cn el sitio atipico de Anangula, en una isla oriental de) las Aleutianas, se encontraron grances ldminas y miicleos, lo que muestra {que algunos grupos pudieron haber desarrollado una efectiva adaptacién ‘marina durante 1 6000 a.C. En este tiempo, del cual data el sitio, solo podia llegar a la isla con embarcaciones Se han encontrado conjuntos que contienen microléminas, datados en 6000 a.., 0 tal vez desde 8000 a.C. hasta 3000 a.C., a lo largo de la costa pa- cifica, hasta el sur y el centro-sur de Washington. En los sitios situados al sur 1L0$ RECOLECTORES POSPLEISTOCENICOS 13 Fioura 42. Microléminas y nteleo del Paleoértco (1/2 del tamafio natural). (De ‘Anderson, 1968) de la costa central de la Columbia Briténica, las microléminas estaban as0- Gadas a puntas talladas y cuchillos que parecen derivar de culturas tempra- nas de Ja meseta, La fusién de las tradiciones del Artico y las de la meseta podria finalmente haber culminado, un milenio después, en las elaboradas ‘eulturas de la costa noroeste. Es posible, pero improbable, que la fuente originaria de ambas tradicio- nes culturales, esquimales y atapascas, fuera la tradicion paleodrtica. Sin em- bargo, hoy existe un vacfo en el registro arqueolégico de Alaska entre & {6000 y 4000 a.C. (Dumond, 1983). Alrededor del 4000 a.C., durante el pe- iodo Altitermal, las célidas temperaturas pudieron ocasionr la expansién hacia el norte de Jos bosques subirticos. La gente adaptada al bosque, pro- bablemente indios relacionados con Jos habitantes arcaicos de Jos bosques ‘meridionales y orientales més templados, ocuparon el interior y la costa de ‘Alaska desde el 4000 al 2000 a.C. Sus puntas de proyectil de lados 0 esqui- ras con muescas han sido encontradas en el complejo Palisades en el sitio tstratificado de Onion Portage, en Tuktu, al norte de Alaska, en el comple- jo «Tuktu> de Healy Lake, en Alaska oriental, y en otros sitios que m0 es- {in bien fechados. En Onion Portage las puuitas de lados eon muezcae ests- ‘ban asociadas a grandes cuchillos y raspadores terminales. Con el transcurso . Sin embargo, los tiles pre-Dorset no estén taf Stamente tallados como los tiles Denbigh, por Jo que es dudoso que proce- dan de estos timos. Bs mis probable que ambos, pe-Dorset y Denbigh, se desarrollaran desde tna cultura ancestral comiin. Un candidato posible para el papel de antepasado comin es la cultura representada por un conjunto exevado en Kahron conde Pint Baron, Ass coal pares = mis tiguo que el complejo Denbigh (Campell y Cordell, 1975). Se puede acontar més de un sito para sstenar esta fora. Los epequenos dies del Artico» traen inmediatamente a la mente las microléminas mucho més antiguas de la tadicién paleodrtica. Sin embargo, si se pretende un origen paleosrtico de la tradicién de los

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